Dia nueve.

Tsu debía admitir que en un principio no esperaba mucho del japonés que escogió como su alumno ¿Porque? Simple solo lo escogió por ser callado, así que pensó que solo hablarían durante las horas de sus tutorías y luego cada uno seguiría por su caminó. Que equivocada estaba.

Todoroki era adorable ¿Y la mejor parte? El no tenía idea, era totalmente ciego ante sus propias lindas acciones, como cuando después de un buen entrenamiento le miraría con esos grandes y brillantes ojos en busca de una caricia en su suave cabello junto con comentarios favorables sobre su buen desempeño. Demonios, Lal tenía razón, si lo malcriaba llevándolo a comer algo de su elección después de la escuela solo para verlo sonreír un poco más. En su defensa, el chico parecía tan nuevo en esto del afecto entre tutor-alumno o mejor dicho cualquier tipo de afecto que Tsu literalmente podía sentir su corazón ser apuñalado con culpa si no bañaba con cariño y afecto al chico.

Por esa razón probablemente termino hablando con él incluso entre clases, es que verlo ahí solito en su puesto, mirandola de vez en cuando con esos ojos suyos llenos de anhelo que estaba seguro que el ni siquiera era consciente que estaba haciendo era demasiado para ella y su débil corazón.

Al principio temió que sus elementos pudieran colocarse celosos del chico y tratarlo mal... Pero pronto descubrió que al igual que ella cayeron por los encantos del chico con cabello blanco y rojo. Skull fue el primero, porque simplemente así era su personalidad, podía ser tímido y terminar siendo demasiado ruidoso por eso pero tenía un gran corazón por lo que no demoro en querer ser amigo del joven solitario. Lal y Colonnello le siguieron, Lal porque al igual que ella probablemente tampoco pudo resistir a un adorable Sho-chan queriendo cariño y cuidado maternal, y Colonnello simplemente porque si una persona tenía la aprobación de Lal y Tsu era alguien que valía su tiempo, además el cielo estaba seguro que siempre quiso un hermanito a quien mimar. Los siguientes fueron Fon y Viper, el azabache porque disfrutaba de ligeras y amenas conversaciones como las que podía tener con Sho-chan, y compartían los mismos gustos en te así que fue cuestión de tiempo antes de que cayera, Viper debido a que descubrió que su amistad con el chico podía ser lucrativa es decir, Sho-chan era malditamente atractivo para cualquiera con dos ojos, por lo que no era de extrañar que ya tuviera su propio club fan, el cual era más que feliz de pagar un buen precio por fotos de su lindo objeto de adoración, ver como los números en su cuenta bancaria subían siempre sacaba el lado suave de la niebla. Los últimos fueron Bermuda, quien estaba encantado de tener un compañero que no fuera tan ruidoso y pudiera durar dos minutos en total silenció, y Verde, el científico estaba enamorado con el quirk dual de Todoroki así que no tomo mucho para que lo considerara parte de su pequeño grupo.

Y no solo eso, sino que para mejorar las cosas Sho-chan comenzó a tomar "cosas" de ellos, palabras, o hábitos que para ellos eran normales pero que en el momento que el japonés usaba se volvía demasiado hilarante.

— Joven Todoroki eres tan maduro. — Le felicito un día All Might después de una clase y al principio no pensaron mucho de eso hasta que el nombrado contesto.

— Gracias, es el trauma de la infancia.— Contesto como si hablara del clima. Enseguida la cara del profesor se deformo mientras todo la clase quedaba en silencio hasta que ocho risas resonaron por todo el lugar.

¿Quien hubiera pensando que el chico tomaría una de las bromas internas de Tsu con Reborn para decirla a su profesor en medio de la clase? Se rieron tanto que apenas pudieron respirar y sus estómagos dolieron por un buen rato ¡Incluso Bermuda estaba apoyado contra un árbol riendo!  Eso hizo el truco, a ellos no les agradaba Todoroki, demonios ellos amaban a Sho-chan.

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