Capítulo Sesenta y Cinco.
Los helicópteros se acercaban ya con personal de búsqueda y rescate para asegurarse de atender a las posibles víctimas o atrapar a los extremistas que pudiesen haber en lo niveles superiores a los inhabilitados por las explosiones, en la azotea del poderoso rascacielos en llamas Brasil se retiró la máscara dejando ver su rostro cansado pero con una sonrisa tranquila sorprendiendo al de ojo naranja.
—Me... gu..gustas.. mu..cho.. –Se esforzó en pronunciar a pesar del dolor mientras lo miraba a los ojos con un sonrojo notable en sus mejillas, aprovechando en robarle también un beso debido a que el otro estaba el shock—.
Duró apenas unos cortos segundos pero fueron los suficientes para hacerlo sentir en la gloria antes de saltar al vacío seguido de un grito aterrado de Serbia que por instinto se asomó al borde, solo para notar que el más alto traía un paracaídas que a la altura adecuada abrió para esconderse entre el humo hasta aterrizar en un edificio cercano más bajo.
El balcano se quedó observando con todo lo sucedido en el día rondándole en la cabeza sin creerlo hasta que fue rescatado por uno de los helicópteros para ser llevado al hospital donde servía revisado por sus golpes y la inhalación de humo. Pero no podía dejar de pensar en las palabras ajenas con curioso acento y sobre todo en el beso que este le dió, seguro estaba alucinando por la sorpresa pero aún podía sentir sus labios sobre los suyos.
. . .
Alemania vio al enmascarado alejarse tras haberlo dejado junto con la irlandesa en una sillas de la recepción, apenas estaban llegando la policía y servicios de emergencia debido a los bloqueos por la marea de gente pero por suerte no habían pérdidas mortales que lamentar y ya se estaban liberando las calles.
En silencio se quedó sentado moviendo un poco sus pies abrazándose bajo la manta que cubría sus hombros, bebiendo un par de sorbos de agua hasta que lo comenzaron a revisar al notar que estaba allí y estaba embarazado.
—¡Alemania! –Al de ojos lavanda le regreso el alma al cuerpo cuando lo divisó, corriendo en su dirección sin importarle un carajo el resto para arrodillarse frente a él a revisarlo rápidamente en busca de alguna herida o golpe– ¿Mi amos estás bien?, Italia y yo estábamos buscándolos pero luego no podía encontrarse y había sangre de Irlanda en el suelo, tenía tanto miedo de que te hubiese pasado algo.
—Estamos bien –El tricolor se limitó a decir abrazándose a su pecho y aspirando su aroma para darse tranquilidad, tendría que decirle luego lo sucedido alta evitar que lo interrogaran– ¿Dónde está Italien?
—Oí por la radio que estaba en el hospital junto con Serbia, Egipto se está encargando de monitorear a todos los que evacuaron de aquí, ahora debemos ir nosotros a que te revisen –Rusia le dio un beso en la frente y lo tomó en brazos para así ir a una de las ambulancias que estaban en la entrada—.
• • •
Un par de horas más tarde tanto ellos como Italia estaban en la habitación del asiático en el mismo hospital, hablando en tono bajo con emoción de ver a la cachorra en sus brazos que dormía tranquila luego de haber comido.
—Se parece más al tonto, pero tiene el color de cabello de Japón –El eslavo sonrió divertido observando cómo su amigo ignoraba totalmente su pierna suturada y vendada para estar acostado al lado de su esposo embelesado con su bebé que había tomado su pulgar con la pequeña manito que tenía—.
—Es preciosa Jap, me alegro mucho por ustedes –Sonrió también el Omega europeo tomándoles una foto que envió a su suegro de estrellas doradas con quien charlaba por mensajes para asegurarle de que todas estaban bien—.
—No creí que Tokyma se adelantaría una semana pero me dio mucha ansiedad ver más noticias y más las explosiones del edificio, además va a ser complicado repararlo así que es seguro que nos mandarán a vacaciones indefinidas.. –El de ojos marrones suspiró alzando los hombros, son duda los nuevos inicios eran complicados pero necesarios para progresar como sociedad—.
—Podemos tomarlo como un tiempo de calma, al parecer la OCOI entró en pausa pues según mi padre; el último castrado que soltaron tenía un pendrive dirigido hacia él donde estaba toda la información necesaria para destruir redes de trata y muchas otras cosas más, incluso al parecer uno de sus compañeros estaba implicado en violencia familiar.. –Rusia abrazó igual de pensativo a su pareja, por suerte sus ahorros les permitirían sustentarse tranquilamente hasta que el asunto se resolviera en la torre o simplemente cambiarían de trabajo—.
Debido a la situación se les permitió quedarse a dormir en otra habitación contínua ya que el germano aún debía de ser monitoreado para descartar cualquier problema por la inhalación prolongada de humo.
Por la noche la histeria colectiva se había calmado ya significativamente pero se hablaría de ello por mucho tiempo más, todos aquellos cuyos nombres fueron revelados como escorias serían perseguidos para obtener lo que merecían por dañar.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top