Hola buenos días, tardes o noches mis queridos nakamas como están espero que estén bien bastante bien, les traigo un nuevo capítulo y espero que les guste, y sin más que decir comenzamos.

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| Narra Isari |

- Frío es lo único que podía sentir además de una gran oscuridad rodeandome, creía que al morir sentiría una calma y una paz pero no es así no sentía nada de eso al contrario, tenía rencor, odio y miedo muchas emociones más sin embargo mis sentidos hicieron que sintiera la necesidad de abrir los ojos. -

- Al abrir los ojos la luz volvía inundarme pero en el lugar que desperté y no era precisamente en las calles, o el cielo, al contrario era una celda, pero no eran prisioneros comunes todos y cada uno de ellos eran antropomorficos algunos con partes de animales, otros en cambio parecían demonios u angeles, pero si algo era cierto todos están aquí por algo y yo no soy la excepción. -

- Al revisarme pude notar que tenía un tubo en mi brazo con lo que parecía ser suero bajando de una bolsa colgada, entonces se oyeron llaves girando para abrir ¿una puerta?. -

| Narración en tercera persona |

- Las puertas de metal resonaban en todo el lugar, y cada uno de los prisioneros se abrazaron o se escondieron entre las sombras con el motivo de esconderse para que no los vieran, el miedo y el pánico los invadió a cada uno de ellos, se empezó a oír pasos que iba lento pero firme y luego una risa llena de locura acompaño a los pasos. -

— Los pasos seguían y seguían hasta que se detuvo en un punto o más en un celda, Isari solo veía esas botas las cuales están enfrente de su celda, tenía miedo de tan siquiera voltear hacia arriba pero la voz de aquel quien la estaba viendo hizo que su piel se le erizará. —

???: Pobre alma en desgracia, es una pena que un buen juguete este en tan mal estado, pero una vez que te recuperes serás como un juguete nuevo, jajajaja jajajaja jajajaja.

— Así se alejó de la celda, con otra risa maniática, pero solo fue cuestión de horas para que gritos de dolor o incluso chillidos como de animales suplicando, fueran lo suficientemente como para que incluso Isari quisiera ya esconderse, en lugar que fue a parar no era más que el mismo infierno. —

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— Los meses pasaron y aunque Isari agradecía que tuviera comida y un lugar donde dormír eso no la reconfortaba, ya desde del anochecer hasta el amanecer solo gritos, lamentos y sonido carne y huesos siendo despedazados era una tortura psicológica. Además su cuerpo ya estaba recuperado, más no sano ya que la enfermedad que tenía era desde que nació, algo con lo que le había impedido escapar; pero lo más preocupante para ella es el hecho de que ya solo es la única en aquel laboratorio. —

— De todos prisioneros ninguno sobrevivieron a los experimentos del científico loco, Isari oraba para que la liberará pero no sucedió nada, así que perdió su fé estaba recostada sobre el suelo cuando las puertas grandes de acero se volvieron abrir, y una más las pisadas se oyeron por aquella prisión pero está vez Isari estaba sola. Los pasos resonaban en aquella prisión, Isari solo podía oir como los pasos se acercaban más y más, y nuevamente se detuvieron en frente de su celda. —

Científico loco: Ho pero que lugar tan callado no crees muñeca.

— Isari no dijo nada ya que no quería hacerlo enojar. —

Científico loco: Mmm por lo que veo no hablas mucho… pero no te preocupes pronto podré oir tu melodiosa voz.

— Y decir nada más abrió la puerta de su celda y tomó de la mano a Isari quien no peleó, ni puso resistencia solo se dejó guiar por aquellos pasillos del laboratorio, hasta que entraron en una sala vacía, solo los instrumentos. El científico la recostó en una cama de enfermería donde procederá con los instrumentos a torturarla y experimentar con ella, sin embargo a Isari le escurrían las lágrimas silenciosas, el cientifico lo notó y volvió a hablar. —

Científico loco: Oh ya se que no soy un demonio bonito, pero yo solía ser todo un galánaso alguien poderoso.

– Luces, camara, arroz.

– ♪ Yo era guapo y ambicioso, Todo yo delicioso, Ya soy vil, un villano, oloroso Y malicioso. ♪

– ♪ Lo tenía todo, un gran status, chicas mil, Era un galán todo para mi, De pronto un usurpador vino a ocupar mi puesto, Por eso soy malvado y tan deshonesto. ♪

– ♪ Era un superstar, joven y fresco, Gallardo un ídolo gigantesco, soy un demonio fatal y brutal, un criminal.

– ♪ Te crees más malo que yo, yo nunca oí de ti, soy grosero, pordiosero, un carcelero, asesino a la gente y culpo a mis compañeros, lo hizo él. ♪

– ♪ Invencible, Irascible, soy intocable Insaciable, como un lugar sin ley, soy insufrible. ♪

– ♪ Diré que es lo que voy hacer, yo te voy a hacer sufrir. ♪

– Hahaha hahaha.

— Así se retiro de la habitación dejando a una Isari triste y con miedo, suplicando que la rescatará alguien. —

| Time skip |

— Han pasado tres meses desde que Isari entró a la sala de experimentación y en ese tiempo ha sobrevivido a todos los sueros, aumentos y entre otras cosas para conseguir el demonio perfecto, pero eso no ha sido suficiente pues su mente está tan rota, que solo piensa en venganza. —

— Y solo es cuestión de tiempo y paciencia para lograr su venganza, no solo contra este demonio, si no también en contra de esa perra estúpida a la que alguna vez llamo madre. —