Estamos en Julio, pleno auge y apogeo de la época de verano, pero veamos cómo está nuestro pequeño Izuku gordito midoriya y su Madre Inko la MILF obesa midoriya, la pasaban en toda está época de calor.

Estamos exactamente a mitades de Julio, siendo ya casi el mediodía, pero había un cuarto en la casa de los midoriya en el que cierto niño con más de 20 kilos de sobrepeso estaba todavía durmiendo, rodeado de botellas de refrescos, jugos, malteadas y cartones de leche y botes de helado al rededor de él en la cama y al rededor de está por todo el suelo de su habitación también habían envolturas de bocadillos, dulces, pastelillos y demás frituras y golosinas.

El pequeño regordete estaba durmiendo con apenas sus calzoncillos puestos y una camisilla que se subía hasta por encima de su panza, todo ésto mientras botaba babas al dormir de costado y sostenía un control de la PlayStation XV en una mano y abrazaba un bote de helado de galletas oreo a medio comer y derretido.

Pero toda está paz de gordito que el niño tenía sería interrumpida por el sonido del tocar de su puerta ya que su madre entraría trayendo el "desayuno".

- Izuku, levantate corazón, ya traje tu desayuno

El pequeño se levantaría con gran pesadez y cansancio y mientras tallaba sus ojos, preguntaría a su madre por la comida que traía.

- mami... Que trajiste... Huele muy rico!

El diría abriendo sus ojos de par en par, deleitado por el olor que traían las comidas que su madre trajo, así ella respondió.

- tu desayuno de todas las mañana, un pastel, un tazón grande de un mix de todos tus cereales favoritos, galletas, leche y malteada y pan recién hecho con mucha avena para tomar, todo para un desayuno rico en energías y muy saludable

Izuku se levantaría lentamente, para luego sentarse y esperar a que su madre le pusiera su mesa del desayuno y cena en cama, cosa que Inko haría para después dejar todo en la mesa de su hijo relleno.

Ella después vería todo el desorden en el cuarto para luego agacharse medianamente y recoger un poco de la basura encima de la cama de Izuku para así preguntarle desde hace cuánto no salía de su habitación.

- Izuku... Desde hace cuánto no has salido de tu habitación?.

El gordito mientras comía vería al techo tratando de recordar, hasta que lo lograría para después mientras comía del gran pan recién hecho le respondería.

- Desde hace dos semanas mami... Creo que desde que tu me compraste los nuevos 12 juegos para mi PlayStation... Por que preguntas?.

Inko entonces vería con algo de preocupación el tiempo de sedentarismo seguido de su hijo, pero entonces ella recordaría el tiempo que se le pasaba ella sentada en el sillón de la sala solo viendo servicios de streaming mientras comía frituras y comida rápida y chatarra mucho más perjudicial que la de su hijo, para luego simplemente olvidar todo lo sucedido y seguidamente de una idea flash le diría a Izuku.

- Hijo, que tal si vamos a la playa? Hace mucho tiempo que no vamos, además aprovechando que estamos en verano, apuesto que habrá mucho helado esperando por nosotros en esos puestos de playa jejeje ~

Izuku seguiría comiendo su comida y mientras su madre decía ésto, ella se sentaría al lado de él y empezaría a acariciar su cabello, hasta terminar su invitación, para así Izuku luego de escuchar a su madre, la vería y mientras tenía un pedazo de pastel en la boca, el acentiria con su cabeza varías veces dando un si como respuesta, mientras tanto Inko feliz se levantaría para ir decir

- Bueno Izuku, entonces iré a preparar todo para que vayamos a la playa, mientras tanto tu termina de comer mi niño

Así Inko iría a su habitación a empezar a probarse sus viejos trajes de baño, además de los pocos que había comprado luego de empezar a pesar más de 480 libras, cosa que al parecer apenas pocos le quedaban, cosa que no le importó mucho, ya que para ella, todavía podría comprar más luego de que éstos ya no le quedarán.

Así ella seguiría, pero luego de que se probara uno tras otro, ella se cansaría un poco por la gran movilidad que tuvo que hacer, poniéndose a comer así un poco de helado, lastimosamente ésto la desconcentraria de su actividad principal, para luego empezar a comer más helado olvidando todo lo demás, hasta quedarse atascada en el sillón, junto a un montón de botes de helado y pais mientras veía una telenovela.

En cuanto a Izuku, éste se pondría a jugar en su consola de videojuegos también olvidando lo dicho por su madre, pero luego de su desayuno tardío, junto al hecho de que ambos olvidarán ir a la playa, provocó que ya por la tarde, Izuku sintiera hambre al ya no estar con alguna golosina cerca, junto al hecho de que ya iban a ser las 3:30 de la tarde éste bajaría de su cama, ya que su madre no escucharía sus llamados por más comida, debido a que está se quedo en traje de baño, dormida en el sillón con varios botes de helado devorados, así que Izuku iría a la cocina y de los gabinetes y de la nevera, se llevaría varias frituras y algunas botellas de refresco a su cuarto para seguir comiendo y jugando.

Cosa que hizo hasta las 7:20 de la noche, hora donde su madre se despertaría algo angustiada al ver que ya era de noche y que no habían ido a la playa, pero luego pensó que irían mañana por la mañana, así ella con un poco de esfuerzo iría a ver a Izuku, para verlo jugando mientras tenía dos montañas de bolsas de papas fritas, pastelitos y barras de chocolate y golosinas, junto a botellas a cada lado de él.

Cada montaña tenia su estatura sentado, así que mientras el jugaba videojuegos y comía Inko haría una pregunta para el pequeño regordete, la cuál era obvia y ya muy dicha por ella.

- Izuku... Ya está muy tarde, voy a pedir algo de comer a domicilio, que quieres hoy... Pizzas, hamburguesas o algunas bandejas?

Así Izuku mientras jugaba le respondería a su madre con una respuesta que a Inko le abriría mucho el apetito.

- Por que no pides todos mami? Así tendremos para comer más mañana

Inko no pondría resistencia ante el pedido calmado y desinteresado de su hijo, así pidiendo todo, unos 5 combos de hamburguesas, 10 cajas de pizzas y además de algunos cuántos platos fritos cargados de estofados y guisos con mucho arroz, cosa la cuál al llegar el pedido Inko los recibiría y los llevaría a la cocina para organizar todo y luego servirle a Izuku otra vez en la cama en su mesa especial para comer.

Destapando todo frente a él para que el fresco aroma de comida le abriera a el también el apetito, así Inko dejaría a Izuku comiendo en su habitación mientras ella iba a su cuarto para dejarse caer en la cama, encender su televisor y empezar a comer, así estando ambos gordos comiendo toda la comida que pudieran, hasta quedar dormidos al día siguiente.

~ A la mañana siguiente ~

Inko despertaría en su cama, sucia y embarrada de salsas y guisos sobre su cara, manos y panza, todo mientras aún llevaba un viejo, pequeño y apretado traje de baño, eso hasta que de un eructo ella terminaría de despertar, levantándose para bañarse directamente a pesar de su recién amanecer, ella entraría en su ducha y empezaría a bañarse, limpiando cada parte de su fofo y gordo cuerpo hasta estar limpia e ir por una toalla de su tamaño para luego ir por su traje de baño que mejor le quedaba, para así luego salir de su cuarto, ir a la cocina y preparar una gran plato de desayuno estilo Estados Unidos para después llevarselo a Izuku.

El mientras estaba jugando videojuegos y terminando sus sobras del día anterior, todo mientras se rascaba un poco y masajeaba su panza regordeta.

Inko llegaría a su habitación y le dejaría su desayuno para luego mientras salía de la habitación de su hijo ella decir

- Izuku, prepararé la tina para bañarte e ir a la playa, así que termina tu desayuno, tu vídeojuego y cuando te llame ven a bañarte corazón

El pequeño solo respondería.

- si mami.

Así dandole un guardado a su partida para después agarrar su comida y empezar a comerla como un cerdito en un frenesí de gula hasta que quedó muy lleno para moverse.

- Mamá!!!... Mamá!... Mami!?...

El pequeño gordito llamaría a su madre, ella a los pocos segundos llegaría con su hijo para ver a esté respirando muy pesado y sudando a mares, manchado y embarrado de comida mientras estaba en calzoncillos ya que se había quitado su camisa sin mangas, la gorda mujer le preguntaría que pasaba o que quería, el solo respondió.

- me cargas hasta la tina?

Inko solo rio y sonrió maternalmente para después cargarlo con todas sus fuerzas y a paso lento, pesado y seguro, dejarlo en tina y quitarle su ropa interior para empezar a darle un baño a su pequeño cerdito.

~ ya en la playa ~

Podemos ver a inko acostada en una toalla mientras bebía una botella de Coca-Cola de 2.5 litros, vistiendo un bikini extra grande mientras por encima llevaba una túnica de seda blanca suelta de color blanco y un sombrero playero de dama de ala ancha igual blanco.

Mientras Izuku estaba frente a ella vistiendo una simple bermuda verde extra grande para su edad, el cuál le quedaba algo suelta, todo mientras el estaba comiendo una paleta de helado y junto a su madre, estaban viendo ambos el mar, ellos estaban tranquilos disfrutando de la cálida y a la vez refrescante brisa del mar.

Pero de un momento a otro cierta pequeña rubia peli ceniza de ojos rojos la cuál se pararía frente a Izuku mientras lo saludaba.

- Hola Izuku!

Itsuki bakugo, la rubia ex compañera de la escuela de Izuku lo había visto desde lo lejos y venía a saludarlo.

- He?!... Ho-hola Itsuki

El pequeño regordete estaría asustando, recordando como aquella niña era extremadamente horrible con él cuando le hacía bullying pero, al parecer ella está vez estaba tranquila y parecía amigable.

- Inko! Cómo estás gordis?

Mitsuki Bakugo, madre de ambos engendros del demonio hacía acto de presencia saludando a Inko, Inko al voltear a verlas vería a un par de gorditas que solo tenían un leve sobrepeso

- Yo Gorda? Ja! Mitsuki deberías ver a quien se lo dices sabes?

La gorda mujer de pelo verde se reía un poco mientras veía a Mitsuki sentarse al lado suyo mientras está comía un vaso de helado extra grande con cuatro bolas grandes de helado de diferentes sabores, en el cuál tenían un poco de queso rallado entre cada una de las bolas, además de lo que parecía ser salsa de caramelo y palomitas caramelizadas entre estás, para terminar arriba en el vaso una montaña del queso rallado con dos galletas de chocolate, unos cuantos trozos de manzana y en la punta una cereza final, rodeándolo todo con unas cuantas capas de salsas dulces y caramelo para aderezar el helado.

- Donde compraste eso Mitsuki?

Diría la mamasota de gigantesco peso mientras se relamía los labios y masajeaba su panza, viendo la bomba diabética calórica que estaba comiendo su amiga

- Ahí atrás en ese puesto que pusieron unos extranjeros

Señalaría la rubia mientras estaba sentaba bajo la sombrilla de su amiga, pero luego de un momento ella pondría una cara algo avergonzada con Inko mientras comía su helado.

- Sabes Inko... Quería pedirte perdón por lo de Izuku y lo que Katsuki le hizo es que... No lo sabia es solo que, creo que me equivoqué en como ser madre, siempre

Inko entonces vería a Mitsuki sin expresión alguna más que la de estar escuchando atentamente a Mitsuki cada una de sus palabras mientras se seguía disculpando por todos y cada uno de los actos de sus hijos hasta que Mitsuki al terminar de hablar sería callada por un

- Te perdono ya no importa mucho eso, es el pasado, así que ya no pasará, además Izuku ya se adapto mucho a su nuevo estiló de vida, así que no te preocupes por ello, el seguirá estudiando en casa, además, creo que sería algo bueno para Itsuki y Katsuki no?

Así ambas mujeres se abrazarían para después ver a sus hijos jugar en la playa y divertirse comiendo helado mientras ellas los cuidaban, ahora sin rencores, en un nuevo modo de vida hasta el atardecer en donde cada quien volvería a su casa, con Los Midoriya atascando se de comida hasta caer dormidos hasta el día siguiente, mientras que las Bakugo al volver a su casa verían a cierta niño rubio lanzando insultos al aire mientras jugaba videojuegos en su habitación.

- Katsuki Bakugo! Que estás diciendo, acaso con es boca me das besos?!

Castigaría la madre al niño con problemas de irá y luego agarraría el control del chikillo y desconectaria la consola mientras lo escuchaba hacer berrinches mientras que veía como su madre enviaba a su hermana a comer unas cuantas bandejas de frituras por comportarse bien hoy.

FIN!!!

Así termina nuestro capítulo de está vez, con dos mujeres  reconciliándose y si lo se, me demoré demasiado en subir nuevo capítulo y pido perdón, pero es que la universidad me dejo un tiempo sumamente corto para escribir la historia, así que pido perdón gente, pero aún así, disfruten de un Izuku chiquito y gordito junto a una Inko Obesa Midoriya el día de hoy.

Yo soy Arthorius, nos vemos en el próximo episodio (cuando lo siga escribiendo), así que me despido diciéndo, EXCELSIOR!!!!!