LEVEL 7
READY, PLAYER TWO?

Todo iba para la mierda.

Había estado tratando de evitar a Michael todo lo posible desde lo ocurrido en clase de teatro, aunque no era difícil, no es como si él se hubiese molestado en buscarlo tratar de acercarse a él para disculparse por casi abollarle la cara y el desastre de su cumpleaños.

Se sentía dolido, tanto que no podía sacárselo de la cabeza. Ni siquiera podía insultarle o hablar mal de él con los demás. Por la mierda, ni siquiera quiso mencionar el detalle del golpe para evitar que se pusieran en su contra. No sabía si eso último era por protegerlo... O porque no tenía que meter a sus amigos a un tema privado que no deberían criticar.

Esto lo estaba consumiendo, miraba su teléfono esperando mensajes pero Michael no le enviaba mensajes. Él quería enviarle alguno ¿Pero qué podía decirle? ¿Por qué siquiera debería ser él quien iniciara la conversación? ¡Se supone que esta ba indignado! ¡Fue su novio quien se portó como un imbécil! Ah, y de todos modos lo extrañaba como si no lo viese desde hace años, a pesar de que solo había pasado una semana.

Trató de distraerse con sus amigos, su padre, hasta con Heidi y Evan, pero él siempre estaba en su cabeza.

Hoy volvía de la casa de Jake. Había ido para ayudarlo con el trabajo en grupo de biología y estaba agotado. Afortunadamente su padre no estaba en casa, se había ido a una cita con Heidi. Qué afortunados son algunos ¿No?

No le quedaba mucho que hacer más que mirar televisión. No tenía mejores ideas para gastar el rato a menos que Michael estuviese presente, pero eso no era posible en este momento... Y quizá nunca.

¿Esto sería el fin de su relación? No podía creer que en apenas unos meses todo se haya ido tan rápido al demonio ¡Todo había sido tan hermoso en el comienzo! Lo anhelaba de regreso, tan solo una vez más, no importaba cómo. Se negaba a perder a su mejor amigo y al amor de su vida de esa manera. Solo que... No dependía solo de él, no pretendía "volver" con Michael si él no se disculpaba por nada, no era tan tonto.

La tarde ya estaba volviéndose noche afuera. Era un viernes bastante bonito para quedarse encerrado comiendo frituras y despotricando contra la película de El ladrón del rayo, como estaba haciendo en este momento, y así hubiese continuado hasta que le agarrase el sueño pero... No esperaba que su padre llegase tan temprano.

Bueno, creía que era él quien estaba tocando la puerta, pero su padre tenía las llaves de la casa.

–A estas horas... –Murmuró para sí mismo con extrañeza, dirigiéndose a la puerta a abrir. No le tomó ni medio segundo observando a su visitante para darse cuenta de que había sido pésima idea abrir sin preguntar, por lo que cerró de golpe sin dejarle terminar la oración.

Mierda, era Michael, y estaba volviendo a tocar la puerta después de recuperarse del susto que fue casi romperse la nariz de un portazo ¡¿Qué estaba haciendo ese idiota aquí?!

–Jeremy, abre por favor. –Pidió al otro lado de la puerta. El aludido bufó limpiándose una lágrima con el dorso del brazo.

–¿Qué es lo que quieres?

–Solo... Quiero disculparme, y que hablemos.

Jeremy lo pensó por aproximadamente dos minutos. Estaba confundido con respecto a sus sentimientos. Por un lado quería arreglar las cosas con Michael, por el otro quería mandarlo a la mierda, por abajo... Tenía hambre. Ah, y por arriba estaba muerto de miedo ¿Qué debería suponer luego del ataque de ira que tuvo esa vez? Sin embargo, se forzó a negarlo. Michael nunca lo golpearía, al menos no a propósito ¿Verdad? No tenía que tenerle miedo.

–Está bien, puedes pasar. –Respondió por lo bajo, abriendo la puerta para que pasase. Michael apenas dio un paso adentro hizo una mueca al ver que la flor en su mano había perdido sus pétalos. Jeremy se extrañó, no había notado la margarita antes.

–Yo uh... Iba a darte esto pero el golpe de la puerta... Creo que la mató. –Se rió por lo bajo disimulando la vergüenza. Jeremy intento no sentirse adulado.

La verdad es que las margaritas eran sus flores favoritas, Michael lo sabía perfectamente.

–Solo... Vamos a sentarnos y dime lo que tengas que decir. –Indicó impacientemente, guiándolo al sofá. Se sentaron alejados, Jeremy con los brazos cruzados y una pierna sobre la otra, tenso y molesto, mientras que Michael con expresión nerviosa y todo se veía en una postura más relajada. Eso le enfadaba ¿Cómo es que estaba tan relajado? ¿No se le pasaba por la cabeza que si no lo perdonaba su relación de hace 13 años se iría muy al carajo? –Espero que esta vez no pretendas gritarme.

Michael suspiró pesadamente, seguro que captó ese golpe indirecto. –Escucha, yo... Hice cosas malas. Pero solo quiero que me escuches, si decides perdonarme o no ya es tu decisión.

–Por supuesto que lo es, y por supuesto que hiciste cosas malas.

–Sí, lo sé. Pero no pretendía hacerte daño.

Jeremy casi suelta una risa sarcástica. –¿Verme llorar como magdalena no fue bastante evidente? –El silencio reinó por unos momentos. Si la tensión tuviese peso sobre la atmósfera eso explicaría por qué Jeremy ahora se sentía ligeramente deprimido. –¿Por qué lo hiciste? ¿Por qué... Me hiciste eso?

–Es que yo... Me siento algo celoso ¿Sí? –Admitió. El de pecas no dijo nada, solo escuchando expectante. –Ahora ya no somos solo nosotros dos como lo éramos antes y... A veces me asusta verte tan cerca de ellos. Siento que vas a dejarme solo de nuevo y... Y-Yo solo entro en pánico y actúo sin pensar. Eres tan perfecto, Jeremy... No es de extrañar que todos te quieran.

Ok... Costó resistirse a tan halago. –¿Por qué no me lo dijiste y ya?

–Porque tú ya tienes tus propios problemas. No necesitas cargar con los míos.

De repente sentía su furia mermar ¿Todo esto se debía por simple falta de atención? ¿En serio Michael se sentía así de abandonado? Bueno... Aunque estaba enojado por lo que hizo, no podría negar que fue su culpa meter esas malas ideas de sí mismo entre ambos. No debería estar sorprendido de que Michael creyera que lo dejaría como si nada algún día de estos.

–Michael, escucha. Tú me importas ¿Está bien? Me importas y te amo más que a nadie, y lo sabes. –Pausó para ser claro una vez que tuvo toda la atención de su invitado. –Y tengo ahora a más gente que querer pero... No te dejaría atrás de nuevo. Necesitas confiar en que no lo haré. –Michael asintió frenéticamente como si no pensara lo contrario, casi como un niño pequeño. Aquello lo enterneció tanto que no pudo terminar sin decir. –Pero... Entiendo que te sientas inseguro por mi culpa, así que trataré de ser más atento.

–¿Eso quiere decir que sí me perdonas?

–Claro que sí, tonto.

Chilló de la sorpresa cuando Michael literalmente lo aplastó contra el otro lado del sofá para llenarlo de besos, pero segundos más tarde estaba riéndose por lo bajo respondiendo uno que otro de sus veloces besos, pero Michael estaba tan eufórico que apenas le daba la oportunidad.

–¡Gracias, gracias, gracias, gracias! ¡Te amo tanto, Jeremy! ¡Eres el mejor novio de todos!

Entonces todo volvió a su lugar. El miedo, la tristeza, el dolor, todo se esfumó en ese mismísimo segundo que acunó su rostro con sus manos y lo besó tan dulcemente como no había hecho hace tiempo. Michael le correspondió más inquieto, pero pronto se tranquilizó entre sus labios.

–Te extrañé mucho. –Fue lo único que atinó a decirle.

Todo iba de maravilla.

(...)

Después de que las cosas se calmaran más entre los dos, ambos acordaron una piyamada. Michael por suerte tenía un par de cosas a mano que había dejado en el auto, y de todos modos ya tenía su propio cepillo de dientes en la casa, así que no hubo muchos líos o discusiones sobre el tema.

Él ahora mismo estaría en el baño preparándose para ir a dormir o quizá ver una película, pero Jeremy tenía planes diferentes.

A ver, no es que quisiera olvidar todo de repente pero... Chloe le había mencionado una vez que la mejor forma de completar la reconciliación es con una buena dosis de sexo ¿Podía negarle eso? Jake y ella estaban de lo mejor juntos desde que se acostaron en la fiesta de Halloween. Seguro que eso funcionaba.

Estaba ligeramente nervioso. Ya había tenido relaciones con Michael, pero no fueron más de un par de veces y siempre lo iniciaban de forma casual con los besos. Nunca había intentado "ser sensual", después de todo no era su fuerte, era demasiado torpe como para intentarlo. Pero... Vamos, tenía al hombre en su casa, totalmente ignorante e inocente de lo que planeaba ¿No era este el momento ideal?

Estaba decido, solo que... No supo cómo comenzar hasta que revisó las camisetas holgadas de piyama que tenía guardadas en el fondo del ropero.

Una vez que la lamparita se encendió sobre su cabeza no hubo marcha atrás.

Michael entró estirándose, notoriamente agotado. –Bueno... Yo creo que deberíamos ver "Alex Strangelove" antes de dormir o podemos ver... ver...

Jeremy hizo un esfuerzo abismal por tragarse la risa que le provocó ver cuán rápido la expresión de Michael cambiaba a sorpresa apenas le vio. Había escogido una de sus camisetas más largas, de esas que nunca usaba porque le llegaban hasta arriba de las rodillas, y se había decidido por esperar a Michael sobre la cama espalda arriba, balanceando las piernas como un niño y observándolo con la mejilla sobre los brazos. Según algunas personas esa pose era sexy, y aparentemente sí servía para enrojecer a su novio, así que...

–Creo que podemos hacer algo más divertido que ver películas ¿No crees? –Entrecerró los ojos usando su tono más sugerente y sensual dentro de su posibilidad ¿Le creerían que incluso con Michael observándolo como si hubiese sacado la lotería seguía creyendo que debía de verse ridículo? Es que... Por la mierda, esto era como actuar en una porno.

Afortunadamente sirvió. En menos de lo que pudo procesar estaba sentado sobre el borde de la cama con su novio de frente, jugueteando con sus rizos, ah, y su paciencia de paso.

–¿Tú qué sugieres?

–Sugiero que me quites la ropa y nos reconciliemos de la forma adecuada. –Respondió con impaciencia, haciendo el amague de besarlo, pero fallando cuando Michael se apartó.

–¿Ah sí, cómo? Si puedes ser más específico.

El de pecas casi y le daba un buen golpe en la cabeza. No le molestaba cuando Michael lo vacilaba, pero estaba tratando de incitarlo de una forma muy obvia y el desgraciado tenía los huevos de fastidiarlo.

–Que me folles, Mell ¿Quieres que te lo pida por escrito o me ponga un cartel en el pecho?

El de gafas prácticamente estalló de la risa y después le besó inesperadamente canturreando en voz baja, casi en un susurro contra sus labios. –Lord, show me how say no to this. I don't know how say no to this.

Fue imposible negarse a seguirle el juego. Ahora recordaba por qué amaba tanto a ese idiota. –Hey, stay. Don't say no to this.

Jeremy no se consideraba como alguien "sensual", más bien era de los que veía al resto ser sexy y provocador y se preguntaba cómo lo hacían ver tan sencillo.

Él no tenía los pechos firmes o curvas atrayentes de una mujer, así como tampoco era el típico chico musculoso y bien formado que se ve en las revistas de la televisión. Solo contaba con un manojo incontable de pecas y la ansiedad a mil. Era un maldito desastre poco apetecible. No era sexy para nada, pero... Podía sentirse así.

En este momento sí podía sentirlo. Cuando Michael lo besaba, cuando lo recorría impacientemente bajo la ropa como si no pudiese esperar hasta quitárselas de una maldita vez, cuando le susurraba halagos en voz baja... En ese preciso instante podía sentirse hermoso.

–Uh... ¿Te importa si...? –Pudo haber sido una eternidad y no lo hubiese notado, pero rato después Michael hizo un rápido gesto levantando apenas su camiseta y entendió a qué se refería. Negó con la cabeza apegando su espalda más contra su pecho, esperando inquieto hasta que pudo ver la prenda caer por el costado de la cama.

–Al fin, ya me estabas tocando la moral de tanta espera. –Bromeó, recibiendo en respuesta una risa ligera y entretenida.

–¿No preferirías que toque algo más?

–Jesucristo... Que Dios te libre de esos pensamientos impuros. –Volvió a decir con una sonrisa entre divertida y complacida, sintiendo que su pareja volvía a abrazarlo y bajaba sus besos por su nuca.

–Sería muy complicado con una belleza como... Como... ¡¿Qué demonios?!

Es poco decir que casi le dio un infarto al tiempo que Michael chillaba y se echaba hacia atrás, espantado. Joder, pensó lo peor ¿Tenía una araña o algo así en la espalda? ¡MIERDA! ¡¿TENÍA UNA PUTA ARAÑA EN LA ESPALDA?!

–¡¿Qué?! ¡¿Qué pasa?! ¡Quítamelo, quítamelo!

–N-No tienes nada, solo... Bueno, sí tienes... Pero...

Michael no necesitaba decir más, Jeremy comprendió a qué se refería, y eso lo hizo sentir muy incómodo.

A ver, cómo explicar esto. –Oh, eso... Son por los choques eléctricos del Squip. –Explicó, aunque se sentía perturbado sacando el tema en un momento como este. –Solo son... Mis nervios, creo. Nada raro, eso creo.

–Viejo, es horrible.

Quiso que la tierra lo tragara de la vergüenza que sintió al escuchar eso ¿Se creía Michael que no sabía que sus cicatrices eran algo espantoso? Lo tenía claro, eran tétricas y atemorizantes, pero no le hacían daño o le molestaban, solo incrementaban un poco su sensibilidad y nada más. No lo culpaba por reaccionar de ese modo porque no las había visto antes, consecuencia de la clásica posición del misionero, sin embargo... ¿Tenía que asustarse tanto?

–N-No es taaaan malo.

–¿Bromeas? Es como cuando se te marcan las arterias, no es bonito.

Ok... Eso dolió. Aunque supiese que era verdad dolió. Por más que supiese que fuera tonto esperar que le dijera "Da igual, me pareces hermoso como eres" dolió. Y lo gracioso es que le dolió aún más cuando lo escuchó decir lo siguiente.

–Esto, uh... Mejor lo dejamos para mañana. El susto me quitó la inspiración.

Jeremy asintió, aunque no pensaba igual. –O-Oh, sí, entiendo, claro.

Luego de aquello simplemente se acurrucaron juntos para dormir.

Pero de frente, Michael no quería abrazarlo por la espalda, y posiblemente no querría hacerlo nunca.

LEVEL 7 COMPLETE!

L o a d i n g . . .

FILE SAVED!

CONTINUE, PLAYER TWO?
Yes<                                     No

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Ni se crean que tendrán porno de mí tan pronto, JAJAJAJAJAJAJA

Okno, estoy planeando hacer un OneShot smut, pero bien bonis, con comedia y todo, y con el AU de BMF sisi. Nomás ténganme paciencia.

Les recuerdo que no voy a abandonar Be more gay, solo espero las vacaciones (?

Igualmente hoy estoy enferma como la mierda, fue un milagro que me inspirase

Y si se preguntan por qué actualizo este más que el Squiperemy... La verdad es que es más interesante ver cómo algo que amas se destruye(?)