Erick va caminando en dirección a Joel para pedirle disculpas por "invadir su privacidad".
Al final, ¿Fue culpa de él encontrar su cuenta de twitter?
Joel debería estar agradecido porque siempre que ponía un tweet de "tengo hambre", Erick le llevaba una pizza gigante, pagada quién sabe con qué dinero.

Había estado pensando la manera de acercarse a Joel y se acordó del lápiz que le pidió prestado hace meses. Lo había guardado porque le recordaba la primera vez que hablaron.

Tengo que pelear con alguien, ya no me siento como el papi Brian. Soy tan cursi, mierda.

Cuando logra visualizarlo, Joel está en su casillero hablando con Zabdiel. Erick maldice mentalmente y se acerca rápidamente con puños en sus manos. Él sabe que no tiene caso pelear con alguien del tamaño de Zabiel, pero después de todo ¿Quién es el Erick Brian?

"Hola." Aclara su garganta. "Y adiós. Voy a hablar con mi novio. A solas." Finge una sonrisa en dirección a Zabdiel.

"Está bien, nos vemos Joey." Zabdiel se aleja lo más rápido del lugar. Hace días le hablaron de Erick y sabe lo peligroso que puede ser. Le teme.

"Mmm, hola." Joel finge estar enojado pero lo único que quiere hacer en este momento es besar a Erick y decirle que él también lo ama.

"¿Y qué te decía este men?" Sonrió para disimular sus celos. "Si quieres no me digas, confío en ti."

"Estaba preguntándome si conocía a algún Chris." Dice Joel confundido.

"Christofrente va a morir cuando le cuente." Erick comienza a marcar el número de Chris en su teléfono, emocionado.

"Espera, ¿Qué pasa con ellos?" Joel alza una ceja esperando la respuesta de Erick.

"No contesta. Odio a ese tal Zabdiel, no sé que le ven." Bufó y colocó sus ojos en blanco.

"Pues, es lindo, alto, buen cuerpo y tiene más culo que -" Es interrumpido por Erick. Joel quiere hacerlo enojar.

"Ni se te ocurra terminar la oración." Apretó sus puños. Joel rió al ver que logró lo que quería.

"Bueno, adiós Erick." A veces se pasa de diva orgullosa.

"Espera, yo quería devolverte el lápiz que me prestaste." Al ver el lápiz en la mano de Erick, Joel se sonroja al recordar el significado de éste.

"Gracias, pensé que lo habías robado." Dice mostrando todos sus dientes en una sonrisa. A la mierda orgullo.

"No es robado si lo pides prestado." Erick se cruza de brazos, indignado por la acusación.

"No se sabe cuando se habla de tí." Erick bufa.

"A las seis en tu casa. Veremos películas." Joel intenta protestar. "Shh, llevaré pizza."

"Pizza. Está bien." Se despide con la mano.

Erick no sabe desde que momento le está mirando el trasero. Sacude su cabeza y se va.

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"¿Por qué traes películas de zombies? No eres romántico." Dice Joel haciendo un puchero.

"Son todas very good, ¡Mira como se le come el cerebro!" Grita con emoción, señalando la pantalla.

¿Cómo le digo que su pronunciación inglés es horrible? Piensa Joel.

"No quiero ver la película." Dice con dobles intenciones.

"¿Qué quieres hacer, bebé?" Erick alza las cejas de manera supuestamente seductora.

Joel dudoso se sienta de rodillas, rodeando con ellas el cuerpo de Erick y quedando cara a cara con él. Lo besa por unos segundos.

"¡Joel, justo cuando le estaban clavando la navaja!" Dice Erick interrumpiendo el beso.

Joel intenta volver a su puesto un poco molesto, pero Erick posiciona sus manos en su cintura. Vuelven a besarse, el beso es lento y largo. Pero sinceramente, la posición en la que se encuentra Joel no ayuda mucho.

Erick comienza a repartir besos por el cuello de Joel, deteniéndose en una zona específica para dejarle una pequeña marca. Joel comienza a moverse en la entrepierna del otro.

"E-Erick." Gime al sentir el bulto del más pequeño.

"Mío." Sigue succionando la piel de Joel. Observa los labios entreabiertos de Joel y sus ojos cerrados por la excitación. "¿Quieres que te haga el amor, bebé?"

"S-soy virgen." Susurra.

"Pensé que lo de virgo era en broma." Dice Erick sonriendo. "Sólo lo haremos si tu quieres."

"Quiero que me hagas tuyo." Sólo esas palabras bastaron para que Erick dejara su lado tierno y su Brayan interior saliera.

Erick apaga el televisor rápidamente e intenta cargar a Joel para llevarlo a su habitación. Para su suerte, son los únicos en la casa.

"Erick, no puedes cargarme." Ríe al ver el esfuerzo de su novio. Joel agarra por las piernas a Erick y lo levanta, sorprendiéndolo. "No pesas nada, mi amor, eres tan pequeñito."

"Pff, tengo mi erección en tu hombro, camina rápido." Dice intentando ignorar el comentario del más alto.

Al llegar al cuarto Joel tira a Erick en la cama, comienza a darle besos desesperados en el cuello y a acariciar la piel dentro de su camiseta.

"Mi-mierda, Joel." Lo toma de las muñecas y lo tira bocarriba en la cama, intercambiando las posiciones que tenían anteriormente. "Eres tan caliente. No sabes cuanto tiempo esperé para esto."

Erick le da un beso cálido en los labios y lo mira a los ojos para pedir la aprobación y quitarle la camiseta. Joel muerde su labio al ver los ojos verdes, en este momento oscuros, mirándolo de esa manera.
Cuando ya ninguno de los dos tiene su camiseta, Erick empieza a desabrochar el pantalón de su novio, que parece que va a explotar en cualquier momento, igual que el de él.

Joel se sonroja y comienza a ponerse nervioso. Erick nota lo anterior.

"Seré muy cuidadoso, lo prometo." Joel asiente lentamente. "No debería apenarte mostrar tu cuerpo, eres perfecto." Dice Erick acariciando su mejilla.

"Tú eres perfecto. En serio lo eres." Termina de quitar los pantalones y ropa interior de Erick, sintiendo que sus mejillas estan lo más rojo posible.

"¡Oh Dios! Que bien que no meterás esa cosa en mi culo." Dice Erick sorprendido por el tamaño del pene de Joel. Éste ríe apenado.

Las manos torpes de Erick comienzan a masturbar el pene de su novio, provocando fuertes gemidos por parte de ambos, los cuales intentan calmar mordiendo su labio inferoir.

"Te-te necesito." Trata de no sonar urgido, pero quiere sentirlo. Ya.

Erick hace caso y coloca tres dedos frente la boca de Joel.

"Chupa, mi amor." Joel comienza a lamer los dedos de Erick mientras lo mira a los ojos de manera atrevida.

Luego de estar lo suficiente húmedos, el más pequeño empieza a introducir lentamente un dedo en la entrada de Joel, éste alza su cadera en respuesta al dolor. Pasan pocos minutos y ya no siente dolor.

"M-más, bebé."

Erick introduce el segundo dedo y cuando siente que Joel está acostumbrado, introduce el tercero. Joel gime de dolor.

"Shh, tranquilo amor." Erick mira con preocupación los ojos llorosos de Joel, no quiere lastimarlo. Es lo que menos desea en el mundo.

"E-está bien." Dice con sus uñas enterradas en la sábana. Pasan varios minutos y por fin se acostumbra a la sensación. "Y-ya"

Erick besa su hombro y le susurra "Tranquilo"

Erick comienza a entrar en Joel lentamente, hasta que el mayor le pide que entre más y Erick lo obedece. Lágrimas salen por los ojos de Joel, pero él sabe que pronto todo el dolor cambiará por excitación. Está nervioso, pero a la vez feliz porque está haciendo el amor con la persona que tanto ama.

Erick le da muchos besitos en el rostro para calmarlo, mientras le repite lo mucho que lo ama.

Luego de unos minutos Joel se acostumbra a la sensación y comienza a moverse lentamente, provocando los gemidos de Erick.

"¿M-Más rápido?" Pregunta Erick. Ya quiere follarlo, pero sabe que tiene que esperar a que su novio se acostumbre.

"S-sí." Las uñas de Joel se entierran en la espalda de Erick cuando siente que le aprieta las nalgas con sus manos.

Las embestidas comienzan a ser más fuertes y la habitación se llena de gemidos, algunos ahogados, Joel no quiere gritar como una puta, pero los gemidos del otro se lo impiden.

"Mierda, Erick. Más f-fuerte, por favor." Erick no puede contener su risa al ver a Joel desesperado pidiéndole por más.

Erick siente que el cuerpo de Joel tiembla cuando toca un punto específico y acelera las embestidas en ese punto.

"Me-me voy a-" Joel no termina la oración y su semen se esparce por el pecho del menor.

Al instante, Erick gime y se corre dentro de Joel. Busca sus labios para darle un beso mientras sale lentamente de él.
Se acuestan en la cama y Erick se encarga de taparlos a ambos con las sábanas.

"Erick." El más pequeño mira a su novio, quien está más tierno que nunca, aunque sus labios están rojos y su cabello está mojado de sudor, aún así su mirada sigue pareciendole la más tierna del mundo.

"¿Sí, bebé?" Sonríe mirándolo y le acomoda un cabello que estaba su en frente.

"También te amo."