Capítulo 19: Un acontecimiento inesperado

Capítulo 19: Un acontecimiento inesperado

WILSON WALTER

Estaba inquieto toda la noche sin poder dormir, mi perro percibía que estaba despierto acostado a un lado de mi cama y me miraba de vez en cuando en la tenue oscuridad, acompañando mi insomnio.

No debí tomar café al llegar tan de noche, ahora no tenía sueño.

Solo estaba pensando en lo ocurrido hoy, en la sonrisa de Bellota, en sus ojos cristalizados y en esa forma de mirarme, era algo completamente diferente a la chica que conocí ese día en la escuela.

Tenía vida.

Tenía colores.

Era la verdadera Bellota, no la amargada por una enfermedad que la estaba carcomiendo.

De repente la puerta de mi habitación se abrió un poco, mi perro fue el primero en alzar las orejas y mi mamá entró a la habitación pareciendo preocupada diciendo:

—Wil...

—¿Qué ocurre? —pregunté sentándome.

—Me ha estado llamando un número desconocido —dijo—, temo... que sea tu padre.

Me quedé un poco pasmado, y extendí mi mano hacia ella, mi madre entendió lo que le pedía y me dio su teléfono, bloquee el número, pero luego entendí que si tenía el número no iba a dejarnos en paz, así que saqué el chip y lo boté.

—Mañana hay que comprarte otra linea —dije.

Ella afirmó con la cabeza y tomando nuevamente su teléfono salió de la habitación.

Solté un suspiro volviendo a acostarme en la cama, mi perro Ragnar colocó su cabeza sobre mi hombro y cerró los ojos como si me dijera que me durmiera de una vez, pero no podía.

Le escribí un mensaje a Bellota a ver si se me calmaba la ansiedad.

Wilson: Gracias por acompañarme al concierto, te deseo una buena noche, TQM.

Esperé mirando la pantalla pero no me respondió, ¿me excedí con lo de “TQM”? no quería que pensara que estaba yendo muy rápido, es decir Te Quiero Mucho; TQM, todo el mundo lo usaba... ¿o aquí no?

Ahora estaba más inquieto.

¨****¨

Después de una larga noche donde se me hizo un poco difícil dormir, amanecí sin una respuesta de Borsun, aunque estaba más tranquilo porque de seguro que la vería en el instituto, o eso pensé. Porque no estaba, ni en su casillero, ni en sus clases extracurriculares.

 Uhm ¿hoy no le tocaba natación?

Fui hacia allá, tampoco estaba.

Intenté llamarla, pero me mandó al buzón de voz. Al salir de clases esperé sentado afuera en la grama al lado de mi bicicleta, ¿tal vez me estaba evitando por lo de ayer? O ¿sería por lo del TQM?

De repente Gina se acercó a mí, como siempre iba vistiendo una falda muy corta con una camisa que mostraba el ombligo y una cadenita plateada que adornaba su abdomen plano. Olía a fresas, siempre me topé con chicas como ella, pero me alejaba, eran las más acomplejadas y exigentes, rogaban atención y eran atosigantes, no me agradaban.

—¿Por qué tan triste, Wil? —dijo arrodillándose a mi lado, su cabello moviéndose un poco por el viento, su sonrisa de comercial iluminando su rostro.

—Solo estoy pensando. —me limité a decir.

Ella acarició mi cabello acercándose a mí en evidente coqueteo mostrándome un poco de su escote y dijo:

—Oye, ¿te gustaría ir a mi casa después de clases?, mis padres están de viaje podemos ver... películas.

¿Películas?

Estaba muy seguro de que lo último que pasó por su cabeza eran las películas si me daba una larga introducción de que tenía casa sola.

—Estoy algo ocupado. —me limité a decir.

Yo no era... de aprovecharme de las chicas, mi madre me enseñó a que eso no era de caballeros.

—¿Haciendo qué? —replicó Gina alzando una ceja pareciendo ofendida por mi rechazo, como si nadie en su joven juicio la rechazaría.

Tenia razón, pero mi juicio no era joven, tuve que madurar muy rápido.

—Escucha —dije por fin mirándola y le acaricié la mejilla para que no le atormentaran mis palabras—, eres una chica muy guapa, creo que todos con ojos pueden verlo, pero no soy el chico para ti, espera por alguien que valga la pena y no solo use tu cuerpo, sino que te adore.

Ella apretó los labios pareciendo confundida.

—¿Eres gay? —replicó— Es decir eso justificaría que estuvieras con la... Ború.

Le quité la mano de la mejilla, como me molestaba las personas tan superficiales.

Borsun —la corregí—. No tengo que ser gay para ser un caballero, crecí con mi mamá, ella me enseñó a tratar a una mujer, ahora, date tú ese valor.

Me levanté y me fui de ahí dándome por vencido, Borsun no había venido al instituto y solo perdía el tiempo.

***

Fui a su casa, no había nadie.

No contestaban el teléfono.

Fui a comprarle un nuevo chip a mi madre, hice la tarea, me distraje pero seguía intranquilo sin saber donde carajos se había metido Borsun.

***

Al día siguiente no la vi tampoco en la escuela. Fui a preguntarle al encargado de su sección y me dijo que estaba de permiso.

Eso me asustó más.

Volví a llamar a su numero y como obra celestial por fin me atendió.

—¿Borsun? —dije con el corazón en la boca—, ¡joder! ¿donde te habías metido?

—Hola.

Esa no era la voz de Bellota.

—¿Señora Jung? —pregunté confundido.

—Sí —su voz sonaba algo frágil—, disculpa no haber respondido antes Wilson, el teléfono de Borsun no estaba cargado.

Tenía que tomar el numero de los padres de Borsun para contactarlos en caso de emergencias.

—¿Donde está Borsun? —pregunté tal vez con demasiada desesperación.

—Borsun está hospitalizada, la tenemos en la clínica del Rose. En el piso 2, la habitación 3.

Sentía el corazón en la boca.

—Pero... ¿qué ocurrió? —susurré.

—Ha estado... —su voz se quebró y entonces se escuchó un alboroto en el fondo y ella colgó, fruncí el ceño completamente asustando queriendo teletrasportarme a través del teléfono a ver qué estaba pasando.

Salí del instituto, tomé mi bicicleta y fui a la clínica a buscarla, mis manos estaban temblando al pensar lo peor. Apenas entré a la recepción me detuvieron para preguntarme a donde iba, pregunté por la paciente del piso 2, habitación 3 como me había dicho su madre y la mujer buscó en su computadora para seguidamente mirarme con algo diferente en su mirada que me hizo temblar.

—La paciente ha sido trasladada a la morgue.

—¿La morgue? —repetí sin aliento.

A la morgue iba la gente que ya no estaba viva.

Caí de rodillas sin fuerzas al procesar que Borsun había muerto.

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Y se marchó y a su barco lo llamó libertad 🎶 okey no 😭😭😭😭 saben que hice el capítulo ayer y se me olvidó subirlo? 🥲 perdonen, Se nos ha muerto! vota para que reviva 😭😭😭

Instagram: Ysarisareinamoo

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