Busqué a Lawan por toda la casa, porque había pasado un rato desde que abandonó la conversación en la sala y se retiró en dirección a la cocina, pero cuando fui a buscarla no la encontré ahí. El único lugar que aún no había revisado era el jardín trasero. Cuando llegué, me di con la sorpresa de que había una especie de terraza, con parrilla y una mesa, que se conectaba por una puerta a la cocina.

Lawan no estaba sola, junto a ella se encontraba un joven vestido de verde, revisando una carpeta, de esas que usan las enfermeras en los hospitales.

—Off, querido, estas aquí —dijo ella sonriéndome y estirando la mano para que me acercara— ven aquí, deja que te presente a mi doctor New Thitipoom.

Le ofrecí mi mano, y él la tomó con un fuerte agarre.

—Mucho gusto, y su doctor se llama Tay Tawan, yo solo soy su asistente.

—El gusto es mío ¿Interrumpo algo? ¿Todo está bien? —pregunté.

—Por supuesto, cariño —fue Lawan quien respondió, atrayéndome para que me sentara junto a ella.

—Estaba revisando y probando las habilidades motoras de la Sra. Atthaphan, y hasta el momento todo está bien —dijo él mientras comprobaba una vez más los signos vitales de Lawan.

Preparó dos tubos de ensayo, una ligadura y una aguja, y descubrió el brazo de Lawan para extraer unas muestras de sangre, que luego colocó cuidadosamente en un cooler de laboratorio.

—Oh New ¿tenemos que hacerlo ahora? —Ella preguntó haciendo un puchero muy parecido a los que hacia Gun.

—Señora preciosa, sé que no le gustan los ejercicios de memoria, pero debo recordarle que son muy necesarios en el proceso de recuperación —dijo New, cariñosamente mientras sacaba de su maleta unas tarjetas de memoria y algunos otros objetos.

—¿Quieres ir por algo de beber, querido? —Ella se dirigió a mí, pero le susurró a New muy bajito "No me hagas abochornar delante de mi futuro yerno doctor" —New me miró y ambos compartimos una sonrisa cómplice.

—Iré a la cocina por unos refrescos ¿está bien?

Ella se volvió hacia New, sonriéndole apreciativamente.

—¿Y dónde está tu esposo querido?

A New se le iluminó la mirada.

—Está en el hospital aun, pero no tardará en llegar. Sabe muy bien que para Tay, usted es su paciente favorita.

—Oh, claro que lo sé ¿sabías que fui yo quien le aconsejó que te pidiera matrimonio?

—Si lo sé. Y estoy muy agradecido con usted. Por eso mismo, quiero que se mantenga siempre sana, así que vamos a empezar con los ejercicios ¿está bien?

—Ya veo. Comencemos

Me dirigí a la cocina y me tomé mi tiempo para volver, quería darles espacio, porque al parecer Lawan no se sentía cómoda con mi presencia en ese momento.

—¿Lo está haciendo bien? —Me volví para ver directamente al dueño de esa voz.

—Si.

—Soy Tay Tawan, el médico de cabecera de la Sra. Atthaphan. Usted debe ser Off.

—Lo soy, mucho gusto —extendí mi mano hacia él.

—Ella-

—¿No te han explicado su rutina cierto?

—Me temo que no y sinceramente estoy un tanto intrigado, pero no sé si sea correcto preguntar, al menos no en este momento.

—Pues antes es mejor.

Miró a través de la ventana y tras un asentimiento de New, comenzó a hablar.

—Ella sufrió un accidente automovilístico hace casi dos años, ¿lo sabes cierto? —Asentí— perdió el control del auto en una curva y cayó por un acantilado, su automóvil dio tres vueltas de campana. Cuando los rescatistas llegaron al lugar ella estaba inconsciente. El impacto causó un traumatismo craneoencefálico, la operamos por una hemorragia y estuvo un par de meses en coma, cuando despertó, descubrimos que estaba sufriendo amnesia e inmovilidad de sus extremidades inferiores. Fue un año difícil para Khalan, que no podía pedirle a su único hijo volver a casa, cuando estaba a poco de terminar la carrera. Aun así, Gun se las arreglaba para estar con ellos y aunque a veces se le dificultaba venir, nunca dejó de estar pendiente de su mamá. Gracias a Dios la recuperación de Lawan se estaba dando de manera rápida, casi milagrosa, y él no tuvo que abandonar los estudios. Le dimos de alta, pero cuando todo parecía estar bien, algunos meses después, de pronto una noche, fue ingresada nuevamente al hospital porque había sufrido un segundo derrame cerebral que dejó nuevas e importantes consecuencias.

—¿qué quiere decir?

—Trastornos a nivel sensorial (tacto, vista, olfato), problemas en la deglución de alimentos, coordinación motora, tono muscular, que se sumaron a los del accidente.

—¿Por eso la presencia de New?

—Así es, New es su terapeuta personal y ha estado con los señores Atthaphan durante todo el proceso de recuperación, desde el momento que Lawan fue dada de alta, después del accidente y continuó el trabajo de rehabilitación luego del derrame. Prácticamente pasa la semana entera junto a ellos.

—Pero no he notado nada extraño en ella, se desenvuelve de manera muy normal.

—Pues hay afectación de las funciones superiores, quiero decir a nivel neuropsicológico. Algunas de sus funciones cognitivas se vieron alteradas: la atención, concentración, la memoria, el razonamiento, el lenguaje y presenta cambios en la conducta y sus emociones.

Estaba completamente sorprendido, Gun nunca me había explicado realmente todo lo que su madre estaba pasando y no es que en los meses que estábamos juntos yo, hubiera estado cerca de sus padres, pero justo ahora me sentía fatal, debí haber indagado más, se supone que Gun es lo más importante para mí.

Lawan es tan risueña, tan jovial. Ella era inquieta y divertida, pero ahora, de repente, me la imaginaba tímida, triste, asustada y extrañando a su hijo todo el tiempo.

—¿Ella va a estar bien?

—Mira Off, milagrosamente Lawan ha sobrevivido a ambos episodios y ha mejorado, ante todo pronóstico, es una luchadora nata. Pero el resultado de la disfunción cognitiva es una pérdida de las relaciones sociales y eso conlleva a la preocupación y angustia por parte de la familia. Estas alteraciones tienden a presentarse con diferentes frecuencias; sin embargo, suelen alterar la capacidad del paciente para adquirir, almacenar y recuperar nueva información. Por lo que Lawan siempre tiene que estar rodeada de personas que puedan de alguna manera ayudar a mejorar su situación.

La rehabilitación no es una cura, pero apunta a minimizar el daño permanente y a mejorar la adaptación del paciente. Ha necesitado volver a capacitarse de manera intensiva, en lo que respecta a la movilidad, el equilibrio, la percepción espacial y corporal, incluso el control de esfínteres y lenguaje y como verás lo ha hecho muy bien.

—Es alarmante y aterrador lo que me está contando doctor. Realmente nunca hubiera creído que estaba pasando algo tan malo con ella.

—Pero, ahora Gun estará aquí y eso será de mucha ayuda para su padre y para ella. Igualmente New continuará pendiente de su recuperación.

Miré a la dulce mujer en la terraza, respondiendo a lo que New le preguntaba, riendo y aplaudiendo cada que lo hacía bien y un sentimiento de protección anidó en mi interior. Si antes había sentido la necesidad de permanecer junto a la mujer, aunque apenas llevaba minutos conociéndola, ahora con mucha más razón quería estar pegado a ella y ayudarla en todo lo que estuviera a mi alcance, con tal de verla siempre sonreír.

Pero ¿cómo iba a lograr estar cerca si en unos días tenía que partir?

—¿Y cómo está mi paciente favorita? —ella sonrió grande, cuando escuchó la voz de Tay, su doctor.

—¿Y quién es este doctor tan guapo? —respondió ella con otra pregunta, pero dirigiéndose a New.

—No tengo la menor idea, nunca antes lo había visto. —respondió él riendo, a la vez que sus mejillas adoptaban un tono rojizo.

Lawan se volvió a mirarme.

—Este es Off; él va a ser mi yerno.

—Oh en serio. No sabía que Gun, tu único hijo, fuera a casarse —bromeó Tay, lo perderás muy pronto.

La mirada de Lawan cambió de risueña a mortalmente seria. New se mantenía alerta.

—Deberías pensar bien antes de soltar tus palabras doctor.

Los ojos de Tay se abrieron con sorpresa.

—Solo tengo un hijo, es verdad, pero no estoy perdiéndolo, al contrario estoy ganando un hijo más.

Mi corazón dio un brinco y no pude evitar saltar frente a ella y darle un abrazo.

—Me disculpo amable señora, no fue mi intensión insinuar otra cosa.

—¿Sabes? Los tiempos cambian a toda prisa y Khalan y yo, nos vamos poniendo viejos. Sería agradable ver crecer a nuestros nietos, quien sino ellos podrían estar corriendo y haciendo travesuras en este inmenso jardín.

Ella se dirigió a mí, besando finalmente mi frente.

—¿Quieren que les cuente una historia?

De pronto preguntó ella, cambiando completamente el tema. Y pude notar lo que Tay había tratado de explicarme antes. Lawan no dominaba bien tiempo y espacio, su mente aún era voluble, sus emociones tampoco las podía dominar bien.

Gunnie, mi pequeño, había estado lidiando en silencio con la preocupación de estar lejos de su madre en momentos que más necesitaba estar cerca, y lo peor de todo es que yo en ningún momento noté la tristeza en él, siempre alegre, siempre vivaz y tan lleno de vida, al igual que ella, pese a todo, siempre con una sonrisa y dulzura indescriptible.

El Sr. Atthaphan se unió a nosotros en la terraza, nos explicó que los invitados estaban por irse y quería que fuéramos a decir adiós, antes que Godji intentara llevarse a Gun, para convencerlo de que trabajara para ella en lugar de abrir su propia galería.

Sin pérdida de tiempo, me puse en marcha junto a Lawan, para rescatar a mi pequeño.

Noté de inmediato que New y el Dr. Tawan, se disponían a conversar con Khalan, seguramente para informarle acerca de la salud y progresos de Lawan.

𝕰𝖛𝖎𝖎 𝕭𝖑𝖚𝖊 ʚĭɞ

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Mis hermosos corazones, no soy una experta en medicina, pero hago lo que está a mi alcance para que puedan comprenderme. Tampoco es como que me haya inventado los términos y eso, NO.

Pueden buscar y leer acerca de Apoplejía y traumatismo craneoencefálico ok. Los quiero mucho... disfruten.