112
1 semana después.
Ya habían pasado semanas desde el secuestro, BeomGyu tenía dos semanas de alta, y apenas esa mañana, Kai estaba firmando su salida del hospital.
—Te acompaño —ofreció ChangBin cargando voluntariamente la maleta de cosas personales del omega que volteó a verlo.
Ya estaba recuperado físicamente, los chupetones ya no existían, los moretones tampoco, los rasguños estaban sanando progresivamente, estaba sano físicamente y podía ir a casa.
El doctor había insistido sobre recibir tratamiento psicológico pero no era algo que Kai tuviera en mente en ese momento.
—Necesito empezar mi turno normal mañana —le insistió al alfa que suspiró con un asentimiento.
—Lo harás, no te preocupes... —aseguró, el omega asintió abrazándose a sí mismo, volteó a ver las habitaciones, la única habitación que estaba ocupada era la de YeonJun.
Hizo una mueca, teniendo el recuerdo vivo y grabado en fuego en su mente de YeonJun dándole un baño, dándole lo que más necesitaba en ese momento de dolor, angustia y asco, además de la semana y días que estuvieron secuestrados, y el gesto que tuvo de ir a visitarlo a su habitación varias veces.
—Ya vengo —avisó empezando a caminar a la habitación con seriedad, su expresión era inmutable, no transmitía nada.
ChangBin lo miró caminar, se apoyó del escritorio de la recepción mirando al doctor ir a él con los papeles de Kai, todos los exámenes y resultados que se hicieron.
—Usted ha estado todo el tiempo con él y... No me incumbe la relación que tengan, pero quisiera pedirle algo —empezó a hablar con él, un tono serio y con las manos dentro de la bata, ChangBin asintió con seriedad— Su negación a trato psicológico es entendible y hasta normal en cierto nivel, pero me preocupa que al estar dado de alta y sólo en su hogar pueda cometer algún error o suceder una tragedia... Sinceramente hace cuatro días que podía ser dado de alta pero por insistencia mía quise dejarlo más tiempo bajo supervisión, pero sabemos que el agente Huening es astuto... Así que quisiera pedirle el favor como médico y compañero, que no lo deje sólo —pidió con total preocupación, ChangBin asintió con seriedad, captando la orden.
Así el médico no se lo pidiera, él no lo dejaría sólo en ningún momento.
Por otro lado, Kai entró en silencio a la habitación de YeonJun que estaba sentado en la camilla, abrazando sus piernas.
—Hola —lo saludó avanzando un poco más, quedándose a los pies de la camilla.
—¿Ya te vas? —preguntó YeonJun mirando que Kai ya no tenía la ropa de hospital, recibió un asentimiento.
—Vengo a ser educado y despedirme, además de agradecer... Por el baño y los sacrificios que hiciste allá adentro —habló, YeonJun asintió agachando la mirada.
—Lo lamento mucho... Por tu situación, y-yo... Enserio lo lamento —murmuró mirándolo a los ojos con arrepentimiento, era un sentimiento real, Kai lo sabía, lo veía en su máximo esplendor.
YeonJun estaba arrepentido.
—No era una situación evitable, tarde o temprano iba a pasar por el ambiente en dónde estábamos —hizo de menos la situación con un gesto, YeonJun alzó las cejas— Tienes oportunidad de redimirte, con una vida nueva —le habló, inevitablemente mirando al buró al lado de la camilla, a un lado de una botella de agua había una ecografía, YeonJun se estiró y se la enseñó a Kai.
Kai la tomó en sus manos por educación, mirando la foto fijamente.
—Yo... Tienes razón en lo que dijiste... Voy a criar a un niño para que se cuide de nosotros...
—Crialo para que sea mejor persona que ustedes —cortó devolviendo la ecografía con una media sonrisa. Kai sentía el arrepentimiento de YeonJun, así como había visto suficiente para saber que ese omega era una buena persona y veía lo capaz que era de cambiar— Crialo para que sea el omega que ayuda a otros en las peores situaciones, y no para que sea el omega que traficó personas... —señaló, YeonJun asintió mirando al otro retroceder para irse.
—Que te recuperes... Y vivas feliz —deseó cuando el otro abrió la puerta, Kai relamió sus labios volteando a verlo.
—Por ahora sólo puedo vivir —fue lo único que dijo antes de irse, dejando a YeonJun sólo y reflexionando la corta conversación que tuvieron.
Observó a ChangBin sólo, esperándolo para irse de ahí.
El alfa se había ofrecido a llevarlo a casa, y no se había negado, no tenía el auto ahí y no quisiera estar rodeado de personas en un transporte público.
El repudio al tacto que había desarrollado era algo increíble y que por más que quisiera controlar, no podía.
Aceptaba agarradas de mano y abrazos, pero sólo de ChangBin, irónicamente.
—¿Puedo... Acompañarte? —preguntó ChangBin cuando estuvieron frente al complejo de apartamentos donde vivía el omega, Kai lo observó fijamente.
—¿Para qué?
—No... No quiero dejarte sólo, puedo irme en la noche si quieres pero-...
—No, no soy un niño que cuidar.
—Pero-... No es por eso, todos estos días te he cuidado y-...
—Ya no quiero, ChangBin —negó de nuevo, el alfa suspiró— No soy tu responsabilidad.
—No te veo como una responsabilidad, sólo no quiero que estés sólo y-...
—¿Crees que no puedo cuidarme sólo? —preguntó mirando el perfil del alfa que relamió sus labios— No soy débil, no soy una copa de cristal ni un niño al que tengas que cuidar, voy a comer y beber mis medicamentos porque sé que debo y sé que si no lo hago sería imposible volver a trabajar... Déjame sólo que no voy a matarme, si eso piensas —espetó, con el ceño fruncido, ChangBin asintió con lentidud.
—Bien, te escribiré para saber de ti... —decidió con un suspiro, haciendo un movimiento rápido para inclinarse a la puerta del asiento del omega que dió un salto en su lugar, cambiando su expresión de molestia a una de miedo en segundos.
ChangBin se alejó de inmediato al captar esa reacción.
—Solo voy a abrir la puerta —explicó acercándose con más suavidad, Kai relamió sus labios y salió, tomó su maleta antes de cerrar la puerta, ChangBin le hizo una seña con una media sonrisa— Si necesitas algo, llámame.
—Si... Gracias —se despidió antes de retroceder, caminando al complejo con un suspiro, rodando la maleta y agitando las llaves.
Entró en silencio, saludó al vigilante con un pequeño susurro y subió tranquilamente al penthouse.
Volver a casa se sentía como un alivio, no era el frío del hospital con la dura camilla, simplemente era su hogar, y si, estaba sólo, pero nada como su casa.
Se quitó los zapatos, se concentró en organizar sus cosas de la maleta, dejando una botella de agua a un lado de su cama junto a las pastillas que debía tomar.
Miró su cama, luego su maleta, con ropa y una chaqueta que no era suya.
ChangBin se la había dado uno de los días que se quedó a dormir en la habitación, la sacó de la maleta y la olió por instinto, la dejó en su cama.
Empezó a sacar prendas y prendas de su armario, dándoles la forma de un nido, apilando y apilando, asegurándose de que quedara como quería.
Cuando se sintió satisfecho, se acostó en el medio, abrazándose a sí mismo.
Suspiró cerrando los ojos, tratando de relajarse, debía descansar y prepararse para volver a las oficinas y al equipo, iba a trabajar y cumplir un horario.
Piénsalo... Te estoy haciendo un favor.
Dió un salto en su lugar sintiendo un escalofrío, tomó asiento en la cama queriendo olvidar lo que su mente le mostraba, pero no podía.
Estaba grabado a fuego.
Se levantó y se fue al baño de inmediato a quitarse la ropa y meterse a la ducha, una ducha larga dónde se dedicó a restregar su cuerpo con una esponja una y otra vez hasta que estuvo enrojecido, irritado por completo.
Esa era su rutina, y era inevitable, porque no importaba cuando jabón y agua usara, no importa cuánto usara la esponja.
Él se sentía sucio.
[...]
11:00 pm
—El juicio de Choi SooBin es en cinco días, se le negó la presencia a Choi YeonJun puesto que también debe ser enjuiciado... Se ha considerado colocar seguridad en su habitación de igual forma —explicó uno a los agentes frente a él, todos en una mesa, escuchando y asintiendo. TaeHyun cruzó los brazos.
—Pero Choi YeonJun ha demostrado tener buen comportamiento y colaboración, no digo que no sea necesario pero considerando su estado de embarazo, ¿No sería estresante? —preguntó haciendo a los demás opinar, ChangBin asintió considerando las palabras de Kang.
—Puede ser, pero no podemos privilegiarlo cuando es un criminal... Tenemos consideración pero no llegaremos al trato tan especial... Creo que con un sólo guardia es suficiente, con horarios rotativos —explicó, todos estuvieron de acuerdo, ChangBin relamió sus labios, escuchando lo que seguían hablando pero sin procesar del todo la información.
Apenas y había enviado y recibido mensajes de Kai, se supone que trabajaría hasta las siete de la mañana, apenas empezaba el turno.
—El agente Huening se integra mañana al equipo —informó él mismo levantándose cuando le cedieron la palabra, todos hicieron expresiones de sorpresa.
—P-pero... Él está...
—Su condición física está bien y está preparado para volver, no está siendo obligado, lo está haciendo por voluntad propia —explicó ChangBin, los demás asintieron, TaeHyun ladeó la cabeza, procesando la información— Sólo les agradezco mantener distancia... Su situación no es fácil...
—¿Y la ayuda psicológica? Debería tomar un descanso, está en su derecho.
—Él simplemente no quiere —negó sintiendo su teléfono vibrar en sus pantalones, pidió disculpas y salió de la oficina, sin saber qué TaeHyun lo siguió con la mirada, y luego lo siguió por completo, saliendo de la oficina.
TaeHyun estaba empezando a sospechar algunas cosas y descubriendo algunas otras.
—¿Hola?
—¿H-hola...? T-tu...
—¿Qué pasa? ¿Te sientes bien?
—N-no, yo-... Y-yo soñé qué-... Soñé que vino y-... —del otro lado, el omega sollozó, apretando la sabana bajo él— ¿Puedes venir?
—Llego en diez minutos —prometió antes de colgar, se dió la vuelta con rapidez, dando un salto en su lugar cuando encontró a TaeHyun de brazos cruzados, mirándolo.
—¿A dónde vas?
—¿Eres mi esposa acaso? —rió, TaeHyun negó con la cabeza.
—Ni en tus sueños, soy perro con correa —aclaró, dejó sus manos en sus bolsillos— ¿Vas con Kai?
—Si... Me necesita —sinceró, el otro asintió.
—Yo te cubro, pero escucha algo primero —pidió acercándose a su compañero, dejando una mano en su hombro, lo miró directamente a los ojos con una mirada seria— Kai no está en un buen momento y espero lo entiendas, si te quieres aprovechar o le haces cualquier cosa mala así sea mínima me aseguraré de sacarte de aquí a patadas y no me importa perder mi trabajo por eso, ¿Bien?
—No le haría ningún daño ni me aprovecharía de él —prometió, con total sinceridad. No había porqué aclarar las cosas, ni debía aclarar sentimientos, TaeHyun sabía lo que pasaba, era un secreto a voces.
—Ve —concedió, mirando al otro irse a paso apurado, negó un poco con la cabeza, sintió una vibración en su bolsillo, sacó su teléfono mirando la notificación de que su novio le había enviado un vídeo por otra aplicación.
Fue a la mensajería y empezó a grabar una nota de voz.
—Ojitos lindos~ Te tengo un chismesote~ —canturreó dándose la vuelta para entrar de nuevo, con una pequeña sonrisa.
[...]
11:10 pm
Tal como había dicho, llegó en diez minutos a la vivienda, subiendo por el elevador hasta el penthouse, tocó la puerta con un jadeo.
Casi de inmediato, el omega abrió la puerta.
Estaba en pijama, despeinado, sudando, hiperventilando, con los ojos cristalizados, una mirada de miedo y desespero que quedó grabada en su mente.
—Tus labios... —murmuró cerrando la puerta a sus espaldas y quitándose los zapatos con rapidez, Kai mordisqueó sus labios de nuevo, haciéndolos sangrar.
—Y-yo-... Yo estaba durmiendo... S-soñé-... É-el... El estaba... Y yo-...
—No necesitas contarlo —negó con voz suave, dejando sus palmas frente al omega que empezó a llorar de nuevo, sintiendo miedo, desesperación, ansiedad.
Había soñado uno de los tantos momentos de lucidez que tuvo en el secuestro y se había sentido tan real que había despertado asustado, incluso desorientado, pensando que seguía amarrado a una cama en un lugar que no conocía.
—Ven —el alfa lo guió al sillón, lo tomó de las manos, acariciando su dorso con sus pulgares, el otro sollozó— No está aquí... —negó con suavidad, el otro asintió una y otra vez escuchando, ChangBin lo seguía sujetando de las manos, dándole espacio pero mostrando apoyo por ese agarre de manos y caricias— No está aquí... No puede llegar a aquí... Está encerrado... No tiene salida... Estás bien... Tu-...
—N-no, y-yo-... Yo no- e-estoy bien... —sollozó inclinándose voluntariamente al alfa que lo rodeó con sus brazos, dejándolo llorar en su hombro. )
¿Qué más podía hacer que abrazarlo?
—No está aquí... No te hará daño... No te hará nada... —susurró sintiendo la necesidad de acariciar su espalda, pero sabía por experiencia que el omega lo repudiaba.
Kai se mantenía apoyado de él, pero con sus manos encogidas en el pecho, sin devolver el abrazo.
Ambos eran igual de altos, no había diferencia de altura, la única diferencia notoria era la contextura, mientras que Kai estaba ejercitado pero manteniendo una apariencia delgada, ChangBin se notaba más robusto, con músculos más grandes y pecho voluptuoso.
Y a pesar de eso, cuando abrazaba al omega, parecía hasta más pequeño que él.
—L-lo lamento-... Tu-... Tu estabas trabajando y y-yo-...
—Eso no importa, no es como si me fueran a regañar —murmuró quedándose ahí todo el rato que el omega lloró y trató de calmarse, dándole los apoyos que conocía pero sin ser asfixiante, sin tocarlo más de lo que el otro permitiera.
Él podría hacer eso todas las noches, sin problemas.
Por otro lado, Kai se sintió agradecido con su compañero, por ser tan leal y ayudarlo tanto, por correr hacia él cuando lo necesitara.
Tal vez fuera un omega que mantuviera la idea y palabras que no necesitaba a nadie, a ningún hombre, ningún alfa.
Pero en ese momento sí que lo necesitaba.
—Si piensas empezar a trabajar mañana, tienes que ser consciente de que aún se está viendo evidencia y revisando papeleo del caso —empezó a hablar con seriedad, firme, el otro sorbió su nariz escuchando— Si vas a ir a su juicio y verlo a la cara, no puedes estar así, si necesitas más tiempo puedo conseguirlo, pero no puedes-...
—Yo puedo —afirmó con la voz ahogada, se separó del abrazo secando sus lágrimas con brusquedad, el otro hizo una mueca de preocupación— Yo puedo, no me puedo quedar así y-y... No hacer nada...
—¿Crees que las pesadillas se van a ir si lo haces? —cuestionó, el omega lo observó, ChangBin suspiró sabiendo que había metido un poco la pata por su preocupación de la situación.
—No tengo porqué explicártelo de nuevo, ChangBin —negó pasando sus manos por su cabello, ChangBin se levantó del sillón.
—Recuestate, te preparé un té o algo... Te prometo que no me iré... —prometió, el omega le obedeció, indicando dónde estaban las cosas cuando el alfa preguntó.
La mayoría de veces negaba el querer ser cuidado, pero era una mentira, si lo quería.
A veces decía que prefería estar sólo.
Pero era mentira.
Él necesitaba una compañía, una compañía como la de ChangBin en ese momento.
No podía seguir haciéndose el duro...
Cuando estaba tan destrozado por dentro.
Esta pareja es un poco inesperada hasta para mí, porque (dato) no estaba planeada en ninguna de las versiones, y surgió en mi mente de la nada JJAJAJAJ
Pero estoy disfrutando muchísimo escribirla y espero que a ustedes leerla!
Nos vemos!
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