No podía creer que lo había hecho... me había unido a Ao'nung...

No pensé en los problemas, las negativas o los regaños que iba a conllevar esto, yo solo... viví el momento junto con él. Estar con él ha sido diferente, se convirtió en mi lugar seguro.

Con él no tenía que pretender nada, no esperaba que fuera el hermano mayor, el hijo perfecto o un gran guerrero. Él vio a través de mi y me escucho... y sigue aquí.

Ao'nung... probablemente este sacrificando más que yo en este momento y por eso no lo dude, no podía negarme cuando no vi dudas en sus palabras.

Abrí mis ojos al chocar con algo... y tarde en ubicarme. Era como un deja vú, de nuevo en la guarida secreta de Ao'nung... acostado a su lado y viendo su gran espalda frente a mi, pero esta vez era diferente.

Podía tocarlo y no solo eso... aún estaba esa sensación en mi cabeza del vínculo, podía sentirlo...

Me acerque a él y apoyé mi cabeza sobre su espalda, enrede mis piernas entre las suyas y pase mis manos desde su cintura hasta su pecho, terminando por abrazarlo y sonreír como un tonto por poder hacer una cosa tan trivial como poder amanecer a su lado.

-Buenos días...- escuche la voz ronca de Ao'nung.

-Buenos días...- contesté aun embobado.

Su cola se enredó en una de mis piernas y enredo sus manos con las mías, forzandome a pegarme aun más su cuerpo. Mi pecho quedo contra su espalda y mi cabeza arriba de su hombro, donde le dio oportunidad de besarme.

-Creó que me puedo acostumbrar a despertar a tu lado-susurro aun contra mis labios.

-Si, yo también- sonreí y le devolví el beso.

Se removió un poco y me aparté, para que él se volteara. Paso su brazo debajo de mi cuerpo y termine con la mitad de mi cuerpo sobre él, aun siendo abrazado.

-Aunque creo que ya deben estar buscandonos...

-Todavía no quiero regresar- fruncí el ceño derrotado.

-Ya es tarde Tey, ya te he robado por suficiente tiempo- su mano bajo por mi espalda.

-Bien... solo quería evitar el regaño por un poco más de tiempo.

-Les dirás sobre lo nuestro?- pregunto nervioso.

-No lo sé, tu quieres hacerlo?

-No... no aún, probablemente me destierren si lo digo ahora y sin prepararlos.

-Estoy de acuerdo, podemos... hacerlo poco a poco.

-Hagamos eso cariño.

-Si seguimos de esta manera será difícil ocultarlo- bese su mandíbula y escuche su risa, junto con el pequeño apretón en mi cintura.

-Ya es difícil...- tomo mi rostro y me hizo voltearlo a ver- has visto tu cuello?

-Que?- me levante espantado.

Toque mi cuello y sentí la marca de su mordida... y entre en pánico. Estaba tan ido que ni siquiera me detuve a pensar en esto.

-No te preocupes- se levantó tambien- también tengo algunas pequeñas marcas- señalo su propio cuello.

-Oh Eywa... estamos muertos.

-Esta bien, tengo algunos collares, con eso podemos ocultarlos.

-Si claro. Que más sutil que usar tus collares.

-Entonces quieres presumir las marcas?- se estaba burlando.

-Buscaré mi collar llegando, mientras mis padres no lo noten estoy a salvo.

-Como quieras... algún día tendrás que llevar alguno de los míos.

-Ah si? Y eso por qué?

-Porque seré yo quien te los regale- me tomo de la mano y nos puso en marcha.

No pide evitar sonrojarme, siempre tenía formas nuevas de sorprenderme. Tiene una forma peculiar de ser romántico y un presumido al mismo tiempo.

-Estaré esperando...- pude decir después de un rato.

-Yo también esperare el mío...

-Talvez lo haga o talvez no, será una sorpresa...

-Eso no sería...

-Ao'nung!- nos grito Rotxo apenas y llegamos a la aldea.

Nos soltamos de las manos y cubrimos lo mejor que pudimos las marcas, pero él se veía distraído y preocupado para realmente prestar atención.

-Qué sucede?- pregunto Ao'nung.

-Son las aldeas vecinas, parece que hay problemas.

-Sucedió algo?- preguntó ya más serio.

-Alguien esta persiguiendo a Turuk Makto.

-Que?- esta vez fui yo el que se preocupo.

Ao'nung volteó hacia mi y entendí que nos teníamos que separar ahora, ambos necesitamos ir a ayudar a nuestras familias.

-Te buscaré después- rozo nuestras manos sutilmente y acepte.

-Neteyam!- esta vez fue Tsireya quien me hablo.

-Que sucede?- algo no estaba bien.

-Es Lo'ak! Salió de la arrecife.

Se me hizo un nudo en la garganta. No podía creer que estuviéramos pasando por esto de nuevo.

-Sabes donde esta?- pregunto Ao'nung respaldandome.

-Creo que fue a buscar a Payakan- se veía nerviosa.

-Ve por los Ikul- le pidió a Tsireya- ve por el collar y verifica si tu familia esta bien, nos vemos donde siempre- me ordeno.

-Vale...

-Vamos Rotxo, preguntemos si hay peligro y regresemos...

Todos seguimos sus instrucciones. Esta vez llevaba más prisa, no podía dejar que Lo'ak tuviera otro problema... no ahora que probablemente estaban cerca de encontrarnos.

Llegué a mi tienda y no había nadie. Talvez le estaban dando el informa a mis padres... o solo salieron, no debía preocuparme por eso, tenía otro problema encima.

Fui hacía mis cosas y encontré mi collar, me lo puse y antes de volver a salir choque con Kiri.

-Donde estabas?- me interrogó con los brazos cruzados.

-Salí a dar una vuelta

-Si claro... y yo estoy ciega.

-No sé de que hablas.

-Vi la marca...- señaló su propio cuello para hacerme entender a que se refería.

-No digas nada- fruncí el ceño. Ni siquiera estaba sorprendido, confiaba en Kiri y no diría nada, pero aun no quería explicar nada.

-No puedo creer que nuestro hermano mayor fuera quien rompería el molde de hijo perfecto...

-Kiri...- le advertí.

-Esta bien, me alegro por ti...

-Gracias, supongo. Volveré más tarde...- le dije mientras salía de ahí.

-A donde vas?!

-A buscar a nuestro tonto hermano!

Si nuestros padres estaban distraídos, no nos meteríamos en problemas... solo quedaba rogarle a Eywa.

-Listo- me pregunto Tsireya cuando llegue junto a ella.

-Si... estas segura de que salió?

-Si, espero este bien.

-Vamos! -llegaron Rotxo y Ao'nung corriendo y se subieron a su respectivo Ikul.

Los cuatro partimos y a lo lejos empece a notar a Lo'ak, pero estaba junto con un Tulkun... era Payakan?

-No debemos acercarnos demasiado con los Ikul... nademos y mantengamos la distancia- pidió Ao'nung y aceptamos.

Nadamos el resto del camino y solo pude observar. Lo'ak realmente tenia un vínculo con ese Tulkun, no se sentía peligro a su alrededor como contaban las historias y... mi hermano parecía divertirse... hasta que se sumergiron.

Los seguimos. Lo'ak entro a la boca de Payakan y este la cerro, me altere y quise ir a detenerlo, pero tanto Ao'nung, como Tsireya me detuvieron.

Espera...

Tsireya me pedía que esperara después de ver a mi hermano ser comido...

-<Es un vínculo>- me aseguró Ao'nung.

-<Y esta bien que los dejemos>

-<Payakan lo escogió...>

Sonada algo increíble y probablemente algo que le pasaría a Lo'ak... pero eso me hacía sentir lejano a él.

Hace mucho no confiaba en mi para cosas así, los problemas siempre los causabamos juntos, pero ahora ni siquiera estaba al tanto de ellos.

-<El estará bien>- me aseguro Ao'nung, tal vez al verme desanimado.

-<Eso espero>

Y realmente estuvo bien, él salió intacto... pero no fue lo mismo regresando a la aldea.