Capítulo 8
Narra Ta:
¿Estar con otra persona que no sea el alfa? ¿Y sí lo hago? De todas maneras no tengo nada que perder, además, al alfa ni siquiera le importa, podría revolcarme con mil hombres y a él no le importaría. Por otra parte, podría ser una buena venganza, es decir, no quiero volver con él, pero debo tenerlo cerca para que mi bebé pueda nacer saludable.
¿Qué mejor que restregarle en la cara que mi cuerpo fue de otro hombre? Entonces le dije al doctor que sí, que estaba más que dispuesto a hacerlo, pero solo era por rencor. El médico regresó un par de horas más tarde, mi cuerpo cada vez estaba más débil y tuve que preguntarle a mi Omega interno el olor exacto de mi alfa.
- Menta y Canela... - Susurré con una voz muy suave.
- Hola Omega, ¿cómo te sientes? - Pregunta el doctor y mi consciencia quedó perdida por unos minutos, en los que podía ver mis acciones, pero como en segundo plano.
- Mi alfa, tráelo. - Siento las lágrimas saliendo de mis ojos y me dolió en mi corazón.
- No puedo, perdóname. - Contesta el doctor.
- No quiero hacer esto... Quiero a mi alfa. - Mi Omega llora aún más intensamente y aunque no quiera hacerlo, mi decisión ya está tomada.
- Sabes que no lo hacemos por lastimarte. Solo déjanos tratar de salvar a tu bebé, ¿o acaso no quieres salvar a tu cachorro?
Entonces volví al control y fue cuando comprendí eso de que a veces el Omega interno puede tomar el control por completo de mi cuerpo y mis acciones, sin que yo pueda hacer nada. Por eso le pregunté si esto fue lo que me hizo en la semana que olvidé y su respuesta fue clara; ahora me siento feliz de poder comunicarme con él.
Estaba muy nervioso cuando el doctor me preguntó si estaba listo, sobre todo cuando mi Omega me mostró todo lo que vivimos con el alfa en aquella semana de celo. Dudé un poco, pero al final, pensándolo mejor, este bebé no tiene la culpa de quien sea su padre y lo malo que ha sido conmigo; además, tengo personas buenas que me ayudarán a criarlo y enseñarle.
- Estoy listo. - Fue cuando el aroma de Jeff se empezó a esparcir por el dormitorio y mi Omega me recordó a la semana en que nuestros aromas se mezclaron, haciéndome verlo como un príncipe en mi imaginación.
- ¿Quién de ustedes lo hará? - Se gira el doctor y todos mis actuales amigos se miraron entre ellos muy sorprendidos.
- ¿Nosotros? - Preguntó Build como si no hablara con ellos.
- Sí ustedes, ¿no habrán creído que lo haría yo, verdad? Porque ya tengo pareja. - Contesta con calma el doctor.
- Ustedes dijeron que viviéramos en un trio, ¿ya lo olvidaron? - Les dije en forma de reclamo a Apo y Build.
- ¿Ustedes le dijeron eso? - Se asombra Smart.
- ¡¿Cómo pudieron?! - Los regaña James y ambos levantaron sus manos en forma de rendirse antes de que me miraran seriamente.
- Oye niño, solo era una broma. Ni siquiera nosotros hemos pensado en hacer eso. - Dice Apo refiriéndose a ambos.
- Pues alguien debe hacerlo, pero no debe ser un alfa. - Alega el doctor. - Y quien lo haga, debe controlar su aroma.
Después de varios minutos discutiendo, el olor de Jeff me estaba intoxicando, al punto de excitarme como jamás lo había imaginado, y yo mismo recorría mi cuerpo con mis manos. A lo lejos escuché a Apo decir que él lo haría, pero solo porque era necesario para salvar al bebé y no porque realmente quisiera hacerlo.
Todos abandonaron la habitación, menos Apo, a quien divisé que se había quitado lo ropa y se estaba masturbando mientras me miraba retorcerme en la cama con deseo. Su pene es solo un poco más grande que el mío, pero no iguala el tamaño de Jeff que me hizo ver las estrellas cuando estuve en celo; se sube a la cama, se mete entre mis piernas y con sus dedos cierra mis ojos.
- Piensa en tu alfa; imagina que es él y no yo. - Susurró en mi oído derecho antes de entrar en mí.
- Ufff...
En un principio quise detenerlo, pero la verdad es que la imagen de Jeff sobre mi cuerpo, fue tan erótica, que la cama se mojaba con el lubricante natural que salía de mi culo. Casi podía sentir a Jeff embistiendo con fuerza en mi interior, mordiendo algunas partes de mi cuerpo y yo dejando rasguños por sus brazos, pero sin tocar a Apo.
Mis ojos estaban cerrados, mis manos apretaban las almohadas y aunque mi consciente sabía que era Apo, mi Omega interno se encargó de hacerme creer que era Jeff quien me estaba tomando. Apreté mis piernas alrededor de la cintura de Apo, no quería tocarlo con mis manos porque sabía que sentiría la diferencia entre él y mi alfa.
- ¡APO! - Me sentí extasiado de placer porque lo hacía tan fuerte como Jeff.
- ¡Mierda, no apretes tanto!
Él apretó mi muslo, pero eso solo me recordó a cuando Jeff lo hizo y después dejó una mordida en ese lugar; yo seguía sin abrir los ojos, pero estaba disfrutando de imaginar a Jeff. Por primera vez en meses quisiera que esto fuera real, que venga Jeff y que haga con mi cuerpo todo lo que desee, porque ese aroma del simulador me está volviendo loco.
Un orgasmo devastador me golpea como un terremoto y mi semen sale a gruesos chorros; imagino que es porque no he tenido un orgasmo en este tiempo; segundos después, Apo se corrió en mi interior. Al no ser alfa, no hubo nudo, él solamente salió de mi cuerpo y se acostó a mi lado, cubriéndose con las sábanas.
- Te ves mejor. - Me dice después de que recuperamos el aliento.
- Gracias, Apo. Espero que esto no haya sido tan feo para ti. - Entonces se echa a reír.
- En realidad, quería preguntarte, ¿cómo es que tu alfa aún tiene pene?... Creí que cortarías el mío. - Seguía riéndose y después de una pausa, dijo: - Esto no cambia nada entre nosotros, seguimos siendo solo amigos.
- Me alegra, yo creí que me pedirías matrimonio. - Lo hice reír aún más y me contagió esa risa.
- No pequeño. Yo espero casarme con un alfa que la tenga enorme y me perfore hasta el estómago; porque esto de penetrar a otro Omega, sí está bien, pero no es lo mío.
Después de reírnos un rato, Apo dejó entrar al doctor, quien dijo que mis signos vitales se habían normalizado, al menos temporalmente, pero también nos explicó que puedo volver a caer en la misma situación en la que estaba; aclaró que nos dejaría el simulador de aromas en caso de volver a necesitarlo y que tratáramos la forma de traer a Jeff de inmediato.
- ¿Aún necesito al alfa después de todo? - Pregunté con un poco de dolor.
- Lo lamento, pero te repito que no conoces la gravedad de estar separado del alfa con el que te imprimaste. La única manera en que puede uno de ustedes vivir en paz, es que el otro muera.
No sé porqué sentí un extraño escalofrío recorrer mi columna cuando dijo que solo la muerte podría romper el vínculo, es como estar casados sin haber firmado ningún documento legal. En cuanto el doctor cruzó la puerta, los chicos se quedaron conmigo; Build y Apo son los que siempre me están cuidando, así que los veo como hermanos.
A la mañana siguiente, pude trabajar con normalidad, solo que disminuyeron mis labores por lo del embarazo, empecé a encariñarme con el cachorro e incluso le hablaba de vez en cuando. Pero esa paz solo me duró una semana, recaí y está vez fue más doloroso en verdad, el doctor dijo que esto pasaría y que debíamos intentar de nuevo lo que pasó con Apo.
- Pero, ¿yo otra vez?... No, esta vez lo hará Build. - Se queja Apo.
- ... - Build me mira por un momento. - Está bien, lo intentaré.
Después de colocar el aroma de Jeff que me inundó como el océano en tsunami, mi excitación se fue por los cielos, y todos salieron inmediatamente de mi habitación, dejándome solo con Build. El aroma falsificado de Jeff había creado un momento erótico y mi culo estaba escurriendo mi lubricante, esperando a que alguien lo hiciera.
- Seré gentil. Prometo no lastimarte. - Las palabras de Build me sacaron una sonrisa. - Cierra tus ojos y piensa en tu alfa.
Hice lo mismo que la primera vez, obedecí cerrando mis ojos para pensar en que era Jeff, debo estar realmente demente por tener en mi cabeza al alfa que más daño me ha hecho. Sin embargo, no hay nada que yo pueda hacer, mi Omega está verdaderamente encaprichado con Jeff y me gusta cuando me muestra imágenes de él follándome sin piedad.
Es lo que mi mente reproduce una y otra vez mientras Build tiene su pene metido en mi culo; mi Omega me muestra la forma en que yo suplicaba por más y Jeff obedecía. Fue maravilloso cuando sudábamos y el alfa perdía su poco control y mordía partes de mi cuerpo; ver cómo se alejaba para volver a meterme su polla y me hacía cruzar un abismo entre el dolor y el placer.
- ¡AHHH!... ¡BUILD!...
Al igual que Apo, Build tampoco me besó, simplemente me penetraron mientras mi Omega le hacía creer a mi mente que quien lo estaba haciendo no era nadie más que Jeff Satur. En cuanto ambos llegamos a un asombroso orgasmo, Build se dejó caer a mi lado y rápidamente puso toda su ropa en su lugar, antes de mirarme con cierta culpa.
- Seguiremos siendo amigos, ¿verdad? - Entonces sonreí.
- Sí, solamente amigos. Pero llama al doctor, porque aún me siento muy mareado.
El doctor entró y después de examinarme, su diagnóstico fue que el tratamiento ya no iba a dar resultados y que ahora sí necesitábamos con urgencia la presencia de Jeff. Apo me dijo que habló con Bible para explicarle, pero que no entiende de razones, dijo que solo el día en que él muera, dejará de Jeff se acerque a mí.
- Llamen a mi casa directamente y pidan hablar con mi madre.
Mi último recurso, era acudir a la persona que me mandó lejos y que definitivamente comprendería el dolor que voy a sentir si pierdo a mi cachorro con quién ya me encariñé, mi bebé no debe morir. Cuando pude hablar con mi madre y le expliqué la situación, me dejó hablar con Mile, a quien le conté todo lo que ha pasado y que son Apo y Build los que me han mantenido vivo.
Mile me hace la promesa de traer a Jeff conmigo, solo por salvar a mi cachorro y sé que eso es suficiente, ya que el único que siempre puede persuadir a Bible es él. A penas pasaron unas 5 horas y yo sentía mi cuerpo más débil y mi mente más distante, cuando la puerta se abrió y Mile junto con Bible traían cargado a Jeff, dejándolo caer a un metro de la cama.
- ¡Arrástrate por mi hermano! Llega a él por tus propios medios. - Espeta Bible.
Por cada vez que Jeff hacía un esfuerzo para llegar a la cama, mi cuerpo se retorcía de dolor; y ahora que lo pienso, las feromonas de mi alfa se sienten ácidas, como de dolor mezclado con amargura. Mile se percató de mi dolor y él personalmente ayudó a Jeff a subirse a la cama conmigo; nos vimos a los ojos y lloré cuando lo vi en peores condiciones que yo.
- Mi Omega. - Suspiró con dolor y acariciando mi rostro. - Déjame aliviar tu dolor. - Se acercó a mí y al entender sus intenciones, me alejé de inmediato.
- ¡No hagas eso! - Traté de alejarlo, pero él me agarró del cuello y me acercó.
- Es la única manera de no perderlos. - Susurra.
- Pero, yo te perderé si lo haces... - Ambos llorábamos para este punto, pero Jeff no dio su brazo a torcer.
- Perdóname, no puedo estar sin ti, o culparme por la muerte de mi cachorro.
Antes de que yo pudiera responder, Jeff me marcó, pero algo que muy pocos saben, es que cuando alfa y omega están imprimados, a través de la marca, el alfa puede absorber todo el dolor del Omega. Así que en cuanto Jeff me soltó, ya no había ningún dolor en mí; sin embargo, él empezó a convulsionar, así que grité por el doctor.
- ¡Aléjate! ¡Ta, por favor, aún lado! - El doctor literalmente me quitó de encima de Jeff y pronto, él dejó de moverse.
- ¡¡¡AHAHAHAHA!!!
Un dolor profundo se alojó en la mordida que Jeff acababa de hacer, mis ojos empezaron a arder y sentía cómo mi corazón iba partiéndose en dos, hasta que dejé de sentir a Jeff. Bible me abrazaba con fuerza, mientras yo lloraba con tanto dolor que gritaba y el doctor le daba RCP a Jeff, pero él no respondía, no había ninguna reacción de su parte.
- Lo lamento, pero sacrificó su vida por salvar la tuya y la de tu cachorro.
Después de las últimas palabras del doctor, todo se tornó borroso, antes de caer en una oscuridad profunda...
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top