"Di queso."

"Quesoooo." Dijo entre dientes, sonriendo en grande mientras esperaba que la vieja cámara capturara el momento. "Las mejillas me doleran."

"Ya." Respondió Jimin en medio de su sonrisa.

Cuando al fin la cámara capturó el momengo ambos dejaron de sonreir, pero Jungkook aún mantenia la cintura de Jimin en sus manos, abrazándolo cerca y sintiendo los latidos de su corazón. Mientras esperaban que la instantánea se revelara, Jungkook le dio un rápido beso a Jimin, besando primero sus labios, luego sus mejillas y luego la punta de su nariz.

Las mariposas volaban cerca de ellos, el olor de las flores invadía sus fosas nasales y los sonrojos en sus mejillas no faltaban. Era el ambiente perfecto y la vida perfecta.

Jimin se recostó en el hombro de Jungkook mientras veía como la foto se iba revelando, oliendo la colonia del ladrón de su corazón.

"Hueles a vainilla." Comentó Jungkook, dándole un apretón a su cintura.

"Es una nueva crema, me gustó mucho su aroma y sus recomendaciones."

"Te hace la piel más suave." Halago, acercándose a su oreja para susurrarle con una sonrisa. "Me preguntó si sabrá a vainilla cuando lo pruebe con mi lengua."

"Ya~" Soltó una risilla, empujando levemente a Jungkook, sonrojandose hasta las orejas, aquello era muy fácil para él, sonrojarse.

"Te sonrojas tan bonito." Apretó su mejilla, mordiendo su labio inferior. "¿A que hora sales hoy?"

"A la misma de siempre ¿vendrás por mi?"

Jungkook asintió, tomando la instantánea de la mano de Jimin. "Vamos a la playa a tomar más de estas." Elevo la foto para que ambos la vieran, la fotografía era muy linda, ella podía reflejar la felicidad de sus sonrisas e ilusión de sus pupilas, una obra, sin dudas.

"Es muy linda." Susurro, tomándola de la mano de Jungkook. "La pondré en mi casillero, así la veo todos los días."

"Que cursi." Sonrió.

"Aprendí de ti." Se volteó para envolver sus brazos en el cuello de Jungkook, ladeando su cabeza mientras le sonreía. "¿Recuerdas toda la basura cursi que me decías cuando te rechazaba?"

"Lo recuerdo." Sonrió mientras acercaba a Jimin de la cintura, quería estar cerca de él, sentirlo suyo. "Se que todo eso te encantaba."

"Un poco." Se encogió de hombros. "Pero estaba desconfiado, porque creí que solo te burlaban de mi, o simplemente me molestabas."

Jungkook no dijo más, no quería hablar más sobre lo que pasó antes, porque aquel camino fue el que tomó para ganar su apuesta y ella estaba en el pasado. No era conveniente traerla a la mesa cuando todo había acabado.

Pasado pisado.

Para dejar de hablar del pasado, Jungkook beso a Jimin, moviendo sus labios mientras se sostenían muy cerca, sintiendo el calor de su abrazo y de su beso, embriagados en los sentimientos que flotaban cuando se sostenían. Era el cielo. Cuando se besaban se sentían como ángeles aleteando en el paraíso, infinitos e inalcanzables.

Muy en lo alto, sin que nadie los alcance.

,,

Habían quedado en verse en los pasillos, por lo que Jimin decidió dejar ir a sus amigos, hoy era un día de playa con Kookie. Mientras lo esperaba, se dedico a elegir un lugar para la polaroid que tomo en la mañana, le gustaba mucho como se veía. Se sentía feliz al verla.

Completamente feliz.

Nada podría acabar con aquello.

O eso es lo que creía.

Porque mientras acomodaba aquella foto, unos pasos traían en su espalda el mal augurio, traía las lágrimas y las heridas. Pero Jimin no sabía aquello, pues aún estaba borracho en los besos que Jungkook le dio.

Aún.

"Jimin." Escucho a su lado, se volteó para verle mejor, era Mingyu. "¿Podríamos hablar?"

"Claro." Asintió, cerrando su casillero con la foto dentro. "¿Qué pasa?"

Y a lo hecho, pecho.

Pronto serian empujados al infierno, aquella burbuja de felicidad explotaría y dejaría heridas en sus rostros.

cortito pero ajaaaaaa
así hay más suspenso :$