Antes de que empiece, hola a tod@s, espero que les guste el fanfic, estará más enfocada en la relación Panjose pero también habrá un poco de Donaisy. Estoy empezando este Fic gracias a mi prima Liz, ella ya leyó todos mis fics Vegebul y me insisto a crear este pueden agradecerle a esa maldita, ya leí varios fics Panjose pero siento que nuestras queridas aves merecen más tiempo para darse cuenta de que es lo que sienten así que espero que lo disfruten, sin más empecemos!!!!

Narra Panchito

Íbamos a salir pa'l supuesto estudio donde empezaríamos a ver todo lo relacionado con lo de nuestra nueva y ya planeada banda, "Los tres caballeros" ¡estamos de vuelta! y pensar que hace apenas un mes estábamos buscando trabajo en algún bar de aquí de Estados Unidos

— ¿y ya conoces ese estudio Donald?— pregunte

— ¡Geez! aun no, pero me dijo mi amiga Daisy que iba a estar allá para recibirnos— dijo el pato mientras extendía la mano para llamar a un taxi

— ¿amiga? ¡Meu deus Donaldo!— dijo plumas verdes mientras se tapaba la cara con una mano y sonreía

— What?

—  patito tu aveces si que estás bien pend...

— não Panchito— rápido me puso un dedo en el pico para callarme y continuó— pero si concuerdo con que tal vez eres algo torpe mi querido amigo— dijo recargándose en su paraguas

— hey! What's the big idea!

— the big idea es que tú no hiciste lo que te dijimos mi amigo— dije rodeando mi brazo por su cuello y abrazándolo

— ¿de que están hablando?— me empujo Donald molesto

— ora, ora, aguas Donald, este traje de charro no es barato— dije sacudiendo mis solapas

—tranquilo Donald, solo pensamos que después de los consejos que te dimos ibas a ir con Daisy a decirle lo que sientes

— aún no le dire lo que siento— se puso rojo y se cruzo de brazos

— uyuyui ¿ya te entomataste verdad? ¿Ahora por que tan rojo?— dije a carcajadas dándole unos codazos

— José río y dijo— Donald no tienes por qué avergonzarte por sentirte atraído por Daisy no tienen nada de malo— dijo extendiendo su brazo pidiendo un taxi vacío que nos ignoro y nos pasó

— ya lo sé chicos, pero apenas la conocimos hace una semana, no pienso decirle... aun

— mi querido amigo, yo pude conquistar a mi exnovia Rosinha el día cuando la conocí, para mi una semana se me hace suficiente tiempo para cortejar a una mujer tan bella como lo es la senhorita Daisy— dijo cerrando sus ojos y recargándose de nuevo en su paraguas

—no guys, not yet... además ella es nuestra manager y fue un milagro que aceptara ayudar a nuestra banda

— yo no lo llamaría milagro ¡es lo que merecemos mis cuates! A nos nosotros nos sobra talento hasta pa' repartir, solo faltaba que alguien notara lo talentosos que somos

— tienes razón— Jose se paro de nuevo y se acercó más al pato y a mi, puso cada una de sus manos en nuestras espaldas y nos volteó a ver— por ahora tenemos que enfocarnos en "Los tres caballeros" y en llevar nuestra banda adelante

— Simón, ayayai!— di de a brincos— será mejor que nos apuremos amigos, llegaremos tarde si no nos vamos ya

Me baje de la banqueta,  tomé una de mis revólver y disparé al aire

— ¡taxi!— chifle llamando la atención de varios personas alrededor y también detuve el paso de la calle

— ¡amigos!

Me voltearon a ver sorprendidos

— ¿por que se quedan ahí viéndome con cara de weyes? Órale pónganse changos, súbanse al taxi de ahí— señale el taxi vacío y enseguida se subieron, guardé mi revólver, fui con ellos y me subí atrás al lado de José

— Panchito! Tienes que tener más cuidado amigo, aquí las pistolas no se ven igual que en México, si te ven con una te pueden arrestar — dijo mientras volteaba para atrás de su asiento

— échate unos calmantes Donald, no va a pasar nada, tengo mi certificado de portar un arma justo aquí— le di palmaditas a mi bolsillo del pantalón— además estas armas son para las presentaciones, no pueden matar a nadie y ya estamos en el taxi ¿que más esperas? vamos al estudio

— Okay— en seguida se puso con el otro gringo a darle direcciones y el taxi se puso a andar

— oye Panchito— volteé a ver al brasileño

— ¿qué pasó?

— tal vez debas escuchar a Donald un poco... ten cuidado mostrando tu arma, ya sabemos cómo puedes llegar a ser las personas racistas con sus estereotipos— luego me puso la mano en el hombro

Otra ves sentí lo mismo de hace algunos días, levante mi sombrero y peiné rápidamente mi cresta con la mano mientras trataba de controlar mi respiración

— ¿tudo bem?— dijo sin soltarme mientras se agachaba un poco pa ver mi cara

— Simón, todo bien... sólo creo que al parecer mi cuerpo se quiere enfermar, me siento raro

— ¿que sientes?

— siento que no puedo respirar bien, ardor en la cara y empiezo a sudar de las manos— dije esto mientras me limpiada el sudor de mis manos en mi pantalón

— se rio— no te preocupes mi amigo, son los nervios, lo haremos muy bien en el estudio confía en nosotros— dijo soltándome y tomando su caja de cigarrillos de su saco  mientras abría la ventana del taxi— ¿te molesta si...?— dijo con un cigarro en su pico pidiéndome permiso

— tu échale

— Muito obrigado

Sonrió y prendió su cigarrillo con un encendedor y a la vez ayudaba a prenderlo inhalando y expulsando aire rápidamente con su boca, otra vez me sentí igual... ¿que es está madre que siento? Dejé de ver a mi amigo y baje mi ventana también tratando de regular la respiración

— madres jeje... hace calor ¿no?— dije tragando saliva y quitándome el sombrero

— acalme-se meu amigo, respira en lo que llegamos

Me quede pensando, yo, Panchito Pistoles jamás he estado nervioso antes de una presentación, no me pasó nunca en las corridas de toros, ni tampoco cuando cantaba y peleaba en el palenque, o cuando cantaba para el pueblo por cualquier fiesta, jamás me pasó.... no estoy nervioso por la presentación en el estudio... debe ser otra cosa ¿pero ...que?

— ya llegamos fellas— río con su típica voz

— twenty dolars please— dijo el chofer

— bueno ¿pues ahí pagas no Donald? Thanks señor! — me quite mi sombrero como forma de despedida al chofer y me baje

— yes, thank you so much sir, now excuse me— dijo Jose saliendo de ahí y yendo conmigo
Vimos cómo Donald sonrió incómodo dándole un billete de cinco dólares y un chicle, el chofer lo pateó fuera del taxi y le grito groserías

— ¡la tuya c*brón!— le grité al taxi con la mano hecha puño mientras veía cómo se iba

— what the heck you guys!— dijo mientras Jose le ayudaba a pararse

— a mi no me digas nada, yo me sacrifique ayer con lo de las hamburguesas— dije indignado y me crucé de brazos

— y yo me sacrifique al pedirle más dinero a tu tío Mc. Pato para la renta— dijo plumas verdes sacudiéndole la ropa al pato, Donald solo se levantó y se quejó en voz baja

— ¿tons? ¿Es aquí? — dije volteándome

Miramos el gran edificio que estaba frente a nosotros

— no lo sé, no parece un estudio... ¿o si?— dijo con ambas manos en su paraguas

— no lo sé, nunca había estado en un estudio— dije levantando ambos brazos

—yo tampoco— levanto los hombros José

—ni yo

—...— nos quedamos callados

— ¿y qué esperas Pato?

— ¿de que hablas?

— llámale a tu novia pa' que le preguntes

— she's not my girlfriend!— dijo rojo

— cálmate tomatito

— además ¿no habías dicho que ella nos iba a recibir en la entrada?— preguntó Jose mientras quitaba el resto de ceniza de su cigarro

— ahhh... ¿si?

— llámale, ándale Donald no seas tonto— le eche porras

Nos pusimos a su lado viendo cómo le iba a marcar

—no puedo, estoy nervioso— dijo plumas blancas sacudiendo la cabeza y alejando el celular

— ya márcale Donald— dije dándole un golpecito en la espalda y este empezó a toser

— auch! ¡No me golpees tan fuerte Panchito!

— vamos Donald ya has hablado con Daisy muchas veces y seguirás hablando con ella, vamos márcale, sem medo mi amigo

José iba a presionar el icono para marcarle a Daisy y Donald le dio un manotazo en la mano a José

— ¡au!

— ey! No le des manotazos a José, si no le marcas nosotros lo haremos por ti— le arrebate el celular sonriendo justo cuando iba a presionarlo el botón para marcar Donald me lo quito de nuevo

Se lo arrebate de nuevo y levante mi brazo con el celular en mi mano y con la otra mano en mi cintura

— ja! Olvídalo Donald yo soy más alto que tú y no vas a poder...— me dio un cabezazo en el estómago y me saco el aire— hijo de tu...— baje los brazos y me sobe el estómago, se me callo el celular al suelo y Donald lo tomo contento mientras decía

— gracias... jejeje

— canijo...— apreté los dientes soportando es semejante wamazo que me había dado

— ¡ya basta Donald! —José se puso enfrente mío y sujeto el celular con ambas manos, colgándose antes su paraguas en el brazo, Donald hizo lo mismo y sujeto con ambas manos el celular— ¡Deixe ir!— dijo jalando con fuerza

— no! you let go first!

— ya basta amigos— me pare bien y me acerque mas a ellos quedando atrás de José— párenle— justo les iba a separar cuando ambos soltaron el celular, José salió disparado hacia atrás, ósea hacia mi y me llevó santo trancazo, caí de espaldas y José encima mío aun dándome la espalda— ay!

— ¡maldita seja Donaldo!— su cigarro y su sombrero cayeron al suelo también

— auch! open your eyes you idiot! you hurt me!— grito una muchacha

— oh, phooey— dijo el pato avergonzado

José se sentó en el suelo y yo también haciendo como un trenecito para ver de que muchacha se trataba

Donald se paro rápido y se volteó a ayudar a la muchacha

— hola... Daisy, i'm sorry— dijo mientras se ponía su gorrito de marinero y enredaba sus dedos

— ¿Donald Duck?

— si... lo siento mucho

—ufff, recuérdame comprarme un casco para cada vez que nos encontremos

—ah sure...

José se cubrió el pico con su mano y cerró los ojos mientras aguantaba la risa

— jajaja— me tomé la cabeza por encima del sombrero, es cierto el día que conocimos a Daisy, Donald le pegó con una charola del mercado mientras comprábamos pan, reí más y le dije— Donald es una maquina de golpes desde siempre

— ¡que engraçado!— soltó las carcajadas mientras se cubría sus ojos con una mano

Sonreí, volviendo a sentir lo mismo, me nervie y me toque el pecho

—ora ora...— José pensó que se lo decía a él y enseguida se puso de pie y me dio la mano—gracias compa

La tomé y me ayudo a levantarme, enseguida él y yo nos agachamos a recoger sus cosas, él levantó su cigarro y su sombrilla, yo agarre su sombrero mientras él se sacudía

— lo siento Panchito—río de nuevo— mis guantes se ven muy bien con mi traje pero no sirven mucho para sujetar cosas con fuerza

— no te preocupes mi amigo, no me dolió tanto  la caída

— a mi no me dolió nada— río de nuevo— estás muy cómodo a pesar de lo delgado que te ves

Ardió mi cara de nuevo

— eh... gracias— me rasque la nuca— ah si, toma— el me recibió su sombrero, se peinó sus plumas y se puso el sombrerito de nuevo

En seguida escuchamos la conversación de Donald y Daisy

— ¿te quedarás aquí mirando o me vas a ayudar a levantarme?— dijo la plumitas blancas con una ceja levantada

El pato se apresuró y le ayudó a pararse, José y yo nos acercamos a ambos, apenas abrí el pico el celular de Daisy empezó a soñar

— revisó su celular — ammm, Donald...

— ¿si?

— me estás marcando

El pato dio un brinco y revisó el celular que tenía en la mano

— ¡pffff!— José se recargó ambas manos en sus muslos mientras reía

— jajaja es como dicen en mi pueblo, le picaste con la nalga

José soltó otra carcajada mientras Donald se apresuraba a cancelar la llamada

— i'm sorry

— don't worry...— dijo Daisy aguantando la risa— bien, apresuremos el paso, ya está esperando el inversionista en la sala de grabación, síganme— dijo sujetando un cuaderno y a la vez revisando su celular mientras se puso en friega a caminar

Ella entro al edificio y José le tomó del hombro a Donald aun riendo

— ¿no que no le ibas a llamar?— siguió riendo aun más fuerte

— oh! Shut up

Donald entró al edificio

— no Donald, sinto muito JAJAJA

Al final entramos al edificio y luego al elevador cuando íbamos a uno de los pisos de la mitad del edificio

— ¡órale! Este edificio si que se ve que es muy fino

— por supuesto que lo es, es uno de los estudios más Grandes y exitosos de todo Estados Unidos, si hacen un buen trabajo presentándose hoy, les aseguro que podrán hacer una gira y volverse tendencia en poco tiempo

— gracias senhorita Daisy, sin su ayuda hubiera sido muy difícil llegar hasta aquí y con una cita para un inversionista

— debo decir que tienen mucha suerte de que yo los haya visto antes que algún otro manager— dijo con orgullo— la verdad es que en sus presentaciones llaman mucho la atención supongo por que son algo... escandalosos— dijo sonriendo mientras miraba hacia el techo del elevador

— ese es el sello de Los tres caballeros — dije abrazando a mis amigos por el cuello— si somos buenos en algo es pa la fiesta y pa'l desmadre

Daisy río de nuevo y entonces se detuvo el elevador

— oh, al parecer ya llegamos— paso en medio de nosotros— síganme

Intercambiamos miradas y la seguimos, en ese piso había solo un largo y algo ancho pasillo con sillones y en la pared del fondo una secretaria con su escritorio escribiendo algo en su computador Daisy fue con ella y nosotros detrás de ella

— hola, disculpe ¿llegó el inversionista al estudio 3?

— la ñora le miró de malas y contestó— ¿usted es Daisy Duck?

— así es

— si ya llegó, la está esperando— le entregó algo

— Perfecto gracias

Regreso hacia nosotros con una llave y se fue a la puerta tres

— okay chicos, esperen aquí, hablaré rápidamente con el inversionista y en un momento los haré pasar, por favor no hagan nada y espérenme aquí hasta que les hable

— cuenta con eso jeje— dijo el pato

— si tranquila, nosotros nos quedamos aquí

— okay , trataré de no tardar—abrió la puerta y los tres nos sentamos en uno de los sillones primero Donald luego yo y al lado Jose

Vi como José se empezaba a reír de nuevo y volteó a ver a Donald soltando otra carcajada

— eres todo un Romeo, Donald— dijo plumas verdes limpiando una lágrima

— ¡para con eso! Si ustedes no me hubieran obligado a marcarle nada de esto habría pasado

— tranquilo Donald, se nota que le gustas— dije

— claro que no ¿cómo le voy a gustar después de haberle pegado con una charola y después de haberle caído encima

— mi amigo, te dire como solía decir mi madre, el amor es para todos— termino de decir esto y apago su cigarro

Me quede viendo como apagaba su cigarrillo en el cenicero que estaba en una mesita al lado suyo

— si... — dije confundido sobre aquel comentario que hizo Jose, pero alegre por alguna razón

—no lo sé guys, pienso que lo estoy hechando a perder antes de que empiece

— tranquilo Donaldo, las buenas relaciones no se hacen de la noche a la mañana— se acomodó Carioca en su asiento

— supongo tienes razón— soltó un suspiro

— gringo ¡estate tranquilo! Mira si hay personas que te pueden ayudar esos somos nosotros, aquí el lorito verde es un experto en el coqueteo, es un don Juan disfrazado de loro

— ¿que te puedo decir?— dijo cerrando los ojos con una sonrisa mientras levantaba los hombros— ey! Espera no soy un don Juan

— estoy tratando de hacerte ver un conquistador para calmarle las plumas al Donald— le dije mientras le daba un codazo y en voz baja

— si es el caso...— dijo Pepe Carioca ya tranquilo

— y además ¡también me tienes a mi Donald!

—volteo a ver a José y dijo— ...¿y?

José se rio de nuevo

— eyeyei cierra el pico, puede que no sea un conquistador como aquí el presente, pero si alguien sabe más de romanticismo que cualquiera, ese es Miguel— dije señalándome con mi dedo pulgar

— ¿quien es Miguel?— dijeron al mismo tiempo, levante mis brazos serio y les revente un sopapo

— ¿dicen ser mis amigos y no se saben mi nombre completo? ¡soy yo mero!

— ahhhh

— no hay nadie mejor en los detalles que Panchito Romero Miguel Olivero Francisco Quinteros González lll ¡Ajajaiii chispas!— dije con tremendo orgullo mientras me ponía de pie y me agarraba de mi cinturón con ambas manos

— amigo, tu nombre parece biblia— dijo José con una sonrisa

— ¡ya lo sé! ¿Cómo esperas que nos aprendamos ese nombre tan largo?

— quien quiera a Panchito que le atore tantito ¡si señor!

José iba a decir algo pero Daisy abrió finalmente la puerta

— caballeros, pasen porfavor— se quedó ahí parada viéndonos

— ora si viene lo mero bueno— abrace a ambos por el cuello estando aun sentados

— you guys, será mejor que no echemos esto a perder, es una gran oportunidad para nosotros— susurro

— tranquilo Donaldo, todo irá bien mis amigos, solo hagamos lo que ya sabemos hacer y confiemos en nosotros — susurro José

— ¡hagamos esto!

— ¡Si!

Narra Daisy

Los tres caballeros entraron a la habitación y yo cerré la puerta, tomé un gran respiro y traté de esconder mi nerviosismo lo más que pude

— caballeros les quiero presentar al inversionista, Miss Emma Glamour

— para ustedes solo, Miss Glamour— dijo Glamour bajando un poco sus gafas de sol para verlos

Ellos se quedaron parados sin decir nada

— ¿el inversionista es una señora? — dijo Donald "en voz baja"

José le dio un codazo molesto

— ¡hey!

Volteé a ver a Glamour mientras yo me reía con incomodad

— una disculpa, Miss Glamour, es solo que su presencia causa mucha impresión— dijo José mientras se acercaba a Glamour haciendo unos giros al lado suyo con su paraguas y con intachable seguridad en sus palabras— José Carioca, é um prazer te conhecer— en seguida tomó su mano y le dio un beso en sus nudillos y con la otra mano levantó su sombrero en forma de saludo

— how exotic...— dijo mientras inclinaba su cabeza hacia un lado, con una ceja alzada y una media sonrisa

— ¡yo soy Donald Duck! Y también es todo un placer conocerla— José se retiró y Duck solo le dio un buen apretón de manos

— ¡de verdad que es todo un placer!— grito el gallo asustando a Donald, Panchito se acercó y le tomó su mano y empezó a sacudirla con mucha fuerza— muchas gracias por venir hasta acá para vernos, permítame me presento, mi nombre es Panchito Rome...— volteo a ver a sus amigos y a la vez paro de sacudirla— solo Panchito Pistoles

En seguida separé a Panchito de Glamour

— muy exótico...— dijo seria

—je..jeje... ejem, Miss Glamour, ellos son Los tres caballeros, una banda independiente, ya le comenté los costos de inversión que necesitaremos para que Los tres caballeros puedan iniciar e incrementar su carrera musical

— correcto señorita Duck, por el momento quiero ver que tienen estos jóvenes para ofrecerle a un público— dijo sin voltearme a ver mientras sacaba una libreta y una pluma

— si claro Miss Glamour— acorde con nerviosismo

— por el momento ya tengo algunas estrategias de venta y del tour que le podríamos dar a estos jóvenes— dijo y continuó anotando— puedo notar que dos de ustedes son de origen latinoamericano ¿no es así?

— nada más que México y Brasil— dije señalando a Jose y a Panchito con mis manos

— eso es bueno para el mercado, bien, muéstrenme lo que tienen...— dijo sin dejar de ver su libreta y señalando el estudio de grabación

—está bien— dijo Panchito mientras abría la puerta al área de grabación y pasaba después de Jose

— are you ok?— escuche en voz baja por parte de Donald

— si, estoy bien, solo estoy nerviosa... solo hagan lo mejor que puedan

— cuenta con ello— sacó un disco de su saco— es la tercera canción la que cantaremos

— está bien

Donald entró y cerró la puerta del área de grabación... los chicos comenzaron a cantar un cover de una canción que desconozco pero a decir verdad se lucieron, solo me quede ahí parada viendo de reojo a Miss Glamour mientras los veía y anotaba más cosas, al final ellos terminaron

— pueden salir— dijo Glamour acomodándose en su asiento y con un tono de voz que no me gusto para nada

Los chicos salieron

— oiga señorita Glamour— dijo Panchito

— Miss Glamour

— cierto, disculpe usted Miss Glamour, será que le podemos presentar de nuevo pero en un escenario, siento que no se pudo presenciar toda la esencia de Los tres caballeros en esta pequeña cabina

Glamour levantó una ceja en silencio

— estoy de acuerdo, me siento muy tenso si no bailo— menciono José

— es cierto además pasamos toda la noche preparando una coreografía para que la viera

— iniciativa... me gusta, Daisy— volteo a verme

— ¿si Miss Glamour?

— porfavor llévanos a la sala de presentaciones estoy segura que ahí habrá suficiente espacio para que ellos puedan hacer su presentación— se puso de pie y tomó su bolso

— en seguida— dije preocupada

Supongo que me quede pensando en muchas cosas, en cuanto menos me di cuenta ya estábamos en la sala de presentaciones y los chicos habían comenzado de nuevo. Mis preocupaciones se esfumaron pronto por ver el buen trabajo que estaban haciendo cantando y bailando, tan escandalosos como siempre, mire de reojo a Miss Glamour y noté como sonrió y enseguida escribió en su libreta de nuevo... solo espero que todo esto salga bien

— ¡muy bien chicos!— les aplaudí contenta justo cuando terminaron su presentación, Glamour se quedó anotando cosas en su cuaderno cuando...

— oye José se supone que íbamos a cargar a Donald y no a ti— dijo Panchito "en voz baja"... oh no...

— yeah! Y también cantaste mi parte de la canción

— oh vamos Donald, no fue para tanto — dijo restándole importancia

— ¡si lo fue!

—no, no empieces con otro de tus teatros— respondió el brasileño

— ¡Panchito!

— ¿yo que?

— ¡dile algo!— Panchito se quedó quieto —arggggg— en seguida Donald empujó a José y este callo del escenario, cayendo en la mesa donde estaban todas las bebidas haciendo que salpicara agua en la cara y en el vestido de Glamour

— ... ijole

— ¡OMG! Lo siento mucho— grito Donald— ¿está usted bien?

Glamour se paro rápido de su asiento con el cuaderno seco aparentemente

— that's it! No cuenten conmigo para una inversión— tomó su bolso y camino hacia la salida de la sala, corrí enfrente de ella muy rápido

— ¡espere Miss Glamour! Fue un accidente, ellos no querían tirarle agua encima se lo aseguro

— silencio Daisy, no fue solo el que arruinaran mi hermoso vestido, no están listos para lo que conlleva ser una banda musical, son solo jóvenes que quieren tener una banda por que creen que sería genial— me grito molesta— el es muy tosco y brusco— señaló a Panchito— el quiere acapararse el escenario— señaló a José— y el obviamente tiene problemas de ira muy serios— señaló a Donald— además uno de ellos suena como si no hubiese tomado nada de agua mientras canta

Nos quedamos en silencio y trate de pensar rápido en una solución

— dicen que quieren ser una banda musical pero no actúan como si de verdad lo desearan...— Dijo señalando a Los tres caballeros mientras ellos quedaban cabizbajos— ya perdí suficiente tiempo— guardó su libreta en su bolso y me rodeo para salir de la sala dando un portazo al salir

— supongo que se acabó sin siquiera haber iniciado...— dijo Donald

— ¡não! ¿Que se supone que voy a hacer? Ya no puedo trabajar en la aerolínea, ellos me despidieron

— y no podemos quedarnos más tiempo aquí en USA... ya no tenemos para la renta— dijo Panchito quitándose el sombrero— tendré que regresar a Mexico sin haber cumplido el mayor de mis sueños

— no ¡no lo harán!

Vi como se confundieron ante mi comentario y salí rápidamente de la sala a perseguir a Glamour, baje por las escaleras lo más rápido que pude y llegue a la recepción

— disculpa... uf— le dije jadeando a la recepcionista — ¿no vio salir a la inversionista Glamour?

— vi que entró al baño señorita Daisy

— ¿y de casualidad tendrás un uniforme extra que me prestes?

— de hecho si— sacó su uniforme y me lo dio

— y algo más ¿donde están las toallas limpias de los lavamanos para los baños?

— debajo de los lavamanos

— thank you!

Salí corriendo al baño y al abrir la puerta vi como Glamour intentaba secarse con algo de papel

— señorita Glamour

— pensé que había dicho que era suficiente Daisy

— lo se Miss Glamour... pero me gustaría ayudarle a secarse y también a llegar a un acuerdo con usted

Ella soltó un suspiro

— mire primero meta se al baño y le daré un vestido que tengo aquí mismo... está limpio y seco y tomé esta toalla— dije mientras sacaba una toalla debajo del lavamanos

Ella no reclamó nada solo entró al baño y yo entré al que estaba al lado suyo, me quite el saco rosa que traía y enseguida me quite el vestido, se lo pase a Miss Glamour y yo me puse el uniforme de la recepcionista volviéndome a poner el saco rosado de vuelta y salí del baño

Ella salió después y vio el vestido en el reflejo del espejo

— esta muy lindo este vestido

— me alegro que sea de su agrado, ahora me gustaría hablar sobre Los tres caballeros

— escucha Daisy, seré sincera contigo— dijo mientras se ponía sus gafas de sol de vuelta— ellos son extrovertidos y llamativos, la verdad es un deleite verlos y escucharlos, pero no saben controlarse no controlan su rudeza, sus ganas de mostrar su talento al escenario, y su enojo, y lo pero de todo, además se atreven a venir a pedir mi inversión sin siquiera tener una canción original

— lo se, lo sé yo hablé con ellos sobre eso hace unos días, pero me dijeron que no alcanzaron a terminar su canción... al menos lo que es la letra

Suspiro de nuevo y se puso la mano en la cara

— está bien, está bien, haremos esto Daisy... en tres días ellos volverán a presentar para mi en la sala de presentaciones— no pude soportar mi emoción

— ¡no lo puedo creer! ¡Muchas gracias señora Glamour!

— aún no terminó— me calló— presentaran para mi una canción original suya y será la última oportunidad que les daré, y ese día decidiré si invertiré mi dinero en ellos o no. Y no creas que siempre hago esto Daisy, si estoy tomando esta decisión es por que veo que tienen mucho talento, ellos son unos especímenes raros y exquisitos de apreciar, así que habla con ellos

— claro que si, muchas gracias Miss Glamour

— y por esta segunda oportunidad que les estoy dando me quedare con este vestido, es muy bello— dijo viéndose de nuevo en el espejo

— que bueno que le gusto

— está bien Daisy, te veré en tres días y consíguete a una asistente, no podrás con todo tu sola, hagan algo con la voz del pato, tal vez me veré obligada a sacarlo si no lo arreglan... y recuerda, una canción original...— salió y cerró la puerta

Lo único que pude hacer fue verme en el espejo y empezar a gritar de la emoción

...

—... entonces nos veremos en el estudio mañana chicos— dije despidiéndome de Los tres caballeros

— gracias por lo que hiciste por nosotros hoy Daisy y también por el aventon— dijo Panchito con una mano en el pecho

— no hay de que chicos, pero porfavor mañana vayan al estudio con la partitura que ya tienen y empezaremos a ver lo de la letra ahí y Donald mañana veremos también la cuestión de tu voz

Donald se cruzó de brazos pero luego se quedó cabizbajo

— tranquilo, no te sientas avergonzado por lo que dijo Glamour

José y Panchito iban a decir algo pero cambiaron miradas y se quedaron callados

— ¿sabes algo Donald? Yo podría escucharte cantar toda la noche

Vi como descruzó de brazos y me miro con una sonrisa

— gracias Daisy

— no hay de que, además no te preocupes sé exactamente con quien llevarte para revisar tus cuerdas vocales— dijo con una mano en el volante y con otra tomando mi barbilla

—está bien, entonces... nos vemos mañana

— me reí— claro que si Donald, nos veremos mañana

Tomé reversa y me fui de afuera de su apartamento yendo a mi casa, Donald es tan tierno...

Narra Panchito

Daisy se fue y nos despedimos todos levantando nuestros sombreros

— awwww que bonito son los novios— le di codazos a Donald— Uhhhhhhh

— yo podría escucharte toda la noche— dijo José imitando a Daisy mientras le tomaba una mano a Donald y levantaba un pie como princesa

— oh come on— dijo Donald mirando hacia arriba con una sonrisa— ya basta con eso, vayamos a ver qué vamos a cenar

— okay

Subimos las escaleras hasta nuestro apartamento y José abrió la puerta, entramos y todos colgamos en el perchero nuestros sombreros y entramos a la cocina

— pues no soy chef, pero si quieren yo me aviento la cena de hoy— dije mientras me lavaba las manos

— muchas gracias Panchito— agradeció plumas verdes mientras se servía un vaso con agua— ¿y que piensas cocinar?

— nada especial, además creo que ya no tenemos tanta comida— abrí el refri y estaba casi vacío— ¡ORA! ¿Que pues?

— ¿que le pasó a la comida? ya casi no queda nada— dijo Donald mientras me tomaba del brazo

— pues así tragamos fíjate — me rasque la cabeza y sentí como José me tomó del hombro de nuevo y lo volteé a ver

— pues quedan salchichas y hay pan normal, podrías hacer unos hotdogs—río— aún que no sean tan elegantes como se ven con el otro pan

—sentí como me ponía rojo— ¿que?— y me reí con nerviosismo

— oye ¿estás bien Panchito? — dijo el pato jalándome a la vez del chaleco y me volteé a verlo

— Simón...

— ¿estás seguro mi amigo? Estas extraño desde esta mañana— camino José y se paro al lado de Donald ambos viéndome

— ehhhh. Si, cilantro, tal vez es que aun no proceso todo lo qué pasó hoy— me sentía muy nervioso, me paré derecho y solo mire a otro lado

— de hecho tenemos que cambiar la partitura de nuestra canción a una hoja limpia, la otra hoja está toda rayada— dijo plumas blancas mientras se tomaba de la barbilla

— si, y después de pasarla en limpio Panchito tal vez pueda tocarla con la guitarra, solo para asegurar que esté bien.

— si, claro yo me encargo

Se quedaron ambos viéndome... ¿serán ellos los que me ponen todo nerviado? Evite pensar más en eso y dije rápido

— bueno pues manos a la obra, si no se nos va a hacer tarde pa cenar jejeje— me volteé y tomé las salchichas, el jitomate y la cebolla que teníamos ahí, saqué el aceite y me puse a cocinar las salchichas, escuche como Donald fue a la habitación y como regreso

— hey you guys— dijo Donald con la partitura, unas hojas limpias y una pluma en su mano

— ¿Si?— dije volteando a ver cómo ambos se sentaban en la mesa y como Donald ponía las cosas en esta

— quiero disculparme por haber peleado tanto con ustedes hoy, supongo que era el estrés de lo de la cita con Miss Glamour y también los nervios de tener que ver a Daisy

— awww— exprese con ternura— que ternurita salió ser el pato

— no te preocupes mi querido amigo, no son necesarias tus disculpas, nosotros sabemos que este día fue algo estresante y aún más para ti, tú tuviste que lidiar con tratar de verte bien ante Daisy— dijo Pepe mientras se prendía un cigarrillo

— eso si, y Donald, mi amigo, también discúlpanos si te llegamos a molestar mucho con lo de la carrilla con Daisy, pero pos ya nos conoces— dije sin verlos mientras cuidaba no rebanarme un dedo con el jitomate

— no se preocupen por eso, solo eviten hacerlo enfrente de Daisy

— copiado— dije haciéndole una seña

Donald y José seguían platicando un poco mientras yo los escuchaba y terminaba de hacer los Hotdogs

— bueno mis amigos, para ser hotdogs baratos me salieron muy bien, provechito— les serví sus platos y puse la cebolla y jitomate en el centro de la mesa

— ¡muito obrigado meu amigo!— dijo plumas verdes recibiendo su plato

— muitas denadas José

José se rio, probablemente por mi increíble pronunciación

— yeah! Thank you pal!

— provecho Donald

Nos pusimos a comer y a platicar cómo siempre hacíamos, en cuanto Terminamos la comedera Donald se ofreció a lavar los platos mientras que José se puso a pasar en limpio la partitura de nuestra canción

— mua— lanzó un beso al aire cuando terminó de transcribir la partitura

— a ver a ver— tomé la partitura y la empecé a leer— ándale, ese es mi gallo— le felicite y le di un golpecito con los nudillos de mi mano a la partitura

— ¿ya está?— preguntó el pato mientras se secaba las manos en su ropa

— si ¡Pepe hizo un gran trabajo!

— gracias, solo falta que comprobemos si no me equivoqué anotando alguna de las notas

— cierto, iré por mi guitarra— me paré y fui a rápido a la recámara la tomé y regrese rápido a la cocina— a ver pásamela— dije viendo a Donald

— ¿que?

— está— me agarre la entrepierna y José soltó otra carcajada

— ¡Hey!— se paro plumas blancas molesto

— ey, ey tranquilo estaba bromeando, hablo de la partitura pa checar si esta bien

Donald en seguida me dio la partitura y la agarre con la misma mano con la que tenía la guitarra, jale una silla y recargue la hoja en un vaso, justo iba a empezar a tocar cuando sonó el tono de un celular

— ¿a quien le llaman?— pregunte

— a mi no— dijo José revisando su teléfono

*Gasp*

José y yo volteamos a ver a Donald

— ¿pos qué pasó?

— ¿Donald todo bien?

— es... un mensaje de Daisy

— Uhhhhhhh— le eche carrilla cantadito— ¿y qué esperas tigre? ¡Contéstale!

— are you sure?

— tranquilo mi amigo, Panchito y yo revisaremos la partitura

— gracias amigos

Él patito se paro de la mesa, entro a la habitación y cerró la puerta

— ahí va nuestro Romeo— dijo José sentándose en la silla donde estaba Donald, más cerca mío

— ese Donald está lleno de sorpresas— me acomode en la silla y puse mis dedos en los acordes de nuestra canción

— bueno comienza...

Empecé a tocar y ahí íbamos corrigiendo uno que otro error pero terminamos rápido de revisar la canción

— buen trabajo loro, ya quedó pa mañana— me puse a tocar notas al azar

— vamos a asombrar a Miss Glamour con esta canción, estoy seguro

— la verdad nos la rifamos con la melodía, solo falta el canto

— eso va ser muy fácil, mañana lo veremos con Daisy no te preocupes— tomó su cigarro aún encendido del cenicero y tomó una buena bocanada de humo

Me quede viéndolo y me puse a reflexionar... Lo qué pasó esta mañana cuando José me tomó del hombro y cuando vi como prendía su cigarro en el taxi, cuando se estaba riendo de Donald, o en el momento de la presentación en la sala... como bailaba y cantaba con plena y visible felicidad, cómo movía sus caderas al más puro estilo brasileño, cuando nos subimos al carro de Daisy, sintiendo su pierna tan cerca de la mía o hace un ratito, cuando me tomó del hombro mientras revisaba el refri... yo no estaba nervioso en lo absoluto por la presentación con Miss Glamour, mis nervios no eran por eso, siempre fueron por... madres

— ¡oh por Dios!— grite sorprendido y me tape el pico con ambas manos y tiré la guitarra al suelo mientras trataba de procesar con angustia mi más reciente descubrimiento

—¿Panchito? ¿Qué pasó? ¿Que tienes?— me grito exaltado y asustado

— yo...

— ¿tu que?— me dijo con los ojos abiertos y acercándose a mi asustado

— ¿que está pasando?— salió Donald de la habitación

— Panchito... no sé qué tiene

Donald se acercó a mi y me empezó a preguntar cosas, pero no podía escucharlo, me quede mirando el suelo

— no, no, es que esto no puede ser— me susurre a mi mismo y me tomé de la cabeza con angustia, volteé a verlo a él y después vi mis manos

— ¿amigo que tienes? —dijo Donald con tono de preocupación

Lo volteé a ver y sentí un nudo en mi garganta como si hubiese bebido mucho tequila, mis ojos se llenaron de lágrimas

— mi apá y mi amá...

— ¿que? ¿Qué hay con ellos?— dijo Donald

Ellos estarán decepcionados de mi, mi apá es muy apegado a la religión, esto que siento por Jose es... inaceptable, está en contra de todo lo que me enseñaron de morrito y ellos no lo saben

— yo...— cayó mi primera lágrima y me limpié rápido con mi chaqueta de charro sentía que me estaba hiperventilando me levante de golpe

— Panchito tranquilo— el...me tomó de la cara, pude ver su determinación en sus ojos— respira... tranquilo, todo está bien, Donaldo y yo estamos aquí

Empecé a respirar más pasito y él me soltó lento

— escucha no sabemos por lo que estás pasando Panchito, pero pasaremos esto juntos, como siempre lo hemos hecho— dijo Donald tratando de tocar mi brazo

— ¡No!— le pegue a la mano de Donald evitando que me tocara, mi miedo creció al ver la cara de Donald y José al ver lo que había hecho

— Donald, lo siento... yo no quería lastimarte, perdón es solo que...

—si no nos quieres contar no pasa nada— dijo Jose interrumpiéndome y comprensivo— solo queremos que você esté bien

Sentí miedo y empecé a llorar, muchas cosas pasaban por mi cabeza, José me abrazo y me empezó a consolar en portugués, Donald fue por un vaso con agua para mi, me sentí más tranquilo y tomé el agua que me dieron

— ¿ya te sientes mejor?— preguntó plumas blancas preocupado

— creo que si— respondí sin verlo a los ojos

— creo que será mejor que te bañes y te vayas a dormir Panchito, te esperaremos en la recámara— dijo Jose con una media sonrisa

— si gracias— me levante de la silla le di unas palmaditas en el hombro a Donald y abrí la puerta del baño, voltee a ver a ambos, o más bien a José y baje la mirada mientras entraba rápidamente a bañarme

Estaba pensando en muchas cosas que ni siquiera me di cuenta cuando ya estaba recostado en mi cama mirando el techo, mire a la izquierda, y vi la cama de Donald con él roncando, me volteé hacia la derecha viendo a José dormir... por alguna razón esa imagen me relajo mucho y pude finalmente dormir