Escena XXVI: El gozo y la tristeza de Polurno Rultelo Mertila en el bar

Fecha: 24 de junio del 2022 (Tarde)

Personajes:

· Polurno Rultelo Mertila

· Rotino Rultelo

· Irjula Mertila

· Iruto Nunte Yerlo

· Huésped masculino 1

· Huésped masculino 2

· Huésped masculino 3

· Huésped femenino 1

· Huésped femenino 2

Lugar: La sala del bar Aguanile

(Descripción del lugar: La sala del bar es un espacio amplio que contiene los siguientes aspectos. En el lado izquierdo, se observan varias mesas blancas con cuatro sillas blancas alrededor de cada mesa. En el lado derecho, se muestran varias mesas blancas con cinco sillas blancas alrededor de cada mesa. En el centro, hay una pista de baile y una luz azul encendida que ilumina toda la sala. El ambiente es nocturno por la luz azul.)

(Se abre el telón)

(Ingresa Polurno Rultelo Mertila caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

(Ingresa Rotino Rultelo Mertila caminando al escenario por el pasillo derecho)

Polurno: (malvado) Tulkio es un tonto, porque ha permitido que yo le meta la droga encima. Creo que su rostro de miedo es lo que me da más risa, porque es tan patético y tonto que ni siquiera sabe que yo hago todo correctamente. Actué para que no me viera como una amenaza, porque así debe ser, amigo.

Rotino: (molesto) Polurno, estás actuando mal. Eres un drogadicto de mierda que ni siquiera sabe que va a hacer en el futuro. Es indignante que seas un chico que no tiene futuro. Mejor piensa en ti mismo en vez de atacar a los demás, querido. A nadie le gusta las personas como tú, porque eres un adicto a las drogas.

Polurno: (malvado) Padre, parece que estás del lado de Tulkio, porque ni siquiera te dignas en ponerte de mi lado. Mi posición es la correcta, porque ese imbécil de Tulkio ya perdió en contra de mí. Solo me voy a preocupar si es que alguien llama a la policía. Es increíble que aún seas mi amigo cuando ni siquiera me apoyas.

Rotino: (tranquilo) Polurno, eres muy inmaduro todavía para entender que un chico como Tulkio puede denunciarte para que se salga con la suya. No quiero que te lleven a la cárcel. Me estoy preocupando por ti, porque en el futuro tú tendrás el negocio familiar. Yo te quiero, aunque no lo demuestre todos los días.

Polurno: (reflexivo) Desde niño, siempre eras distante conmigo hasta que empecé a consumir drogas. Era un desconocido para ti cuando era pequeño que esa es la razón por la que consumo sustancias ilegales. Quiero llamar tu atención después de tantos años de ignorancia por parte tuya. Creo que las drogas no funcionan para mí.

Rotino: (enojado) Entonces déjalas de una vez, porque no es justo que ahora no tengas la decencia de mostrar arrepentimiento. Has vivido tantos años consumiendo que ni siquiera te pones a pensar o investigar de lo que consumes. El cannabis es una droga, pero también es una planta. La marihuana se fuma en cigarrillos enrollados en pipa o en pipas de agua.

Polurno: (sincero) Es cierto que yo compro sobres de cocaína y compro algunos cigarros todos los días, porque me mantiene adicto. No puedo concentrarme o resolver problemas con facilidad, porque siempre estoy pensando en la droga. Soy más propenso a asumir riesgos sexuales y tener problemas mentales.

Rotino: (alarmado) Hijo, por favor deja la marihuana de una vez, porque incluso podría afectar hasta el pulmón donde respiras. Es tan desagradable que incluso muchos jóvenes que conducen han perdido la vida en contra de la marihuana. No hay que romantizar el uso de la marihuana, porque no es buena en realidad.

Polurno: (sincero) Lo que pasa es que es demasiado adictiva. Lo que debo hacer es intentar dejarla, porque a veces me siento mal todos los días. Me siento solo y desolado, porque tengo ansiedad social. Tengo tantas ideas negativas que mi único escape a la felicidad es la marihuana. No la puedo dejar, porque es mi felicidad.

Rotino: (alarmado) Polurno, llevo tanto tiempo pensando en mandarte a rehabilitación. Estás tan metido en las drogas que incluso te olvidas de tu futuro. Ni siquiera vas a la universidad y todos los días debo pagar lo que compras, porque te lo robas de las tiendas. No te han atrapado, pero no esperes que pase ello.

(Polurno Rultelo Mertila empieza a derramar lágrimas en sus ojos)

Polurno: (llorando) No la puedo dejar, porque es imposible para mí. No puedo alejarme de esa sustancia, porque sufro cada vez que estoy lejos de ella. Necesito ayuda de un médico o un pediatra para que me regule el uso. Perdón por haber sido tan imbécil, pero la verdad es que mi vida no es tan feliz como quisiera.

Rotino: (sincero) Hijo, todos tenemos una vida difícil, pero no por eso andamos con una pipa o cigarro. Debes dejar eso por favor, porque te está malogrando la vida. No quiero que termines siendo un drogadicto que solo gasta su tiempo en las drogas. No es urgente que ahora tengamos un tema

Polurno: (llorando) Padre, por las noches no puedo dormir bien, porque tengo pensamientos negativos todos los días que no me dejan vivir tranquilo. Siento que estoy triste por dentro, pero no quiero mostrar esa tristeza a los demás, porque me siento avergonzado por mí mismo. Debo ocultar mis sentimientos.

Rotino: (sincero) Polurno, ya van a llegar los clientes así que mejor empecemos a tener un comportamiento más educado. Eres bueno aparentando que te sientes bien así que hazlo. No me decepciones, porque te puedo retirar del bar por narco traficar marihuana. Es sorprendente que no te sepas comportamiento.

Polurno: (llorando) Padre, no creas que yo no trato de alejarme de la marihuana, porque trato de hacerlo, pero me cuesta. No es tan fácil como simplemente dejar de consumir. Confieso que hice que Tulkio se tomara la bebida por completo. No puedo estar convencido de lo que estás diciendo, porque me cuesta aceptar lo que dices.

Rotino: (sincero) Polurno, ahora vienen los huéspedes para que empieces a tomarte en serio lo que viene. Lo más sensato es que te comportes y no le ofrezcas marihuana a las personas que andan por ahí. No quiero tener que descubrir algo inesperado o lo que vaya a pasar en estos momentos. Debo esconderme lo más pronto posible.

(Ingresa el huésped masculino 1 caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

(Ingresa el huésped masculino 2 caminando al escenario por el pasillo derecho)

(Ingresa el huésped masculino 3 caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

Huésped masculino 1: (sincero) Amigo, pensé que te habías ido de viaje. No puedo creer que nos hayas mentido todo este tiempo. No creas que estamos molestos, pero simplemente me sorprender un poco. Cuéntanos que sucedió para que hoy no tengas que realizar un viaje por avión hacia tu destino.

Huésped masculino 2: (cordial) Amigos, mi esposa me dijo que íbamos a tener un descanso en nuestra casa y nuestro vuelo se retrasó. Creo que podemos llegar a otro vuelo y ahora debemos tener un poco de dinero para poder viajar. No puedo pensar con claridad, porque es increíble que haya perdido mi vuelo.

(Ingresa el Huésped femenino 1 caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

(Ingresa el Huésped femenino 2 caminando al escenario por el pasillo derecho)

Huésped femenino 1: (apurada) Amigos, ahora debemos disfrutar estos momentos donde estamos en la discoteca. Podrían ser los últimos momentos donde estemos felices. Quizás nosotros podamos obtener mayor felicidad en recuerdos que tenemos en nuestras vidas.

(Irjula Mertila se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)

(Polurno Rultelo Mertila se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)

(Rotino Rultelo se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)

(Irjula Mertila se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)

(Iruto Nunte Yerlo se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)

(Huésped masculino 1 se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)

(Huésped masculino 2 se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)

(Huésped masculino 3 se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)

(Huésped femenino 1 se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)

(Huésped femenino 2 se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)

(Cierre del telón) (Fin de la escena XXVI)