"El futuro no está prometido para nadie. Si tienes un sueño, ve a por él."
-Anónimo

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[ Ubicación Actual ]
Goldenrod City
Ciudad Trigal

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—¿De verdad no podemos caminar más rápido? Siento que hasta un Slakoth nos ganaría—preguntó Harley con algo de dificultad, tenía sudoración excesiva en el rostro.

—Lo haríamos, si no tuviera que cargar con la mayor parte de tu peso, hablando de eso, siento que estoy cargando cada vez más, ¿qué sucede Harley? Espero y no sea alguna especie de chantaje o algo por el estilo—respondió Drew cargando a Harley, colocando el brazo alrededor de su espalda. Debido a la altura de Harley, se le dificultaba llegar a su cuello, así que optó por esa opción, sin embargo, él aún no notaba lo mal que se estaba poniendo su rival, al parecer no era algo poco delicado después de todo.

—¡No! Para nada, ahorita no tengo necesidad de eso—comentó el coordinador con traje de Cacturne.

—Aún débil, no pierdes el sentido del humor—dijo Drew entre dientes, lo cual no alcanzó a escuchar Harley—. Y bueno, a todo esto, ¿qué fue lo que te pasó para que te sintieras así? No me digas qué fue un ataque de pánico.

—¡Por supuesto que no! Ni que fuera un simple principiante, es más, cuando lo fui nunca llegué a sentir eso—exclamó el coordinador de mayor estatura, aunque con una voz débil debido al agotamiento que sentía por todo el cuerpo, incluso ya hasta en sus cuerdas vocales.

—¿Entonces?—preguntó Drew.

—Es un misterio, es la primera vez que me siento así, nunca me he sentido tan débil, tan humillado—contestó Harley mientras ambos seguían caminando rumbo a su destino.

—Aparte de débil, se te está borrando la memoria, las humilladas que te di jamás las vas a olvidar, o al menos eso creía—dijo Drew batallando cada vez más con el peso, parecía que en cualquier momento iba a colapsar.

—Todas las personas, tienen una pizca de suerte en sus vidas, por más arrogantes o maletas que sean—contestó de inmediato, aún débil, su personalidad no le permitiría perder una discusión.

—Te describiste muy bien sabes, tienes suerte en que te esté ayudando, es más, ¿por qué lo estoy haciendo?—se preguntó el chico del cabello verde brillante, olvidando lo que sucedió previamente.

—Y decías, que, yo era el que estaba, perdiendo la memoria—dijo el chico de cabello morado, respirando casi en exceso, después de cada palabra—. Me cargas porque, si me dejabas ahí, se enteraba May, de que le gustas.

—No iba a permitir que le dijeras mentiras a May, eso iba a hacer incómodo para todos—dijo Drew algo tenso, las primeras palabras de Harley que provocara que se pusiera de esa manera.

—Ehhhhh, para eso me gustabas campeón—Se burlaba el chico de mayor estatura.

—Cada quién sus gustos—respondía Drew, parecía gozar burlarse del débil Harley.

—Lo que necesitas es solo un empujoncito, y no me dejas ayudarte—Harley decía, mientras veía que el centro Pokémon se empezaba a ver a la distancia, ya estaban cerca de su destino.

—Yo no necesito ayuda, y menos de ti, después y May me termina viendo cómo tu, ¿cómo lo digo de una manera discreta? Ah, como alguien que quiere salir del closet, como coloquialmente le dicen—dijo Drew con un tono serio y frío, se comenzaba a enfadar debido a que Harley no paraba de hablar de lo mismo.

—Está bien, como quieras, igual conseguí lo que quería—dijo el chico que su vestimenta hacia parecerse a un Cacturne.

—¿Qué?—preguntó el chico ganador del gran festival.

—Confirmaste que te gusta May, y ahora es inútil que lo niegues—respondió Harley, sin embargo su voz parecía irse apagando, se veía cada vez más débil, aunque su necedad por seguir hablando se mantenía intacta.

Dicho esto, Drew no pudo evitar sonrojarse como nunca antes visto, su reacción fue tan grande que perdió la concentración y por ende también la fuerza que estaba utilizando para cargar a Harley, causando un desequilibrio entre ambos, trayendo como consecuencia que ambos impactaran el suelo.

—¡Ah!—gritó Drew después de la caída—. Ya vez lo provocas Harley, deberías mejor aprender a no meterte en asuntos que no te incumben.

Sin embargo, el coordinador no respondía...

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—Oye Harley, ya deja de hacerte el dormido, estamos a escasos metros del Centro Pokémon para que puedas descansar, desde aquí lo puedo ver, es tu problema si no quieres levantarte—dijo el coordinador de Roserade molesto debido a la caída, creyendo que su rival seguía bromeado.

El chico proveniente de Ciudad LaRousse intentó de todo, lo sacudió, le gritó por su nombre varias veces, pero nada, Harley parecía haberse desmayado, lo débil se le notaba desde rato atrás pero, ¿tan delicado era? Drew se quedó pensando por un instante, necesitaba procesar lo que estaba sucediendo, si bien no le agrada, en el fondo no le deseaba algún mal de esta magnitud.

Poco después, agarró a Harley por el cuerpo e intentó levantarlo con todas las fuerzas que tenía, se veía las venas en el cuello y en los brazos, pero no fue suficiente, término cayendo nuevamente.

—Mierda...—dijo en voz baja intentando calmar su frustración mientras se encontraba de rodillas mirando el panorama, como venían bajando de la colina, no había nadie cercano para ayudar, aunque el Centro Pokémon estuviera cerca.

—¿Y ahora, qué voy a hacer?—Se preguntó, su cara estaba llena de tierra y reflejaba impotencia, no iba a dejar a su rival ahí tirado.

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—¡Drew!—Se escuchó una voz femenina gritar a distancia, el chico de cabello verde volteó de inmediato y vio que era May, corriendo a toda velocidad donde se encontraba.

May llegó al lugar donde se encontraban, y, vaya que su reacción fue sorpresiva, no podía creer lo que estaba viendo sus ojos, un Drew con su cara media triste y un Harley inconsciente a medio camino, se podía imaginar hasta el peor de los escenarios.

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—¡Harley! ¿¡Puedes oírme?!—Fue la reacción de May moviendo al chico que estaba inconsciente, viendo si así podía despertar, pero nada, era inútil—. ¿¡Drew qué fue lo pasó?!

—No lo se, estoy igual de sorprendido que tu, yo estuve apoyando su peso todo el camino porque me dijo que si se sentía mal, pero no imaginé que era de tal magnitud—respondió Drew angustiado por su rival—. May, no hay tiempo que perder, debemos llevarlo de inmediato al hospital, no falta mucho para llegar, por fortuna se encuentra cerca del Centro Pokémon, si podemos cargarlo.

—Si, vamos—dijo May, poco podía decir, aún se encontraba "en shock" por lo de su rival.

Ambos hicieron su mejor esfuerzo para poder cargar a Harley, les resultó menos complicado porque claro, ya eran dos.

Tardaron aproximadamente 10 minutos en llegar al hospital, tomando en cuenta que iban lento por obvias razones. En el camino Drew y May no dijeron ninguna palabra, ambos solo querían llegar a su destino.

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—¡Necesitamos ayuda, un médico!—Fue lo primero que gritó May al llegar al hospital, al igual que Drew sus rostros lo decían todo, no sabían que estaba pasando realmente con la persona que estaban cargando.

—¡Rápido una camilla!—gritó un Doctor acercándose a los coordinadores.

En cuanto dieron la orden, la camilla llegó de inmediato, colocaron cuidadosamente a Harley en ella para trasladarlo a emergencias mientras revisaban su pulso, síntomas y demás.

—Ojalá no sea nada grave—dijo la chica de pelo castaño uniendo ambas manos, volteando hacia arriba en forma de pedir un deseo.

—No se preocupen, haremos todo lo humanamente posible, daremos noticias en cuanto salgamos de emergencias, mientras tanto pueden esperar en la sala de espera—dijo uno de los médicos que irá a emergencias.

—Gracias doctor—agradeció el chico de ojos verdes observando cómo todo el equipo de médicos partían.

Silencio poco después rodeó la sala, aún necesitaban procesar lo que ocurrió, parecía que la final entre ellos ni siquiera ocurrió.
No quedaba otra opción más que esperar noticias, aún sabiendo que eso podría tomar bastantes horas.

¿Qué hacer en estas situaciones? Un momento donde se congela todo y lo parte un rayo, no se sabe a que lado debes moverte, que hacer para mejorar la situación cuando realmente no hay que se pueda hacer, se cierra la puerta pero quieres romper la pared, ¿que hacer?, palabras llegan a ser un arma poderosa, pero en este caso, ni escribir la palabra se puede...

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Esa misma noche, en otra parte del mundo Pokémon, un joven entrenador estaba teniendo una batalla en un gimnasio Pokémon, tal vez les resulte familiar el nombre de, "Ciudad Sunyshore", así es, nos encontramos en la región de Sinnoh, parece ser que para el entrenador junto con su fiel Pikachu es el último obstáculo antes de poder acceder a la Liga Sinnoh.

—¿Eso es todo lo que tienes?—dijo el entrenador de Luxray en combate, su oponente es un Infernape que al parecer su energía para luchar se estaba agotando, se veía confiado, al ver qué su oponente acaba de recibir un Colmillo Trueno directo, que lo debilitó bastante.

—Resiste Infernape, falta poco, yo se que tu puedes—dijo el entrenador con un chaleco color negro con amarillo en el centro, intentando animar a su último Pokémon aunque el panorama no le favorecía.

Al oír las palabras de su entrenador, Infernape levantó la mirada y volteó a verlo, aunque se veía diferente, sus ojos estaban completamente rojos.

La vibra dentro del gimnasio se puso extraña, nadie en si sabía lo que estaba sucediendo, solo que Infernape se acercaba lentamente a su entrenador.

—¿Qué ocurre Infernape?—preguntó su entrenador al ver qué no era normal en él reaccionar de esa manera.

—Brock, ¿será que Infernape está pasando por lo mismo de nuevo?—preguntó una chica de cabello color azul que estaba vestida como porrista.

—Si Dawn, al parecer Infernape, activó Mar Llamas...—respondió el joven que estaba a lado de Dawn, se veía que era mayor que ella y que Ash también.

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Poco después, Infernape pegó un tremendo grito y utilizó Lanzallamas, dañando diferentes partes del gimnasio casi impactando a los presentes.

El líder del gimnasio solo se quedó observando, esperando a ver qué podría ocurrir, o simplemente qué haría el entrenador al respecto.

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—¡Infernape detente, de lo contrario vas a acabar con el gimnasio!—gritó Ash al ver el caos que estaba haciendo su Pokémon.

Infernape nuevamente volteó hacia su entrenador, su rostro reflejaba algo de molestia, se acercó a Ash aún más hasta llegar a dónde estaba junto con Pikachu.

Ash se dio cuenta que Infernape estaba sacando provecho de su habilidad Mar Llamas al estar en su límite, sin embargo lo primero que pensó fue que había perdido el control de su poder, no es la primera vez que sucede, ocurrió también cuando Infernape solo era un Chimchar y Monferno.

Todos tenían el presentimiento de que Infernape iba a lastimar a Ash debido a que aún no controlaba el poder de su habilidad. Sin embargo cuando llegó con su entrenador, se le quedó viendo fijamente por unos instantes, Ash por otro lado, hizo lo mismo y su Pokémon sonrió, demostrando que tenía control total de su poder, siendo esta la primera vez que lo logra.

—Bien hecho Infernape—felicitó Ash a su Pokémon con una felicidad inmensa, después de tanto entrenamiento logró lo que tanto anhelaban ambos.

—Infernape—asintió a su entrenador el Pokémon con corona de fuego, estaba listo para continuar con el combate, volteando hacia su oponente que solo observaba desde la distancia, esperando su siguiente movimiento.

—¡Increíble, es Mar Llamas en todo su resplandor!—dijo un entrenador que también observaba el combate desde las tribunas acompañando a Dawn y Brock, llevaba puesto una camisa deportiva amarilla, pants negros y sandalias, lo cual era su ropa característica.

—¡Vamos Ash y Infernape, tienen todo para ganar!—gritaba Dawn en muestra de apoyo para sus amigos.

—Solo basta que no se confíen—dijo Brock algo emocionado pero sin exagerar.

—Tiene razón Brock, con Mar Llamas los ataques de Infernape de tipo fuego estarán super cargados, sin embargo un ataque fulminante del Luxray de Volkner y será el fin, Ash deberá apresurarse si se quiere llevar la victoria—dijo Flint estando de acuerdo con Brock, ahora solo les quedaba observar como terminaría este combate.

—Este combate aún no termina Ash, así que demuéstrame lo que tienen—dijo Volkner esperando el siguiente movimiento después de toda esa escena.

—¡Lanzallamas!—ordenó Ash, y con Mar Llamas activado, el ataque duplicó su poder.

—¡Ray!—Luxray esquivó el ataque a medias, sintió el calor rozar su piel del lado izquierdo.

Volkner estaba sorprendido por el poder de Infernape, pero eso solo le causó más emoción por tener una batalla tan llamativa después de tanto tiempo.

—Impresionante... ¡Luxray atactrueno!

—¡Esquivalo Infernape!—reaccionó Ash inmediatamente, Infernape esquivó con éxito, sin embargo Volkner no lucía preocupado, al contrario—¿Por qué tan sonriente?—.

—Todo lo tengo fríamente calculado Ash—respondió Volkner listo para ordenar otro ataque.

—Aquí viene—dijo Flint desde las gradas, sabía la estrategia que tenía en mente Volkner.

—¡Colmillo Trueno!—ordenó el especialista del tipo eléctrico a su Pokémon, y logró conectar el movimiento a su oponente en su brazo derecho.

Infernape solo observaba como Luxray logró conectar ese movimiento con mucha furia, por otro lado Ash miraba seriamente lo que acababa de ocurrir, sin embargo no se veía preocupado tampoco.
Los demás en las gradas no se la podían creer, ¿Es el fin?

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—Te confiaste muy pronto Ash, admiro tu persistencia pero todo termina aquí.

—Creo que no has estado prestando atención realmente, ¿verdad?

—¿¡Qué?!—reaccionó inmediatamente Volkner ante el comentario de su adversario, regresó la mirada al combate, Luxray estaba aún mordiendo el brazo de Infernape, sin embargo una llamarada comenzaba a crecer mas, sobre todo en la boca del Pokémon que tenía fuego como corona.

—¡Ahora Infernape!—ordenó Ash, provocando que Infernape liberara todo su poder, el ataque de Rueda Fuego se hizo presente en el campo de batalla, era gigantesca, no se comparaba con cualquier otra que haya hecho Infernape en el pasado, giraba alrededor del campo con Luxray recibiendo de lleno todo el daño que le estaba provocando dicho movimiento, hasta que ambos chocaron en una pared debajo de las gradas.

Una pared de humo rodeó el área de la colisión, a la espera del resultado, ambos entrenadores solo veían el escenario en el que terminó la colisión de ataques de su combate final, sucedía lo mismo en las gradas, todos estaban nerviosos, ¿quien se llevaría la victoria?

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La cortina de humo se había despejado, mostrando como resultado solo a un Pokémon de pie...

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—Luxray ya no puede continuar, el ganador es Infernape, ¡lo cual significa que la victoria es para Ash Ketchum de Pueblo Paleta!—anunció el arbitro del combate, y ante ese anuncio, Ash y sus Pokémon comenzaron a celebrar.

—¡Lo logramos Infernape!—dijo Ash mientras abrazaba al Pokémon que fue alguna vez un Chimchar, bajo el mando de Paul, su gran rival.

—¡Ganaron, realmente lo lograron, bien hecho Ash!—gritó Dawn desde las gradas para felicitar al entrenador que ahora había calificado para participar en la Liga Sinnoh.

—Bien merecido el triunfo de Ash, dejó en shock a Volkner, gracias a el ahora volverá a ser el líder de gimnasio de siempre—dijo Flint acerca de su fiel amigo, a pesar de la derrota se le veía contento, no había tenido una batalla así hace bastante tiempo.

—Ash ha llegado lejos, seguramente llegará fuerte a la liga Sinnoh—dijo Brock viendo como su compañero de viaje ha ido mejorando región tras región, ahora parece que ha llegado cerca de un nivel alto para competir después de adquirir bastante experiencia.

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Todos los presentes en el combate de hace unos instantes ya se encontraban afuera del gimnasio, con un bella luna iluminando el cielo, ya solo faltaba una cosa, y era la más importante o al menos la más significativa para Ash, la entrega de su octava medalla.

—Ash, Infernape y tú me dejaron impresionado en ese último combate, hace mucho tiempo que no me sentía de esta manera, con ganas de seguir combatiendo, esa chispa que brinda pasión por enfrentar a alguien fuerte, te motiva, me demostraron que han pasado por muchas aventuras, batallas y experiencias los cuales han enfrentado juntos como entrenador y Pokémon, y con ese lazo, tengan por seguro que iluminarán la liga Sinnoh—felicitó Volkner al entrenador que lo derrotó, elogiando su espíritu, no cualquiera tenía esa magia de formar lazos fuertes con sus Pokémon, muchos solo los utilizan para combatir sin forjar ninguna amistad, y esa era una realidad—Bueno Ash, sin más que decirte, te hago entrega de tu última medalla, la medalla faro.

—Gracias Volkner—agradeció Ash mientras tomaba la medalla.

—¡Muy bien, acabo de obtener, la medalla faro!—gritó Ash mientras daba su clásico salto de victoria mientras sus Pokémon hacían lo mismo, para después colocar su octava medalla en su respectivo estuche.

—Muchas felicidades por tu medalla Ash—dijo Dawn felicitando a su compañero de viaje nuevamente, solo que ahora en persona, después de todo, entre ellos se han apoyado desde el inicio, y así va a ser hasta el final.

—Muchas gracias Dawn, de verdad que sin su apoyo no sé si lo hubiera logrado—y después de ese agradecimiento se dieron "esos cinco" tan significativo a lo largo del viaje alrededor de la región.

—Ahora es momento de conquistar la Liga Sinnoh, tendrás un par de semanas para estar en tu mejor versión, al igual que todos tus Pokémon, no tengo duda de que harás un excelente papel—dijo Flint, animando a Ash para confrontar lo que ha venido anhelando desde que llegó a Sinnoh de la mejor manera posible.

—En verdad te lo agradezco Flint, a todos, se que la verdadera prueba está a nada de comenzar, y por ello voy luchar hasta el último segundo para lograr mi objetivo, ganarla.

—Confió en que lo harás bien, solo sigue fiel a tu estilo—dijo el líder del gimnasio, y con esto ambos se dieron un apretón de manos, era hora de partir.

—Bueno, creo es momento de despedirnos, nuevamente muchas gracias por todo—dijo Ash mientras hacía una reverencia.

—Éxito Ash—se despidieron ambos, el alto mando y el líder de gimnasio con la misma frase, mientras el entrenador partió junto con sus amigos.

—¡Esto hay que celebrarlo Ash!—dijo Brock emocionado, compartía la misma vibra que Ash.

—¡Cuenten conmigo!—dijo Dawn igual de emocionada que los demás, la ocasión lo amerita después de todo.

—Nada más no vayas a querer ligarte a las chicas que te encuentres por ahí—respondió Ash en tono de burla a Brock, ya conocía muy bien la personalidad de su amigo.

—Intentaré no hacerlo jajaja—comentó Brock mientras soltó una carcajada, será mejor que no prometa cosas que no podrá cumplir.

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2 horas después...

—¡Eso estuvo de otro nivel!—dijo Brock de manera alegre, ya habían regresado al Centro Pokémon después del festejo, era lógico que no duraría mucho, ya era noche después de todo.

—Claro, por poco y te descontrolas, lo cual ya no me sorprende—comentó el entrenador que participará en la liga Sinnoh, haciendo énfasis en lo que había "prometido" Brock antes del festejo—. Por poco y ya no salimos de ahí, con eso de que no te querías despegar de la mesera, solo porque partimos mañana temprano decidiste venirte.

—Oye no me vas negar que es linda, al menos me hubieras dejado pedirle su número—dijo el especialista de tipo roca tratando de justificarse, y vaya que lo hacia de manera terrible.

—Brock, tuviste dos horas para hacerlo, si te sirve de consolación al menos le caíste bien—añadió Dawn.

—Gracias Dawn, me faltó atrevimiento en ese momento, ya sabes, por muchas experiencias fallidas—agradeció Brock el comentario que le hizo la finalista del Gran Festival.

—Parece que vas aprendiendo poco a poco—dijo Dawn—. Lo digo porque en vez de lanzarte directamente a las mujeres como siempre lo has hecho, esta vez solo platicaron casi todo el tiempo que estuvimos ahí.

—Me sentí muy cómodo tener una plática así, estuve a nada de cometer las locuras que siempre hago, pero esta vez me contuve, me parece una chica interesante, ella trabaja de mesera para pagar sus estudios, quiere ser Doctora, además de entrenadora algún día, ya ves lo común que es tener múltiples sueños y caminos hoy en día, y eso me parece admirable. Debería seguir su ejemplo, ya que, a veces me pregunto, ¿realmente hago lo que me apasiona? Tendré que analizarlo más adelante—comentó Brock, lucía contento, tranquilo, se profundizó por un instante, y fue algo grato para Dawn y Ash verlo de esa manera, no todos los días lo escuchas hablar de esa forma, y, la confianza que ha ido tomando desde que iniciaron su aventura se ve reflejado aquí, se encuentran afuera de sus respectivas habitaciones, a nada de irse a dormir, así que fue algo inesperado su comentario hecho al final del día, su viaje está a nada de concluir y puede existir la posibilidad que busca encontrar otro rumbo.

Hubo un breve silencio después de su comentario, pero había sonrisas, decían más que palabras el reflejo en sus rostros después de todo, son de esos momentos que son escasos, y pensar que el viaje está por terminar, ya no quedarían muchos momentos así restantes, así que tiene aún más significado.

—Me da gusto por ti Brock, me siento bien al saber que te llegó un poco de suerte, además  de que nos compartas lo que piensas, a cada uno nos tocan momentos felices, tristes e intermedios, y al final para estamos aquí, para apoyarnos en cualquiera de esas circunstancias, ha sido un largo recorrido desde Ciudad Pewter, ¿lo recuerdas? Todo lo que sientes, también lo siento, por eso también tengo esa vibra positiva mejor que nunca—dijo Ash ante el comentario que realizó su gran amigo con el cual ha recorrido cuatro regiones, casi son hermanos a este punto, su apoyo es incondicional—. ¿Qué te parece si antes de partir de Sunyshore vamos a desayunar ahí?

—¡Me parece una excelente idea!—dijo la entrenadora de Piplup—. ¿Qué dices Brock, te animas?

—Pero por supuesto que sí, me encanta la idea, gracias chicos—agradeció Brock el lindo detalle de sus amigos—. Bueno, no se diga más, si es un hecho que iremos, más vale ir bien descansado.

—Concuerdo contigo Brock, ha sido un largo día después de todo, planeamos todo el día de mañana, que descansen chicos—dijo Dawn mientras abría la puerta para entrar a su habitación.

—Buenas noches—dijeron todos mutuamente al entrar cada uno a sus respectivas habitaciones.

La noche se veía bastante tranquila, el escenario lucía agradable, la luna iluminando de una manera hermosa, todo parecía impecable, sin embargo no en todos los lugares del mundo se puede disfrutar de la belleza de la misma manera...

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Un entrenador se encontraba alrededor de un paraíso místico, con el color azul, rojo y beige como los colores más resaltantes del lugar, al parecer era algo nunca antes visto, el viento soplaba de una manera tranquila mientras que las hojas de los árboles se movían y hacían ese sonido que te genera paz cuando cierras los ojos y solo escuchas la esencia que causa ese mismo sonido.

Pocos segundos después el entrenador se puso de pie, no se encontraba despierto previamente.

—¿Dónde, estoy?—Fue lo primero que se preguntó, miró el paisaje que tenía en su entorno, era hermoso, aunque no parecía como algo que se podría ver en la realidad, después bajó su mirada para observar sus manos, se dio cuenta que no las veía con la claridad que generalmente las ve, de echo, en todo.

Comenzó a caminar y una sensación de paz lo inundaba poco a poco, no sentía ninguna especie de preocupación, miedo, nada, solo disfrutaba lo que el lugar le ofrecía, por un momento parecía no recordar nada.

De la nada el entrenador empezó a levitar de manera leve, alcanzó como máximo despegarse del suelo aproximadamente un metro para después regresar a la gravedad normal y volver a tocar la superficie.

Se sorprendió ante dicha acción que sucedió, por esa razón se detuvo un segundo, ahora al parecer él quería probar algo más. El entrenador estiró su brazo y abrió la palma de su mano, de repente un rayo de energía salió de ahí, causando una ligera explosión en el horizonte.

—Esto es un sueño—dijo, aunque dudó por un segundo, se supone que en los sueños no es posible decidir el transcurso del mismo, solo observas, no tienes el poder de cambiar algo, nunca había experimentado algo así antes—. Increíble, que extraña sensación, intentaré no despertar para seguir viviendo esto.

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Mientras más recorría el lugar, más se sorprendía, cada "área" de este paraíso místico parecía tener paisajes similares a recuerdos del entrenador, aunque claro, no eran 100% idénticos, pero si se sentía familiarizado al contemplarlos de cerca.

—Ese lago me resulta familiar... Me recuerda a aquella tarde donde ayudamos a aquel sujeto a realizar su espectáculo de Volbeat junto con los Illumise de la chica que le gustaba, y de paso confesar lo que el sentía por ella, ah qué recuerdos...

—Parece ser que lo recuerdas muy bien—dijo una voz femenina que se escuchaba cerca del lugar.

El entrenador inmediatamente volteó para ver si encontraba a la persona que dijo ese comentario, era conocida para el, por la reacción que hizo. Después de buscar a sus alrededores un poco, por fin la encontró, y se sorprendió de inmediato.

La chica tenia camisa con mangas cortas y cuello de color rojo que brillaba más que un rubí, con un semicírculo azul marino en el pecho, junto con una falda blanca y debajo de ésta unos shorts de licra color azul oscuro, y lo más característico de ella, sus dos mechones de pelo castaño que salen de lado de su cabeza.

—¿Cómo has estado Ash?—dijo la chica de ojos azules, que brillaban más que el propio zafiro, causando que el entrenador de Pikachu se paralizara aún más.

—¿May...?—Fue lo único que salió de su boca, lo que solo pudo decir, tenía un sin fin de preguntas en este momento, todo era tan confuso, debido a la misma reacción sorpresiva que tuvo—. ¿De verdad, eres tú?

—Claro que soy yo, ¿quién más podría ser, a caso ya no me parezco?—respondió May, agregando su dramatismo característico en su personalidad.

Ash se rió ante dicho comentario de su amiga, sabía que solo ella hacia eso.

May al ver la sonrisa de Ash, comenzó a acercarse hasta estar al lado de el, había un mar de sentimientos entre ellos, preguntas, Ash en especial no comprendía exactamente lo que estaba sucediendo, solo se quedaron observando el paisaje por unos instantes.

—¿Esto es real?—Se preguntó Ash en su mente, aunque de algo si estaba seguro, la tenía al lado suyo, y había pasado mucho tiempo desde la ultima vez que se vieron...

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▶️ Continuará...

-Notas del autor: ¡He vuelto! ¡He vuelto! Al fin después de tanto tiempo regresé de la muerte, odio el hiatus, te sientes muy ocupado una temporada y es comprensible que descanses de la escritura, pero te desacostumbras y te da flojera volver, no me da miedo admitirlo.

De verdad ofrezco a una disculpa a todos los lectores que estuvieron esperando con ansias la continuación de esta historia, me encanta como va quedando y como está planeado llegar en capítulos futuros, feliz aniversario a la historia por cierto. 🎂🌃😅
Debe ser una enorme coincidencia lo se.

Era un hecho que no abandonaría la historia, ahora estoy dispuesto a regresar con todo, hasta cambié la portada para que se vea notorio el regreso, mis expectativas es publicar un capítulo mucho más frecuente, aunque no los quiero ilusionar nuevamente, así que prefiero no prometer nada, pero no se preocupen, estaré escribiendo seguido para publicar capítulos pronto.

Hasta aquí el breve comunicado, quisiera saber si les gustó el capítulo, ¿aún tengo el toque? Me da curiosidad lo que opinan ustedes. Nuevamente gracias por el apoyo a esta bella historia de Advanceshipping.
Hasta la próxima lectores, JoseStar920 se despide. 🤚🌃

Fin del Capítulo 1
Publicado: 13 de Febrero de 2020
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