Capítulo dedicado a: kookietaetae_10 y MarlyUwU muchas gracias mis bubus, les tkm. 🥺💜

Como saben, siempre es un gusto dedicar capítulos a todes ustedes wawas, pero considero que sería un poquito justo si algunes al menos dejan un corazoncito de que vieron la dedicación, no es obligatorio, pero sería lindo si lo hacen. 😔❤

Sin más, de todas formas es muy bonito volver ésta semana con un capítulo más. owo

No se olviden de votar y comentar para tener una Nomi feliz y más comentarios de Kookoo y Kyum. 😂💖

¡Disfruten la lectura!

Mirándolo detenidamente, uno de dos chicos caminando juntos rumbo al restaurante en el que trabajaban a unas calles más, lamió la cuchara de su propio helado, fijándose muy bien en su amigo castaño casi tragándose el dulce frío apenas lo ponía en su boca, yendo cucharada tras cucharada en el gran bote para él solito mezclado con un montón de dulces, y el rubio a su costado tragó extrañado además de asombrado por cómo podía comerlo tan rápido y no sufrir un dolor de cabeza horrible debido al frío subiendo a su cerebro.

— ¿Te encuentras bien Kookie?— El menor mencionado sin comprender el tono asustado en el Park, ladeó la cabeza, terminando de comer su última cucharada con sus labios un tanto hinchados gracias a estarlos llenando del helado cada cierto momento.

— A como me siento y veo, sí, ¿por qué la pregunta Jiminie?— Contestó pacíficamente, agarrando otra cucharada para llevársela a la boca y rápidamente tragársela, sin saborear la vainilla, el chocolate o siquiera ver si en realidad sí era vainilla y chocolate como creyó leer en la tienda de atrás.

No lo sé, es un poco raro el que básicamente te acabas de comprar ese bote mezclado con una explosión de azúcar y ya llevas la mitad.

Sumando que te ves desquiciado, como cuando te controlé y no comimos dos días porque hice mi huelga de hambre.

Feliz en esa tarde de domingo, Kookoo se recostó, estirando las patas al mismo tiempo que bostezaba con sueño sin importarle el gesto molesto de Jungkook dirigido a él.

"Por eso te quedas sin salidas".

Ni fue la gran cosa, dramático.

Rodando los ojos, Jungkook siguió comiendo de su mezcla, adorándola.

— Pues Kookie, si no supiera que serás alfa, ahora mismo estaría considerando que estás embarazado y me lo estás ocultando.— Riéndose a carcajadas de la expresión horrorizada en Jungkook, prefirió aclararlo.– Es que tu helado me da miedo, es como vomito de unicornio, pero sin colores, porque es dulce.— Murmuró, fijándose algo asqueado.– Y desde ayer en la noche no paras de comer helado, Somin me dijo que comiste dos botes enteros sumando el de hoy.— Apretando los labios, lo miró asustado.– Espera, ¿o sí estás embarazado?

— ¡Claro que no hyung! ¿¡Cómo voy a estarlo!?— Exclamó sorprendido de la pregunta, provocando nuevas risas en el mayor.– Ugh, no lo sé, desde ayer tengo el antojo de helado, ¡pero no estoy embarazado! Creo que se debe a mi celo, no falta demasiado para que suceda.— Se encogió de hombros, cubriéndose con su abrigo del clima algo frío.

Sólo un loco como tú come helado con éste frío.

"Ni hace tanto, exagerado".

18 grados para mí es frío, a pesar del pelaje está feo el asunto.

— ¿Qué?, ¿en serio? Creí que era en dos o tres semanas.— Jimin abrió la boca ligeramente, comiendo de su propio helado y comprendió porqué Jungkook sentía esos antojos, era un síntoma normal en sus celos, o más bien en el de cualquiera con celo, y Jungkook afirmó, encubriendo la verdadera razón de estar comiendo tanto helado con la excusa dada a su hyung, aunque de alguna manera era verdad.

Al día siguiente, luego de pensar un poco en las cosas que le decía Kookoo respecto a Yugyeom y ver a éste desaparecer de donde se encontraban en la tienda de conveniencia a punto de entrar en celo, él mismo volver a su casa y pasar su noche con Somin, en ningún solo momento paró de sentir el calor en su interior por culpa de la conexión con Yugyeom y su mordida, haciéndolo enojar, como si estuviera sudando por dentro del cuerpo y algunas ocasiones sudando por fuera al grado de llevarlo a bañarse dos veces.

Sin embargo, no era ningún calor insoportable, era como cuando estaba el pleno verano llenando Seúl y él se encontraba en medio de la calle permitiendo que el sol golpeara contra toda su cara, entonces la mejor opción para refrescarse, fue ni más ni menos que el helado, como algunas bebidas heladas, pero el más efectivo fue el dulce frío, comiéndolo tanto que sorprendió a Somin estando junto a él en la noche.

De todas formas, ese algo en su interior de querer comer cosas dulces era aparte, tratándose obviamente de su celo pero era un pre-síntoma, el cual casi siempre sentía cuando se acercaba, por lo que esa mañana al pasar por el mayor y bajar del autobús, le propuso ir a conseguir un helado, él comprándose un bote entero con un montón de dulces y Jimin algo más simple aunque dulce igual.

— Yo también lo pensé, pero Kookoo dice que por algo se adelantará sólo ahora.— Comentó, relajándose por el helado refrescando el interior de su cuerpo una vez más.– No será ésta próxima semana, tal vez la siguiente, de todas formas iré avisándole a Chanmi noona y Jaebeom hyung de la excusa de mis appas.— Comentó, con Jimin asintiendo al saberla.

— ¿Quieres que te cuide? La vez pasada no lo hice y Somie me dijo que te la pasaste pegándole a la ventana de tu habitación.— Avergonzado, Jungkook empujó a Jimin burlándose de él ante el recuerdo de cómo por su desesperación de salir al sentirse necesitado llegó al punto de pegarle a la ventana con la idea de romperla.– ¿¡Qué!? ¡Yo sólo digo lo que me contaron!

Aborrezco la fuerza de los vidrios hoy en día.

No me dejaron disfrutar que te ayudara para ir por alfas a la calle...

Deprimido, Kookoo dejó de mover la cola mientras Jungkook reía.

— Lo dices riéndote de mí Jiminie.— Acusó, puchereando antes de que Jimin estirara sus brazos y rodeara a Jungkook, besándole la mejilla.

— Sabes que te quiero mucho Kookie.— Comentó tiernamente, esperando la respuesta con un piquito en los labios y Jungkook sonrió avergonzado, sin decirle nada.– ¡Oye, dime que también me quieres mucho! Acepto un te amo.— Pestañeó cariñoso justo cuando el menor lo quitó de un empujón.– Extraño a mi Jungkookie borracho diciéndome "te amo Jiminie, nunca lo digo, pero lo hago".— Imitó su voz y Jungkook se contuvo de volver a empujarlo.

Debería dejarte tomar más seguido.

Me encanta cuando se burla de ti.

"Cierra el pico".

Ni que fuera pájaro.

— Por eso nunca te lo digo, lo utilizas en mi contra.— Gruñó Jungkook, caminando lejos del rubio para darle otra cucharada a su helado derritiéndose.– Desde ahora te lo diré una vez por mes.

— ¿¡Por qué eres tan cruel!?

Porque está bien amargado.

Al menos a ti te dice te amo una vez al mes.

A mí cada vez que hay un mundial de plano.

Siendo dramático, Kookoo se dejó caer por completo, como si le doliera que Jungkook nunca le dijera esas cosas pero en realidad le asqueaba, así que el castaño prefirió ignorarlo.

— Porque la vida es injusto y tú eres un mal hyung que graba la vergüenza de otros.— Contestó pacífico, con Jimin bufando ante la acusación, pero la tomó, aunque le fastidiara cómo nadie aceptaba unos simples vídeos de él exponiéndolos.

— Todos son tan exagerados.— Susurró, estando al lado de Jungkook.– Pero volviendo al tema de tu celo, ¿sí quieres que te cuide?— Formando una mueca, Jungkook lo vio.

— ¿Me prometes que ésta vez no me obligarás a comer?— Mirándolo sorprendido, Jimin no tardó en golpearle en la nuca y Jungkook se quejó con un puchero.

— ¿Quieres que te deje tres días enteros sin probar ni un sólo bocado? Estás loco, sigo sin comprender la razón de porqué Kookoo y tú no quieren llenarse el estómago, en esos días es cuando yo tengo más hambre que nunca.— Jimin regañó, y Jungkook tragó, sintiendo a su lobo removerse molesto.

Es que nosotros no queremos comer, queremos beber.

Y chupar cosas.

Pero principalmente BEBER, tú sabes de lo que hablo.

Sonriendo pervertido, Kookoo se volvió a levantar de su lugar, sonrojando a Jungkook por su manera de imaginarse cosas horribles para él durante su celo y todo por culpa de Kookoo y sus fetiches o gustos extraños.

— Yo no, me quedo sin apetito los tres días y cuando me obligas a comer no me puedo dormir tan fácilmente.— Haciendo un mohín luego de su falsa excusa, comió lo poco que quedaba de su helado, tirándolo en la basura cuando pasaron cerca de unos asientos.– Por eso te pido que si me cuidas, no lo hagas.— Apretando los labios, Jimin lo vio.

— Hagamos un trato.— Propuso el rubio, agarrándolo de un brazo para entrelazarlo con el suyo.– ¿Qué tal si te dejo sólo dos y el tercero te obligo a comer? Tu tercer día ya no es tan sufrido como los otros dos y de paso hablo con Chanmi noona y Jaebeom hyung que te cuidaré, pero le dirán a los demás que nos fuimos a Busan de visita juntos.— Agradándole la idea, Jungkook afirmó.

Pero que ésta vez no entre a la habitación sin tocar.

Ustedes me hacen pasar unas vergüenzas horribles.

— Kookoo dice que ésta vez no te olvides de tocar como la otra ocasión.— A las risas, Jungkook y Jimin siguieron caminando a la par, sobre todo Jimin al recordar lo que pasó y el pobre Kookoo se cubrió avergonzado de lo pasado.

— Ya me disculpé como cinco veces, pero Kookoo, debes superarlo y entender que tenemos lo mismo.— El canino no tardó en levantar la cabeza al oír que le hablaban, jadeando molesto.

¿¡Superarlo!?

Me vio en medio de MÍ momento y lo único que hizo fue reírse de mí además de disculparse como 50 veces.

Pero eso no quita que me arruinara todo además de hacerme olvidar que necesitaba un alfa.

— ¿Sabes qué? Sí interrumpelo, mucho más, se olvida de su tontería del alfa.— Molesto, Kookoo gruñó desde su pecho y Jungkook sólo se lo aguantó en el interior divertido.

Tontería, tontería, siempre son tonterías.

Déjame viviiiiir.

"En la otra vida".

Kookoo inhaló y exhaló, cerrando los ojos.

Es un buen humano, lo es, aunque a veces sea un total imbécil, te alimenta, es bueno contigo cuando quiere y unas contadas diez veces te ha hecho caso.

Es un buen humano.

— Y creo que está quedando loco, ya habla consigo mismo y todo.— Murmuró a Jimin, riéndose de Kookoo gruñendo rabioso y dando vueltas de la desesperación.

— Tranquilo, Chimmy a veces es así, son etapas de los lobos, con el tiempo cambian.— Restó importancia, logrando hacer jadear a los dos caninos amigos en su propio mundo.

Me voy a morir de un coraje y ustedes diciendo que son etapas.

Lo repito por milésima vez.

Los odio.

— Cambiando de tema, porque sé que Kookoo seguirá haciendo su show y tú evitando desde la mañana hablar de ello cuando fui a tu casa.— Codeó Jungkook, sintiendo a su lobo bufar y hacerse bolita en su lugar.– ¿Qué tal te fue con Yoongi hyung?— Alzó ambas cejas sugerente, codeándolo seguido, por lo que Jimin le vio raro aunque feliz.

— Hablas como si hubiera sido una cita o algo así.— Le empujó ligeramente, decepcionando a Jungkook por no verlo nervioso ni sonrojado.– Y no lo estuve evitando, es que no sabía cómo sacar el tema.— Susurró, rascando su cuello justo cuando Jungkook sonrió, por fin descubriendo ese ligero tono rosado en sus mejillas.

Sospechoso.

— ¿Tú?, ¿sin saber cómo sacar el tema?, ¿conmigo?— Cruzó los brazos sobre su pecho, burlón en las preguntas hacia el mayor rodando los ojos avergonzado.

— ¡Como sea!, ¿quieres que te platique o no? Estamos por llegar al restaurante y no le diré nada a los otros, tendrás el resumen exclusivo si te apuras.— Rápidamente Jungkook asintió, abrazándose a Jimin riendo del cambio tan repentino en su amigo.– Bien. Anoche que nos fuimos, debo admitirte que el camino fue algo incómodo y vergonzoso porque no sabíamos de qué hablar, a veces comentábamos cosas, pero Yoongi hyung es adorable ya que muchas veces yo le sacaba un tema del restaurante para entretenernos y él intentaba seguirme el ritmo algo apenado y sonrojado.— Comentó risueño, iniciando a relatar lo sucedido.– Fuimos al río Han porque creímos que sería un lugar solitario y no habría demasiada gente.

Uuuuy, querían estar solos, uuuuuuy.

"Quiero decirlo, pero no me contará nada".

Sí, sí, tú calla, deja que siga con el chisme.

— ¿En el puente o por donde se puede comer?— Cuestionó, creyendo en esas dos zonas puesto no se los imaginaba en donde solían encontrarse algunas parejas todos los días acampando, platicando o las familias simplemente pasando el rato.

— En el puente, que por cierto, da miedo.— Murmuró, pausando.– En cualquier momento creí que alguien vendría y nos robaría, no había absolutamente nadie, ni siquiera por donde se puede comer, pasamos por allí y preferimos ir al puente para tener el auto de hyung más cerca.— Tembló, provocando una carcajada en Jungkook y sonrió.– Bueno, en fin. Bajamos, nos acomodamos y empezamos a hablar, pero él fue quien inició, para sorpresa mía, creí que yo debería iniciarla porque lo vi muy apenado.— Pensando unos segundos en Yoongi sonrojado, soltó una risita.– Comenzó contándome que ese día cuando vino a cenar con su hermano y pasó a encontrarse conmigo, él iba a venir solo, principalmente a idear en dónde sería que se pondría porque como recuerdas, no habían pianistas ni nada antes.— Jungkook asintió en acuerdo, dejándolo proseguir.– Pero justamente se encontró a su hermano por la tarde, y se enteró que la novia de éste lo había dejado después de tres años por otro alfa, estaba despechado, triste y más.

Uy no, ustedes los humanos con sus rompimientos.

— ¿Eso que tiene que...?— Jungkook cuestionó confundido, tragándose su risa por Kookoo fastidiado y Jimin levantó la mano.

— A eso voy, desesperado.— Elevando una curva en sus labios, Jungkook lo miró con gracia.– Hyung para animarlo, decidió decirle que fuera con él al restaurante, entonces de mala gana aceptó, sólo para distraerse y fueron, pero como te lo comenté, no se encontraba en su mejor momento, le tenía un desprecio a los omegas horrible y no paraba de decir que todos eran iguales, que todos esto, que todos el otro, y bla, bla, bla.— Ahora sí entendiendo el rumbo, Jungkook bufó con gracia.– Cuando llegaron, se sentaron y yo los atendí, sí recuerdo que él dijo lo primero que vio en la carta, o al menos de eso me di cuenta porque Yoongi hyung le preguntó si estaba seguro al tardar más y ni le hizo caso, entonceeees.

Alfa estúpido.

Dame un alfa, pero no como ese, por favor.

— Como estaba triste y en parte furioso, decidió descargar contigo su enojo.— Rodó los ojos, Jimin afirmando a la lógica del asunto.

— Apenas le llevé el plato, aparte de que hyung me dijo mi aroma se le hizo algo similar al de la ex-novia de su hermano, éste reaccionó sin pensar, olvidando lo que sea que pidió y como se sentía apenado, en vez de pensar las cosas bien, lo primero que hizo fue tirarlo, gritarme, enojarse y como yo no me quedé callado, hyung hizo todo lo posible por callarlo a él aún gritándome, estaba demasiado avergonzado conmigo y ni siquiera iba a excusar más las estupideces de su hermano porque él no lo llevó para eso, menos para hacer un alboroto en el lugar donde trabajaría y conmigo que sólo estaba haciendo mi propio trabajo.— Explicó mientras Jungkook conectaba todos los hilos.– Luego de eso, fue a disculparse con Chanmi y Jooheon-nim, con Jaebeom hyung no porque todavía no entraba al restaurante en ese momento, pero conmigo no supo ni cómo hacerlo, lo intentó varias veces.— Rió al acordarse de algo.– De hecho, dice que un día estuvo a punto y como me vio tan enojado no se atrevió, creyendo que lo golpearía o algo así.

Awww.

LE TIENE MIEDO.

Ternurita.

Kookoo ladeó la cabeza, enternecido.

— Tus golpes son como de bebé Jiminie, con esa manito nadie puede.— Agarró la mano del mayor con la suya, comparándolas como se encontró a Taehyung varias veces riéndose de Jimin ya que sus dedos eran mucho más largos y el mencionado se sonrojó, apartándola.

— ¡El punto es!— Exclamó molesto, frunciendo el ceño.– Después de tanto, y tanto, no se le ocurrió volver a hacerlo, aunque tenía el pendiente.— Contó, suspirando.– Su plan era intentar acercarse un poco a mí, hablar y cuando me viera más amigable, pedirme disculpas, que pues, le funcionó de alguna manera.— Se encogió de hombros al darse cuenta de cómo no necesitaron más.– Incluso en un cierto momento le habló a su hermano y él también me pidió disculpas por todo, creo que los hermanos Min son muy vergonzosos, se escuchaba muy apenado a través del teléfono, que tanto Yoongi hyung como yo nos reímos de sus tartamudeos y sus disculpas continúas, diciéndome que nunca se imaginó a sí mismo haciéndole algo así a un omega que no tenía la culpa y bueno, yo los disculpé a ambos, se oían sinceros, Yoongi hyung se veía arrepentido.— Uniendo sus manos, sonrió.

Tanto para eso.

En serio que no comprendo a los humanos.

— ¿Y? ¿Ahora todo bien?— Cuestionó Jungkook, con la propuesta de que siguiera.

— Síp, dimos por hecho que desde ahora seríamos amigos, hablamos de otras cosas y aclaramos otras, pero...— Jimin mordió su labio pensativo, justo cuando fueron llegando al restaurante, jalando a Jungkook, éste mucho más interesado ahora, ambos apartándose de la entrada de vehículos.

— Sabía que no todo pudo estar tan calmado, ¿¡pero!?

Chismoso.

"Mira quién habla".

Tú me hiciste así, humano, ahora atente a las consecuencias.

— Ocurrió algo sólo un poquito raro.— Cerró un ojo al tiempo que hizo una mueca y Jungkook alzó una ceja.– Cuando acordamos las cosas luego de hablar y amigarnos, decidimos darnos la mano, para cerrar el problema como si fuera un trato y apenas las juntamos, sentí algo muuuy, extraño.— Susurró, sorprendiendo a Jungkook sin esperar eso.

— ¿Qué sentiste?— Cuestionó impaciente por como Jimin no decía nada.– Deja de hacer tanto silencio dramático y dilo.— Riéndose a carcajadas, Jimin le pegó en el pecho.

Eres bobo, humano.

— Es que aún no lo entiendo, Chimmy se puso como loco apenas tocamos nuestras manos, dijo algo que no logré entender y creo que Yoongi hyung también lo sintió porque ambos nos vimos literalmente al mismo tiempo, fue como una corriente eléctrica o algo así, fue muy raro.— Formó un puchero confundido.– Mientras nos sujetábamos no parabamos de sentirse esa corriente y Chimmy no paraba de estar feliz, así que apenas nos soltamos, dejamos de sentirlo, pero decidimos no tomarle mucha importancia.— Finalizó y Kookoo jadeó frustrado.

Ustedes me sorprenden con su sola existencia.

Les dejamos las cosas tan fácil y no lo entienden.

Kookoo golpeó con las patas, sentándose en espera de oír la respuesta de su humano con el ceño fruncido.

— ¿Se te ocurrió buscar qué significa eso Jiminie? Es que ya sabes.— Susurró.– Un alfa, con un omega, si unen sus manos...— Insinuó, agarrando la suya con la de Jimin sin sentir absolutamente nada y el rubio parpadeó.

— ¿Crees que pueda significar algo?— Jungkook afirmó y Kookoo le agradeció internamente.– Ahora que lo dices, puede tener sentido, lo buscaré por la noche al salir.— Pausó, ansioso.– Aunque me va a dar algo si significa otra cosa, contigo no lo siento y eso que eres mi segunda soulmate.— Pegó su mejilla con la suya y Jungkook bufó.

— ¿Cuántas tienes, infiel?

Esa me gustó, JAJAJAJAJAJAJA.

— ¡Jungkookie!— Carcajeándose al mismo tiempo, Jungkook fingió indignación, caminando con la cabeza en alto a SeokJin con Jinyoung y Bambam hablando.– ¡Sólo son Taehyungie y tú!

— ¿¡Y lo pones primero a él!? No soy la opción de nadie, óyeme.— Alzó la mano frente a la cara de Jimin riendo y Jinyoung los señaló.

Así se habla, alfa empoderado.

— ¿Ustedes qué se traen, telenovela?— Divertido, Jungkook le hizo un gesto, dispuesto a contestarle, sin embargo, algo más importante vino a su mente y Jimin se adelantó.

— Díselo a él, es bien dramático.

Desde su nacimiento, toda la vida, 24/7.

Todos se lo dicen.

"Cállate".

— No me lo dices dos veces.— Murmuró SeokJin, apretando la mejilla de Jungkook observándolo enojado con un puchero.

— Un gusto verlos un día más chicos.— Ironizó, sacándole risas a los mayores.– Pero Jinyoung hyung, o Bam, ¿Yugyeom sí entró en celo al final? Ayer me quedé con el pendiente cuando les hablé y él no me mandó ningún mensaje hoy.— Ligeramente sorprendido al ver a Jungkook preocupado por Yugyeom, Jinyoung asintió a la pregunta.

Que adorable eres, te preocupas.

"Cierra la boca".

— Sí, entró en celo, incluso gracias por avisarnos. Mingyu, Bam y yo estábamos en su departamento cuando llamaste.— Contó, teniendo la atención de SeokJin sin saber esa información.– Yugy no es muy territorial ni nada, pero con su habitación sí lo es y se la pasa encerrado ahí, entonces no tardamos en salirnos para irnos al departamento de Mingyu que vive en el mismo piso, en caso de proteger a Bambie y no molestarlo a él.— Exhaló, siguiéndole Bambam.

— Literalmente cuando estábamos entrando al de Mingyu, Yugyeom entró al suyo, ni siquiera nos vio y apestaba a celo.— Formó una mueca asqueada con Jungkook sonriendo divertido ante eso.– Claramente yo no lo voy a ver hasta el martes o miércoles, pero Mingyu habló con él hoy y se encuentra bien, un poco extraño nada más, ésta ocasión sí se volvió un poco más territorial, no lo dejó entrar al departamento como en otras veces y como dijo Youngie.— Murmuró, apretando los labios y frunciendo el ceño.

Ay, pobrecito...

Kookoo agachó la cabeza, pensando en el sufrimiento de Kyum y Jungkook decidió no tomarle importancia.

— ¿A ese grado? Creí que Yugyeom era muy tranquilo respecto a su celo, es un alfa muy neutro y feliz, por eso lo digo, exceptuando cierto tema pasado.— SeokJin habló, logrando meterse en la conversación y Bambam contestó antes que Jinyoung a las risas por Jungkook empujando al mayor, ruborizándose de la pena.

— Yugyeom es como un cachorro en su celo, en eso tienes razón hyung.— Comentó el tailandés con gracia.– La mayoría del tiempo sólo busca mimos y amor, Mingyu se burla de él demasiado, pero en muy raras ocasiones la pasa realmente mal, ya saben a lo que me refiero.— Alzó las cejas sugerente, provocando las risas en todos.

Que pervertido, me agrada.

— ¿Y sí le dura dos o un día?— Preguntó Jimin, sin estar muy informado del celo de un alfa y Jungkook disimuladamente igual.

Información que nutre tu vida, humano.

Cuando un alfa siente su celo muy intenso, le suele durar los dos días, algunos como ya son así, están acostumbrados y se distribuye ese celo del demonio en dos.

Pero hay otros que sólo lo sufren durante el día entero y se toman el segundo para descansarlo o superar los "rezagos" porque lo sufren todo de una.

"Que horrible es eso".

Tú lo harás, debes saberlo.

Con un gesto adolorido, Jungkook tragó, y Kookoo movió la cola, de repente entrando una idea en su cabeza.

— Ésta vez seguro será sólo hoy, pero mañana lo descansará porque, pues, el dolor es tremendo.— Jinyoung afirmó con los ojos cerrados.

— No extraño los días en los que estaba solo, ahora todo es mucho más fácil.— Sonrió viendo a Bambam golpeándolo en el brazo sonrosado.– Kookie debe entenderlo, ¿el tuyo es de uno o dos días?— Abriendo los ojos por la pregunta de Jinyoung, Jungkook carraspeó, agradeciéndole la información a Kookoo mentalmente.

— El mío es de dos días, por suerte, nunca me ha tocado de uno solo y me imagino lo duro que debe ser para algunos alfas, como Yugyeom, me da lástima.— Guardándose su risa nerviosa, Jimin respiró tranquilo, sonriéndole para calmarlo al ver su sonrojo.

TE SALVÉ EL CUELLO, MALAGRADECIDO.

"Gracias, te quiero".

Awwww.

Que asco.

Riéndose por el quejido de Jungkook, Kookoo continuó moviendo la cola de lado a lado.

También te quiero.

Pero que asco.

— ¿Lo ven? Sé que los celos de cada rango son difíciles, pero el de alfas es un nivel extremo.— Murmuró horrorizado Jinyoung, y los presentes le dieron la razón puesto no había ninguna mentira en él.– Antes de que llegaran hablé con Chanmi noona, literalmente hace quince minutos, así nada más informáremos a los demás en la cocina Kookie.— Jungkook contestó con un asentimiento, sonriéndole al mayor.

— ¿Acaban de llegar ustedes igual?— Cuestionó Jimin, obteniendo la afirmación de la pareja menos de SeokJin, todos entrando a los vestidores puesto se les haría tarde si no se apresuraban y se cambiaban.

— Yo llegué hace rato en el autobús, Nam me ofreció traerme, pero es algo vergonzoso aprovecharme tanto de él, no soy Hobi.— Susurró risueño, Jimin resopló.

— Yo que tú me aprovechaba hyung, no siempre te ofrecen llevarte al trabajo gratis y más con un al...— Deteniendo su comentario por la mirada molesta de Jungkook a él, el rubio se aclaró la garganta exageradamente.– Hyung, hyung es muy bueno y no tendría ni un problema en traerte aquí.

Celoso con el chocolate.

Por favor no seas un tóxico, me agradas así.

Quejándose, Kookoo se sentó correctamente y Jungkook lo ignoró olímpicamente, sonrosado de las mejillas.

— Es lo mismo que le dije, pero el gran Kim SeokJin se avergüenza de intentarlo.— Comentó Bambam, a un casillero de Jungkook, ambos riéndose por lo dicho.

— Eso pasa cada mil años Bam, te juro que cuando dicen "Jin hyung se avergonzó", me debo reír antes de creerlo.— Suspiró Jungkook con alegría, abriendo su casillero luego de los demás y el omega mayor le pegó en la espalda.– ¿¡Qué!? ¡Tengo razón! Todos los presentes aquí lo saben y por cierto somos los únicos, ¿por qué?— Abrió los ojos al percatarse del lugar casi vacío, exceptuando las afueras en el estacionamiento.

— La mayoría ya están en la cocina, otros siguen esperando a sus amigos y aunque entran corriendo, les da tiempo.— Se encogió de hombros Jinyoung.– Y aunque no lo creas, Jin hyung se avergüenza seguido, sobre todo ahora.— Habló el Park acusador, con SeokJin sonrojándose rápidamente y Jungkook se sorprendió.

Sospechoso, otra vez.

Los humanos siempre parecen tan sospechosos...

— Con razón se ve que lloverá.— Murmuró el Jeon bromeando, sacándose la camisa antes de ponerse la del trabajo.– ¿Por qué hyung?— Los otros tres presentes aparte de Jungkook, vieron a SeokJin, animándolo a que hablara y éste rió nervioso, rascándose la nuca.

— Hay algo que me lleva carcomiendo la cabeza desde el inicio de la semana, Kookie, estoy muy avergonzado.— Murmuró, dejando aún más extrañado a Jungkook volteándose por completo al mayor.– Verás, tú sabes que a pesar de nuestras peleas absurdas, tu fuerza descomunal contra la mía, que peso mucho menos que tú y que estoy mucho más desnutrido que tú, te quiero mucho, ¿verdad?— Pestañeó buscando ser adorable y Kookoo entrecerró los ojos.

Déjalo hablar.

Luego lo asesinamos si es necesario.

— ¿Qué hiciste hyung?— Cruzándose de brazos tras abotonar los botones, SeokJin pasó saliva aterrado.

— B-bueno, puede ser que de casualidad, el día que te peleaste con Yugyeom...— Sudando frío, SeokJin apretó los ojos, cubriéndose la cara.– Yo te haya inculpado directamente a ti de algo que yo hice.— Murmuró, con Jungkook abriendo la boca perplejo.

— ¿E-exactamente qué?

— Puede ser... El tema del teléfono de Yugyeom en tu mochila.— Susurró muy por lo bajo, y el aroma de Jungkook cambió en menos de un segundo.

LO SABÍAAAAAAAAA.

YO LO SABÍA, ME MEREZCO UN PREMIO.

— ¿¡Fuiste tú hyung!? ¿¡Por qué!?— Exclamó, dolido de alguna manera con SeokJin y éste no tardó en agarrarlo por los hombros, observando el puchero triste y enojado de Jungkook.

— ¡Antes de que te enojes y me mates, fue necesario!— Respondió velozmente, exhalando de ver a Jungkook serio.– Cuando lo hice no pensé, ni siquiera creí que armaría un problema de ese tamaño para ti Kookie, pero ese día, luego de que entramos a la cocina y obviamente tú seguías enojado con Yugyeom, te oí unas contadas veces diciéndole cosas a él que lo hicieron molestar y de alguna forma me harté de escucharlos con sus comentarios, como todos.— Jungkook se dirigió a Bambam, recibiendo la confirmación de éste apenado.– Así que mi mejor opción, fue resolverlo de la peor manera. Te inculpé sin razón de haber robado el teléfono y sabía que Yugyeom se enojaría al grado de pelear contigo de una buena vez, quería explotar la bomba entre los dos y lo logré, pero de la peor manera, jamás me imaginé como terminarían.

Estaría enojado, pero su terrible acción te llevó, o los llevó, a una solución después de la pelea, claro.

— ¿Es por eso que Chanmi noona y Jaebeom hyung lo sabían?— Cuestionó inexpresivo al mayor, éste asintiendo con rapidez y Jimin levantó la mano, llamando la atención de ambos.

— Jin hyung se sintió terrible ese día y lo confesó cuando estábamos en el autobús de regreso aquí, como Chanmi noona y hyung no dijeron nada de lo que hablaron con ustedes, se aterró y nos contó a todos juntos, esperando que si los habían despedido, lo hicieran en cambio con él porque lo provocó, pero los dos ya sabían de eso gracias a que vieron las cámaras mientras nos cambiábamos la ropa mojada y de alguna manera, apoyaron a SeokJin a pesar de las consecuencias, la amenaza de despedirlos era para hacerlos entrar en razón.— Finalizó el Park nervioso, y SeokJin observó el rostro serio de Jungkook oyendo la información.

— ¿Lo confesaste para que te sacaran a ti hyung, en vez de nosotros?— SeokJin movió la cabeza de arriba a abajo, apenado con el menor y Yugyeom sin estar presente.

Awww, eso fue muy dulce.

Kookoo movió la cola, feliz con el otro humano por admitirlo.

— Nunca creí que llegaran a ese punto, e-entonces cuando vi lo enojados que estaban Chanmi y Jaebeom me arrepentí. Intenté disculparme con los dos toda la semana, pero no me atreví, me daba mucha vergüenza verlos a la cara sin sentirme horrible y el día que fuimos al bar estuve por decírselos, buscaba hacerlos reír con lo primero que se me ocurriera para aligerar el ambiente y no me odiaran, una cosa llevo a la otra y uhg, discúlpame tanto Kookie, también lo haré con Yugyeom, yo en...— Sin dejarlo esperarse esa acción, Jungkook rodeó con sus brazos a SeokJin, colocando la cabeza en el cuello del asombrado Kim, éste recibiendo el abrazo casi de inmediato con los ojos totalmente abiertos.

— Gracias hyung.— Murmuró, apretando su agarre en él.– Aunque obviamente fue una horrible acción la que hiciste y me inculpaste, lograste hacer que Yugyeom y yo estuviéramos bien de una vez por todas, tenemos una gran comunicación, ahora estoy de lo mejor, además que aprendí de muchos de mis errores, así que en serio hyung, gracias, te perdono.— Sonriendo relajado, SeokJin recargó su cabeza en la de Jungkook.

Y cada día mejoras más humanos.

Inserta el corazoncito del tres.

— Siempre está tu hyung para resolver tus problemas.— Acarició su espalda, mencionando aquella frase que alguna vez le dijo cuando se conocieron y Jungkook rió enternecido, oyendo a Jimin carraspear.

— ¿Es n-normal que esto me ponga sentimental?— Jinyoung palmeó el hombro de Jimin, abrazándose a Bambam.

Que chillón es tu amigo, no se aguanta nada.

— No, puedes llorar si quieres, tengo pañuelos.— Soltando una risilla los tres por la broma de Jinyoung, vieron como Jungkook y SeokJin se separaron, sonriéndose al otro.

— Ya, ya, mucho amor por hoy.— Ahora los dos chicos se miraron asqueados, riéndose en cuestión de segundos mientras sus amigos suspiraban.

Mejor, mejor.

— Ahora sí, la cocina puede estar en paz, sin ningún problema.— Festejó Jinyoung, aplaudiendo.– Sólo una última cosa Kookie, es que ya queremos entrar, sólo nos gusta ver reconciliaciones.— Haciéndolos bufar, Jinyoung sonrió.– Chanmi me dijo que como Yugyeom no vendrá ni hoy ni mañana, podemos escoger a quienes trabajarán entre tú y yo porque tú debes venir por obligación también, claro, si quieres.— Apretando los labios, Jungkook se acercó a Jinyoung.

— ¿Y él... Ya no los escogerá?— Jinyoung negó.

Qué te está pasando, qué te están haciendo.

¿¡Por qué te siento indeciso!?

— No, me gustaría esperarlo igual, pero si lo esperamos ahora seremos sólo él y yo, a menos que hablemos con Chanmi noona.— Mordiéndose el labio ante la propuesta, Jungkook negó a la fuerza, dejando perplejo a su propio lobo.

Algo que Jungkook había notado el día pasado en Yugyeom, es que a él le interesaban hacer ese tipo de cosas, cosas que lo hacían ver como el chef principal y no podía quitarle esa felicidad al pelinegro, no después de recordar su emoción luego de decirlo y sin querer su celo se entrometió en sus planes desde la noche anterior, preguntándose en el interior cómo se encontraría el menor.

— Estoy bien hyung, mejor esperemos a Yugyeom.— Ensanchó su sonrisa, y Jinyoung afirmó mientras Bambam le devolvía la curva en sus labios, la pareja entrando a la cocina seguido de Jimin despidiéndose de los cuatro para ir hacia el interior del restaurante.

Oh por Dios...

— ¿Vamos Kookie?— Cuestionó SeokJin, ya listo.

— Ahora te alcanzo hyung, tengo que acomodar unas cosas.— Levantando un pulgar, el mayor también entró por la puerta, dejando solo a Jungkook en los vestidores y aspiró, feliz de sus decisiones pasadas además de haber tomado bien la confesión de SeokJin, que a pesar de que en un inicio, le decepcionó un poco, terminó haciéndole un buen rumbo a su vida.

Una de las cosas que me gustan de los humanos son sus amistades.

Todos aquí son buenos amigos, y te llevan por el camino correcto, además de estar siempre en las buenas y en las malas.

Kookoo se recostó, todavía feliz de ver las mejoras con Jungkook, él estando feliz de escuchar aquello.

— Lo sé.

Tú eres una mala influencia, pero igual eres bueno a tu manera, un gran amigo para muchos.

El mejor inicio de tu capítulo.

— Gracias lobito, planeo que siga así.— Viéndose por última vez en su espejo contento, cerró la puerta, decidiendo que sería un buen día a pesar de su calor interno y tomó aire, entrando a la cocina con casi todos reunidos allí en espera por él, saludándolo.

"Y por muchos años más".

Al otro día.

— ¡Jin hyung, Jaehyun, la mesa 23 necesita cinco!, ¡Dokyeom, Soyeon, la 17 necesita tres de la sopa y cinco de la entrada!— Apresurado, Jinyoung movía sus manos por todos lados, dictando las órdenes que llegaban por parte de los meseros y al mismo tiempo las rayaba para ensartarlas, revisando los platillos llegando y volver a llamar a los meseros con el fin de que fueran a traer los platos de sus respectivas mesas.– ¡Jungkook! ¿Tienes los principales de la cinco?

— ¡Saliendo!— Exclamó el castaño, llevando tres platillos ágilmente en sus manos hasta la mesa de salida con Jinyoung del otro lado luciendo centrado y se los entregó, éste rayando otras dos hojas antes de meterlas en el pincho.– Ahora te traigo dos de las entradas hyung.

— Claro Kookie, gracias.— Murmuró con el ceño fruncido, sacándole una risilla a Jungkook cuando se dio la vuelta y fue con Soyeon, agarrando dos de los platos dispuesto a ayudarle.– ¡Felix, cuatro de los principales!

— ¡Oído!

Éste lugar es un caos desde ayer.

Bueno, no tanto, pero creo que ya me estaba acostumbrando a los gritos del alfa pelinegro cada noche.

"No sólo tú". Jungkook limpió su frente por milésima vez del sudor, lavándose las manos de inmediato y volvió a su trabajo de las entradas, acordando mentalmente con su lobo recostado tranquilamente.

— ¡Van los postres!— El grito de Jaehyun en toda la cocina les hizo apartar a Soyeon y a Jungkook, dándole el paso al castaño pasando con tres postres en sus manos antes de estirarse y agarrar los últimos dos.

— ¡Nam hyung, Hobi hyung! ¿¡Tienen los cortes!?— La pregunta en alto de Jungkook sonó mucho más fuerte, sorprendiendo a la chica a su lado y el menor se rió, pidiéndole disculpas por su tono a la vez que la otra Jeon le restaba importancia sonriente.

— ¡En dos!— Respondieron al unísono, ambos alfas viéndose asombrados, pero volvieron a su trabajo risueños de la coincidencia.

Y la segunda opción.

"Gracias".

— ¿¡Tienes la guarnición de la b, Bambam!?— Llamó al peligris, éste levantando el dedo pidiéndole un segundo y resbaló el sartén caliente a través de la mesa libre, Jungkook tomándolo fácilmente del mango con un trapo para levantarlo y servirlo en tres platos.– ¡Gracias!, ¡Jin hyung, ya está frito el nuevo tocino!— Recibiendo una respuesta positiva, apagó el horno, siendo ágil en todos los sentidos, sin embargo, limpió su cara con una toalla de nuevo, guardándola a un costado de su cadera y se volvió a lavar las manos, pensando en la presión de ese día.

"En definitiva, hace falta Yugyeom".

Si bien que lo extrañas.

Evitando responderle al canino sonriendo burlón, Jungkook agarró los platos en la mesa, llevándoselos a Jinyoung junto a Soyeon y chocó su mano contra la de la chica al terminar, sonriéndose por su buen equipo.

Era obvio que tras dos días de trabajo; de servir, de anotar y gritar por todos lados, la falta de Yugyeom allí se daba a notar con fuerza.

El día anterior, después de anunciar junto a Jinyoung que Yugyeom no asistiría en esa tarde y la siguiente ya que se encontraba en su celo, Jungkook en vez de hacerse cargo por él mismo de la cocina, fue Jinyoung quien lo hizo, puesto Jungkook no tuvo ningún problema con ello y le pareció buena idea que el mayor fuera como el chef principal por los dos días sin el Kim allí, igual que meses atrás donde el restaurante no era tan visitado y eran pocos los presentes en la cocina. Así que el día avanzó tranquilo, con Jinyoung volviendo a su antiguo trabajo de dar órdenes en la cocina mientras los demás cocinaban y Jungkook ser el segundo al mando.

Lo más notorio de no tener a Yugyeom ahí con ellos, era que ya no escuchaban sus gritos algo amables pidiéndole a todos que se apuraran o hicieran ciertas órdenes, ayudando a Jinyoung con entregar todo y además preparar él mismo los platillos en las distintas áreas. Por lo que al tener mucha gente presente en esa noche de domingo, Jinyoung sentía que estaba por volverse loco, al grado de sí pedirle ayuda a Jungkook al final y el menor entró en acción; gritando, pidiendo aparte de preparar las cosas por sí mismo, igual que Yugyeom pero un poco más relajado y serio al momento de hacerlo, una ayuda que fue por supuesto buena para Jinyoung a punto de colapsar por tantos pendientes.

De alguna forma, Jungkook en ninguno de los dos días paró de pensar en Yugyeom, algunas veces cuestionándose qué haría el pelinegro en su lugar y cómo debió mandar en la noche pasada ya que Jinyoung no le pedía ayuda hasta el momento y se olvidó de muchas cosas una vez se apareció el Kim en su vida y tomó ese lugar en el restaurante, sin embargo, las cosas bien aunque ciertamente extrañas.

— ¡Kookie, los cortes!— Haciéndolo dar un saltito de la impresión, el mencionado fue a traer los cortes de carne a la zona de Bambam, Hoseok y Namjoon, agradeciéndole a los dos últimos para ir a Felix y entregárselos, éste ahora dándole las gracias a él por su ayuda, ambos oyendo los gritos de Jinyoung dirigiéndose al resto.

— ¿Soy yo, o hyung está alterado?— Murmuró Felix al Jeon, éste afirmando a su costado.

Para nada.

Sólo rompió dos lapiceros y una hoja la hizo pedazos de los nervios.

— Siento que en cualquier momento se le reventará la vena en el cuello del estrés.— Riéndose a carcajadas, Bambam se acercó a ellos luego de oírles desde su lugar.

— La verdad nunca lo vi trabajando antes de que nosotros llegáramos aquí, ¿era así siempre?— El par negó velozmente.

Era bien serio, a veces me daba miedo.

— Hyung estaba mucho más tranquilo en esos tiempos porque éramos pocos y venía gente, pero no demasiada como ahora, por eso parece que le está por dar un colapso.— Rodando los ojos a la diversión en la voz de Felix, Bambam se limpió las manos, terminando por el momento ya que no tenía ningún pedido.

— Después de todo éste tiempo juntos, hay algo que me sigue sorprendiendo y es cómo a pesar de que está estresado, molesto o lo que sea, siempre chicos, ¡siempre! Mantiene esa expresión.— Señaló a Jinyoung serio, provocando nuevas risas en los tres.– Yugyeom lo suele imitar mucho con su risa porque dice que se ríe como sin sentimiento, a mí no me sale.— Movió las manos, arrancándole una carcajada a Jungkook.

Sí lo imita bien, la verdad.

— ¡Sí lo oí! Es como que sí le da risa, pero Yugyeom lo hace ver de una manera seria y se cubre siempre la boca.— Coincidiendo, los tres chocaron sus puños con gracia.

— Cuando nos conocimos, a la primera jamás creí que él sería mi pareja destinada porque es muy calmado, amable, es simple a su manera pero también es divertido, y luego estoy yo, el Bambam que conocen desde hace unos meses siempre siendo él.— Recorrió su cuerpo con sus manos y Felix apretó los labios curioso, igual que Jungkook al mencionarlo.

— ¿Al cuánto tiempo se dieron cuenta del otro hyung? O de sus sentimientos, más bien.— El omega curioso, parpadeó, y Bambam sonrió.

— Fue a los tres meses, nos dimos cuenta de que éramos pareja dos meses antes, pero decidimos conocernos un poco más y ya saben.— Bufó, evitando verles directamente por el rubor en sus mejillas y Jungkook abrió los ojos, recordando aquel asunto con Jimin y Yoongi el día anterior mientras Felix se tenía que excusar por un llamado de Jinyoung.

Al fiiiin se te prende el foco con algo.

Habla, habla, quiero ver el drama del humano rubio en la noche.

Se ve chistoso chillando.

Jungkook regañó en el interior al canino, éste sin importarle en lo que daba vueltas en su lugar.

— Oye Bam, ¿te puedo hacer una pregunta respecto a lo de las parejas destinadas?— Sorprendido, el tailandés asintió, pidiéndole si iban hacia el área de las estufas y los dos fueron a esa parte.

— Soy todo oídos, ¿qué quieres saber Kookie?— Sonrió, tronándose las manos como si se preparara y Jungkook sintió a Kookoo sentarse firme, listo para juzgar la información de Bambam.

— Bueno...— Carraspeó, pensando la mejor manera de cuestionarlo.– ¿Cómo se dieron cuenta de su lazo?

— Sé que la manera más fácil de darse cuenta es con las manos, pero uhm... Digamos que Jinyoung y yo nos dimos cuenta de una manera más normal, como el contacto vocal.— Ironizó, pausando ante la ceja alzada de Jungkook.– ¿¡Qué!? No somos los únicos en dar un beso en la primera cita.— Gruñó cuando Jungkook lo vio a las risas.

Que atrevido es tu amigo.

Me sigue agradando.

Kookoo lamió su costado felizmente.

— Dijiste que decidieron hacerlo formal a los tres meses, pero se dieron cuenta dos antes.— Acusó de la mentira y Bambam lo empujó.

— ¡Viniste a preguntarme, no juzgarme! Como si tú también te hubieras podido resistir a alguien como él, bueno, en caso de omegas no sé cuál sea tu gusto.— Se encogió de hombros, rompiendo la cubierta de un guante como entretenimiento.

— Aún no estoy muy interesado en ese... Aspecto.— Murmuró, avergonzado del golpecito que le dio Bambam pícaro.– Pero en fin, ¿dijiste mano?— Cuestionó interesado de esa información.

— Yo tampoco lo sabía, me lo contó mi omma cuando la fui a visitar una ocasión.— Inició, enternecido de ver a Jungkook tan atento a él.– Parece ser que cuando tienes una pareja destinada cerca, con sólo tocar su mano te das cuenta de que es él o ella, el simple toque puede hacerlos sentir un millón de cosas.— Explicó, contando con los dedos.– Sienten una corriente, sus lobos se reconocen, se ponen nerviosos, no paran de verse a los ojos y creo en algunos casos hasta la barrera entre los lobos se abre unos segundos, no estoy muy seguro de eso último, sumando su emoción, claro.— Abriendo la boca, Jungkook quedó en un mini shock.

¿Ahora ya lo entendiste?

Tu amigo se va a morir, JA, JA.

Con gracia, Kookoo movió su cuerpo de lado a lado, dejando aún más sorprendido a Jungkook.

— ¿Y con un beso en los labios?

— Es muuucho peor, es como sentir una euforia corriendo todo tu cuerpo, te emocionas tanto, tú mismo lo reconoces cuando lo haces y los lobos se pueden acercar por primera vez en su mundo, sin una barrera de por medio, es lindo, como no tienes idea.— Suspiró el tailandés, cruzándose de brazos.– Igualmente, no en todos los casos es igual, he escuchado de algunas parejas que prefieren terminar como amigos luego de tomarse la mano porque no sienten esa conexión de pareja y en otros hasta se dejan, no funcionan.

La astilla de madera tiene razón.

¿Entiendes? Ya que no llega a ser ni tabla porque está flaco.

JAJAJAJAJA.

"No eres bueno con los chistes".

Todos se reirían de ellos, tú no porque eres amargado.

— ¿No funcionan?— Jungkook frunció el ceño al ver la afirmación de Bambam.

— En algunos casos muy extraños, las parejas destinadas se reconocen, se aman y se adoran por unos meses, pero al pasar los años se dejan, no logran conservar su lazo a pesar de la fuerza y no se aman tanto como ellos creían, llegando así al rompimiento.— Comentó, notando a Jungkook asombrado.– Incluso teniendo hijos, el alfa decide cortar el lazo con el omega y algunos mueren cuando éste muerde a otro omega.— Tragando, Jungkook contuvo su acción de tocarse el cuello.

— ¿D-de verdad?

Síp, aquí te va otra clase.

Algunas parejas se dan cuenta de inmediato, como los que deciden conservar una relación amistosa, prefieren dejarlo así antes de ser una pareja fracasada.

Lo que unos no saben, como el humano tailandés, es que esas parejas de lazos rotos se forzan a estar con el otro porque dicen "oh, es mi pajera destinada, debo estar obligado u obligada a vivir con él o ella".

Y no es así, incluso nosotros sentimos luego de encontrarnos cuando no tenemos una conexión como creímos, ese amor que debería haber y no está, nos podemos dar cuenta en el mismo mes o al otro.

Pero ustedes imbéciles se fuerzan, fin de la clase, hoy ando muy maestro contigo.

"Gracias lobito".

Ladrando, Kookoo se volvió a sentar en su lugar.

— Mi hermano es uno de esos casos, y antes que hagas una expresión de tristeza o como que te duele algo.— Levantó la mano, deteniendo a Jungkook a punto de hacerlo.– Él se encuentra muy bien ahora, sólo se trató de que su pareja no lo supo valorar, tuvieron dos cachorros, se casaron, se divorciaron, pelearon por la custodia, Mark hyung ganó la pelea, terminó con un lazo roto y tuvo un pequeño riesgo de morir pero nada grave.— Movió la mano como si nada y Jungkook se quedó en un shock total, de la misma manera Kookoo con los ojos bien abiertos.

Retiro lo dicho.

Algunos humanos no son estúpidos, algunos dan miedo...

Recuerdame que con él debemos estar bien.

"Acepto".

— Eh... ¿Y dices que está bien?

— De lo mejor, hyung no lo quiere admitir, pero anda con un modelo chino desde hace añooos.— Alargó la palabra unos segundos.– Y él lo ayudó a sanar mucho junto a sus cachorros, pero EH, sólo son amigos.—  Alzó una ceja, provocando una risa en Jungkook.– Por eso si llegas a estar con tu pareja destinada y te das cuenta de que algo no funciona, Kookie, lo mejor será dejarlo, a pesar de la conexión de los dos.

En efecto, mi estimado.

— Buen consejo, gracias Bam, y a pesar de la nada fácil historia de tu hermano Mark con su pareja, me alegra de que le haya ido bien, igual a ti con Jinyoung hyung, ustedes sí se ven para toda la vida.— Sonrojado, Bambam le pegó con la cadera.

— Gracias, yo creo lo mismo, todos podemos ser felices de alguna manera u otra, tarde o temprano.— Guiñó un ojo, viendo unos segundos a Jinyoung.– ¿Y por qué tanta curiosidad con éste tema?

— Ah, es por un... Primo.— Murmuró lo último sin querer dejar expuesto a Jimin, ciertamente pensando en él mismo.

Son tal para cual ustedes dos.

— ¿En serio?

— Síp, conoció a su pareja pero aún no lo sabe, tendré que hablar con él y deci...— Interrumpiéndolo, la voz de Kookoo y Jinyoung hablándole lo desconcentró.

Debemos comprar pañuelos saliendo de aquí.

— ¡Kookie! ¿Puedes venir a ayudarme? Me rindo, nunca más intentaré hacerlo todo solo.— Jinyoung jadeó cansando y todos oyéndole se rieron del Park casi llorando de la frustración.– Por favor, soy dependiente de Yugyeom y de ti.

— ¡Claro hyung, ahora voy!— Volteándose a Bambam, le sonrió.– Seguimos hablando después, ¿de acuerdo? Tú siempre me dejas con ganas de seguir la conversación Bam.— Se quejó y se dio la vuelta alegremente con Bambam carcajeándose en su lugar, dejándolo ir.– Ahora que te veo casi muriendo hyung, ¿cómo le hiciste cuando no estuvimos la semana pasada?— Se acercó, tomando la libreta de Yugyeom a un costado y el lapicero.

— Pues, luego de llorar en el baño antes de empezar a trabajar todos los días y agradecerle a Chanmi noona y Jae de reducir los comensales a la mitad esos días, di lo mejor de mí.— Colocó las manos en su cadera alegremente, pasándose a su lado común de trabajo y Jungkook se echó a reír.

Con todo mi humano, demuestra que antes valió la pena darte el lugar.

— Hoy no llorarás más hyung, volvamos a los viejos tiempos.— Tronó sus dedos, golpeando su puño con el del mayor feliz.– ¡Bien, estoy a cargo ahora con hyung! ¿¡Entendido!?— Gritó con fuerza, recibiendo las sonrisas de todos.

— ¡Sí Kookie chef!— Con humor, Jungkook ensanchó su sonrisa por la broma del llamado antiguo.

Y sintiéndose bien en el interior, empezó a mandar en la cocina, como algunas veces se imaginó haciéndolo meses atrás, siendo ayudado por Kookoo atento a las órdenes para recordarle y sin querer volvió a pensar en Yugyeom, imaginándose cómo se encontraría al una corriente de calor más ligera atravesarle el cuerpo por unos segundos.

Estoy decepcionado.

— Cuál es tu razón hoy, lobo tonto.— Quitándose el casco, Jungkook sacudió su cabello, respirando relajado por el aire golpeando en toda su cara una vez se detuvo frente a su casa, contento de llegar una noche más.

Mi plan de la noche era oírte contarle al omega rubio de su lazo con el alfa pelinegro y reírme de sus lloriqueos de frustración y miedo.

Pero no, justamente hoy se le ocurrió a la beta jefa y al alfa jefe retenerlo con los demás humanos y arruinarme todo.

Otra vez vuelvo a odiarlos.

— Ya tendrás tu momento, deja de chillar, yo estoy feliz porque soportaría cincuenta, "¿estás seguro?".— Bufó, bajándose de la motocicleta y la llevó al pequeño compartimiento donde siempre la guardaba, cerrándolo con una de las llaves en su bolsillo y fue a la puerta, entrando a su casa en cuestión de segundos.– Me sorprendería que dures una semana sin odiarnos.

Si dejan de ser tan estúpidos podría considerarlo.

— En la humanidad eso jamás pasará, pierde las esperanzas.— Soltando un largo bostezo, estiró sus brazos, y se quitó la chaqueta, sintiendo a Kookoo gruñir molesto.

Pueden ser tan buenos como nosotros, pero siempre deciden vivir por sentimientos, y amor, y te amos, y te quieros, y sus emociones, y todas esas cosas asquerosas.

Se complican mucho, demasiado, ya estoy harto.

— Es porque siempre pensamos con la cabeza y no el... Ya sabes, te lo dije varias veces.— Susurró, aclarándose la voz.

El pene, dilo, sólo dilooo.

Te lo voy a deletrear si no te atreves a decirlo.

— Lobo pervertido, no lo haré.— Gruñó de vuelta, fijándose en la soledad de su hogar aquella noche y fue a la cocina, sacando una botella de agua en el refrigerador como siempre.– Como sea, si te sigo el juego ya sé de qué manera terminará.— Dándole largos tragos a la botella helada, jadeó.– Y no tengo ganas de pelear contigo.

No me dejas divertirme en paz.

Estoy cansado de verte hacer lo de siempre, como volver a bañarte, cenar, acostarte a ver tonterías en ese aparato, algunas otras te pones a...

Callando al canino, y como una salvación para Jungkook de una vergüenza, una llamada repentina llegó a su teléfono en su mochila, haciendo levantar a Kookoo ladeando la cabeza y el Jeon fue rápidamente a la bolsa, abriéndola apresurado antes de que dejara de sonar y sus ojos se abrieron de extremo a extremo cuando leyó el nombre en la pantalla.

Tu soulmate te habla, humano.

Divertido, Kookoo lamió su pata, sintiendo a su humano nervioso de repente.

— Cállate, sólo lo dije una vez.— Apretó los dientes y el canino se guardó el comentario de no referirse a exactamente ese día, observando a su humano contestar la llamada de Yugyeom a punto de terminar y colocarse el teléfono en la oreja.– ¿Hola?

— Hola Kook.— Sonriendo inconscientemente por oír la voz del pelinegro, salió de la cocina.– No sé si es buena hora para hablar, ¿estás libre? ¿No estás ocupado?

— No, para nada, estoy libre.— Contestó de vuelta, metiendo una de sus manos a sus bolsillos.– ¿Cómo estás? No sé nada de ti desde el sábado.

Me encantas preocupado djaldjaksjaks.

Soy feliz.

Kookoo volvió a mover su cola, imaginándose a Kyum hablándole a su humano igual que él.

— Iugh, hablas como en esas conversaciones incómodas de amigos que ya ni se quieren o son desconocidos.— Calmándose por oír a Yugyeom ser él mismo y no llamarlo tal vez en medio de síntomas de celo, Jungkook bufó, ocasionando una risa en Yugyeom.

— Yah, te estoy preguntando cómo estás por tu celo, pero si quieres podemos volverlo incómodo, respóndeme "bien, ¿y tú?"— Sentándose, se soltó a las carcajadas con Yugyeom, negando ante su broma con el pelinegro.

— Mala interpretación, lo siento.— Contestó Yugyeom del otro lado de la línea, dando un largo respiro.– A como cabe, bien, estoy pasando el último rato con algunas cosas pero ya volvió el Yugyeom normal, no el que quiere romper todo y desquitar sus asuntos.— Bromeó, sonando como si se hubiera agachado a recoger un peluche y unos ladridos resonaron de fondo.

— Ow, ¿tienes un perrito?— Jungkook dejó caer su cabeza por completo en el mueble, oyendo más de esos ladridos.

Una pulga.

Uy no, si estoy feliz con esa gata lejos ojalá éste no sea un problema.

— Mi hijo verdadero, de hecho.— Gruñendo, Jungkook se cruzó de brazos molesto por la risa burlona de Yugyeom.– Se llama Dalkyum, es un pomerania.

Awww, otra bola de pelos.

Ignorando a Kookoo, Jungkook sonrió, jugando con una de sus cintas.

— Debe ser una ternura, con razón sus ladridos sonaban tan pequeños y adorables.— Rió, con Yugyeom soltando un sonidito de afirmación.– Y me alegra de que estés mejor, Jinyoung hyung y Bambam dijeron que les dijo tu amigo Mingyu.— Ironizó lo último mientras Yugyeom bufaba.– Que ésta ocasión fue peor tu celo, y por cómo te fuiste tan apurado ese día en la noche creí que ni siquiera llegarías a casa.

— Sí, no me quise ir así a propósito, sólo ocurrieron unas... Cosas.— Murmuró lo último, volviendo en sí.– Apenas llegué a mi departamento me encerré y no volví a salir, únicamente a recoger la comida que Mingyu me llevaba, pero fue muy raro, los dos días los sentí horribles, exceptuando hoy hasta la tarde que me relajé.— Contó, sonando como si tuviera una mueca.– Normalmente el peor es el primero, me mata, y para sorpresa mía, ahora fueron los dos, recargado al triple, no sé qué me sucedió.

Yo sí sé.

— La verdad sí es algo extraño, ¿tu lobo no te explicó a qué se debió?— Permitiéndose acostarse por completo en el mueble, Jungkook cerró los ojos, volviéndolos a abrir para mirar el techo.

— Absolutamente nada, y tiene su razón, está indignado conmigo desde ayer porque sólo lo dejé salir en la noche y parte de la madrugada.— Acusó, respondiendo algo del otro lado que no iba para él y se rió cuando escuchó a Yugyeom gruñir seguramente en contra del canino.– Y justo me acaba de maldecir, sí, tardará unos días pero luego se le quitará lo MOLESTO.— Volvió a gruñir, asustando un tanto a Jungkook aunque se recompuso en cuestión de segundos.– Lo tuve que detener porque estuvo a punto de salir del departamento.

— En definitiva, son iguales.— Jadeó molesto.– Kookoo todo el tiempo quiere que salga y me la pase buscando un...— Pausando, se dio cuenta de lo que iba a decir.– O-omega, varias veces me ha hecho pegarme en la ventana o intentar salir de mi casa.— Sintiendo a Kookoo pararse de derecho, se tragó la gracia queriendo salir de sus labios gracias a la indignación reflejándose en él.

No me gustan los omegas, para empezar.

Y segunda, necesitamos un alfa.

No te lo tengo que estar repitiendo todos los días, jum.

— Kyum una vez estuvo por romper el ventanal del piso, creyendo que los humanos también podíamos caer como gatos desde el sexto piso, literalmente.— Yugyeom coincidió y Jungkook balbuceó asombrado.– Lo sé, lo sé, una muerte segura y él sigue diciendo que no nos hubiera pasado nada.— Comentó molesto, decidiendo cambiar de tema.– Sin embargo, hay algo que me interesa mucho desde hace rato, ¿qué tal les fue ayer y hoy en el restaurante?

— ¡Oh, cierto! Me imaginaba que me hablabas por eso y nos pasamos a otros temas, lo siento.— Sonrió, agarrándose las mangas tranquilamente.– Todo bien, la verdad no me esperé que hicieras tanta falta en la cocina, pero después de ver a Jinyoung hyung tan estresado, muriéndose y sufriendo ataques de nervios, en definitiva haces falta.— Soltó una risilla, encubriendo algo en su mente y Yugyeom soltó una carcajada.– Me encargué de hacer todas las cosas junto a él, dirigí unas contadas tres o dos horas, no me acuerdo, pero fue extraño sin tenerte ahí gritándole a todos que se apuraran y luego sonriendo como buena gente.— Inquirió mientras el pelinegro parecía sonreír del otro lado.

Igual es bien tierno, no puede ser malo ni dos minutos.

Bueno, sí pudo contigo, pero es tierno.

Kookoo se sentó con la cola entre las patas, oyendo atento la conversación de los dos humanos.

— Yo sé que me aman, no hace falta decirlo.— Respondió con felicidad y Jungkook rodó los ojos divertido.– Debió ser bueno encargarse los dos días del restaurante, gracias por hacerlo con hyung.— Jungkook afirmó, tragándose su sonrisita después de oír aquello.– ¿Y no pasó nada nuevo aparte de hyung sufriendo?

— Sí sucedió algo, incluso podría decirte que te sorprenderás.— Emocionado, Jungkook soltó una risilla antes de continuar.– ¿Te acuerdas del problema de tu teléfono? Lo que ocasionó nuestra pelea, y todo lo demás cual prefiero olvidar excepto la tregua.— Habló, esperando unos segundos antes de que Yugyeom respondiera.

Siempre va a vivir en nuestras memorias, humano, no se borra.

— Por supuesto, ¿descubriste quién fue?— Feliz de oír a Yugyeom creyendo que no fue él, Jungkook prosiguió.

— Síp, y es quien menos te lo puedes imaginar.— Pausó, mordiéndose la uña.– Fue Jin hyung.

— ¿¡Qué!?, ¿¡Jin hyung!?— El grito de Yugyeom lo hizo apartarse unos segundos del teléfono, soltando una risilla animada.– ¿Por qué él haría algo así?

Porque es un buen humano que hizo algo malo para hacerlos pegarse y mejorarse en cuestión de horas.

Sigue sonando bien en mi cabeza.

"A ti qué no te suena bien".

Que tú seas tan bobo.

— Tuvo sus razones, me explicó todo hoy y se disculpó.— Comentó, haciendo como que no escuchó a Kookoo.– Ese día en la cocina, Jin hyung me contó que me escuchó diciéndote cosas molestas y tú me respondías de vuelta, lo podrás recordar bien.— Incómodos, Jungkook y Yugyeom decidieron seguir derecho con el tema.– Era obvio que después de tanto tiempo viéndonos y oyéndonos pelear, se cansó, como todos los demás, así que su plan fue ir a los vestidores mientras nosotros estábamos ocupados, abrir nuestros casilleros y meter tu teléfono en mi mochila, ahora que lo pienso, por eso había otro olor en mi casillero pero no logré descifrarlo.— Murmuró pensativo.

— ¿Y cómo supo nuestras contraseñas?

Cierto, lo único de ese omega que no me agrada es que es demasiado chismoso.

Ya ni tú.

— Se me olvidó preguntarle ayer, pero hoy me acordé y me dijo que se sabe nuestras contraseñas, al parecer tú y yo ponemos nuestra fecha de nacimiento en todo.— Rió junto a Yugyeom.– También se sabe la de Bambam, Jimin, Namjoon y... Sabes, tal vez deberíamos cambiarlas.— Frunció el ceño al percatarse de la poca privacidad que tenían con SeokJin.

— Esa es buena idea.— Confirmó Yugyeom, aclarándose la voz.– Puedes seguir.

Ya lo aburriste.

"Nadie te habló".

Que lástima, yo hablo cuando quiero.

— Sí, sí, a eso voy.— Levantó la mano como si Yugyeom pudiera verle.– Al final, hyung se sintió terrible porque nunca se esperó que llegáramos a ese grado de golpearnos y hacer todo lo demás, él sólo quería hacernos pelear, gritarnos nuestras cosas de una buena vez pero se arrepintió al vernos en la piscina todos golpeados y con Chanmi y Jaebeom furiosos, entonces cuando dejaron de hablar con nosotros en el hotel, volvieron al autobús, no dijeron nada y empezaron a marcharse, decidió confesar frente a todos lo que hizo, por lo que si nos habían despedido, pedía a cambio lo despidieran a él porque él lo provocó.— Sonrió y Yugyeom soltó un sonidito enternecido.

— ¿En serio? Otros no hubieran hecho eso, hyung es muy bueno.— Yugyeom murmuró admirado, dejándole hablar.

— Es lo mismo que pensé.— Bostezó, recordado lo demás.– Hyung se enteró por parte de Chanmi noona y Jaebeom hyung luego, que ambos ya sabían de eso porque mientras nos cambiábamos vieron las cámaras y de alguna manera comprendieron el porqué lo hizo, así que la excusa de despedirnos fue simplemente para hacernos sentar cabeza y amigarnos de una buena vez.— Rascando su nuca, apretó los lentes.– Y frente a Bambam, Jinyoung y Jimin me pidió disculpas, animándose ya que Jinyoung hyung le insistió en decirme, estuvo intentando toda la semana pero temía que no lo perdonáramos, hasta ayer al darse cuenta como yo lo perdoné y estoy seguro tú lo harás igual.

Y como que no lo hace.

Ah, mentira, si es más buena gente tú, amargado.

— Fue un mal método, eso debemos admitirlo ambos.— Contestó de inmediato, aunque sonando contento.– Pero tienes razón, nos ayudó bastante y ahora estamos muy bien, resultó mejor de lo que pudo imaginarse ese día, entonces es obvio que también lo perdono, hyung nunca haría algo así sólo con el fin de sacarnos de allí, o eso creo.— Susurró inseguro lo último.

No me sorprendería si esa es una opción, hasta yo los sacaría si me canso de ustedes.

Riéndose del gruñido de Jungkook hacia él, Kookoo dio vueltas hasta hacerse una bolita en su lugar, relajado.

— Tampoco lo descartes, hyung es muchas cosas a la vez, sin embargo, el hecho de hablar y confesar frente a todos fue bastante valiente, estaba dispuesto a ser despedido por nosotros, de alguna manera me conmovió.— Se encogió de hombros, obteniendo la afirmación de Yugyeom del otro lado.

— Es cierto, mañana hablaré con él apenas llegue, otra vez me tendrás molestándote todo el día.— Burló el pelinegro y Jungkook soltó un quejido en falso.

— ¿No le puedes pedir a tu lobo que te haga durar más el celo? Eres molesto y me gusta estar a cargo.— Susurró con gracia en lo que Yugyeom contestaba negativamente.

— Lo siento, los celos tienen un límite, ¿te imaginas estar todo un mes en celo? Ugh, no, que horror.— Yugyeom pareció temblar y Jungkook ni siquiera lo quiso imaginar.– Si yo sé que me extrañaste Jeon, sólo tienes que admitirlo.

PFFFFF.

Para hacerlo admitir algo así primero se acaba el mundo y se vacían los océanos.

Imposible.

— Dices tantas tonterías.— Risueño, Yugyeom suspiró.

— Vamos, es fácil decir que extrañaste al risa de bruja en tu vida por dos días.— Pausó, sonando de pronto insinuoso.– Incluso podría decir que te preocupaste por mí, fuiste a preguntarle a Bambam y Jinyoung cómo me encontraba.— Expuso, mientras Jungkook se quedaba derecho en el sofá.

Uuuuh, te atrapó.

Quedándose en silencio, Jungkook mordió su labio algo pensativo, y Yugyeom del otro pareció sorprendido al oírlo callado sin decir nada, por lo que parpadeó, intentando no mal entender al Jeon sin decir absolutamente nada ya que se quedó sin palabras, únicamente supo mantenerse estático y Yugyeom carraspeó.

— ¿Jungkook? ¿Sigues ahí?

— E-estás loco, no me preocupé.— Bufó sonrojado, sintiendo a su lobo emocionado de repente y volvió a la normalidad en cuestión de segundos, decidiendo devolver la broma.– Más bien quien creo que me extraño fue otro éstos dos días.— Rió, aún viendo el techo avergonzado de uno de sus pensamientos.

Soooo.

Let me be your maaan.

I will always love yooooou, and you love meeeee too.

Estaremos juntoooos paraaaa siempreeee.

Moviéndose, el canino cantó como si aullara, pensando en todas las indirectas tontas de esos humanos y Kyum debía estar pensando lo mismo que él.

"¿Puedes cerrar el hocico? Que molesto eres".

Toda tu vida me amarás.

— Claro q-que no, no pensé en ti ni un segundo.— Volviendo a pelear con alguien en la otra línea, Jungkook rió puesto Yugyeom parecía enfadado como él con Kookoo.– Y como sea, ¿hoy no estás con tu hermana ni con Jimin hyung?

— Nop, Jiminie no podrá venir porque se quedó junto a Chanmi y Jaebeom a revisar algunas cosas en la zona de la mesa como los demás, y mi hermana sólo viene de vez en cuando luego del trabajo, casi siempre estoy solo los inicios de semana.— Infló las mejillas, revisando la hora en su teléfono y se dio cuenta que estaban por ser las once.– Aunque debo colgar ahora, aún no he cenado y ya es tarde, lo siento.

— Ah, no te preocupes, al menos pude saber cómo les ha estado yendo y gracias por contarme todo.— Si Jungkook pudiera ver en esos segundos a Yugyeom, sabría muy bien que el pelinegro estaría sonriendo tan en grande que se notaba en su voz.– Cena bien, nos vemos mañana.

— Claro, nos vemos mañana...— Pausó, de alguna manera sin querer colgar y Yugyeom se quedó al oír esa pausa, frunciendo el ceño ligeramente.– Sí, nos vemos mañana.

— Nos vemos.— Volvió a contestar, y Jungkook afirmó, sonriendo levemente.

— Nos vemos.

Que manera de coquetear.

La clásica de quién cuelga primero, porqué los humanos son así de bobos.

— Nos vemos, Kook.— Yugyeom rió, sintiendo su pulso acelerarse.

— Nos vemos, Yug.— Jungkook mordió su lengua, evitando pensar en lo dicho por el canino.

— Adiós.

— Adiós.— Riéndose al mismo tiempo que Yugyeom, abrió los ojos, dándose cuenta de unas vez por todas lo que estaba haciendo.– B-bueno, sí, ¡adiós!— Rápidamente cortó, sonrojándose hasta las orejas de la vergüenza y Kookoo se rió de él.

Humanos con una neurona.

Nada más les faltó el "cuelga tú primero" y las risitas de enamorados.

Sonriendo malicioso, Kookoo se lamió un costado y Jungkook bufó.

— Cállate, ni siquiera sé porqué hice eso.

¿Te la vuelvo a cantar? Me salen bien las de amor.

— ¡Suficiente por hoy!— Gruñó, levantándose del mueble para ir a su habitación.– Estoy quedando loco.

Por él.

— ¡Eres un fastidio Kookoo!— Exasperado, se tomó del cabello, negando repetidas veces.

¡Vamos humano!

Tienes que admitir que hay algo raro con ese humano desde que se conocieron.

Como ya te lo hice ver, no sé... ¿100 veces?

— No hay nada raro con Yugyeom, tal vez con Nam hyung sí.— Sonrió, pensando en el moreno, y la quitó de inmediato al notar la ceja alzada del canino.– Yugyeom es sólo un buen amigo, y ya, quizás en un futuro un mejor amigo.

¿¡Por qué no admites lo que ves y oyes!?

No eres tan ciego para darte cuenta, humano estúpido.

Él podría ser tu...

Y respirando profundo, Jungkook calló a Kookoo, negando.

— No lo es Kookoo.— Tragó, imaginándose todos los problemas que traería a su vida aceptar algo así y miró a otro lado.– Yugyeom no es mi pareja predestinada.

Bueno, con tu permiso, me iré a suicidar.

Fue un placer, me rindo.

Martes.

Observando por la ventana en una tarde tranquila y fresca de entre semana, Yugyeom recargó la mano en su mejilla, esperando ciertamente aburrido a que el autobús avanzara mucho más rápido rumbo a la parada que lo llevaría a las calles del restaurante, y Kyum igual o peor de aburrido estiró las patas, soltando un largo bostezo además de exagerar en su voz sin saber con qué entretenerse, no como su humano distrayéndose entre ver lo típico en una ciudad.

"¿Ya me hablarás?". Yugyeom cuestionó en su mente al canino, éste ladeando la cabeza a otro lado molesto.

No.

"Estás aburrido, no tienes con qué entretenerte y soy tu mejor opción".

Sí tengo otra opción, me bañaré.

Entonces largo de mi vista, traidor.

Indignado, Kyum se dio la vuelta, dándole la espalda, y Yugyeom rodó los ojos molesto.

Luego de pasar dos días de celo terribles, conservar pensamientos para nada sanos o normales, querer desquitar su molestia en cualquier cosa presente y al recobrar la cordura una noche atrás, Yugyeom por fin se sintió listo de ir al restaurante a trabajar, con Kyum todavía enojado de no permitirle estar más tiempo fuera, pero obviamente tenía sus razones por las que detuvo la libertad del canino, como el agarrar su teléfono para intentar marcar los números de sus amigos omegas o betas en el restaurante, hacer el vago intento de salir del departamento, buscar imágenes inapropiadas y casi exponerlo frente a Mingyu al querer pedirle a su amigo un producto completamente innecesario.

Sin embargo, dándole muy igual la molestia del lobo desde la noche pasada y esa mañana, se alistó tranquilamente, no sin antes limpiar su casa de todo lo que tiró, desacomodó por su estrés, se baño por última vez con agua helada y por fin pudo saludar a Mingyu así como a Minhee al medio día, quedándose con ellos un rato y tener que irse una hora y media después puesto debía tomar un autobús al haber dejado su automóvil en el restaurante dos noches atrás.

Para Yugyeom, sin duda fue uno de los celos más difíciles de sobrellevar, peor que el primero, controlándose demasiadas veces en imitar a Kyum y hacer las cosas que jamás se atrevería estando "normal" en su día a día, no obstante, el cuerdo de los dos en esa situación siempre era él y Kyum era el desesperado buscando aliviarse de la manera más común y pervertida existente en el mundo común sin importarle que podía traer malas consecuencias. Aunque Yugyeom en muchas ocasiones se lo hizo ver, al canino no le importó, él sólo necesitaba saciar su dolor interior y exterior, dándole muy igual los demás, llevándolo a estar enojado con Yugyeom y no explicarle porqué ese celo fue tan horrendo.

Yugyeom, lo quisiera o no, tomó con gracia todo ese asunto, ya que su lobo era bastante divertido estando molesto y le costaba encontentarle, incluso le había pedido a Mingyu por mensaje si podía comprar algunos filetes para él mientras Kyum estaba dormido, pero eso sería hasta la noche.

"Te di libertad un medio día, yo estaría feliz con eso".

Tú, yo no.

Yo quería MÍ día.

Esperé seis meses para esto y así me pagas, maldito humano malvado.

Volteando únicamente a decirle aquello molesto, se siguió en su lugar, lamiéndose una pata furiosamente.

"¿Qué querías que hiciera? Ya te lo pregunté cinco veces, no iba a permitir una denuncia por acoso sexual gracias a ti". Yugyeom apretó los puños, fijándose en la hora en su teléfono y pensando que no le faltaba demasiado por llegar a la parada.

Lo que te puede hacer una demanda.

Dramático.

No es como que fuera a asesinar al omega o la omega.

"Qué voy a hacer contigo, creí que los lobos tenían más consciencia". Cruzándose de brazos, negó, y Kyum finalmente se volvió a él, entrecerrando los ojos.

Debo explicarte algo.

Nuestro celo acaba de terminar básicamente ayer antes de llamar al amor de tu vida y fingir que fue porque querías saber del restaurante.

¿Crees que a mí no me afectan éstas cosas? Era mi momento de brillar y liberarme, pero no, ahora estoy sentimental y quiero llorar por todo aparte de sentirme indignado cuando los alfas no son así.

QUÉ ME HICISTE.

"Okey... Yo no te hice nada de eso". Yugyeom parpadeó sorprendido por Kyum tirándose dramáticamente a un lado. "Si quieres llorar es porque algo te afecta, ¿qué es?"

Quiero un omega.

Vamos a morir, tú tienes 24 años de existencia, yo más, se nos va a acabar el tiempo y moriremos solos.

Nadie quiere a un alfa treinteañero sin futuro como tú en algunos años.

Y no me quieres dejar tener cachorros, nunca te vas a casar, no vamos a tener una mordida en el cuello de alguien, vamos a tener que asistir a los baby showers de tus amigos sin un omega a tu lado y yo moriré de tristeza porque no tengo a nadie.

"Bien, creo que entiendo porqué estás así de exagerado hoy". Con todas sus fuerzas, Yugyeom se tragó la carcajada queriendo salir de sus labios y Kyum jadeó molesto luego de lloriquear. "Estás teniendo una crisis, además que como ésta vez nuestro celo fue muy pesado, te está afectando al modo de meterse en tus sentimientos".

¿¡Yo!? ¿¡Una crisis!?

Que estúpido, yo no tengo eso...

Levantando la cabeza a Yugyeom sonriendo burlón, se sentó correctamente.

¿Qué es una crisis?

"El sentirse triste o preocupado sobre qué harás en un futuro y en tu caso, es qué pasará si estamos creciendo sin nadie a nuestro lado todavía, es como los adultos de edad media al darse cuenta que dejaron de ser jóvenes". Contó en su mente, suspirando con alegría. "Además, estás sensible porque no te di tanta importancia en éste celo y me dio igual si querías estar afuera o no, si querías desquitarte a tu manera, MENOS EL TEMA DE SALIR, pero siento eso".

Me alegra que lo admitas.

Pero... Creo que sí, es sólo que te estás volviendo más grande, ¿y si nadie se fija en nosotros después? Feos, arrugados y nada fuertes o autoritarios.

Agachando la cabeza, Kyum rascó con su pata bajo suyo, y Yugyeom estuvo por soltar un sonidito de ternura.

"Es bueno ser un alfa tranquilo, ¿sabes? Además, creo que dejamos muy en claro la semana pasada que es mala idea meterse con nosotros". Yugyeom insistió, recibiendo una sonrisita del canino. "Entonces no te desanimes, en algún momento conseguiremos a alguien, no estamos tan mal, o eso creo." Viéndose a si mismo, Kyum bufó.

Tus camisas de anciano me siguen sin convencer.

"Pero como decía, sea omega, beta o incluso alfa". Inquirió lo último fastidiado, con Kyum aceptándolo ciertamente dudoso. "No nos moriremos solos, y algún día tendrás esos cachorros que tanto quieres, ¿de acuerdo?"

¿Me lo prometes?

"Te lo prometo". Levantó las manos, sonriéndole al lobo y éste asintió.

Bien, me parece esa idea.

Te perdono.

Moviendo la cola, Kyum volvió a estar feliz con Yugyeom, el pelinegro festejando internamente su victoria.

Y no entiendo porqué tú estás tan tranquilo con tus sentimientos y emociones cuando deberías estar como yo.

"Esos temas no me suelen preocupar a mí, por el momento estoy bien con mi soledad, aunque tú no". Se encogió de hombros, observando a lo lejos la parada. "Sé que algún día podré estar con alguien y no hay nada más importante, mis appas están bien, yo estoy bien, mis amigos están bien, tengo un buen trabajo y...". Pausando, Yugyeom vio a otro lado. "Tal vez quiero algo imposible, pero no me afecta mucho".

¿Seguro? Porque es vergonzoso verte sonrojado por culpa de otro "alfa".

"Ese sería mi único problema actualmente". Pasó saliva, coincidiendo con el lobo. "A veces me confunde, pero me gusta estar con él y... No lo sé, es algo imposible, como ya te lo mencioné.

Yo no lo veo tan imposible, sería un problema con el tema de dominación, pero eso se resuelve con el tiempo, porque claro, YO soy el de arriba.

No te voy a dejar opciones.

"Ahí el problema de porqué me gustaría que fuera omega, aunque le guste Nam hyung". Formando un puchero, Yugyeom se levantó de su asiento una vez paró el autobús y bajó, exhalando. "Si tan solo..."

Aún te queda ver si es tu pareja o no,  podría cambiar muchas cosas.

Pero claro, estás tan acabado que es la fecha y no puedes agarrarle la mano.

La vida no te quiere.

"Lo supe desde que me dio un lobo que se le pasa demostrándome cuánto me desprecia a veces". Bufó, provocando la alegría en Kyum sentado.

Es un honor, mi humano.

Me encanta hacértela imposible.

Como ahora, que si tienes vista de águila y no estás ciego, el amor de tu vida está a dos calles de aquí caminando rumbo al restaurante.

Volteando de inmediato, Yugyeom parpadeó, observando con dificultad una silueta caminando tranquilamente a esa distancia de él y sin querer sonrió, apresurándose en ir tras el castaño.

Eres tan tierno, igual que un cachorro.

Aunque en definitiva, será un problema para ti, estás caído por él.

— Y tú por Kookoo.

NO LO DIGAS EN VOZ ALTA, HUMANO IMBÉCIL.

D-digo, de qué estás hablando.

Estás loco... Imbécil.

Nervioso, Kyum dio vueltas, ignorando la diversión en Yugyeom ahora a una calle de Jungkook y agradeciéndole de decir la verdad al canino.

— Tú solito te acabas de exponer lobito, estás rendido por ese lobo, ¿crees que no me di cuenta el día que me provocaste en separar a Jungkook de hyung?— Alzó una ceja.– Yo colaboré, no lo niego, pero tú me provocaste más a verlos y enojarme.

Shhhh, ¡nos oirán!

Maldito humano, otra vez me caes mal, ya me voy.

Escondiendo la cabeza entre sus patas, evitó verle y Yugyeom soltó una risita, por fin alcanzando a Jungkook entretenido en su teléfono sin notar a nadie más pasando a su lado o detrás de él, por lo que aprovechó la oportunidad en ir y sonriente, cubrió sus ojos con sus manos, mordiendo su labio divertido al ver a Jungkook dar un saltito de la impresión.

— ¿Sabes bien que puedo oler...?— Antes de que Jungkook pudiera terminar la pregunta, descubrió uno de sus ojos con su mano, cubriendo ambos con una sola y la otra la llevó a su nariz, riéndose bajito de la queja de Jungkook.– Esto egs tampa.

Que adorables.

Y que asco, amor humano.

Ligeramente feliz de volver a ver a Kookoo, Kyum de levantó y el otro lobo le vio, moviendo la cola tanto como él lo hacía.

— Quién soy.— Oyendo a Jungkook bufar por el tono grueso en su voz, el castaño guardó su teléfono en su bolsillo, levantando las manos para tocar el dorso de las de Yugyeom con cuidado, frunciendo el ceño y el pelinegro se avergonzó.

— Yugyeom.— Respondió rápidamente, sorprendido a Yugyeom por ello y finalmente lo dejó libre, Jungkook respirando normal de nuevo.

— ¿Cómo lo...?

— Tienes manos grandes.— Sonrió el mayor, aclarándose al segundo como si no se hubiera fijado antes, sonrojándose.– Y-y cuando intentaste hacer la voz gruesa te ganó la chillona.— Parándose al lado del otro, se volvieron a sonreír.

El amoooor, el amor, el amor, el amooor.

Bien fijado él, ¿te diste cuenta?

— Buen punto, creí que sería más difícil.— Puchereó, cruzándose de brazos.– Que sorpresa verte por aquí, y solo, pensé que hoy vendrías en tu motocicleta.

— Lo iba hacer, pero Jiminie me abandonó junto a mi hermana por irse a una exposición de comidas y postres internacionales de todos los años y otra en la misma área sobre cosas exclusivas de disney, entonces me rogaron que les prestara la motocicleta y aquí estoy.— Se señaló, aspirando.

Si se les olvida traer la arepa me voy a molestar.

— ¿Y por qué no fuiste con ellos? Según sé te encanta la comida.— Obteniendo un golpecito molesto de Jungkook, se rió con ganas.

— No tenía ánimos, prefería trabajar hoy.— Se excusó el castaño, sintiendo a Kookoo removerse.

Mentiroso, lo querías ver a él.

Ojalá pudiéramos tener una opción de decir algo al día y que nos oigan todos, ugh.

— ¿Y cómo te encuentras hoy? ¿Todo bien?— Yugyeom afirmó contento a las preguntas de Jungkook siguiendo luego de ignorar a Kookoo.

— Me siento como nuevo, recargué las baterías.— Levantó ambos pulgares y Jungkook ensanchó su sonrisa.

Las doble a y las triple a, no sé si me doy a entender.

Kyum inquirió, sonriendo pervertido y el pelinegro nunca tuvo tantas ganas de darle una patada como otras veces mientras el lobo seguía viéndose de vez en cuando con Kookoo.

— Es bueno oírlo, por fin hyung no sufrirá un ataque de pánico y es capaz hasta de besarte.— Bromeó, riéndose junto a Yugyeom al costado.– Ayer se me olvidó decirte, pero todos preguntaron por ti el primer día y Jaebeom hyung ayer luego de terminar su celo, fuiste muy solicitado por tan sólo dos días.— Codeó, chasqueando la lengua al ver a Yugyeom sonreír egocéntrico.

Ni le hubieras dicho.

— ¿Qué te dije? Todos me aman.—  Colocó las manos detrás de su cabeza, y Jungkook le pegó de nuevo, sobándose la zona por el dolor.– Déjame disfrutar mis minutos de fama.— Formó un nuevo puchero.

Que molesto es, por Dios.

Hoy seré una sensación, ¿te das cuenta?

Alzando la cabeza, Kyum se vio a sí mismo.

— No, eres una molestia.— Jungkook le sacó la lengua.– Te iba a preguntar porqué venías también caminando y acusarte de acosador, pero acabo de recordar que tu auto sigue en el estacionamiento.— Habló Jungkook, metiendo las manos a su sudadera gris de ese día y Yugyeom asintió.

— Jinyoung hyung me preguntó si se lo llevaba y le dije que no, prefiero llevármelo hoy en la noche, a veces me gusta caminar.— Explicó en lo que el Jeon entendía.– ¿Tu autobús pasó antes del mío?

— Oh, no.— Negó, confundiendo a Yugyeom a medida que avanzaban al restaurante.– Mi hermana tiene una pastelería por éstas calles, trabajaba antes ella y estuvo de visita, así que quedamos en venir con Jiminie por aquí, les dejaba la motocicleta y me iba al restaurante caminando.— Explicó mientras Yugyeom abría la boca comprendiendo.

Algún día me gustaría conocer a esa alfa...

Hoy estuvo con ella y no huele muy fuerte al otro aroma, sólo un poco al del omega rubio.

Extraño, ¿no lo crees?

Analizando la situación, Kyum entrecerró los ojos, lamiéndose a sí mismo sin dejar de verles.

— Vaya, me imagino lo emocionados que debieron estar Jimin hyung y tu hermana al punto de faltar a sus trabajos por esas exposiciones.— Jungkook afirmó con gracia, soltando una risilla y Yugyeom sonrió, intentando ignorar lo dicho con certeza por el canino.

— Me fueron a despertar a mi habitación y me obligaron a dejarlos llevarla, sólo porque me prometieron traerme algo de comida.— Colocó los ojos en blanco y de pronto dio un saltito, chasqueando los dedos al acordarse de algo, asombrando a Yugyeom por la rapidez con la que Jungkook revisó su mochila.– ¡Cierto! Antes de que se me olvide y cambiemos de tema, quería darte esto, es tuyo.— Levantó un dedo, pidiéndole un segundo al detenerse.

¿Su corazón? Sí.

— ¿Qué es?— Cuestionó curioso, y Jungkook sacó del cierre más grande una libreta pequeña junto a un lapicero, entregándoselos a Yugyeom sonriente.

— Ayer me los llevé por accidente en el pantalón y preferí guardarlo en la mochila para dártelo hoy directamente a ti.— Tomándolo, Yugyeom se sintió feliz de ver a Jungkook hacer esas pequeñas acciones.– Es tuya, así que, ya sabes, no tienes que comprar una nueva libre ni un lapicero.— Rió.

Awwww, eres una ternura.

Que adorable es.

— Gracias Kook, por traerlo y dármelo, el Jeon de antes me los hubiera tirado a la cara.— Empujó un poco, soltando una carcajada de Jungkook gruñéndole enfadado y avergonzado.– Incluso un pajarito me contó que preferiste dejarme a mí el escoger quiénes trabajarían en la boda junto a hyung en vez de hacerlo tú con él.— Comentó como si estuviera desinteresado, pasando los brazos detrás de su espalda y Jungkook se rascó una mejilla, viendo a otro lado.

— Maldito Bambam.— Susurró, fijándose en la sonrisa burlona del pelinegro.– ¡Y-yah! Déjame en paz, en serio eres una molestia cuando te lo propones.— Chilló, alejándose de él molesto y Yugyeom fue detrás suyo a las risas.

No te lo voy a negar, a mí también me estresa.

No sé porqué siquiera eres su amigo, humano bobo.

Kyum negó y Yugyeom apretó los labios, decidiendo no responder nada.

— Eres adorable siendo bueno, Jeon, me agradas.— Comentó, ocasionando un bufido en Jungkook delante suyo y parpadeó, viendo la libreta en sus manos junto al lapicero, levantando la cabeza hacia el más bajo caminando sin ninguna expresión en el rostro, interesado por algo en su mente de repente.– Oye, Kook, sé que no puede ser una gran pregunta para ti pero, ¿se sintió bien mandar por dos días?— Cuestionó desde atrás, y Jungkook se detuvo por un momento antes de continuar, tomando aire.

— Supongo, se sintió bien después de todo, me recordó a los viejos tiempos con hyung.— Metiendo las manos a sus bolsillos, se encogió un poco, pensando mejor en su respuesta.– Y claro, es lindo al menos dos veces al año.— Sonrió, sintiéndose de alguna manera desanimado y Yugyeom lo notó.

Ah, de pronto me siento triste.

Kookoo se recostó, dejando su cabeza caer por completo y Kyum se acercó a él, ladeando la cabeza con un gesto.

Humano estúpido, porqué le preguntas.

Molesto, el canino le reprochó a Yugyeom, gruñendo bajito.

"Espera".

— Ayer cuando dejamos de hablar estuve pensando un poco.— Murmuró, regresando a su costado y llamó la atención de Jungkook.– No creo que sea mala idea dejarte el mando a ti de vez en cuando, me interesa ver cómo lo harías y seguir tus órdenes.— Aunque se sintió de pronto ilusionado, Jungkook tardó unos segundos en negar a la propuesta, mordiendo su labio.

— A Chanmi noona y Jaebeom hyung no les agradaría la idea, es como quitarte tu puesto.— Se cruzó de brazos, observando al frente.– Y Yugyeom, no te tienes que sentir mal por esto, lo noto apenas me ves, después de todo lo que acabamos de pasar, comprendí que tú mereces más el puesto, no yo.— Alzando una curva pequeña en sus labios, ladeó la cabeza, conectando sus ojos con los de Yugyeom apenado.– Sólo me tomará un tiempo superarlo, pero estaré bien.

Deja de empeorarlo maldito.

Te voy a pegar.

— Kook, yo...— Susurró, sin embargo, Jungkook negó repetidas veces, pegándole en el hombro.

— Está bien, ya te lo dije, no te sientas mal.— Soltó una risilla, admirando que llegaron a la entrada del estacionamiento y señaló.– ¿Vamos? Si no nos apuramos no tendremos tiempo.— Sin dejarle responder, le dedicó una última sonrisa, apurándose en saludar a Namjoon, Hoseok, Jaehyun y SeokJin reunidos hablando, mientras Yugyeom sentía una pequeña opresión en el estómago.

"Síp, ya me arrepentí".

Humano bobo.

Soltando un largo suspiró, en el interior se gritó hacer algo respecto al obvio sentimiento de tristeza en Jungkook hablando del puesto, no obstante, por ese momento no podía hacer nada, al menos hasta que pasara el tiempo y a ambos gerentes les pareciera buena idea luego de todo lo que pasó.

— Siempre hay una solución.— Susurró para sí mismo, saludando igual a los mayores en espera por ellos y vio unos segundos a Jungkook, avergonzado de pensar que haría lo posible para volverlo un poco más feliz.

Holaaaa. :D

Nuevamente es un gusto volver a traerles un capítulo más de éste precioso fic. owo💗💗💗

La verdad jamás me esperé actualizar tan seguido, creí que después de un mes no podría y estoy rompiendo mi récord. 😂💖

Pero en fiiiiiin, vayamos al resumen semanal. 👀

Al inicio Kookie se la pasó sufriendo de calores por culpa de Yugyeom, al grado de comer tanto helado como le fue posible y hacer una explosión de azúcar, yo era Jimin al verlo comer eso 😂💖, pero incluso Jiminie no se salvó de las preguntas de Jungkook y sin querer, Kookie sabe que Yoongi es la pareja predestinada de Jimin, tal vez esa información a él le sirva en un futuro, además de lo que le contó Bambam en medio del trabajo y sí extrañó un poquito a Yugy 👀.

Al otro día, Jungkook y Yugyeom hablaron por la noche, diciéndose indirectamente que sí se extrañaron y no supieron cómo colgar 😂, y para finalizar, Yugyeom vio tener una crisis a Kyum así como encontrarse a Jungkook y hacerlo recordar del tema del puesto sin querer. 😔🖐🏻

¿Cómo creen que reaccione Jiminie a la noticia de Yoongi?, ¿Jungkook le tomará importancia a la información de Bamba?, ¿aceptará que quizás Yugyeom es su predestinado?, ¿creen que Yugyeomie pueda hacer algo para arreglar lo del puesto?

¿Qué pasará en el siguiente capítulo? 🧐

Como siempre, o al menos para mí, me encanta volver con mis notas y los capítulos para saber cómo han estado, so.

¿Qué tal les está yendo últimamente?, ¿todo bien en sus vidas?, ¿qué tal les va en su fin de semana o cuando lo lean?

Por mi lado, me encuentro muy bien, ésta semana tuve la oportunidad de distraerme con algunas otras cosas, como salir con mis amigues un rato, hacer más ejercicio de lo habitual, el domingo pasado fui a la playa y casi se me va al pie una tarántula, pero todo bien. owo

Eso podría decir que es lo único interesante, además del lunes hacer un viaje nocturno del cuál acabaré muerta 🥴.

Y la verdad no tengo mucho más importante, sólo que siempre utilicen zapatos y no anden descalzos para evitar riesgos muy posibles si viven en un ranchito con mucha naturaleza como yo. 😙

Sin más, me voy retirando, tengo que irme a cenar. uwu

No se olviden de comer muy bien, tomar mucha agua, cubrirse si hace frío en donde viven y que les amo mucho. 💗

¡Nos leemos luego, cuídense! 😷