Narra José

Me levante a una buena hora, me vestí y recordé que quedamos con los demás a vernos en el restaurante del hotel, tomé mi sombrilla y me vestí, baje de buen humor por el buen clima y vi a todos sentados en la mesa con caras molestas... menos Panchito

— buenos días

— José what the fuck it's wrong with you?!— me grito Donaldo

— ei ¿por que me gritas? Y ¿por que están todos molestos?— dije sentándome y pidiendo la carta tranquilo

— ¿co-como que por qué cabr*n?— me dijo Clara molesta y con un tono como si fuera algo obvio— quedamos en una hora para desayunar y llevamos esperándote dos horas— dijo molesta

— ¿dos horas?— revise la hora y eran las 11:00 de la mañana— ¿no desayunaron ya?

— ¡No!— respondieron todos molestos conmigo, a excepción de Panchito que pareció comprenderme por completo

— ay la verdad fue nuestra culpa pato, nosotros ya conocemos al José— dijo Panchito defendiéndome

— yeah— dijo Donald de mal humor

— n-no hay pedo, ya pediremos de desayunar todos— dijo Panchito tratando de calmar a todos, después de desayunar parecieron estar de mejor humor

— gracias por esperarme a desayunar— dije limpiándome el pico, me iban a reclamar las damas pero solo soltaron un suspiro

— ...hombres— dijeron viéndose

— a ver ¿entonces hoy harán que?— dijo Daisy acomodándose en su silla

— iremos con el amigo de José— dijo Panchito

— yeah, nos van a mostrar de su cultura

Las damas se voltearon a ver preocupadas y notamos como iban a impedir que fuéramos solos por las calles como si nada

— estaremos en un lugar seguro, además yo conozco muy bien aquí— dije orgulloso

— agh, eso no lo sabremos a menos de que...— dijo Daisy tomándose la barbilla pensando— Clara... yo me reuniré con Miss Glamour sola, sugiero que tú vayas con los chicos... bueno si eso no es problema José— dijo Daisy incómoda

— ¡claro que no es problema! Mientras mas seamos mejor, además solo iremos para turistear un rato

— mmmm ¿crees poder cuidarlos Clara?— dijo viéndola

— claro jefa, yo me encargo, después de todo nos quedan 6 días aquí y en cuatro días es el carnaval, no creo que haya tanto desmadre— dijo despreocupada

— bien entonces me iré a reunir con Glamour— dijo poniéndose de pie y después le dio un beso en la mejilla a Donald— los veré después chicos

— claro

— te cuidas— dijo Panchito

Daisy se fue de prisa y yo en seguida me puse de pie y me estire

— ¿a qué hora vendrá Néstor?— preguntó Donaldo

— oh, no a de tardar— dije despreocupado

— bueno le llamaré al chofer, será mejor irnos en un carro o algo, después de cómo me contaron que se fueron ayer en moto, no creo que quepamos todos ahí— dijo Clara con una sonrisa, Panchito se rió... otra vez tuve la sensación de que lo perdía

Después de esperar un rato llego Néstor y en el estacionamiento nos subimos, ya que algunos fanáticos se estaban quedando en la salida del hotel para atraparnos y demás. Salimos en la camioneta mientras Néstor daba indicaciones de a qué lugares ir.

A decir verdad estuvimos muy seguros, nadie se nos amontonó a diferencia del día de ayer, nos encontramos con músicos que tocaban en las calles y bailaban, por supuesto Néstor se puso a bailar y también yo, nos trajo recuerdos mientras brincábamos dábamos vueltas siguiendo una que otra vieja coreografía que teníamos cuando trabajábamos en la escuela de samba, cuando noté a Panchito y Clara mirarme mientras mi galo la tenía tomada de un hombro

...

El resto de la tarde fue algo así, unos momentos muy emocionantes sobre nuestra cultura, gastronomía y demás, pero después llegaba la hora en la que Panchito y Clara se miraban... se abrazaban, se tomaban de la mano, que todo el buen momento por el que estaba viviendo se esfumaba... sin embargo quien se encargó de distraerme de eso fue Néstor mientras íbamos caminando a un Bar donde dijo que veríamos a Pedrâo, el sol apenas se ocultaba y yo estaba... de no un buen humor

— ouve— me llamo— ¿está todo bien?

— si, todo bien— dije fingiendo una sonrisa, decidí cambiar de tema en ese momento al ver a Donald, Clara y Panchito riéndose mientras caminaban enfrente nuestro— mejor cuéntame sobre qué hablaba Marcia ayer, dijo que me ibas a decir algo importante

— él abrió los ojos sorprendido y vi como se puso nervioso— ah claro, eso... si, te lo dire saliendo del bar... no quiero que tus amigos se enteren por el momento

Me quede confundido y con ganas de preguntar más, sin embargo mis dudas no serían respondidas por ver cómo Néstor me evadió en ese momento mirando hacia todos lados inquieto... me asusté, pero no quise preguntar

Llegamos al bar, aquí solíamos venir cuando presentábamos acá en bahía, puxa! Que buenos recuerdos

— ¡caray! Esta bien ching*n aquí— dijo Panchito viendo a los alrededores

— entremos— dijo Donaldo emocionado y todos caminando hacia la entrada

Narra Panchito

— não!— grito Néstor— todos volteamos a verlo por el grito desesperado y asustado que dio, él aclaró su garganta y dijo— e-es decir... lo qué pasa es que ya tengo preparada una mesa para nosotros, y será más seguro para todos ustedes entrar por acá, síganme

Nos miramos todos pa' después seguirlo por la puerta trasera, Néstor tocó la puerta, como si fuera una clase de código, en seguida la abrieron y intercambiaron palabras en portugués, miré la cara atenta de José, después sin problemas entramos por donde lo que parecía ser la cocina

— ¿que ching*dos?— le dije en voz baja a Clara en español

— sepa wey... no creo que sea nada pero por si acaso ¿traes tus pistolas verdad?— me susurro

— Simón— dije en susurro mientras caminábamos, la verdad no me preocupada, lo que dijo Néstor tenía sentido, sería muy riesgoso para nosotros entrar por la entrada principal, salimos de la cocina y vimos el lugar, era un bar muy exclusivo, creo que jamás había estado en un bar así de "bien acomodado" las mesas estaban con buena distancia, había un escenario grande y había dos pisos donde las hostess llevaban a los clientes que querían estar en las mesas de arriba, el lugar de las bebidas era Manlio y había un wey algo haciendo bebidas de forma rápidos, desde la cocina un muchacho hablo con Néstor y nos llevaron a una mesa donde nos esperaba un wey panzón

— Pedrâo?— grito mi Pepe parándose en seco, el otro wey volteó a verlo y se paro

— Zé Carioca!— grito y en seguida se empezaron a abrazar...

Después nos presentamos y nos acomodamos, se sentó Néstor, el Pedrito, Plumas blancas, Clarita después yo y al final José, en esas mesas que son en forma de media luna, llego la botana antes de comer y empezamos a platicar y a conocer más a Pedrâo, me callo bien el wey, nos platicaban anécdotas con el José, yo me partía de risa, el José es más cabr*n de lo que aparenta

—¿ ... eso no fue cuando vendiste boletos para demostrar la fuerza de Néstor?— preguntó Pedrito

— sim!— contestó mi José riendo y dándole un golpe a la mesa— solo sacaba esa fuerza cuando estaba celoso, ese día nos golpearon a los tres, por "estafarlos"— dijo José riendo— después ya en el hospital y de la golpiza que nos dieron fue cuando coqueteaste con la enfermera Pedrâo

— ¡si! Que era mi enamorada en ese tiempo— grito Néstor con el ceño fruncido y con una sonrisa

Todos empezamos a reír cuando...

—desculpe a interrupção, você quer pedir agora? 

sim obrigado, você pode me trazer— respondió... el mesero es un... si, definitivamente es uno, reconocería a uno en cualquier parte, en ese momento me puse más alerta sin dejar de fingir poner atención en la conversación y lo que cada uno está pidiendo, me puse a ver al rededor de nuestra mesa disimulando... el pianista del escenario... la pareja que estaba a un lado de nosotros.... el barman todos ellos vienen juntos, no me alerte, ya ubicando más o menos el número de personas supuse que había la misma cantidad del otro lado del local.

Se que no es necesario, pero me alegro de haber cambiando mis revólver de presentación, por las de balas reales... después de lo que me pasó en mi pueblito, supe que era mejor estar más prevenido, pero nunca les dije a mis amigos, mijo menos a José y Clara. Puedo defenderme y ching*rmelos si intentan algo, o quizá todos ellos están aquí cuidando de un narco o no se, lo que si sabia es que no debía preocuparme.

Me despreocupe tanto que tuve una buena charla con los amigos de José ¡José es un hijo de *uta jajajaja! Sin duda ha cambiado, no al 100% pero sin duda ya no es tan aprovechado, hasta eso, las cosas que nos hizo a Donald y a mi en la universidad no se comparan con las cosas que les hizo a sus mejores amigos de brasil, pero ellos lo tomaron muy tranquilos riéndose de las locuras que se le habían ocurrido a José en esos tiempos, me alegro ver a José avergonzado por las historias que contaban, eso era otro indicio de que en verdad sentía el haberse aprovechado de sus amigos... José puede ser un cabr*n, pero es mi cabr*n.

Terminamos de comer y le empezamos al chupe, estábamos muy relajados, platicando, se hacía de noche y todo estaba tranquilo cuando las luces del local se empezaron a apagar, al igual que las voces de todas las personas dejaban de escucharse, todos pararon su conversación al escuchar al pianista tocar unas teclas y ver cómo las luces iluminaban el escenario, las cortinas rojas cerradas del escenario, más músicos se pusieron a un lado del pianista, dejando el escenario solo, cuando empezó una canción

[Aquí debería haber un GIF o video. Actualiza la aplicación ahora para visualizarlo.]

(Recuerden cómo funciona esto xdxd, lo que relata después de de la letra de la canción, es lo que está pasando mientras lo cantan)

Tell me when will you be mine

Se escuchó a una mujer cantando, pero no había nadie en el escenario

Tell me quando quando quando
We can share a love divine
Please don't make me wait again

Salió una larga pierna de las cortinas, tenía tacones y era una mujer, después de terminar el último verso, ella abrió las cortinas de golpe saliendo al escenario, en seguida todos empezaron a aplaudir y no pude ignorar la impresión de José al verla

(La imagino toda prra empoderada vestida así, los paréntesis son lo que canta José, prosigamos)

When will you say yes to me
Tell me quando quando quando

Empezó a bailar samba de forma sensual moviendo las caderas mientras caminaba al pianista y se sentaba en la cola del piano recargándose de forma sensual en este

You mean happiness to me
Oh my love please tell me when

Volteó a ver hacia nuestra mesa se bajó del piano y camino hacia las escaleras del escenario con intenciones de ir con nosotros, Néstor se rió al igual que Pedrâo y le dijeron algo a José en portugués

Every moment is a day
Every day seems a lifetime

Canto mientras un señor le extendía su mano para ayudarla a bajar del escenario y así llegar al suelo con las luces siguiéndola, ella caminaba y bailaba a la vez hacia nuestra mesa

Let me show you the way
To a joy beyond compare

Llegó con nosotros, o más bien con José y se inclinó levantándole con un dedo la barbilla. ¡ME SAQUÉ UN CHING* DE PEDO! Más al ver que la misma manera en la que ella le estaba viendo (provocativa) fue regresada a ella por pare de José

I can't wait a moment more (i can't wait baby)
Tell me quando quando quando

Antes de que José le siguiera la corriente rodó los ojos con una sonrisa coqueta, la chica al seguir cantando sujeto el moño de José con una mano y con la otra le acarició la mejilla

Say its me that you adore (i adore you)

Le susurro la chica en la mejilla a José, este le contestó su parte y ella se separó caminando de prisa de regreso al escenario

And then darling tell me when

Se puso la mano en la frente como "pobre princesita" José en friega se paro con su paraguas y la siguió poniéndose a un lado de ella

Hey Girl you your my(my) Bella
You make my vida feel better

Canto José mientras la morra se subía al escenario por las escaleras, José se subió de un impulso directo al escenario llegando al centro antes que ella

I'll write you lovely, love letters
And sing for you acappella

José dio tres aplausos en la última frase y agarró la sombrilla por la parte de arriba (No por el mango)

My Bella My Bella
I'd die if I can't come near
I love you forever

Canto para tomar con la parte del mango la cintura de la chica, jalarla a él, después darle una vuelta y quedar frente a frente

Every moment is a day
Every day seems a lifetime
Let me show you the way

Empezó a liderar José un baile, que parecía una guerra por ver quien seducía más al otro con sus movimientos, se frenaron en seco antes de la última frase, la chica tenía su pierna doblada y levantada a la altura de la cadera de José y él sujetándole piel con piel la cintura

To a joy beyond compare, Uhhh

Canto la muchacha acariciandole la mejilla y acercándose peligrosamente a mi José viéndose a los ojos

¡Yo no podía hacer nada! Era un lugar público y el único ahí que sabía sobre José y yo era Donald, miré hacia el pato al sentir su mirada y la de Clara, yo les sonreí y fingí que todo estaba bien, según Clara ella era la única que sabía sobre mi gusto hacia José, pero Donald sabía que yo estoy enamorado de él y que aparte estamos en una secreta relación.

Para fingir empecé a aplaudir, Donald y Clara al verme hacerlo lo hicieron también, Néstor y Pedrito no se dieron cuenta, ellos estaban muy entretenidos aplaudiendo y chiflandoles, mientras José y la morra hacían una reverencia para después abrazarse

— wow que... bonito, pero ¿quien es ella?— dijo Clara tratando de ocultar su molestia, lo cual fue suficiente para que los brasileños no se dieran cuenta

— ella es Rosinha— dijo Néstor con una sonrisa

¿¡ROSINHA!? No mam*s lo que me faltaba

— ¿la ex novia de José?— preguntó Donald sorprendido y molesto

— ella misma— respondió Pedrito de buena gana, otra vez la mirada de Donald y Clara se posaron en mi...

Genial lo que me pinch*s faltaba, Justo cuando todo parece ir bien, estamos rodeados en un local y al parecer fui el único en notarlo, aparece la exnovia de José y para terminarla de fregar esta chulísima

— hicieron un lindo dueto— dije con una sonrisa. José es mío... uffff, no tengo por qué preocuparme, somos pareja y ella solo es su exnovia, al contrario, me pondré pilas para descubrir qué tipo de cosas le solían gustar a José para hacerle algo especial después, luego de tener ese pensamiento en mi cabeza, la tranquilidad abundó en mi como si un tsunami apagara un gran incendio dentro de mi corazón

— ... ah... bueno si— dijo Clara sacada de pedo por mi actitud y ni se diga de la misma cara que tenía puesta El plumas blancas

— Zé solía cantarle aveces, y ella siempre a tenido una linda voz

— jajaja pero al parecer Rosinha aún le tiene ganas a Zé— dijo Pedrâo dándole unos codazos a su amigo burlándose

— uf ni lo menciones, todas las mujeres en brasil le tienen ganas a Carioca— dijo Néstor fastidiado

— ya se, tú fuiste el único hombre que alcanzó a tener una novia antes de que llegara Zé y enamorara a todas las meninas, enamoraste a la única mujer que no se iba a enamorar nunca de él, así que no enojes que hasta eso tuviste suerte

— y demasiada— dijo mirando al techo recargando su cachete en su mano todo apend*jado por la hermana de José — pero siendo sincero, Rosinha siempre estuvo ahí a pesar de cómo es Zé y si creo que alguien tiene oportunidad con él sería Rosinha— dijo levantando los hombros despreocupados y en eso llegaron ambos

— Donald, Clara, Panchito, les presentó a Rosinha, Ró, ellos son mis amigos— dijo José con una sonrisa y con su mano bien postrada en la cintura de la morita

— un placer conocerte— le dije yo estaba ahí en la orilla y Donald y Clara estaban a mi otro lado, lo más obvio es que yo saludara primero

— el placer es mío— me extendió la mano, la morra saludo a todos y actuaba muy femenina en todo el tiempo, se sentó ella a mi lado y en la orilla se sentó José separándome de él

Sabía que no tenía que preocuparme así que sonreí y platiqué con ellos, Clarita y plumas blancas se tranquilizaron al verme así de relajado ante la "situacion" y pudimos conversar agustin

Pedimos postre y continuamos conversando y conociéndonos más cuando en lo qué José y Rosinha nos platicaban emocionados sobre una accidentada cita que vivieron noté como se le esponjaron las plumas al Néstor, vi de reojo que sacó su celular y revisó un mensaje, le dijo algo en voz baja a Pedrâo y se puso de pie, vi que la postura de Rosinha cambió al verlo ponerse de pie y en seguida cambió la conversación por completo

Narra José

— ¡oh! Este perdóname Carioca, tengo que irme pero fue muy rico verte— me dio un beso en la mejilla

— ¿ya te vas? Aun tenemos tiempo— dije sonriente tratando de convencerla de que se quedara, había pasado tanto tiempo

— si, pero no te preocupes, no te escapas de mí tan fácil, te veré mañana si puedo, es que tengo que irme a recoger unas cosas— dijo poniéndose de pie y pasando en medio de la mesa y de mi para salir, ya estando afuera me volvió a besar la mejilla y se despidió de todos, noté que Néstor estaba parado y me llamo

— ei Zé, você poderia me acompanhar rapidamente? quero apresentá-lo a alguém— me llamo por que me quería presentar a alguien

— claro!— me puse de pie y me termine lo que quedaba de mi bebida— ahora vengo— le dije a Donald, Clara y Panchito sin verlos y seguí a Néstor

Pedrâo se paro también pero se fue a otro lado

(Nuevamente imaginen que TODO el diálogo está en portugués, es para evitarme la fatiga xd)

— ¿Y a quien me vas a presentar?— dije sacando mi cajetilla de cigarro y prendiendo uno

— oh, es un amigo mío, es importante que lo conozcas por que...— se quedó viendo hacia nuestra mesa y vi que Panchito se dirigió al baño

— ¿que pasa?— le dije volteándolo a ver confundido— ¿estas bien?

— si, si, solo pensé que Panchito iba a venir— dijo tomándome la muñeca, lo miré y se dio cuenta de como me sujeto, en seguida me soltó

— pues si quieres que venga voy rápido por el— dije despreocupado con mi cigarro entre mis dedos y recargándome en mi sombrilla

— no, nadie más puede venir, sígueme— dijo molesto y tomándome del brazo otra vez

Tal vez está en sus días, no era raro ver a Néstor molesto.

Caminamos para ir a la cocina y se acercó el mesero que nos había estado atendiendo

— hola señor Néstor— dijo el mesero con una sonrisa

— hola... ¿ya está aquí?

— si, ya los está esperando, por aquí, de este lado— nos dijo, mientras yo sacaba el humo de mi boca confundido, salimos de la cocina y al lado de la puerta de la entrada de la cocina, estaba la puerta de esos refrigeradores gigantes donde guardan toda la carne congelada para preparar después, ahí entramos los tres

— ahhh... ¿Néstor?— le susurre antes de entrar

— tranquilo, estaremos bien— me dijo seguro... normalmente confiaría en Néstor pero en esta ocasión me daba miedo, me quede prado ahí sin querer pasar, Néstor y el mesero se quedaron viéndome hasta que Néstor me tomó de la mano y me metieron, el mesero entrecerró la puerta supongo que después el iba a salir. Caminamos por el pasillo un poco y había unas escaleras y una especie de elevador, supongo era para bajar por ahí carne, mientras fumaba traté de tener la calma, veía a Néstor muy concentrado en algo, parecía como si no estuviese asustado, bajando las escaleras llegamos a un lugar con un pasillo medio largo y habían tres puertas, la del cuarto de refrigeración el cual tenía una puerta de acero, las puertas del elevador y otra puerta al final del medio largo pasillo la cual tenía una pequeña ventana de cristal

— por aquí señor Néstor— dijo el mesero con las manos en la espalda y entrando a la puerta con la pequeña ventana

Ya me estaba acabando el cigarro por los nervios, pero mantuve la cordura, soy muy astuto, cualquier cosa si es que llega a pesar podré escapar

El mesero nos abrió la puerta y era un cuarto grande para el pequeño espacio que imaginé que tendría esta recámara, había una gran mesa, y atrás de esta habían un montón de pantallas, cuando me di cuenta vi que eran cámaras de seguridad, había una silla dándonos la espalda mirando hacia las pantallas

— jefe aquí están, con su permiso me retiro— dijo el mesero para empujarnos a Néstor y a mi, o más bien solo a mi adentro y cerrando la puerta

Miré a las pantallas y miré una imagen que se me hacía similar, Merda!

— oye Néstor dime si soy yo ¿o si esa es la entrada de mi hotel?— le susurre asustado en inglés para que el sujeto no entendiera

— si lo son Zé Carioca— respondió el hombre de la silla en inglés, abrí los ojos asustado y el giró su silla para encontrarme a un señor con plumas amarillas, era más chaparrito que Néstor, tenía bigote un peinado con gel horrible y traía puesto un traje— lamento si le incomoda, pero prefiero hablar en portugués si no le molesta, el inglés no es mi fuerte al hablarlo y me siento más cómodo en mi idioma nativo

Yo me quede viendo al hombre y apreté con fuerza el mango de mi sombrilla con mi mano izquierda mientras fijaba mi mirada en las pantallas

— oh, solo son cámaras de seguridad— explicó en portugués— cómo puedes ver, es la entrada del hotel donde te hospedará, los pasillos afuera de sus habitaciones y la calle afuera de la casa del tío de tu amigo Pedrâo, las calles donde serán pronto el carnaval, la entrada de este local, puede ver también que tenemos las cámaras enfocadas en todos lados dentro de este local y... ¡oh! También los autos y carros que utiliza su chofer o mejor dicho, un chico que trabaja para mi cada vez que los lleva a algún sitio

Me quede con el pico abierto asustado

— ¡oh cierto! Si estás preocupado por tu privacidad, la de tus amigos y familiares, puedes tranquilizarte, son solo cámaras de lugares de entrada y salida para asegurar que ustedes están seguros

Me di cuenta de lo evidente que estaba siendo al molestarse mi miedo y me metí el cigarro a la boca

— porfavor, no se queden ahí parados, tomen asiento— dije extendiendo su mano hacia unas sillas enfrente de la suya separándonos a él y a nosotros únicamente por la larga mesa

Néstor sin pensarlo se sentó en una de las sillas y yo lo miré mientras tenía mi cigarro en la boca y mientras agarraba con ambas manos mi sombrilla, Néstor me miró y me susurro

— estaremos bien— me sonrió... debo confesar que eso me tranquilizo y camine sin dejar de ver al sujeto sentándome a un lado de Néstor

— ¿por que nos están espiando?— dije expulsando humo de mis pulmones

— oh no, no lo malinterprete señor Carioca, una disculpa, en unos momentos me encargaré de explicarle el porqué de todo esto, pero creo que tenemos que comenzar desde el principio, así que... señor Néstor si me hiciera el favor de empezar para nuestro querido Zé...

Abrí los ojos sorprendido y miré hacia Néstor

— ¿de que está hablando?— dije alejando mi asiento del de Néstor

— oye, tranquilízate— me dijo Néstor muy enojado— esto no es sencillo y quiero que prestes la máxima atención a lo que te voy a decir...— me tomó del hombro y me acercó a él— dime Zé ¿recuerdas la última visita que visite antes de quedarte a vivir en Estados Unidos con tus amigos?— me preguntó

— claro, fui con ustedes a visitarlos a Río de Janeiro después de graduarme y salir de la universidad— dije viéndolo

— ¡si! ¡Exacto!— dijo con una sonrisa— te quedaste un mes y luego te fuiste... pues hubo cosas que pasaron Justo cuando te fuiste, ahora dime si recuerdas a Zé Galo— me dijo serio

— agh, como olvidar a ese idiota, siempre me hizo la vida difícil queriéndome robar a Rosinha y querer dejarme en ridículo siempre que tenía oportunidad— dije cruzado de brazos

— bueno pues... Justo de él te quiero hablar— levante una ceja y lo miré atento— en cuanto te fuiste, volvió a insistirle mucho a Rosinha en que salieran, obviamente ella lo rechazó y él se molestó y después de unas semanas no lo volvimos a ver, supusimos que se fue a vivir a otro estado de aquí de brasil... luego de un tiempo (esto pasó hace un año)— remarcó— estábamos Pedrâo, Marcia y yo viendo las noticias mientras cenábamos, pues resulta que Zé Galo consiguió un trabajo... que bueno... ya te imaginarás qué tipo de trabajo— dijo rascándose la nuca— se volvió narcotraficante, transportaba drogas y las vendía por todo brasil, él salió en las noticias y lo reconocimos, dijeron que los policías que lo estaban buscando hace unos años por narcotrafico se infiltraron en su casa de lujo a un lado del mar, pero él huyó en su yate y no pudieron seguirlo por que todo eso pasó en la noche, nuevamente pasó tiempo y no supimos más de él

Me di cuenta que me acabe mi cigarro y en seguida sin pensarlo saqué otro y lo encendí

— fue hasta hace un mes— dijo ahora el viendo la mesa con una cara aterrada— le llegó un mensaje a Rosinha de él, diciéndole que seguía enamorado por ella y que quería hablarle, ella no supo cómo el consiguió su número de teléfono y le dijo que no estaba interesada, ella no nos mencionó nada al respecto hasta que....hasta que esa misma noche Pedrâo recibió una llamada de ella llorando, Pedrâo me llamo y salí de la casa, le dije a Marcia que cuidara de Zico y Zeca y me encontré con Rosinha y Pedrâo en la casa de ella

Me miró asustado abrió el pico para decirme algo más, bajo solo la mirada y la levantó de nuevo viéndome aterrado

— dijo que cuando llegó del trabajo se encontró con Zé Galo en su sillón, la estaba esperando, ella iba a correr pero él cerró la puerta, le volvió a insistir en estar juntos, le prometió una buena vida y demás, ella le rechazó por ultima vez y conoces a Ró... ella le grito y le pidió que saliera de su casa y que no regresara nunca más. Fue entonces cuando Rosinha dijo que pensó que él la iba a matar, él empezó a lanzar su sillón, la mesa, su librero y muchas cosas en la habitación, y fue cuando le empezó a preguntar por ti Zé

Abrí mis ojos aterrado

— el la amenazo y le preguntó por donde podría encontrarte, por tu número de teléfono y por cualquier tipo de información tuya, ella nos dijo que la ahorco y que la estaba amenazando si no le decía donde podía conseguir algún tipo de contacto contigo, ella le dijo la verdad, diciéndole que la única que tenía tu número telefónico era Marcia

Me quite el sombrero y lo puse en la mesa aterrado, sentí como mi corazón se aceleraba en una desesperación

— el la dejó ahí en su casa y se fue, luego ella le marcó a Pedrâo y fue cuando fuimos con ella. Después el día siguiente la acompañamos a las autoridades, fue cuando conocí al jefe de policía Manoel— dijo extendiendo la mano hacia el señor que estaba ahí con nosotros— él se ha estado encargando del caso de Zé Galo desde casi su comienzo, nos dijo que recomendaba que no dejáramos a Ró sola, así que se fue a vivir con Pedrâo, después de tres días.... Zé Galo apareció de nuevo— dijo con un nudo en su garganta y mirando sus manos recargadas en la mesa

— ¿Néstor?

—...— se quedó callado mirando a la mesa y aguantando las ganas de llorar

— ¿qué pasó?— dije acercándome a él y lo tomé de los hombros haciendo que me viera

— yo... regrese esa noche del trabajo— dijo viéndome a los ojos con lágrimas— llegue a la casa, abrí la puerta y vi las luces apagadas a excepción de la de la cocina, no grite para saludar como siempre hago por que pensé que los niños ya estarían dormidos, me di cuenta de que no al entrar a la cocina... ahí estaban Zico y Zeca detrás de Marcia, ella los estaba protegiendo con un cuchillo de cocina en las manos, miré hacia el otro lado y ahí estaba Zé Galo... ella, ella no lo pensó, al verme empujó a los niños y me grito desesperada que me los llevara

Miré cómo empezaba a llorar

— yo... no sabia que hacer, ella me suplicaba que los llevara a un lugar seguro, me dijo que ella estaría bien, Zé Galo intento ir hacia mí pero ella le dio una cortada en el brazo, me grito que me los llevara y que me buscaría después, fue ahí cuando sujete a los niños y me los lleve a la fuerza, los subí a la moto en contra de su volutas y la mía, arranque a toda prisa y fui a la casa de Pedrâo en lo que marcaba a la comisaría, yo...— empezó a respirar agitado y desesperado— sabía que hice mal al dejarla ahí, así que deje a los niños con Pedrâo sin darles una explicación y regrese donde ella estaba... pero ya no estaba ahí, ni tampoco Zé Galo

Me miró avergonzado

— perdóname... perdóname yo te prometí que la cuidaría... pensé que la había perdido, llegue a la casa y había oficiales pero ni una señal de ella, ella no contestaba su teléfono y no la encontramos esa noche, Pedrâo me llamo y me dijo que los niños estaban muy inquietos y asustados, así que regrese. Afortunadamente la mañana siguiente escuché la puerta y la abrí, era Marcia— dijo limpiándose las lágrimas y sorbiendo mocos– ella estaba bien solo tenia cortadas y raspones en las piernas pero estaba bien, la llevamos al hospital, nos contó que Ze Galo le pidió tu número, ella se lo dio con la condición de que la dejara ir, él aceptó y Marcia se lo entregó quitando el chip del celular rápido, se lo entregó y salió corriendo de la casa, metiendose entre callejones y las casas, fue cuando escuchó el grito de Zé Galo, las cortadas de las piernas fue por que al huir calló y se raspó y cortó al caer, también al caer rompió el chip del celular por eso no pudimos tener contacto contigo... fuimos a la comisaría de nuevo y fue entonces cuando volvimos a hablar con Manoel, nos dio Pistolas a Pedrâo y a mi, todos nos quedamos a vivir con Pedrâo ese tiempo y ni él ni yo dormíamos en las noches cuidando de los niños, a Ró y Marcia. Manoel nos dijo que era muy riesgoso estar ahí en Río de Janeiro, Pedrâo y yo estábamos consiguiendo dinero para irnos del país, pero fue entonces cuando vimos su entrevista Zé— me dijo poniendo una mano en mi hombro— dieron las fechas y lugares de donde estarían ustedes, Manoel nos llamó al instante y nos dijo que fuéramos a Bahía, nos prometió protección todo el tiempo y trabajo, también dijo que esperáramos hasta que tú llegarás para hablarte de esto

— e-espera ¿entonces ustedes no vinieron hace un par de días aquí?

— llevamos un mes viviendo aquí, hablamos con el tío de Pedrâo y nos dejo su casa, Manoel le compro las casas a los vecinos, y Manoel y su equipo de policías nos están cuidando todo el tiempo, de hecho en este local trabajan Pedrâo y Rosinha, Pedrâo es cocinero y Ró canta y es bailarina, por esa razón no llegaron ayer en la tarde con nosotros— explicó— aquí pusieron su cuartel secreto para vigilarnos y mantenernos a salvo— dijo— yo trabajo vendiendo fruta en las mañanas no muy lejos de la casa, pero Marcia y los niños viven casi todo el tiempo ahí adentro

Yo me quede boquiabierto, hice mi silla para atrás y pase mis dedos entre las plumas de mi cabello con estrés

— mi equipo y yo somos profesionales y estamos cuidando muy bien de tu familia y amigos Zé— me dijo Manoel— te dire algo, la verdad por alguna razón cualquier cosa relacionada con Zé Galo me llevaba a ti, tu familia y amigos— dijo levantando una tableta de sus piernas y buscando algo en esta, cuando encontró lo que quería me la entregó— esto fue el día que mi equipo y yo nos infiltramos en su casa de lujo hace un año, antes de que se escapara de nuevo... encontramos esto en su habitación

Era una imagen impresa de Google maps gigante, y era una imagen impresa de la colonia donde vivíamos mis amigos y yo, tenía marcada con un círculo de un plumón rojo, la casa donde vivía con Marcia, la casa de Néstor, la casa de Rosinha y finalmente la Casa de Pedrâo

— como puedes darte cuenta él al parecer ya te había estado buscando, incluso...

Cambió la imagen y vi que tenía fotos impresas de Donald y sus sobrinos, fotos que seguro saco de alguna red social, también tenia fotos viejas de Panchito con su hermano Miguel

— a tus amigos de Estados Unidos también los había estado buscando, pero sin duda todo es para llegar a ti, encontramos fotos tuyas destrozadas en un cuarto, y demasiadas de la señorita Rosinha— explicó mientras me mostraba las fotos

— ¿p-por que? ¿Por que haría todo esto?— dije estresado arrebatándole la tablet y viendo las fotos— yo jamás le hice nada malo a Zé Galo, al contrario— dije asustado

— lo se, el señor Néstor se encargó de contarme su relación con Zé Galo... realmente no sabemos qué quiere con usted, lo que si sabemos es que no es nada bueno. Sin embargo tengo un plan y lamento si lo hago sentir como una especie de carnada señor Carioca— se disculpó conmigo mientras yo le regresaba la tableta— pero finalmente lo podremos atrapar, estoy casi seguro que él ha estado siguiendo las redes sociales de su Banda con sus amigos. Nos alegramos infinitamente que no los pudiera alcanzar en sus presentaciones en New York y en Acapulco, pero estamos seguros que estará aquí en bahía para esta presentación, tengo a mucha gente en toda bahía para avisarnos si es que lo ven, lo más seguro es que lo veamos y que él se aparezca el día de su presentación en el carnaval, que es exactamente en cuatro días— explicó serio mientras miraba su tableta y se metía a una aplicación— los estamos protegiendo en todo momento, no debe preocuparse, incluso en estos momentos sus amigos están siendo protegidos y vigilados, tengo a muchos agentes haciéndose pasar por civiles, en realidad podría llamarlos como sus guardaespaldas si gusta— dijo riendo

— ¿a-ahora nos están protegiendo?— pregunte sorprendido y sin ganas... tenía una guerra emocional mientras trataba de comprender todo lo que estaba pasando

— ¡claro! Mi equipo es profesional, miré Zé, en estos momentos están siendo protegidos por unas personas haciéndose pasar por civiles a un lado de su mesa, el pianista, el bar man, la hostess de la entrada, el mesero que les atendió y bueno... jajaja en realidad tengo a más personas aquí cuidando de ustedes— dijo de buen humor— puede despreocuparse, ellos estarán cuidando de ustedes así como muchos otros agentes más que tengo trabajando para mi en estos momentos, pero si le pediré que por favor se presenten en cuatro días en el carnaval, es muy riesgoso pero— dijo levantando los hombros y las cejas avergonzado— lamento decir que es la única forma de poder atraparlo

— ¡por supuesto que aceptó! Mi familia y mis amigos estuvieron en peligro... pero en ese caso... creo que tengo que hablarlo con Daisy y con los demás

— ¡no!— me grito Manoel— lamento que tenga que ser así, permíteme te explico, esto es solo para advertirle a usted ya que le involucra directamente, me hice cargo de hablar con el hotel y directamente con su inversionista la señorita Emma Glamour, le explique la situación hace un par de días, me dijo que no quería que se cancelara su presentación por esto de Zé Galo, le ofrecí protección a ustedes, a la señorita Daisy y su asistente Clara, ella aceptó y pidió que no le dijéramos a nadie y que se mantuviera lo más que se pudiera en anonimato, es por esto que solo tú podrás saberlo, no lo puede saber ninguna de tus jefas, o tus amigos el pato y el gallo mexicano, esto se queda en anonimato, sin embargo creo que por tu protección y la de tus amigos sería bueno que le digas a tu amigo... ¿Panchito? Que lleve sus características pistolas a todos lados

— oh, no, no entiende— le dije— las pistolas de Panchito son solo de presentación, no son capaces de herir a nadie— le explique, el se puso serio a la vez que ponía una mano en su boca

— en ese caso le daré un arma a usted también, debe ocultarla bien, señor Néstor le encargo que le enseñe cómo cargarla y esconderla con sus prendas, deberás llevarla todo el tiempo contigo al igual que esta tarjeta— dijo mientras me daba una pistola y una tarjeta que cabía perfectamente en mi cartera, salía un código, la foto de él y lo que parecía ser su firma— está tarjeta es en caso de que te pidan el permiso para usar y cargar el arma, no la use a menos de que sea completamente necesario, Néstor le enseñará todo lo relacionado a cómo usarlo

— ¿como? ¡Espera! Eso quiere decir que Néstor... tú ¿estás armado?— dije abriendo los ojos sorprendido mientras lo veía

— s-si— dijo levantando sus shorts holgados y yo notando que tenía una cosa atada a su muslo con la pistola en su estuche de la pierna— Pedrâo, Marcia también estar armados, la única que no tiene arma es Ró, ella se negó a usar una por... bueno ya sabes lo que le pasó a su madre

— oh...cierto— dije para bajar la cabeza, a la mamá de Rosinha la mataron con una pistola

— pero Pedrâo la espera siempre al terminar su turno para regresar juntos a la casa, así que... bueno todo está bien

— lamento si llegue a incomodarte señor Zé, estaremos en contacto y los estaremos cuidando bien, no se preocupe.— dijo extendiéndole mi arma a Néstor junto con su estuche y broche, Néstor se escondió la pistola atando el estuche en su otra pierna y yo tomé la tarjeta guardándola en mi cartera— pero le repito, por favor... no le diga nada a sus amigos ni a sus jefas, mucho menos postee en sus redes sociales sobre esto y también eviten decir donde estarán, aunque pensándolo bien sus fans son buenos para proteger de ustedes... estarán bien, solo eviten salir solos — me dijo, Néstor y yo nos pusimos de pie

— si... y muchas gracias por cuidar de mi familia— dije sentimental estrechándole la mano a recargándome en la mesa para alcanzarlo

— es mi trabajo señor Carioca, lo atraparemos y usted y su familia podrá regresar a sus vidas normales, creo que es todo por mi parte, pueden retirarse, y señor Néstor...

— ¿si?

— estaré en contacto directo con usted, disfruten de la tarde, estaremos con ustedes todo el tiempo

— si Manoel, gracias amigo— le extendió la mano y le dio un apretón... me alegro ver que Néstor se hizo un amigo, sin decir otra palabra caminamos a la salida, subimos las escaleras y llegamos a la mesa

Estaba absorbido en pensamientos no podía creerlo, miré a mi amigo Néstor... ellos enserio pasaron por mucho, muchas cosas y yo no estuve aquí, ni tuve idea ¡Zé Galo pudo haber asesinado a alguien! Y yo probablemente no me hubiera enterado, mis sobrinos estuvieron en terrible peligro y Néstor con Pedrâo se hicieron cargo de ver por toda mi familia. Ellos son los mejores amigos que puedo pedir....

— ay al fin llegaron— dijo Clara

— lo siento, le presente a alguien a Zé, tenía rato queriendo presentarle— dijo Néstor de buen humor dándome un codazo, supe que tenia que fingir estar bien y reaccione cuando él me dio el codazo

— si, un agradable amigo— conteste recargándome en mi sombrilla con una sonrisa, debo pensar en otras cosas, y supe Justo en que pensar cuando no vi a Panchito— ¿donde esta Panchito?

Empecé a pensar lo peor, es decir ¿qué más podía pensar después de todo lo que me acaban de contar?

— fue al baño... de hecho...— dijo Donaldo y sentí unas manos en mis hombros

— ¿me buscabas?— me dijo al oído— yo volteé y lo abracé— ¡wow! Ey ¿qué pasa?— dijo sorprendido poniendo una mano en mi cabeza mientras con la otra me abrazaba

No me importo que Clara estuviera ahí, ni que Donaldo ni Néstor estuvieran viéndome, me sentí mucho mejor al abrazar a Panchito... y pensar que no podría decirle nada... me aguante las ganas de llorar y me separe

— ¿donde estabas?— lo miré sin soltarme el hombro

— el levantó una ceja al igual que una sonrisa— me fui al baño, sé que da saco pero... creo que la combinación de tanta carne con tequila no hizo buena idea, estuve vomitando— dijo y después me limpio una lágrima de mi mejilla para después poner su mano en su cintura— ¿y a ti que te pasa?

— nada— mentí, me pasa de todo y no te puedo decir— solo que casi me atraganto con mi saliva— dije limpiándome la lágrima

Néstor, Clara y Donald empezaron a reír fue entonces cuando supe que mi mentira funcionó, más al ver la agradable risa de Panchito

Narra Panchito

Néstor le llamo a José pidiéndole que si le acompañaba rápido en cuanto Rosinha se fue de la mesa

Esto no me gusta, sé que Néstor no trae nada en manos, su actitud no es la de un loco o busca pleitos

En lo que José se ponía de pie y le daba otro trago a su bebida, vi a lo lejos como Rosinha intercambiaba palabras con el mesero raro que nos atendió y vi como se fueron a la cocina ¿por que saldría por ahí? Nadie pareció notarlo más que yo, Pedrâo también se fue, yéndose hacia donde estaba el barman sin decir nada. Donald y Clara se pusieron a platicar en cuanto José y Néstor se fueron

— amigos, creo que yo iré al baño, el tequila ya hizo efecto— dije sonriendo y sobándome la panza

— no seas puerco— me dijo Clara en lo que Donald reía, reí con él y dije

— no me tardo

Me puse de pie y noté que el hombre de la pareja que estaba comiendo en una mesa a un lado de nosotros se paro, supe que sería muy arriesgado si me veía seguir a Néstor y José, así que me dirigí mientras andaba maldiciendo hacia el baño, estos weyes están aquí por nosotros... no hay pedo, yo sé cómo manejar esta situación, entre y cerré la puerta, vi que había otro wey más mam*do ahí y le hablé en inglés desesperado

— ¡por favor ayúdeme! El hombre que viene detrás mío me está persiguiendo y no se porque— dije sujetándolo para que evitara ver mis revólver

— yo te ayudo— dijo con un buen inglés, nos pusimos detrás de la puerta, y está se abrió con el wey de la mesa de al lado que me estaba siguiendo, el mam*do del baño lo agarró y empezaron a pelear, los dos estaban muy en su pedo, que yo solo le di un golpe a ambos en la nuca con la parte dura de mis revólver dejándolos inconscientes, me asegure que ninguno estuviera sangrado y miré al wey mam*do que me ayudó con pena

— lo siento wey— dije avergonzado mientras arrastraba su cuerpo hacia un baño— pero era la única forma de que el guarda espaldas supiera que yo no le ataque, así si él recuerda algo, fuiste tú quien lo dejó inconsciente y no yo— cerré la taza del baño y lo senté recargándolo en la pared, miré su chaqueta negra y la gorra roja que tenía — perdón, también tomaré esto un momento— me quite mi chaqueta de charro, mi cinturón con mi soga y mis pistolas y finalmente mi sombrero, los puse abajo de las puertas del lavamanos bien acomodados en una esquina, pensé dos veces y solo tomé una revolver metiéndola entre mi cintura y mi calzón, no antes sin ponerle seguro pa' que no se me fuera a disparar por accidente

Después en friega arrastre el cuerpo inconsciente del guarda espaldas a otro baño y al igual que el otro wey lo senté ahí cerrando ambas puertas con seguro

— ching*n... creo que el que mi papá me enseñara esto con sus antiguos guardaespaldas al fin me sirvió de algo— dije mientras me ponía la chaqueta y me ponía la gorra cubriendo mi cara, también me puse la capucha encima de la gorra y salí del baño buscando rápido a mi José

Miré a todos lados viendo cómo del otro lado del local el mesero raro entraba con José y Néstor a una puerta al lado de la cocina, camine diferente encorvándose un poco y tratando de aparentar ser otra persona, funcionó por que ningún otro de los guardaespaldas fingiendo ser civiles o trabajadores me prestó atención, camine en friega hacia la puerta donde se metieron fijándome de que nadie me viera cuando entre, agradecí a diosito que la puerta estaba entrecerrada y no completamente cerrada por que si no definitivamente valía madre.

Entre sin que nadie me viera dejando la puerta como estaba y solté un suspiro, en seguida sentí frío. También escuché unos pasos en lo que parecía ser un sótano, habían unas escaleras y en el piso de abajo se escuchaban pasos caminando hacia acá

— ¡no mam*s, no mam*s!— susurre paniqueado mientras pensaba en que hacer, luego miré un elevador grandote abierto, me metí y me pegue a una esquina, sin querer le piqué a un botón, y escuché como los pasos ya estaban llegando al  piso, el elevador cerró las puertas y sentí como empezó a bajar, me tambalee sorprendido, las puertas se abrieron de nuevo, me asomé y escuché la puerta de arriba cerrarse— ¡ja, ja, ja!— me reí en susurro— nadie puede contra Panchito Romero Miguel Olivero Francisco Quinteros González lll— dije orgulloso, saque mi pistola de mis chones y me quede con ella en la mano

Camine hacia la puerta de refrigerados y toque despacio, ese pinch* mesero me las va a pagar si me congelo a mi Lorito

— ¿José? Mi amor ¿estás ahí?— dije pegando mi oído a la puerta fría, no escuché nada, hasta que empecé a escuchar la voz de alguien en una puerta que lo había visto, una puertita al final del pasillo con una ventana

Me separé despacio con una cara de confusión viendo a la puerta, camine intrigado hacia ella con la pistola en manos, me agache un poquito para evitar que vieran mi cabeza o algo por la ventana, me pegue a la pared del lado derecho y me asomé por la ventana

— ahí estás— dije en susurro para mí mismo quitándome un ching* de peso de encima, estaba hablando Néstor y en portugués ¡ching*da madre!... tengo que grabar esto, saqué mi celular de mi bolsillo del pantalón y puse para grabar la voz, puse el celular en el suelo, había un pequeño espacio entre el suelo y la puerta así que por ahí iba a salir el sonido, en efecto noté como mi celular grababa el audio de lo que ellos estaban contando... de por mientras me quede viendo hacia al wey enano de plumas amarillas que estaba con ellos.

Guácala, su peinado está bien gacho... ñeee cada quien. Trate de ver más, pero no podía arriesgarme a que me vieran, en ves de eso me dispuse a revisar las escaleras o el elevador por si alguien más bajaba y apunte hacia allá en lo que mi celular grababa todo... le pediré a alguien que lo traduzca por mi... y sé exactamente a quien.

Estaban hablando de algo serio y el olor al cigarro de José salía por debajo de la puerta, tranquilo mi amor... yo te cuidaré por lo que sea que estés pasando. También el pendej* del Lorito me asusto al ponerse de pie estresado mientras hablaba con el otro wey, por un momento pensé que me había visto...

Ya me estaba aburriendo por que no entendía ni madres de lo que hablaban hasta que escuché un pequeño golpe, me asomé un poco y vi un arma en la mesa, y vi como Néstor levantó su shorts de mezclilla dejando ver que él estaba armado, José se sorprendió pero no lo vi asustado, no me debo preocupar pero estaré vigilando a ese wey, quizá ya traduciendo esta madre sabré por que está armado

Escuché como se ponían de pie José y Néstor, escuché como se despedían y se dirigían a la puerta

¡MADRES!

Tomé en friega el celular y parando la grabación, corrí hacia el elevador, estoy seguro que si subía por las escaleras me iban a ver, me oculté de un lado del elevador abierto, los vi subir las escaleras y hasta que no escuché la puerta cerrarse no me asomé.

Escuché el portazo de la puerta, vigile si no venía el wey amarillo y sin dejar de ver hacia esa misteriosa puerta subí corriendo las escaleras, ya sintiéndome más seguro, abrí un poco la puerta, para ver si nadie me veía al salír, aproveché que una familia estaba pasando por ahí cuando abrí la puerta y camine al lado de ellos para dirigirme en friega al baño, estaba sudando, abrí la puerta del baño y había un Niño lavándose las manos, yo entre y me metí a un baño, me quite la chaqueta y la gorra, escuché como el morro salió en lo que yo me desvestía y aventé la ropa por arriba al wey mam*do que me desconté hace un rato, en friega me puse mi chaqueta charra, y mi cinturón, tomé mi sombrero y salí caminando como si nada del baño, fue entonces cuando noté de nuevo las miradas del pianista la "pareja" del guardaespaldas que me siguió al baño y la del Barman yo las ignoré y vi parados a José y a Néstor enfrente de nuestra mesa, escuché mi nombre salir por su boquita

— ¿me buscabas?— le susurré al oído para de pronto sentir como se volteaba a abrazarme con fuerza — ¡wow! Ey ¿qué pasa?— dije sonrojado regresándome el abrazo y poniendo una mano encima de su sombrero, él se separó de mí sin dejar de sujetarme del hombro con los ojos aguados viéndome y con una sonrisa

— ¿donde estabas?

— me fui al baño, sé que da saco pero... creo que la combinación de tanta carne con tequila no hizo buena idea, estuve vomitando— le mentí, pero estoy seguro que es lo mejor que puedo hacer por ahora, Néstor está aquí y no puedo decirle que estuve cuidando de él, le limpie una lágrima de su chachete... este solo es otro indicio de que él no está bien— ¿y a ti que te pasa?

— nada, solo que casi me atraganto con mi saliva— dijo limpiándose la otra mejilla con la el dorso de su mano, todos empezaron a reír y vi como él pareció tranquilizarse, así que reí también, solo para notar su cuerpo soltar lo tenso que estaba

Después regresó Pedrâo, pero fue solo a despedirse, después de todo ya era muy de noche, nosotros llamamos al chofer y salimos nuevamente por la cocina, nos recogió el chofer y nos llevó al estacionamiento del hotel, nos bajamos y Clara dio la maravillosa idea de ir a tomar al bar de ahí? Lo cual ninguno negó, caminamos hacia adentro del hotel y vimos cómo Néstor se despedía de José... fue una despedida muy.... sentimental, al menos por parte de José, es estaba... muy encerrado en sus pensamientos... sepa por que, pero mañana lo descubriré, así a lo lejos nos despedimos de Néstor quien se subió a su moto y se fue del estacionamiento del hotel

Narra José

Estábamos bebiendo de nuevo en el bar del hotel... no puedo creerlo... Zé Galo me está buscando... y desde hace un año, atacó a mi familia y amigos. Estoy muy asustado, tenía mucho miedo y seguía sin creer lo que había pasado hace un par de horas y lo peor es que no puedo decirle a mis amigos

Seguí tomando en silencio mientras Clara y Panchito se reían de Donald, Panchito me volteó a ver, yo estaba serio viendo a un punto muerto, se giró a mi y me dijo

— debes estar cansado, será mejor que vaya a dormir— dijo con una sonrisa

— yo...no sé si sea capaz de poder dormir

— ay vamos José, nos hemos puesto pedas peores que esta— dijo Clara mientras le traían otra Piña colada

— si, pero ya es tarde— dijo Donaldo bostezando— yo te acompaño Joe, yo también tengo sueño

— ... b-Bueno la verdad si estoy agotado— confesé

— ustedes descansen, creo que ora mañana no tenemos así como un plan o algo que hacer— dijo Clara mientras espantaba a una mosca que le volaba cerca

— Simón, tranquilo mi plumas verdes, mañana yo creo que turistearemos otro rato en la tarde— dijo Panchito viéndome mientras yo me ponía de pie

— bueno en ese caso, me retiro, no creo poder más jejeje— reí poniéndome de pie, me acerqué a Clara y le di un abrazo y beso en la mejilla como despedida, después Donaldo también se despidió de ella, camine a Panchito y él se puso de pie para darme un abrazo... si necesitaba a Panchito en un momento, este era el momento indicado, por alguna razón me sentía más seguro entre sus brazos

— descansas— me susurro— te quiero

— y yo a ti, nos vemos mañana— le conteste para separarme a fuerzas de él, espere a Donaldo para que se despidiera de Panchito y juntos nos subimos cada uno a su habitación, bueno, Donald se fue a ver si Daisy seguía despierta.

Por mi parte entre a mi recámara, me quite el saco y el sombrero colgándolos en mi perchero al lado de la puerta de entrada, me recargue en la puerta con estrés y camine hacia mi cama mientras me deshacía el moño de mi camisa, vi en mi buró el arma con su estuche y clip, es cierto, Néstor dijo que se lo daría a un chico del otro que trabaja para Manoel y que él lo dejaría en mi habitación, lo tomé y lo metí en uno de los cajones, sentándome agitado en la cama

— no creo poder pasar por esto solo— me dije a mi mismo con estrés poniendo mis manos en la cara mientras sentía como quería llorar , literalmente todos los que amo están en peligro, necesito decírselo a Panchito, pero no puedo, ellos dijeron qué anonimato... pero Panchito es bueno con el arma, si solo le digo a él podrá ser bueno para protegernos... me senté pensando en lo que iba a hacer— sim le voy a decir...

Me hice el moño rápidamente, me quedó feo, tomé mi saco y mi sombrero, solo será rápido, pediré un momento con él y ya me iré a dormir, salí de mi habitación sintiendo el frío en mi cara, baje y camine hacia el bar del restaurante, a las mesas de afuera, ahí nos gustaba sentándonos, baje unas escaleras, cuando iba a doblar cuelga para llegar a la mesa y-yo... los vi

— hmn— soltó como un gemido Clara

Abrí mis ojos con dolor y me escondí detrás de la pared, miré mis manos y me pellizqué el brazo, não... esto enserio está pasando

Me asomé despacio sintiendo como mi corazón se destrozaba y los miré de nuevo, Clara estaba recargada en la mesa haciéndose para atrás mientas Panchito la tenía acorralada entre sus caderas y la mesa, él la estaba sujetando de la cara y la estaba besando

E-Esto no es enserio, esto debe ser un sueño ¡no es verdad!

Vi y escuché como los dos gemían... el gemía con voz gruesa... como hizo conmigo... me oculté de nuevo detrás de la pared y me tomé la frente, sentí como empecé a respirar agitado y cómo las lágrimas salía sin permiso de mis ojos, yo no quise ver más, salí corriendo hacia el estacionamiento, ahí me tape la boca y empecé a llorar

— filho da *uta!— grite herido mientras lloraba, me limpie las lagrimas y corrí afuera del estacionamiento, empecé a correr por las calles hasta que vi un moto taxi y le llame

Me subí en él y le dije una dirección sin pensarlo, me volteé evitando que me viera llorar, esto es un sueño no puede ser verdad esto no... sentía como quería vomitar por estar respirando tan agitado, apretaba mis rodillas con fuerza y estresado mientras lloraba en silencio

— chegamos, são 30 pesos— yo son ver al chofer del moto taxi me baje de este y vi como Néstor y Marcia me estaba esperando afuera de la casa, junto con los vecinos o mejor dicho... agentes

— Zé! ¿Qué pasó?– dijo Néstor en pijamas corriendo junto con Marcia y otro guardia espaldas— Zé Galo te persiguió

Yo solo empecé a llorar destrozado y el guardia me tomó los hombros y me dijo

— recibimos una llamada de que te vieron salir del hotel corriendo, necesitamos que nos digas si Zé Galo apareció

— no, no fue nada de eso... ¿puede irse?— dije empujando al guardia, él dio dos pasos hacia atrás y dio una señal a más personas dentro de la casa, él entró después de eso

Marcia y Néstor cambiaron miradas y dijeron

— ¿entonces?

— ¡y-yo soy un idiota!— dije sujetando mi sombrero y arrojándolo al suelo con fuerza

— epa! ¿Por que lo dices?— dijo Néstor tratando de tranquilizarme

— yo les mentí... yo si estaba teniendo una relación con.... ese Galo mexicano, guapo y encantador — dije molesto y llorando desgarrando mi garganta—Panchito y yo éramos pareja pero yo lo acabo de ver.. yo lo vi

Empecé a llorar de nuevo y abracé a Marcia mientras lo hacia

— ¡oye! ¡No me puedo ir hasta que me paguen!— Grito el del moto taxi, Nestor me volteó a ver y en seguida fue a pagar por mi, Marcia me llevo dentro de la casa y en seguida Néstor corrió con nosotros abrazándome del otro lado

— e-esperen— dije sorbiendo mocos y en voz baja— Ró y Pedrâo ¿están aquí?— pregunte mientras lloraba, no quería que nadie mas me viera así

— no, ellos terminan su turno en dos horas— contestó mi hermana acariciandome la cabeza

— ven entremos— dijo Néstor preocupado abriéndonos la puerta

Fuimos a la cocina mientras lloraba

— ¿¡soy una zorra para él o que!?— dije molesto llorando

— ¿qué pasó? Zé no podemos ayudarte si no nos cuentas lo qué pasó

Yo empecé con la desagradable y horrible historia mientras lloraba y sentía como los pedazos rotos de mi corazón se rompían de nuevo y como esos pedazos aun más rotos se hacían polvo

Eu tinha razão! ¡Lo sabia y no hice nada! Al contrario fui parte de su pequeño jueguito enfermo de tener ¡dos parejas! Sin duda un juego divertido y entretenido para un bisexual

Sentía como lo odiaba, y como me odiaba a mi aun más por no haber puesto una pausa, por no haber preguntado.... por atrever a confesarle lo que sentía por él y demostrárselo con besos coqueteos y demás

Pensé en sus palabras cuando me dedico serenata en Acapulco

"te prometo que daré lo mejor de mi José, haré que no te arrepientas"

Si.... Lo que digas

HOLAAAAAA, ahí está el capítulo, ehhh que les pareció? Fuerte verdad busjajajjaa. Saben que me ayudan mucho un su voto y con un comentario (por cierto a aquellos que han comentado Gracias! Me hacen muy feliz sus comentarios🥺)

Ora si, espero que lo hayan disfrutado tanto como yo disfrute escribirlo, muchas gracias y nos leemos pronto ♥️♥️♥️

Pd : escribir a las 2:11 de la madrugada es mi pasión así que....