Capitulo dos.
Una vez llegaron al castillo dejo a su caballo en el establo y subió de nuevo hacia una de las torres en donde tenía instalado un gran laboratorio bien equipado con estantes de libros, set de química, un gran telescopio, planos, mapas, dibujos hechos por él mismo y una enorme mesa de madera en la cual poso a la golondrina que había encontrado Kohaku ese día y atrajo hacia él unos libros con apuntes, mapas, lupas, entre otras cosas se sentó en una silla y empezó de lleno nuevamente en su investigación.
-Mmm- miro a la golondrina a través del vidrio de la lupa antes de atraer hacia él uno de los mapas del reino y con un lápiz empezar a marcar círculos en este de nuevo- están incrementando- dijo a sus adentros-
-¿Alguna novedad nueva?- dijo la amazona cerrando la puerta detrás de ella-
-Hay algo que se llama tocar la puerta leona- la miro y volvió a lo suyo- no, aun no hay nada nuevo sólo que cada vez aparecen más y más de estas-
-Ya veo- se acerco a él- ¿y cual es tu teoría?- dijo-
-Es difícil de decir- se alejo del vidrio de la lupa- ya con esta son doce en total mas que venimos encontrando- dijo-
-¿¡Doce?!- dijo sorprendida- sabía que se estaban convirtiendo en piedra pero...no tantas- dijo-
-Temo que doce es un número pequeño aun leona- la miro- si te fijas bien ya an habido avistamientos de estas aves convertidas en piedra quizás hasta mucho antes- miro el mapa- hace dos meses un aldeano dijo que había encontrado dos de estas en su establo cerca de donde descansaban los cerdos, otro dijo que encontró una hecha pedazos en la puerta de su casa, una dueña de una taberna dijo que en las ventanas de esta encontró más y así con casi cada habitante o campesino lejano-
-Entiendo- se cruzo de brazos- y...¿que crees que este pasando? ¿por que crees que las golondrinas se estén convirtiendo en piedra? ¿crees que esto también pueda llegar a afectar a los demás animales?-
-Aun no se eso pero si llegase a pasar sería un gran problema no sólo para ti o para mi sino para todo el pueblo Ishigami y temo que para otros reinos cercanos en general- dijo mientras ponía una mano sobre su boca-
-Bueno...- se recosto contra la pared cruzada de brazos con un pie apoyado sobre la pared- al menos hoy cenaras bien- rió- ese venado se veía muy apetitoso si me lo preguntas-
-Se nota que te gusta la carne de venado ¿eh, leona?- dijo burlón-
Ella sólo soltó una risita.
Él giro su mirada hacia la ventana de la habitación, el sol reflejado sobre el vidrio de esta dejaba a iluminar más el cuarto. Afuera veía pasar a algunas aves en frente de su ventana mientras abajo podía escuchar a sus tropas entrenar como cada día.
-¿No deberías de estar entrenando leona?- volteo a verla-
-De hecho...- se paro derecha- la verdad es que me dio curiosidad acerca sobre las golondrinas que encontramos hoy- dijo- como dije anteriormente ninguna de ellas estaban cuando pasamos por esa zona cuando perseguimos al venado, estoy segura-
-¿Tú y tu aguda visión nunca fallan, eh?- se rasco el oído- te creo leona- se puso de pie y camino hacia la ventana poniendo sus manos en su cadera- yo también estoy diez billones por siento seguro de que esas golondrinas no estaban allí antes y el que aparecieran más de la nada la verdad da mucha curiosidad- mantuvo su mirada fija en sus soldados que entrenaban- iré a ver al viejo Kaseki- se giro- necesito su ayuda en algo-
-El viejo Kaseki está ocupado ahora- dijo- no creo que quieras molestarle- lo miro- pero si te interesa...haya abajo en los entrenamientos hay cosas interesantes que ver aunque no sea ciencia- sonrió-
-Bien- esbozo una sonrisa mostrando los dientes- vayamos entonces-
.
-¡HA!- el filo de su espada estuvo a pocos centímetros de su cara tentando el cortarle la piel y hacerlo sangrar pero hizo acopló de su fuerza e hizo retroceder a su hermano volviendo a atacarlo-
-El cuerpo más abajo y la punta de los pies mirando hacia adelante- dijo Nikki cruzada de brazos- hazlo bien- le dio un golpe con el puño en la cabeza-
-¡Ya Nikki no me pegues me duele mucho!- dijo chillando Ginrou-
-Es para que te mantengas más concentrado- lo miro con autoridad-
-¿Y esto es una mujer?- volteo a ver a su hermano recibiendo otro golpe por parte de la guerrera esta vez más fuerte mientras su hermano se llevo una palma a la cara y negó con la cabeza-
-¡No te pases Nikki!-
-¿Eh?- los tres voltearon-
-Entendemos que Ginrou es una escoria molesta pero no lo mates del todo lo necesitamos después de todo-
-Gracias- dijo el ojiverde-....creo...-
Kohaku rió.
-¿Como va el entrenamiento?- dijo Senku con poco interés pero mirando a su alrededor-
-Hoy se despertaron con menos ancias que otros días- dijo Nikki- así que tuve que ponerme un poco ruda-
-¿Un poco?- dijo Ginrou mientras la miraba con reproche-
-Como sea- dijo mientras se rascaba el oído con el meñique- veo que las armas están más preparadas esta vez-
La guerrera asintió con la cabeza.
-Se lo pedimos al viejo Kaseki-
-Así que por eso esta ocupado, je- negó con la cabeza- tendré que esperar hasta que termine lo suyo para poder hablar con él, su habilidad como artesano es lo que necesito para lo que tengo en mente en este momento-
-¿En que lo explotaras esta vez?- dijo Kohaku burlona-
-¿Quieres hacerlo tú en su lugar?- la miro-
-Creo que prefiero entrenar-
-Eso pensé- rió-
Decidió volver a su estudio para seguir investigando las golondrinas y dejo a la amazona con los demás para que ella entrenará e hiciera lo suyo en lo que esperaba que el viejo Kaseki dejase de estar ocupado.
Así se paso toda la mañana ignorando el hecho de que quizás tenía alguna u otra responsabilidad o lección que aprender como futuro monarca pero siguió en lo suyo investigando a fondo la petrificación rompiéndose la cabeza en varias ocasiones frustrado por no obtener respuestas o las respuestas incorrectas muy diferentes a las que quería en realidad pero aun así no se rendiria eso no estaba en él y tampoco lo estaba en ninguno de los habitantes del pueblo Ishigami, diez billones por siento seguro de que si y de que encontraría la respuesta a este misterio que había estado ocurriendo últimamente aunque eso significara aveces descuidar sus demás obligaciones, llegaría al fondo de esto.
-Mmm- retiro su cara del vidrio de la lupa de nuevo y se dejo caer en el respaldo de su silla echando su cabeza hacia atrás antes de reír entre dientes- esto de verdad aveces es un dolor de cabeza- miro al techo- pero....no falta mucho para que logre resolverlo si tan sólo....- escucho golpes en la puerta- ¿hm? Adelante-
-Ishigami-sama- una de las criadas entro por el portal de la puerta- el almuerzo esta listo-
-Bien- se incorporo- diles que ya iré-
-Compermiso- hizo una reverencia y se marcho cerrando la puerta detrás de ella-
Una vez más sólo miro al suelo y se paso la mano por el pelo. Miro de reojo las cosas puestas sobre la mesa entre ellas un frasco marrón con un pequeño liquido adentro de este junto con formulas, libros, mapas y otros frascos más pequeños al rededor. Se puso de pie y se dirigió a la puerta cerrandola tras él.
.
Mientras tomaban su descanso Kohaku fue hasta el establo y allí encontró a su caballo comiendo y este al verla fue hasta el extremo de su puerta mientras acercaba su cara hacia las manos de su dueña.
-Hola Yûma- dijo- buen probecho- sonrió mientras lo acariciaba-
El caballo siguió comiendo mientras que Kohaku se quedo allí observandolo y sonrió con nostalgia. Aquel caballo había sido un regalo que su padre le había dado cuando fue su décimo cumpleaños y era algo que atesoraba pues hasta donde sabía la madre de aquel caballo fue una vez la yegua de su madre quien murió años atrás cuando ella aun era pequeña y con ese animal por muy raro que parezca se entendían ya que ambos amaban la libertad y el sentir el viento soplarles en la cara cada que salían a cabalgar en las mañanas rumbo a tener una vista de la puesta de la subida y bajada del sol era increible y era también un recuerdo de su antiguo hogar antes de pasar a formar parte de los caballeros del pueblo Ishigami. Había dejado a su padre y a su hermana en la casa en la que los tres vivían un poco apartados del pueblo pero aun así aunque los extrañaba aun se mantenía en contacto con ellos atravez de cartas, no recordaba mucho de su madre nisiquiera su voz o su personalidad, lo mínimo que sabía de ella era lo que su padre y su hermana le contaban y aunque no recordaba su voz si sabía que era una mujer rubia que siempre llevaba su cabello amarado en un rodete de ojos azul acuarela y lo sabía gracias a que tanto ella como su hermana llevaban siempre consigo un relicario de plata con un árbol tallado en este una foto de su madre y eso era algo que atosoraba tanto como a su hermana, su padre y a aquel caballo y ahora su nueva vida como caballero real.
Saco su relicario escondido debajo de su camisa y lo abrió deslizando la tapa hacia un lado y allí estaba la foto de una mujer rubia con un rodete y las típicas mechas hacia adelante con su flequillo peinado a un costado sonriendo calidamente con los ojos entrecerrados.
Sonrió al ver esa foto al tiempo que sentía sus ojos humedeserse por las lagrimas, de inmediato guardo su relicario bajo su camisa y se paso la mano por sus ojos secando sus lagrimas antes de que estas cayeran por sus mejillas.
-¿Pasa algo leona?- la voz repentina de Senku la sobresalto y la hizo voltear. Él estaba recostado contra la pared de brazos cruzados-
-¡Senku!- dijo ella- ¿No estabas alamorzando? Aun no termina tu hora del almuerzo- dijo- ¿te estas descuidando otra vez?-
Él rió y negó con la cabeza.
-No se te escapa nada- se acerco- y descuida no me estoy "descuidando" como dices, al parecer la que perdió la noción del tiempo esta vez fuiste tú tan concentrada estabas en tus pensamientos que tal vez nisiquiera lo notaste.
-Perdón- dijo-
-Jamás entenderé esa costumbre tuya de pedir perdón por todo- se rasco el oído-
-Lo siento- dijo-
-Ahí va otra vez- suspiro- en fin aun no me as respondido a mi pregunta ¿por que llorabas?-
-¿Que? Yo no...no estaba llorando- dijo- yo no lloro-
-Mientes peor de lo que yo entreno- dijo-
Ella sólo suspiro y negó con la cabeza para volver donde su caballo que había asomado su cabeza de nuevo y ella empezó a acariciarlo.
Cuando la noche cayó en el reino Ishigami, Senku se encontraba aun en su estudio con lamparas encendidas a su alrededor y aunque estaba cansado aun así seguía en lo suyo o bueno lo estaba hasta que escucho la puerta abrirse.
-Senku-
-Viejo-
-¿Todavía estas aquí?- se cruzo de brazos-
-¿Tú que crees?- lo miro con una sonrisa-
Byakuya rió.
-Ya son casi las doce de la noche- miro hacia la ventana- deberías de descansar te ves muy agotado y el estudio de la petrificacion te mantiene ocupado pero también es bueno que descanses hijo-
-Iré luego de terminar de anotar esto- volvió a su agenda-
El peliblanco miro a su hijo recostado en la pared mientras se cruzaba de brazos y sonreía. Ninguno de los dos dijo nada por unos siete minutos y sólo se mantuvieron en un silencio que inundó toda la habitación pero como siempre nada es eterno y el peliverde decidió romper el silencio.
-¿No te iras hasta que me valla a dormir, verdad viejo?- lo miro-
-No- negó con la cabeza y una sonrisa-
-Hmp- soltó una leve risa- bien- se levanto de su silla y se alejo de la mesa- me iré a dormir y continuaré con esto mañana ¿feliz?-
-Mucho- le toco el hombro cuando estuvo a centímetros de él- vamos-
Ambos salieron del cuarto y Byakuya le deseo buenas noches y Senku se fue mientras que su padre lo miraba desde lejos.
Habían pasado dieciocho años desde que se había convertido en el padre de Senku a sus veintidós años, ahora tenía treinta y nueve años casi cuarenta y su hijo cumpliría diecinueve en cuestión de unos meses. Dieciocho años en los que cuido a aquel joven que sería un monarca algún día y también eran dieciocho años en los que recordaba a aquella joven que había dejado la vida de su hijo a un extraño sin pensarlo.
°•FLASH BACK•°
El sol empezaba a bajar por el pueblo Ishigami y por sus playas y Byakuya se encontraba caminando por la arena de estas con dos guardias escoltandolo mientras caminaba, tenía la mirada fija en el suelo cubierto de arena mirando de vez en cuando al paisaje que se posaba en frente de él.
Los colores naranja, rosa y amarillo en el cielo junto con las hermosas aguas de la playa lo hacían todo mucho más hermoso y digno de ser retratado o de disfrutarlo en compañía de alguien.
-¿Eh?- levanto la vista- ¿Que es eso?-
Dejo de admirar el paisaje cuando vio asomarse a unos metros de él un bote de madera oscura con una persona remando con todas fuerzas como si su vida dependiera de eso hasta que finalmente llego a la costa saliendo casi a rastras del bote con unas prendas lamentables que eran los harapos de lo que seguramente alguna vez fue un vestido crema que ahora estaba lleno de tierra y barro seco con un paquete envuelto en una manta cielo igual de maltratada. Byakuya no lo pensó dos veces y fue hasta aquella persona.
-¡Espere!- lo detuvo un guardia- majestad podría ser peligroso, podría ser un delincuente o alguien de muy malas intenciones- lo miro serio con su mano en la empuñadura de su espada-
-Podría necesitar ayuda- ignorando las advertencias de sus guardias fue hasta donde aquella persona se arrastraba.-
Cuando llego se dio cuenta de que era una mujer, joven de pelo largo y castaño muy pálida, sucia, con algunos raspones y muy muy flaca así como de mediana estatura- oye...-
-¿Eh?- ella levanto la vista y reveló unos ojos rojos como las rosas o la sangre con hojeras de cara muy pálida e igual de manchada con algo de tierra- por favor....- susurro-
-¿Se encuentra bien?- pregunto- ¿Quien eres? ¿De donde vienes? ¿Por que estas así? ¿Te persiguen?- preguntaba-
-Por favor....- volvió a susurrar- ayuda...-
-¿Eh?-
La joven perdió el soporte de sus piernas y termino arrodillada en el suelo y hubiese caído de cara de no ser por que él la sostuvo.
-¡Hey!-
-¡Majestad!- los dos guardias fueron hacia Byakuya-
Mientras sostenía a la mujer fue cuando bajo su mirada hacia el paquete envuelto y vio que algo se movía en este.
-¿Que tienes allí envuelto?...- pregunto preocupado-
-Por favor...cuide a mi hijo...- su voz sonaba débil y cansada-
-¿De que habla señorita?- le toco el hombro-
-Cuide de mi hijo por favor....- delicadamente le entrego el paquete a Byakuya quien lo sostuvo con cuidado y miro a la mujer-
-¡Venga conmigo!- dijo- la llevaremos a mi castillo y allí la atenderán bien, se muy enferma, descuide allí mis sirvientes la atenderán y...- callo sus palabras cuando ella puso una manos sobre su mejilla-
-Se lo ruego....cuide de mi hijo- sonrió débilmente retirando su mano de la mejilla del hombre antes de posarla sobre la manta- mi hijo....Senku- con ese ultimo aliento la mujer se desplomó siendo su caída detenida por uno de sus guardias-
Luego de eso dicho por la joven empezó a sentir que las mantas se movían y al bajar su mirada y hacerlas a un lado vio con asombro que lo que estaba envuelta en estas era un pequeño bebé varón que empezó a removerse y a hacer una mueca empezando a sollosar para terminar llorando al final.
-Majestad- miro a su guardia y este negó con la cabeza aun con la joven madre en brazos-
Miro al niño quien abrió sus ojitos y eran igual de rojos que los de la madre, aunque había dejado de llorar aun tenía su carita roja y empezó a mirar a todas partes buscando posiblemente a su madre pero al no encontrarla empezó a llorar de nuevo malhumorado. Byakuya empezó a meser al bebé suavemente para intentar calmarlo llevando una de sus manos para acariciar la carita de este y con ese toque el pequeño volteo su mirada hacia él e inocentemente envolvió su manito en uno de los dedos de Byakuya haciendo que este se quedara mudo.
El pequeño bebé miro con curiosidad el dedo del mayor en su manito y luego a Byakuya para finalmente sonreirle cambiando su mueca de malhumor por una de alegría y Byakuya le devolvió la misma sonrisa al pequeño Senku.
°•FIN DEL FLASH BACK•°
Ese había sido el momento en el que paso a ser el padre adoptivo de aquel joven asexual de mente brillante y no se arrepentia para nada de criarlo aunque no fuese su hijo de sangre aun así estaba orgulloso y sentía mucha lastima de que la madre biológica de Senku no hubiese tenido la oportunidad de ver crecer a su hijo aunque se la regalo a él y se sentía increible ver los avances y tropiezos de un hijo.
- Es un gran chico...- dijo a sus adentros antes de poner una cara seria- ¿Que abra ocurrido para que esa joven madre decidiera escapar? ¿o...que abra hecho para escapar y llegar así?-
¡Wenasssssssssssss! ¿Que ondis? Aquí el segundo capitulo de esta nueva historia ¿que les parecio? ¿hice muy dramático el flash back de la madre de Senku? ¿si? Pos ñeee :v me enganche mucho en esa parte así que.
Bueno descubrimos un poco más los roles de los personajes de la serie en este mundo medieval xd.
Y si se preguntan en donde pueden estar nuestros amados: Chrome, Gen, Ryusui, Taiju, Yuzuriha, Suika entre otros pues.....
Irán apareciendo a medida que esta historia avance así que sean pacientes ¿okis?
En fin me despido ¡Sayonara!
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