Chico Misterioso

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Ambas manos de Sunghoon se aferraron con fuerza a la amplia espalda de Niki, al sentirle empujar sus caderas con fuerza y sin consideración alcanzando su orgasmo minutos más tarde que Park.

Niki se apartó dejándose caer de espaldas a un costado de su acompañante en la cama, estaba muy lejos de sentirse saciado, aquel tipo que nada tenía que ver con su actual ligue, no dejaba de merodear en sus pensamientos, consiguiendo endurecer aún más una nueva erección creciente.

El ni siquiera se había quitado el condón y ya estaba necesitando repetir.

Mentiría si dijera que le producía algún tipo de remordimiento estar con Park teniendo a Jungwon en mente, él simplemente era un tipo que tomaba las oportunidades cuando se presentaban.

Él probablemente algún día pagaría muy caro por su desfachatez, el karma existía y algún día lo golpearía tan duro que él ni siquiera sería capaz de prever el golpe.

Eso era lo que Kazuha le decía a diario, pero claro para ella todo giraba en torno al amor y a la cursilería.

Niki jamás se había enamorado, y estaba completamente seguro de que no sucedería.

El amor sacaba lo peor de las personas a su parecer, Jay era un claro ejemplo de lo mismo.

El besaba el suelo por donde Sunoo caminaba, dejaba que le llamara por absurdos y vergonzosos apelativos cariñosos frente a los demás, además de presumir con todos como si fuese un esposo orgulloso.

¿Y todo para qué?

Para que al primer chisme falso que escuchara aquella pequeña rata sobre Jay siendo un infiel, le diera una bofetada públicamente y lo enviara por un tubo frente a todos los presentes.

Él estaba seguro de haber visto un par de huevos entre las piernas de su amigo al compartir regaderas luego de algún partido de fútbol, pero hasta el momento estaba comenzando a pensar que sólo los imaginó.

Ningún hombre que se respete a sí mismo deberá permitirse ser así de menospreciado.

Conseguir a un tipo como Jungwon sería una Odisea, y él estaba dispuesto a ceder lo suficiente nada más.

No mendigaría por su atención, mucho menos por tener algún tipo de relación con él, eso lo tenía claro.

Estaba siendo un tipo dulce, romántico y paciente, ¿qué más podía pedir aquel pasivo?

── ¿Debería preocuparme tu silencio? ── preguntó Park.

──Tengo demasiado en mente ahora mismo ── frotó su rostro con una de sus manos, antes de despeinar aún más su cabello estirándose en su lugar.

── ¿Algo demasiado importante? ── preguntó.

──Nada en especial ── se encogió de hombros finalmente sentándose sobre la cama y quitándose aquel molesto y húmedo preservativo.

── ¿Estás seguro? ── insistió.

──Si tienes algo que decir sólo hazlo ── se quejó Niki notando hacia dónde se dirigía la conversación.

── ¿Quién es él? ── preguntó acomodándose despreocupado de medio lado en la cama.

──Un nuevo amigo de Kazuha ── mencionó creyendo que era demasiado estúpido negarlo a estas alturas.

── ¿Él está interesado? ── preguntó.

──Eso creo ── suspiró ── no vine hasta aquí a confesarme ¿sabes?

Park era muy consciente de la personalidad de mierda que tenía Niki, él era extremadamente explosivo y demasiado susceptible cuando se sentía incómodo, era algo con lo que podía lidiar.

──Sigo sin entender ¿por qué estás aquí? ── comentó acomodándose a horcajadas nuevamente sobre el regazo de Niki ── ¿es demasiado tímido para tí? ── preguntó tentativamente presionando su torso contra el de su acompañante ── ¿está dándote problemas? ── agregó deslizando sus labios por parte de su cuello y haciendo su camino hasta los del contrario.

──No es un problema, estoy aquí porque estaba necesitando algo de esto ── comentó seguro tomando por la cintura a su acompañante ── ¿desde cuándo necesito una razón para buscarte? ── preguntó alzando su torso hasta quedar sentado con aquel lindo chico aun cómodamente sentado sobre su entrepierna ── ¿no querías verme? ── mencionó divertido dejando una suave mordida sobre su mandíbula.

──No me has dado una razón para querer hacerlo ¿verdad? ── tomó el rostro de Niki entre sus manos, viéndolo directamente.

──Claro que no ── comentó seguro Niki.

── ¿Cuál es su nombre? ── preguntó apartando sus labios de los contrarios.

── ¿Es eso relevante? ── respondió Niki.

──Sólo siento curiosidad ── comentó despreocupado.

──No deberías.

── ¿Por qué no quieres decírmelo? ── mencionó acomodando el cabello de Niki tras su oreja ── ¿me crees capaz de hacer algo respecto contra él?

──Claro que no ── negó ── pero no deberíamos hablar sobre esto, estábamos en algo más ¿no?

── ¿Desde cuándo eso es un problema para ti? ── preguntó ── no es la primera vez en que hablamos de esto en una situación así.

──Prefiero no hacerlo esta vez ── comentó tomando el rostro de Park entre sus manos antes de buscar sus labios atrapando estos entre los suyos, y de paso buscando acallar sus molestas preguntas.

── ¿Qué lo hace tan especial?

A Park no le estaba gustando para nada el rumbo que estaba tomando la conversación, Niki no era un Santo y él lo sabía, era muy consciente de que lo estaba compartiendo con más personas.

Pero él jamás había rehuido a darle información sobre otras personas como en ese momento, él lo estaba evitando por alguna razón.

──No he dicho que sea especial ── comentó seguro ── tu interés realmente me está preocupando.

── ¿Él es atractivo? ── preguntó consiguiendo un jadeo ahogado por parte de Niki al ondear sus caderas prácticamente frotándose contra su entrepierna ── ¿caliente?

Niki ajustó aún más su agarre sobre la cintura de su acompañante, al sentirle removerse bruscamente provocando un suave dolor placentero sobre su necesitada erección.

── ¿Te gustaría que se nos uniera? ── insistió ── es una de tus fantasías ¿no? ── mencionó tentativamente ── estar con dos chicos a la vez ── aclaró.

Niki tragó saliva re lamiendo sus labios, era muy cierto que eso estaba en un primer puesto entre sus fantasías, pero no estaba seguro de que tanto debía fiarse de las palabras de Park.

──Si me das un nombre tal vez podría hacer algo al respecto ── comentó de manera seductora sobre los labios de su acompañante ── podrás tomarnos a ambos, sé que podrías con eso ── mencionó deslizando sus manos por los hombros de Niki ── puedes con eso y más.

Niki parecía estar demasiado interesado y al borde de hablar, Park por su parte buscaba no enseñar sus cartas, el no pretendía bajo ningún término permitir que aquel desconocido jugara con la mente de Niki hasta quedárselo.

Pero era tan difícil, sin tener un nombre por dónde empezar.

¿Por qué Niki estaba tan interesado en ocultarlo de él?

¿Qué era lo que hacía tan especial a aquel pobre diablo?

Él pudo sentir una de las manos de Niki hacer su camino hasta tomar uno de sus glúteos con fuerza, colando uno de sus dedos entre ambos y deslizando este tentativamente por aquel lugar.

Niki podía aún percibir la humedad producto del lubricante bajo las yemas de sus dedos, por lo que sin siquiera pensarlo dos veces coló uno de sus dedos en el interior de su acompañante

No buscaba bajo ningún término distraer a Park de su conversación, el simplemente estaba totalmente tentado y sabía que por más evasivas que utilizara, el no olvidaría fácilmente el tema.

Un segundo dedo acompañó al primero, Niki parecía totalmente maravillado al amortiguar el gemido que escapó de entre los labios de Park con los suyos propios.

── ¿Más? ── preguntó divertido al sentir a Park forzar sus caderas contra su mano, buscando mayor profundidad y empalarse a sí mismo sobre sus dedos.

Pudo ver el cuello y parte del pecho de Park adquirir una suave tonalidad rojiza al forzar un tercer dedo, acompañando a los demás.

Los dedos del menor se hundieron con fuerza en la piel expuesta de los hombros de Niki, a los que se encontraba firmemente sujeto, a la vez que un áspero gemido resonaba en la habitación.

──Espera ── comentó alcanzando un preservativo de su mesa de noche.

──Tengo mis manos ocupadas ── comentó burlón Niki, ajustando aún más su agarre sobre uno de los glúteos de su acompañante mientras los dedos de su otra mano continuaban firmemente hundidos en el ── Hazte cargo.

Park abrió el envase sin mayor problema, pero Niki no estaba ayudando demasiado, el húmedo preservativo resbaló de entre sus dedos el sentir los dedos de su mayor moverse en su interior.

── ¿Pasa algo? ── preguntó divertido Niki, recibiendo sólo un suspiro frustrado en respuesta.

La espalda de Park se arqueó abruptamente, y su respiración se tornó mucho más pesada.

Un quejido escapó de entre sus labios, presionando su frente sobre el hombro de Niki, olvidando repentinamente el preservativo al sentirle rozar tentativamente su próstata

── ¡Hey! ── Niki tomó el rostro de Park con una de sus manos alzando este con facilidad, sin la más mínima delicadeza ── Creí que habíamos hablado sobre esto, odio hablar sólo.

Park lo sabía, pero había algo tan tentador y provocativo en molestar a Niki, que la mayoría de las veces le buscaba pelea deliberadamente.

──Si estoy preguntando algo, espero una respuesta ── la expresión dura de Niki, consiguió extender un ligero cosquilleo en el bajo vientre de Park.

──También yo ── re lamió sus labios ── ¿qué estás ocultándome?

Niki chasqueó la lengua, sintiéndose demasiado frustrado, y de paso dejando caer su cabeza hacia atrás.

── ¿Pensabas en él mientras estabas sobre mí? ── no había recelo o molestia en el tono de Park, sonaba más bien entre divertido y burlón ── ¿quisiste llamarme por su nombre en algún momento?

Niki no se sentía capaz de responder, o mucho menos de pensar con claridad al sentir la lengua de Park deslizar por toda la extensión de su cuello.

── ¿Eso es un sí? ── un gemido complacido escapó desde lo más profundo de la garganta de Niki al sentir a Park tomar con firmeza su erección en una de sus manos.

Park le empujó por lo hombros antes de tomar finalmente el preservativo, deslizando este por todo el espesor de su erección antes de acomodarse sobre él.

── ¿No vas a darme un nombre? ── preguntó Park alineando la latente erección de Niki bajo su cuerpo, antes de bajar sus caderas, dejando escapar un gemido al sentirle abrirse paso en su interior.

Una de las manos de Niki se ancló firmemente a la cintura de Park, continuaba resistiéndose a dar un nombre, pero debía admitir que Park sabía jugar sus cartas, el conocía bastante bien la manera de hacerle hablar y aunque él se resistiera no duraría demasiado.

Niki continuaba con sus ojos cerrados intentando no caer en las trampas que el tipo podría tenderle, sin saber que sólo estaba facilitándole el trabajo.

Las manos de Park recorrieron desde el abdomen de Niki hasta su pecho, deteniéndose sobre este al oír un suspiro en respuesta.

Park acomodó los oscuros rizos azabache que resbalaban por su frente al ver fijamente a Niki, ejerciendo mayor presión sobre el torso del mayor al sentirle alzar sus caderas.

Niki se quejó, suspirando frustrado.

Su erección dolía, producto de la presión que ejercía Park en torno a esta.

──Sólo respóndeme y estaré a tu completa disposición ── susurró sobre los labios de Niki.

Esto estaba cruzando el límite de lo tortuoso para el mayor, sentía su piel arder en necesidad y aquel tipo no estaba ayudando.

── ¿No? ── preguntó Park ── supongo que tendré que buscar la manera ── aclaró alzando su cuerpo muy dispuesto a apartarse de Niki.

No se estaba rindiendo realmente, él sabía que Niki terminaría dándole el nombre de aquel entrometido.

Por lo que ni siquiera pareció sorprendido al sentir su espalda impactar contra la cama, al haber invertido Niki sus posiciones.

──No me gusta la idea de que Jay esté rondando a tu alrededor

── comentó Niki, acomodándose entre las piernas de Park ── ¿debería hacer algo al respecto?

──No es necesario ── respondió rápidamente.

── ¿Vas a rechazarlo? ── preguntó sobre los labios del contrario.

──Odio prometer cosas que no voy a cumplir ── respondió divertido ── últimamente me he sentido muy solo, y Jay ha sido muy buena compañía.

Una sonrisa tiró de los labios de Park al verle tensar notoriamente su mandíbula.

── ¿Has estado viendo a Jay? ── preguntó seriamente.

──Y tú a aquel chico misterioso ── chasqueó la lengua.

──No es lo mismo ── aclaró Niki.

──Seguro que no ── mencionó ── muero por saber que lo hace tan especial e impresionante.

Un gemido ahogado escapó de entre los labios de Park al sentir a Niki hundirse en él bruscamente y en sólo un empuje.

── ¿Así serán las cosas desde ahora? ── preguntó con la respiración un tanto irregular, rodeando el cuello de Niki entre sus brazos al sentirle golpear de manera constante e insistente en él.

Los dientes de Niki mordieron sin consideración el cuello de Park, mientras alzaba sus piernas sujetando estas sobre sus antebrazos, sin darle un solo respiro entre una embestida y otra.

La molestia de saber que Jay ya había estado en algún momento con Park, no hacía más que incrementar haciéndole sentir sumamente estúpido y traicionado.

──Espero no le moleste que haya dejado marcas ── mencionó de mala manera y bastante agitado Niki.

──Espero lo mismo de aquel chico misterioso ── respondió Park ── las marcas en tu espalda no se irán pronto ── aclaró sobre los labios de Niki.

──El chico misterioso ── chasqueó la lengua Niki ── suena aún más interesante si lo llamas así.

──No puedo llamarlo de otra manera ── comentó despreocupado.

──Jungwon ── comentó Niki llamando la atención de Park quien apartó su rostro rápidamente observándole detenidamente ── si es muy difícil de recordar para ti, puedes simplemente llamarlo "El novio de Niki"

La expresión de Park cambió abruptamente al oír esto último por parte del mismísimo Niki.

Él tenía un novio, aquel hijo de puta aparecido había conseguido el título que Park había buscado por tanto tiempo, siendo un recién llegado en la vida de Niki.

Decir que estaba furioso sería quedarse corto, él se encargaría personalmente de aquel intruso y de que no le quedaran ganas de volver a acercarse a su hombre.

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