- Me lleva la re contra putisima madre. ¿De verdad salías con este pedazo de energúmeno? - Preguntaba mientras trataba de esquivar a la demonio devora almas con el auto.

-¿No se supone que eres un ángel y no usas lenguaje soez? - Jungkook me respondía con otra pregunta. - Se veía linda, para los humanos es algo difícil diferenciar quien es bueno y quien es el malo, además no sabíamos que habían más seres a parte de los humanos. No es culpa mía. -Se excuso mientras trataba de sostenerse, quedándose en blanco.

-Se que no es culpa tuya, es algo bastante difícil para los seres humanos ver más alla del cuerpo de otro ser, e inclusive más allá de otra persona. Y me importa una mierda, ser ángel o no, no soy una muñequilla de trapo o de porcelana para decorar. -Mencioné sin más. - ¿Sabes conducir? Tengo que matar a tu novia o ella matará a muchos de aquí. -Seguía teniendo mis manos el volante y mi pie izquierdo con demasiada fuerza mientras esquivaba a la demonio.

A decir verdad, aquella tenía una apariencia  física desgarradora, era una mujer alta, de cabello negro, largo y liso, una tez blanca y de ojos marrones, rasgados y grandes. Un cuerpo esbelto y delgado.

De un momento a otro, se tornó un caos  por completo. La gente empezaba a correr de un lado pata otro. Mientras que la susodicha demonio sacaba sus familiares los cuales tenían una forma arácnida persiguiendo a los que huían de allí. A esta también le salieron una especie de patas de araña, lo que hacía que fuera más complejo esquivarlos con el auto.

-Si, se manejar.- Jungkook por fin salió de su trance.

-Esta bien, toma el volante acelera y ni se re ocurra regresar porque te cuelgo y no querrás saber de donde. -Acto seguido, me quité  el cinturón de seguridad. Dejándole a el, el paso del volante. No dudó mucho otra tomar el control del vehículo y colocarse el cinturón de seguridad también ¿Por qué? No lo sé, humanos supongo.

Salí por la ventana del copiloto y me quite el saco del traje que tenia puesto, el traje era prestado así que tocaba regresar lo en mejores condiciones. Pero había algo que más que me estorbaba en ese monto y era el traje completo. Así que sin más, me quite el pantalón quedando solo en blusa.

-Ey! No deberías de hacer eso aquí. - Me regañaba Jungkook, mirándome y frunciendo el ceño.

- Calma señor SeokJin, no es nada grave, simplemente me estoy quitando lo que me estorba, - En eso saqué una pierna por la ventana - No entiendo por qué se escandalizan tanto ustedes. Mejor concéntrate al frente, y por favor no te detengas, a ti a es quien quiere. Así que perdóname por usarte de carnada. ¿Si? - Lo mire mientras estaba lista para salir por la ventana.

- Pero Odell, no está bien que hagas eso delante de todo el mundo. Es cierto que no puedes hacer conexiones con ningún ser. Pero, ¿Qué tal si? Mira que en cierta forma y a pesar de que llevas muy poco tiempo con nosotros, tememos por ti y nos preocupamos por ti, de verdad. Deberías que creernos. - Suspiró sin más antes de dejar de verme. Y volver su vista al frente del camino. - Se que soy carne de cañon en este momento, así que te deseo mucha suerte, ve y mata a la mujer araña. -Me dijo con convicción.

-Gracias...  A penas llegues al túnel, desvía para llegar a casa, yo me encargaré de todo. -Sonreí  a esto último y salí por la ventana del copiloto para extender mis alas para empezar la pelea con aquella devora almas. -

No sin antes ser prevenida y lanzar una barrera hacia el parque de diversiones y sus alrededores, dejando solo así el acceso al auto y a Jungkook lo cual hacía que su vida corriera aún más peligro de la que estaba corriendo.

Volé por encima del auto y sostenida por mis alas en el aire, saqué el arco que llevaba conmigo, no es difícil para mí sacar un arma u otra. Ya que por ser un ser celestial hacer algo de "magia" me es permitido, y no es juzgado. Lo mismo aplicaría para la señorita del cabello plateado, ya que ella también se le conoce como la guardiana de lad dimensiones, debido a que ella puede conceder deseos con un pago completamente equivalente, además de poder transportar seres a través de los distintos mundos.

Tomé una de las flechas que tenia en mi espada. Y lanzando una lluvia de flechas doradas con algo de sangre violeta, logre acabar con casi la mitad de sus familiares logrando así mi cometido inicial. Hacer que dejara de seguir a Jungkook y se fijara en mi. Para que este pidiera escapar.

La mujer araña como la había llamado Jungkook, se abalanzó sobre mi, sacando de su espalda alas como de murciélago, olvidando al anterior por completo. Y lanzándome púas al parecer con veneno.

En eso en medio de esquivar ataques y golpes vi que ya habíamos avanzado casi al túnel, Jungkook, hizo el desvío para meterse dentro de este y asegurar su llegada a casa. No dudé en cerrar el túnel con una barrera, para que la demonio no pudiera alcanzarlo.

En eso, al momento de colocar la barrera, una de las púas me alcanza a dar en el hombro. Lo cual me hizo bajar hasta el suelo mientras daba un grito ahogado. Aquel ser también llegó hasta pisar tierra, decidida a matarme por haber dejado escapar a su presa.

Aquella mujer, volvió a tener una figura "Humana", con un cuerpo completamente esbelto y espectacular, toda una diosa si podríamos llamarlo así, admito que sentí un poco de envidia, a ver lo curvado y bien proporcionado que era su cuerpo, hermosa. Por esa misma razón Jungkook había quedado rendido a sus pies y ¿Quién no?. En esos momentos recordé la dulce y tierna sonrisa del hombre que se había robado mi corazón pero el no lo tendría, no porque no quisiera, sino porque era yo la de la maldición, era yo a la que nadie podía amar jamás.

En cambio yo, ¿Yo? Yo solo soy una chica de menos de 1.65 cm de estatura, delgada, bastante delgada, con un cuerpo de proporciones pequeñas, ni siquiera me era necesario usar sostenes de copa debido al tamaño de mi busto. Ni ajustar pantalones debido a lo ancho de mis caderas o de mis glúteos. Tenia una proporción corporal muy distinta a la suya. Y eso me hizo sentir menos de lo que ella era.

Sentí que se me clavo una espina en mi pecho, que me hizo sentir ese dolor tan desgarrador de nuevo, sentía que me estaban desollando. El estar enamorada de YoonGi era una completa tortura, me hacía ver una estúpida ante los ojos de cualquier persona a la que le contará mi historia. Una joven, enamorada de un padre soltero, el cual ni siquiera la mira.

Esto me hizo tener la suficiente determinación y rabia, por la mujer que tenía en frente, por si, esa bella mujer demonio que solo busca hombres para seducirlos y después quedarse con sus almas.

Estábamos peleando algo a la par, la verdad no me sentía con la suficiente confianza de soltar más poder, no lo controlaba bien del todo y podría destruir la ciudad y aún hay muchas personas huyendo del sitio, por lo que si solo aumentara un poco mi poder, sería fatal.

La noche estaba cayendo por fin, esta vez habría luna nueva así que los planetas o mejor dicho, los otros mundos que están al rededor de esta dimensión tenían poca o nula luminiscencia, por lo que las estrellas empezaron a divisarse.

Ahora tenia mi espada a la mano, puesto a que la tipa. Estaba sacando como si fueran uñas filosas de sus manos para rasgarme y hacerme pedazos, así que saltaba de un lado a otro, cortando lo mas que podía de sus horribles uñas, y acercarme más a ella.

La distancia entre ambas se acordaba cada vez más. Por su parte, ella se sintió acorralada, desemperándose un poco, por sacar más púas venenosas o por tratar de cortarme con una de sus uñas.

De un momento a otro, convirtió uno de sus brazos en una lanza, y trató de apuñalarme, al mismo tiempo que con mi estaba le había cortado la cabeza. La lanza había alcanzado a rozar la tela la blusa que llevaba, en la parte del abdomen.

La había matado, a aquella mujer hermosa y por la cual Jungkook deliraba, estaba muerta y con eso un peligro menos para este mundo.

Me senté en una de las orillas de la carretera, mirando el mar que se encontraba al frente mío, el mar estaba en paz y tranquilo, la marea era baja y la arena tenía un brillo particular puesto a que no había luna esa noche.

-Espero que te sientas mejor de tu alma abatida. -Giré hacía donde provenía la voz y me pude dar cuenta de quien se trataba.

- La verdad es que siempre ha sido li mismo. Por más de que lo desee, por más de que te pague a ti con toda mi existencia, jamás podré ser querida, amada, deseada. -Suspiré mientras observaba a la mujer de cabello plateado en frete mio. - Además es raro que salgas de tu tienda.

- Yo también sé  lo que es la soledad, aunque no se que se siente ser el sobrante de un mundo cruel y malagradecido. -Suspiró con algo de pesadez. - Vine por tu padre, hace algunos días que tu hermana mayor no aparece y quiso convencerme de que viniera a hablar contigo por si tu tenia alguna idea de donde estaba. - Mis ojos mostraron una expresión de angustia y de asombro.

- No sabia que Carol estaba desaparecida, he estado tan ocupada con la caza y resolviendo todo esto que esta pasando con la organización que nunca se me ocurrió Llamar a casa. -Me excuse, aunque si era cierto, entre Bullet Flower, los demonios, la corrupción de las religiones, matando demonios y demás. Jamás pensé en casa.

- Comprendo, siento que deberías ayudar a tu padre con la búsqueda de ella. - Aconsejando esto último, un viento sopló, llevándose a la mujer del pelo plateado con el.

Me puse de pie y me dirigí a casa, la casa que compartía con 7 jóvenes los cuales no se en este momento que tipo de relación tenemos debido a lo que me dijo Jungkook antes de que el estuviera con sus hermanos, colegas y amigos.

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¡Hola! Se que ha sido un tiempo muy largo desde la última vez que actualicé esta historia  pero por eso mismo les traigo un nuevo capítulo, de paso ofrezco una disculpa, no es que se me hayan acabado las ideas, es solo que entre a hacer mi carrera universitaria y ni había tenido el tiempo o la inspiración de seguir escribiendo, ideas las tengo. Más no las ganas de seguir escribiendo.

Espero que puedan comprender y tener algo de paciencia. De antemano, mil gracias por leer y ser pacientes. Me gustaría que comentaran si algo no entienden o que sugieren con la redacción de la historia, me gustaría leerles y no saber que soy la única aquí inmersa en este historia.

Sin más que decir. Hasta la próxima  😉 😌 😘