Toru y Atsushi comían como animales el Chazuke que prepararon los Akutagawa, habían nadado, corrido e incluso se habían trepado a los arboles sin ningún control, Ryunosuke y Sousuke suspiraban al ver a los felinos tan boraces

- Hoy acamparemos aquí – dijo Sousuke

- Pero la luz de la luna... - decía Atsushi temeroso – y-yo ya no pertenezco a la Agencia... Así que no puedo controlar al tigre...

- Está bien Atsushi – le tomo la mano Toru – ahora me tienes a mi, te enseñaré – dijo sonriente

- Tienes razón – sonrió el albino

A pesar de aquello pasaron una noche tranquilos, miraron las estrellas y la luna en pleno campo abierto, el cielo oscuro y solo la luz de las estrellas y luna adornaban el lugar, obviamente Toru no evito ponerse romántico con Sousuke

- Por favor Toru si harás algo métete en la tienda de acampar – se quejo el albino

- Que celoso Atsushi – dijo Toru yendose encima de su hermano – también te daré amor

- Es-espera no quiero de tu amor – se quejaba el albino quitándose a su hermano de encima

- Toru se descontrola en las noches – dijo el mafioso molesto

- Si, pero es lo mejor de las noches – dijo Sousuke tomando a Toru – que pasen una buena noche – dijo Sousuke llevándose a Toru mientras este se quejaba queriendo besar a su hermano

- Toru cada vez es peor – se quejo Atsushi

- Toru es posesivo incluso contigo ¿Qué esperabas? – decía Ryunosuke – aunque me alegra que no sea competencia

- Es mi hermano

- ¿y que? – dijo Ryunosuke tomando al albino – ven

- ¿A dónde iremos?

- A la orilla del rio – dijo el mafioso

Atsushi y Ryunosuke se sentaron en una gran roca, contemplaban la luna, las estrellas y el reflejo en el rio, Atsushi estaba feliz, Ryunosuke no pudo evitar como el agua se reflejaba en el albino y como este brillaba por la luz de la luna, le pareció lo más hermoso...

- Jinko - ¿estas bien con tu decisión? – pregunto el mafioso

- Si, estoy bien – dijo el albino sonriente

- Me elegiste a mi... así que yo te elegiré a ti – dijo el mafioso

- No tienes que elegir – dijo el albino

- No me refiero a eso, simplemente quiero elegir estar contigo y seguir sintiendo esto que siento – miro al albino a los ojos- este sentimiento llamado amor que me tiene tan feliz

- En-entiendo – trago saliva – Toru quiere que me encargue del Bar junto con el y Sousuke, así que todo seguirá como siempre Ryu, tu y yo juntos... - el mafioso abrazo fuerte al albino

- Gracias Jinko... - miro al albino – tu y yo estaremos juntos, nada malo te pasará y nada te faltará

- Tampoco seré un mantenido Ryu – se quejo el albino

- Con tu antiguo salario lo eras – dijo simple Ryunosuke

- Eres un – el albino no pudo terminar puesto que el mafioso lo beso

Aquel beso que daba el mafioso al albino estaba lleno de arrepentimientos, inseguridades pero sobre todo amor y felicidad, marcaba el comienzo de un nuevo día para ambos y el comienzo de una noche apasionada a la luz de la luna

El mafioso ya tenía al felino prácticamente sin ropa, era algo simple para él a decir verdad, esta vez logró ver a los ojos a Atsushi, este estaba nervioso

- O-oye Ryunosuke – le llamo sonrojado

- Dime

- Re-recuerdas... ¿co-como me dejaste lleno de mordidos en Disneyland?

- Si, usaste suéter por 3 días

- Si, yo... - el albino trago saliva - ¿puedes volver a morderme así?

- ¿Por qué?

- Yo tengo nada que demostrar pero... - miro al mafioso fijo – quiero que las personas puedan ver que soy tuyo - Ryunosuke aguanto las ganas de reír y sonrió

- Claro, lo haré con gusto – dijo el mafioso

Ryunosuke mordía cada parte del albino, dejaba algunas fuertes, otras rojizas, unas comenzaban a ponerse moradas y otras sabia bien que pasarían a hacer de un tono oscuro tal fueran un moretón, sus dientes mercados por toda su piel lo adornaban como un poema

A la media noche Ryunosuke tenía al albino agotado por fin, aunque el no recistiria mucho tampoco, Atsushi respiraba jadeante y profundo, se veía que necesitaría dormir, así que así fue, llevo al albino aun desnudo y sudoroso a su tienda de acampar, allí por fin lograron dormir...

La mañana siguiente Toru se despertó con el olor a Chazuke, sin mencionar que su hermano Atsushi hacia lo mismo, los Akutagawa preparaban aquel platillo cuando los vieron salir

Toru llevaba unas cuantas mordidas visibles, pero aquella mordida muñeca y cuello solo significaban algo para los felinos "Eres mio" y "Estamos enlazados" (o casados para la segunda) Atsushi comenzó a reír al ver a su hermano y Toru lo miro molesto

- De nuevo te dejas morder Atsushi te he dicho que no debes dejarte y

- Lo dice el que esta lleno de mordidas comprometedoras – interrumpió el albino burlón

- Atsushi que grosero – dijo Toru sonrojado

- No puedo creerlo – decía Sousuke – Atsushi se la devolvió a Toru

- Jinko va aprendiendo – dijo burlón Ryunosuke

Los felinos peleaban, Atsushi literalmente llevaba la piel más roja que otra cosa, una mordida a la mitad de su cuello era como un collar, adornaba su cuello y dejaba la vista a cualquiera, sus brazos y muñecas así como dedos y piernas estaban mordidos por el mafioso sin mencionar lo que cubría la ropa. Toru por su lado, llenaba algunas mordidas en los dedos, el cuello y muñecas, sin mencionar lo que cubría la ropa. Los felinos y los Akutagawa habían vuelto al hotel, su gran sorpresa fue ver a algunos de los mafiosos ya y sin olvidarse de Sakura, la diseñadora y planeadora que Toru contrato

- Toru, Atsushi – decía Sakura molesta – les dije que tenían que evitar pelear antes de la boda, miren como están

- Lo siento Sakura – decían los gemelos al mismo tiempo

- ¿Qué les paso? – pregunto Chuuya acercándose

- Chuuya, buenos días – dijeron los felinos alegres al mismo tiempo

- Dan miedo haciendo eso

- Chuuya-san – le llamo el mafioso – solo no les haga caso

- Parece que la pelea estuvo dura – dijo el líder de la mafia – son unos pequeños rufianes par de felinos

- Si, fue una pelea dura – dijeron los felinos burlones

- ¿Ahora de que se burlan? – se preguntaba Mori

- Probablemente de tu falta de estilo – dijo una voz detrás, Dazai se hacia presente dejando ver a la agencia entera, Atsushi se tenso

- ¿A que hora era la boda? – pregunto Naomi

- Tenemos nuestras reservaciones pero lo olvidamos - decía Ranpo

- Atsushi ¿serias amable de mostrarnos? – dijo el presidente Fukuzawa

A este solamente llego la filosa tela de Rashoumon, Ryunosuke había apartado al albino, esto sorprendió a la Port Mafia quienes veían al perro mafioso de aquella manera

- Les dije que lo dijeran en paz – dijo Ryunosuke molesto

- Ustedes se fueron antes – dijo Kunikida arreglándose los lentes – ciertamente es un error pero es algo que no se evitará, el mocoso es parte de nosotros

- Jinko no necesita de personas que lo tratan mal – dijo el mafioso

- ¿pero que paso que están así? – pregunto Dazai ignorando la situación y viendo a los felinos

Los felinos solamente los ignoraron, ciertamente no tenían mucho tiempo las mordidas, apenas se notaban y con la ropa que llevaban, parecían un par de moretones solamente.... Ante aquello los mafiosos voltearon a ver al perro de la mafia, realmente estaban sorprendidos y sin palabras, los agentes suspiraron a ver al albino; al sentir las miradas, Ryunosuke simplemente tomo al albino y se lo llevo, le siguió Toru quien no quería ver a la agencia tampoco y Sousuke solo suspiro

- Yo me haré cargo – dijo Sousuke pasando entre la agencia y mafia

- Sousuke ¿Qué fue eso? – pregunto Dazai

- Están molestos por su reacción con Atsushi, llegan como si nada sin hablar antes y

- Espera – decía Higuchi - ¿dices que Akutagawa-senpai y el tigre de la agencia se llevan bien? – pregunto la rubia esperanzada. Sousuke se carcajeo

- Que divertida eres Higuchi – decía Sousuke entregándole unas entradas – la mafia y la agencia están divididas, si me permiten debo alcanzar a Toru

- Sousuke – le llamo Dazai – no acaparen a Atsushi-kun

- Ok – dijo Sousuke buscando a su amante

Hola disculpen he tenido mucho trabajo, subiré unos cuantos capítulos, espero que sepan que no los he abandonado, solo el trabajo ya saben, gracias por seguir siguiendo el fanfic