Historias hermano de Bell.

-???: A veces cuando piensas entre héroes y villanos, nunca te das cuenta de que estás hablando de una misma cosa en la mayoría de los casos.
Muchos piensan que el héroe es quien protege a las personas, quien salva a una nación y quién hace siempre el bien.
Y el villano es quien mata a las personas, es quien pone en peligro a los demás sin vacilar y quien siempre hace el mal.
Pero nadie se da cuenta de que estas dos cosas son casi siempre lo mismo.

-Bell: Pero, ¿cómo pueden ser lo mismo? No significan lo contrario.

-???: En efecto, estas dos descripciones indican exactamente lo contrario, sin embargo, no por eso quiere decir que no son lo mismo.

-Bell: No lo entiendo.

-???: Jajaja, me sorprendería que lo entendieses con sólo tu edad, te prometo que te explicaré lo que significa cuando seas más mayor.

-Bell: Pero yo quiero saberlo ya, por favor Oni-chan.

-Kichiro: Jajaja, eres muy impaciente, solo tienes 4 años, no te calientes la cabeza.

-Bell: Perooo ...

Kichiro acarició la cabeza de su hermano pequeño para que se calmase y no diese más guerra.

Kichiro era muy cercano a su hermano pequeño, desde que nació, tuvo que pasar mucho tiempo cuidándolo y básicamente criándolo, ya que su madre se encontraba muy ocupada entrenando para ser más fuerte y derrotar al dragón con su Familia.

Kichiro estuvo cuidando de Bell y enseñándole muchas cosas a su corta edad, podía hacer esto ya que resulta que Bell Cranel, su hermano, era casi un prodigio.

A su corta edad ya podía hablar de una manera casi fluida, podía entender los cuentos de héroes que él le contaba y le gustaba aprender cosas gracias a su hermano.

Kichiro también tuvo que cuidar de su otra hermana menor Fuyu, la cual también era muy inteligente para su edad, ella ya podía leer libros con su corta edad de 7 años, y no es el hecho de que sepa leer lo que sorprende a su hermano.

Ella aprendió a leer por su cuenta, Kichiro nunca le enseñó a leer, sin embargo el día de su séptimo cumpleaños, era el día en que le iba a enseñar a leer, pero se sorprendió al descubrir que ella ya sabía.

Ella no llegó a llevarse tan bien con su hermano cómo Bell debido a que sus gustos eran muy diferentes.

Por esa razón, ella no suele hablar de sus intereses con Kichiro, sin embargo, le encantaba hablar con Bell, el cual coincidía con las opiniones y gustos de ambos.

Por esta razón, Bell se convirtió en un pilar muy muy importante para esta familia, haciendo que Fuyu y Kichiro pudiesen expresarse y ser escuchados.

Y aunque Fuyu no se llevaba tan bien con su hermano mayor como lo hacía con su hermano menor, esto no quiere decir que no se llevasen bien.

-Fuyu: ¡Kichiro!

-Kichiro: ¿Pasa algo Fuyu?

-Fuyu: Quiero comer sopa de conejo.

-Kichiro: ¿Eh? Pero, ¿acaso no comiste lo mismo ayer?

-Fuyu: Por un día no pasa nada.

-Kichiro: Te daría la razón de no ser porque comiste sopa de conejo durante 4 días seguidos.

-Fuyu: ... Pero está muy buena.

Fuyu hinchó sus mejillas para convencer a su hermano, siempre que utilizaba esta habilidad única, su hermano solía hacer lo que ella quisiera, pero está vez no.

Kichiro puso sus dos manos en los mofletes hinchados de su hermana y apretó un poco para sacar el aire.

Fuyu se quedó sin aire en los mofletes y se cruzó de brazos, sin dirigirle la mirada a su hermano, un típico berrinche.

-Bell: Jajajaja, siempre hace eso.

-Kichiro: Pfff.

Kichiro contuvo la risa y Fuyu se sonrojó y miró a Bell con furia infantil, con unas pequeñas lágrimas cómicas en los ojos, subió de nivel su berrinche y se puso a lloriquear.

-Fuyu: Wuuuuaaaaa.

Bell se tapó las orejas y Kichiro tenía un sudor estilo anime bajando por su nuca.

Realmente, ella siempre hacía eso, por lo que ya tenía un contraataque preparado.

El hermano mayor empezó a hacerle cosquillas a su hermana en un exitoso intentó de que dejase de llorar.

-Fuyu: ¡Jajaja Jaja!¡Para paraaa-jajaja!

-Kichiro: ¿Te rindes ya?

-Fuyu: ¡Si si pero para-jajajaja!

Su hermano dejó de hacerle cosquillas y la sentó en su regazo, junto con si hermano pequeño.

-Kichiro: Bien, y entonces, ¿tú qué quieres comer Bell?

-Bell: ¿Yo?¡Yo quiero comer algo preparado por tí, todo lo que haces siempre está bueno!

-Fuyu: ¡Si!

Bell y Fuyu soltaron estás palabras con emoción ya que a ellos les encantaba la comida que hacía su hermano, en especial la sopa de conejo.

-Kichiro: Bien, entonces os prepararé unos Jagamarukuns caseros, seguro que os gustarán, ya veréis.

-Bell y Fuyu: ¡Bien!

-Kichiro: Mientras tanto, ¿qué os parece si os cuento otro cuento?

-Bell: ¡Si si si si si si!

-Fuyu: Vale, ¿va a ser otro cuento de héroes?

-Kichiro: Lo siento, es que no tengo nada más que esos.

-Fuyu: Bueno, no están tan mal.

-Kichiro: Bien, hoy os voy a contar una historia completamente diferente a las que os he contado antes, esta historia os dará un nuevo punto de vista de los héroes y los Dioses.

-Bell: Ooooh.

-Fuyu: ¿Una historia nueva?

-Kichiro: Si, es una historia nueva, está no os la conté porque no acaba en un final feliz para el héroe.

-Bell: ¿Eh? Pero si los héroes siempre tienen finales felices.

-Kichiro: En este caso no Bell. De hecho, esta historia quedó en el olvido porque no tenía un final feliz.

-Kichiro/Narrador: Bien, hoy os voy a contar la historia del héroe Teseo.

Hace mucho mucho tiempo, en la era antigua, un héroe nació con unos poderes asombrosos.

Capaz de golpear tan fuerte como el mejor aventurero de Orario y con una magia muy poderosa.

Sin embargo, este héroe también escondía sus defectos, como su gran arrogancia y un ego mayor que ningún otro.

Este héroe fue el hijo de la Familia Poseidón, la cual ya está extinta.

Teseo se encontraba en una ciudad antigua que estaba siendo amenazada por un enemigo sin precedentes.

Teseo, quien era uno de los favoritos de Poseidón, se ofreció voluntariamente a acabar con el enemigo él solo.

Ahora, la batalla no iba a ser fácil, Teseo enamoró a una chica de otra nación y esta le ayudó a sobrevivir.

El enemigo sin precedentes se trataba ni más ni menos que de un enorme laberinto el cual cambia de forma y de lugar a voluntad.

Hay quien cree que este laberinto fue diseñado por el mismo Dédalo, sin embargo, debido a que no hay nadie que le haya preguntado, se desconoce.

Dentro de ese laberinto, se escondía un minotauro, un gran minotauro capaz de acabar con el guerrero más habilidoso.

Teseo ideó un plan junto a la bella dama a la que había conquistado, Teseo llevaría un hilo consigo al partir dentro del laberinto para así no perderse.

Teseo encontró al minotauro y en una batalla épica e innarrable, Teseo salió victorioso a duras penas.

El hilo que llevaba en la mano le enseñó el camino devuelta y con esto consiguió salvar a su gente.

-Bell: Wua Teseo es genial.

Sin embargo, la historia no acaba aquí, Teseo, en el camino de regreso a su hogar tuvo que afrontar varios desafíos y problemas.

Su prometida, la chica que sostenía el hilo, era de otra nación y tenía pensado traicionar su amor por él para sacar información y declararle la guerra a su nación.

Teseo descubrió esto y no tuvo más remedio que dejar a su prometida a su suerte, abandonada en una isla desierta donde nadie nunca la encontraría.

Teseo siguió su camino, pero en un cambio de los acontecimientos, decide quedarse en una ciudad donde poder descansar.

En esa ciudad se encuentra con algunos problemas que solucionar y en uno de ellos, tiene que ir al infierno.

-Bell: ¿Al infierno? Pero no podrá volver.

En realidad, el infierno en esa época era diferente, se permitía la entrada, pero no la salida, aunque eso no quiere decir que no se pueda escapar de allí si estás vivo.

Continuando, Teseo es atrapado por Ares junto con su mejor amigo, y ellos dos fueron transportados a la guarida de Hades donde se quedaron durante varios años encerrados.

Hércules un héroe antiguo consiguió llegar al infierno de la misma manera y se encontró con Teseo y su mejor amigo.

Hércules consiguió salvar a Teseo, pero no a su mejor amigo, haciendo que Teseo llore por la perdida de su mejor amigo.

Hércules lo saca del infierno y le dice que siga con su vida, pero lo que le esperaba en su hogar, en la nación a la que salvó de las manos del minotauro, no era nada más y nada menos que ...

El destierro

El pasó los últimos días de su vida en el exilio, sin que nadie lo reconociese como un héroe y sin ninguna persona que lo quisiese.

-Kichiro: Así termina la historia de Teseo.

-Bell: ...

-Fuyu: Ha estado bien, pero esa historia no parece real, no me creo que antes se pudiese entrar al infierno.

-Kichiro: Bueno, si no quieres creerlo, esa es tu decisión.

Fuyu se fue y dejó a sus dos hermanos solos.

-Bell: ¿Es verdad?¿Esa historia es real?

-Kichiro: Como ya he dicho, pasó hace muchos años, pero ... si, le pregunté a nuestra tía Alfia sobre el tema del infierno, parece ser que si era así, aunque no sé cómo puede saberlo.

-Bell: Y entonces, ¿por qué lo desterraron?

-Kichiro: Se dice que fue porque después de todo el tiempo que pasó, la gente que se encontraba en su hogar no lo reconocía como alguien de su ciudad.

-Bell: ... Es triste.

-Kichiro: No lo pienses demasiado, esto solo demuestra que no todo es un mar de flores rosas.

-Bell: Si ...

-Kichiro: Suficiente, es hora de comer, te prepararé todo lo que me pidas.

-Bell: ¿En serio?

-Kichiro: Claro, incluso puedo prepararte sopa de conejo si quieres, pero no se lo digas a tu hermana.

-Bell: ¡Vale!

La sonrisa del pequeño niño volvió a alegrar el corazón de su hermano, haciéndole pensar que estaba haciendo un buen trabajo.

Bell se fue del lugar y pronto se quedó Kichiro solo, mientras pensaba en lo mucho que le habría gustado a él tener a alguien que cuidase de él cuando era pequeño.

Kichiro nació como el primer hijo de Meteria, pero ella solía pasarse el día en la Mazmorra, justo como hacía ahora.

La única persona que cuidaba de él fue su padre, que después de dejar embarazada a su madre por tercera vez, los abandonó.

Su padre fue un hombre listo y amable, con unos fuertes ideales que nunca llegaron a cumplirse.

Pero no se podía negar que era alguien más responsable que su madre, quién solo los cuidaba al volver del Calabozo.

Kichiro empezaba a pensar que a su madre le importaba más la fama que sus propios hijos, y por ello, él tomó las riendas y cuidó de sus hermanos.

-Kichiro: Debo de dejarles un buen futuro, ellos son lo más importante que tengo.

Kichiro solía leer las historias de los héroes, las analizaba y sacaba información que podía enseñarle a sus hermanos pequeños, era la única manera que tenía de enseñarles.

Pero, mientras más cuentos leía, más aprendían, y no hablo solo de sus hermanos, sino que él también sacaba sus propias conclusiones a algunas preguntas.

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-Kichiro: Bell.

-Bell: ¿Si?

-Kichiro: ¿Está buena la sopa de conejo?

-Bell: Si, mucho.

-Kichiro: Te diré un secreto, no quiero que se lo cuentes a nadie, será un secreto entre tú y yo

-Bell: Vale, juro que no se lo diré a nadie.

Bell se llevó su mano derecha a una zona de su pecho donde él creía que estaba el corazón, pero se equivocó, resultando en una situación muy graciosa y mona.

-Kichiro: Jajaja, se ve que eres todo un hombre crecido Bell.

-Bell: Juju.

-Kichiro: Bien Bell, estate atento a lo que te voy a decir.

-Bell: Si.

-Kichiro: ... No te fíes nunca de los Dioses.

-Bell: ¿Qué?¿Por qué?

-Kichiro: Ellos son la causa de todos los desastres, no preguntes más, solo, ten cuidado, no quiero que te hagan daño.

-Bell: Pero son Dioses, ellos son los buenos.

-Kichiro: Ya, eso piensan todos ... Bell, solamente te estoy avisando, no digo que no te relaciones con ellos o ellas, pero ten cuidado.

-Bell: ... Vale ...

-Kichiro: Bien, es hora de pasear, llama a Fuyu, ella seguro que está ansiosa por el paseo.

-Bell: Hai.

Bell cambió su tono triste a uno más alegre cuando su hermano mayor le dijo de dar un paseo, a ambos hermanos les gustaba mucho pasear y caminar por el bosque junto con su hermano.

Y más que nada, a Bell le encantaba ver a su hermano mayor tan tranquilo mientras caminaba a su lado.

Bell se fue a encontrar a su hermana mayor mientras decía su nombre para encontrarla.

-Bell: ¡Fuyu!

Fuyu fue con Bell, ella ya estaba vestida y preparada para salir a dar el paseo, al igual que Bell.

-Bell: Fuyu-nee-chan, Kichiro-nii-chan dice que salimos ya.

-Fuyu: ¡Vamos!

Fuyu y Bell corrieron con su hermano, quien los esperaba con una sonrisa.

-Kichiro: Bien, andando, mamá vendrá pronto hoy y nos querrá ver en casa cuando vuelva.

-Bell y Fuyu: ¡HAAAI!

Kichiro, Bell y Fuyu salieron a dar el paseo, los dos pequeños seguían al mayor ya que, aunque habían venido mucho, Kichiro solía tomar caminos diferentes cada día para poder ver cosas nuevas.

Kichiro ya había explorado el lugar al completo cuando era pequeño, era un lugar hermoso repleto de vegetación y animales.

Lo que quería conseguir con venir aquí era enseñarle a sus hermanos lo hermoso y tranquilo que era el lugar.

Apartado de su casa, apartado del ruido, apartado de las personas, y lo más importante, apartado de él.

Kichiro siguió caminando por un camino que Bell y Fuyu no conocían, mientras caminaban se encontraban con algunos animales como ciervos y pájaros exóticos.

Bell y Fuyu se entretenían mirando a los animales detenidamente y poniéndoles un nombre.

El lugar por supuesto tenía algunos depredadores.

Un ciervo apareció en el camino, corriendo mientras huía de lo que venía detrás.

Kichiro pudo ver esto, pero se quedó quieto y esperó a que apareciesen.

Bell y Fuyu se pusieron al lado de su hermano, y una vez allí se agarraron a él como si su vida dependiese de ello.

Una manda de lobos apareció en el camino, en su mayoría, todos pasaron de largo, a excepción de dos de ellos.

Los lobos miraron acechantes a los tres hermanos, se acercaban lentamente y Kichiro sabía que esos dos querían algo de ellos.

Kichiro alzó la mano en señal de que parasen, Bell y Fuyu lo miraron confusos, ¿por qué le haría caso un lobo a su hermano?

Los lo os dudaron un momento por la acción del hermano mayor, pero continuaron acercándose enseguida.

-Kichiro: Suspiro Bien.

Los lobos se siguieron acercando más y más, Bell y Fuyu se estaban asustando y se escondieron detrás de su hermano mayor.

-Kichiro: Firebolt.

Un rayo de fuego salió de la mano de Kichiro, el rayo impactó en el suelo, cerca de los lobos, los cuales se asustaron y salieron corriendo.

-Bell: Sugoi.

-Fuyu: ¿Qué ha sido eso?

Ambos hermanos tenían estrellas en los ojos después de ver a su hermano mayor lanzar ese hechizo.

-Kichiro: No le contéis a mamá sobre esto, es posible que se enfade.

-Fuyu y Bell: ¿¡Eeeeeeehhh!?

Fuyu y Bell exclamaron en disgusto mientras su hermano les sonreí, pero era más una sonrisa de advertencia más que otra cosa.

Bell y Fuyu se retractaron y decidieron callarse y asentir.

El paseo continuó su curso como lo era normalmente, atravesaron el bosque un par de veces, vieron más animales pacíficos y visitaron una cascada que había cerca.

Después de terminar, volvieron caminando a la casa y justo antes de que su madre llegase.

10 minutos después de entrar a casa, su madre, Meteria, llegó para supervisarlos.

-Bell: ¡Mamá!

-Meteria: Hola cariño.

Bell y Fuyu corrieron a abrazar a su madre y Kichiro mientras tanto los miraba con una sonrisa en la cara, pero era más bien una sonrisa amarga.

-Meteria: Hola Fuyu, ¿qué tal está mi niña?

-Fuyu: No soy una niña soy una adulta.

Fuyu hizo un puchero, lo que hizo que no se le pudiera tomar enserio.

-Meteria: Kichiro, ¿no vas a saludar a mamá?

-Kichiro: Si, ¿cómo no hacerlo?

Kichiro fue con su familia y se adjuntó al abrazo, su madre le devolvió el abrazo y empezó con su papel de madre.

-Meteria: Bien, se os ve cansados, ¿queréis comer algo?

-Bell y Fuyu: ¡Si!

Bell y Fuyu se fueron a comer y Kichiro entabló conversación con Meteria.

-Kichiro: ¿Dónde has estado?

-Meteria: He estado en la Dungeon, pronto vamos a ir a matar al dragón negro.

-Kichiro: Vale ... entonces, ¿vas a estar por casa cuando vuelvas de esa misión?¿O tu vida de heroína es más importante que nosotros?

-Meteria: ...

Kichiro miró a su madre de forma acusadora y con rabia, él había sido más el tutor de sus hermanos que ella, y aún así ella sigue aparentando que los ha criado.

-Kichiro: Si alguna vez te importamos mis hermanos y yo, aunque sea una pizca, deberías pensar en lo que te he dicho.

-Meteria: ... Lo tendré en cuenta.

Kichiro se fue con sus hermanos y dejó a su madre sola, ella se mordía el labio al pensar que tendría que dejar de ser la heroína de la historia.

Ella amaba esa vida, vivir rodeada de personas que la admiraban y la trataban como si fuese una Diosa entre Diosas, como la mejor criatura existente.

Ella había trabajado mucho para poder llegar hasta aquí, había tenido que hablar con sus antepasados incluso, y había tenido que limpiar su imagen debido a la ferocidad de su hermana con la gente.

Y por eso mismo, al ver todo lo que había conseguido ... no quería parar, solo quería más y más.

Ella caminó junto a sus hijos y entonces preparó la comida.

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~~En medio de los acontecimientos del especial 500 votos~~

-Alfia: Tenemos que estar aten...

La frase se interrumpió porque una explosión los empujó a todos hacia atrás.

Alfia protegió a Bell de la la explosión ya que lo estaba abrazando, en cuanto a los demás ...

Kichiro y Fuyu ya no se encontraban en ninguna parte donde se les pudiese ver.

Bell y Alfia se encontraban tirados en el suelo, Alfia tenía algunas quemaduras por la explosión y Bell tenía algunos rasguños y quemaduras leves.

Por suerte Bell se había dado en la cabeza contra el suelo y había quedado inconsciente.

Ellos dos se encontraban al lado de Meteria, pero ella ...

Alfia pudo ver que su hermana se encontraba a su lado, o al menos lo que quedaba de ella.

Lo único que quedaba era una brazo.

Esta escena provocó la ira de Alfia.

-Alfia: Os voy a matar a todos vosotros.

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Ahora veremos esto desde el punto de vista de Kichiro.
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Después de enfrentar al dragón y fallar estrepitosamente, su madre dejó de ser tratada tan bien y dejó de ser aventurera y empezó a pasar más tiempo con su familia.

Con esto consiguió que Kichiro perdonase parte de sus fallos en el pasado, pero todavía pensaba que una persona no cambia de un día para otro, y la razón por el que había vuelto no le hacía quedar mejor.

-Alfia: Tenemos que estar aten...

Mientras Alfia decía esa frase, Kichiro miró por pura casualidad, suerte o instinto a un lado, ahí pudo ver un cristal en el suelo.

Un Kaenseki.

Un drop item de color carmesí del monstruo Flame Rock que puede explotar cuando se expone al fuego.

Kichiro conocía ese item, se habían producido accidentes y atentados en Orario en la era oscura con este ítem.

Kichiro quería gritar, pero seguro que no le daría tiempo, agarró a la persona más cercana a él, su hermana Fuyu y se escondió ... detrás de su madre.

Kichiro sabía que pasaría con su madre, pero si tuviese que elegir entre su hermana y ella, este sería el resultado, ella era más joven.

La explosión ocurrió, su madre se llevó el impacto casi por completo.

Kichiro tenía que ser rápido, el humo de la explosión estaba tapando la visión de los atacantes, debía de moverse.

Fuyu estaba desmayada en el suelo, pero no se encontraba con quemaduras ni nada grave, por el contrario, Kichiro todavía estaba herido y envenenado.

Como Kichiro y Fuyu estaban envenenados, tenían que relajarse o al menos no ponerse nerviosos, el veneno podría extenderse más rápido por los latidos del corazón.

Kichiro sacó la astilla de madera de su brazo, es una buena herida, pero no debía de quejarse, puede que ayude un poco a que el veneno no le hago efecto tan rápido.

Con su otro brazo, el cual no había recibido daños, sujetó a su hermana y la sacó del lugar antes de que nadie se diese cuenta.

Kichiro, mientras corría por su vida y la de su hermana, pudo ver los restos de lo que antes era Meteria, su madre.

Lágrimas salieron de sus ojos, pero no podía dejar de correr ahora, encontró a Bell siendo sujetado por Alfia, también estaba inconsciente o al borde de la inconsciencia según parecía.

Kichiro dudó, tenía que salvar a su hermana, pero, ¿que hay de su hermano y su tía?

Kichiro miró a su hermana, inconsciente en sus brazos y decidió que al menos la salvaría ella, esto no es una historia de héroes donde todos salen vivos y felices, la vida no es un cuento de hadas.

Él salvaría a los que pudiera salvar y Alfia haría lo mismo.

Mientras Alfia y Meteria luchaban contra los enemigos, Kichiro pudo reconocer voces y entonces se dio cuenta de qué Familia les estaba atacando.

Se hacían pasar por Rakia o por Evilus quizá, pero eso no fue suficiente, él sabía quienes les habían atacado.

Eran la Familia #!&?*&#.

Ellos eran tal y como Kichiro pensaba, ese Dios desgraciado está intentando matarnos.

Corrí y corrí, ahora estaba llorando por dejar a Alfia y a Bell atrás, ojalá esto fuese solo un mal sueño.

Al final llegamos al bosque, con la lluvia nos resfriaremos, debemos de encontrar un lugar con techo, por suerte, conozco este bosque como si fuese la palma de mi mano.

Cerca había una pequeña cueva hecha de roca naturalmente, ese era el lugar perfecto para refugiarse.

Dejó a Fuyu descansando en la cueva mientras que el se fue para buscar algún tipo de remedio para el veneno.

Recogió varias plantas con algunas características curativas y frutos de algunos arbustos y matorrales.

Algunos de los frutos tenían efectos secundarios como deshidratación, espasmos y algunos podían ser tan peligrosos como el veneno, pero era lo único que le quedaba.

Bebió algo de agua y volvió a ponerse en marcha, devuelta con su hermana.

En el camino se encontró una rama de árbol casi arrancada, Kichiro terminó el trabajo y la arrancó, llevándosela consigo.

Kichiro tuvo que ir a trote para no elevar su pulso, correr con Fuyu acuestas ya había sido suficiente.

Una vez allí, se quedó en blanco, necesitaba algo que lo ayudase a mezclar los ingredientes, algún tipo de cuenco o quizá un lugar donde machacar todo.

Aún con este plan, Kichiro no estaba seguro de que funcionaría, no sabía qué tipo de veneno tenía corriendo por sus venas.

Algunos dañan el sistema nervioso y otros dañaban los tejidos, debía de tener cuidado con su propia sangre.

Si se hiciese una herida sangrante en la boca, en caso de que dañase los tejidos, podía quedarse sin dientes e incluso sin lengua.

También había dos formas de activación, los venenos rápidos y los venenos lentos, el nombre indica cómo de rápido se propaga el veneno.

La conclusión a la que llegamos es que Kichiro tiene muy pocas probabilidades de sobrevivir, y no solo eso, tiene muchas posibilidades de acabar en una muerte poco agradable.

El peliblanco mayor miró por toda la cueva y entonces logró ver algo que le podría salvar la vida.

Un pequeño charco de agua en el suelo, tenía la hendidura perfecta para poder hacer lo que quería.

Kichiro se acercó al charco y evaporó el agua.

-Kichiro: Firebolt.

No quedaba ni rastro de agua, y el sitio estaba un poco caliente.

Kichiro soltó sus items en el suelo, esto era su única esperanza, todo dependía de si funcionaría o no.

Kichiro por el camino devuelta a la cueva había arrancado una pequeña rama de un árbol, no era muy larga, pero tenía el grosor necesario para aplastar los materiales.

Kichiro golpeó el suelo de piedra con la rama del árbol una y otra y otra vez.

Mientras aplastaba los materiales su vista se volvió borrosa, le dolía la cabeza y tenía náuseas.

Fuyu se despertó para su suerte, en casa de que no lo hiciese, tendría que forzarla de alguna manera a tragarse el mejunje.

-Fuyu: Kichiro-nii, estoy mareada.

-Kichiro: Fuyu, estoy haciendo una medicina, resiste y ayudame por favor.

Fuyu se acercó a su hermano mayor como pudo, una vez llegó, Kichiro le dio instrucciones.

-Kichiro: Fuyu, utiliza tu magia, necesito agua.

-Fuyu: Frostbolt.

Un trozo de hielo apareció en el suelo, y Kichiro actuó poco después de esto.

-Kichiro: Firebolt.

Kichiro utilizó mucho menos maná que en la ocasión anterior para que no todo el agua se evaporase.

El trozo de hielo se derritió y el agua que quedaba se unió a la "medicina" que estaba haciendo.

Kichiro siguió golpeando el suelo, sus fuerzas le estaban abandonando así que paró y decidió que era el momento de tomarlo, todo o nada.

-Kichiro: Fuyu, tienes que comerte esto.

-Fuyu: H-Hai.

La voz de Fuyu se notaba débil, era como un susurro.

Ambos hermanos tomaron el brebaje y los dos cayeron al suelo sin fuerzas.

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Era el momento de que despertase.

-Kichiro: ¡Aaaaaggggh!

El grito de Kichiro era más un intento desesperado de tomar todo el aire que pudiese, pero consiguió levantarse y tomar aire sin problemas.

Kichiro había sobrevivido al veneno.

-Kichiro: Fuyu, ¡Fuyu!

Kichiro llamó a su hermana en pánico, no tuvo respuesta, pero pudo verla tumbada detrás de él, todavía respiraba, la medicina improvisada había funcionado.

Kichiro notó que los efectos secundarios ya habían pasado mientras estaban desmayados, sus labios cortados y sed se lo confirmaban.

Kichiro se llevó a Fuyu acuestas, mientras caminaba por el bosque, Kichiro observó a su alrededor y empezó a ponerse al tanto de su situación.

Habían estado desmayados durante un rato, ahora era de día y les habían atacado en la noche.

Kichiro recordó entonces que este bosque no era el lugar más seguro para ellos dos.

-Fuyu: ¿Nii-chan?

-Kichiro: Fuyu, ¿cómo estás?

-Fuyu: Tengo sed.

-Kichiro: No te preocupes, estoy en ello.

Kichiro llevó a su hermana a un río donde pudieron beber agua, Kichiro estaba todavía alerta en caso de que aparezca algún depredador.

Fuyu había terminado de beber y tuvo que descansar un poco, aún después de haber estado desmayada todo ese tiempo, el cansancio todavía se encontraba presente.

Sus cuerpos habrían estado teniendo espasmos probablemente, eso explicaría algo.

Dejando de lado eso, Kichiro empezó a pensar y a preocuparse por el estado de su hermano pequeño.

-Kichiro: Fuyu, tenemos que encontrar a Alfia, ella estará con Bell.

Si han sobrevivido claro está.

-Fuyu: Hai.

Fuyu parecía entender que esto era lo correcto, debían de volver por su hermano pequeño.

Una vez que terminaron de beber agua, Kichiro y Fuyu partieron en busca de su hermano pequeño.

Kichiro los sacó del bosque y buscaron a su hermano por lo que quedaba de la casa de su madre.

Estando allí, Kichiro miró al suelo con culpabilidad, recordando que su madre había muerto, y en parte era su culpa.

-Fuyu: ¿Pasa algo?

-Kichiro: ... No, nada.

El nerviosismo de Kichiro iba en aumento, cada vez estaba más preocupado por su hermano menor y por su tía.

-Kichiro: Si ellos siguen vivos estarán en Orario, vamos a por ...

-Fuyu: Kichiro mira.

Fuyu señaló a un lado, era Alfia, estaban andando, tenía una aura triste y peligrosa, pero ellos dos se acercaron igualmente.

Kichiro se asustó al no ver a su hermano menor con ella.

-Kichiro: Alfia ...

-Fuyu: ¡Alfia!

Fuyu se tiró a los brazos de Alfia y esta le devolvió el abrazo con lágrimas saliendo de sus ojos.

-Kichiro: Alfia, ¿dónde está Bell?

-Alfia: ... Se lo han ... se lo han quedado.

Ahora era Kichiro quién tenía las lágrimas amenazando con salir de sus ojos.

-Kichiro: ¿¡Quién!?

-Alfia: ¡Orario!

Alfia se levantó y miró a su sobrino mayor con frustración.

Kichiro se mostró asustado y en shock, al final estaba pasando, el supuso que esto podría llegar a pasar, pero no esperó que lo llevasen tan lejos.

-Kichiro: ... ¿Quién?¿¡Quién!?¿¡Qué Dios a podido hacer esto!?

Alfia miró sorprendida a su sobrino de que entendiese qué era lo que pasaba, ella cerró los ojos y se limpió las lágrimas.

-Alfia: ... Fue ...

Fin de la primera parte del especial 1000⭐

Vale, la razón por la que lo he dividido en dos partes es porque no tengo mucho tiempo para escribir, y como tenía ganas de publicar algo, pues he hecho esto.

Muchas gracias por el apoyo de verdad.

Poned aquí qué Familia creéis que los ha traicionado.