capítulo 37

Editado: 08/ 08/ 2021

[Hima]

Después de comer dimos un par de vueltas por el barrio en el que estaba el restaurante recomendado, que por cierto era muy bueno. Volvimos horas antes para la fiesta del hotel y volvimos a ducharnos para luego arreglarnos debidamente para la ocasión, mientras yo me enrizaba el cabello juntando dos mechones detrás unidos por un broche dorado grande y dejando todo lo demás suelto, veo a Shikadai salir de la ducha secando su cabello, alaba mi apariencia y yo solo río para adentrarme al baño a ponerme el vestido.

Por la ciudad y su extravagancia elegí un vestido azul del largo a los tobillo, o un poco más, tiene un escote en V sobre la espalda y se amarra en la nuca además de que tiene algunos brillantes sobre el pecho y una tela algo transparente sobre mi busto... al verme con el vestido puesto observo la abertura de la espalda terminar en el borde de mi cadera, debo decir que escogí algo realmente llamativo, en fin, me pongo un poco de labial y una base sencilla junto a un rímel suave, mis zapatillas negras altas para terminar... apenas estoy ajustando mis zapatillas para cuando Shikadai entra en la habitación quedando sorprendido.

—Wow... —sonríe —no tengo ganas de que otros ojos te miren así de hermosa, ¿Qué tal si no vamos?

Mi risa sale mientras me enderezo, él frota su nuca con pena y no puedo evitar admirar el ajuste perfecto de su traje sobre su cuerpo, esta igual de atractivo que de costumbre, pero un poco más sexy... tiene la camisa blanca desabotonada en la parte de arriba, su mirada baja mientras ajusta los botones de las mangas; es un traje negro sin el saco abrochado, sin dudarlo me acerco a él admirando la perfección en su peinado habitual, nuestras miradas permanecen unidas en el momento y mi mano viaja sobre su mejilla con suavidad mientras él me toma por las caderas deslizando suavemente las yemas de sus dedos hasta mi espalda descubierta... mi sonrisa sale al sentir su caricia y despierto de mi transe para abotonar su camina mientras me sonríe.

—Yo tampoco tengo ganas de que te vean, eres demasiado guapo... —poso mis manos en su pecho —estoy segura de que muchas chicas se van a acercar a ti.

Él se inclina aprisionando mis labios entre los suyos, y yo me alejo para seguir ayudándole con su traje mientras él juguetea con mi espalda dando largas y pausadas caricias sobre mi piel... mi cuerpo se estremece mientras aumenta su cercanía y al segundo lo aparto por el pecho causando su risa.

— ¡Deja de jugar, se nos hará tarde Shikadai!

—Ya voy, ya voy... —ríe saliendo del baño — ¡No olvides tu bolso!

Al salir me encamino a la cama tomando mi bolso y elevándolo para que pueda verlo, él me guiña un ojo manteniendo su sonrisa confiada y yo entorno la mirada para caminar a su lado, se encarga de ponerme mi chal del mismo color que el vestido, aunque algo transparente, pero claramente cubre su cometido tapando un poco mi espalda; después de acomodarme me sujeto a su brazo para dirigirnos al ascensor.

Nuestro bajar al lobby inicia y puedo sentir como mi monedero vibra, me apresuro a sacar mi móvil notando la entrada de una videollamada de los chicos, al aceptar puedo notar la presencia de nuestros padres y creo que están en nuestra casa. Suavemente golpeo el brazo de Shikadai para atraer su mirada.

Te ves hermosa —Dice Choucho.

Riendo doy un asentimiento —Gracias, ahora mismo vamos a una cena con algunos ejecutivos.

—Yo también le dije que se veía hermosa —rodea mis hombros.

—No queríamos interrumpir —explica mi suegro —y definitivamente ambos se ven muy bien.

—Vayan con cuidado —pide mi madre — ¡Y estamos esperando las fotos de su luna de miel!

— ¡Yo definitivamente quiero ver eso! —comenta con emoción Sarada.

—No te atrevas a dejarla sola Shikadai, hay muchos buitres por todos lados.

— ¡Cuídala! —pide Metal.

—Traten de pasarla bien —interviene Shinki.

—De verdad los extrañamos —confiesa araya —pero deben intentar pasarla lo mejor posible.

— ¡No se desvelen mucho! —brome Inojin.

Yodo interviene golpeando la nuca de Inojin mientras el sonrojo le invade la cara y lo saca del cuadro, ambos reíamos sabiendo perfectamente bien lo pervertido que puede llegar a ser, todos comienzan a despedirse y de igual manera nosotros nos despedimos de ellos. Shikadai me toma por la cadera haciéndome mirarlo y al segundo nos besamos hasta que el ascensor abre sus puertas; nos despedimos de los empleados presentes avisando que llegara una orden de pizzas pagadas para ellos.

Durante la tarde hablamos con algunos empresarios, pero al saber que veníamos por nuestra luna de miel procuraban no quitarnos mucho de nuestro tiempo y por ello nos dejaban libres casi al instante, nos despedimos de algunos que siguen en el hotel y subimos al auto que nos estará transportando en toda nuestra estadía. Al llegar podemos ver una mansión gigante, un mayordomo nos recibe y nos invita al patio trasero donde la familia del señor Marcus se encontraba, saludo a algunos empresarios que están en la sala de la casa y sigo mi camino, al llegar saludo a Danielle con cariño y al pequeño de igual forma, el señor Marcus ni siquiera me deja acercarme a su hija pues me toma de la espalda baja guiándome con algunos amigos suyos para presentarme.

La mayor parte del tiempo Nathalia no se alejo de Shikadai, pero ahora por fin he logrado llegar al lado de mi prometido con ayuda de algunos empresarios que querían conocernos a ambos.

—Un placer —estrecha la mano del hombre.

—Mucho gusto, —nos señala con su copa — ¿Es verdad que vienen a su luna de miel?

—Sí, —confieso tranquila —pensábamos no tener una luna de miel, pero nuestros padres hicieron un trato con nosotros.

El hombre ríe con curiosidad — ¿Un trato, señorita?

—Así es, —asiente —la deje con mi padre platicando un segundo y ellos terminaron haciendo un trato sobre unas vacaciones para ellos y una luna de miel para nosotros, y claro que... —me toma por la cintura inclinándose a mi rostro —la voy a disfrutar.

La vergüenza me invade y lo aparto entre una sonrisa nerviosa, lo golpeo con mi monedero y todos ríe con entusiasmo dándole cumplidos a mi tonto marido, las parejas de ellos me defienden de sus palabras notando mi pena con la situación.

—Ya, tranquila —besa me frente —iré por una bebida ¿Quieres algo especial?

—Puedes traerme lo que quieras —informo con enfado.

—No se enfade señorita, —pide el amable hombre —su marido de verdad es muy gracioso así que no tome enserio todo lo que él dice.

Platica y más platica, presentaciones por aquí y por allá, comimos y bebimos con mucha gente y nos presentamos con muchos más. Ya eran pasadas las doce de la noche y yo no podía encontrar a Shikadai, hacia ya un rato que nos habíamos separado pues me llevaban de un lado al otro entre proyectos y presentaciones, a él también... al parecer teníamos mucha popularidad.

Le pregunte a cada pareja y ninguno podía responderme, la inquietud me llena, pero trato de mantener mi sonrisa frente al señor Marcus y Danielle que me despiden en la puerta, su pequeño hijo esta dormido y Nathalia... bueno, me evito toda la fiesta y no tengo idea de donde se encuentra ahora.

—No te preocupes querida —toma mi brazo con cariño —tal vez se fue antes por sentirse mal, o algo...

—Muchas gracias Danielle, —avanzo dándole un abrazo —nos vemos después, y les avisaré cuando él vuelva.

—Ve con cuidado, y lo siento por hija, ella se fue a acostar más temprano.

—No se preocupe, nos vemos luego, con su permiso y que tengan buenas noches.

Ellos me despiden con la mano y yo me subo a la limosina dejando que el chofer cierre la puerta por mí, mi semblante decae y el auto comienza a moverse. Mis ojos se mantienen cerrados en la obscuridad mientras mantengo mi celular bien sujeto entre mis manos, estoy realmente preocupado por él, no puedo dejar de sentirme ansiosa por no verlo... de repente la ventanilla entre los asientos se abre dejándome ver al conductor que me analiza por el retrovisor.

—No se preocupe, la verdad es que no pude verlo salir, pero él debe estar bien.

Sonrío apenas un poco —Me pregunto dónde estará... al menos debió haber enviado un mensaje, él ni siquiera estaba ebrio.

—No sé que decirle para que quite ese rostro lleno de preocupación, no conozco bien a su esposo, pero no debería de preocuparse...

Exhalo un suspiro y hago bajar la ventanilla a mi lado permitiendo que el aire frío y algo húmedo se mezcle entre mi ropa y mi cabello. Shikadai ¿Dónde te has metido?

-.-.-.-.-.-.-.-.-..-.-.-.-..-.-.-.-.-.-..-.-.-.-.-.-.-

Hola! Bien que bueno que la historia les guste.. esta semana comencé a leer un fic y ya que estuvo tan bueno me entretuve y no actualice... pero bueno aquí está el capitulo y espero subir el otro pronto también se que no debería pero...

Si les gustan los zombies (ya que los amo) les recomiendo buscar en YouTube a XBOXER hace un rato escuchaba el diario de Jonathan ya voy adelantadita y la verdad esta muy cool deberían de buscarlo si claro les gustan lo zombies he historias geniales...

Ahora si me despido!

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top