En el recreo, Luisa fue a la cantina a sentarse al lado de Susan, pero ésta se encontraba muy alejada de ella.
- Susan, siento cómo me comporté esta mañana, he tenido un mal día, solo es eso, por favor perdóname, odio estar enfadada contigo.
- Tía, no pasa nada, entiendo que tengas un mal día. ¡Además yo nunca podría pelearme con mi mejor amiga! ¡Eres la mejor! ¿Lo sabes?
- Y tú también eres la mejor Susan, —Luisa sonrió al ver que todo volvía a la normalidad con su amiga—.
- Por cierto, yogurín no para de mirarte. Te has hecho muy amiga tú de él, ¿no? Antes de clase no parabas de hablar con él, pillina. Adam y Luisa, la pareja del año, ya me lo imagino. Qué bonito, por dios, qué bonito.
Mientras Susan hablaba, Luisa miró a Adam y éste le hizo un gesto para que ambos salieran al patio, se ve que tenían que hablar acerca de todo lo nuevo que estaba pasando, eso a Luisa le asustaba, pero tenía que aceptarlo de una vez por todas.
- ¿Me disculpas un momento Susan? Tengo que ir al aseo un momento...
- ¡Claro tía, pero no tardes mucho que tenemos que seguir hablando, eh!
- Sí, sí, en seguida vuelvo... —Aunque Luisa sabía que eso iba para largo—.
Los dos salieron al patio y Adam comenzó a hablar con Luisa.
- Luisa, no quiero que le cuentes nada a nadie acerca de lo nuestro..., —Adam en seguida se dio cuenta del doble sentido de la frase, pero no rectificó, puesto que le gustaba cómo sonaba eso—, ni siquiera a tu amiga Susan, tiene pinta de ser muy charlatana y podría ir contándolo por ahí.
- ¡Eh! Susan puede ser muy habladora pero también es leal, y sé que no contaría nada acerca de la magia, y de lo que sea que tengo. Y tranquilo, no pensaba contárselo a nadie, gracias por confiar en mí.
- Tengo miedo, ¿vale? Siempre he sido protector, pero no de nadie como tú. No quiero poner en peligro tu vida.
A Luisa le estremecieron esas palabras, ¿ella era importante para Adam, o para el mundo? Quería ser importante para Adam, pero ella estaba segura que los sentimientos entre ellos solo iban a ser de protector y protegida, nunca irían a más.
A su vez, Adam por dentro estaba deseando besar a Luisa, pero era imposible, puesto que las normas de la comunidad prohibían relaciones entre protector y protegida. ¿Por qué era todo tan difícil? Él no había elegido sentir eso por alguien. Lo tenía claro, tendría que hacer que esos sentimientos desaparecieran.

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¡Hola a todos! Espero que os esté gustando la historia. Me gustaría que comentarais para saber vuestra opinión, si os gusta os disgusta... Todo lo posible, que yo lo acepto de buen agrado.
Además me gustaría que os pasarais por las historias de @nathalietkd que son muy buenas. Muchas gracias a todos los que me leéis :)