Nieve...

Una fría y helada tormenta se avecinaba bajando la temperatura de todo, hoy un pequeño ha nacido tal vez algún día se volverá un héroe o solo un villano de una historia mal contada...

Valle de la paz, un lugar pacifico donde vivir y la tranquilidad abunda donde sino tienes dinero o un hogar otros te dan una mano sin esperar nada a cambio es un pueblo, aun asi la gente posee un gran corazón...

Esperanza, frustración, odio y tristeza. Estas son las emociones que se entrelazaban en el corazón de un alma destrozada.

Y al menos hasta ahora, nunca fue suficiente para "El" y quiso destruir su hogar.

Alguien irrumpe en el Palacio de Jade, lleno de odio y amargura reclama lo que una vez debió ser suyo.

—Sabias que yo era el guerrero dragón, siempre lo supiste... siempre.

Y el se negó a darle ese titulo, Oogway el magnifico y sabio espiritual vio oscuridad dentro y le dio la espalda dejando desconcertado a mi mismo y pensé que Shifu protestaría lo vi dudar.

—Pero cuando Oogway dijo lo contrario... ¿Qué hiciste? ¡Dime! ¿Qué hiciste?

Y por primera vez sentí ese asco nauseabundo de ser rechazado, al darme la espalda nadie se puso del lado mío ni me defendió e incluso a quien consideraba un padre me abandono.

—¡¿Qué hiciste?! ¡Nada! — Dejaba escapar su dolor y frustración en su voz.

—¡No era tu destino ser el guerrero dragón, no es culpa mía!

—¿Qué no fue culpa tuya? Imbécil... ¿Quién demonios lleno mi cabeza de sueños y esperanzas? ¿Quién me hizo entrenar hasta romperme los huesos? ¡¿Quién me negó mi destino?!

Me dolía mucho no ser elegido ni menos ser alguien alabado por otros, haber pasado entrenando por 20 años y que me derrumbaran mi sueño y lo que quería ser... termine de volverme en un monstruo cegado por el odio.

No soy mas que basura sin nada de valor, eso creía hasta ver en el panda una nueva generación de guerreros al derrotar "The Chameleon" y devolver las habilidades robadas.

Aun no me decidía si debía disculparme o mostrar respeto por quien me salvo y frente a frente a los tres grandes villanos...

—Tal vez Oogway no se equivoco contigo después de todo.

Si lo mejor, es solo mostrar mi gratitud aun no estoy preparado para dar unas disculpas.

—Finalmente no eres un inútil para todo lo que haces.

—Enserio? Pues en realidad te lo agradezco mucho.

No lo dude hice una reverencia reconocía su valor y valentía que ese panda y su amiga demostraron al detener "La fiesta de la luna de sangre" y a lo lejos la gente gritaba de emoción.

—Creo... que ya es hora de que nos devuelvas a casa panda — dijo abriendo los brazos y con una pequeña sonrisa.

Si, definitivamente nunca mas volveré a pelear y lastimar a mas inocentes, distintos recuerdos se vinieron a mi mente y el no disculparme ni con Shifu y esa pequeña hermanita.

—Este es el adiós para siempre... vive tu vida panda vívela bien y al cumplir tu labor, ven un día a nuestro lado...

En mi pata tenia cogida al Camaleón desde el golpe con Báculo falleció y su lugar ya no era el mundo de los mortales sino de espíritus. Di una pequeña sonrisa triunfante al verlos a los dos.

—Te esperaremos nos vemos del otro lado, Guerrero Dragón...

Todo termino el mundo entero reinaría la paz sin saber que aun le quedaba algo por realizar, esta fue "La Redención de Tai Lung" y su camino hacia la luz.

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¿Cuántos años pasaron? Tai Lung lo desconoce parecía que hubieran transcurrido siglos al estar en un sueño muy profundo, alguien me llamo era el, "Oogway el magnifico" tuvo una sonrisa y le atino un golpe en la cabeza.

—Uhhhhh? ¿Maestro Oogway? Donde estoy... si ya lo recuerdo volví al reino espiritual.

—...

—Si piensa castigarme hágalo de una vez.

—...

—Ya veo... piensa darme la espalda de nuevo.

—Tai Lung... debe regresar a casa.

—Eh?! Q-que dice?

—No... te preocupes... Tai Lung debes volver a casa, todo el reino espiritual estará bien...

—Maestro yo...

—Tu padre va a saberlo... quien fue su amado hijo... y lo que Tai Lung logro... redimirse después de años.

—Si... no hare daño a nadie mas — menciono apretando los puños y inclino la cabeza al ser una reverencia.

—Te has vuelto fuerte, estoy orgulloso de ti.

Su mano del maestro se poso por unos segundos en la cabeza del Leopardo y le trajo recuerdos de su niñez y días en el Palacio de Jade.

Aun tiene una ultima labor que cumplir y dejo escapar lagrimas de sus sensibles y pasivos ojos.

—Por favor... cuida de los demás Tai Lung y conviértete en una persona de bien protege a los animales y las plantas que tanto ame.

—Si... lo hare, y esta vez no volveré a defraudarlos.

—Eres fuerte, nunca dudes de tu fuerza úsala para hacer el bien ve a la luz.

—Parece que al final si merezco una segunda oportunidad.

—Todos merecemos una nueva oportunidad... muchacho se que Po te guiara al camino del bien.

—¿El panda?

—Aunque no lo parezca Po... tiene ese habilidad de cautivar a los demás con su actitud amable y generosa, tal y como lo hizo con Zhen.

—¿Zhen?

—Me sorprende que no la conozcas, es su nueva aprendiz... una Zorro Corsac que representa el Ying y el Yang por su alma bondadosa.

—Ya veo, con que era ella... quizás yo debería agradecerle por ayudar al panda.

—Haz lo que tu alma y corazón crea correcto... no vayas a desperdiciar esta una nueva oportunidad, piensa con sabiduría.

Al decir eso se desvaneció por completo y el reino espiritual empezó a temblar y sacudirse al abrirse un portal bajo mis piernas, volví a caer en un sueño profundo con la esperanza de verlos una vez mas...

Ese pequeño leopardo de las nieves abandonado y solo en una oscura e helada noche sin comida y un hogar despreciado por su propia familia y gente al ser solo un bebe, tuvo la suerte de acabar un mejor lugar con un padre.

Hizo hasta lo imposible le dijo que su destino era la grandeza y gloria, todos los años entrenando fue para que "El" siempre sintiera orgullo y alegría, pero fue su arrogancia y odio que lo cegó su camino solamente condeno su destino...

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A lo lejos del horizonte se dejaba ver el sol saliendo y la llegaba del alba Tai Lung despertó y lo que tenia delante es un riachuelo sintió su cuerpo arder y un pequeño cosquilleo.

—He vuelto a casa... realmente serias capaz de perdonarme luego de haber querido asesinar.

Esa frustración aun estaba presente, la inferioridad y verme un reflejo en el agua me trajo recuerdos de mi antiguo yo, solamente me lleno de mas odio hacia mi mismo, por haber sido un idiota que se dejo llevar por su sueño.

Y golpee el agua desapareciendo ese pequeño reflejo, respiraba al tratar de controlar mi temperamento y al hacerlo, alguien llamo hacia donde estoy.

—¡Po! — llamaba una Zorro Corsac con la mano.

—P-pero si tu eres...

—Uhyyyy? Tu no eres Po... mis disculpas me equivoque de persona.

—Espera, detente ahí un rato... Zorra.

—¡Oh no! Un anciano va a golpearme tengo mucho miedo ¿Y ahora quien podrá defenderme?

—...

—Y encima tiene un bastón para caminar ¿Qué vas hacer? Golpearme hasta matarme abuelo.

—...

—Ups si!

—...

—¿No hablas mucho, eh?

—Si claro... — dijo el leopardo volteando su rostro con algo de pena.

—Algo en mi interior me dice que siente pena ajena por mi... si cree que soy una loca — se dijo en su mente la Zorro.

—Espera... ¿Qué haces tu con el Báculo? Po puede ser un idiota, pero nunca le daría voluntariamente ese báculo a una tonta.

—¿A quien le dices tonta? Abuelo!! Para empezar soy la nueva guerrera dragón.

—¿Tu? Un zorro? Los dioses del olimpo ni se creen eso. A ser un sueño muy lindo el que tienes...

—Huh?! Ven y pruébalo — la Zorro cogió unos palillos de una canasta que trae consigo suyo.

—Shifu... te enseño eso, tus artimañas baratas no serán suficientes — dijo el al coger unos palillos que le paso la Zorro.

—Que impresionante que conozcas el nombre de uno de mis maestros... déjame adivinar ¿Un forajido?

—Inicia de una vez...

—Bien, fui entrenada por Po y esto es un juego de niños para mi.

La vi ella hizo el primer movimiento golpeando con los palillos mi cabeza, se lo devolví asestando un ataque a su cola esponjada. Zhen sintió esa emoción de querer ganar y le pico sus ojos.

—Mierda... eso es jugar sucio, profanaste mis ojos pequeña traviesa.

—¿Quién esta profanando, que?

Al usar los palillos Zhen le dio dos piquetes en ambas piernas a su oponente y luego un golpe en la entrepierna haciendo que suelte un grito tierno de gatito...

—Uhmm~ Uhm~ con que esas tenemos Zorra... ya no seré tan amable como antes.

—¡Oh no! El abuelo va a cantarme una canción de cuna...

—Quiero la revancha.

—Aceptada... y también la ganare.

—...

Volvieron a tener una pelea de palillos, iban igualados hasta que el Leopardo la supera considerablemente y asesta dos piquete en las dos piernas de la Zorro, y después un par en el pecho.

Zhen siente que su cuerpo no puede moverse como si sus nervios fueron tocados por los palillos.

—Umm... eres bueno, ya acepto mi derrota.

—Di la frase.

—¡Es enserio! Me duele decirlo... luego voy a querer la revancha.

—Dila.

—Me... rindo.

La pequeña Zorro Corsac pierde el equilibrio y cae por el cansancio, logre atraparla entre mis brazos y me asegure de no haberla lastimado demasiado por alguna razón es cálida.

La cargue de forma nupcial al no encontrarse nadie a los alrededores decidí llevarla conmigo y llegue a una cueva algo oscura recosté su cuerpo y fui a reunir leña para prender una fogata, pequeño pero tenue y cálido.

Sin darme cuenta empezó a nevar siempre todo se me ponía en contra, ya casi atardecía y atrapes unos cuantos peces con algunos hongos silvestres comestibles y los puse al fuego.

Y la vi dormir, su rostro me traían breves recuerdos de mi mismo al ser un pequeño cachorro instruido por el mejor maestro... y padre que alguien puede desear.

—Papa... ¿Puedes perdonarme después de todo? — Se pregunto asimismo.

De repente esa pequeña Zorro Corsac empezó a despertarse por el buen olor proviniendo de la fogata.

—Al fin despertaste, ya pensaba que asesine a la aprendiz del panda.

—¡Por quien tomas! Soy fuerte muy fuerte.

—Si eso parece.

—Amargado... snif snif que bien huele.

—Puse a asar algunos peces que atrape, pero ni pienses que compartiré mi comida contigo...

—Ah? Algo me dice que me odias.

—Ufffff claramente estaba bromeando.

—Eh! Hey eso es lo mío... tu intenta hacer otra cosa que no sea bromear.

—¿Celosa? Te supere.

—Ni en tus sueños, querido.

—Uhhhh? Entonces no te molestara si le digo al resto del Valle que la gran guerrera dragón se rindió ante un principiante.

—No te atreverías.

—Quieres comprobarlo...?

—Grrrr... tonto.

—Ya están listos ten estos dos son tuyos.

—Menos mal, ya quería almorzar.

La vi unos segundos a la Zorro Corsac devorar los peces asados se le nota disfrutaba comer, ¿Acaso puedo volver a esos días con mi padre? Si esa chiquilla pudo hallar su redención, porque yo no junto a Shifu.

Si de tanto verla, noto mi mirada puesta en ella y se avergonzó.

—¿P-porque me miras tanto? Abuelo... sabes que es descortés mirar tanto a una chica.

—Disculpa, solo que me trajiste recuerdos de los viejos tiempos con mi maestro.

—Oye... ¿No eres de por aquí o si?

—Creí que ya sabias quien era...

—No lo se.

—Si haces algo de memoria puedes llegar a recordarme al fin y al cabo eres alumna del panda.

—Mmm ¿Tai Lung? — pregunto la Zorro Corsac algo sorprendida.

—Y yo que creí que no sabias escuchar.

—Pero tu... estas muerto.

—Si lo estoy.

—Entonces ¿Eres un fantasma o algo parecido?

—Agradecería que no me llames fantasma y por favor no le digas a los demás que me viste.

—¿Por qué? Todos ellos se alegrarían de verte.

—¿Eso crees? No... no puedo volver a lastimarlos, estoy seguro que no sienten empatía por una persona sin valor como yo.

—No lo sabrás sino lo intentas... ya estas en casa porque no ir con los demás — le respondio la Zorro con una sonrisita.

—Que fastidio... termina de comer y vuelve con Po ahí es donde perteneces. Yo pertenezco en el camino de las tinieblas.

—¿Eso crees? Frente a mis ojos solo veo a alguien que intenta ser amable todos tenemos bondad dentro. Un amigo me dijo que nunca es tarde para hacer lo correcto.

—Pero... aunque lo hiciera nadie me perdonara soy un huérfano.

—Bueno... yo también soy huérfana perdí a mis padres a una corta edad.

Por un instante Tai Lung mostro asombro en su rostro y lo comprendió.

—Pero... tu no eres como yo. Porque yo asesine a gente inocente e intente matar a quien me crio como... su hijo.

—No eres el único, ¿Sabes? Mi camino siempre fue en la oscuridad al ser una ladrona pero Po me hizo ver el camino correcto.

—...

—Y termine dándole la espalda y traicione a la Camaleón quien me dio comida, ropa y un techo, aun asi en el fondo me costaba creer que solo me usaba para su beneficio... era como mi madre.

—Entiendo... no te sientas culpable por ello, la Camaleón tomo ese camino que la condeno a ser derrotada... no es tu culpa.

—Jajajaja.

—¿Qué es tan gracioso?

—Nunca espere que el temido Tai Lung fuera tan amable y cortes con una chica.

—Hay no... porque — dijo el leopardo llevando su mano a su cabeza con decepción.

—Pero, creo que esa amabilidad es tu autentico yo, o me equivoco?

—Supongo que si.

—Mmmm si fueras el temible y sanguinario Tai Lung de antes, yo ya estaria muerta ¿Verdad?

—Si eso parece... eh?

Al notarlo, Zhen estaba comiéndose mi parte de los pescados y quise regañarla al final suprimí mis emociones al dar un suspiro.

—Nunca conocí a una Zorro con tanto apetito... ¿Acaso no engordas?

—Eso no se le pregunta a una chica, pero si adoro comer mucho.

—Tal vez Po ya tiene una nueva rival.

—Si por lo visto si. Oye dime una cosa porque alguien tan amable como tu teme ser rechazado de nuevo por su familia.

—Ya te lo dije, no pienso ir.

—Si lo comprendo... no te presionare mas hacer algo que no quieras.

—Te lo agradezco, Zhen.

—Hagamos un trato.

—¿Qué clase de trato?

—Este...

No me lo espere la Zorro lo tomo del meñique sellando algo y sorprendió a un Tai Lung que estaba distraído.

—Volvamos a tener una pelea de palillos los siguientes días y si te gano aunque sea una vez vuelves al Palacio de Jade.

—¿Por qué aceptaría?

—Porque tu padre no deja de pensar en ti, no luego de lo sucedido en Junípero... Po se lo dijo que fuiste traído por la Camaleóna.

—Si ya entiendo... esta bien, pero déjame decirte que no pienso perder ni una sola vez contra ti.

—Entonces es una promesa.

—¿Promesa?

—Tai Lung tu prometes volver a casa junto a nosotros y tener tu nueva oportunidad... tienes que dejar de lado esa oscuridad porque simplemente no importa, solo importa el presente.

Me sorprendió que una chiquilla a tan corta edad hablando con sabiduría y madurez, tal vez el panda no se equivoco al elegirla a ella como su aprendiz.

—De acuerdo, es una promesa... volveré a casa si me derrotas aunque sea una vez y yo juro que seré fiel a mi promesa, Zhen.

—¡Yupi! Entonces promesa hecha.

—Ya es hora de que vuelvas, Po se preocupara y de seguro mandaran guardias a buscarte sino vuelves.

—Si eso lo se.

—Anda ya vete.

—Oye...

—¿Qué?

Nunca me lo vi venir, Zhen fue contra mi y me abrazo unos momentos sentí su cálido pelaje y suaves manos sin embargo en su rostro no había tristeza sino una expresión de gratitud.

—Gracias por la comida... estuvo deliciosa espero volvamos a vernos. Fue agradable hablar y conocerte Tai Lung.

—Si... lo mismo digo, Zhen.

—Hasta pronto, ya debo irme.

—Si y ten cuidado en el camino por favor, regresa a salvo a casa...

Se acabo el abrazo y alejándose Zhen se despedía con las manos y una sonrisa en su rostro por alguna razón esa chiquilla me traía recuerdos de mi niñez.

Ya cayo la noche, y me recosté dentro de la cueva intentado conciliar el sueño.

—Padre... algún día regresare a casa...

Lo prometí que siempre íbamos a ser familia, nuestros lazos unidos y esta vez selle una promesa bajo la nieve y que lograría volver a lo que una vez llame "Familia" y disculparme por todos mis pecados.

Continuara...