Me había puesto la meta de ya no hacer tan largos los capítulos y ahora me contradigo, Dios, ojalá les sigan gustando. 😔💖

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— La pasada noche del martes una llamada a emergencias por parte de un ciudadano anónimo en el estacionamiento para empleados en el restaurante "Honey", al centro de Gangnam, alertó a la policía sobre los hombres más buscados en estos tiempos en Seúl.— SeokJin leyó a través de su teléfono, con todos sus compañeros, meseros, entre otros empleados alrededor de él.– Ambos sujetos fueron encontrados recuperándose en el suelo a punto de escapar, rápidamente fueron capturados e identificados como beta y omega, de nombre Yoo Namseo y Lee Seunyin, ahora siendo procesados en la fiscalía general de Seúl.— Cada uno de los presentes estaba impactado sobre lo que leía el omega.– Los alfas que lograron escapar de estos asaltantes decidieron mantener sus identidades en secreto para evitar la prensa y entre más. Las imágenes de las cámaras del restaurante ya fueron entregadas a la policía solicitando que no las revelen al público y hagan justicia contra estos dos humanos que han hecho daño en los pasados meses.— Con una sonrisa terminó de leer, sabiendo exactamente quiénes eran los alfas mencionados al igual que el resto de empleados.

— Woah Jungkook y Yugyeom son muy valientes.— Murmuró Namjoon aún asombrado.– Eso pasó después de que nos fuimos.

— Es como si estuvieran esperando que Jungkook quedara solo o algo así.— Hoseok rascó su nuca y Bambam lo miró.

— ¿Fue Jungkook a quien asaltaron?

— Eso suponemos, nosotros tres nos fuimos juntos pero Jungkook se quedó todavía antes de subir a su motocicleta, Yugyeom aún estaba dentro del restaurante, entonces creemos que o Yugyeom ayudó a Jungkook, o entre ambos hicieron que quedaran noqueados.— Asintió SeokJin a lo dicho por Namjoon.

Los primeros en llegar a trabajar aquel día, se encontraron con que la escena crucial para la policía ya había sido cerrada y sólo había una cinta amarilla rota en la entrada del estacionamiento, sin embargo, cada uno de los que llegaron fueron atacados por preguntas de los periodistas de los noticieros. Nadie dijo nada ya que tanto Chanmi como Jaebeom se los pidieron a través del grupo de KakaoTalk, aún tenían una plática pendiente con todos una vez dentro del restaurante. Cubiertos de pies a cabeza lograron ingresar a su lugar de trabajo, evitando a toda costa dar respuestas innecesarias.

— Esto es como una película, nunca creí que fuera a pasar algo así aquí.— Jaehyun cubrió su boca aún asombrado y todos le dieron la razón.

— ¿Alguno sabe si Jungkook y Yugyeom sí están bien? Hemos visto cómo han lastimado a las personas en las noticias y me preocupa que hayan salido lastimados.— Taehyung tragó nervioso, tal vez no había intercambio muchas palabras Jungkook, pero si él hubiera estado en esa situación, seguramente Jungkook y hasta Yugyeom estarían igual.

— Yo le mandé mensajes a Yugyeom y me dijo que estaba bien, pero después no me contestó porque ya era tarde, Jiminie debe saber qué pasó con Jungkook.— Bambam levantó la mano para comentar aquello y Jinyoung le dio la razón.– No deben tardar en llegar, Yugyeom me dijo que vendría.— Y justamente Bambam dio en el clavo, sólo que en cambio se apareció Jimin con una mano la cabeza de Jungkook, entrando a la cocina ya cambiados para trabajar. Ambos venían cubiertos con el gorro de una sudadera encima de sus trajes y levantaron la cabeza al mismo tiempo, riéndose divertidos detrás del cubrebocas y extrañados por lo que acababa de pasar.

Jungkook lo primero que vio cuando se quitó el gorro y el cubrebocas fue como todos guiaron sus ojos a la herida en su cuello, cubierta con una gasa pequeña ya que después de llegar a su hogar llamó a Somin, contándole un poco lo sucedido y ella no tardó ni cinco minutos en ir a verlo preocupada, curándole la herida que al parecer sí era un poco profunda pero nada grave o por lo que tuviera que ir al hospital, después Jimin y gran parte de su familia se la pasó llamándole exaltados puesto la alfa no dio muy bien la noticia debido a los nervios que algo le pudo haber pasado a su hermano mayor.

El rostro del castaño se sonrojó y rió nuevamente.

— ¿Qué les pasa?

— ¿Estás bien?— Dijeron todos casi al mismo tiempo, haciendo un coro y Jungkook asintió con una sonrisa.

— Sí te lastimaron, demonios Kook, ¿estás bien?, ¿cómo está tu herida? ¿Yugyeom te ayudó?

— Estoy bien, no fue muy profunda la herida y uhm.— Aclaró, pausando.– No estoy seguro si les pueda contar porque Chanmi noona y Jaebeom hyung me pidieron hablar primero con ellos, pero sí, todo salió bien anoche.— Segundos después Yugyeom entró rápidamente por la puerta, igual que Jimin y Jungkook momentos antes.

Todos encontraron obvio que era él por la altura del alfa y el cuerpo tan característico que tenía, entonces Yugyeom se quitó el gorro, mirando hacia atrás asustado.

— En serio, ¿fui al único que literalmente se le tiraron encima?— Acomodó su cabello desarreglado y el resto se empezó a reír.

— Buscan información, ya sabes cómo son los noticieros Yug.— Se encogió de hombros Bambam acercándose a él y luego le golpeó en la nuca.– ¿Estás bien? ¿Por qué ya no me contestaste? ¿Sabes lo preocupados que estábamos Mingyu, Jinyoung y yo?— Al omega no le importó hacer aquello frente a sus compañeros y Yugyeom gruñó.

— ¡Oye! No te contesté porque eran las dos de la mañana.— Acusó frunciendo el ceño, puchereando.– Y sí, estoy bien, en la mañana estuve ocupado con lo de la policía, Mingyu me fue a ver después.— Luego de ello le dio una mirada rápida a Jungkook y Jungkook una a él, ambos apartándola a los segundos.– ¿Saben dónde está Chanmi noona y Jaebeom hyung? Nos pidieron hablar primero con ellos.— Rascó su pecho apenado por no poder contar nada de la noche anterior, tal como se los dijeron.

— Vinieron hace un rato, deben estar en su oficina.

— En realidad no, estuvimos escuchándolos detrás de la puerta después de que nos "fuimos"— Hizo comilla con las manos la beta, saliendo de su escondite junto a Jaebeom y sacándole risas a los presentes.– Queríamos escuchar qué decían y si podíamos confiar en ustedes chicos, chicas, me alegra que nadie haya hablado con la prensa o hablado innecesariamente, son geniales.

— Los reunimos a todos aquí por una simple razón, y también le pedimos a Yugyeom y Jungkook que no dijeran nada porque los noticieros buscan por todos lados, y son muy capaces de poder encontrar la identidad de Yugyeom y Jungkook sólo para exponerlos en televisión.— Suspiró Jaebeom, abriendo un espacio entre todos y Chanmi se colocó a su lado.– Chicos, me alegra verlos bien y estamos orgullosos de ustedes, en verdad.— Chanmi les sonrió al mismo tiempo del alfa.– Pero hay alguien a quien le gustaría decirles algo también.— Los dos fueron más a los lados y Jooheon se apareció detrás de ellos, con una sonrisa de oreja a oreja, detrás de él Jeol tecleando cosas en una tableta.

— Jooheon-nim.— Saludaron al mismo tiempo y nuevamente en coro, formando varias reverencias y este las devolvió tranquilamente. Jimin se apartó de Jungkook y Bambam de Yugyeom, acercándose a sus amigos a los lados de las mesas y así ambos quedaron en el medio, avergonzándose al tener la mirada de todos encima suyo.

— Buenos días a todos, espero que no hayan tenido muchos problemas en entrar al restaurante, estuve viendo todo el alboroto de los periodistas allá fuera.— Suspiró resignado, no podía hacer nada para sacarlos.– Vengo hoy al restaurante por varias cuestiones, y como se imaginarán, la principal se trata sobre ustedes.— Señaló a los menores, estos sonriendo.– Me pareció necesario venir y ver cómo es que se encontraban, les puedo jurar que jamás me esperé que pasaran por algo así y más aquí, consideraba la zona segura, pero estas personas ya atacaban donde se les daba la oportunidad.— Negó de lado a lado y Yugyeom fue el primero en hablar.

— No se preocupe Jooheon-nim, nosotros nos encontramos bien o eso creo.— Volteó a ver a Jungkook y este otra vez lo vio a él, dirigiéndose ahora al alfa al otro lado de la mesa.

— Como debió ver en las cámaras, por el movimiento de Yugyeom la navaja llegó a cortarme un poco aquí.— Tocó la gasa en su cuello.– Pero mi hermana revisó la herida y no es nada grave, ya se está curando.— La mirada preocupada de Jooheon se relajó un poco y la mayoría aún sin entender sólo observaban.

— Me alegra tanto escuchar eso, y bueno, si se sienten cómodos en contar lo sucedido, pueden decirle a sus compañeros y ahora entiendan todo lo que pasó anoche.— Yugyeom le cedió la palabra a Jungkook y este fue el primero en hablar, la noche pasada quizás se había muerto de miedo, pero al haberlo pasado ya, tanto su lobo como él estaban más tranquilos, sólo ahora acordaron que apenas saliendo del restaurante se subiría a la motocicleta y se iría.– Les agradecería que no salga nada de aquí, se los suplico, esto se los están confiando sus compañeros.

— Anoche como recordarán, Namjoon hyung, SeokJin hyung, Hoseok hyung, Yugyeom y yo nos quedamos a limpiar la cocina.— Empezó a contar, con la atención puesta en él.– Yugyeom se quedó en la cocina y el resto salimos, entonces yo me quedé hablando con mis hyung un rato y ellos tres se fueron juntos, yo no fui porque tenía mi motocicleta.— Pausó, aclarándose la garganta algo nervioso.– Después de que se alejaran yo me quedé un rato parado para contestarle un mensaje a mi familia y tal vez ese fue mi error, pero entonces esos dos tipos se aparecieron, uno me tomó por la espalda y me puso una navaja en el cuello, otro me colocó una pistola aquí.— Ahora señaló su sien, con sus compañeros teniendo expresiones de miedo y preocupación al imaginarse la escena, lo que tuvo que pasar Jungkook.– Sé defenderme, pero estaba aterrado, así que mejor les di mis cosas, no intenté nada.

— Yo me estaba cambiando cuando pasó, no me enteré hasta escuchar ruidos extraños y un grito de uno de los tipos.— Yugyeom cambió un poco su versión, no expondría el tema sobre el aroma que sintió en Jungkook y siguió.– Cuando me asomé pude ver a Jungkook tal y como mencionó. Yo no sé mucho de técnicas de defensa, pero Bambam.— Le sonrió a su mejor amigo, explicando un poco, este sin entender porqué lo mencionaba.– Él tomó clases de defensa y me enseñó algunas, así que las recordé y así fue como pude ayudar a Jungkook, no sé cómo decirlas muy bien, pero son para dejar noqueada a una persona. Ellos al quedar en el suelo, Jungkook y yo aprovechamos para irnos del estacionamiento, después llamé a la policía y ya saben el resto.

Jungkook le agradeció mentalmente a Yugyeom por omitir muchos puntos, principalmente la parte donde hablaron y cuando le agradeció en el semáforo. Realmente quiso agradecerle de mil maneras más, pero no se sentía listo para hablar bien e incluso llevar una buena relación con el alfa, después de que se fuera se sintió tan extraño llegando a su casa, que apenas cerró la puerta a su mente vino como Yugyeom lo apartó de aquel tipo y quedaron juntos unos segundos, era tan raro y definitivamente no le gustaba ese sentimiento debido al alfa, odiaba cómo lo hacía sentir.

— Ustedes son muy valientes, en verdad, Yugyeom, tu iniciativa de hacer eso para ayudar a tu compañero es ejemplar y la tuya por mantener la calma Jungkook, otras personas hubieran hecho de todo menos estar tranquilas como tú, estamos muy orgullosos de ustedes.— Los dos sonrieron al mismo tiempo, reverenciando al mayor por el cumplido.– Serán recompensados por lo de anoche, ustedes también lograron que atraparan a esos infelices y merecen mucho más que un agradecimiento, pero lo platicaremos después.— Guiñó un ojo.– Para el resto, les agradecemos por hacer caso a los comunicados de Chanmi y Jaebeom sobre irse en grupos, acompañar a sus compañeras hasta que llegaron a sus hogares, la situación de Jungkook y Yugyeom se dio sin querer.

Yugyeom miró de reojo a Jungkook, dándose cuenta de lo tranquilo que se quedó luego de su comentario sobre la noche anterior y como no dijo nada de más. De alguna manera le agradaba que Jungkook le hubiera agradecido y no le siguiera dando la misma mirada de odio, aunque de tanto conocer a ese castaño de rango indefinido, podría jurar que tal vez las cosas seguirían igual que antes.

— Sin más, debo retirarme junto a Chanmi y Jaebeom, debemos discutir algunas cosas del restaurante, aparte de extender un poco más la seguridad. Les hubiéramos dado el día libre, sin embargo, en vez de que bajaran las reservas para el día y los siguientes, han aumentado considerablemente.— Arregló su traje felizmente y la mayoría rió.– Procuren ser asaltados más seguido, tengan un excelente día y trabajen muy duro, fighting!

— Fighting!— Gritaron al mismo tiempo, despidiéndose del dueño y los dos encargados yendo tras él para mirarse unos a otros.

— Jooheon-nim tiene razón, ustedes fueron muy valientes, son grandes chicos.— Jinyoung habló por todos, sonriéndoles.– Y nos alegra verlos bien, pero es hora de trabajar, ya oyeron a Jooheon-nim.— Suspiró, escuchando los quejidos de cansancio.

— ¿Alguno de ustedes no quiere cambiar con los meseros?— Cuestionó Baekhyun siendo jalado por Taehyung y comenzaron a dispersarse a las risas.

Yugyeom se iba a voltear para hablar con Bambam, pero la voz de Jungkook lo llamó a quedarse donde estaba.

— Llevemos las cosas por la paz.

Sus ojos se conectaron con los de Jungkook, hablando por primera vez desde lo pasado una noche atrás, de nuevo un tono tranquilo y un poco indiferente se notó. Su cuerpo se cambió hasta quedar frente a frente y Jungkook como un pequeño tic, pasó la lengua por su mejilla.

— Siempre estaré agradecido contigo por lo de anoche, de verdad.— Yugyeom esbozó una pequeña sonrisa, Jungkook suspiró.– Pero no te digo que pueda ser tu mejor amigo o hablarte todos los días a todas las horas, sólo estemos tranquilos el uno con el otro dentro de lo que cabe, ¿te parece?— El pelinegro quiso continuar y aclarar todo de una buena vez con él, pero en la mirada de Jungkook no se encontraban intenciones de querer ser bueno o hablar como unos compañeros normales, sólo quería mantenerse en una línea firme y clara entre los dos.

Yugyeom observó profundamente sus pupilas, como si quisiera encontrar algo más en ellas, Jungkook hizo lo mismo, los ojos de Yugyeom eran pequeños, pero profundos y oscuros, mientras los de Jungkook eran grandes, oscuros y brillosos, ocultando un sin fin de cosas detrás de ellos. De repente, un pequeño escalofrío recorrió el cuerpo de los dos, ocasionando que sus lobos se levantaran alerta y ellos parpadearan exaltados, apartando la vista.

— Estoy bien con eso, llevemos las cosas en paz.— Tragó, alejándose de Jungkook, él ya no seguiría insistiendo.

Jungkook le vio irse y en su pecho una presión se presentó, sin embargo, también tomó camino hacia SeokJin, para ser abrazado y cuestionado por el mayor de mil cosas a la vez.

— Ah, ¿pero qué decías de tu mejor amigo escuálido y si fuerza?— Alzó una ceja Yugyeom hacia el omega peligris, este solo ya que Jinyoung fue a hablar con Namjoon. Bambam bufó, puesto Yugyeom le demostró ser más fuerte de lo que creía o más bien, el pelinegro le demostró su verdadera fuerza más nunca la mostró antes.

— Igualmente lo hiciste debido a mí, yo soy el personaje de esta historia.— Yugyeom abrazó por la espalda a Bambam, riendo.– Quién diría que el gigante cara de bebé haría algo así, salvar a su mayor enemigo.— La referencia le hizo rodar los ojos.– ¿Arreglaron las cosas al fin?— Era claro que Bambam les miró en todo momento mientras hablaban, esperando hubieran dicho todo como se debía y Jungkook se mostró inexpresivo, al igual que Yugyeom, por lo que no sabía como tomarlo.

— Qué te puedo decir.— Se encogió de hombros, evitando el tema, y palmeó su trasero, haciendo una seña a todos sus compañeros puesto los empleados de otras áreas ya se habían ido, era hora de comenzar a trabajar y nadie hacía nada por moverse.

Bambam suspiró, Jungkook y Yugyeom eran un caso que ya no sabía ni cómo ayudar o entender.

[Y como el público lo pidió]

Viernes; 2:30 PM.

— ¡Taehyung, apresurate, no tengo todo el día!— El grito de Yoongi por la escalera le sacó un gruñido apresurado al omega, este corriendo en la sala de su departamento mientras se colocaba la camisa al mismo tiempo que los zapatos, un ladrido suave escuchándose de fondo directo a Yoongi.

Yeontan, el perrito que llevaba acompañando a Taehyung desde hace algunos años cuando llegó a Seúl, movió la cola, feliz sin entender porqué su dueño estaba tan paranoico.

— ¡Ya voy! Da lo mismo si vamos tarde o temprano, eres un maldito puntual.— Se quejó desde arriba y Yoongi sonrió, le encantaba molestar a Taehyung apresurándolo, sabía que el chico de cabellos cenizos odiaba cuando no le dejaban hacer las cosas en paz.

El Kim agarró su bolsa, colgándoselo en el hombro no sin antes fijarse si Yeontan tenía la suficiente comida al igual que agua, y revisó su aspecto desaliñado en el espejo; definitivamente, no se veía bien. El día anterior, al ser su día libre —en general, el de todos— se la pasó dentro de su departamento comiendo y jugando en su computadora junto a SeokJin. El mayor y él habían tenido una casualidad por encantarles jugar en línea, podían pasarse horas frente a las pantallas y no se aburrían, por lo que cuando vieron la hora tras terminar una partida, los dos se dieron cuenta de que eran las cinco de la mañana, decidiendo ir a dormir rápidamente, sin embargo, la mañana entera no le sirvió a Taehyung para reponerse como debía, para nada.

Yoongi la mayoría del tiempo iba por su amigo al edificio donde vivía, entonces al verlo aún dormido luego de tocar su puerta casi treinta veces, lo apresuró pues se les hacía tarde y Taehyung sin ganas de trabajar, aparte de tener un increíble sueño mostrándose en su rostro, no era lo ideal.

— ¡Adiós Tanie, appa viene en la noche!— Mandó un besito al perrito ladrandole como si se despidiera también de él y cerró la puerta con llave, tallándose los ojos para por fin bajar.

— Te dije, no te quedes tan tarde jugando con SeokJin y también se lo dije a él, pero nunca me hacen caso, ahora sufre las consecuencias.— Comentó una vez el menor estuvo abajo y este le regaló una mirada de odio.

— Debo meterte más en el mundo de los juegos, para que sufras como nosotros.— Un puchero se apoderó de sus labios, quizás Yoongi tenía toda la razón, pero no se la daría. El alfa abrió las puertas del auto y el primero en subir fue Taehyung, tirando su mochila en la parte de atrás para ir de copiloto cómodamente.– ¿Viste lo que mandó Yugyeom al grupo?— Tomó el americano tan usual del pelinegro y le dio un trago temoroso, odiaba el café, pero al menos quería estar despierto durante el día.

— ¿El vídeo de Dalkyum o lo de la fecha para ir a trabajar en el hotel?

— Lo del hotel, aunque Dalkyum es adorable, no tanto como Tanie.— Sonrió engreído, aquella era una guerra que Yugyeom y él no terminaban, por cual era el mejor perrito entre ambos pomeranian.– Es increíble que hayan escogido el restaurante para hacer la cena por la inauguración, teniendo el propio, ese hotel es cinco estrellas.

— Es que el nuestro es mil veces mejor que ese, saben de la buena comida.— Bromeó, haciendo reír al menor y prendieron camino al restaurante, el pelinegro con prisa ya que la hora de entrada era a las tres como máximo.

— Lo dices porque tocarás y te pagarán el triple.— Abrió la ventana de su lado, el aire revoloteando su cabello en mil direcciones y Yoongi sonrió.

— A ti también, ni digas nada.— Taehyung rió al ser descubierto y prendió su teléfono, contestando algunos mensajes en el grupo del restaurante y de ahí revisó el chat de Jimin, abriendo la foto que le mandó y era un nuevo ramo de flores, ahora éstas siendo rosas. Sus ojos viajaron a Yoongi, el alfa concentrado en la carretera y mostró la foto, este sonrojándose como si intentara ver de más.

— ¿Piensas ganartelo con flores?

— ¿De qué hablas?— Murmuró sonriente, pensando en la sonrisa y la emoción del omega rubio desde su casa al ver el nuevo ramo de rosas en su sala.

— Ah, hyung, eres adorable haciendo esto, pero no vas a lograr nada si te la pasas mandándole flores.— Iba a continuar hablando, pero el alfa le detuvo.

— Ya estoy logrando algo.— Contradijo de inmediato, suspirando enamorado.– Su sonrisa.

— Ugh, que diabetes me das, asco.— Formó una expresión asqueada por la fase romántica del pelinegro y rodó los ojos.– ¿Por qué no le pides disculpas ya? Podrías avanzar un poco más y lograr que se fije en ti también, así no harás nada aparte de su sonrisa.

— N-no es tan fácil.— Murmuró avergonzado.– ¿Has visto cómo sudo cuando está cerca? No creo poder ni decirle "quiero hablar contigo" sin tartamudear en toda la frase.— Suspiró.– Tú tampoco ayudas mucho, casi me hechas de cabeza aquel día que lo fuimos a dejar a su casa.

— Tú me obligaste a hacerlo.— Se encogió de hombros. En una ocasión cuando empezaron el tema de los asaltos, Taehyung le ofreció a Jimin irse en el auto de Yoongi con ellos, aunque el ahora rubio quiso negarse, Taehyung insistió y al principio fue un viaje incómodo por el silencio de ambos, sin embargo, el de cabellos cenizos logró formar una conversación a pesar de que Jimin y Yoongi no hablaban directamente, notando de paso cómo el aroma de Yoongi y el de Jimin se intensificaron al estar juntos.

A veces habló de más y Yoongi tuvo que pellizcarle, pero no pasó a mayores.

— Como sea Tae, yo sé lo que hago, déjame ir a mi paso.— Respondió tranquilamente, entrando a la calle principal del restaurante y el menor lo observó atentamente, Yoongi lucía tan feliz por hacer aquello de enviarle flores.– Yo no te digo nada de Hoseok.— El rostro entero de Taehyung se sonrojó por el comentario y miró a otra parte.

— No tengo idea de qué hablas.

— Sabes exactamente de qué hablo.— Rió burlón.– Entiendo, fue tu primer amor, ¿pero debes parecer tomate hasta por estar cerca suyo? Al menos no eres como yo y logras hablar sin tartamudear con él.— Dio un giro, entrando al estacionamiento por fin despejado de periodistas, rápidamente la noticia había dejado de sonar por todos lados, sin embargo, algunos habían comentado que vieron a personas tomando fotos donde se supone encontraron a los delincuentes tirados.

— Tú no eres el adecuado para decirme nada.— Cubrió su cara sonrojada, haciendo reír más al mayor.– Es que es tan hermoso hyung, es como una obra de arte a la cual podría ver toda mi vida, a todas horas, y con ese cabello pelirrojo.— Suspiró, su corazón latiendo con fuerza contra su pecho.– Nos dejamos de ver y comunicar luego de que se mudó, ahora no puedo mantener una buena comunicación con él, me siento raro.— Formó un puchero.

— Mi lobo se la pasa diciendo que los humanos somos idiotas y sólo hagamos las cosas sin miedo, nos complicamos mucho la vida.— Bufó, abriendo las puertas después de apagar el motor.– Quisiera tener la tranquilidad que ellos tienen.

— Tata no está a favor, quiere cachorros pero es cobarde.— Salieron del auto al mismo tiempo, agarrando sus bolsas a las risas y saludaron a varios de sus compañeros entrando al restaurante, entre ellos al que menos se esperó ver.

— ¡Tae!— Una cabellera pelirroja se movió entre los que se cambiaban en el vestidor, saludándolo con una mano y una enorme sonrisa en forma de corazón. Taehyung tragó, dándole una mirada en pánico a Yoongi para que se quedara junto a él, pero el pelinegro no tenía esa intención puesto se fue alejando lentamente de él y sonriendo de manera divertida formó con los labios "venganza". Hoseok saludó a Yoongi velozmente y fue hasta él, aún sonriéndole.– Disculpa si te molesto, creo estabas apurado.

— No, para nada, ¿pasa algo Hobi hyung?— Sonrió, sus manos llenándose de sudor y tragó al verlo más cerca suyo.

— No es nada importante, es que SeokJin me pidió si te podía entregar esto, tenía que entrar a hacer helado y estaba apurado.— Extendió unos audífonos con el diseño de un dibujo animado y se sonrojó, agradeciéndole después de tomarlos.

— ¿Podría decirle gracias de mi parte? Acabo de recordar que también debo reunirme junto a los chicos y así no lo molesto.— Sonrió nervioso, alejándose del alfa con aroma a manzana, sentirlo cerca sólo le hacía sentir mariposas en el estómago y este asintió.

— Claro, yo le digo.— Se sonrieron el uno al otro, sin saber cómo acabar la conversación.

— A-ah.— Murmuraron al mismo tiempo y rieron, con Taehyung muriéndose de vergüenza al tener en mente su aspecto ese día, el día donde justamente decidió ir de lo menos arreglado para arreglarse dentro. Hoseok se rascó la nuca, hablando primero.

— Tú... Ahm, ¿irás mañana junto a los demás a tomar? Y comer, creo mencionaron.

— Sí, Taemin nos invitó a todos, ¿usted?— Hoseok pasó saliva por sus labios al ver la sonrisa del menor, en una forma cuadrada tal y como la recordaba desde hace tiempo, su corazón golpeando fuertemente contra su pecho.

— Sí, aún no hablamos en la cocina sobre eso, pero Namjoon y yo decidimos ir.— El omega frente suyo asintió.

— Está bien, entonces nos vemos luego hyung, tenga un buen día.— Formó una reverencia y Hoseok se la devolvió.

— Tú igual Taeta...— Detuvo sus palabras al querer salir de sus labios el apodo que le tenía al menor.– Nos vemos.— El primero en entrar fue Taehyung, algo desilusionado porque Hoseok no quisiera decir su apodo, sin embargo, lo entendía.

El pelirrojo gruñó apenado, cerrando los ojos por unos segundos y el aroma a orégano se presentó detrás suyo, dejándole claro quién era.

— La séptima es la vencida amigo.— Jinyoung palmeó su hombro y Hoseok golpeó su frente. El alfa castaño había observando todo desde atrás, minutos antes había tenido que volver a su casa por unas anotaciones para Jaebeom y al entrar en el estacionamiento vio el momento tierno y vergonzoso entre Taehyung y Hoseok, ambos aún sin saber cómo hablarse bien después de tantos años, era claro que Jinyoung ya conocía la historia puesto Hoseok se la contó.

— ¿Tan mal estuvo?

— Terrible.— Asintió Jinyoung, aguantándose la risa por la vergüenza de Hoseok.– Dale tiempo al tiempo, ya sabrán cómo hablar mejor sin ser tan incómodo.

— Eso espero Young.— Apretó los labios, entrando al restaurante junto al otro y dirigirse a la cocina, siendo todavía reconfortado por el Park.

Hoseok no solía ser nada penoso y siempre te decía las cosas claramente, sin embargo, había algo en Taehyung que le hacía poner nervioso y no expresarse bien, por lo que su propósito era poder conversar bien junto al omega, igual que años atrás cuando ni siquiera sabían sus rangos.

— Yugyeom está tardando, ¿de verdad sí vendrá?— Dokyeom se fijó en la hora en su reloj y se la mostró a Jaehyun, angustiados porque el pelinegro no llegara.

— Supongo que sí.— Se encogió de hombros el alfa, esperanzado de que Yugyeom sí estuviera allí esa tarde.

Cada uno de los que trabajan en la cocina ya se encontraban dentro de esta, reunidos alrededor de la mesa central como era costumbre y esperando tranquilamente a Yugyeom, conversando entre ellos. Era claro que si el alfa no se aparecía, Jinyoung y Jungkook se debían encargar, sin embargo, estos hacía tiempo no daban todos los platillos ya que Yugyeom era quien se encargaba de ver qué harían cada día de la semana exceptuando los jueves, entonces preferían y esperaban el Kim se apareciera por la puerta pronto.

— A mí no me comentó nada, estaba normal hoy.— Contestó Bambam cuando lo vieron a él, Jinyoung pegado a su cuerpo.– La verdad hasta a mí me parece raro.

— Tal vez sólo se le hizo tarde, nos ha pasado en alguna ocasión a todos.— Continuó Felix, sus mayores en acuerdo con él y sonrió, ladeando la cabeza a la puerta entre la cocina y los vestidores, dándose cuenta de la presencia de alguien allí, al poco tiempo abriendo la de la cocina.

Yugyeom se apareció en la cocina ya vestido y ofreciendo reverencias de disculpa, pero este no venía normal como era común. El pelinegro llevaba un cubrebocas puesto y al ver sus ojos estos se encontraban levemente rojos y llorosos, sorprendiendo y preocupando a sus compañeros por verlo mal.

— Siento mucho haberme tardado tanto, sé que en esta semana estamos muy ocupados.— Se disculpó nuevamente y rió limpiándose el lado derecho del ojo cuando una pequeña lágrima salió.– Tenía pensado no venir, pero sé que un par de manos extra son de gran ayuda y no quería dejarlos con todo. Hace un rato, al medio día comencé con una alergia y aún no me deja en paz, no creo que lo haga, entonces les pediré sólo si por hoy pueden encargarse de preparar los platillos ustedes para no contaminarlos aunque lleve el cubrebocas, yo los estaré revisando, si tú estás de acuerdo hyung.— Contó hacia los presentes y pasó a Jinyoung, el mayor asintiendo sin ningún problema.

— ¿A qué se debe tu alergia?— Preguntó SeokJin interesado y sintiéndose mal por el menor.

— Perritos, polvo y gatos.— Contestó Bambam por él, acariciando su espalda tras entenderlo y el resto comprendió.

— ¿No pudiste ir al médico?— Fue el turno de preguntar de Namjoon y Yugyeom negó.

— Tenía muchos pendientes y las pastillas recetadas se me terminaron, pero estoy bien.— Movió las manos para despreocuparlos.– En verdad se los digo, es sólo la molestia en la nariz, estornudos y lagrimeo un poco, pero estoy bien, me suele durar de uno a dos días sin pastillas, el segundo día ya es mucho más leve.— Absorbió un poco su nariz, mostrándose como si les sonriera detrás del cubrebocas.

— Cualquier cosa sabes que no es necesario seguir Yugyeom, primero la salud.— Sonrió Hoseok y Jungkook a su costado sólo lo observó, entendía las molestias y lo horrible que solía ser una alergia, sin embargo, el alfa era demasiado fuerte como para soportar estar un día entero sin tomar nada para las molestias, él no podía ni aguantar una hora.

— De acuerdo, si me siento mal se los avisaré, pero no lo creo.— Volvió a absorber su nariz, agarrando las hojas entre sus manos y tomó aire.– SeokJin hyung, Jaehyun ¿hicieron el helado que les pedí?— Estos alzaron un pulgar afirmando y Yugyeom continuó.– El postre de hoy será simple, son muchos comensales según mencionó Chanmi noona y demasiado tiempo no tenemos, entonces harán brownie, por eso el helado.— Ambos abrieron la boca ahora entendiendo y se alejaron para comenzarlo.– Jungkook junto a Dokyeom prepararán la entrada del domingo pasado, ¿la recuerdas Dokyeom? Para que le expliques tú a Jungkook.— El castaño asintió, chocando su puño contra el de Jungkook y fueron al almacén hablando entre ellos, el Jeon viéndole por última vez para seguir.– Jinyoung y Soyeon se encargarán del platillo principal, esta es una nueva receta entonces les ayudaré sólo a preparar, ustedes se encargarán de servir, y los demás ya saben qué hacer.— Los encargados de las carnes suspiraron, riéndose por el tono de Yugyeom.

— ¿Te atacó muy feo?— Bambam puso una mano en su espalda, caminando junto a él al almacén y Yugyeom lo detuvo un segundo, estornudando contra el espacio de su codo.– ¿Fue por Dalkyum?

— Debió ser más el polvo.— El omega se alejó de pronto, yendo al baño que tenían pegado a la cocina y tomó un pedazo de papel, tendiéndoselo al pelinegro, este se bajó el cubrebocas y sonó su nariz, sintiéndose mucho más relajado.– Ayer y hoy en la mañana estuve jugando con Dalkyum, pero no sentí nada, fue hasta cuando salí a comprar algunas cosas que empecé a estornudar mucho, la alergia me empezó y corría demasiado aire.

— Debió ser por el polvo, sí. Tus appas te hicieron enfermizo y alérgico a todo, ¿no pudieron darte algo bueno?— El gesto de Yugyeom le sacó una carcajada y agarró dos platos hondos, entregándole uno al Kim.

— Minhee jugó también hoy con Dalkyum y sabes su problema de alergias.— Yugyeom fue hasta la parte de las especias, tomando varias a la vez y buscando algunas mientras Bambam se fijaba algunas verduras.

— Pobre Minhee, su caso sí es muy feo.

Jungkook, que se mantenía concentrado en buscar las que Dokyeom le encargó, no evitó interesarse en la conversación al escuchar el nombre del niño, entonces se acercó sólo un poco más, intentando encontrar una especia cual no quería y su lobo dio vueltas, jugando con sus propias patas.

Eres un poco muy obvio.

"No es cierto".

Sí lo es.

— La verdad, pero ya se está aligerando, juega con Dalkyum y Mingyu lo ha visto tranquilo cuando lo va a recoger.— Jungkook pasó saliva al sentir esa presión en su pecho otra vez y se levantó de golpe, teniendo claro que el nombre del alfa moreno era ese, el alfa cual vio aquel día, no deseaba enterarse más de la vida del pelinegro innecesariamente.

— Ojalá y se le vayan defi...

Repentinamente, Yugyeom volvió a estornudar, interrumpiendo a Bambam, y Jungkook justo cuando se volteó a agarrar leche en el fondo del almacén no evitó soltar una risilla, los estornudos de Yugyeom eran cortos y graciosos, entonces no podía evitarlo.

Te parecen adorables, di la verdad.

"A ti no te dije nada". Bufó, volviendo a ver la condición del alfa luego de pasar fuera del almacén y sintiéndose ligeramente mal por él; sus ojos seguían hinchados y rojos, detrás del cubrebocas su nariz debía ser un desastre, sumando que no podía respirar bien gracias a la tela sobre su boca y se limpiaba los ojos cada cierto tiempo. Por lo que tras pensarlo unos segundos y encontrándose en duda aún con el alfa por lo de la otra noche, dejó todo en donde trabajaría junto a Dokyeom, sonriéndole.

— Doky, ahora vuelvo, tengo que revisar algo rápido en mi casillero, estoy aquí en un minuto.

— Claro Kook, te espero.— Jungkook corrió a los vestidores, acercándose a su casillero, donde puso la combinación y lo abrió, quitando algunas cosas de su camino hasta encontrar en el fondo junto a sus lentes tres frascos, uno de ellos siendo por el que fue y lo sacó, asegurándose de que la caducidad no hubiera vencido.

Su lobo soltó un ladrido, en acuerdo, y feliz por la acción que haría Jungkook.

Eres lindo cuando te lo propones.

— Deja de ser tan molesto.— Susurró avergonzado, metiendo el frasco de pastillas para la alergia en una de sus bolsas y volvió a trabajar, esperando que Yugyeom no le ganara en la noche.

[...]

— ¡Buen trabajo a todos hoy! Gracias por la ayuda y disculpenme nuevamente, hice lo mejor que pude.— Yugyeom formó una reverencia larga a sus compañeros, Jinyoung llevándolo hacia arriba sonriente después de que todos se cambiaran en los vestidores y pudieran prestarle atención.

— Trabajaste duro como todos, no es nada Yug.— Habló Hoseok, revolviéndole el cabello, dirigiéndose a la salida.– Esperamos que mañana ya te sientas mucho mejor, deberías investigar de algunas pastillas que ayuden para las alergias y no necesiten receta.

— Eso haré hyung, gracias.— Sonrió, limpiándose una pequeña lágrima cayendo por su mejilla gracias a la alergia.

— Pero no llores, con agradecer es suficiente.— SeokJin contestó, carcajeándose por su broma y Yugyeom rió, golpeándole en un hombro.– Nos vemos mañana Yugyeom, recuperate y duerme bien.— Sonrió el omega al menor.

— Gracias hyung, hasta mañana.— Todos empezaron a salir, deseándole que se recuperara y sintiera mejor, aparte de una buena noche. Él les agradecía entre reverencias, sonriente en todo momento, feliz de que sus compañeros entendieran su situación y lo hubieran ayudado.

Quitó el cubrebocas de su rostro, exhalando más tranquilo y agarró papel, limpiándose la nariz como había hecho desde hace horas.

Te ves fatal, y no me gusta verte fatal.

— Estoy bien, me siento mejor, así que es ganancia.— Suspiró, cambiándose la camisa y quitándose el delantal cubierto de grasa y otras manchas. Odiaba en absoluto sus alergias, las alergias no servían de nada más que para molestar y hacerle los días difíciles.

Deberías reclamarle a omma omega por hacerte tan frágil.

— Hago eso y enfermo no quedaré, pero tirado en una cama sí.— Rió, estornudando por quién sabe cuántas veces en el día. Desarregló su cabello cansado, agarrando la mochila dentro del casillero y lo cerró, no se tomaría la molestia en revisar, si se le olvidaba algo ya lo tomaría al día siguiente.

Sacudiéndose la nariz, fue a paso lento hasta su auto, despidiéndose con la mano de Jinyoung y Bambam tras el omega decirle que lo veía en la mañana siguiente, aparte de sonreírle de una manera extraña cual no supo descifrar. El estacionamiento se quedó un poco solo, la mayoría ya se había retirado y quedaron algunos meseros hablando entre ellos, estos dándole las buenas noches al igual que él a estos.

Parpadeó confundido al ver algo encima de su auto justo en la orilla y fue directo a la parte de la puerta, sujetando la nota a punto de caerse debajo del frasco, incluido este. Abrió la nota doblada a la mitad y un aroma conocido viniendo de esta le sorprendió, leyendo atentamente lo que decía.

"Toma una cada 12 horas, si no te hace mucho efecto toma dos, son para tu alergia".

Yugyeom y su lobo identificaron el aroma de galletas de avena y nuez mezclado con uno a bosque en la nota, entonces una gran sonrisa se esbozó en sus labios, era obvio que Jungkook no quiso dárselo en persona y a pesar de eso, un buen sentimiento se instaló en su pecho. Sacó una pastilla, tomándosela ya que estaba desesperado y bebió de la botella de agua en su mochila, demostrando en su rostro que contento por la acción de Jungkook era poco.

Su letra es bonita.

— Lo es.— Exhaló, nervioso pues en su mente tuvo el instinto de contestarle que no sólo su letra era bonita, sino él.

¡Hola, muy buenas!

Realmente no sé qué decir, me quedé sin mente y estoy escribiendo esto mientras estoy con unes amigues, pero lo voy a publicar mañana, o sea, hoy para ustedes. 😂

Bueno, este capítulo fue algo intenso: Jungkook sigue siendo un pendejo  JAKAJKASJAKJAAK que no puede hablar con Yug, pero el wawa hizo la buena acción de darle unas pastillas para su alergia, Kookie es adorable pero no lo demuestra todavía uwu.

¿Cómo han estado? ¿Bien? ¿Qué tal van sus clases y parciales? 🥺

Yo ahora mismo, hablando en presente, se supone que estoy con mis papás en el puerto de mi estado, por fin salimos a pasear después de mil años 😂, entonces estoy feliz y tranquila, antes de que llegue la tormenta el lunes que comienzo clases. :(

Como siempre, si salen lleven gel antibacterial, cubrebocas y con las medidas de sanidad ya conocidas. 😷✋🏻

Les tkm, gracias por el apoyo que le dan al fic aunque sean unas cuantas personas. 😭❤

Incluso les que sólo leen, les tkm. 💖

Ya me voy, seguiré disfrutando mi día libre, pero eso no significa dejarles sin actualización uwu❤

¡Nos leemos luego, cuídense! 😷