-Fuyu: Bell, juguemos juntos.

-Bell: Pero acabamos de comer, Kichiro-nii-chan dice que no es bueno jugar justo después de comer.

-Fuyu: ¡Mmmmm! Pues si tanto te importa Kichiro-nii-chan vete con él a jugar.

Fuyu se había enfadado.

-Bell: ¡No, no, jugaré contigo! No te enfades.

-Fuyu: Vale.

Fuyu sabía conseguir lo que quería, incluso si tenía que engañar a su hermano pequeño.

-Fuyu: Vamos Bell.

-Bell: Espérame.

Mientras ellos jugaban, Meteria y Kichiro los miraban desde lejos jugar, aunque ellos no sabían de qué hablaban.

Bell solo podía ver cómo movían sus bocas y Kichiro hacía una mueca de disgusto.

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-Ryuu: Cranel-san, es hora de levantarse, ¿qué hace dormido a esta hora?

-Bell: ¿Eh? Oh Ryuu-san, no es nada, solo tenía un poco de sueño.

-Ryuu: Y por lo que se ve, sigues teniendo, ¿adónde fuiste por la mañana?

-Bell: Fui con Welf, teníamos que hacer algunas cosas.

-Ryuu: Ya veo, entonces debes de estar cansado por lo que hicisteis.

-Bell: Si.

-Ryuu: Y dime, ¿que hay de las heridas?

Giré mi cabeza y miré a Ryuu-san quien me miraba con seriedad y algo de enfado creo.

¿Cómo puede saberlo? No hay nada que demuestre mis heridas a no ser que las enseñe.

-Bell: ¿Cómo puedes darte cuenta?

-Ryuu: Mientras trabajabas, noté que evitabas hacer algunos movimientos, y mientras dormías, te levanté la camisa.

-Bell: *Suspiro* Siento si te he preocupado, estas heridas ... estoy bien, pero agradecería si me dejases descansar un poco más, tengo que reorganizar mis planes.

-Ryuu: Te dejaré descansar, pero yo me quedaré contigo.

-Bell: ¿Eh?¿Para qué?

-Ryuu: Alguien debe de tratar tus heridas.

-Bell: ¿Es totalmente necesario?

-Ryuu: Quizá no lo sea para ti, pero sí que lo es para mí.

-Bell: Vale, muchas gracias por todo Ryuu-san.

-Ryuu: Lo hago por mi, no tienes que agradecerme.

-Bell: ...

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Cranel-san se quedó dormido y yo me quedé junto a él, le levanté la camiseta y miré sus heridas vendadas de mala manera.

Quité algunas vendas, y aproveché ahora que estaba dormido para utilizar mi magia.

-Ryuu: La canción de un bosque ahora distante. La canción nostálgica de la vida. Por favor, trae la misericordia de la sanidad a aquellos que te buscan.
Noah Heal.

Curé las heridas de la espalda de Cranel-san, no sé quién le haya hecho esto, pero no voy a dejar que nadie le haga daño bajo mi tutela.

Le di la vuelta e inspeccioné las heridas que tenía en su pecho, ahí pude ver una gran herida, probablemente de un cuchillo debido a la profundidad.

Al ver la herida, una pregunta vino a mi mente, ¿Cómo ha podido mantenerse en pie con esta herida?

No tiene Falna, acabo de curarle la espalda y he podido confirmarlo, ¿cómo ha podido llegar aquí sin quejarse ni desmayarse?

Bueno, ahora está desmayado, pero sigue siendo impensable que él haya podido hacer esto.

-Ryuu: Cranel-san ...

Esto no puede seguir así, no debe seguir así, sea quien sea la persona o incluso organización que le esté haciendo daño, no voy a dejárselo pasar.

Volví a recitar mi magia de curación, con el cántico terminado, dije su nombre.

-Ryuu: Noah Heal.

Las heridas se cerraron, pero no recuperó la cantidad de sangre perdida.

-Chloe: Ryuu-nya, necesitamos ayuda.

-Ryuu: Voy enseguida.

Miré a la cara de Cranel-san por última vez antes de irme, se veía en calma mientras estaba ahí tumbado.

Él debe de estar pasando por algo muy malo, tengo que ayudarle, si no lo hago, no habrá servido de nada que me uniese a la Familia Miach.

Aunque, tampoco creo que Miach-sama esté convencido de que valió la pena entregármelo.

Continué mirando su cara por algunos instantes más sin siquiera darme cuenta del tiempo que llevaba mirándolo.

-Chloe: ¡Ryuu-nya!

-Ryuu: Oh, ¡voy!

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Después de un tiempo desperté.

-Bell: Aaaah, ¿Ryuu-san?

Ryuu-san no se encontraba a mi lado, por el contrario, ahí estaba Syr-san con su traje de camarera puesto, mirándome sentada en una silla.

-Syr: Bell-san, al fin despiertas.

-Bell: Siento si he dormido de más, ¿tenías algo que decirme?

-Syr: No, solo quería saber en dónde has estado.

-Bell: ... He estado con Welf, hoy saldré a conseguir dinero con él.

-Syr: Bell, deberías de parar.

-Bell: ¿Eh?

-Syr: Siempre estás fuera, nosotras hemos hablado contigo para que podamos volver a como era antes.

-Bell: ... Syr, ¿crees que todo puede volver a como era antes?

-Syr: Claro que si, si nos esforzamos lo suficiente, conseguiremos que nuestra amistad sea la misma que antes.

-Bell: ¿Si? Entonces, ¿quién va a reemplazar a Chris y a Talia?

-Syr: ... Bell ...

-Bell: Lo siento, pero yo creo que nada de lo que haga va a cambiar esto, puede que volvamos a llevarnos tan bien como antes, pero nunca será igual.

-Syr: Bell-san, deja de decir eso, eso no es verdad, podemos volver a ser como antes.

-Bell: Syr, puede que sea porque eres la única persona inocente del lugar, pero no entiendes todo lo que puede cambiar la muerte de un amigo.

-Syr: Yo ... no quiero verte así, no quiero que sufras.

-Bell: ¿Es eso lo que te preocupa?

-Syr: Si sniff yo no quiero que mi amigo se sienta así.

Syr-san se encontraba al borde de las lágrimas, y fue justo ahí que me di cuenta de lo que pasaba.

Yo estaba sufriendo por haber matado a Chris y a Talia, y por ello, había dejado de importarme ser feliz o estar bien en temas morales, solamente me importaba la venganza.

Y por culpa de este pensamiento egoísta, Syr estaba sufriendo ... por mi culpa.

Abracé a Syr para que dejase de llorar, no lo pensé, fue casi como si fuese la costumbre, aunque nunca haya hecho esto.

-Bell: Siento haber dicho eso Syr.

-Syr: Yo solo quiero que vuelvas con nosotras.

-Bell: ... Volveré, te lo prometo.

Syr estuvo sollozando un poco más en mi pecho, al cabo de tres minutos se quedó quieta, había dejado de llorar.

La miré para ver que estaba con las mejillas sonrojadas y estaba sorprendida, no entendí que pasaba, así que decidí preguntar.

-Bell: ¿Qué pasa?

-Syr: Tu cuerpo, ¿has hecho ejercicio?

-Bell: Bueno, algo por el estilo.

-Syr: ¿Cómo que algo por el estilo? En fin, lo que pasa es que, tienes un buen cuerpo.

-Bell: Mmmh.

Es posible que después de todo mi cuerpo experimente cambios por estar en el Dungeon tanto tiempo, es un tipo de ejercicio, uno muy peligroso.

Syr se había dado cuenta de esto y me ha elogiado, ¿qué es lo que tengo que decir ahora?

-Bell: ¿Gracias? Creo que no es algo muy importante justo ahora.

-Syr: Claro que lo es, con lo atractivo que eres ahora puede que se te lancé alguna chica.

-Bell: Si claro, te recuerdo que no todo el mundo me ve con los mismos ojos que tú.

-Syr: ... S-Si.

Syr pareció nerviosa, ¿he dicho algo malo? Creo que no he dicho nada para que se ponga así.

Solamente he dicho: "No todo el mundo me mira con los mismos OJOS"

-Bell: De todas formas, creo que tienes razón en una cosa.

-Syr: ¿Si?

-Bell: No paso mucho tiempo con vosotras, y debo de cambiar eso, dentro de una semana tendremos día libre, ¿verdad?

-Syr: Si, Mamma Mía nos dejará visitar la Monsterphilia.

-Bell: Entonces iré con vosotras, haré lo que pueda por pasar más tiempo con vosotras.

-Syr: ¡Bieeeeen!

Syr se alegró por mi decisión y se puso a dar saltos de alegría, yo la miré con una sonrisa en la cara por ver que pude arreglar el daño que le había hecho a Syr.

Solo me queda hacer lo mismo por las demás, voy a enmendar mi error aunque tenga aplazar la guerra que voy a empezar.

Mientras me encontraba "desmayado" empecé a pensar en formas en las que podría derrotar a la Familia Apolo y a la Familia Ishtar.

Conseguí llegar a una conclusión, no puedo derrotar a una Familia yo solo, puede que sea capaz de ganarle a la Familia Apolo, pero entonces las demás Familias intentarían atraparme e incluso matarme.

Tengo que vencerlos y tengo que hacerlo en un juego de Guerra, para que así nadie me quiera muerto.

Pero yo no pertenezco a una Familia, no puedo hacer un juego de Guerra si no tengo una Familia.

Entonces se me ocurrió la idea de matar dos pájaros de un tiro y enfrentar a las dos Familias una contra otra.

Aunque todavía quedaba encontrar la manera de que pase, puedo unirme a la Familia Apolo en el juego de Guerra.

Syr salió de la habitación cuando yo no estaba atento, le resté importancia y me fui de mi cuarto para ver que las demás chicas estaban en el cuarto de Ryuu-san haciendo algo.

Debo de darles su privacidad, no me gusta espiar las conversaciones las ajenas de mis amigas.

Bajé en donde se encontraba Mía y ella me preguntó sus dudas.

-Mía: ¿Qué has hecho ahora?

-Bell: ¿Por qué supones que he sido yo?

-Mía: Te has convertido en el más problemático.

-Bell: Si te soy sincero, creo que tiene que ver conmigo, pero no sabría decir qué es.

-Mía: Con eso me basta, ¿quieres algo?

-Bell: No, creo que voy a salir.

-Mía: ¿Para qué?

-Bell: No lo sé, algo dentro de mí me dice que debo de hacerlo.

-Mía: ¿Qué clase de respuesta es esa?

-Bell: Es una muy buena pregunta ... y no sé qué contestarte.

Salí del bar con esas últimas palabras, no mentía, algo dentro de mí me gritaba que saliese afuera y yo seguí mis instintos.

Caminé por Orario mientras ideaba un rumbo que tomar, pero no me dio tiempo ya que volví a ver una escena que había visto antes.

Una pequeña Palum siendo perseguida por un grupo de aventureros, la chica al verme vino corriendo hacia mí y se escondió detrás de mi espalda.

Los aventureros intentaron llegar a ella a través de mí, pero les tomé el brazo con fuerza.

El aventurero al que le tomé la muñeca dio un quejido y se soltó de mi agarré porque yo le dejé.

-???: ¿¡Qué haces!?

-Bell: Marchaos y dejad a la chica, no lo repetiré dos veces.

-???: Déjate de idioteces, esa chica nos debe dinero.

-Bell: ¿Me ves con cara de que me importe?

-???: Serás ...

El hombre no atacó, se quedó quieto en el sitio, miró a Lily por última vez antes de irse.

-???: Nos tendrás que dar tu dinero después, no lo olvides, y tú también por entrometerte.

Todos se marcharon y nos dejaron solos junto con una considerable cantidad de gente mirándonos.

Miré a mi espalda, pero lo que vi me sorprendió hasta la médula, Lily estaba diferente, en el sentido de que tenía unas orejas que no debían de estar ahí.

-Bell: ¿Puedes cambiar de forma?

Lily se dio cuenta de que yo lo había notado y se sorprendió, probablemente se había olvidado.

Esto me viene bien, es una habilidad muy útil y podría utilizarla para mí beneficio.

De hecho, creo que me vendrá perfecto para hacer que Apolo rete a la Familia Ishtar a un juego de guerra.

-Bell: Bien, creo que mejor te quedas conmigo un poco más.

-Lily: Yo creo que no.

Lily intentó alejarse de inmediato, pero yo le agarré el brazo impidiendo que lo hiciera.

-Lily: ¡Suel...!

Le tapé la boca.

Lily quiso protestar y gritar, pero se calló al ver que mi cara no reflejaba nada más que seriedad, hasta ahora solo le había enseñado mi parte alegre, verme de esta forma puede haberle intimidado.

Señalé a una persona cercana de aquí, era una de las personas que intentó atacarla la vez anterior, estaba al acecho.

Retiré mi mano de la boca de Lily y ella se quedó mirando al hombre, parecía aterrada tan solo de verle la cara.

-Bell: ¿Quieres que vayamos a por un crepe o algo así?

-Lily: ¿Eh?

-Bell: Te he preguntado si quieres un crepe.

-Lily: No, no es eso, ¿por qué eres buen conmigo?

-Bell: ¿Qué razones tengo para no serlo?

-Lily: Soy una desconocida, podría ser solo un truco para sacarte dinero.

-Bell: No lo creo, ya lo tengo comprobado.

-Lily: ¿Cómo que lo tienes comprobado?

No puedo decirle que vi su alma y puedo adivinar sus intenciones.

-Bell: Si no te vale con esa razón, te diré está otra, eras una desconocida en apuros, y yo no puedo evitar querer ayudar a ese tipo de personas.

-Lily: ... Eso no dice nada nuevo.

-Bell: Puede ser, pero tampoco es que importe, ya lo entiendes después de todo, ¿verdad?

Punto de vista de narrador

Lily asintió con un sonrojo en la cara, está era la segundo o tercera vez que la salvaba, y no solo eso, él había demostrado ser alguien confiable, un tonto que se preocupa por los demás más que de él mismo.

Ese era Bell Cranel a los ojos de Lily.

Lily siguió a Bell por la calle, había bastante gentío así que se acercó aún más a Bell.

Bell ni se inmutó por esto, estaba más concentrado en que no se acercase nadie sospechoso.

-Lily: ¿Sabes adónde vamos?

-Bell: ¿Eh? Oh, claro, hay una tienda cerca de aquí, podemos comprar crepes ahí.

-Lily: Bien.

Bell y Lily caminaron juntos durante todo el trayecto, y Bell no lo sabía, pero había alguien que los estaba siguiendo, alguien más aparte de ese miembro de la Familia Soma.

Era Dian Cetch quien le estaba siguiendo, Bell no había notado su presencia gracias a un item muy costoso que tenía en las manos, pero aún con esas, Bell podía sentir una segunda mirada clavándose en su espalda.

Dian Cetch estaba siguiendo a Bell junto con una de sus miembros estrella, Airmid.

-Airmid: Dian-sama, no deberíamos de estar aquí.

-Dian: Él no debió meterse con mis miembros.

El Dios todavía le guardaba rencor aún después tanto tiempo, era una personalidad infantil e idiota, pero así era este Dios.

Pronto se dio cuenta de que Bell no era alguien a quien debía de enfrentarse, gracias a lo sucedido con Apolo en la taberna.

Dian siguió observando a Bell junto con Airmid, quién lo miraba muy desconcertada.

No era raro, después de todo había amenazado a varios aventureros sin problemas y consiguió que se marchasen.

Airmid empezó a mirarlo más fijamente, al igual que su Dios.

Los dos parecían dos acosadores, por lo que alguien que no quería ver al conejo herido hizo aparición.

-Ryuu: Será mejor que no os metáis donde no os llaman.

-Airmid y Dian: ¡AAAAAH!

El grito de Airmid y el de Dian Cetch alertaron a algunas personas, quienes miraban confusos a las dos chicas y al Dios.

Cabe decir que el grito de Dian Cetch sonó incluso más agudo que el de Airmid, como una niña pequeña gritando.

-Airmid: R-R-Ryuu-san, esto no-...

-Ryuu: No pasa nada mientras no intentéis hacerle algo.

Ryuu llevaba el traje de camarera para disimular, así solo tendría que decir que buscaba a un compañero de trabajo y se libraría de cualquier sospecha.

-Dian: ¡¿Dónde está?!

Ryuu, Airmid y Dian habían perdido de vista al peliblanco.

Volviendo con Bell, él dejó de sentir dos de las miradas que iban a su espalda, solo quedaba el miembro de la Familia Soma, mientras se mantuviesen en un lugar con gente no pasaría nada.

-Bell: Hemos llegado.

-Hestia: ¿¡Bell-kun?!

Bell se quedó congelado al escuchar quién lo llamaba, por alguna razón, tenía el presentimiento de que algo malo iba a pasar por esto.

-Bell: Hestia-sama.

-Hestia: ¿Qué haces aquí?

-Bell: ¿Yo? Bueno ...

Hestia miró a su lado, viendo que tenía a una acompañante, Lily.

-Hestia: ¿Estás teniendo una cita?

La mirada de Hestia se volvió fría y con resentimiento.

Bell pensó que iba dirigida a él, pero pronto se quitó eso de la cabeza al ver que la mirada de Hestia era aún peor cuando miraba a Lily.

Pero no entendía por qué su Diosa se comportaba así, no se comportaba de la misma manera antes.

Pero tampoco estaba seguro de si era siempre así ya que nunca vio cómo actuaba con una amiga de Bell.

Nunca llegó a presentarle a Mía o a las chicas, y solo le hablo unas pocas veces sobre Talia.

-Bell: Esto, Lily, ¿conocías a Hestia-sama?

-Lily: No, nunca la había visto o he oído hablar de ella, ¿tú la conoces Bell?

-Bell: Fue mi Diosa antes de que me encarcelasen.

-Lily: Oooh, ya veo qué es lo que pasa.

Lily abrazó el brazo de Bell y molestó a Hestia con la siguiente frase.

-Lily: Es un placer conocerla Hestia-sama, espero que podamos llevarnos bien.

En la última parte, dejó de mirar a Hestia y miró a los ojos de Bell, Hestia se enfadó y empezó un berrinche.

Es cierto que expulsó a Bell de su Familia, pero todavía pensaba que le pertenecía debido a que antes fue de su Familia.

Lily iba a continuar hablando, pero fue interrumpida.

-Claris: No deberías meterte con Hestia-sama, Lily.

-Lily: Claris-sama.

-Hestia: Juju, esa es mi niña para tí apoyo-kun.

-Lily: Chi.

Lily miró con envidia a Hestia porque ella no era reprendida por Claris.

Claris se dio cuenta de Bell y tuvo que presentarse.

-Claris: Oh, lo siento, mi nombre es Clarissa Wolgan, pero puedes llamarme Claris si eres amigo de Lily.

-Bell: Un gusto, yo soy Bell Cranel, antiguo primer hijo de la Familia Hestia.

-Claris: Oh ... así que eres tú, Lily, ven conmigo.

Clarissa no disimuló su desánimo al saber quién era Bell, Hestia se entristeció un poco, pero logró ocultarlo.

Bell por otro lado sabía cómo eran las cosas, él habría hecho lo mismo en su posición, o quizá algo peor.

-Bell: Siento molestar, yo ya me voy.

Bell empezó a irse, pero Lily tenía dudas.

-Lily: ¡Espera! ... Ell-...

-Bell: No te preocupes, entiendo la situación y debo decirte que con ellos estás más segura que conmigo.

Bell entendía la situación a la perfección, Lily era de la Familia Soma, pero debido a que podrían desconfiar de ella, no se lo dijo a ninguna de las dos.

Sin embargo, tampoco quería que los integrantes de su Familia le atacasen.

Lily miró a Bell mientras se iba, sorprendida de su rapidez para entender las situaciones y encontrar una respuesta y solución adecuada.

-Claris: Hey, Bell Cranel.

Bell giró su cabeza para mirar detrás de su hombro.

-Bell: ¿Qué pasa?

-Clarissa: Quiero hablar contigo, a solas.

Bell suspiró cansado de tener que meterse en embrollos por culpa de su sueño, no es que no quisiese ser un héroe, pero cada vez se lo ponían más y más difícil.

-Bell: ¿Tiene que ser ahora?

-Clarissa: Cuanto antes mejor, quiero algunas explicaciones, solo será eso.

-Bell: Vale.

-Clarissa: Sígueme.

Clarissa caminó y pasó a su lado, Bell se había dado la vuelta para hablar con ella, por lo que ahora miraba a Lily.

Con un gesto de mano y una sonrisa radiante se despidió de ella, quien le devolvió el gesto.

Acto seguido, siguió a Clarissa.

Clarissa parecía muy seria, no quiere hablar con él por voluntad propia por lo que parece, y Bell se dio cuenta.

-Bell: ¿Adónde vamos?

-Clarissa: Tú solo mantente en silencio y sígueme, vamos a un lugar más privado.

Bell miró su mapa mental de Orario, y según la ruta que estaban siguiendo, el lugar privado más seguro sería ... el Distrito del Placer, si quieres privacidad, ese es el lugar.

Aún así, dudó de que alguien como ella aceptase ir a aquel lugar con él, sonaba ridículo.

Pero conforme iban avanzando, las posibilidades se iban reduciendo y el Distrito del Placer todavía seguía siendo una posibilidad.

Bell estaba sudando frío, ¿qué quería ella de él exactamente?

Clarissa, antes de entrar al distrito del placer, giró y me dijo que ya habíamos llegado.

-Clarissa: Es aquí, vamos a ... ¿qué haces?

Bell se había dado un golpe en la mejilla a modo de castigo por haber pensado eso, él se quedó callado y entró primero.

Clarissa, algo confusa, le siguió el paso.

Bell se sentó en el suelo de la habitación y esperó a que Clarissa hiciera lo mismo.

-Bell: Bien, ¿qué pasa?

-Clarissa: Iré directa al grano, ¿qué intenciones tienes hacia Lily?

-Bell: ... ¿En qué sentido?

-Clarissa: ¿Vas a hacerle algo malo?

-Bell: No.

-Clarissa: ¿Vas a romperle el corazón?

-Bell: Eso entra dentro de la anterior pregunta, pero no tengo intención de hacerle daño emocional si es lo que quieres saber.

-Clarissa: ¿Qué es lo que quieres de ella?

-Bell: Un favor.

-Clarissa: Explícate.

-Bell: Bueno, la ayudé a salir de una situación complicada, quiero que me ayude con una cosa.

-Clarissa: Sigue.

-Bell: No te incumbe, pero te aseguro que saldrá ilesa y la recompensaré.

-Clarissa: Entonces eso no es un favor.

-Bell: Llámalo como quieras, solo necesito eso de ella, a partir de ahí haré lo que más le convenga.

-Clarissa: ... Está bien, por lo menos pareces sincero.

-Bell: ¿Eso era todo?

-Clarissa: ¿Pasa algo con eso?

-Bell: A decir verdad, me gustaría preguntarte algunas cosas a tí también.

-Clarissa: Bien, haré lo que pueda.

Debe de ser difícil ser el líder de la Familia Hestia, ella debe de tener bastante presión sobre sus hombros, quizá podamos beneficiarnos el uno del otro.

-Bell: ¿Cómo es ser la líder de la Familia Hestia?

-Clarissa: Es muy fácil.

Miente, se está haciendo la dura para no mostrar las dudas que hay en su cabeza.

-Bell: ¿Alguna vez has tenido algún problema en dirigir la Familia? Por favor, di la verdad.

-Clarissa: ... Si.

Ha dicho la verdad, ya es algo.

-Bell: Última. ¿Aceptarías mi ayuda?

-Clarissa: ...

Bell también dudaría, pero si él estuviese en su lugar, no aceptaría, para ella solo es un antiguo líder que se ha vuelto loco.

Por lo menos, esa es la imagen que tienes al escuchar los rumores sobre Bell.

-Clarissa: Creo que si, pero tendrás que ganarte mi confianza y la de la Familia.

-Bell: Está bien, eso era todo, si necesitas algún consejo o ayuda, no dudes en venir a mí.

-Clarissa: Ni siquiera tienes Falna.

-Bell: Tengo mis contactos, ten un buen día.

Bell solo quería saber si todavía tenían algo de confianza en los demás, para Hestia, que Bell matase a alguien debió de sentirse como una puñalada por la espalda, o eso pensaba Bell.

Ahora que sabía que sus acciones no habían cambiado la forma de ser de su Diosa o de la nueva capitana, se marchó del lugar.

Él dijo la verdad, necesitaba a Lily para engañar a Apolo, pero obviamente la recompensará de una manera u otra.

El plan que Bell tenía en su mente iba tomando forma y pronto se dio cuenta de que solo quedaba ejecutarlo.

Bell sabía que tenía que contárselo a Welf, no iba a involucrarse, pero necesitaba su ayuda para enfrentar a la Familia Ishtar.

Además de que necesitaba una nueva armadura y encontrar un lugar fijo donde esconder sus armas, trajes, armaduras y la máscara.

Pero lo más importante para él era revisar su condición.

Bell caminó hasta la sede de la Familia Hephaestus y esperó a que saliese Welf del lugar.

-Welf: Bell, ¿pasa algo?

-Bell: Quería invitarte a tomar algo en la Anfitriona de la fertilidad, invito yo.

-Welf: Está bien, te sigo.

Welf siguió a Bell por Orario, Bell no mentía, quería invitarle a comer algo a modo de celebración por haber sobrevivido.

-Bell: ¿Cómo están tus heridas?

-Welf: Estoy bien, tenía algunas pociones en mi habitación, nadie me vio entrar.

-Bell: Menos mal, por cierto, aunque vayamos a celebrarlo, quiero hablar contigo sobre una cosa y pedirte un favor.

-Welf: Me parece bien, haré todo lo que pueda para ayudarte.

-Bell: Muchas gracias Welf, eres al único al que le puedo contar todo.

Bell sonreía, recordando que era lo mismo que hacía con Talia y Chris, siempre se contaban todo y tenían una fe ciega los unos con los otros.

Welf ahora era el único con el que podía compartir ese lazo, no es que no confiase en las chicas, pero por el contrario, no quería involucrarlas.

-Welf: Jejeje, para eso están los amigos.

Bell y Welf llegaron a la Anfitriona de la fertilidad, siendo recibidos por Ryuu y los dos espías.

Bell arqueó una ceja y vio confundido los dos nuevos.

-Bell: ¿Dian-sama, Airmid-san, pasa algo?

Airmid inclinó la cabeza.

-Airmid: Perdón.

-Bell: Eeeh ...

Bell entonces se acordó de que antes cuando estaba con Lily pudo sentir dos miradas extra, y teniendo en cuenta que Ryuu los miraba molesta, Bell entendió lo que pasaba.

Aunque tenía que disimular.

-Bell: No sé que pasa, pero no es necesario que te disculpes, no creo que puedas hacer algo malo.

Airmid levantó la cabeza, parecía avergonzada por lo que había hecho, cualquiera podría saber que no lo hizo con malas intenciones.

Por otro lado, Dian Cetch se mostró reacio a pedir perdón, de hecho parecía enfadado por estar aquí.

-Dian: Debes de pagarme por los daños que le hiciste a los miembros de mi Familia.

-Bell: ¿Eh? ... Oh, te refieres a esa vez hace 2 años.

-Dian: Exacto, paga.

¿Por qué viene ahora? Esta pregunta rondaba por la cabeza de Bell, y solo dos respuestas le llegaron a la cabeza.

1) Es una excusa y está planeando algo.

2) Tenía miedo cuando yo tenía un Falna.

La segunda tiene algo de sentido, se preocupa de que si inicia una pelea, sus dependientes salgan heridos, aunque sea un nivel 1.

Aunque por otro lado, Dian no parece la clase de Dios que se preocupa tanto por eso.

-Bell: Tu pago es que no te hayamos cobrado por las botellas que me hicieron romper, pero te prometo algo, a la próxima que ocurra eso, seré mucho menos comprensivo.

Bell intimidó al Dios con su mirada, una mirada que bien podría reflejar la sangre que sería derramada.

El Dios se estremeció por su mirada y Airmid se interpuso por si pasaba algo.

Ryuu miraba a Bell preocupada y alerta.

-Bell: No es preocupéis, no tengo Falna al fin y al cabo.

Es asustadizo, quizá tenía miedo de que Bell fuese directamente a por él, o por lo menos eso pensaba el peliblanco.

-Bell: Da igual, de todas formas, solo quiero invitar a Welf a una comida.

Welf y Bell entraron al restaurante donde trabaja el peliblanco y los dos subieron al cuarto de Bell para hablar en privado.

-Welf: ¿Qué ha sido eso de ahí fuera?

-Bell: Creo que esos dos me han estado siguiendo hoy, supongo que Ryuu-san se dio cuenta y los interceptó.

-Welf: Vaya, no sabía que eras un don Juan.

Bell le dio un coscorrón a Welf para retomar la conversación por donde debía de ir.

-Bell: A lo que iba, te voy a contar información sobre dos Familias que se han convertido en mis objetivos.

-Welf: ¿Dos Familias?¿Enteras?

Bell asintió y procedió a contarle a Welf sobre lo que ocurría en la Familia Ishtar y los problemas entre la Familia Apolo con Ryuu y la Familia Hestia.

Después de eso, le contó el plan que tenía en mente, para ello le habló sobre Lilyruca Arde.

Welf entendió todo y en cuestión de unos minutos ya habían terminado de explicar.

-Welf: Está bien, te haré una armadura y te fabricaré una espada magia.

-Bell: Gracias Welf.

Welf sonrió a su amigo.

-Welf: Aquí no hay gracias que valga, tendrás que dejarme comer todo lo que ordene gratis.

La cara de Bell reflejó dolor, él estaba casi sin blanca, lo más seguro es que se quede sin valis después de hoy.

-Bell: S-Si.

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Bell se encontraba mirando al techo con una mirada muerta, su cartera estaba totalmente vacía, por el contrario, el estómago del pelirrojo estaba lleno.

-Welf: No había comido así de bien en todo el tiempo que llevo con vida.

-Bell: ...

-Mía: ¡Ponte a trabajar!

Bell no tuvo tiempo de seguir hundiéndose en su miseria ya que tuvo que trabajar para seguir con vida.

Este día no era el día del, ahora más que nunca, pobre peliblanco sin blanca.

Fin del capítulo 21

Quitando los chistes malos del final, quiero saber qué os ha parecido el capítulo, ¿os ha gustado?

Si es así, espero que estéis listo para el siguiente porque pronto será la guerra entre Familias.

Sin más nada que decir, me despido de vosotros.