•Capítulo 5: Descontrol•

Eren: Hola Hanji-san -me saludó

Hanji: Oh, has llegado primero. Pensaba que ibas a llegar junto a Tn

Eren: -Niega con la cabeza- Ayer ella estaba ocupada...

Hanji: ¿Así? ¿Haciendo qué? -pregunté curiosa

Eren: Pues... estaba...

Tn: Ya llegué Hanji -interrumpió sin dejarlo terminar. Que oportuna es la canija

Eren: Ohayo (buenos días), Tn

Tn: Ohayo Eren, Hanji

Hanji: -Asentí con una sonrisa ansiosa- Vamos a empezar el entrenamiento

Tn y Eren: ¡Hai! -hacen el saludo militar

Hanji: Eren, colócate en posición, tú vas primero

Eren: De acuerdo

Eren se transformó en titán mordiendo su mano, poniendo de objetivo cortar unos árboles que tenían hierba mala.

Parecía andar todo bien, pero Eren perdió el control de nuevo. Mi escuadrón y yo nos alejamos de ese lugar... todos nos alejamos menos Tn... Oh no.

¡¿Pero qué piensa hacer?! ¡La puede matar! ¡Y si lo hace yo también muero porque el enano me va a matar!

Silencio.

Ningún ruido de terror se oía de parte de ella.

¿¡NANI?! ¡A Tn no le ha hecho nada! ¡¿Por qué?!

La enana estaba arrodillada al frente de él, quedándose quieta sin hacer el más mínimo movimiento. Eren se acercaba a ella a paso lento, y cuando llegó lo suficientemente cerca de ella, alzó la mano para darle un golpe, o al menos eso creí... Nos alarmamos y cuando estábamos por ir a ayudarla, Eren paró su mano de golpe. Él había logrado recuperar el control de su titan.

Eren se arrodilló a la par de ella, mirándola desde su gran altura (ya que en ese momento medía 14 metros) con la cabeza ladeada. La miraba fijamente mientras que la enana le devolvía la mirada sin ninguna pizca de miedo. Eren dirigió su mano hacia la enana y le acarició la cabeza con delicadeza. Para ser un titán y una humana, esa escena se veía demasiado tierna a mi parecer.

Menos mal que no está el enano.

Se ve como si Eren estuviera enamorado de Tn...
Nah, no creo. Aunque esa mirada que le dirige no transmite simple afecto de amistad, creo...
Cómo la mira, cómo le sonríe, cómo le habla... Entonces Eren está...

Se oye un grito de guerra que interrumpe mis pensamientos.

Levi: ¡Aleja tus sucias manos de mi hermana, engendro!

Tn: ¡E-espera Levi-aniki!

Eren se separó de Tn y retrocedió unos pasos asustado. Pronto se echó a correr siendo perseguido por Levi. Era divertido ver como un titán se espantaba al ver a un enano de la altura de un árbol en desarrollo.

No lo detuve ya que me pareció de lo más cómica esta escena.

Tn: ¡Levi-aniki! ¡Aunque Eren sea un titán y se regenere no significa que no le duela! -lo regañó entre gritos mientras ella también los perseguía

Levi: ¡Te vas a quedar sin descendencia mocoso!

Eren decidió salir de su titán y apenas vio que Levi se acercaba nuevamente huyó. Fue una mala elección haber salido, ya que, aunque el enano tenga piernas cortas, corre más rápido que una pulg... CONEJO.

¡Ah! ¡Lo va a alcanzar! ¡Que idiota!

Eren: ¡E-espere capitán! ¡Es un mal entendido!

Hanji: ¡Levi, ya para! ¡No puede permitir que dañes a mis sujetos de estudio!

Tn: ¿Sujetos...?

Eren: ¿...de estudio? -completó su frase parando de correr

Levi frenó de golpe, ahogué una risa al ver que casi choca contra Eren.

Hanji: Erwin se molestará si lo haces enano -amenacé al ver que estaba por agarrar a Eren del cuello de la camisa

Levi: Mier... -Tn lo miro mal al lograr llegar a la par de ellos, el aclaró su garganta- Miarda

¿Debería de tomarlo como un insulto cuando ni dijo la palabra que debía decir? Bueno, cosas de hermanos.

Hanji: Aunque eso hubiera servido para comprobar algo... -pongo una mano en mi mentón- ¿Si le cortaran una zona vital a Eren, se volvería a regenerar? -me pregunté para mí misma

Eren: -Se aleja-

Hanji: Joo~. No te haré nada Eren, solo fue una pregunta que pasó por mi cabeza -mentí riendo de manera inocente

Eren: Está bien -respondió dudoso, y se volvió a acercar

Levi: -Suspira irritado-. Mejor ya me voy, tengo que elegir un nuevo escuadrón

Tn: Elige bien Levi-aniki

Levi se fue en su caballo.

Eren: Gracias por defenderme, Hanji-san

Hanji: No fue nada, ahora me deben más horas de experimento

Tn: ¿Y yo por qué?

Hanji: Entonces solo será Eren

Él miro a Tn suplicante. Se me daba bien chantajear a las personas.

Tn: ... Agh, de acuerdo -soltó rendida-. Voy a quedarme junto a Eren por unas horas extras, pero yo decido cuando irme

Hanji: ¡Ya hooo! -salté sintiendo como mis mejillas se sonrojaron por la noticia, ¿qué experimentos podría hacer esta vez con ellos?

Tn: Tampoco te entusiasmes, solo serán unas horas más

Hanji: Ah, claro -respondí sin prestarle mucha atención

Tn: No te pases de la cuenta, Hanji -habló en tono amenazante

Hanji: Ay no, ¿cómo creen?

Y así... ¡nos la pasamos experimentado toda la tarde hasta la madrugada!

¡Te amo enano, gracias por hacer que Eren y Tn perdieran el tiempo persiguiéndose entre ustedes!

Levi eligió a su nuevo escuadrón, la mayoría eran hombres, y solo unas cuantas mujeres debido a que no muchas se unían a la legión.

Como su mano derecha era Tn, ella tuvo que convivir con su escuadrón, así, alejándose de Eren. Aunque Eren también era perseguido debido a su fama de chico titán... En fin, cosas de famosos.

Y cada vez que se ven, se forma un ambiente incómodo entre ellos, lo que dificulta mis experimentos cuando ambos están juntos.

Hmmm... Si consigo que la enana y el chico titán se amisten y pasen tiempo a solas tal vez hasta logren enamorarse mutuamente.

¡Ya sé! Los juntaré.

JAJKAJAKASJKAJAJA. Me reí mentalmente.

Hanji: ¡Eren! ¡Tn! -los llamé. Por suerte ambos no estaban muy lejos debido a que Levi los mandó a limpiar cerca

Tn: ¿Uh? ¿Qué ocurre Hanji?

Hanji: Vengan conmigo

Me miraron dudosos.

Hanji: ¡Por favor!

Tn y Eren: Vale -respondieron al unisono

Perfecto, han mordido el anzuelo.

Tn: ¿Por qué nos trajiste frente un armario, cuatro ojos?- preguntó sospechosa

Hanji: Oh, es que se me ha caído algo muy importante ahí y no lo he podido encontrar, mis gafas están funcionando mal debido a que no los he limpiado desde ayer.- me excuse- Por eso quiero que se acerquen a ver ustedes

Tn: ¿De verdad? Me estás jodiendo Hanji, pensaba que era importante

Hanji: ¡Si es importante! ¡De eso depende mucho!

Eren: Bueno, si es una orden no nos queda otra más que aceptar

Tn lo miro mal, casi fulminándolo con la mirada.

Eren: Emmm, yo...- rascó su nuca desviando la mirada de ella

Hanji: ¡Entonces es una orden! Asómense y saquen lo que quiero

Ello me obedecieron.

Esperé a que estuvieran más cerca del armario (que justo cabían aproximadamente dos personas) y los empujé dentro. Salí corriendo antes de que Tn me lanzara maldiciones e insultos.

Bien, ahora tengo que vigilar que el enano no se de cuenta de lo que he planeado.

Corrí rápidamente a la oficina del enano.

Narrador omnisciente

Eren estaba arriba de Tn, sosteniéndose de sus brazos para no caer en su encima, pues el empujón fue tan fuerte que les hizo perder el equilibrio, y debido al reducido espacio, no se podían mover cómodamente.

Tn, al darse cuenta de la pose en que se encontraban buscó la mirada del ojiverde para reclamarle, sin embargo se quedo callada al ver que este tenía una mirada penosa. A la fémina le causo ternura esa acción, pero agitó su cabeza desechando esos pensamientos.

Eren: Perdón, no puedo moverme

Tn: Yo tampoco, pero hay que intentarlo

Eren: -Asiente- E-está bien

Tn: Intenta moverte tu primero

El ojiverde le hizo caso. Cuando Eren levantó su cabeza se golpeó fuertemente, provocando que se sobara la zona afectada, y como no tenía de qué sostenerse, todo su peso cayó encima de Tn.

Tn: E-Eren...

La cara de Eren había caído en los pechos de Tn.

Tn: ¡Ah! -chilló

Eren: ¡L-lo siento mucho Tn! -se disculpó levantando su cara rápidamente

Tn: Hentai

Eren: ¡¿Hentai?! ¡No! ¡Yo en serio no quería...! ¡Fue un accidente!

Tn: Tch, ya levántate -ordenó

Eren: No puedo moverme más

Tn: Atrás tuyo hay unas cajas que impiden movernos libremente -informó-. Voy a patearlas desde aquí

Pum. Se escuchó como las cajas se hacían a un lado, permitiendo más espacio entre ellos.

Tn: Ahora si, muévete -ordenó

Eren: Hai

Eren se levantó sentándose en un rincón, Tn no tuvo de otra y se sentó al costado de Eren.

Tn: Es cómodo y cálido -pensó al estar cerca del ojiverde. Lo observó de reojo y vio que este la estaba viendo. Eren, al sentirse descubierto desvió la mirada avergonzado

La fémina se levantó un poco e intentó abrir la puerta, no obstante, esta estaba atrancada con una silla desde fuera.

Eren: No creo que funcione, hay que esperar a que venga alguien

Tn: La cuatro ojos lo tenía todo calculado -dijo suspirado pesadamente

Eren: Por eso tanta insistencia, pero ¿por qué?

Tn: Es simple. Quiere juntarnos, ¿para qué otra cosa nos encerrarías a los dos solos?

Eren: Oh, ya veo, si era obvio

Tn se sentó de nuevo al costado de Eren.

Tn: Hace tiempo que no hablamos tranquilamente, ¿cómo está Mikasa y Armin? -sacó tema de conversación

Eren: Pues están bien. De hecho, Mikasa nos está enseñando combate cuerpo a cuerpo a Armin y a mí... ¿Y... cómo te va con el capitán Levi?

Así pasaron conversando, restaurando el tiempo que no se hablaban, conociéndose más. Hasta que se hizo de noche, y a la peli___ le venció el sueño, quedando su cabeza recostada en el hombro de Eren, este por otro lado, estaba incómodo.

Eren: ¿Tn? -la llamó- ¿Ya te quedaste dormida?

No obtuvo respuesta, a lo que este se quedó callado para después observar como dormía.

En otro lugar no muy lejano.

Levi: ¡¿Cuatro ojos, dónde está mi hermana?!

Hanji: N-no lo sé -respondió nerviosa

Levi: Dime dónde rayos está -la tomo del cuello de la camisa agachándola a su altura, dirigiéndole una mirada amenazante

Hanji: No te lo diré -respondió firme

Levi: ¿Así? Puede que al día siguiente no amanezcas con algunas extremidades...

Hanji: -Traga saliva- Tranquilo enanín, por supuesto que te diré dónde está la querida enana

La castaña llevó al azabache, con pasos temblorosos, hasta el cuarto en donde estaban. 

Levi: ¿Y bien?

Hanji: Están ahí -señaló al armario

Levi: Hazte a un lado -la empujó

Levi sacó la silla que atrancaba la puerta y la abrió, encontrando a su hermana recostada en el hombro de Eren, mientras que "el mocoso titán" tenía su cabeza recostada sobre la cabeza de la contraria.

Levi: ...

Hanji: Oh no -murmuró

En un ágil movimiento cogió a su hermana, sacándola del armario, provocando que la cabeza de Eren se estrellara contra la madera.

Eren: ¡¿Qué pasa?! -se despertó de un salto

Levi: Jaeger... -pronunció su nombre de manera amenazante, a lo que al nombrado le recorrió un escalofrío por su columna vertebral

Eren: -Se gira lentamente para encontrarse con el rostro sombrío del azabache- P-por favor no malinterprete las cosas -se dirigió al capitán sudando frío

Levi: Hanji. -la llamó en tono neutro- ¿Cuál fue tu objetivo al encerrarlos aquí?

Hanji: A-a-ah... pues... -ríe nerviosa- Ellos... ¡¡QUE TE LO EXPLIQUE TU ESCOBA!! ¡ADIÓS ENANO! -sale corriendo

Levi: ¡No huyas cuatro ojos de mierda! -le gritó cabreado

Erwin: -Entra a la habitación extrañado por ver a Hanji salir corriendo- Levi, después arreglas esos asuntos con Hanji, compórtense de acuerdo a su edad

Levi: -Desvía la mirada y gruñe molesto- ¿Qué quieres Erwin?

Erwin: Necesito hablar con ustedes, a solas -agregó mirando al ojiverde

Eren: En ese caso me retiro comandante -hace el saludo militar-. Perdón por los inconvenientes

Erwin: -Asiente-

Eren sale del cuarto dejándolos en un ambiente incómodo.

Tn: ¿Hmmm? ¿Qué ha pasado? -preguntó al despertar

Erwin: La ciudad subterránea está en problemas -soltó sin tacto alguno

Tn y Levi: ¡¿Eh?!

Tn: Apenas me levanto y me das esa noticia -se cruzó de brazos y Levi la bajó, ya que la tenía cargada como costal de papas 

Erwin: Algunas personas tomaron la misma ruta de criminales. -continuó- Los queremos reclutar tanto por sus habilidades físicas y estratégicas

Levi: Entiendo, necesitas nuestra ayuda para capturarlos

Erwin: Si

Levi: Entonces... ¿para cuándo es la misión?

Erwin: Hoy mismo

Tn: ¿Vas a traer más soldados con nosotros, o solo vamos a ir los tres?

Erwin: Solo vamos a ir nosotros, no podemos levantar sospechas. -los miro seriamente- Si vamos en grupo los pondremos alerta y nos descubrirían rápidamente

Tn: Tiene lógica. -va hasta la puerta- Yo iré preparándome de una vez

Erwin: -Asiente- Tu igual, Levi

Levi: Está bien

Erwin, Levi y Tn se dirigieron al subterráneo con capuchas puestas, las cuales solo mostraban la mitad de su rostro.

Pararon su andar frente a una casa de madera que tenía el aspecto de estar abandonada, pues no estaba en condiciones como para ser habitada.

Tok tok. Tocan la puerta.

-: ¿Quién está tocando la puerta? -sonó una voz ronca del otro lado de la puerta- Váyanse sino quieren morir

Alice: ¡Oye idiota! ¡No amenaces tan descaradamente! -se oyó una voz chillona regañando al sujeto

-: Que molesta, ¡mejor me largo yo! -gruñó molesto y se fue cerrando la puerta de golpe, sin permitirle a los tres ver a la portadora de la voz chillona

Alice: -Abre la puerta- Perdón por su comportamiento

-: Hmp -los ve por el rabillo del ojo

El señor de piel morena, y cabello casi negro empujó su hombro con el de Erwin, haciendo que al comandante se le cayera la capa por el empuje brusco.

-: ¡¿A-ah?! ¡Son soldados! -trató de salir corriendo, pero Levi lo noqueó con ayuda del rifle

Tn: Esto casi nos ocasiona problemas

Levi: Dejémoslo aquí -los demás asintieron

La gente del subterráneo nunca tuvo la oportunidad de salir al exterior, por lo tanto, no estaban enterados de que existían los soldados de la legión de reconocimiento o los de guarnición, eso solo era un rumor para ellos. A los únicos que conocían eran a los policías militares.

Erwin: Bien -respondió- No creo que nos ocasione problemas si lo dejamos acá, lejos de nosotros... -pensó

Alice: Ay no, son de la policía militar

La chica comenzó a cerrar la puerta, sin embargo Erwin fue mas rápido y puso su pie en medio.

Erwin: No somos de la policía militar -aclaró-. Somos de la legión de reconocimiento

Alice: Pensaba que esa tropa era solo un rumor

Levi: Pues ya ves que no -se quita la capa al igual que su hermana

Tn: No hemos venido para arrestarlos, al contrario, los queremos llevar fuera de este lugar

Al oír esas palabras, le comenzaron a brillar los ojos y los dejó pasar en aquella casa algo dudosa, pues aún no confiaba en ellos y siempre estaba alerta por ello.

-: Alice, ¿quiénes son ellos?

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