Salem: No se muevan, traten de no hacer una locura

Korem: Hild es la experta en perros ¿Qué debemos hacer?

Hild: Esos no son lobos normales

Surt: obvio que no, son mecánicos y demás escurren tinta como los monstruos de bóvedas y desean matarnos como siempre ¿y sabes lo peor? ¡Soy un gato!

Korem: ¡cálmate que estoy entrando en pánico!

Los tres canes gigantes les gruñían con fuerza mostrando sus afilados dientes y acercándose lentamente mientras tinta caí de sus bocas imitando la saliva, partes de su cuerpo estaban cubiertas de tinta y piezas mecánicas dejando ver los engranajes moverse, las tuercas rechinar y la maquina funcionar como un extraño motor que emitía en su interior una luz roja como el de sus ojos. A este punto salem ya estaba con las garras clavadas con fuerza y temblando del miedo.

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– ¿De donde salieron?

– ¿Por qué tiene el logo de Luperca? –

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Hild: no lo se, nunca los había visto

La chica sostenía su pluma mágica, pero parecía mas espantada que los demás ya que veías en sus ojos una sensación de terror o mas bien parecía haber estado en una situación familiar.

Sin previo aviso se lanzaron a ustedes comenzando una persecución alrededor de la enorme sala, surt te tomo del hombro y usando su fuerza te subió junto a ella a una de las estatuas gigantes para no ser alcanzados. Uno de los monstruos le gruñía y trataba de alcanzarlos, pero surt le lanzo un hechizo que lo dejo aturdido un momento.

Surt: trata de que no te alcance

Korem había logrado burlar a uno haciendo que chocara con la pared y aprovechando a subir a una de las estatuas para protegerse.

Hild se había quedado quieta en su lugar ya que uno de los lobos la miraba y gruñía sin apartar su vista de ella. Era como si la estuviera analizando con la mirada o algo más, los otros dos no le hacían caso al estar más concentrados en ustedes y el gato que llevabas contigo.

Korem: ¡perro del demonio, aléjate de mí!

Korem pateo el hocico de la bestia haciendo que se enoje mas con el, ahora usaba sus patas y viste como un humo salia de estas haciendo que las piezas se movieran y fueran haciéndose mas grandes y así alcanzar al chico.

Mientras surt les lanzaba hechizos que no le afectaban mucho, korem luchaba por su vida y Hild seguía estática ante la mirada del lobo frente a ella notaste un grupo de miradas mas siendo espectadoras del espectáculo.

Alsaste la vista y viste los ojos de los murciélagos ante ustedes, estaban despiertos y mirando todo el desastre frente a ustedes, sus ojos eran del mismo color rojo que el de los lobos y parecían listos para bajar del techo y atacar.

Mientras el ruido alrededor se formaba y la vida de sus amigos estaba en juego, Hild tenía su propio conflicto interno. Las llamas de un recuerdo parecían revivir ante la vista del enorme can que tenia en frente.

No temblaba, no lloraba y tampoco cambiaba su expresión seria, solo estaba ahí ante la mirada de la vista y al mismo tiempo siendo el recuerdo un suceso de su pasado. Ver los colmillos sobresalir de su boca mas la fuerza del agarre en estos animales, los conocía a la perfección, sabe que de un mordiscos podía arrancarle el otro brazo.

Ya perdió uno, ya sabe como es ser la presa, pero ¿Podrá soportar otro ataque?

Hild: (mantén la calma, no huyas, no tiembles, no te doblegues los lobos deben saber tu posición así solo te respetaran)

Vivir entre bestias traía sus ventajas, aunque en este momento no era la única con su vida en juego.

A un lado los gruñidos de las bestias solo razonaban con fuerza, una de estas casi tomaba la pierna de korem.

Korem: ¡AH, COMETE AL GATO ESTA MEJOR ALIMENTADO QUE YO!

Surt: ¡CÁLLATE QUE MIS OÍDOS DUELEN POR EL RUIDO!

La chica se quedo callada y quieta por lo que dijo.

Surt: ruido, eso es ruido

Dijo mientras su cabeza ideaba un plan.

Surt: ¡Korem, usa un hechizo de sonido cuando yo haga el mio!

Tomo con fuerza su pluma mágica mientras le daba una patada en el hocico al animal, la ayudaste a subir hasta la cabeza de la estatua y korem había logrado también llegar.

Surt: tápense los oídos, esto será feo

Ambos se miraron y de un movimiento usaron un hechizo de sonidos que molesto a los lobos y casi hacían sangrar tus oídos aun cuando los tenías tapados. Sentías un fuerte zumbido en tu oído y salem se metió en tu chaqueta para amortiguar un poco el impacto. Las bestias mecánicas se retorcían por el sonido que les lastimaba el oído.

Al mismo tiempo el lobo que vigilaba a Hild se lanzo a ella casi mordiéndola, esta esquivo el ataque y corrió en dirección contraria atacando con un hechizo las patas del animal y dejándolo adolorido. Aprovecho el ruido y la confusión de las bestias para escapar de este.

Estaba por subir a una de las estatuas cuando una de las bestias choco con ella y la estatuas haciendo que la parte de la enorme escultura le cayera encima y la lastimara.

Un pedazo de roca le cayó encima de su pierna haciendo sonar parte del salón tanto por el impacto como el grito que soltó la chica.

Hild: ¡Argh mi pierna!

Su grito llamo la atención de los murciélagos y la sangre que machaba su pantalón solo fue un incentivo para que fijaran su objetivo. Hild se dio cuenta que llamo demasiado la atención de los monstruos del techo, trato de levantarse, pero fue inútil, solo sentía un horrible dolor en su pierna como de todo su cuerpo.

El ruido se detuvo quedando solo los chillidos de las bestias y como si de cámara lenta se tratara viste bajar a la orda de murciélagos en grupo llevándose arrastras a Hild, esta usaba su pluma, ningún hechizo funcionaba hasta que de golpe se la quitaron y la arrastraron con ellos.

Hild: ¡AUXILIO, AYUDA, KOREM, SURT, ____, QUIEN SEA AYÚDEME!

Surt: ¡HILD!

Korem bajo de un salto cayendo de pie al suelo mientras usaba uno de sus hechizos contra las bestias murciélagos.

Surt bajo también para ayudar a su compañero, pero no soltaban a la chica haciendo que un par se lanzara contra ellos atacándolos mientras los lobos recuperaban el oído.

Hild: ¡Suéltame¡

Hild pataleaba para safarse de su agarre aunque no era mucha la fuerza que podía dar por la condición de su pierna. Mientras era arrastrada se sujeto de la base de una de las estatuas deteniendo su avance aunque al mismo tiempo los monstruos tomaban mas fuerza.

Salem: hay que hacer algo aprendiz o se comerán a los chicos

El felino había dicho mientras salía de tu chaqueta, miraste alrededor tratando de ver si había alguna palanca o artefacto como la bóveda anterior solo pudiste ver algo en el techo donde estaban los murciélagos. Era una cadena larga de metal como para bajar algo o activar una cosa.

Viste de reojo a salem y este miro la cadena.

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– Necesito que llegues hasta ahí –

– Tu poder nos ayudaría ahora –

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Salem: solo espero llegar hasta haya arriba

El felino se preparo la llama de su cola se encendió mas desapareciendo de tu lado y apareciendo en uno de los barandales del techo no muy lejos de la cadena.

Salem: nya, solo un poco mas

El gato reunió más energías despareciendo y apareciendo mas cerca de la cadena, lo único que lo separaba era la distancia más la altura considerable. Estabas buscando otras opciones cuando notaste que uno de los lobos se había recuperado y vio a salem en el techo.

Abrió su boca y de esta comenzó a generar tinta con una extraña luz roja que te recordaba al fuego que tenían dentro de sus cuerpos.

El gato estaba mas concentrado en alcanzar la cadena que no notaba al lobo bajo el. Los otros dos chicos aun estaban luchando contra los murciélagos y los brazos de Hild no durarían mucho tiempo más.

Debías hacer algo rápido.

Como si por instinto fuera sacaste tu pluma mágica, la piedra rojiza no emitía ni un solo brillo como el de tus amigos un cuando tuviera la misma apariencia, del brillo de la gema notaste como había algo brillando cerca, como el reflejo de una luz cerca.

Miraste arriba de ti y te encontraste con un ladrillo con el logo de Luperca, sin mas te acercaste a este subiendo mas al techo por las grietas que tenias. Lo tocaste dándote cuenta que era una tapa, estabas por abrirla cuando escuchaste la cadena jalar.

Salem: lo logre

Por el peso del gato la cadena fue para abajo y al mismo tiempo el suelo comenzó a temblar.

Surt: ¿Qué?

Korem: ¿Ahora que sucede?

Los lobos se fueron de ahí como si supieran lo que sucedería y al parecer lo sabían. El suelo se abrió dejando caer a surt y Korem en lo que aprecian ser tubos que los llevarían a diferentes lugares, Hild ya no aguanto mas siendo jalada por las bestias.

Sin más el suelo regreso a la normalidad dejándote solo en esa sala sin saber a donde fueron llevados tus amigos.

Salem: creo que no debí hacer eso

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La primera actualización del día

¿Qué les pareció? ¿Dónde cayeron los chicos?

Sin más nos vemos en el siguiente capítulo de Twisted Legend
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