47. Mía
- ¿Qué quieres hacer hoy? -Preguntó Harry, comiendo un bocado de los panqueques que él mismo había preparado.
Mi cuerpo pedía a gritos una cama, pero desafortunadamente tenía que limpiar todo el desastre que había quedado en mi casa después de la fiesta. Los chicos se habían ido alrededor de las seis de la mañana, y Harry optó, obviamente, por quedarse conmigo.
Podía acostumbrarme a despertar junto a él, definitivamente. No había mejor sensación que dormirme atrapada en sus brazos, sintiendo nuestras piernas entrelazadas y su profunda respiración en mi cuello.
- ¿Ronnie? -Carcajeó al verme tan distraída. Si sólo supiera en qué estaba pensando...
-Oh, perdón. -Dije y bajé la mirada, avergonzada-. ¿Tienes algo planeado? Tengo que limpiar todo.
-Puedo llamar a mi ama de llaves, si quieres. Ella puede limpiar.
-No, no. No es necesario.
-Sabes que no dejaré de insistir. Y terminarás cediendo, no lo hagas difícil... -Bromeó pasando un brazo por mis hombros, palmeándolo suavemente- le enviaré tu dirección.
Bufé y llené mi boca de panqueques para no admitir que tenía razón. Iba a ceder en cuanto me mirase con esa estúpida y convincente sonrisa, quizás incluso pondría cara de perrito mojado. ¿Cómo iba a decirle que no?
Además, estaba quitándome un gran peso de encima. ¿Quién sabe cuánto tardaría en limpiar la sala de estar por mi propia cuenta?
Terminamos de desayunar en silencio, cada uno lavando su respectivo plato. Me fue inevitable pensar en cuán pésima anfitriona era. No sólo mi visita estaba limpiando, si no que había cocinado él, y a eso había que sumarle que me prestaría a su ama de llaves.
- ¿Soy buena novia?
Harry me miró confundido ante mi inesperada y repentina pregunta, seguramente preguntándose en qué estaba pensando, considerando la manía que tenía con querer saber qué pasaba por mi mente a toda hora.
-Te amo, Ron. -Me contestó y tomó mi rostro entre sus manos para besarme-. Claro que lo eres. ¿Soy un buen novio?
-El mejor.
- ¿Acaso tienes más? -Rió sobre mis labios. Sonreí como la idiota enamorada que era y volví a besarlo. Estábamos tan cerca que temía que pudiese escuchar los fuertes latidos de mi corazón-. Podríamos ir a ver a Gemma hoy. Quizás sorprenderla en su oficina.
- ¡Me encantaría! ¡Y a Lou!
No se sorprendió al escucharme aplaudir de la emoción, sabiendo que las vería después de varias semanas y que de verdad las extrañaba. En realidad, Gemma y yo no habíamos compartido tanto como para extrañarla, pero me hacía ilusión verla, de todas maneras.
Su amorosa mucama llegó a mi casa al cabo de media hora. Su nombre era Camilla y por lo visto, era muy tolerante, ya que me había escuchado agradecerle una y otra vez por tomarse el tiempo para ayudarme, e insistía en que no tenía ningún problema, que era su trabajo y que adoraba a Harry. Él le dijo simplemente que me ignorara y lo amenacé con retractarme de haber dicho que era el mejor novio de todos.
¿Pero a quién quería engañar? Jamás iba a tener a otra persona como él junto a mí. El simple hecho de pensar que algún día pudiésemos terminar fue aterrador.
- ¿Puedo usar esto? -Quitó su camisa roja de mi armario y fruncí el ceño.
-No. ¡Es mía, te la robé! -Me sacó la lengua y se sacó la remera blanca que tenía puesta desde el día anterior, aventándola hacia mí para colocarse la otra prenda- Bien, entonces ahora esta es mía.
-Tú eres mía. -Dijo con naturalidad, acercándose seductivamente hacia mí. Mordí mi labio al ver lo increíble que le quedaba aquella camisa que tanto me encantaba. Definitivamente tenía que volver a tenerla.
-No soy de nadie, Styles. -Lo desafié abrochando un botón, que probablemente había dejado desabotonado a propósito- tonto.
-Veremos...
Revoleé los ojos, intentando mantener la calma.
Claro que era suya. Jamás lo admitiría en voz alta, pero me tenía en la palma de su mano, y lo sabía.
Antes de salir, dejé una de las llaves de emergencia en el pequeño tazón que estaba sobre un estante al lado de la puerta principal, en caso de que Camilla terminara antes de que nosotros volviéramos de invadir la oficina de Lou y Gemma. Había comenzado a limpiar ni bien llegó, pero el desorden era tan enorme que temía que tuviese que quedarse por el resto del día.
Eran casi las dos de la tarde, y según Harry, su hermana estaría trabajando hasta eso de las cinco. Teníamos tiempo de sobra para ponernos al día. ¿Sabría que estábamos oficialmente de novios?
- ¿No quieres caminar? -Se quejó al verme ir en dirección al estacionamiento de mi edificio. Resoplé como una niña pequeña y tomé su mano. Temblé. A pesar de estar plenamente soleado, hacía más frío del que podía tolerar, aún teniendo cuatro capas de abrigo.
No conocía el camino hacia la oficina de Lou, pero confiaba en que Harry estuviese ubicado. Más de una vez nuestra caminata fue interrumpida por fans, que ya no parecían estar sorprendidas al vernos tomados de la mano o abrazados. Muchas iniciaban conversaciones conmigo y eso me encantaba, el saber que ya no me consideraban una "enemiga". Una de ellas, llamada Alice, halagó mi cuenta de Instagram, asegurando que amaba todas las fotografías que publicaba ahí. Prometí aceptar su petición de seguimiento en Twitter (no planeaba hacer público mi perfil) y se despidió de mí con un abrazo.
-Para de robar, Ronnie. Primero mi ropa, ahora mis fans. ¿Qué sigue? ¡Mi hermana! -Carcajeó y no hice más que codearlo justo arriba del estómago. Por un momento creí haberlo lastimado de verdad por lo fuerte que había gritado, pero cuando me detuve a preguntarle si estaba bien, alzó la mirada y me robó un beso.
- ¿Quien roba ahora, eh? -Bromeé y abracé su brazo tras besar su mejilla.
No quería saber por cuánto tiempo habíamos estado caminando, pero escucharlo decir "ahí es" y señalar un edificio en la cuadra de enfrente, fue música para mis oídos y casi pude escuchar a mis piernas festejar. Tenía que mejorar mi estado físico o en lugar de caminar, comenzaría a desplazarme rodando.
Sin pedir ningún tipo de permiso, pasamos la recepción y nos metimos en el primer ascensor que vimos. Harry se burló de mí por abandonar mi hábito de subir por escaleras, pero creía que si llegaba a dar un paso más, me desmayaría.
Me arrastró por interminables pasillos, golpeando finalmente una puerta blanca con una inscripción dorada que decía "the craft".
- ¡Adelante! -Se escuchó desde adentro. Dejé que Harry pasara primero y comencé a escuchar gritos- ¡Mírate nada más, estás vivo!
-Muy graciosa. Traje una sorpresa. -Contestó él con su característica voz, lenta y áspera.
Entré tímidamente y miré a mi alrededor. Había tres escritorios ubicados en forma de H en el medio de la oficina, que estaba repleta de cuadros modernos en las paredes y llena de ropa y maquillaje por todos lados. Todos lados, literalmente.
- ¡Ronnie! ¡También estás viva! No puedo creer cómo pudieron olvidarse de mí, ni siquiera estarían juntos de no haber recibido mi ayuda. -Reclamó Lou, abalanzándose hacia mí para abrazarme. Reí en su oido.
-Es imposible olvidarme de ti, Lou.
-Lo sé, lo sé. -Sacudió su cabeza juguetonamente- Gemma acaba de salir a comprar comida china, estábamos muriendo de hambre. ¿Ustedes quieren?
-No, acabamos de desayunar, pero gracias igual. -Contestó Harry.
-Sabes, estaba esperando verte pronto. Tenía como un presentimiento. Supongo que deduje que me extrañarías mientras no estés y vendrías a despedirte de mí.
Harry abrió sus ojos como platos y los cerró con fuerza. Me miró a mí, y luego a Lou, y luego a mí, y así severas veces. Lou estaba confundida, como si no pudiera terminar de entender qué estaba pasando y me miró en busca de explicaciones.
Pero yo tampoco entendía.
¿Harry se iría? ¿A dónde? ¿Por qué? ¿Con quién? ¿Por cuánto tiempo?
- ¿Mientras no estés?
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Woooops, Lou metió la pata. Eso te pasa por olvidarte de ella, Styles.
Siempre dejo los capítulos en momentos así, so so sorry, no puedo evitarlo jajajja.
Este cap va dedicado a @Nicky_Styles porque es un amor y amé todos todos sus comentarios ♡
¡Empecé una nueva fic! Se llama Infatuation y es de mi Luke hermoso. La protagonista se llama Olivia (amo ese nombre, quería que lo supieran). Les agradecería mucho mucho mucho que pasaran a leer el prólogo que subí. ♡♡♡♡
Si no lo hacen por mí, háganlo por Hemmo porque... Sí, porque es hermoso.
¡Y también cambié las portadas de todas mis historias! ¿Les gusta? Necesito opiniones o voy a morir.
Una vez más, gracias por todos los comentarios y votos, las adoro ♡ E invito a votar a las hermosas y amorosas lectoras fantasma, jeeee.
Les mando un beso enoooorme.
MAR
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