LEVEL 11
READY, PLAYER TWO?

–Y... Ajá, Brooke me envió las fotos de los apuntes y las consignas de las tareas. –Christine explicaba detalladamente, mirando su teléfono.

Luego de su... "pacífica" charla con Michael, ella regresó a la habitación y hablaron sobre lo ocurrido. Ella quedó bastante convencida de la historia que el de gafas le contó. Básicamente, le dijo que le había dejado su termo a Evan para que se encargara porque él tenía que usar el baño, y Evan en su ignorancia con el asunto de los Squips decidió llenar el termo con aquella bebida tan popular.

La joven Canigula respiró en paz al fin, pero Jeremy estaba asustado como para llevar la contraria o decirle la verdad, además ella se veía muy feliz al descubrir que supuestamente todo era un malentendido. Michael pues... No es como si le hubiese dicho algo durante ese lapso de tiempo, pues él tampoco intentó contrariar, pero de todos modos le provocaba temor, más aún cuando pretendía ser cariñoso y le acariciaba la cabeza aún adolorida por el golpe y los tirones de cabello.

Se repitió constantemente que era absurdo temerle ahora que Christine estaba ahí con ellos, sin embargo parte de ese miedo se debía precisamente a eso. Michael tal vez sí era capaz de dañarla.
Luego quiso negarlo, convencerse de que Michael solo se había molestado con él y había tenido un pequeño arranque de ira como solía tener últimamente.

Se quedaría callado sobre el tema, era lo que más le convenía ahora.

–Entonces... ¿Esta es toda la tarea que hay? –Preguntó, deseoso de que no tuviese más que esas pocas preguntas de biología, pero Christine negó con la cabeza y se sentó a su lado en la cama, apoyándose en su costado para mostrarle de cerca el teléfono.

–También dejaron estos ejercicios de matemáticas. La profesora Heron te dará una semana, comprendió que estabas en mal estado. Oh, la profesora Sawyer también dijo que había que leer...

Jeremy la escuchó atentamente, pudiendo ignorar que Michael le tomaba la mano, después de todo lo estaba haciendo hace rato. Luego no pudo, empezó a notar cómo él incrementaba la fuerza en su apretón, volviéndolo tenso y hasta un poco doloroso, pero no dijo nada.

–Deberías mandarle las fotos, ya sabes, para que las vea en su propio teléfono. –Michael propuso tranquilamente, disimulando perfectamente.

Christine asintió apartándose un poco para mandar las fotos. –Tienes razón. Vas a necesitarlas para copiar todo, Jeremy.

El aludido también asintió con la cabeza, aprovechando ese momento donde Christine se concentraba en su labor para voltear un poco hacia Michael. No entendía qué es lo que quería reprocharle ahora, solo sabía que cuando lo miraba de ese modo algo lo estaba molestando. No tuvo dudas cuando volvió a sentir su agarre fuerte y tenso, pero en su muñeca.

–E-Este... Gracias por la tarea, Christine.

–No hay de qué, Jeremy. –Respondió ella, y para desgracia, tuvo que justamente volverse a acercar para pellizcarle cariñosamente la mejilla y sonreírle. –Lo que sea por mi mejor amigo.

Christine acostumbraba a tratarlo de ese modo. Muy dentro suyo, la joven Canigula aguardaba un lado maternal con sus amigos, así que podían decir que ella era la "amiga mamá del grupo". Eso nunca le molestó, encontraba agradable que Christine fuese así con él, solo que ahora era mal momento para eso.

Ahogó una queja pero sin poder ocultar su gesto adolorido. Christine se alarmó por ello y dejó su rostro tranquilo. –¿Te pellizqué muy fuerte?

–S-Sí, pero solo un poco.

Mentía, apenas sintió eso comparado a la forma en que su novio seguía presionando su brazo entre su mano como si quisiera exprimirle la sangre.

–Oh... Lo siento. –Se disculpó, levantándose para guardar sus cosas. –Debería irme ya pero... Si quieres puedo quedarme un rato más para cuidarte, Jeremy.

Mierda, sí, por favor. Realmente quería que su amiga se quedara más tiempo, era su novio el que parecía quererla lejos ahora ¿Cómo sabía? Basta con decir que apenas quiso abrir la boca para responder, volvió a sentir dolorosamente cómo él hundía sus dedos en su brazo.

–N-No... Este... M-Michael puede cuidarme.

–Cierto, no te preocupes Chris. Yo me encargo por ahora. –Respondió él de forma amable, demasiado como para estarle aplastando huesos y piel.

Jeremy suplicó por dentro que Christine solo se fuese de una maldita vez, así como también rogaba que no se fuera.

–Está bien, nos vemos mañana, chicos. –La joven se despidió dándole un corto beso en la mejilla a cada uno y se detuvo con él para abrazarlo. –Me alegra que estés mejor, Jeremy.

Él contuvo la respiración apretando los dientes, sentía que se le iba a quebrar el puto brazo.

Cuando Christine abandonó el lugar fue libre de zafarse del agarre de su novio con una queja, sobándose la zona afectada mientras el otro se levantaba y buscaba entre las cosas de su mochila.
Jeremy creyó que no tenía un daño muy grave, solo... Tal vez se le harían moretones poco notorios.

–Perdón, me puse nervioso. –Se disculpó rápidamente con una sonrisa tranquila como si nada hubiese ocurrido, sacando los útiles y una carpeta de la mochila para dejarlos sobre el escritorio. –Bueno... Mejor librarte de la tarea de la escuela pronto ¿No?

–Pero Jenna aún no me envía las clases grabadas y...

–No te preocupes por eso, ya me las envió a mí y acabo de mandártelas. Revisa tus mensajes. –Jeremy hizo caso, efectivamente tenía varios videos descargados, y con ver el inicio del primero reconoció el salón de clases donde tenía historia. Iba a agradecer pero su novio se adelantó a hablar. –Ahora sí ¿Quieres tu computadora y el libro de tu clase de lenguaje mientras me encargo de esto?

–¿Encargarte?

–Pues... Sí. –Se alzó de hombros. –No voy a las mismas clases que tú, pero soy mejor en matemáticas, tú eres un desastre. –Jeremy no lo negó, era un asco para las matemáticas, y Michael aunque no era un genio era bastante decente y pasaba todos sus exámenes con notas de 6 a 7 puntos. –Estás mal ahora, solo lee lo que te mandó la señora Sawyer. Yo haré el resto.

El de pecas se sorprendió bastante con ese ofrecimiento. No porque Michael no hubiese hecho su tarea antes, sino porque frente a él parecía haber recuperado al mismo de siempre. –A-Ah... No es necesario, yo puedo hacerlo.

–No seas bobo. Deja que te consienta un poco. Quiero creer que me la deberás. –Dijo en tono burlón. –Pero necesito tu teléfono para pasarlo todo.

–Bueno... Está bien, pero pregúntame si no entiendes algo. –Pidió, y entonces le entregó el celular. Michael soltó una risa socarrona y se alejó hasta el escritorio para buscarle la computadora y el libro, antes de sentarse para hacer su trabajo.

–Jeremy, entiendes menos que yo, no serás de ayuda.

–¡Hey, lo intentaría al menos!

El de gafas se volvió a reír y prosiguió a ponerse a trabajar. Jeremy por otro lado abrió su libro, y antes de ponerse a leer le dedicó una mirada curiosa a su novio, quien se encontraba ya de espaldas a él.

Se sentía muy extrañado y confundido con él cerca. Michael era una montaña rusa de emociones demasiado brusca y rápida con la cual no sabía lidiar aún. Había breves momentos donde le asustaba su actitud y no quería quedarse solo con él, y luego... Todo volvía a la normalidad con un "Lo siento", y su amoroso novio de siempre regresaba a él ¿Sería así siempre? No quería conformarse con esto, sin embargo... Tenía mucho miedo, miedo de perderlo.

Una hora y media más tarde, Jeremy ya había terminado de leer y sin nada más que hacer se puso a ver "Newsies". Nada mejor para ambientar el ambiente de estudios que algo de historia sobre huelgas y reparte periódicos de dudosa sexualidad.

Michael seguía resolviendo ejercicios de matemáticas, o al menos eso suponía. No lo había visto tomar la calculadora hace media hora, pero se veía concentrado ¿Estaría respondiendo lo de biología quizá? No lo pensó demasiado, solo lo dejó seguir, hasta que por fin dejó las cosas de lado y se acercó con una expresión insatisfecha.

–¿Ya terminaste?

–Sí, no fue difícil, las preguntas eran fáciles. –Dejó de verlo por un segundo, fijándose más en el teléfono en sus manos. –Christine... Brooke y Chloe... ¿Siempre son tan afectuosas?

–¿Eh? ¿De qué hablas?

–Bueno, lo digo por los apodos que te ponen... Y cómo se hablan... Y los corazones que se envían.

–Espera ¿Estabas leyendo mis mensajes? –Quería escandalizarse. O sea, si hubiese leído un par y ya de Christine no le hubiese sorprendido mucho, ella fue quien envió las fotos pero... ¿En serio había leído los demás?

–Somos novios, Jeremy, tenemos que saber todo sobre la vida del otro. –Contestó con simpleza, y su rostro expresó disgusto mientras parecía subir por un chat. –Me parece inapropiado que hables así con ellas cuando sales conmigo. Por no hablar de las bromas que hace Rich, son desagradables y desubicadas ¿En serio te ríes de esto?

El joven Heere no supo qué decir. Rich tenía un sentido del humor algo crudo, a veces no daba risa, pero solo respondía como si lo hicieran para no volver tediosa la conversación ¿Era indebido que hiciera eso? –E-Este...

–¿Y quién carajo es "Cuack"? La tienes agendada con un corazón verde.

–Q-Qué... Michael, es la señorita Duke. La enfermera de la escuela. La conoces.

No sabía qué tenía de raro. Conocía a Heather desde que era niño y la visitaba constantemente a la enfermería, se llevaban bien, y ahora que estaba cerca de ser mayor de edad decidieron pasarse sus números para hablar de vez en cuando. Le agradaba Heather, y estaba seguro de que si alguna vez necesitaba ir al nutricionista ella sería la primera en atenderlo.

–¿Hablas con una señora? ¿Tienes idea de lo mal que suena eso? Ella tiene como cuarenta años, Jeremy. Podría ser tu madre o tu tía.

–Michael, ni hablamos tanto. Y tenemos los números de muchos profesores.

–Pero no hablamos con ellos en privado. –Alegó, haciendo una mueca de molestia. –¿Quién sabe por qué te habla? ¿Y si trata de coquetearte o algo así?

Jeremy casi se infarta al escuchar semejante idea. –¡Michael, por Dios! ¡La señorita Duke ya tiene novia!

–No sabes si es verdad. –Insistió.

–¡Hasta me sé su jodido nombre! ¡Martha! ¡Martha Dunnstock! –Gritó, ya encolerizado ¿Por qué de pronto le hacía este teatrito?

Michael no respondió, siguió revisando un par de cosas más en silencio y luego le entregó el teléfono a Jeremy. –Borré su número. No quiero que sigas hablando con ella.

–¡¿Qué?! ¡¿Por qué?!

–No es apropiado que hables con una señora mayor como si fuese tu amiga. Ah, y también debes dejar de hablar de ese modo con Christine, Brooke y Chloe. Te comportas como si no tuvieras novio ¿Hola? ¿Michael Mell? Para ponerte así de meloso me tienes a mí.

Se mordió el labio revisando el celular, efectivamente, Michael había borrado a la señorita Duke de sus contactos y había quitado los apodos en los nombres de sus amigas. Se sentía bastante fastidiado con eso, aunque no muy enojado. Podía volver a pedirle el teléfono a la señorita Duke cuando fuese a la escuela y volver a cambiar los apodos de sus amigas, realmente esto no era la gran cosa.

Los días continuaron pasando con normalidad. Michael había vuelto a ser el mismo de siempre, claro que con sus detalles pero no era nada que pudiese manejar. Ya hasta se había acostumbrado a que fuera a ensayar seguido, y acordaron que él lo llevaría y traería de regreso sin excepciones. Con la escuela casi siempre era igual, y no le incomodaba porque conducir siempre le resultó tedioso.

En resumen, casi todo era normal otra vez. Casi todo.

Se daba muy seguido que pelearan por pequeñeces relacionadas con el teléfono de Jeremy, sus chats y sus contactos. Cada pelea era más ridícula que la anterior, Michael se molestaba por cosas insignificantes como formas de despedirse de los demás, de saludar, los memes, lo que subía a su historia, incluso los temas que hablaba.

Era sofocante, pero no duraba demasiado antes de ignorar los pedidos de Michael. No pensaba dejar de hablar con la señorita Duke solo porque él creyera que ella iba a secuestrarlo y violarlo o algo así. Solo estaba exagerando, pero... Ya no aguantaba esas peleas.

Ahora mismo, Michael revisaba su teléfono nuevamente. La costumbre era que borrase de nuevo a Heather de sus contactos y luego él la volvería a agendar, pues a este punto ya se sabía su número de memoria. Sin embargo esta vez fue diferente. El número no parecía pertenecerle a nadie ahora.

Quiso hablarle a Heather sobre eso, pero... Ella siempre lo evitaba cuando lo veía en la escuela.

Su novio se veía bastante feliz con esto. No sabía bien qué había hecho ahora, pero estaba seguro de que él tuvo algo que ver con esto. No quería preguntarle solo porque temía de su reacción cuando se sintiese acusado, y solo por eso dejó las cosas como estaban y deseó que con el tiempo pudiese volver a hablar con Heather para preguntarle qué ocurrió.

Por ahora haría una cuenta secundaria para todas sus redes sociales. Estaba agotado, al igual que aquella enfermera de verde vestir, que ahora mismo cuidaba sus pasos y miraba por milésima vez el mensaje en su teléfono.

Aléjate de Jeremy, perra. La policía se va a enterar si sigues hablando con él, tu reputación se irá a la mierda. Vete a coquetear con alguien de tu edad, puta necesitada.

Tal vez... Una amistad entre una cuarentona y un joven no sería posible.

LEVEL 11 COMPLETE!
L o a d i n g . . .

FILE SAVED!
YOU COMPLETE THE "Watch ou! Violence is present" STAGE!

CONTINUE, PLAYER TWO?
Yes<                                     No
Are you sure, player two?
Yes <                                   No

YOU WENT TO THE "React! Report and ask for help!"

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No tengo mucho que decir, estaba inspirada(?
Este capítulo no es muy agresivo como pueden ver, pero quería hacer algo calmado antes de empezar a aumentar la violencia(???)