-¡Hey, felicidades!

Abby se abalanza sobre mí y me abraza, pero no estoy de humor. Lo que ha pasado esta mañana hace que no pueda celebrar una victoria.

Os explico mejor: Nuestro tutor no sabía que nosotros éramos pareja y se ha creído que nos habíamos acostado. Si sumamos eso al hecho de que él es mayor de edad, significa castigo seguro.

-¿Por qué pareces tan cabreada? ¡Has ganado la semifinal!

-Menuda ilusión...

-¿Qué te ha pasado? -Max se acerca a nosotras-. Has estado muy rara, al principio parecía que estabas empanada.

-Probablemente lo estaba. Lo siento, Max.

-¿Qué ha pasado?

Cuando voy a contestar, Cece aparece con su cara de culpabilidad. Lleva desde que pasó con esa cara incrustada.

-Te juro que si pudiera hacer algo, lo haría. Es todo mi culpa...

-Ya sé que es tu culpa, pero da igual. Lo que ha pasado, pasado está.

-¿Pero qué ha pasado? ¿Por qué estáis todos tan raros?

Nos miramos con mala cara y decido contestar.

-Ayer Cece y Álvaro tuvieron... "su noche especial".

-¿Y no nos habías contado nada? -Le pega Lola, que acaba de llegar.

-El caso es que para dejarles intimidad me fui de la habitación y me quedé durmiendo en la de Jake.

-Ajá... -Me instan para que siga.

-Esta mañana, cuando iba a despertar a los tortolitos, nuestro tutor me ha visto salir de la habitación de Jake y ha armado la de Dios. No solo tenemos prohibido vernos, porque "Es un peligro que un mayor de edad esté cerca de una pequeña criatura"...

-¡Os lleváis cuatro meses!

-¡Lo sé! Y no solo eso, sino que cuando volvamos hablará con nuestros padres.

-Tus padres lo saben.

-Y los de Jake también, aunque su padre no me conozca. Solo espero que ahí se acabe todo, porque no me apetece que me dé una charla por algo que no he hecho con mi novio.

-Es una mala pata.

-No, si da igual. Al final, se solucionará y ya está, pero el mal trago ha estado ahí.

Me despido de todos y voy hacia el vestíbulo, necesito caminar y despejarme. Me cruzo con Jake y me paro. Voy a decirle algo, pero veo a tutor acercándose, así que susurro un lo siento y salgo por la puerta.

**

Hoy termina todo. Puede que ganemos o que perdamos la final, pero ya está. Mañana estaré en mi amada California y esto solo habrá sido una pesadilla.

-¿Te han dicho contra quien es la final? -pregunto a Max mientras me pongo la coleta.

-No estoy seguro, preguntaré.

Sale del camerino que nos tienen preparado y me quedo sola, mirándome al espejo. Alguien entra por la puerta, no tengo que girarme para saber que es Tom.

-Que gane el mejor ex-novio, ¿no crees?

Se acerca a mí y pone sus manos a cada lado de la silla. Nos quedamos mirándonos al espejo en silencio.

-No pensé que llegarías.

-Subestimas mi inteligencia. Siempre lo has hecho.

-¿Qué quieres?

-Desearle suerte a una gran amiga.

-Tú y yo no somos amigos, así que déjalo. No te sale ser tan bueno.

-Anabel, Max... -Entra el preguntador del programa-. ¿Dónde está Max?

-Enseguida viene. ¿Pasa algo?

-Podéis venir, enseguida empezamos.

-Suerte al mejor -susurra Tom antes de salir por la puerta.

Estoy tan nerviosa que voy ya hacia donde será la prueba, en el salón de actos del hotel. Paso por delante de varias puertas. Entonces, una de ellas se abre y una mano me arrastra a su interior.

-¿Pero qué haces? -grito cuando me doy cuenta de que se trata de Jake.

-Lo siento, pero es que si no no hay manera de hacer esto.

Y me besa suavemente.

-No me vuelvas a pegar un susto de esos -susurro con nuestros labios pegados.

-Hecho. Ahora vete, no te puedo secuestrar demasiado.

Me vuelve a besar y me empuja fuera. Me coloco bien el pelo y sigo caminando como si no me acabara de liar con mi novio. Max me espera con una sonrisa, así que lo imito. Allá vamos.

**

-¿Año de publicación de El hombre invisible?

-1807 -contesta Max rápidamente.

-¡Correcto! Continuamos... ¿Premio Nobel de Literatura 2015?

Esa es mía. Voy a darle, pero Tom se adelanta. Maldita sea mi lentitud.

- Svetlana Aleksiévich.

-¡Correcto!

Esta vez no vamos tan bien. No me gustan los empates, significa que habrá una sección más, y eso me asusta. No me gusta un pelo perder.

Mientras hacemos el descanso, me quedo mirando al público. Distingo a mis amigos y sonrío en su dirección. Sé que Jake estará en su habitación, ya que ni siquiera se le permite ver el final del concurso.

-El jurado ha decidido que habrá una última pregunta... -El presentador llama mi atención- con el título: "Deportes". La persona que responda bien dará a su equipo la victoria.

Tom me mira con superioridad. Nunca he sido demasiado buena en los deportes, solo en baloncesto, y las posibilidades son mínimas de que además salga algo que me sepa. Para más INRI, Max es un negado para esas cosas. Tenemos muy pocas posibilidades de ganar.

-Como todos saben, Michael Jordan ha sido considerado como el mejor jugador de la historia. La pregunta es: ¿cuántos anillos NBA ha ganado, con qué equipo lo consiguió y a qué se dedicó al dejar el baloncesto?

Sonrío, no me puedo creer que haya tenido tanta suerte.

-Ganó seis anillos de oro con los Chicago Bulls y cuando se retiró se dedicó al béisbol.

Lo siguiente que os voy a contar es demasiado confuso. La gente abrazándome, Tom marchándose enfadado... Yo siendo feliz...

-¿Cómo sabías eso último? -dice Cece mientras salimos al pasillo tras la celebración.

-Digamos que tuve al mejor entrenador. -Miro de reojo a Jake.

-Pues me alegro. -Sonríe y me abraza.

Ahora solo queda volver a casa y tratar de olvidar esta experiencia.