Portada Variante

Tanto los héroes y demás sobrevivientes buscaron debajo de los escombros, buscaron día y noche durante dos semanas sin descanso alguno, incluso los miembros de Night Raid se quedaron durante esas dos semanas para ayudar. Habían encontrado cientos de sobrevivientes, la mayoría heridos, algunos con alguna extremidad perdida, pero los miles que habían encontrado eran solo cuerpos sin vida. Spider Man escuchó el llanto de un niño, caminó hacia él y lo vio sentado y recostado en un escombro; se agachó y apoyó en una rodilla

— Hola, niño. Ven conmigo. Te ayudaré a buscar a tus padres

El niño no tenía más de diez años

— Mi papá dijo que si me quedaba aquí y lo esperaba, estaría bien

— ¿Desde cuando?

— Desde antes de que todo se destruyera

Un grupo de bomberos llevaban sujetando de las extremidades de un hombre de piel oscura, de aproximadamente cuarenta años. El niño lo ve y sus ojos vuelven a inundarse de lágrimas

— Dios mío — dijo Spider Man en voz baja y abrazándolo, consolandolo

El niño grita "¡Papá! ¡Papá!" una y otra vez en un llanto descontrolado, corriendo hacia su padre. Bulat usaba su armadura para salir de las ruinas con facilidad y con un par de personas heridas, luego los entrega a los paramédicos; sin embargo, había un hombre que estaba en una camilla, le sujetó el brazo con su mano vendada y preguntó:

— ¿Volverá a ocurrir? ¿Qué le digo a mis hijos? ¿Qué hicimos para merecer esto?

Bulat no respondió al instante, solo lo miró, buscando las palabras, pero solo desvío y bajó la mirada; le avergonzaba no tener respuestas. Él único que podría tenerlas era el Capitán América, pues para él era la segunda vez que vivía algo semejante. ¿Qué le dirían a los niños? ¿Qué le dirían a los niños que quedaron huérfanos? Akame ayudaba a atender a los heridos, le ponía vendajes a un adolescente, luego alzó la mirada y vio a Spider Man deseando que nada de esto hubiera ocurrido (como todos los demás), sabía que se sentía responsable por toda esta destrucción, por tantas vidas perdidas, por tantas familias que nunca volverán a ver a sus seres queridos. Akame solo lo miró pensando en que decirle mientras los bomberos y policías pasaban a su lado, algunos llevando cadáveres

Spider Man sintió una mano posarse en su hombro, alzó la cabeza y vio a Akame ofreciéndole su mano, él la tomó y ella le ayudó a levantarse. Días después se llevó a cabo una misa, el funeral más de Nueva York, incluso más grande que el día en que se llevó a cabo el atentado de las torres gemelas. Todos asistieron, Spider Man volvió a usar el traje negro pero se quedó afuera con la multitud

— Hola — saludó Akame vertida con un pantalón negro, una blusa amarilla y unas botas negras, llevaba un abrigo azul oscuro, una bufanda blanca y unos guantes — Te traje un café

— Gracias — tomó el vaso, se subió la máscara hasta el puente de la nariz y bebe un sorbo — Lo necesitaba

Es curioso como las personas, sin importar que tan diferentes sean, se vuelven cercanas después de una tragedia de tal magnitud. Akame era más cálida con él, se preocupaba, no quería dejarlo solo

— ¿No tienes frío? — le preguntó mientras el viento gélido soplaba con fuerza y los rayos del sol brillaban por su ausencia

— Sí, pero estoy acostumbrado. Creo que el cielo se mantendrá rojo por un tiempo

— ¿Qué le pasó al rojo y al azul?

— Solo lo usé porque este olía a alcantarilla, pero ya lo lavé. Mine sigue deseando acabar conmigo, ¿no?

— Ella es muy temperamental y un dolor de cabeza, pero es buena persona. Solo necesita tiempo

— Lástima que no sea como tú, así se ahorraría muchos golpes

— Como el que le dio Kate

— Te pareces a ella, ¿sabes? A Kate

— ¿En que?

— En muchas cosas

— ¿Será porque tenemos muy buen cuerpo? No puedo negar que ella es muy guapa

Spider Man se mantuvo en silencio y se rascó la nuca

— Lo tomaré como un halago — continuó Akame — Anoche hicimos juntas la cena. Me dijo que también era buena con la espada y me ofrecí a entrenar con ella

— Me alegra saber eso, sobre todo porque ella sufrió mucho en su adolescencia — Akame oía con atención — A los dieciséis fue violada en Central Park, ella sabía defenderse pero el infeliz era más grande y fuerte, y desde entonces no para de entrenar. Creo que ha recibido tantas palizas como yo

— Es una buena mujer con un corazón de oro, aunque no lo parezca

— De hecho es una de las pocas personas que se mantienen a mi lado. He perdido a tantos amigos que empecé a distanciarme de todos — bebió otro sorbo mientras miraba a las familias llorar — Ella usó parte de su fortuna para conseguir el mejor equipo para mi guarida y Moon Knight me ayudó a construirla. Hasta me ofreció unirme a los Vengadores de la Costa Oeste pero yo la rechacé. Enterré a tanta gente que si algo les llegara a pasar, yo... Solo no...

— No quieres ser el responsable de sus muertes — terminó la oración por él — Entiendo lo que sientes, yo también he perdido a personas que quería y maté a muchos inocentes cuando trabajaba para el imperio

— ¿Dónde está tu guarida?

— No servirá de nada. El terremoto la destruyó. Y no quiero que Kate desperdicie su dinero en mí. Ya tiene suficiente siendo la que financia a su equipo de vengadores

— No somos tan diferentes después de todo. Me pregunto si la Capital Imperial fue destruida

— Si lo fue, entonces ya no hay guerra en la que deban pelear

— Aún queda Esdeath. Si no la matamos, provocará una guerra en otros reinos. Un terremoto no la matará

— ¿Tienes miedo por lo que dijo Uatu?

— Demasiado, pero todos nos sentimos igual

— Si te soy sincero, dudo mucho que vayamos a ganar

— Ganaremos —  respondió al instante — Tenemos que intentarlo

— Es más fácil decirlo que hacerlo. Debí asegurarme de que nadie me seguía esa noche. Si Leone no hubiera cruzado el portal, nada de esto habría pasado

— Es verdad, pero no le digas a Leone. Saber que fue la responsable sin saberlo la tiene muy afectada

— Estuve hablando con Stephen, dice que tenemos poco más de un año para salvar nuestros mundos

— Tiempo suficiente para hacerlo. ¿Tú que dices?

— Digo que más vale que ganemos

Cuando la misa llegó a su fin, las personas se fueron a lo que quedaba de sus hogares, otras se fueron a refugios brindados por Stark Industries, Tony había programado a la Legión de Hierro para que ayuden en la reconstrucción de la ciudad, para sí acelerar las cosas. Unos días después, Peter se estaba despidiendo de su familia, Teresa le dio un beso en la mejilla y el perro (adoptado por May) se frotaba contra las piernas del arácnido, este se agachó y lo acarició con ambas manos como si lo secara con una toalla

— Cuídalas bien, perrito — se paró y las miró — Vendré de vez en cuando

— Peter, ¿qué pasa? — le preguntó May

— Nada, tía May. Estoy bien

— Sé muy bien cuando algo te pasa, Peter. El otro día te escuché hablar con esa chica de ojos rojos

— Es que... No sé si podré encontrarla, tía, no he parado de buscar a Jessica y cuando me estoy acercando, todo se va al carajo. Por más que lo intente, la gente que me importa son los que la pagan y... no sé que hacer

—  Empieza por hacer lo más difícil: perdonarte a ti mismo. Yo creo en ti, Peter. Eres una buena persona; y sé que encontrarás la forma de salvarla a tiempo. No tienes que hacer todo solo

— Tiene razón, Peter — aseguró Teresa — Todos necesitamos ayuda. Hasta Spider Man 

El Dr Strange abrió un portal que los enviaría a la sala de reuniones de la base de Night Raid, Peter se puso la máscara antes de que los de Night Raid lo vieran sin ella, cruzó junto a ellos el portal y Kate solo se quedó en el vestíbulo del Sactum Sanctorum con su ex novio kree Noh Varr, América, Moon Kmight y Cassie Lang, está última sintiéndose intimidada por la sola presencia del avatar de Konshu. Najenda se sentó en su trono, puso un cigarro entre sus labios y lo encendió. El silencio era lo que reinaba en este momento

— ¿Cuál es el plan, jefa? — preguntó Mine

— Seguir cumpliendo las misiones que nos asigne el General Saito. Stephen dijo que el terremoto afectó a la Capital pero en mucho menor medida. Aún quedan otras ciudades que deben ser liberadas. Suena tonto, hasta infantil, si lo comparamos con el fin del mundo

— ¿Qué hay de la hermana de Spider Man? ¿No vamos a salvarla? — preguntó Shelee

— ¿Cómo puedes olvidar algo tan importante? — preguntó Mine con molestia — Claro que vamos a salvarla. En parte es su culpa por dejarse secuestrar

Aquellas fueron como un fósforo que cae en la pólvora, pues Spider Man tomó del cuello, la alzó por encima de sí con una sola mano, y sus lentes habían tomado una forma más triangular, mientras amenazaba con golpearla. Bulat y Leone le sujetaron el brazo libre con todas sus fuerzas sin poder moverlo ni un solo milímetro

— ¡¿Crees que tú lo habrías hecho mejor?! ¡No tienes ni idea de lo que vamos a enfrentar!

— ¡Spider Man, ya basta! — exigió Najenda

Spider Man la dejó caer, Mine se llevó la mano al cuello mientras tomaba bocanadas de aire, viendo con odio pero también con miedo al metahumano

— Te dije que tarde o temprano te costaría caro esa actitud — le dijo Lubbock, ganándose una mirada asesina de la fémina de pelo rosado — Ni me mires así. Sabes que tengo razón

En medio de una aldea unos cuantos días de la Capital viajaban Spear y su padre Chouri en un carruaje, escoltados por los mejores soldados del Ejército Revolucionario, viendo por las ventanas a los habitantes en la pobreza extrema, pero Spear sentía que su viaje no acabaría bien y más preocupada estaba por su padre, quien el primer ministro antes que Honest. Chouri era ya un hombre de avanzada edad, su pelo brillaba por su ausencia, era delgado y no pasaba del metro setenta, tenía ojos saltones y rasgados como todos los habitantes de su nación y un enorme y plateado bigote de morsa acompañada por una barba de chivo

— Esto está peor de lo que pensé — comentó Chouri — Será tentar a la muerte con Honest como el primer ministro

—  ¿Cómo se supone que lo enfrentaremos? Según los informes, Esdeath regresó a la Capital hace unos días junto a Las Tres Bestias

— Eso es lo que más me preocupa, pero echarme para atrás significaría desamparar a toda esta gente, hija. No puedo permanecer retirado cuando hay personas que viven de esta manera, todo por la sed de poder de un solo hombre. Primero nos reuniremos con Night Raid para planear con más cuidado nuestro siguiente movimiento. Cambiando de tema, ¿cuándo piensas casarte?

— ¿Eso que importancia tiene? Si una buena persona se presentara, ni siquiera me casaría

— Ya veo, eres del otro "equipo" — Spear abrió los ojos estupefacta — No me sorprende. La otra noche te vi con Akame

— Por Dios, papá, no soy lesbiana. Simplemente no tengo ningún interés en el matrimonio

— Alguien te tiene que cuidar, hija. Llegará el día en que yo ya no esté en este mundo y no quiero que estés sola

Spear soltó un pesado suspiro y vio tres siluetas a lo lejos, teniendo una visión más clara conforme se acercaban

Chouri palidece al reconocerlos, el cochero (el soldado que llevaba las riendas) se desvío e hizo que los caballos corrieran a toda velocidad mientras que los demás soldados se quedaron para darles tiempo suficiente para huir

— ¡¿Qué sucede?! ¡¿Quiénes son ellos?! — preguntó Spear

— Las Tres Bestias. Son los subordinados de Esdeath, usuarios teigu y son impecables en el asesinato

— ¡Entonces no podemos dejar a nuestros hombres! ¡Debemos ayudarlos!

— ¡Están muertos! ¡Apenas sí nos consiguieron tiempo para huir!

El cochero gira a la derecha para luego ir cuesta abajo hacia la izquierda, continúa en línea recta y apresura a los caballos, Chouri se asoma por la ventana y ve tres caballos persiguiéndolos, caballos cuyos jinetes eran los subordinados de la General Esdeath. Chouri le pide al cochero que vaya más rápido y que se orille a la derecha sin detenerse, dicha acción los salvó de recibir de lleno el hacha que les había arrojado Daidara, quien era un fanático de la batalla, pero por alguna razón sus ojos eran blancos en su totalidad; el hacha no paraba de girar de manera horizontal y regresa esta vez para decapitar al cochero ya los caballos, el cochero se sacó su arma y jaló el gatillo, salvando así sus vidas. La frustración se ve reflejada en la cara de aquel asesino, quien se inclino hasta llegar al suelo para recuperar su teigu. Suben cuesta arriba y Las Tres Bestias alcanzaban a los rebeldes, pues el carruaje evitaba que los caballos pudieran seguir manteniendo la distancia, terminan de subir y el cochero trata de hacer que los caballos corran más rápido, sin embargo Nyau, el miembro más joven de Las Tres Bestias, sacó su teigu,  la cual era una flauta que al tocar una determinada melodía hizo que tanto los rebeldes como los caballos empezaran a quedarse dormidos. El carruaje se vuelca, el cochero cae rodando y después de unos momentos, solo dos de ellos comenzaron a despertar, Spear se dio cuenta que estaba tirada e el suelo junto a su padre pero algo la había sentir náuseas, lo cual fue ver el cuerpo mutilado del cochero

— ¿Qué demonios quieren? — preguntó Spear con tono hostil

Liver, el miembro más viejo de Las Tres Bestias y su líder, dirigió su atención a Chouri e hizo una reverencia mientras Daidara la sujetaba

— Señor Chouri, permítame presentarme,  soy Liver, líder de Las Tres Bestias y un gran admirador de sus obras políticas

— Si eso es verdad, entonces ¿por qué vinieron por nosotros? Si van a matarme, háganlo pero dejen ir a mi hija

Liver solo mantuvo la mano derecha abierta y los dedos juntos como una cuchilla, y con voz serena respondió:

— Me temo que eso no será posible, señor, las ordenes de la General Esdeath son absolutas 

Acto seguido alzó la mano por encima de su hombro izquierdo para luego decapitar al que alguna vez fue el primer ministro de la Capital Imperial

— ¡Papá! — gritó con horror y con los ojos llenos de lágrimas — ¡Asquerosos hijos de puta, yo misma me encargaré de matarlos!

Liver se limitó a hacer un gesto a Nyau, indicándole que matara a Spear. Ella luchaba inútilmente por liberarse, Daidara miró a otra parte mientras Nyau sacaba una cuchilla para cortarle la cara, como si de una máscara se tratase; los gritos de Spear, sus suplicas, resonaban a una distancia considerable pero nadie la escucharía, nadie vendría a salvarla, y en medio de sus desesperación gritó un nombre a todo pulmón:

— ¡Spider Man!

Y en medio de su tormento, su corazón dejó de latir por el shock. Nyau tomó el rostro de la fémina y se la mostró con alegría a sus dos compañeros, siendo Daidara quien lo veía con asco 

El trío de asesinos procedieron a arrojar carteles de Se Busca que decían el motivo y recompensa por la captura de Night Raid mientras cabalgaban, todo esto bajo ordenes del primer ministro, reconociendo que eran trucos sucios que no funcionarían con los funcionarios bajo el patrocinio del general Budo. Peter estaba acostado cerca de la orilla de un acantilado, mirando las nubes con las manos detrás de su cabeza y su máscara sobre su desaliñado pelo; cerró los ojos mientras sentía la caricia de la brisa y escuchaba el canto de las aves, el sentido arácnido vibró suavemente y él frunció el ceño, bajando con una mano la máscara para seguir protegiendo su identidad

— ¿Sigues sin confiar en nosotras? — le preguntó Leone sentándose a su izquierda y Akame a su derecha

— No soy de los que confían de la noche a la mañana — respondió Spider Man

— Se nota, pero tendrás que hacerlo tarde o temprano

— ¿Quieres hablar? — le preguntó Akame a Spider Man

— ¿Sobre que?

— Sobre lo que quieras. Tus amigos, como te convertiste es Spider Man, tu familia. Leone dice que tu esposa es muy hermosa, y tiene razón

Los lentes de su máscara tomaron una forma más triangular y horizontal

— Lo dices como si te gustara

— A Akame le gustan las mujeres — comentó Leone y se acercó más a su oído — Y si juegas bien tus cartas, podrías disfrutar lo mismo que otras mujeres que han pasado por su cama

— Intenten seducirme todo lo que quieran, no les contaré todo de un solo tiro — les aseguró sintiendo como su entrepierna lo traicionaba y se maldijo en voz baja, luego se enderezó para que no sea tan notorio — Sé que Najenda las envió a sacarme información. Puedo decirles algunas cosas pero nada más

— ¡Genial! Primero lo primero: el Capitán Rogers dijo que no existen las teigu en tu mundo, así que dinos, ¿cómo obtuviste tus poderes?

— Una araña genéticamente modificada me mordió hace varios años. En Oscorp crearon una super araña, tomaron las habilidades de muchas especies de arañas y las unieron en una sola

— ¿Hay más arañas como esa?

— Por fortuna no. La que me mordió murió poco después. Es mejor así

— Entonces ¿cómo es que Spider Woman puede hacer lo mismo que tú?

— Ella quedó al borde de la muerte por culpa mía, los médicos no esperaban que pasara de esa noche y yo... Estaba desesperado por salvarla, así que le inyecté una buena cantidad de mi sangre esperando que mi ADN mutado se fusionara con el suyo y tuviera mi factor curativo. Gracias a Dios funcionó, pero a diferencia de mí ella es muy buena persona, tanto que la gente se aprovecha de ella

— ¿Y tú esposa? — le preguntó Akame

— Por última vez, ella no es mi esposa, es mi hermana mayor

— Pero bien que la devorabas con la mirada. No te culpo, yo también lo hice. El solo hecho de imaginarla desnuda junto a mí y lamerle sus grandes...

— ¿Tienes que ser tan explícita?

— No es mi culpa que tengas una imaginación tan activa y tu pene se ponga tieso como una vara

— Y se ve que está muy bien equipado — comentó Leone con picardia y mordiéndose el labio inferior

— Ja ja — dijo Spider Man con sarcasmo — Como que hoy andan con ganas de fastidiarme. ¿Por qué no joden al enano de Lubbock?

— Porque es un idiota y un pervertido que siempre aprovecha cualquier oportunidad para vernos las tetas; pero tú no eres ni de cerca como él. Tú eres mucho más guapo, alto y sobre todo estás muy bien equipado

Spider Man se levanta de golpe cuando Leone le agarró la entrepierna

— Con razón Kate no te quita los ojos de encima — continuó Leone

— No me simpatizan. ¿Querían información o hacer un trío?

— Información — le dijo Akame con voz serena — Aunque no me molestaría ser madrastra. La que quiere sexo es Leone

— Hay cosas más importantes que hacer, no tengo tiempo para coger — dio media vuelta y caminó de vuelta a la base, pero se detuvo y miró por encima de su hombro a Akame cuando ella le preguntó por su hijo — ¿Qué?

—Tu hijo — habló ahora con más seriedad — La otra noche oí a Teresa confesarle a Kate que ibas a tener un hijo

— Estás caminando por terreno peligroso

— Hay otras formas de obtener información, Peter. No solo soy buena matando — se levantó y lo miró a los ojos — Prefiero que te sinceres con nosotras que tener que averiguarlo por otros medios

— ¿Me estás amenazando?

— Digo que el asesinato no es lo único en lo que soy buena. Solo estoy siendo sincera contigo y espero que tú también lo seas

— Y para eso querían seducirme

— Fue idea de Leone. Ya te vimos sin la máscara y prometemos no decir nada, pero tarde o temprano tendrás que decirles a ellos quien eres

— Váyanse al carajo — les dijo molesto y pero que Akame le recordara lo de su hijo lo sintió como un golpe de Hulk — Entiendo que quieran saberlo todo pero que son... duras

— Entiendo, pero estamos cerca del fin del mundo

— Mira, ese tema no tiene nada que ver con lo de la Bruja Negra

— Pero deje claro mi punto. Será más sencillo si hablas

— ¿Qué más quieren saber?

El sentido arácnido vibró una vez más, esta vez con mayor intensidad y se abalanzó hacia ellas justo antes de que dos agujeros negros se abrieran en el suelo. Adhirió sus pies a la rocosa pared pero fue tacleado por la espalda por un hombre blanco con manchas negras en todo el cuerpo, y cayeron en un agujero negro que se acaba de abrir, impactando contra el suelo. Ante ellos estaba Mysterio y a su lado estaba Spot. Antes de que cualquiera se diera cuenta, Spider Man tenía alzado y sujetado del traje a Mysterio, este se aferró a los brazos de su enemigo con el pulso acelerado

— No, por favor no — rogó Mysterio

Spot no hacía nada, pues esta reacción por parte del arácnido era de esperarse, debía seguir el plan. Akame y Leone se mantenían en guardia mientras Spider Man amenazaba a Mysterio con dejarlo lisiado si no hablaba

— Le pedí a Spot que te trajera porque quería hablar contigo, no que las trajera a ellas también — aseguró Mysterio controlando los nervios — No pretendía lastimar a tu mujer y a tu hija recién nacida

— ¡Las secuestraste, idiota! — gritó furioso arrojándolo contra la pared

Spot iba a intervenir pero Quentin, con el caso quebrado, le pidió que no lo hiciera

— Necesitaba tu maquina para viajar a otras realidades. Solo mírame, araña, estoy muriendo, tengo cáncer de pulmón y un tumor cerebral, ambos inoperables y tengo menos de un año de vida. Creí que si iba a otras realidades, encontraría una donde habría una cura definitiva

— Te habría ayudado

— El viejo Spider Man lo habría hecho, tú eres Moon Knight versión araña. Solo te falta ser un puto psicópata de mierda que le corta la cara a los criminales como si fuera una maldita máscara de feria

Spider Man se había calmado, vio que a Quentin se le había caído el pelo (posiblemente por la quimioterapia) y la expresión en su reflejaba el miedo a morir. Su furia había sido reemplazada por lástima, su viejo yo estaba regresando, aún quería matarlo o como mínimo dejarlo sufrir, pero también quería ayudarlo, llevarlo con Reed o con Tony; una vez más su verdadero yo decide hacer lo correcto, le pidió a Spot que abra un agujero negro al edificio baxter mientras un dron transmitía en vivo desde las alturas, y en una computadora, un hombre de mediana edad los observaba. Spider Man se detiene en seco y alzando la mano izquierda les indica a las asesinas que se detengan, pues el sentido arácnido había vibrado

— ¿A donde pensabas llevarnos, Spot? ¿Con Maggia? ¿The Hand? ¿Kingpin?

Spot se mantuvo en silencio, no supo que decir y Akame nota sus manos temblorosas

— ¿A que le temes? — le preguntó Akame pero un agujero negro se abrió en el suelo y tanto ellas como Spider Man cayeron en él

Quentin le pregunta a Spot a donde los envió, pero no obtuvo respuesta, ni siquiera sabía que Spider Man fue traído desde otra dimensión. En una cueva golpeada por las olas del agitado océano, la Bruja Negra sonreía al ver a través de su espejo como Spot y Mysterio se habían deshecho de tres de las personas que más amenazaban sus planes, aunque le parecía incoherente, pésima, la excusa que el dúo de villanos les dijeron y sabía que tanto Spider Man como las asesinas no le creyeron pero el buen corazón del arácnido era algo que podía usar en su contra. Su espejo volvió a tomar una apariencia normal y bajó los escalones de piedra que estaban detrás de ella, para asegurarse de que su prisionera se mantenga en donde la dejó, pues aquella joven mujer que casi dio a luz a su nieto estaba en un cuarto que era iluminado a duras penas por una antorcha en la pared. Era una mujer de veintitrés años, alta, su pelo castaño y descuidado le llegaba hasta la mitad de la espalda y tapaban parte de su bello rostro, sus grandes ojos azules estaban enrojecidos por tanto llorar, vestía una blusa roja de manga corta, un pantalón de mezclilla y unas botas color marrón; su nombre era Jessica Sabrina Parker Fitzpatrick, la hermana melliza menor de Peter Benjamin Parker: el Ultimate Spider Man

Los grilletes sujetaban su cuello, muñecas y piernas, y al igual que las cadenas unidas a la pared, estaban hechizados para que no pueda romperlas a pesar de tener la fuerza suficiente para darle pelea al Increíble Hulk. Su peor tormento era que la bruja usaba un hechizo para meterse en su mente y hacerle ver repetidas veces la muerte de su hijo no nato, haciéndola desear la muerte, pero no le iba a dar el gusto a pesar de lo débil que se sentía, pues la Claudia Wolf solía visitarla de vez en cuando para sacarle una considerable cantidad de sangre para preparar las pociones que la ayudarían a recuperar su poder. Jessica vio una vez más el vendaje en sus antebrazos manchados de sangre, y no se los quitaba debido a que su factor curativo se volvió más lento. Estaba sentada y recostada en la pared, abrazando sus piernas y ocultando su rostro, alzó la mirada al escuchar la manija girar y vio entrar a su torturadora

— ¿Cómo estás, querida? — le preguntó Claudia con expresión de satisfacción

— Déjame ir, por favor — suplicó en voz baja

Claudia, la Bruja Negra, se agachó a escasos centímetros de ella, puso sus dedos debajo de la barbilla para verla mejor, le acomodó un poco el pelo y le dio una fuerte bofetada, dejando la marca colorada en la mejilla de la ex prometida de su hijo

— Ya hemos hablado de eso, Jessica, tú no irás a ningún lado, permanecerás aquí el resto de tu vida y nunca volverás a ver a tu familia

— Yo no lo maté

— No, pero se murió por tu culpa y tuviste la osadía de embarazarte de él. Te habría asesinado el día en que te conocí, pero no había visto a mi hijo Mike tan feliz. Sin embargo, tuve que usar el poco poder que recuperé para darles una advertencia a tus hermanos — la castaña abrió los ojos sorprendida — Sí, tus hermanos están buscándote e ignoraron mi advertencia. Es una pena que no sean como tú: alguien noble, bondadosa y sobre todo sumisa

— Entonces tienes los días contados. No los conoces tan bien como yo

Claudia sonrió, le parecía adorable la ingenuidad de la joven metahumana; la expresión de Jessica pasó de mostrar un poco de esperanza a mostrar preocupación, miedo

— ¿Qué les hiciste? — preguntó temerosa la metahumana

— Ya lo verás

Claudia procedió a retirarse, había plantado aún más la angustia en su prisionera y mientras avanzaba por el pasillo oyó su grito entre llanto, pues Jessica temía que los haya asesinado. Una de las paredes de piedra se abrió de par en par, revelando un oscuro pero enorme sala; y de ahí salió un ser humanoide, de metro ochenta, era una especie de zombi y su interior era iluminado por una luz anaranjada, no tenía nariz y se podía ver a través de sus costillas, también era calvo y caminaba como si los pies le pesaran: era un Inferius

El inferius se arrodilló, bajó la cabeza y habló con una voz ronca

— ¿En que puedo servirle, mi señora?

— Necesito que elimines a tres personas por mí: Akame: una mujer muy peligrosa y portadora la teigu murasame, Leone: una mujer salvaje, le gusta el combate y es portadora de la teigu Lionell; y él más peligroso es Peter Parker, Spider Man: un metahumano poderoso pero demasiado inteligente, es medio idiota pero no debes subestimarlo. No tengo el poder suficiente para enfrentarlos, por eso te encomiendo esta tarea

— Puede confiar en mí, mi señora. Los mataré y traeré sus cuerpos ante usted

— Sé que así será — el inferius se levantó y la miró a los ojos — Mejpr aún, hierelos para asegurarme de que nuestra huésped los vea sufrir hasta morir

El inferius se desvaneció en medio de una niebla nauseabunda, Claudia hizo un gesto de asco mientras movía una mano cerca de su nariz para despejar ese mal olor, luego regresó con Jessica y sacó de su manga una daga mágica. Jessica se pegó más a la pared deseando que se la tragara sin dejar de llorar, Claudia hizo uso de su anillo para poder hacer magia y con un movimiento de su mano azotó a la castaña contra al suelo, lejos de la pared hasta donde las cadenas lo permitían, se agachó a su lado y acercó la daga al brazo izquierdo

— Tu estúpido hermano debería estar escondiéndose como un niño asustado, y en lugar de eso está cada vez más cerca de encontrarnos. Dime, ¿te has estado comunicando con él o con tu hermana?

— Por favor — rogó cerrando los ojos con fuerza — Yo no hice nada

— ¿Y Strange? ¿Qué tal de ese Moon Knight? Esa máquina de matar tiene a un maldito dios de su lado

— Ten piedad

— ¿Sabías que las personas con adn de araña tienen depredadores? Por más poderosa que seas, por más valiente y poderoso que sea tu hermano, no hay nada que puedan hacer contra ellos. Te lo preguntaré una vez más, ¡¿te has comunicado con ellos?!

Jessica negó con la cabeza sin abrir los ojos

— No te creo. ¡No te creo!

Deseosa, Claudia le subió la blusa hasta los pechos y con su daga, que comenzó a brillar al rojo vivo, le talló desde el abdomen hasta el vientre las siguientes palabras en mayúsculas "PUTA" "MALA MADRE" lentamente como si pintara un cuadro, los gritos de Jessica se oían perfectamente en toda la caverna; Claudia miró con satisfacción el resultado de su obra y para seguir deleitándose hizo un movimiento de mano para voltear a quien fue Spider Woman, le subió la blusa hasta los hombros y en diagonal le talló los números "24/12". Jessica no podía hacer más que gritar y llorar, deseaba con todo su ser despertar de esa maldita pesadilla, pero esa pesadilla estaba lejos de terminar. Peter Parker estaba acostado en una cama, los rayos del sol entraban por la ventana, sentía un peso sobre su brazo derecho, abrió los ojos ante la suave calidez del sol y vio que junto a él dormía una mujer desnuda cuyo pelo castaño le cubría el rostro, una de sus suaves manos estaba sobre el pecho del arácnido, sus grandes senos se aplastaban contra el torso, poco a poco abrió sus azules y grisáceos ojos, y miró los marrones ojos del varón

— ¡¿Tess?! — preguntó sorprendido

Intentó levantarse pero no podía, Teresa se acostó sobre él y le plantó un tierno beso en los labios. Peter tenía el pulso acelerado, no sabía como reaccionar, ¡había tenido sexo con su propia hermana!

— Tess, ¿qué fue lo que hicimos?

— El amor, Pete, hicimos el amor. ¿Por qué pones esa cara? Parece que viste un fantasma

— Somos hermanos. Esto está mal

— No sabíamos eso cuando me embarazaste, y aún así seguimos con nuestro amor secreto

— ¿Quieres decir que Abby es mi hija?

— Hija y sobrina, pero nadie sabe eso excepto Jess y los Cuatro Fantásticos. Pete, dime que ocurre

...

—  Akame — llamaba una voz femenina — Hija, ya es hora de cenar

Akame estaba con la mente sumergida en un libro, estaba sentada debajo de un árbol mientras siente la caricia de la suave brisa. La fémina alzó la mirada al escuchar su nombre una vez más, se levantó y se dirigió a la cocina, la casa era humilde, muy humilde, su hermana Kurome degustaba de su cena y sirviendo más platos; Akame parecía estar en shock, sus ojos lagrimeaban al verla, pues aquella mujer de mediana edad muy parecida a ella y a Kurome

— ¿Qué tienes? — preguntó la mujer antes de recibir un fuerte abrazo de su hija mayor

Akame no dijo nada y su abrazo fue correspondido. Leone estaba en un en la barra de un bar, bebiendo una jarra de cerveza, luego otra, y otra; junto a ella bebían Bulat y Najenda y detrás de ellos estaban los soldados rebeldes cantando y bailando, algunos sosteniendo jarras de cerveza y derramándola un poco. ¿Qué estaban festejando? Entre ellos se encontraba el primer ministro rodeado de rebeldes mientras era cruelmente mutilado, perdía la nariz, perdía las manos, perdía la lengua, perdía su pene, perdía cada parte de su repugnante y grasiento cuerpo; Leone puso la jarra en la barra, se abrió paso entre los rebeldes con una sonrisa siniestra, alzó el puño derecho y le atravesó el estómago a Honest para luego arrancarle los intestinos mientras los soldados gritaban de alegría, como si su equipo de fútbol hubiera ganado el campeonato. Sin embargo, no podrían estar más lejos de la realidad, pues Spider Man, Akame y Leone se encontraban inconscientes y atados por una especie de cadena mágica mientras eran llevados en el hombro de los Sin Mente