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+ Era Halloween, y todos los amigos y conocidos de Paula asistirían a su fiesta, la cual estuvo organizando desde hace tiempo para que todos pudieran disfrutar de esta festividad a su lado, y el de su familia. Los Polestar eran una familia muy cariñosa y cálida, y se notaba con los cuidados de los niños que estaban bajo su cargo. Así que todos estaban dispuestos a ir sin excepción, así que, casi todo el mundo estaba allí. Los padres de Paula no podían estar presentes en la fiesta, así que se dejo de encargada a Kumatora, así que era el único ""adulto"" responsable aquí.
+ El ambiente era acogedor, y todos se divertían, Paula fue a buscar algo de tomar, y fue a su cocina, vio por la ventana la linda Luna y estrellas que estaban en el oscuro cielo azul, era la única en esta parte de la casa... O al menos eso creyó. Un hombre de aspecto corpulento estaba caminando por el patio, se arrastraba levemente y estaba dirigiéndose hacía la puerta del sótano, tenía algo en las manos, ¿Era una caja de Pizza? ¿Y un soplete? No podía ser su jardinero... Era un viejecillo muy simpático que se acostaba temprano, ¿Qué haría un Halloween en la noche en su casa para regar las plantas? Esta tomo rápidamente su bebida. (Jugo de Naranja) Y se dirigió hacía donde estaban las demás chicas.
...
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+ Los muchachos se dispersaron, aunque algunas de las chicas estaban en el cuarto de Paula, la cual les estaba contando el suceso.
― ¿Estás segura? ― Pregunto Kumatora, siendo algo "responsable" en el asunto, oh por cierto, su disfraz era de caballero.
― Si lo estoy... ― La muchacha estaba comiéndose las uñas del terror. La pequeña rizos de oro (Ese era su disfraz literalmente.) Había visto a alguien extraño deambular por los alrededores, y no quería guardárselo para nada, ¿Y si venía a hacerles algo a todos?
― ¿No crees que este perdido? Digo, puede ser nuevo en estos lares. ― Pregunto Nana, mientras vigilaba junto a Kumatora a los hermanos pequeños de sus amigos. Tenia un disfraz bonito de la Cenicienta.
― No lo se... Pero el Jardinero no es. ― Dijo ricitos de oro. ― No creo que sea seguro salir ahora mismo...
― Tranquila, todo estará bien, seguro... Ehm... ― Nana no podría asegurarle nada, podía ser alguien inocente o una persona que estaba enferma. ― ¿Se lo contamos a los demás?
― Si, debemos de hacerlo, aunque, ¿Saben dónde esta Pippi? ― Pregunto.
― Creo que esta... ― Antes de que Kumatora hablará Pippi vino con un pequeño juguito y sonrío al verlas.
― ¡Hola! ¿Ya se enteraron? ― Comento.
― ¿Sobre? ― Dijo Paula.
― Oh, ¡Un hombre estaba preguntando si puede unírsenos! Yo le dije que no... Y bueno, al parecer se fue, o sigue afuera... No estoy muy segura.
― ¡No me digas eso! ¿Sabes dónde esta Ana? ― Dijo Paula preocupada, Ana había bajado con los demás a la fiesta al buscar más bocadillos.
― Oh Ana salió un minuto afuera, me dijo que iba a revisar si el de la Pizza había llegado.
― El de la Pi- ― Se escucharon gritos. ― ¡NO PEDI NINGUNA PIZZA! ― Dijo Kumatora alterada.
― ¡DEBEMOS BUSCAR A ANA! ― Dijo Paula tomando de la mano a Pippi y salió corriendo escaleras abajo junto a Kumatora también.
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+ Al llegar abajo todos los de la fiesta estaban afuera completamente en shock, ¿Acaso...? ¡No podía ser! Ellas se abrieron paso ante los demás adolescentes ya que habían hecho un circulo al rededor de la persona que aparentemente era Ana. Al ver lo que había sucedido Paula empezó a llorar. La pobre niña estaba tirada en el pavimento de la calle con la cara, pies, manos, ¡Todo el cuerpo quemado! Y un bidón de Gasolina a su lado, y... Un soplete, y una Pizza... La cuál decía con la tinta de un bolígrafo "Invita la casa." Qué atroz... ¡Debían salir todos de esa casa ahora ya!
― M-Muy bien t-todos... ― Dijo sollozando junto a los demás. ― ¡V-Vayan todos a casa rápid-! ― Ja, ¿Creen que esto iba a ser tan fácil? Un auto que estaba estacionado a la par de la casa intento arremeter contra los presentes, haciendo entrar a todos a la casa, ¡¿Qué diablos estaba pasando?! Nadie lo sabía, pero todos se reunieron en grupo, por suerte nadie más había salido herido... Además del cuerpo calcinado de su mejor amiga. Estaban en la casa y no había roto la puerta, eso estaba bien por lo menos.
― ¿¡Qué se supone que esta pasando!? ― Replico Ness frunciendo el seño. El cual estaba vestido como Mario, solo que Lucas estaba agarrando su gorra.
― ¡No lo se! Hay un loco fuera de esa casa y no creo que tenga buenas intenciones... ― Dijo Kumatora.
― Y creo que estamos encerrados... ― Murmuro Lucas. El cuál estaba disfrazado de Pit de Kid Icarus.
+ Los demás hicieron silencio, y Lucas señalo la puerta se escuchaba a alguien martillando tablas en la cuál posiblemente su única salida, oh, y también las ventanas, ¿Acaso no podía ser esto peor?
― ¿¡Y no tienes un hacha o algo Paula!? ― Pregunto Fuel. El cuál tenia un disfraz de pirata.
― Creo que en el ático hay una... ― Dijo Paula. ― ¡Iremos a buscarla todos juntos! No se separen ni se distraigan, ¿Bien?
― Entendido. ― Dijeron al unísono.
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+ Los muchachos estaban algo lejitos del grupo para evitar choques entre estos, además de que Ninten estaba yendo como una tortuga, ¿Porqué? Fácil, su traje estaba algo ajustado y tenía partes de metal, estaba súper bien hecho, ¡Mala idea para cuando tienes a un extraño tratando de asesinarte!
― ¿Porqué justo hoy que vengo con un traje que no me deja ni correr pasa esto? ― Dijo Ninten frunciendo el seño, ¡Lo peor es que ir de Captain Falcon lo había planeado desde el Halloween pasado!
― No lo se, sabrá Dios si llegas a morirte por no poder correr. ― Dijo Claus el que se vistió de... Santa Claus, si, lo habían retado a hacerlo, restándole importancia, aunque si le importaba que al enano no le pasara nada, y por supuesto a su gemelo menor.
― ¡Claus no digas esas cosas! Estarás bien Ninten, lo aseguro. ― Corrigió Lucas, el azabache de pañoleta suspiro.
― Gracias, pero necesito que alguien me acompañe a quitarme este disfraz, será solo un minuto, después de todo traje una mochila con ropa. ― Dijo Ninten rezando por ser acompañado, no iba a ir sólo a que lo matara ese extraño hombre, ¿Qué le dirían a su mamá?
― Si me estás invitando a que vaya, no iré. ― Dijo Claus rápidamente, no podía dejar solo a su hermanito. ― ¿Y si voy que pasará contigo Lucas? ― Lo miro con preocupación.
― Estaré con Ness y los demás, no te preocupes, ve y acompáñalo. ― Dijo señalando a Ness, el cuál sonrío inmensamente.
― ¡Si! Yo podré cuidarlo. ― Ness abrazo a el rubio y el rubio lo abrazo a el, dándole la "seguridad" de protección que Claus necesitaba ahora mismo.
― No dije que iría. ― Dijo el bermejo.
― YA BUENO VAMONOS. ― Dijo Ninten agarrando fuertemente del brazo al de ojos esmeraldas antes de que replicara. Este iba a ser un largo camino.
+ Los niños de más adelante estaban algo nerviosos, dos de ellos habían subido al ático para comprobar, los demás se quedaron abajo. Fuel y Paula silenciosamente fueron buscando entre las cosas, cajas, baratijas, fotos, y más cajas, Paula había encontrado algunas cosas, incluso su osito de peluche favorito, Mr. Fiddles, ¿Porqué Fiddles? Bueno, recuerda cuándo fue a comprar un oso a una juguetería, tenía un pequeño violín al lado de su caja, seguramente alguien lo dejo allí porqué al final no era lo que quería comprar. Lo tomo y abrazo con delicadeza, y recibió un llamado de atención.
― ¿Paula? Lo siento por lo de Ana... ― Dijo Fuel buscando la hacha.
― No te preocupes... ― Dijo, una lagrima cayo por su mejilla. ― E-ella siempre me dijo que si algún día Dios viniera a buscarla para llevársela al reino de los cielos, iría con el sin dudar... Espero que haya sido por eso... ― Abrazo más fuerte el peluche, su mejor amiga se había ido y nunca volvería. Tal vez debió aclarar sus sentimientos antes...
― Eso espero también... ― Tomo el hacha, y se la mostró, Paula sonrío. ― ¿Por Ana?
― ¡P-por Ana! ― Dijo entusiasta y bajaron juntos las escaleras del ático. Tal vez no pase nada Mal...
― ¡Maldición! ¡Claus este cierre... NO CIERRA! ― Dijo resaltando lo irónico, llevaban más de 2 minutos con Ninten tratando subir el cierre de su pantalón. El bermejo rodo los ojos.
― Póntelo rápido me quiero ir. ― Dijo pegándole una patada a la puerta del baño.
― ¡Entonces vete! ― Dijo Ninten por el enojo, en realidad no quería que se fuera.
― ¿Acaso te desquitas con el cierre y conmigo por lo de Ana? ― Interrogo el bermejo, sabía que Ana era muy cercana al azabache enano.
― ... Ella era una gran amiga, ¿Okay? Si me duele y me enoja que un enfermo le haya arrebatado su vida porqué si. ― Dijo el azabache enano. ― Ahora largo... Quiero un momento sólo.
+ Sin decir más el bermejo se retiro del baño a paso rápido, Ninten lo escucho y suspiro pesadamente, pero siguió tratando de corregir el problema con el cierre, ¡Esto era un problema muy abierto! ¿Entienden? Porqué no cierra el cierre... Rápidamente se escucharon pasos hacía el baño, Ninten rodo los ojos divertido y hablo.
― ¿Acaso estas sordo? ¡Quiero un minuto a solas! ― Río el azabache más enano. ― Ya saldré en un momento... Sigo con ese problema con el cierre... ― Musito y siguió tratando de subirlo, no tuvo respuesta, y alguien abrió lentamente la cerradura de la puerta Ninten se alarmo. ― ¿E-eh? ¡No seas imbécil! Ni creas que me vas a ver en calzones... ― Se volteo para seguir arreglando el problema.
+ La puerta había sido abierta completamente, y alguien se acercaba en paso lento, se escuchaba el leve rozar de la madera por el suelo... ¿Madera?
― Oye Claus... ― Se volteo el azabache.
+ Sin poder reaccionar a la situación, el hombre de antes tomo la cabeza de Ninten y la torció de manera no muy amigable, rompiendo su cuello, haciendo un "crack" eso resulto muy satisfactorio para el, como si no fuera suficiente, clavo 6 pequeñas estacas muy afiladas en todo su cuerpo, incluyendo la cabeza con algo de esfuerzo, estaba completamente atravesado por ellas, a continuación, acompañada de una leve sonrisa, tomo cada extremo del niño y comenzó a partirlo en pedazos, pequeños y lindos trocitos, los cuales quedaron en el suelo, y contemplo su obra de arte, TODA la sangre que el niño había podido tener estaba derramada en el suelo, ensuciando todo... Goteaba un poco de sus manos y ropa, se retiro de allí rápido... Debía seguir divirtiéndose.
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+ Los chicos al llegar con los demás sonrieron al tener su salvación, los demás festejaron, Pippi sonrío.
― ¡Estamos salvados! ¡Kumatora nos salvamos! ― Festejo Pippi.
― ¡Exacto! Esperen, ¿Dónde están Ninten y Claus? ― Pregunto la pelirosa.
― Uh, eso es verdad, ¿Dónde...? ― Busco con la mirada la rubia de pelo rizado.
― ¡Ellos fueron al baño a que Ninten se cambiara la ropa! ― Dijo Ness, Lucas asintió.
― Si, ellos deben estar de regreso ahora mismo. ― Dijo Lucas, aunque estaba preocupado por ellos dos, ¿Cómo podrían estar seguros de eso?
― ¡Dije que no nos separáramos ni nos distraigamos! ― Dijo Paula algo irritada.
― Calma, de todas maneras... Ya tenemos una solución para nuestros problemas. ― Dijo Fuel.
― Pero debemos estar alerta igualmente... ― Dijo Poo, el cuál había estado de lo más callado.
― Iremos a ver, ¿Si? ― Dijo Kumatora. ― De hecho... ― Inspecciono, al principio de la fiesta estaban: Ella, Lloyd, Ana, Ninten, Pippi, Paula, Ness, Poo, Nana, Lucas, Claus y Fuel. Ahora se sabía que Ana había partido y no había rastro de Ninten y Claus, definitivamente tenian que estar alerta.
― Pero iremos todos juntos, ya saben, nos ira eliminando poco a poco si vamos en grupos... ― Dijo Pippi con algo de miedo.
― Bien, todos juntos, ¡No pierdan de vista a nadie! ― Dijo Paula dispuesta a seguir, debían buscar a Claus y a Ninten y salir de este infierno.
+ Claus camino hasta las escaleras y se quedo un tiempo ahí, seguía esperando a Ninten después de todo, aunque, escucho a alguien arrastrar madera, ¿Acaso habían conseguido el hacha? Dio un vistazo rápido, pero no vio nada, y por seguridad fue a ver como estaba Ninten. Camino por los fríos pasillos de la casa, que parecían ser interminables, hacía una frío que calaba los huesos, hubiera sido peor sin ese patético disfraz de Santa que tenía puesto, mientras pensaba un poco sobre lo de Ana, realmente le dolió, era una buena amiga, y sabía que a Ninten le había pegado aún peor, estaba junto a Lloyd aguantando las lagrimas. No lo podía culpar, aunque trataba de ignorar lo sucedido, no podía tapar el sol con un dedo. Al llegar, vio un notorio rastro de sangre...
― No... No... ¡NO MALDICIÓN! ― Grito para sus adentros el pelinaranja para entrar al baño.
+ Su cuerpo estaba completamente desmembrado, como si de cortar un pastel en piezas para todos los invitados. Este miro hacía afuera de la puerta y salió corriendo escaleras arriba, debía decirle a los demás, las lagrimas querían escapar de sus ojos, pero las reprimía, ¡Realmente Ninten era un idiota! ¡Un idiota al que quería vivo! Corrió y corrió, hasta llegar arriba, al parecer estaban a punto de bajar las escaleras.
― ¡Claus! ¿Qué-? ― Pregunto su hermano gemelo a medias.
― ¡NINTEN ESTA MUERTO EN EL BAÑO! ― Dijo Claus con una inmensa rabia, no solo porqué haya muerto a manos de alguien tan desagradable, si no que lo había hecho de una manera que era fácil de evitar.
― ¿¡QUÉ!? ― Dijo Ness, empezando a sollozar, lo cuál se convirtió en llanto, ¿Porqué le pasaba todo esto a la gente que más quería? Lucas lo abrazo y consoló a medias, ya que este también había empezado a llorar de miedo.
― ... No me digas eso... ¿Es una broma? ― Musito Lloyd, el cuál no podía creer lo que había escuchado, Claus negó con la cabeza, ¡Dos de sus primeros amigos habían muerto! ¿Qué diablos se suponía que iba a ser ahora? Oh si... Caer al suelo y llorar con fuerza, Lucas al ver esto, abrazo también al de pelo grisáceo.
― ¡Debemos movernos rápido todos! ¡Realmente quería a esos dos pero no creo que a ellos les gustaría que muriéramos todos aquí! ― Dijo Fuel, tomando la palabra.
+ Todos se vieron entre si, y concordaron, aunque ni Ness, Lucas y Lloyd pararon de llorar en ningún momento, estaban asustados... Aunque Claus se les unió al pequeño abrazo y los hizo caminar, aunque el también estaba dolido por las dos muertes, no quería más asesinatos. Paula y Fuel fueron a la delantera mientras los del grupo se mantenían juntos pero atrás, estaban frente a la puerta, y Fuel empezó a romperla, con algo de nerviosismo ya que hacía bastante ruido... Se escucharon fuertes pisadas y todos ahogaron un grito y se acercaron aún más a la puerta, Fuel la trataba a romper con todas sus fuerzas... O al menos hizo lo que pudo, repentinamente... Le habían disparado en la cabeza, Paula se quedo estupefacta, y miro hacía el hombre, cargaba el rifle de caza que había comprado su padre hace un tiempo para aprender a cazar... Todos entraron en pánico y empezaron a correr, Paula hizo lo mismo, Claus, Lucas, y Ness se tomaban fuerte de la mano para ir al sótano, mientras que Pippi, Poo y Kumatora estaban guiando a Lloyd a un lugar seguro, Nana tomo fuerte la mano de Paula, y empezaron a buscar un lugar seguro también.
+ La rubia de pelo rizado estaba inexpresiva ante la situación, ¿Todo esto era real? ¿Porqué hoy debían morir todos? Todo lo preguntaba mientras corrían escaleras arriba de nuevo, tal vez en el ático estuvieran mejor...
+ El rubio, el bermejo, y el azabache habían llegado al sótano, con algunas cosas que encontraron abajo trataron de reforzar todo, había un pequeño armario donde podrían caber 2 personas...
― ¡S-Solo cabemos dos aquí! ― Dijo Lucas muy alterado, ¿Acaso hoy era su fin?
― ... Lucas, escóndete allí. ― Dijo Claus, frunciendo el seño, Lucas obedeció. Y este mismo miro a Ness a los ojos. ― ¿Podrías cuidar a Lucas en el caso de que no este?
― ... ¡Oh no hermano! ¿¡Qué piensas hacer!? ― Dijo con algo de terror, si bien, nunca le cayo bien a Claus, lo menos que quería era que hiciera alguna locura.
― ... ¿SI O NO? ― Dijo notablemente desesperado.
― Uh... ― Este mordió su labio inferior. ―Claro... ― El azabache lo miro con mucha preocupación.
― Ness... Lucas... Yo- ― Antes de que el bermejo terminara, se escucho a alguien tratando de destrozar la puerta. Claus musito. ― ¡Por favor no se muevan de aquí! Ness entra... Y cuida con todo tu corazón a mi hermano...
― ¡C-Claus por favor no! ― Dijo el rubio enojado, ¿Porqué su hermano era tan bueno? ¡El quería que estuviera a salvo! ― Yo me quedaré afuera...
― No, si llegan a escapar de aquí, quiero que se digan sus sentimientos hacía el otro, ¡No pude hacerlo con Ninten! Pero, al menos si me pasa algo... Si podré hacerlo, ¿Si? ¡Ahora entra Ness! ― Dijo empujando al azabache a dentro, se escucharon dos chillidos con su nombre, pero, cerro el armario. Este estaba llorando notablemente, de verdad no quería que les pasará nada. ― Te quiero Lucas...
― ¡Y-Yo t-t-también! ― Se escucho por el otro lado de la puerta, estaba opacado por el hipo y su voz temblorosa.
+ La puerta eventualmente fue derribada, Claus trago en seco y tomo lo más fuerte que vio, una barra de acero. Con evidente rabia le hablo al asesino.
― ¿Qué diablos es lo que te pasa? ... ¡Esto es Halloween por Dios! ― Dijo el bermejo. ― ¡Ojala que si encuentran mi cuerpo te den pena de muerte!
+ Termino de decir, para abalanzarse a el hombre, le había dado unos cuantos golpes con la barra, aunque el juego se termino cuando el asesino se dejo de juegos tontos. Un espejo viejo que estaba allí, lo rompió y tomo uno de los pedazos en sus manos, Claus se alejo considerablemente, y el hombre se abalanzo al niño, hubo un forcejeo por unos momentos, hasta que clavo fuertemente el espejo en su mejilla. Grito de horror, y el hombre sonrío, empezó a mover el trozo de espejo de manera en la que empezaba a cortar toda la superficie de su mejilla y piel, la sangre brotaba y Claus pateaba y trataba de irse, lo cual hizo que el señor cortara una linda sonrisa de oreja a oreja, la sangre goteaba de sus mejillas y formaba un gran charco en el suelo. El niño se soltó un poco del agarre e intento tomar el trozo de espejo, lo cual lo corto y grito de dolor, el hombre tenía una idea. Tomo sus dos manos y con delicadeza y gracia amputo sus dedos, Claus se retorcía de dolor y horror, quería que lo matara de una vez... Al no estar satisfecho empezó a cortar sus manos también... Claus estaba empezando a desmayarse... No podía más... Ja, que tonto era, sólo sintió el punzante dolor de el cristal cortando lentamente sus pies, estaba llorando, definitivamente lo estaba haciendo... ¡Qué manera tan horrible de morir! Al menos, el sujeto tomo en cuenta sus palabras, y se apiado de el, solo un poco, y decidió terminar con su sufrimiento, piso, y piso, y piso su cabeza... ¡Hasta romper su cráneo! Tarareando, salió de la habitación, Claus no podía estar más aliviado, había muerto por fin.
+ Se habían encerrado en la habitación de Paula. Lloyd realmente estaba temblando... Kumatora trataba de calmarlo, Poo no sabía que hacer, y Pippi estaba en una esquina pensando, todos estaban centrados en no ser el objetivo de ese enfermo, hasta que Kumatora, noto que la ventana estaba sin sellar, ¡Podían salir por allí!
― Oigan... La ventana esta abierta, salgamos por allí. ― Dijo rápidamente y acercándose a la ventana.
― ¿Y-y los demás? ― Interrogo Pippi.
― ¿Acaso quieren morir ustedes aquí? ― Dijo Kumatora. ― ¡No hay tiempo para ir por ellos! Debemos salir y buscar ayuda, no creo que los teléfonos de aquí funcionen...
― Bien... Podemos atar las sabanas de Paula entre ellas y después a la cama y bajar por ellas. ― Explico brevemente Lloyd.
+ Todos empezaron a atar las sabanas entre si, estaban algo nerviosos, podía no salir bien... De todas formas, Poo iba a bajar primero, lo había decidido. Al tener todo listo, el Dalaamés bajo por las frías sabanas hacía el patío de la casa, bajaba lentamente y con mucha duda... Iba a llegar a salvo hasta que la sabana agarrada de la cama se desato, todos gritaron en por la histeria al ver que Poo cayo y se dio un golpe en la cabeza, dejándolo semi-inconsciente en el suelo.
― Oh Dios... ¡Alguien tiene que ayudarlo! ― Dijo Kumatora.
― Yo lo haré... ― Dijo Lloyd, tal vez no iba a ser tan difícil todo esto, ¿Cierto? Bueno, volvió a atar las sabanas a la cama junto a las chicas.
― ¿Estás seguro? ― Pregunto Pippi.
― Eh... Podríamos que decir que un poco. ― Dijo Lloyd para posteriormente bajar con cuidado.
+ Lloyd reviso la cabeza de Poo para ver si había recibido algún daño visible, no lo había y esto lo alivió, no sabía que hacer exactamente, ¿Lo iba a dejar aquí? Iba a ser un punto fácil, pero, no podrían subirlo de nuevo a la habitación... Lloyd miro arriba y vio que sus amigas habían dejado de mirar por la ventana, ¿Acaso se habían ido o algo? Bueno, se escucho un estruendo y varios gritos, tal vez... Podrían estar muriendo ahora mismo. El del pelo grisáceo no perdió el tiempo en salir corriendo hacía la calle, avanzo hasta la carretera y dio un gran suspiro... ¿Acaso estaba libre por fin? ¡Debía buscar ayuda! ¡Si! Este comenzó a correr un poco hacía la cera, pero sus lentes cayeron en medio de la carretera, no podía ver nada... Era un mundo oscuro y borroso el que veía, ¿Cómo iría a buscar ayuda así? Bueno, se quedo esperando unos segundos para no escuchar ningún ruido de esta misma para cruzar y buscar sus lentes. Cruzo con rapidez y los tomo, se los puso y... ¡Salió volando! Lo habían chocado, tal vez ni siquiera estaba escuchando bien del terror que tenía, sintió sus huesos crujir ante el peso de las llantas de un camionero, ni siquiera noto la presencia del niño debajo suyo, escuchaba música activamente, ¿Cómo lo escucharía? Esto acabo rápido, lo último que escucho fue el crack de su cabeza siendo pisoteada.
+ Paula y Nana estaban asustadas en el ático, no se separaban por nada, y menos al oír cuatro disparos abajo... Era aterrador, Nana no podía más con esto... Estaba con la mente inestable, sollozaba y temblaba, y se le ocurrió una idea.
― P-Paula... Y-yo no quiero morir a manos de ese extraño... P-pero se que moriremos igual... Y si solo... ― Hizo una pausa la rubia. ― ¿Lo hago yo misma?
― ¿Qué quieres decir Nana? ― Interrogo mirándola a los ojos.
― Eres una gran amiga Paula... Siempre lo fuiste, pero... Me gustaría partir con Ana y los demás, de la manera más indolora posible, ¿Podría hacerlo por favor? ― Rogo un poco.
― No... ― Dijo Paula. ― Escaparemos... ¡Lo se! ― Dijo abrazándola con fuerza.
― Seamos realistas, creo que nadie queda vivo aún, ¿Crees que alguno de nosotros tenga si quiera la oportunidad de tener una buena vida después de esto? ― Dijo Nana, la cuál dirigió su mirada a una pequeña caja con viejas fotos con cristales, y se fue acercando a ellos.
― ¡No estas segura de eso! ― Dijo Paula, la cuál agarro fuerte su mano. Estaba molesta por su decisión, ¿Porqué no podía ser más positiva?
― ... Simplemente lo se. ― Dijo Nana sin apartar su mirada de la caja. ― Perdóname Paula, yo realmente no puedo con esto...
― Lo entiendo, pero eso no es la solución. ― Dijo sonriéndole, tal vez se había arrepentido.
― Si... ― Esta le devolvió la sonrisa y tomo su mano delicadamente, se dirigió a su muñeca... Para torcerla rápidamente y hacer que Paula diera un pequeño grito de dolor. Se había liberado.
+ Paula se levanto rápidamente y se abalanzo contra la otra rubia, las cuales forcejearon durante un buen rato, hasta que Nana consiguió darle una patada en el estomago a Paula, la cual quedo inhabilitada y cayo al suelo, Nana fue a la caja, y rompió uno de los cuadros, tomo uno de los vidrios que protegían la imagen y lo acerco a su cuello, empezó a sollozar un poco.
― T-tengo mucho miedo... ― Dijo la rubia suicida.
― Y yo también... ¡Esto es una locura! Baja eso ahora mismo Nana... ― Dijo con rabia en su voz, ¡ERA UNA IDIOTA! ¿Porqué no confiaba en salir de allí con vida?
― N-no hay vuelta atrás... ― Dijo hablándose a si misma, con un movimiento rápido, rajo su garganta con fuerza, cayo al suelo, mientras la sangre salía y moría lentamente, dolía.
― ¡NANA! ― Dijo Paula empezando a llorar. ― ¿¡PORQUÉ!? ― Dijo aún en el suelo. ― E-esto es estúpido... ¿Porqué me dejaste sola aquí? ...
+ La rubia del pelo rizado se levanto del suelo lentamente, le dolía el estomago y el corazón, ¿Y si tenía razón? ¿Y si todo esto era inútil? ... Esta se negó a aceptarlo, bajo las escaleras del ático, y se dispuso a escapar como sea.
+ Ness y Lucas, al escuchar que nadie se acercaba y estar algo de tiempo allí encerrados, abrieron la puerta, y salieron, ambos abrazados, se quedaron estupefactos al ver a Claus en medio de la habitación, el rubio no soporto ver a su hermano en tal estado, sus dedos por el piso, sus manos amputadas, y sus pies también... Todo decorado con sangre, Ness le tapo los ojos al rubio y siguieron caminando, aunque ellos dos habían comenzado a llorar en silencio. Se dirigieron a la sala, tomando el hacha que había quedado en el suelo junto a Fuel.
― Nessu... ― Dijo Lucas con la voz quebrada. ― ¿Qué haremos...?
― No se... Pero, si llegamos a no sobrevivir, quiero que sepas que te amo, ¿Bien? ― Dijo el azabache sonriendo levemente, aunque su voz se escuchaba apagada.
― Yo también te amo mucho... ― Dijo el rubio dándole un abrazo fuerte, el cual fue correspondido al instante.
+ Se escucharon ruidos de la cocina, los dos se asustaron, y salieron corriendo hacía el segundo piso, allí vieron a Paula en su habitación, esta se sorprendió bastante al verlos vivos.
― ¿C-cómo? ... ― Pregunto la rubia.
― Nos escondimos en el sótano... Y bueno, Claus se sacrifico por nosotros... Veo que los demás tampoco pudieron sobrevivir... ― Dijo Lucas mientras admiraba como Pippi, y Kumatora yacían en el suelo, y al no ver a Nana, a Lloyd o Poo se temían lo peor.
― Lo siento mucho por lo de tu hermano. ― Dijo Paula desviando la mirada y viendo hacía la ventana.
― No pasa nada. ― Respondió.
― ¿Entonces tienes un plan? ― Dijo Ness, mientras se abrazaba con Lucas.
― Uhm, no... Pero podríamos bajar por aquí y escapar supongo... ― Esta empezó a descender, al terminar en el suelo, el azabache y el rubio bajaron también.
+ Caminaron hasta la carretera, lentamente, el rubio y azabache estaban muy felices de estar por fin fuera, ¿Acaso por fin podrían ir a casa? No se lo podían creer... Si no fuera porqué alguien tenía otros planes para ellos... El hombre vino y empujo a Paula hacía un lado, no podía moverse... Ellos lo miraron con horror, y con un hábil movimiento, corto sus cabezas. Paula estaba temblando ¿PORQUÉ NO PUEDO HACER NADA? Era una cobarde, se acobardo en el peor momento. El hombre se acerco y le dijo unas palabras.
― ... Mira todo lo que hiciste. ― Dijo finalmente. Para ella quedar pensativa, y empezar a correr, ¿A donde? No había lugar, tarde o temprano la alcanzo y la durmió, ¿Para siempre? No lo sabia...
Solo había aceptado su destino.
+ Poco después, dos jóvenes se dirigieron a la casa y tocaron la puerta, estaba entre abierta así que la terminaron de abrir.
― ¡Ya llegamos! ― Dijo un rubio con lentes.
― Perdonen la tardanza tuvimos problemas con el transporte y... ― Un chico de sombrero de copa hizo silencio, al ver sangre, y el cadaver de uno de sus amigos en el suelo, este y el rubio se miraron por unos segundos y decidieron irse.
― ¿Buscaban algo? ― Dijo el hombre.
― No... Gracias. ― Dijeron al unísono, yéndose rápidamente de la casa.
― Es una lastima...
!!
+ Una rubia había despertado, en una celda, estaba sucia y con muchos rayones, al igual que ella, sus lindos rizos habían sido opacados por unos poco trabajados y horribles, estaba esposada y hoy iba a ser una gran día para ella, al menos todos lo decían así.
― Señorita Paula. ― Dijo una policía. ― Siempre soñando tanto, ¿Eh? Vamos, hoy es su gran día, debe ir a cumplir su pena de muerte.
― Si señora. ― Dijo temerosa y se levanto, yendo por los fríos pasillos esposada y con una mirada vacía en su rostro.
Había sido todo un sueño, uno muy retorcido... O, ¿Tal vez no lo fue?
Fin...
Terminado el 29/10/2023.
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