Capítulo 7




Narra Ta:




En cuanto nos alejamos, les pedí a los Omegas, que por favor me llevaran con mis padres para despedirme de ellos, pero me dijeron que la orden de Bible fue específica. Así que, Build que no iba manejando, sacó un celular del bolsillo de su pantalón y me lo entregó, luego de marcarle a mi hermano, quien después de unos segundos contestó la llamada.

- "¡¿Ta?!" - Escuchar el sonido de su voz fue tan reconfortante.

- ¡Bible! ¿Por qué? ¿Por qué no me dejaste ir a casa? - Fue lo primero que pregunté.

- "Todos queremos verte y abrazarte, no pienses que no. Pero este es el primer lugar donde el alfa vendría a buscarte..." - (Frenos de automóvil derrapando). - "Y hablando del imbécil, ya está aquí... Déjame deshacerme de esa escoria y te llamaré cuando sea seguro."

- ¡Bible! - Traté de decir algo, pero...

- "Te amamos, Ta. Por favor, cuídate mucho". - Bible colgó la llamada y me dejó con la palabra en la boca.

- Gracias por salvarme... Yo también los amo. - Susurré mirando el celular.

- Oye niño, ¿por qué hueles como a seis alfas? ¿Acaso vivías en un burdel? - Me pregunta Apo.

Realmente yo no me había percatado de los aromas que emanaba mi cuerpo, he pasado tanto tiempo teniendo miedo hasta de respirar, que no me he inclinado a olerme. Efectivamente, él tenía razón, pero solo eran los aromas concentrados de mis padres, hermanos y el más fuerte era el del alfa del que acabo de escapar.

- Ah, no. Es que mis padres y hermanos son alfas, es el aroma que se siente. Y el otro es de un tirano a quien espero no volver a ver en mi vida. - Contesté y Build me miró antes de acercarse a mi cuerpo y absorber mi aroma.

- ¡Debo haberme vuelto loco! ¡Es que creo que hueles a mi alfa! - Entonces Apo se rió.

- Por eso le preguntaba, yo también sentí el aroma de mi alfa... Como si eso fuera posible. - Dijo con cierta nostalgia.

- ¿Por qué ustedes son tan grandes si son omegas? - Traté de cambiar de tema porque me pusieron nervioso.

Fue Apo quien empezó a explicarme, que ellos vienen de padres omegas, así que son omegas natos, por eso son más grandes de lo normal y también son más dominantes, no son sumisos. Además, me contaron que pasaron años tratando de encontrar a sus alfas, pero que jamás aparecieron, por eso ahora están buscando a un Omega para vivir en trío.

- ¿Quieres ser el candidato a tercer mosquetero? ¡Te ves tan tierno que podría comerte! - Me dijo Apo.

- ¡Yo no quiero eso! - Alega de pronto, una voz en mi interior.

- ¿Omega? - Lo llamé en voz alta y ambos me vieron. - Esperen, es que no te podido hablar nunca con mi Omega interno y ahora parace que quiere hablar.

- Si quieres estar con ellos, no me opondré. - Vuelve a decir. - Pero no sé si podrás mojarte porque a mí no me interesa. - Me quedé boquiabierto, era primera vez que estaba teniendo una conversación con mi Omega interno y me sentí emocionado.

- ¿Qué sabes de la semana por la que me reclamó el alfa? - Yo también necesito saber lo que pasó.

- No puedo mostrarte aún. Perdóname, pero eso dolería mucho. - Sentí a mi Omega aullar de dolor.

- ¿Por qué va a dolerte? ¡Ese alfa no nos quiere! - Traté de que no se escuchara como reclamo, pero no logré nada.

- Bueno, el humano no nos quiere. Pero el alfa en su interior, vive y muere por nosotros. - Se escuchó melancólico y no quise saber más, porque es imposible que ese alfa tenga sentimientos. - ¡Yo lo amo!

Fue lo último que dijo y después de eso, ya no pude hacer que hablara conmigo, simplemente, es como si se hubiera metido en alguna cueva a llorar a su alfa, pero ese no es mi alfa. Después de eso, mi interior se quedó en silencio, es primera vez que hablo con mi Omega interno y lo que me dice es que ama a un alfa cruel y despiadado.

Traté de calmarme para poder disfrutar de mi libertad, pero de vez en cuando un sentimiento de ira y frustración se acomodaba en mi interior, y lo más extraño es que no eran mis emociones. Los dos omegas pudieron sentir mis cambios de ánimo en el aroma que emanaba de mi cuerpo y por eso quisieron cambiar de conversación.

- ¿También lo sienten? ¿Ese aroma? - Les pregunté directamente.

- Niño, te haré una pregunta y debes ser sincero... - Dijo Apo. - ¿El alfa del que huyes... te marcó?

- No. - Respondí secamente, pero con un ligero dolor en mi corazón.

- ¿Es posible que tu Omega se imprimara de él? - El de esa pregunta fue Build.

- ¿Qué es eso? ¿Qué es imprimar? - Pregunté confundido.

Entre ambos me explicaron que imprimarse de un alfa u Omega, significa crear un vínculo entre los animales que viven dentro de nosotros, es incluso más profundo que la marca de unión. Porque si no hay marca, ni imprimación, no hay emociones compartidas, pero si hay imprimación, aunque la marca no exista, siempre vamos a sentir las emociones del contrario.

- Es una locura, no estamos imprimados, es solo mi Omega cambiando de humor. - Dije negando esa absurda posibilidad.

- Bueno, esperemos que así sea, o tu cuerpo va a reaccionar al no estar cerca de su alfa.

Con las últimas palabras de Apo, todos nos quedamos en silencio y luego me quedé profundamente dormido en el asiento trasero, y desperté por unos dedos que se paseaban en mi rostro. Abrí lentamente mis ojos y era Build, quien me miraba con cariño y con una voz tranquila me pedía que despertara, porque ya habíamos llegado.

Me senté de nuevo y veo varias casas, hoteles, un zoológico, un lago con sus respectivos botes bicicletas y finalmente un inmenso edificio que dicen que es donde voy a vivir. Nos detenemos y bajamos, cuando de repente, un Omega me sale al encuentro y me abraza como si fuéramos mejor amigos, y justo detrás de él un alfa bastante guapo.

- Hola, soy James. Que gusto que llegaras con bien.

- ¿No te hicieron nada esos dos? - Pregunta el alfa. - No les hagas caso, solo hablan estupideces. A veces creo que debería montar un circo y ponerlos como la atracción principal.

- ¡Púdrete, Smart! - Le reclama Apo.

- Tú también púdrete sin tu paga de este mes. - Se lo dice con tono autoritario, tanto que me recordó a Jeff.

- ¡Cállense! - Se altera James, lo cual no es bueno por su embarazo. - Ven tesorito, te mostraré tu dormitorio, y luego demos una vuelta para que conozcas tu lugar de trabajo.

Nos fuimos conversando con James, me contó que ha sido difícil su relación con Smart, sobretodo porque es menor que él, pero que su Omega lo reconoció como su alfa y que decidió no ir contra la corriente. Después de mostrarme mi habitación, la cual es muy hermosa, me llevó hasta la 'atracción principal', que es un parque de diversiones, justo en el jardín del hotel.

Dimos un largo paseo con James, me presentó con otros empleados, en su mayoría omegas y betas, así que pregunté porqué no habían alfas trabajando en el lugar; la respuesta que recibí, fue muy simple y me gustó:

- El único alfa aquí es mi marido, y como ves, ya tiene pareja. No recibimos alfas en este pueblo a menos que ya estén emparejados, es una forma de cuidar a los empleados.

Me alegré tanto de escuchar esas palabras, es como llegar al lugar correcto, ese que mi corazón tanto ha anhelado y al que costó llegar, después de tantos años. James me dice que estoy encargado de la limpieza en el área de juegos infantiles y después me lleva de regreso al dormitorio, donde me pide que descanse, porque empiezo mañana mismo.

Al día siguiente fue bastante difícil mi primer día, pero de alguna manera, anduve con una sonrisa todo el día, solo por la felicidad que me daba tener libertad y ganar dinero por mi trabajo. Aunque siempre terminaba muy agotado, mi mente y cuerpo exigían más horas descanso, aunque siempre excedía las 10 horas durmiendo.




Dos meses y medio han pasado...




Desde que me fui de la mansión del alfa, las cosas se han puesto raras en mi interior, me refiero a los síntomas que últimamente me invaden, como: dolores de cabeza, náuseas matutinas, dolor en mi vientre si hago un movimiento brusco, dolor en mi espalda, todo el tiempo tengo hambre, pero sobretodo, el maldito cansancio que jamás se quita.

Apo y Build le pidieron a Smart un día libre para cuidarme, porque les preocupaba la situación en la que me encontraba, y al saberlo, fue el mismo alfa quien me envió a un médico. En cuanto el alfa cruzó la puerta de mi dormitorio, el olor de sus feromonas me inundó como un tsunami y no me gustaron en los más mínimo, así que terminé vomitando.

- ¿Y el doctor? - Pregunté cuando salí tambaleándome del baño.

- Se fue, dijo que mejor enviará a su colega beta.

Al menos una hora más tarde, llegó el otro doctor, los chicos habían estado poniendo paños con agua fría para bajar la temperatura y una almohadilla caliente en mi vientre por el dolor. El doctor hizo muchas preguntas, me revisó el cuerpo y finalmente, me dijo que tenía un diagnóstico, pero que antes de decirme, que le contestara la siguiente pregunta:

- No veo marca de un alfa, pero, ¿te has imprimado de uno? - Otra vez esa estúpida pregunta.

- No, eso no ha...

- Mi alfa. - Pude escuchar a mi Omega interno en un susurro doloroso.

- ¿Estamos imprimados con Jeff? - Fui directo con mi pregunta y su respuesta fue más que clara. Eso provocó que las lágrimas se me salieran sin control y el doctor solo bajó la cabeza.

- Solo espero que sea el padre del cachorro en tu vientre. - Su afirmación me dejó literalmente congelado de la sorpresa. - La razón por la que estás así, es porque necesitas del olor de las feromonas de tu alfa, tu bebé las necesita. Además, no has tenido relaciones sexuales con nadie desde que lo dejaste.

- ¿Se puede resolver de alguna manera? ¡Su alfa no es precisamente un santo y sus hermanos nos matan a todos si se dan cuenta de que los hemos unido! - Alega Build.

- Mantenerlos separados es lo que los está matando. Casi puedo ver a su alfa en una condición similar. ¿Acaso no saben que separar a un alfa y omega imprimados es mortal? ¡Han puesto en riesgo no solo sus vidas, si no también la del cachorro! - Nos regaña el doctor a todos.

- ¡No puedo volver! ¡No puedo! - Dije llorando. - Y yo no quiero un cachorro. No de ese maldito tirano... ¡No lo quiero, no lo quiero! - Grité desesperado.

- Ta, cálmate carño... ¡Mírame! ¡TA, MÍRAME! - Grita James, sacándome de mi trance. - Él no pidió venir... Y tal vez, tú tampoco lo pediste, pero piensa que te puede hacer feliz. Tómalo como una oportunidad.

- ¿Y si es un alfa? - Dije llorando.

- Yo le mostraré cómo deben portarse realmente los alfas. No te preocupes por eso. - Entra Smart en la habitación y me hacen llorar aún más.

- Bien... ¿Cómo está el bebé? - Pregunté, pero aún con el miedo de tenerlo y que sea tan cruel como su padre.

- Muy débil, y eso es porque tú estás débil. Pero se me ocurrió un plan para que podamos mantenerlos con vida, ya que un te faltan algunos meses de gestación, pero necesitamos al alfa. - Me desconcerté un poco.

- ¿Por qué? ¿Para qué lo necesito? - Reclamé molesto.

- Porque te imprimaste de él. La solución que te daré, es que engañemos a tu percepción de la realidad, que le hagamos creer a tu mente y cuerpo que estás cerca de tu alfa, pero va a llegar un momento, en el que eso dejará de dar resultados.

- ¿Cuánto tiempo podré estar sin él?

- A la velocidad a la que avanzan las cosas, un mes, 15 días, tal vez menos. Con suerte lograremos mantenerte vivo una semana con medicamentos, pero si necesitas tiempo para reunirte con tu alfa, debemos pasar al plan B.

- ¿Y cuál es el plan B? - Se altera un poco Build.

- Tengo un simulador de aromas en mi consultorio, solo debemos preguntarle a tu Omega sobre el aroma que emana de tu alfa y crearemos un escenario falso, solo que debes tener sexo con alguien más. ¿Estás dispuesto a que te toque otra persona?...




N/A: ¿Lo vieron venir? 👀😎

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