-¿Qué parte no entiendes?- exclamó el mayor de los hermanos- ese color me hace ver gordo

-Jisung estás embarazado- refuto el tercero, ya cansado- todo te hace ver gordo- el segundo hermano le golpeó la nuca ante el comentario

-para la boda la bebé ya habrá nacido, idiota- le recordó el mayor, dejando los trozos de tela sobre la mesa

Para Gunil era una escena algo graciosa, en la mesa principal estaban los ocho omegas Ah, discutiendo de colores, tonos y texturas mientras sus esposos o novios estaban más alejados, como si fuera común ver esa escena, bueno, solo uno parecía algo desconcertado

<El más nuevo> fue su pensamiento, ocultando su risa tras su libreta

-Jeongin ten conciencia- el único pelirrojo tomo el pedazo de tela que sostenía el mencionado, poniéndolo junto al cabello del mismo- este tono no te combina con el cabello

-voy a teñirlo, obvio, tu deberías hacer lo mismo

-pero acabo de retocarlo- parecía que en cualquier momento todos se lanzaría contra el hermano más cercano, por su propia seguridad prefirió acercarse a los novios y esposos, quienes tenían un ambiente más relajado

-¿Tienes planes después de esto?- le pregunto Christopher cuando estuvo cerca de los alfas y lejos de los omegas

-saldré a beber con un amigo- recordó, mirando instintivamente al omega con el que saldría esa noche, aquel que parecía querer ahorcar a su hermano más bajo con otro trozo de tela- ¿Es normal?- pregunto, notando al hermano más joven poner dos retazos de tela frente al hermano pelirrojo ¿Gritando en francés?

-no tienes idea, la última vez tuvimos que meternos porque empezaron a amenázarse con agujas- comento con cierta burla- ahora es divertido, pero esa vez Hyunjin termino desmayado y Minho con una herida en la frente

-te acostumbras a esta familia una vez entiendes que no debes tocar tres puntos: política, deportes y gama de colores- comento a quien reconocía como Minho, si no se equivocaba, era quien más tiempo llevaba en la familia

-el señor Ah te lo advierte cuando le pides permiso para cortejo- agrego Hyunjin, quién tenía a su bebé en brazos

-¿Todos pasaron por eso?- los seis asintieron, parecía que el más nuevo era el más alejado a ese tema, pero también asintió

Todo parecía normal, dentro de lo que se podía claro, pero había algo que le molestaba, un ligero picor en la nariz que se iba haciendo más grande, como si alguien cuyo aroma estaba cargado de molestia, pero también de egocentrismo se estuviera acercando a la sala donde estaban

Él conocía ese aroma

-señor no puede entrar ahí- escucho a una de las asistentes antes de que la puerta de cristal fuera abierta.

-Jungsu, cariño- sabía que algo iba a pasar cuando Niki empezó a llorar, deteniendo toda su pelea de hermanos, pues Yongbok se había acercado para tomar a su bebé en brazos y calmarlo- han pasado muchos meses desde que nos vimos formalmente

-Byulsoo, que sorpresa ¿Qué haces aquí?- pregunto, intentando no sentirse abrumado por el gigantesco ramo de flores que el alfa le ofrecía, bajo todas las miradas de sus empleados, los cuales veían todo gracias a las paredes de vidrio

-solo quería ver a mi chico- el alfa intento besarlo, pero lo esquivó fingiendo estar interesado en el ramo

-estoy ocupado ahora, hablemos más tarde- no quería verlo, o más bien si, pero solo para terminar formalmente con él y claramente no lo haría con todos sus empleados mirando

-Por favor lindo, seré rápido- insistió

-dos minutos- le concedió- ¿Podrían dejarnos solos?- pidió a todos los que estaban ahí, cerrando las persianas para sentir un poco de privacidad. En menos de un minuto solo quedaban ellos dos en la sala

-Su, estos últimos meses han sido fantásticos a tu lado- <discurso ensayado> pensó inmediatamente- y enserio agradezco que me dieras una segunda oportunidad a pesar del error de mi pasado- <errores actuales>- y justo ahora siento que estamos en el mejor momento de nuestra relación- <ambos sabemos que es mentira>- por eso te pido que te cases conmigo- ¿En qué momento se inclino y de dónde sacó la cajita?

Analizo la situación, si le decía que no, las cosas terminaban ahí, sin más, pero si acepta...

-okey- dijo sin ánimo, aceptando el anillo y el beso que dejo el mayor en él- pero, quiero un cortejo- condiciono

-¿Qué?

-un cortejo, cuando empezamos a salir no me cortejaste, ahora lo quiero, completo- específico

-pero Su, eso dura un mes entero, podríamos usar ese tiempo en la organización de la boda, podríamos casarnos justo después que Jeongin- Byulsoo intento acercarse, pero el omega dio un paso hacia atrás

-no, quiero un cortejo, y tendrás que pedir el permiso de mi padre al final, si no te acepta entonces no nos casaremos, terminaremos y no volverás a buscarme- dijo firmemente- y si no estás de acuerdo, terminemos aquí y ahora- vio el anillo en su mano, con la intención de quitarlo

-¡No!- le detuvo- está bien, te daré los regalos y hablaré con tu padre- acepto a regañadientes- ¿Qué tal si vamos a cenar? para celebrar nuestro compromiso

-estoy ocupado, otra noche será- antes de que Byulsoo se le volviera acercar, abrió la puerta, dejando pasar a sus hermanos y cuñados

-pero...¿Qué haces aquí Gunil?- <¿Apenas te das cuenta? ¿Enserio?>

-estoy trabajando- le respondo de forma cortante, sin verlo, fingiendo estar interesado en sus anotaciones ¿Por qué no conoció a Gunil antes que a Byulsoo? incluso estando enojado era perfecto

Se mantuvo en silencio durante el resto de la lluvia de ideas, claro que sus hermanos lo notaron pero no dijeron nada, seguramente irían a buscarlo al departamento de Jiseok en cuanto salieran de las oficinas de Wekah y le preguntarían que paso

Lastima que esa noche no llegaría.

Wannabe era uno de los clubes para prestigiosos del país, por no decir el más prestigioso, cantantes, empresarios millonarios, deportistas, influencers reconocidos internacionalmente eran la clientela habitual del lugar, para alguien como él entrar a Wannabe era una cosa que solo podría pasar una vez, pero para alguien como Jungsu, bueno, se notaba que era un ambiente al cual estaba acostumbrado, podía verlo moverse con experiencia entre los cuerpos, uniéndose con facilidad al ritmo que llevaban, sin importar los cambios en la música 

-nunca había entrado a uno de estos lugares- reveló el mayor, recibiendo un vaso con una sustancia de color rojo en cuanto se le acerco 

-disfrútalo, no cualquiera entra a este club- escucho decir al castaño por sobre la música mientras bebía del vaso que había pedido antes de volver a la pista

¿Cuánto tiempo llevaban ahí? ya no lo sabía, pero sabía que era el suficiente para ya sentir los efectos del alcohol en sus sistema, fue ahí cuando decidió dejar de beber y concentrarse en su acompañante, él cual no había dicho mucho desde que llegaron, solo se dedicaba a pedir lo que se le viniera a la mente y tomarlo como si fuera simple agua para luego volver a bailar

-sabes, Byulsoo por fin se atrevió a pedirme matrimonio- estaba ebrio, el arrastre en las palabras y los torpes movimientos lo delataban- lo quería terminar, pero se me adelantó- Jungsu no se había sentado desde que llegaron, apenas lo hacia 

-así que por eso estaba ahí- dijo para si mismo

-cree que no sé con cuántas tipas me ha engañado desde que volvimos- dio otro trago a su bebida, terminando lo que quedaba en el vaso- 15 chicas, en sus veintes, seis eran mis modelos, todas rubias, no entiendo el porque

-Bueno, Byulsoo no es...

-no hablo de Byulsoo, él ya dejó en claro que es un idiota que se deja guiar por su segunda cabeza, no entiendo a esas chicas ¿Por qué aceptaron un segundo encuentro? no es como que Byulsoo tenga algo grande que ofrecer- intento contenerse, pero fue imposible, río con ganas ante lo dicho- lo digo en serio, no te rías- a pesar de no querer hacerlo, Jungsu también río

-será mejor que te lleve a casa- sentenció el mayor cuando se calmo un poco

-pero no quiero irme aún- se negó tal como un niño haciendo un berrinche

-ya estás ebrio Jungsu- el mayor le hizo levantarse- mañana tienes que trabajar y yo también

-soy el jefe, puedo llegar a la hora que quiera- decía mientras era arrastrado a la salida

-si pero yo no, tengo una evento a las diez- reveló mientras salían del club

Pareció que eso calmó al menor, pues se mantuvo en silencio parte del trayecto, pero claro que no pudo ser todo el camino

-no quiero ir a casa- dijo, mirando hacia afuera

-¿A dónde quieres ir entonces?

-al Royale- murmuró, recargándose por completo en la ventana del vehículo.

Uno de los muchos regalos que le dio Jinhwa a Junyoung como cortejo fue una suite en Le Maison Royale, el hotel más prestigioso de Seúl pero, como Junyoung no ha tenido una razón para usarla, deja que sus hermanos la usen cuando lo necesiten y justo ahora la necesita más que a nada

-no te vayas- pidió, sentándose en la cama- quédate conmigo- Gunil se hincó frente a él, dispuesto a quitarle los zapatos

-no puedo Su- fue la corta respuesta mientras que quitaba ambos zapatos. Cuando la tarea estuvo hecha, se levantó con la idea de despedirse, pero el menor lo tomo del brazo y lo jalo, haciendo que cayera encima suyo- Jungsu no estoy jugando, tengo trabajo en la mañana- dijo, intentando levantarse

-no importa, te llevaré yo mismo- Jungsu lo abrazo por los hombros y lo pego más a él, abrazándolo también con sus piernas- pero quédate conmigo

-Su...- el menor seguía sin soltarlo, incluso lo acerco aun más, sus narices se rozaban cada vez más- suéltame ¿si? me quedare pero suéltame primero 

-Gun...si te hubiera conocido a ti primero que a Byulsoo, justo ahora me estaría casando contigo ¿Sabes?- la voz del omega era mas bajo que al principio, casi como si fuera un susurro- tu eres mucho mejor que él, más dulce, más atento, más guapo, serías el esposo perfecto

-Su...- podía sentir como el alfa intentaba zafarse de su agarre- Ah Jungsu, estoy hablando en serio, por favor déjame moverme

-yo también hablo enserio, te quiero a ti como esposo, no a Byulsoo- un corto contacto entre sus labios, rápido, cualquiera pensaría que fue un simple e inocente piquito, pero no lo fue, así no lo sintieron ellos. Para ellos fue diferente, fue una gota del elixir que ambos querían probar pero en sobriedad jamás se atreverían a pedir

-Su, eres el novio de mi hermano- un nuevo contacto, nuevamente iniciado por el menor, más largo y emocional que el anterior

-olvídalo ¿Si? a partir de hoy Byulsoo no es mi novio- Jungsu lo libera del agarre de su cuello, pero no del de sus piernas, logrando girar al mayor para que quedara en la cama y él sobre Gunil

Gunil lo veía estupefacto ¿De dónde sacó tanta fuerza para ese movimiento? no le dio tiempo ni para pensar en más, pues volvió a besarlo como si su vida dependiera de ello. Gunil podía jurar que era fuerte de voluntad, que era imposible que cayera ante los encantos de Ah Jungsu, pero la verdad era que Jungsu lo tenía comiendo de su mano. No iba a dejar ir una noche como esa, no importaba que en la mañana uno de los dos iba a estar arrepentido, claro que, ese no iba a ser él.

Me atrase un poco más de lo que esperaba, pero lo conseguí a un día antes de empezar un nuevo proyecto.

La próxima actualización será el viernes de la próxima semana, pero es un secreto cual será la que voy a actualizar.