Un pequeño omega rubio estaba oculto entre los arbustos vomitando todo lo que había en su estómago.

Jimin llevaba varias semanas sintiéndose bastante mal, tenía ascos, se mareaba con frecuencia y todo lo que comía, terminaba vomitandolo. No le había dicho nada a Jungkook pues tenía mucho miedo.

Hace una semana les había llegado la noticia de que una peste se había desatado en algunas ciudades, estaba enfermando a todos, ocasionado muchas muertes, aún no se sabía con exactitud que lo provocaba así que todo el mundo estaba teniendo sus precauciones.

Jungkook había decidido no ir al pueblo a hacer las entregas de leche, verduras y frutas. Necesitaba ser precavido pues no quería que algo le fuese a pasar a Jimin o a él.

El omega regresó después de su ida al río por agua y se encontró con Taehyung y su pequeño cachorro. De inmediato su cara llena de preocupación cambio por una de felicidad.

- Hola!!

Taehoo corrió al encuentro del omega.

- ¿Cómo está mi lindo bebé?- Jimin lo tomó en brazos de inmediato y lo lleno de mimos.

- Estoy aquí también...- Taehyung acarició su pancita de 8 meses.

- Lo sé, con esa panza es difícil no verte...

- Te haz ganado un par de golpes Minnie!!

- Jajaja!! Lo siento...- el omega rubio le dió un pequeño abrazo a Tae y le dejó un par de caricias en la barriguita.

- ¿Dónde estabas?

- Fuí por agua... ¿Dónde está Hobi?

- Fue con Jungkook a revisar uno de los cultivos...

- ¡Oh! Ven, vamos adentro para que puedas descansar, ¿Quieres un té?

- Quiero acostarme y no levantarme nunca más...

Los omegas entraron a la casa, Jimin acomodó una manta en el suelo junto a la pequeña sala y puso todos los juguetes que tenía en casa para Taehoo, luego sentó al cachorro ahí quién de inmediato se entretuvo con ellos.

Fue a la cocina y puso el agua para el té, sintió la presencia de Taehyung detrás de él, sabía que sospechaba algo.

- ¿Qué pasa?

- ¿Uh?

- Dime que está pasando...

- Tae, no pasa nada...

- Te conozco...

Y vaya que lo hacía, Taehyung sabía reconocer perfectamente cuándo algo le ocurría a Jimin, cuándo le mentía y cuándo le ocultaba cosas.

El omega rubio bajó la cabeza y trató de no llorar, esa era otra cosa, llevaba días sintiéndose muy sensible y por todo quería llorar.

- ¿Minnie?

Taehyung de inmediato lo abrazó.

- Tengo miedo...

- ¿De qué? ¿Qué pasa?

- Creo que voy a enfermar, tengo muchos ascos, no puedo comer nada sin vomitarlo, me mareo mucho y yo...

- ¡Oh por Dios!

El omega pelinegro lo tomó de las mejillas mientras lo observaba con ojos brillosos.

- ¿Qué? ¿Sabes qué es? ¿Es grave?

- Todo lo contrario, es lo mejor que pudo haberte pasado...

- ¿De qué hablas Tae?

- Estás esperando un cachorro...

- ¿Qué? No!! Yo no... No puedo tener cachorros...

- No estás seguro de eso... Además esos síntomas son de embarazo...

- Tae, ¿Tú crees que yo? ¿Qué esté esperando un cachorro?

- Sí, casi estoy seguro de eso... Jungkook lo puede confirmar...

- ¿Cómo?

- Con tu aroma... Si él detecta un nuevo aroma en ti, es por el cachorro...

- No sé si decirle, yo...

- Házlo Minnie... Puedo apostarlo, tú estás esperando un cachorro...

- ¿Y si estoy enfermo? ¿Qué tal si tengo esa enfermedad...?

- No es eso Minnie, Namjoon nos dijo que quien está contagiado tiene fiebre a temperaturas muy altas, dolor de cuerpo, una terrible tos que no le permite a las personas poder respirar... ¿Tú sientes algo así?

- No...

- Es porque tú estás esperando un cachorro... Háblalo con Jungkook...

- Lo haré...

Jimin estaba muy emocionado, él siempre había querido tener un cachorro y cuándo parecía que iba a tener un poco de felicidad su vida, se lo habían arrebatado sin piedad. Pero ahora estaba con el alfa que amaba y un cachorro de Jungkook era lo que más deseaba en la vida.

Con Taehyung preparon la comida para que cuándo llegaran los alfas pudieran disfrutar de está, y así fue la tarde se pasó con ellos disfrutando una comida agradable conversando de como la vida había cambiado en estos meses, que planes tenían ahora que el nuevo cachorro estaba por llegar.

Fue una tarde agradable, cómo siempre lo era cuando se reunían, no sólo con los Hobi y Tae, también con Nam y Jin y hasta con Mingyu y Yugyeom.

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Esa noche después de darse un baño juntos entre besos y caricias sutiles, Jimin estaba sentado entre las piernas de su alfa mientras este le secaba el cabello rubio.

- No haz estado comiendo bien estas últimas semanas cariño...

- Creí que no te habías dado cuenta...

- Siempre te estoy observando Jimin...

- Es sólo que no he tenido mucha hambre...

- ¿Seguro que es sólo eso amor?

- Bueno...- Jimin no podía seguir ocultándole las cosas a su alfa- Yo he tenido muchos malestares últimamente...

- ¿Estás bien? Debemos ir con un doctor...- Jungkook hizo rl amago de levantarse pero el omega lo detuvo de inmediato.

- Tranquilo... Es sólo que en las últimas semanas he tenido muchos ascos, no puedo comer nada sin vomitarlo, me mareo con frecuencia, hablé con Tae y me dijo que probablemente....

- Es nuestro cachorro...

- ¿Qué?

Jimin volteó de inmediato para ver de frente a Jungkook.

- He notado un aroma diferente en ti, además de tu olor a fresa, yo sentía otro muy sutilmente pero no quería incomodarte con ideas mías, no veía nada extraño además del hecho de que casi no comías...

- Entonces, eso quiere decir que...

- Estamos esperando un cachorro!!

El alfa lo atrajó a sus brazos se inmediato, beso la marca permanente que adornaba el cuello de su omega desde hace varios meses.

- Kook!! Amor estoy tan feliz!!- Jimin había roto en llanto de inmediato, era el omega más feliz del mundo. Por fin se sentía completo.

- Te amo Jimin!! Gracias... Gracias por regresar a mí...

- Te amo Jungkook... Gracias a tí por ser mi salvación!!

La pareja comenzó a besarse, un beso tierno dónde se demostraban todo el amor que sentían el uno por el otro, el deseo por entregarse fue creciendo.

El alfa acomodó al omega con cuidado sobre la cama, comenzando a besar su cuello, le quitó el camisón y la ropa interior.

Jimin acarició con suavidad la espalda de su alfa, con sus pequeñas manitas bajó el pantalón que el pelinegro estaba usando y cómo pudo se lo quitó, el omega dejaba salir suspiros juntos a gemidos y jadeos de placer.

Jungkook comenzó a besar el cuello del rubio, así que el omega lamió dos de sus dedos que guió hacía su entrada, la cuál ya estaba bastante lubricada, se preparó muy bien mientras disfrutaba de los besos que su alfa repartía por su rostro, mandíbula, cuello y pecho.

El omega gemía en el oído del pelinegro logrando excitarlo de sobremanera y más enterrando sus pequeñas uñas en los grandes hombros de su alfa.

- ¡Estoy listo!

- ¿Te preparaste bien cariño?

- Si!! Te necesito ya!! ¡Por favor!

Jungkook guió su miembro a la entrada bien preparada y completamente lubricada de Jimin, el omega al sentir la intromisión en su interior, mordió au labio inferior con fuerza.

Cuándo Jungkook por fin estuvo dentro espero algunos minutos esperando que su esposo se adaptara, dejándo tiernos besos en las mejillas de Jimin quién sonreía gustoso, mientras ponía boquita en un puchero esperando ser besado.

- ¡Te amo!

Jimin sonrió al escuchar aquello, nunca se cansaría de oírlo, el alfa entonces dió la primera embestida, llegando muy profundo en el interior de su omega quién puso los ojos en blanco, poco a poco fue aumentando la velocidad, llevando al rubio al máximo gozo, así que comenzó a sar embestidas más profundos, tocando aquel punto de placer de su esposo.

- ¡Mghm! ¡Ahí Kook! ¡Ahí!

- ¡Me encantas amor! ¡Argh!

- ¡Te amo alfa!

El alfa comenzó a mover su cadera con más rápidez, levantó una de las piernas de su omega en su hombro, en tanto besaba su cuello con fascinación, llevó sus manos al miembro de su pequeño y comenzó un vaivén rápido.

Jimin no pudo aguantar más y se corrió entre sus abdomenes, el omega estaba completamente ruborizado, con los ojitos llorosos de felicidad, cómo siempre era después de que se entregaban a la pasión.

El alfa siguió moviendo sus caderas alargando el orgasmo de su omega y buscando su propia liberación, la cuál llegó minutos después haciendo que se corriera en su interior mientras lo anudaba y lo mordía.

Jimin cerró sus ojitos mientras sonreía, no importaba el dolor del nudo, ni de la marca reabierta. Se sentía bien, pleno, feliz, realizado, se sentía satisfecho y lo más importante es que se sentía amado.

La pareja se sonrió antes de besarse una última vez pues el rubio se quedo completamente dormido minutos después, el alfa esperó a que su nudo bajara mientras curaba la marca y repartía besos en el rostro de su omega dormido. Después se encargó de limpiarse y limpiarlo, con cuidado lo acomodó en la cama y él se acostó a su lado.

Los cubrió con una manta, admiró la belleza de su omega mientras guiaba una de sus manos al vientre de su pequeño, estaba tan contento, no cabía la felicidad en su interior, dejó un beso en la boquita de Jimin y otro en su barriguita plana aún.

- Te amo cariño y a nuestro cachorrito también...

Jungkook se quedó dormido poco después abrazando a los amores de su vida.

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Es que está historia me hizo sentir tantas cosas🥺🥺

Escribiré dos o tres extras! 💕