► Capítulo 08; Desagradable y "sí"
Si comentan y votan, esa estrellita irá al cielo 😔❤
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El gimnasio solía ser un lugar al que Jungkook y Jimin frecuentaban cada dos o tres veces a la semana, desde que se conocieron e iniciaron su amistad iban casi todos los días, sin embargo la flojera de las mañanas y el frío en ocasiones les hizo cambiar de opinión muy notoriamente, logrando que solamente se pusieran de acuerdo en días variados.
Aquella mañana, ambos se levantaron energéticos y felices, el clima cálido se mostraba por toda la ciudad de Seúl, a lo que estaban seguros de que sería un largo día caluroso. Después de llamarse y acordar una hora, salieron de sus casas para tomar el mismo autobús y dirigirse a un gimnasio cercano, no tanto ya que obviamente debían subirse a un medio de transporte, pero considerablemente a la distancia de los otros era mucho mejor. Somin jamás los quiso acompañar, era una alfa que odiaba el ejercicio con todo su ser y de alguna manera ambos omegas la envidiaban porque comía lo que quería y no engordaba.
— ¿Te fue bien con la consulta?— Habló Jimin calentando para los ejercicios que haría en ese momento ya dentro del gimnasio y Jungkook asintió abrochándose por la muñeca los guantes de boxeo mientras el beta instructor se colocaba las manoplas, desde minutos antes hablaron de diferentes cosas sin importancia, por lo que Jimin se dedicó a preguntarle sobre ello ya que se acordó. El Jeon se acomodó bien parándose contra el hombre más alto, aparte de ser cinta negra en Taekwondo había comenzado desde hace unos meses a practicar con guantes de boxeo y a la vista de Jimin y muchas personas pasando fuera del gimnasio por distintos días, era realmente bueno en ello.
— Me hablaron para tomar algunas muestras más y enseñarme el papel donde marcaba que era compatible con el nuevo rango, noona me lo enseñó.— Respondió inhalando para ver al beta listo de recibir los golpes en las manoplas.– También en lo que se basaría el procedimiento.
Y la forma de pago.
Un día atrás Jungkook fue llamado por el hospital de cambio de rango, para que fuera a verificar algunas cosas y volver a hablar con Sunmi de lo importante en su transformación, aparte de darle algunas recomendaciones para esconder su aroma sin tanta medicina en su cuerpo como eran los supresores. Después de salir de allí fue al restaurante, por lo que obviamente le contó a Jimin desde antes y a su hermana en la noche, sólo el que había ido, no todo.
— Quisiera saber como es que será Kookie, nos dijiste una parte pero no todo desde la vez pasada.— Jimin se detuvo de moverse para mirar entretenido a Jungkook comenzar su práctica de algunos cuantos minutos con el instructor y de paso agarrar su teléfono dispuesto a grabarlo. Jungkook dio el primer golpe seguido, concentrado en darlo bien y contestarle a su amigo, su lobo se mantenía calmado con la cola entre las patas y lo encontraba muy callado.
— Después de analizar las muestras y hacer las pruebas para el medicamento adecuado, me llamarán otra vez y daré inicio a la medicación, que tardará unos cuantos meses.— Contó golpeando de un lado a otro las manoplas y esquivando algunos movimientos del mayor.– Pero lo primero que notaré después de un tiempo, unos dos o tres meses es el cambio del período del celo y mi aroma, intentarán que sea igual al de bosque aunque no es muy probable, puedo llegar a tener algunos problemas con eso.— Resumió en palabras básicas y simples para Jimin, ya que cuando Sunmi le especificó todo, su cara estuvo como el día en que le enseñaron las ecuaciones integrales.
[Antes de comenzar a recibir comentarios, quiero aclarar que como dije en la descripción, es modificado a mi forma este omegaverse, entonces todo es posible aquí. Tampoco significa que cambiaré todo, si no sólo agregaré mi forma del cambio de rango.]
— Woah.— Abrió la boca sin dejar de grabar a su amigo y Jungkook rió de sólo imaginarlo.– Te contesto en un momento, ¡tú sigue concentrado!— Animó alzando un brazo y en vez de ayudarlo lo hizo llegar a confundirse un poco y casi equivocarse en un golpe. El menor siguió su entrenamiento durante varios minutos, manteniéndose en su posición y poco a poco el calor le invadió seguido del dolor en los brazos al hacer fuerza.– Jackie Chan se queda bobo a tu lado.— Murmuró centrado y el instructor soltó una risilla, divertido por los comentarios del castaño.
¿Se ha estado juntando con el omega de los postres? Que mal chiste.
— Listo, por ahora.— Terminó el beta con un último golpe y Jungkook jadeó apartándose el cabello de la frente sudoroso y medio cansado, aparte de divertido por el comentario de su lobo.– Seguirán con los otros ejercicios que les ponga, Jimin y tú, luego antes de irte lo haremos otra vez.— Susurró un pequeño "sí", inclinándose al mayor en acuerdo y agradecido.
El ejercicio no sirve para nada, ya te lo digo yo.
— ¿Qué me querías decir Jiminie?— Ignoró lo dicho por su lobo y el mencionado no quitó sus ojos del vídeo grabado hasta que acabó y una vez reaccionando, sonrió.
— ¿Cuando seas alfa me puedes dar?— Jungkook se sonrojó golpeándolo en la espalda con la pierna y el omega se tiró hacia enfrente a las carcajadas.– Juego, la verdad me das asquito, pero no hay porqué ser tan agresivos.
— Idiota.— Le ayudó a levantarse del suelo, a lo que Jimin se aprovechó a colgarse de su cuello.
Antes me agradaba más.
— En realidad la pregunta era ¿Cómo vas a pagar todo?
— Oh.— Se encogió de hombros arrastrándolo a donde se encontraban las máquinas y las pesas esperándolos, su lobobse quedó como piedra de repente.– Noona me dijo que puedo ir pagando poco a poco porque ya di un cuarto de todo el dinero, debo tener la mitad cuando me den las medicinas y entre éstas terminaré de pagarlo.
— Al menos tienen consideración, ¿tu sueldo te alcanza?— Jungkook asintió.– Gracias a Dios, no quiero prestarte dinero.— Luego del comentario el otro omega golpeó su cabeza empujándolo lejos, fingiendo indignación tras haber dicho eso.– Ando pobre Kookie, apenas y puedo pagar el transporte.
Chismoso.
— Pero los juguetes para Litty sí.— Bufó divertido apenas Jimin chifló mirando hacia otro lado y actuó como si de verdad le prestara atención al entrenador llevándolos hacia las pesas.
— ¿Ya viste esa pesa?
No dio risa.
— Da igual, nunca cambiarás Jiminie.— Rodó los ojos agarrando las pesas que le pasó el beta y observó como a Jimin también le daba otras.
— Hagan una serie de diez repeticiones por cada brazo, coloquense firmes y mantengan la espalda recta.— Indicó viéndoles moverse tal y como se los dijo.– Separen un poco las piernas.— Señaló, ambos empezaron levantando un brazo seguido del otro.
Ridículos.
— Se me olvidó preguntarte desde ayer.— Murmuró Jungkook centrado en verse al espejo mientras Jimin soltaba un sonidito en duda igual que él, sonriéndose cuando se encontraron con una mueca dolorosa en los labios.– En alfa del piano, uhm, se me olvidó su nombre... ¿Yoongi? Creo que era así.
Uh, ju, ju. Jugando con fuego.
Jimin bufó.
— Ese idiota.— Soltó con recelo.– Si estabas dispuesto a preguntarme si me ha dicho algo, te aclaro que no. Sólo me ve de reojo en sus descansos y en ocasiones parece que se ríe de mí.— Gruñó enfadado, sorprendiendo a Jungkook.– Es muy divertido burlarse del mesero peleonero para él.
— ¿Reírse?
¿Que ese no era el cara de gato?
— Sí, ante ayer estaba atendiendo la mesa diez, cerca del piano, y empezó a reírse apenas me vio ahí parado, es idéntico al tipo aquel.— Se tragó el enojo tras acabar y dejar caer las pesas en el suelo.
Desde semanas anteriores, la noche que Jimin tuvo la pelea con un alfa pelinegro y que este justamente era el hermano del nuevo pianista en el restaurante, el castaño se la pasó esperando al menos un simple "perdón" por parte de alguno de los dos, sin embargo ese perdón, jamás llegó, solamente fue dirigido a Chanmi y el dueño de los restaurantes considerando que el tal "Yoongi" se podría quedar sin empleo gracias a los actos de su hermano. Por supuesto que Jimin se quedó indignado después de que el dueño, Jooheon, pareciera haberle dado igual si le pidieron disculpas o no, entonces desde que entraron a trabajar otra vez en el restaurante, traía un enojo atravesado hacia el pianista engreído.
— Quien diría que también es un idiota.— Suspiró Jungkook tirando una pesa en el suelo y la otra la sostuvo entre sus manos en lo que el instructor les daba una nueva serie de repeticiones.– Sólo ignoralo y ya está, si finges que ni siquiera existe, capaz deja de tomarte atención también.
Como OTROS...
Tragó sintiendo a su lobo dar vueltas de un lado a otro.
— Lo sé, pero realmente es molesto, incluso su aroma...— Susurró fastidiado.– Té verde, me desagrada.— Frunció la nariz en recuerdo.– Meh, mejor tomaré tu consejo y haré eso, no le demostraré mi enfado.— Aseguró siguiendo el ritmo de las sentadillas que hacía Jungkook.– ¿Y tú? ¿Cómo vas con todos?
La mirada del más alto entre ambos cambió.
"Bien, sólo odio a un alfa" creo que es una buena respuesta.
— Seguimos teniendo un buen trabajo en equipo.— Gimió en bajito por el repentino dolor en sus piernas.– Encajamos bien, nos repartimos las cosas como deben ser y cuando es hora de decorar es mucho más rápido y limpio.— Contó ladeando la cabeza con los ojos fijos en el espejo y a su mente llegó la incomodidad de los últimos días, que era específicamente una persona.– Aunque...— Jimin volteó a mirarlo por esa última palabra.
Aunque...
— Aunque...— Repitió esperando la respuesta de su amigo.
Jungkook en toda su corta existencia, creía que jamás podría llegar a odiar a alguien de una manera extrema, es decir, mirar a una persona y que de inmediato sintiera ganas de darle un golpe o decirle un insulto. Esa persona finalmente se apareció en su vida sin previo aviso hace días y con un aroma muy profundo a pay de limón: Kim Yugyeom. Cada vez que se lo encontraba en el estacionamiento del restaurante y dentro de este, sentía un tipo de presión en el pecho y su lobo gruñía en dirección a él, enojado de sólo ver su presencia allí. Encontraba en él algo malo, a pesar de la sonrisa radiante que siempre llevaba sobre los dientes, esa mirada animada y una risa de señora de cuarenta años, veía su amabilidad como algo falso y como si quisiera llevarse con todo mundo de alguna manera, sea como sea la forma.
Resumiendo, Yugyeom no le agradaba y jamás le agradaría, era un chico raro, exageradamente amistoso y su aroma no lo dejaba concentrarse ya que lo sentía por todos lados de su nariz.
Estaba dispuesto a quejarse con Jimin de lo que pensaba sobre Yugyeom en esos momentos desde que llegó, así como hizo el mayor con Yoongi, pero decidió guardarlo para después, ya que a su mente llegó otra persona, ahora haciéndolo sentirse nervioso de sólo imaginarlo y con el que todavía no tenía la oportunidad de intercambiar muchas palabras, pero si lo intentaba su corazón se aceleraba y el sonrojo llegaba a sus mejillas en cuestión de segundos.
— Bueno, hay un alfa...— Rió avergonzado y los ojos de Jimin se abrieron en menos de un minuto, deteniéndose cansado de hacer varias sentadillas como Jungkook.– ¿Has llegado a ver a Kim Namjoon?
Ay, el canela pasión.
Su lobo movió la cola verdaderamente interesado.
— Oh, ¿el de las carnes?— El menor se rascó la nuca nervioso.
Él me puede revisar toda la carne que...
— Sí, puede sonar raro viniendo de mí p-pero...— Detuvo al canino, si ya estaba rojo gracias a su respiración irregular, se coló peor.– Pienso que es muy a-amable y amigable.
— ¿Amigable en la forma de...?— Le codeó alzando ambas cejas ante sus ideas en mente y Jungkook parpadeó negando de un lado a otro, Jimin ya sospechaba.
De que él puede...
— ¡N-no es lo que piensas! Es sólo que, quizá es un poquito lindo y me g-gusta su forma de pensar, es todo.— Se volteó a otro lado para que Jimin no viera más su sonrojo, pero fue inútil ya que éste fue a él soltando varios gritos en alto, a las risas al terminar de confirmar lo que creía. Y su lobo no ayudaba para nada.
— ¡Te gusta hyung!
Por supuesto que sí, es hermoso.
— ¡Ya te d-dije que no! Que me guste su forma de pensar no significa nada, además, apenas tenemos casi una semana de conocernos, es absurdo decir eso.— Jimin soltó un pequeño "awwww" al verlo tan nervioso y es que por el tiempo que llevaba conociendo a Jungkook, sabía que cuando le gustaba alguien se ponía de esa manera e intentaba ocultarlo.– ¡Jiminie!— Su lobo se coló patas arriba, girando de un lado a otro.
— Yo creo que has escuchado del amor a primera vista.— Canturreó poniendo aún más colorado a Jungkook y alejándolo cuando lo quiso abrazar.– "Un poquito lindo" también da a entender otras cosas Kookito de mi vida.— Juntó sus manos bailarín.– Está bien que te guste Namjoon hyung, no te voy a negar que es lindo y sus hoyuelos son adorables, tampoco he podido hablar con él pero creo que es un muy buen alfa.
Nunca es suficiente para mí...
— Lo es, es muy maduro y, a-alto.— Su corazón se aceleró nuevamente, su lobo se estaba volviendo loco, hasta parecía que le dieron una inyección de azúcar. No era un secreto, que a pesar de que pronto se convertiría en un alfa también, le gustaban de cierta manera las personas altas, las veía mucho más atractivas cuando lo eran.– Pero ahí se queda, te lo quise comentar porque me preguntaste, así que olvidalo y sigamos lo que dice hyung, porque incluso ya se sentó.— Señaló al instructor mirándolos hablar y ambos rieron apenas levantó las manos al cielo como si fuera un milagro de que se dieran cuenta.
Buuuu.
— Pensaba en ir a comer y volver en media hora.— Le dieron un golpe amistoso en el hombro y siguieron la nueva instrucción que les dio de inmediato, dispuestos a seguirlo en lo que les dijera y dejaron las pláticas para después, puesto que no tenían mucho tiempo allí y las horas se les pasaron volando entre tantos ejercicios y movimientos que les enseñó el beta mayor al par de omegas.
Ese era el inicio de un montón de cosas por suceder en ese próximo fin de semana.
Unas horas después, haciéndose por fin la tarde, Jungkook y Jimin llegaron al restaurante juntos, el omega mayor decidió tomarse un baño en la casa del castaño y así irse ambos en la moto del mencionado hasta el lugar. Ya era normal si alguno se bañaba en el departamento del otro, en ocasiones se quedaban a dormir y también se preparaban de comer, los años de alguna manera lograron llevarlos a ese nivel de confianza en el otro, uniendo a Somin por un lado, pues ella los acompañaba muchas de esas veces. Estando en el lugar quedaron de verse luego y Jimin se fue con los otros meseros para comenzar a preparar todo.
— Buenas tardes a todos, éstas son las tareas de hoy para cada uno.— La voz chillona y poco agradable del alfa alto parado a unos metros suyo, le dieron ganas de rodar los ojos a Jungkook, pero se contuvo, no era bueno amargarse en horas tan importante donde debía intercambiar palabras con sus demás compañeros, recién apareciéndose en la cocina, la mayoría ya estaba presente, reunida alrededor de una barra grande y oyendo algunas cosas que decía el pelinegro, esperando por los restantes hasta que por fin se aparecieron. Yugyeom comenzó a decir y tachar las actividades de cada uno rápidamente, de lo que debían encargarse, sus trabajos y las cosas en organizar dentro de la bodega. Jungkook no le prestó mucha atención, ya que prefirió jugar con el arete de SeokJin a su lado y jalarlo para que le doliera la oreja, riéndose divertido.
— ¿No tienes mejores cosas que hacer?— Cuestionó el mayor fingiendo enojo y negó sonriente, pegándole en la nuca como respuesta.– Maldito mocoso.— Levantó la mano pegándole también y ambos se dieron golpes en distintas partes del cuerpo, creando una pequeña batalla cual ganó Jungkook tras tenerlo apresado entre sus brazos en un cierto momento, SeokJin quiso quitarlo, los brazos llevándolos hacia atrás con ganas de darle golpes y que lo soltara, pero el menor no se dejaba a las risas.
— Jungkook y SeokJin hyung.
Ya te cargó el payaso, diría omma omega.
El llamado de Yugyeom les hizo levantar la cabeza a ambos y mirarlo tener el ceño fruncido puesto no estaban prestando atención a lo que decía, prefiriendo estar en su propio mundo como si él no importara. SeokJin se aclaró la garganta intentando reprimir su sonrisa y Jungkook se mantuvo sujeto a él sin dignarse a soltarse o ponerse en una posición firme, le daba igual, aunque la mirada del pelinegro era penetrante, tanto, que el omega sujeto tembló un poco.
— Lo siento Yugyeom ¿Qué decías?— Se disculpó honesto SeokJin y a la vez algo avergonzado ya que las miradas fueron a parar hacia ellos. Yugyeom reprimió hacer un gesto de mover la cabeza de lado a lado.
Pfff, no se aguanta nada.
— Terminé de dar las actividades ¿Saben qué les toca?— El par se dio una mirada discreta y el alfa suspiró restándole importancia, era la primera vez que lo hacían y no es que fuera para tanto.– Les dije que a ti SeokJin hyung te toca llenar la bodega junto a Jungkook, porque hoy Jaehyun se encargará de hacer con Felix un postre en específico y tú Jungkook lo ayudarás porque yo haré algunas cosas con Jinyoung.— Murmuró sin mirarlo y Jungkook sonrió un tanto engreído, podía haber logrado su cometido después de días.
Su lobo debe estar enfadado.
El primer día donde Yugyeom se le acercó e intentó formar una conversación con él, hubo algo en su interior que no le agradó para nada del alfa, su lobo estuvo a la defensiva desde que estuvo hablando muy notoriamente con el propio y dejándolo oír todo lo que le decía, lo notó como si estuviera forzándose a sí mismo para hablarle y eso no le agradaba de las personas, que le hablaran sólo a la fuerza y sin tantas ganas, y agregando que mucho menos viniendo de él lo esperaba, la persona que tomó su puesto y pareció darle igual si antes iba a ser de otra persona. Su amenaza pareció funcionar, Yugyeom no le hablaba si es que era lo necesario y cuando hablaban no le miraba, sólo mantenía la cabeza gacha u observando a otra cosa, le comentaba lo que tenía que hacer y no había nada más.
Varias veces, sólo para provocarlo un poco, le golpeaba por el hombro, pues siempre que veía algo que no le gustaba, su aroma se intensificaba y se volvía delirante al olfato. Por alguna extraña razón le gustaba olerlo, el pié de limón siempre fue uno de sus postres favoritos y que él lo tuviera lo ponía tanto de malas como de buenas, podía haberlo tenido Namjoon, Bambam o algún otro nuevo, pero no, justamente lo llevaba la persona menos indicada en ese restaurante y le castraba, era un olor tan bueno para alguien tan absurdo y desagradable.
— Si no tienen ninguna pregunta, se pueden retirar a hacer sus actividades.— Concedió entregándoles una sonrisa, resaltando sus pómulos, y cada uno le sonrió de vuelta, esparciéndose por el resto de la cocina para iniciar. Jungkook permaneció pegado a SeokJin, caminando como pingüino hacia la bodega repleta de personas desorganizándola y agarrando montones de verduras, productos, especias y demás, empujándose entre todos y riéndose de algunas bromas absurdas.
¡No puede seeer!
Su lobo se quejó cubriéndose los ojos con las patas.
— Listo chicos, tienen todo este desastre para ustedes, conste que yo no fui.— Se burló Hoseok y Jungkook tomó el brazo de SeokJin pegándole en el hombro seguidamente, el mayor colaboró estando de acuerdo con pegarle al pelirrojo.– Auch, auch, ¡duele demasiado!— Exageró sobándose el brazo y Bambam detrás de ellos rió.
Mentiroso...
— Lo hizo a propósito, yo lo vi.— Acusó enseñándoles con la cabeza el desastre entre las cajas y el alfa se sostuvo el pecho indignado.
Oye, él me cae bien.
— Una semana conociéndonos y ya soy traicionado ¿Qué me pasará en los años restantes contigo Bambam?
— Hará que te quedes sin empleo.— Bromeó Jungkook empujando con una patada a SeokJin dentro de la bodega y este lo jaló haciéndolo casi caerse. Los dos presentes hablando con ellos se carcajearon por lo sucedido.– ¡Hyung!
— ¡Tú empezaste!— Alzó los brazos corriendo al fondo del espacio cerrado y frío.
Omega feo.
— Nosotros nos vamos, terminaremos regañados como a ustedes les pasó si seguimos aquí.— Bambam se cubrió la boca aguantándose una risilla. SeokJin obligó a Jungkook para que lo sujetara y pareciera que no lo dejaba ir a darle un golpe.– ¡Adióooos!— Cerró la puerta en la cara de SeokJin, logrando que Jungkook lo señalara con un dedo y se sostuviera el estómago simulando que se estaba riendo de él.
— ¡Yah! Mocosos irrespetuosos.— Bufó arremangándose la camisa del traje.– Yo lo sabía, debí quedarme en la cocina de mi omma ayudándola hasta que estuviera de ochenta años y me llamaran señor Kim.— Suspiró arrastrando algunas cajas repletas de verduras y Jungkook lo ayudó pero otras llenas de productos variados.
— ¿No de por sí ya te llaman anciano?
JAJAJAJAJA.
La mirada que le dio SeokJin le hizo reír mostrando los dientes y le mandó un beso tal como hacía él.
— De qué me sirve pelear con un alfa igual que tú, eres tan malcriado.— Negó observando a Jungkook sonreírle y le sonrió de vuelta sin poder creerlo.
Nos ama pero no lo dice.
— Muy en el fondo me amas hasta con tu alma.— Golpeó su pecho yendo a la parte de las latas, condimentos y especias.– ¿Tú te encargarás de esa parte hyung?
— Síp, si tú acabas antes podrías ir por la tabla y contar las carnes restantes en el congelador.— SeokJin respondió concentrándose en arreglar todo como se debía y asintió de acuerdo. Ordenar y contar la bodega no era la gran cosa ni la primera vez que lo hacían SeokJin y Jungkook, tal vez no juntos, pero en alguna ocasión se tuvieron que parar ahí mientras los demás terminaban sus actividades iniciales antes de la tarde.
Claramente no se quedaron callados en ese rato ni todo el que les restaba estando allí, hablaron de, a lo que se podría considerar "chismes" y sus risas se lograban oír fuera de la bodega por los sucesos contados, muchas veces simplemente se reían gracias a las acciones o muecas del otro, sin embargo continuaban ordenando lo que se les había pedido y que así no los regañaran en cualquier momento. Jungkook no paraba de reír y sonreír debido a los malos chistes del omega mayor incluidas sus anécdotas extrañas, sus otros compañeros que entraban a traer algunas cosas de vez en cuando los miraban y soltaban risillas comentándoles algunas respuestas al meterse en la plática.
Todo era felicidad y diversión en la bodega para Jungkook, su lobo movía la cola respondiendo por ratos y se mantenía recostado sin preocupaciones de por medio. Hasta que finalmente se apareció Jinyoung seguido de Yugyeom revisando una lista de ingredientes y peleando por quien tenía la razón, ambos entraron haciendo un pequeño alboroto y quejándose contra el otro de comentarios sin sentido, SeokJin y él se quedaron observándolos, esperando a verles reaccionar para decirles finalmente lo que sucedía.
— ¿Ya dejarán de pelear o por fin nos dirán qué sucede?— El par se quedó callado, empujándose el uno al otro antes de recomponerse y Jinyoung fue el primero en hablar.
Tan bien que iban las cosas.
— Haremos un postre porque ya terminamos el preparado del platillo, y lleva chocolate derretido según dice la lista de los ingredientes, pero Yugyeom dice que lleva cacao en polvo porque ya sería demasiado chocolate si le agregamos el derretido.— Contó bufando con los ojos puestos en Yugyeom y el alfa menor en él. SeokJin rodó los ojos divertido.
¿Es posible?
— Dejenme ver.— SeokJin extendió la mano mientras Jinyoung le pasaba la hoja con las anotaciones. Jungkook los miró en lo que acomodaba unas latas pequeñas sobre otras y el omega asintió luego de leerlo detenidamente.– Conviene más ponerle cacao en polvo como dijo Yugyeom, o un chocolate diferente tal cual el blanco, sería excesivamente dulce y agregarle algo más ligero viene mejor.— Yugyeom sonrió a SeokJin por apoyarlo en su idea y el Park suspiró resignado.
Si hubiera sido yo escogía la idea de Jinyoung, pfff.
— Ya qué, debo hacerle caso a este mocoso.— Yugyeom soltó una risilla en lo que Jinyoung le apretaba una mejilla.– Gracias hyung ¿Aún les falta mucho que hacer a los dos?— Asintieron al mismo tiempo exhalando.
— Nos queda revisar las carnes y abrir las cajas de las pastas.— Respondió Jungkook directo a Jinyoung y el mayor palmeó sus hombros.
— Al menos se libraron hoy de estar preparando todo, tenemos más trabajo que ayer.
— Por eso no me arrepiento de no ponerte atención Yugyeom.— El alfa rió contento y negó de lado a lado.
— Fue pura suerte hyung, la verdad no lo hice a propósito.— Contestó sincero. Jungkook los dejó seguir hablando aunque podrían tardarse un rato más si seguían así, el único que pareció darse cuenta fue Jinyoung acercándose a la puerta pues faltaba una hora para la llegaba de las personas.– Espero puedan terminar lo antes posible, un par de manos más nos vienen bien en la cocina.
— Nos apresuraremos, por ahora mejor terminen lo que tengan que hacer, nos están desconcentrando.— Les echó fuera de la bodega y los menores alzaron las manos alejándose fuera del lugar dispuestos a cerrar la puerta tras despedirse con la mano, no obstante se pararon cuando el Park alzó los brazos recordando su ida al espacio pequeño aparte de su consulta rápida a SeokJin.
— ¡Cierto! Yugyeom, ya que tú lo quisiste así, trae uno de los frascos con cacao en polvo.— Sonrió alejándose apresurado y Yugyeom gruñó en su dirección, expulsando un poco más de su aroma, cual llegó fácilmente a la nariz de Jungkook, haciéndolo olfatear disimuladamente.
Ya no aguanto, ya no aguanto, no quiero que tenga ese aroma ¿¡Por qué él!?
Su lobo gruñó en el interior, el Jeon caminó de un lado a otro desde la entrada de la bodega, llevando algunas bolsas de algas Nori desde donde estaba SeokJin hasta la repisa encima de unas cajas con litros de aceite. Por el rabillo del ojo se encontró con Yugyeom buscando el mencionado frasco entre todos los demás, pero a pesar de que sabía ya su posición, lo dejaría perderse entre los nombres hasta encontrarlo.
Malo.
"A ti también te cae mal, no digas nada." comentó en su mente frunciendo el ceño en regaño a su lobo.
Cierto, sin embargo puedes hacer algo para que lo note, el pobre parece ciego.
— Jin hyung ¿Sabe dónde está el cacao en polvo?— El omega miró al pálido y le sonrió metiéndose entre ambos para agacharse y agarrar en el último espacio un bote de metal con el nombre de tal cosa. Yugyeom abrió la boca queriéndose pegar por no haberlo visto antes.– Que vergüenza, revisé ahí y no lo vi, gracias hyung, siento molestar.
— No es nada Yugyeom, yo lo sé porque son años de experiencia sacando ese bote del mismo lugar, estoy viejo.— Jungkook les oyó reírse y fue al otro lado de la entrada, tomando unas botellas de agua y observó distraídamente como Yugyeom se dirigía a la entrada. Aprovechó, sonriendo para sí mismo en el interior, de pasar a su lado y darle un leve golpe en el hombro, siguiéndose derecho como si hubiera sido por accidente y estuviera apurado de dejar las cosas en donde eran.
Su aroma es más fuerte, parece enfadado.
"Siempre está enfadado".
¿Por qué será?
Jungkook rió dando una respiración y en esta, el aroma del alfa atravesó hasta dentro de su ser, de pronto le dieron ganas de comer algo dulce, era tan extraño.
Yugyeom en su lugar se quedó parado, apretando el bote en sus manos y volteó lentamente a mirar a Jungkook. Desde tiempo antes se la pasaba golpeándolo en el hombro, incluso en el primer día lo hizo, sin embargo, lo había dejado pasar porque no le era tan importante, no es como que le pegara muy fuerza, se volvía casi un roce, pero ese día llegó al punto de cansarlo y hartarlo de esa actitud, sus ganas de soportarlo por fin acabaron en el suelo, su lobo le gruñía cada vez que lo veía y su aroma se intensificaba, lo encontraba como si quisiera a fuerza provocar una pelea o llevarse mal aún más. Esperó a que volviera a ir hasta donde se encontraba él, controlando la rabia de su lobo que lo hacía casi gruñir involuntariamente, lo miró tomar algunas cosas y se acercó a Jungkook, tomando aire, dispuesto a hablar tranquilamente.
— Jungkook.— El alfa mencionado dio un giro para encararlo, viéndolo sin ninguna expresión en su rostro y Yugyeom se coló firme, aunque por dentro se sentía nervioso.– Sé que no te agrado y tal, pero... ¿Es necesario que hagas eso?
— ¿Hacer qué?— Fingió hacerse el desentendido y se aguantó las ganas de reír cuando Yugyeom apretó la mandíbula, mostrándose una vena en su cuello.
— No te hagas el que no sabe, desde hace días no has parado de golpearme el hombro cada vez que paso al lado tuyo, es como si te pareciera divertido y para mí no lo es.— Suspiró.– ¿Puedes por favor parar de hacerlo? ¿Crees que es necesario?— Ambos le dieron un rápido vistazo a SeokJin, él sin darle atención a lo que estaba sucediendo y se enfrentaron nuevamente. Jungkook se acercó un poco más a Yugyeom, sonrió por el nerviosismo en su sistema y asintió.
— Sí, es necesario.— Se alejó llevándose productos consigo y el pelinegro no lo pudo creer, se quedó medio segundo incrédulo, pero finalmente reaccionó. Contó hasta tres para no decirle nada más y formar un alboroto, salió de allí completamente callado y se dirigió a Bambam cortando las cabezas de los pescados.
— Bam, oye.— El omega lo miró sonriéndole y cuando vio aquella cara del alfa casi sacando humos por las orejas, le tendió el cuchillo, entonces Yugyeom rió apartándolo.– Supongo que aún te falta mucho.
— Nada de aún te falta mucho ¿Por qué vienes así?— El resoplido de Yugyeom lo hizo confirmar su teoría de su enfado y que dejara el pescado de lado para oírlo entre susurros sin que los demás de enteren.
— Es Jungkook, ya no lo soporto, se la pasa golpeándome en el hombro y tratándome mal, es como un niño de cinco años.— Bufó en voz baja.– Hace un rato que fui con Jinyoung hyung, me quedé para tomar un frasco y cuando iba saliendo me golpeó otra vez, le pedí si podía parar y si era necesario, sólo me respondió "sí, is nicisirii". Ese tipo quiere crear una guerra.— Gruñó desde el fondo de su pecho y Bambam soltó una risilla.
— Quizá sólo le gusta fastidiarte, puede ser que te haya tomado como un objetivo, tipo un bully en las escuelas.— Comparó el tailandés, a lo que Yugyeom lo miró como si estuviera loco.– Yah, tal vez no es así, pero está raro, Jungkook se porta excelente con todos, todos los días se despide de mí y de Jinyoung antes de irse, en ocasiones nos hemos quedado platicando un rato.
— Entonces tiene un odio contra mí, porque no me soporta.— Se encogió de hombros colocándose los guantes en las manos.– Como yo ya no lo soporto a él.— El mayor de ambos iba a comentar algo, pero Yugyeom le ganó poniéndose recto.– Si él me busca, me encontrará, no me importa si soy el nuevo, no merezco un trato así, nadie lo merece.
Bambam abrió la boca por lo último, entonces Yugyeom le dio una pequeña sonrisa y se fue con Jinyoung para hacer lo que debían. Sus ojos viajaron a la bodega abierta, asomándose disimuladamente y Jungkook reía con SeokJin, el mayor contando algunas cosas y el otro siguiéndole la corriente entre risas.
"Todo esto... Es tan raro" pensó, entrecerrando los ojos. "¿Por qué Jungkook trata así a Yugyeom?
Tarde pero seguro owo.
Sé que me tardé mi tiempo en publicar y mucho están en su quinto sueño, pero se me olvidó por completo que actualizaría hoy y bueno, aquí está uwu❤.
No tengo mucho que decir, sólo que apoyen a mi bebé, o sea este fanfic por fi unu💗
FELIZ CUMPLEAÑOS A GYEOMIE, EL AMOR DE MI VIDA Y DE MI ALMA JUNTO A KOOKIE 🥺❤
¿Qué opinan del capítulo? 👀
¡Nos leemos luego!
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