-Entonces....¿estás perdido?__pregunto tratando de ayudar al niño frente suyo aún si la respuesta a su pregunta era más que clara, pero aún así el contrario respondió con un asentimiento__¿donde fue la última vez que viste a tu madre?__cuestiono mirando a los lados.

-En...el puente que divide...el territorio Norte del Sur...__contesto en un tono bajo llegando al susurro.

-Soy Timothy Drake! Y te ayudaré...desde hoy somos amigos, ¿tu cómo te llamas?__dijo extendiendo su mano.

-Soy....__susurro para luego de un pequeño silencio tomar la mano del oji-cielo__soy...Konner...

El peli-negro despertó abruptamente con la respiración agitada, miró a los  alrededores notando que aún seguía en esa sala de tortura, miró por la pequeña ventana viendo que ya era de noche, se tomó su tiempo para tranquilizarse soltando un largo suspiro para luego levantarse de su sitio.

-Bien, hora de explorar el pueblo Sur...__hablo con sigo mismo acomodando su cuchillo, camino hacia la puerta y efectivamente, estaba trancada, la pateó pero no funcionó, frunció el ceño luego tomar una de esas sillas colocándola frente a la ventana, trepando cual gato para salir por allí.

Al estar fuera rodeó la iglesia viendo por una ventana como había una silla, una escoba junto a un trozo de madera que trancaba la puerta <mocoso listo> pensó con una sonrisa burlona <Pero yo lo soy aún más> contrataco el primer pensamiento con ese para así empezar su recorrido por el pueblo, ya todos estaban en sus casas posiblemente dormidos por lo que con más libertad vio cada esquina.

-Porque siempre a donde voy, todo es tan aburrido__dijo en un suspiro llevando una de sus manos a su cabello sacudiendolo ligeramente.

E

l Moreno miraba el pueblo en el que habitaba desde el tejado, solía ir allí para desestrezarse, la noche le era tranquila como todos estaban dormidos podía sentir mucha paz, era una sensación placentera, ver las casas sin ninguna vela prendida, el viento fresco soltando directamente a su rostro, no había nadie más afuera además de él, eso hasta que vio a un ser conocido pero nada agradable caminando despreocupadamente por las calles con las manos en los bolsillos, Damian lo observó detenidamente preguntándose como rayos había escapado con todo lo que dejó bloqueando la única puerta de salida, pero bueno, era momento de averiguarlo por lo que con una gran agilidad bajo del tejado y se acercó al adolescente.

Mientras caminaba tras él notó como este estaba viendo a todos los alrededores como si buscara algo, en un punto el chico que creía se llamaba Pim o al menos algo así lo recordaba se detuvo y sin con desgano giro para verle, esto sorprendió un poco al moreno pues no había notado que este era consciente de su presencia, pero no importa no era como si en verdad la estuviese ocultado por lo que se acercó a él y en un rápido movimiento lo mando al suelo.

-Niño....me estas lastimando, como dicen pequeño pero peligroso...__dijo el chico teniendo la mitad de su rostro contra el suelo que era puro polvo el cual estaba haciendo que le picara la nariz.

-Como es que lograste salir?Pim__pregunto sin rodeos importandole poco la mirada azulada que se posaba en su persona aún desde abajo.

-Un mago jamás revela sus trucos o sino ya no tiene gracia alguna~ ¡Y mi nombre no es Pim, es Tim!__respondio con una sonrisa juguetona para luego cambiarla a una de falsa ofensa.

-<TT> silencio Pim, ahora responde mi pregunta...__el menor no estaba para juegos, casi nunca lo estaba, se mantuvieron en un silencio tranquilo por un momento hasta que fue cortado por el sonido de la puerta siendo abierta de alguna casa.

Ambos jóvenes voltearon y vieron a un señor de mediana edad con los ojos cerrados intentando abrirlos, al parecer lo habían despertado, por lo que rápidamente Tim cargó al de ojos Jade, escondiéndose tras una casa para evitar que el adulto los viese, Tim miraba cuidadosamente como el señor echaba un vistazo de aqui a allá y luego entrar de nuevo a su casa.

-Bajame, Pim!__susurro con reproche pues el más alto lo tenia sujeto y eso lo estaba incomodando.

-Aww pero eres tan pequeño__murmuro con una sonrisa ladina cuando estuvieron fuera de peligro, claro que esto molesto al más bajo por lo que dando un cabezazo al otro se pudo safar.

-Cuando te digo que hagas algo, lo haces! No juegues con mi paciencia__expreso entre dientes con rabia para patearle al mayor en la entrepierna provocando la caída de este al suelo mientras se sujetaba de la parte adolorida.

-Sabes esto podría llegar a ser hasta romántico...tu, yo, la noche, la luna las estrellas y yo siendo arrastrado por tu tierno encanto~__decia el peli-negro el cual literalmente estaba siendo arrastrado por el menor el cual de alguna forma podía con su peso.

-Cállate de una vez Pim!__no era nada nuevo que cada que el joven le hablaba al Moreno este lo cállase como respuesta.

-Pues...se nota que tienes una gran personalidad!__aun estando en el suelo levantó la mano y enseño un pulgar arriba__hay que seguir trabajando en ello, solo debo encontrar tu lado más tierno__comento mirando el cielo oscuro, una piedra golpeó su cabeza haciendo que se quedase siendo aún ignorado por el que consideraba un chiquillo, al no recibir ni un reproche decidió callarse y dejarse arrastrar por un rato ya enseguida volvería a molestar al menor.

-Tienes suerte de que siempre tenga una llave extra de este lugar como precaución__comento el menor soltando los pies del de piel Blanca y así insertar la llave en el cerrojo, cuando la abrió vio al mayor esperando a que se levante para que entrasen pero este se mantuvo en el suelo__Levantate y entra!__exclamo con molestia y cansancio se suponía que sería una noche tranquila.

-Noo..p! Me trajiste hasta aquí en contra de mi voluntad, arrastras además y ahora quieres que me levante? Sigue con tu trabajo niño!__dijo levantando sus pies sin siquiera mirar al chico colocó sus manos detrás de su cabeza en el momento en el que empezó a ser agresivamente arrastrado.

-Enserio quieres morirte, por alguna extraña razón aún no te entrego, deberías comportarte bien quizá así sea más piadoso contigo!__enserio que ese Pim ya lo tenia harto, veía como este tranquilamente se sentaba en el suelo sacudiendolo un poco y así mirarlo como si nada__Agh...lo preguntare una vez más ¿qué hacías afuera, que buscabas?__pregunto cruzándose de brazos.

-Quiza si, quizá no, la verdad morir esta sobrevalorado al igual que vivir, ninguno que mejor que el otro, la diferencia es que, la vida ya sabes la mierda que puede llegar a ser pues la haz experimentado en cambio la muerte ni sabes que hay después de ello, tal vez en el momento en el que morimos nuestra Alma se desvanece en la nada, no iríamos al cielo ni al infierno, solo POOF y termino....__despues de decir esas palabras solo se quedo mirando al niño frente suyo que lo miraba como si todo lo dicho  le sudara__Y sobre lo segundo..pues un paso que lindo, tierno niño con personalidad de un gato gruñón me dejo aquí...barado...solo...asustado...sin ningún manta..para tan siquiera cubrirme del frio~__dramatizo fingiendo estar llorando, enterrando su rostro entre sus rodillas, solo quería molestar al niño más.

-Lo siento!...__eso dejo dejo sorprendido al mayor pero aún así no levantó el rostro ¿qué estaba pasando? Fue la cuestión que cruzó la mente del adolescente__ no llores...__era alguna clase de broma? No podía que en verdad creyera que estaba llorando ¿o sí?, escucho como el moreno se salía del lugar entonces el chico levantó la miraba, por primera vez estaba confundido en verdad, vio como el menor volvía con unas mantas que tapaban su vista entonces fue que Tim se dio cuenta que enserio le había creído por lo que rápidamente con su saliva humedeció sus ojos para que parecieran lágrimas.

-Hip! Cre-i que no te importaba__hablo mientras el menor ponía mantas en el suelo.

-Habia olvidado por completo sobre esto, pudiste haber pescado un resfriado!__susurro el Moreno colocando las mantas en el suelo.

Tim aún estaba dudoso porque ese niño que era tan tan frío y como decirlo sin...sonar tan duro, oh si!, frío y endemoniadamente malvado sin ningún empatía hacia la gente, por lo que después de unos segundos haciendo funcionar su inteligente cerebro, entendió una cosa, el niño frente suyo era un niño que había vivido suponía toda su vida en ese pueblo en el que todos son amables y honestos, etc, etc prácticamente todo rosas descartando la temible y asquerosa forma de interpretar la religión, quizá ese niño era muy ingenuo con la gente o ingenuo en sí, ya lo descubriría más adelante.

-Bien, ya está, puedes dormir aquí, vengo mañana temprano a recoger todo de nuevo ¿de acuerdo? Pim, no te vuelvas a escapar porque si lo haces, ya no seré amable contigo!__dijo antes de salir y cerrar todo nuevamente.

-Gracias...__susurro el oji-celeste mirando la "cama" improvisada que había hecho el menor con el montón de sábanas__espera...además de esto...¿haz  estado siendo amable?__pregunto a la nada aún más desconcertado.