19. No vale la pena
— ¿No vienes? —Carraspeé viendo cómo Daisy se había empezado a alejar de mí en cuanto salimos por la puerta principal del edificio.
Ella negó con la cabeza y me saludó con un simple gesto con la mano. Vale, me había puesto nerviosa por un simple trayecto hacia la salida. ¿Por qué no me lo había aclarado desde un principio? Hubiese evitado ponerme histérica para nada.
Una bocina llamó mi atención y al levantar la mirada divisé a Liam, que me sonreía desde adentro de un auto tan grande como el de Harry.
—Sube, preciosa. —Carcajeé revoleando los ojos y abrí la puerta de atrás. Apoyé la cartera en mi regazo y vi a Styles sentado en el asiento del copiloto.
—Hola, tú. —Habló y se volteó con una sonrisa que dejaba ver sus hoyuelos.
—Tengo nombre, tú.
Miró hacia adelante intentando ignorarme y rascó "disimuladamente" su mejilla con el dedo del medio. Reí estrenduosamente sin poder creer lo infantil que era.
Aunque debía admitir que infantil y todo se veía endemoniadamente bien.
Un gorro de lana verde tapaba sus rulos y llevaba puestos varios abrigos, junto con los típicos jeans ajustados. No pude evitar quedarme mirándolo por un par de minutos hasta que decidí que si no dejaba de hacerlo pensaría que estaba obsesionada con él.
《O se daría cuenta》
— ¿Por qué no vino Daisy? —Preguntó Liam rompiendo el silencio, dado que hacía ya unos minutos ninguno de los tres hablaba.
—Salió conmigo y pensé que lo haría, pero al parecer se arrepintió o no lo sé.
—Oh... Bueno, ella se lo pierde. Por otro lado, el restaurante se llama V-Blue y es genial.
— ¡Conozco este lugar! Vine con mamá la semana pasada. —Exclamé cual niña de cinco años en cuanto frenó el auto en el estacionamiento del restaurante que tanto conocía gracias a la loca vegetariana de mi madre.
—No deberías conocerlo, ahora está arruinada la sorpresa —se rió y bajó del vehículo.
La anfitriona nos guió hasta una de las mesas del fondo, "la más discreta", tal como habían requerido los chicos. Harry se sentó a mi lado y Liam enfrente de él, quejándose de ser el tercero en discordia unas cinco veces desde que nos habían ubicado. Styles le contestó esas cinco veces que no fuese idiota, dejándome sin otra opción que pensar que alguien estaba algo gruñón esa mañana/tarde.
— ¿Cuánto tiempo tienes, Ronnie? —Habló finalmente Harry, apoyando suavemente su mano en mi muslo. El simple contacto provocó un escalofrío a lo largo de todo mi cuerpo. No había manera en la que pudiera acostumbrarme a él, siempre me pondría la piel de gallina sin importar cuánto tiempo pasara.
—Ho... hora y media —sonreí de lado y apoyé mi mano en la suya.
—Eso debería alcanzarnos —dijo, y al verlo mover sus labios al hablar sentí extremas ganas de besarlo. Ganas que, por supuesto, intenté reprimir sacudiendo mi cabeza, como si eso fuera a ayudar de verdad.
Liam hablaba tan rápido que me costaba seguirle el hilo a la conversación: era por eso, o simplemente se debía a la gran distracción que tenía a mi lado. Después me terminé acostumbrando a que estuviese tomando mi mano por debajo de la mesa, y pude mantener la charla con el increíble Liam Payne, que hablaba fascinadamente de cualquier cosa que pasaba por su cabeza.
—Hola, soy Brittany y seré su moza esta tarde. —Nos interrumpió cortésmente una joven castaña, tratando de que no se le salieran los ojos de sus órbitas al lanzar una mirada hacia nuestras manos unidas. Instantáneamente lo solté y rasqué mi nuca más que nerviosa. Lo último que necesitaba era eso. Harry le sonrió y también lo hizo Liam— ¿Qué se les ofrece pedir?
Los tres pedimos diferentes tipos de ensaladas, aunque una sopa hubiera ido perfecta junto al clima de aquel lunes de enero, en el que el frío dominaba las calles de la ciudad de Londres.
Hasta que Britanny volvió con nuestras órdenes, los dos me interrogaron más de lo necesario acerca de mi vida, y aproveché para hacerles las mismas preguntas. Era increíble cómo nuestra conversación cambiaba radicalmente y podía mantenerse igual de divertida y dinámica sin importar el tema.
Era casi la una de la tarde cuando Harry dejó de hablar, tras pasar severos minutos con el ceño fruncido mientras miraba la pantalla del celular.
En un principio no quise entrometerme preguntándole qué le había pasado, es decir, no tenía por qué decirme, y para ser sincera tampoco quería arriesgarme a preguntar y que me contestara con un vago "nada".
— ¿Qué? —Suspiró Liam mirándolo con cara de pocos amigos.
— ¿Qué, qué? —Le contestó él con una risa fingida.
—Escupe, Harold. —Lo amenazó con el tenedor. Claro, Liam, el tenedor es aterrador.
Harry tomó una bocanada de aire antes de contestar.
—Básicamente todo el mundo sabe que tú y yo estamos aquí.
Cerré los ojos dramáticamente por un segundo, y tomé mi celular para confirmar lo que estaba sospechando. También sabían que yo estaba ahí.
—No obtendrá propina, de eso estoy seguro.
—No seas así, Liam. Pudo haber sido cualquier persona de aquí, pero ya no importa. Sólo espero que no haya tantos paparazzis cuando salgamos.
¿Paparazzis? ¿Había escuchado bien?
— ¿No deberíamos irnos? —Sugerí y ambos asintieron. Luché para que dejaran que pague al menos mi parte, claramente sin tener éxito alguno. Liam pagó la cuenta y la anfitriona nos despidió amablemente y se disculpó.
No había entendido el motivo de su disculpa hasta que salimos totalmente del lugar, en donde esperaban tres o cuatro hombres con sus enormes cámaras.
Bajé la cabeza intentando no perder de vista a Liam, que nos guiaba por entre los autos hasta llegar al suyo.
—Harry, ¿ella es tu nuevo ligue de una noche? —Gritó uno de los paparazzis, haciendo que Harry se detuviera en seco. Antes de que pudiera ser un problema, estiré de su campera obligándolo a moverse y seguí nuestro camino.
—No vale la pena. —Le susurré al llegar al auto. Él asintió y abrió la puerta por mí para que me subiera.
Sí, estaba segura de que no valía la pena discutir con un hombre que se notaba a mil leguas lo único que quería era molestar, pero no podía evitar preguntarme qué era lo que había querido decir con eso.
¿Sería yo simplemente otro ligue de Harry?
# # # # #
Comenten que les pareció, besitoooos muaa.
Mar
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top