Capítulo 40



Cinco meses después


"No hay lugar para eso", gruñe Jisung. "Minho, en serio, es el sofá más feo y posiblemente el más antiguo que existe".

Minho deja caer su extremo del sofá y pone sus manos en sus caderas. El pequeño departamento de Minho se ve tan vacío sin los toques personales, la mayoría de los cuales están alojados en cajas que ocupan la sala de estar de Jisung en casa. Todo lo que queda, en realidad, es este estúpido sofá. Habían donado la cama y la cómoda de Minho, ya que no los iba a necesitar, y Minho no tenía muchos más muebles que esos. Nada más cabría realmente en esta maldita caja de zapatos.

"Compromiso", dice Minho. "Me mudaré a tu ridículo apartamento, debería quedarme con mi sofá de mierda".

"Así que estás admitiendo que es una mierda". Jisung sonríe. "Vamos, Minho, es un peligro para la salud. Me quedé atascado la última vez que me senté en él.

Minho hace pucheros. "Jisung, por favor."

Jisung se muerde el interior de su labio y pone los ojos en blanco. "Bien. Pero va en el dormitorio de invitados."

Minho sonríe como la luz del sol. "Gracias. Ahora toma tu parte y ayúdame con esto."

"No veo por qué no pudimos contratar a alguien", se queja, por lo que parece ser la decimoquinta vez.

Y, una vez más, por decimoquinta vez, Minho dice: "Porque es apenas algo y ambos somos completamente capaces de moverlo".

Lo cual es cierto, hasta que llegan a la puerta. El sofá no cabe, así que intentan girarlo. Casi cae sobre el pie de Minho, Jisung recibe un golpe en las espinillas y no pueden sacarlo del apartamento. "No va a encajar", dice Jisung en voz alta, luchando por mantener su agarre en la cosa.

"Lo tengo aquí de alguna manera", dice Minho. "Intenta convertirlo en una fracción a... no, eso no funcionará. Eh."

"Minho", se queja Jisung. "Es pesado".

"Tal vez debería llamar a Lix y pedirle que venga a ayudar", sugiere Minho.

Jisung gime y deja su mitad del sofá. Crea una pared entre él y Minho, atrapándolo en el pasillo y a Minho en el piso. "Él y Hyunjin convenientemente tienen una cita esta noche", dice Jisung. "Ya traté de que vinieran a ayudar".

"Oh." Minho está en silencio por un momento. "¿Seungmin y Jeongin?"

"Visitando a la familia."

"Correcto." Minho suspira. "Está bien, un intento más".

Jisung hace un sonido molesto pero levanta su extremo del sofá. No es solo un intento más. Son las seis, y de alguna manera finalmente logran llevar la cosa estúpida al pasillo, donde casi se derrumba sobre Jisung y lo mata. Bajar las escaleras es aún más difícil, y Jisung está hecho un desastre sudoroso y jadeante cuando lo cargan en la parte trasera de la camioneta que habían alquilado para hacer esto.

Por supuesto, ese no es el final. Todavía tienen que llevarlo al edificio de Jisung, y se necesita la ayuda del portero para meterlo en el ascensor, y luego, una vez más, luchan por meterlo en la puerta. Una vez que la cosa finalmente está en la habitación de invitados, Jisung la mira y se dirige a su sofá, donde se derrumba en un montón. A diferencia de Minho, que está ocupado desempacando.

"Minho", llama Jisung. "Toma un descanso. Eso todavía estará allí en una hora."

"En un minuto", grita Minho. "Solo estoy guardando mi ropa para que no se arrugue. Dijiste que podía quedarme con los dos últimos cajones, ¿verdad?"

Jisung va a decir que no, dijo que Minho podría quedarse con los dos del medio. Y luego recuerda, y sus ojos se abren como platos mientras salta del sofá. Sus pies enfundados en calcetines resbalan sobre la madera dura, y casi se desliza contra una pared en su prisa por llegar a su habitación, pero es demasiado tarde.

Minho está de pie allí, con el cajón inferior abierto de par en par, agarrando una caja en la mano. Lo mira boquiabierto, levantando lentamente su mirada hacia la de Jisung. "¿Qué es esto?" pregunta suavemente.

El estómago de Jisung se revuelve. No se suponía que Minho encontrara eso. Estaba metido en ese cajón por una razón. Quería esperar hasta el momento adecuado. Para el momento perfecto. Y, por supuesto, no entiende eso, porque no es suficientemente difícil preguntarle esto a Minho.

Lentamente, Jisung cruza la habitación. Toma la caja de las manos de Minho con dedos temblorosos, y respira para calmarse antes de hundirse sobre una rodilla. "No es así como se suponía que iba a ser esto", admite Jisung. Se frota la nuca. "Um. Joder, es estúpido cómo soy bueno con las palabras cuando no importa, cómo puedo escribir canciones sobre cosas y cómo me siento y mierda, pero cuando trato de decírtelo nunca sale bien. Pero. Joder, está bien. Minho, mira, eres... no, eso no es...

"Solo sácalo", susurra Minho. "Solo dilo, Jisung."

"Correcto." Jisung se estremece. "Eres solo – eres todo, ¿sabes? Quiero cada minuto contigo. Cada minuto del resto de mi vida contigo. Te has arrastrado hasta mi corazón, llenando todos estos espacios vacíos que no sabía que estaban allí. Has iluminado todo mi mundo, y podría soñar con un millón de vidas diferentes para mí, pero estarías a mi lado en cada una. No siempre estuve seguro de si el amor verdadero era algo que realmente existía, pero esto, esto no podía ser otra cosa que eso. Y joder, tengo veinticuatro años, Minho. No hay forma de que sepa lo que quiero para el resto de mi vida, pero lo sé. Eres tu. Siempre vas a ser tú. No puedo imaginarme alguna vez queriendo a alguien más. Así que... Cásate conmigo, Lee Minho. Joder, cásate conmigo, ¿de acuerdo?"

Fin

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