N.Campbell: Dormí bastante bien durante toda la noche, creo que si me hacía falta tocarme un rato para descansar... Nunca se me pasó por la cabeza que Alex haría eso, creo que sí me hubiera dicho no lo hubiese dejado, ah, pero se sintió tan bien.

Desperté y estaba solo en la cama, supongo que como es fin de semana saldrá con Sophia o con los chicos, si yo no lo controlo se la pasaría todo el día en la calle. Me levanté e hice mi rutina como siempre, me tardé apropósito para ver si se aparecía en la habitación pero nada.

Bajé a la primera planta y pude sentir un aroma de comida recién hecha, olía delicioso y fuí a dar un vistazo a la cocina. Ahí estaba él preparando algo para desayunar.

Se fijó en mí cuando se volteó frente a la alacena.

—Buenos días, bello durmiente —Me saluda con una gran sonrisa en su rostro.

—Hola, ¿Tu hiciste ésto? —Señalo lo que está sirviendo en el plato.

—Es Pudín de avena con frutos secos, Sophía me enseñó la receta y quise prepararla para tí —Es un lindo gesto que me hiciera el desayuno, no pensé que lo haría, Alex suele ser muy vago.

—Wow, te lo agradezco mucho.

—Lo que sea por verte feliz —Inesperadamente me dió un corto beso tomándome de del cuello, me separé al instante de él.

—¿Qué estás haciendo? ¿Por qué ese beso?

—Am... Pensé que podía...

—¿Podías qué? Alex, si entiendes que tú no debes hacer eso cuando yo no te lo he permitido.

—Lo siento... —Con una cara tristona —No lo volveré hacer.

—Tienes que aceptar que yo no siento lo mismo por tí.

—Pero anoche dijiste...

—¡Sé lo que dije! —Mi intensión no era gritarle pero ya me estaba colmando la paciencia que siempre esté tan insistente con este tema.

—...Ok —Colocó los utensilios en el lavavajillas —Voy a salir y no vendré hasta la tarde.

—¿Qué te crées que eres? No puedes estar saliendo y viniendo cuando te dé la gana. No irás a ninguna parte hasta que mamá vuelva.

—Entonces ven conmigo, después le dices que salimos los dos.

—Yo no saldré de aquí, y tú tampoco. ¿Entiendes?

—¿Y qué se supone que haré aquí encerrado?

—¿Qué harás? Tienes internet, tienes piscina, tienes plataformas para ver películas y series que tú quieras, tienes videojuegos, tienes gimnasio, ¿Y aún así dices que qué vas hacer aquí?

—Estoy cansado de siempre lo mismo, Cam, ¿No lo entiendes?

—Eso es muy malagradecido de tu parte...

—Puedes insultarme todo lo que quieras, pero no me vas a retener aquí —Se va apresuradamente de la cocina yendo a la salida de la casa.

—¡Idiota! ¡Ni te molestes en regresar! —Mejor que se desaparezca, no podía soportarlo más tiempo.

A pesar de ese mal rato, cocinó bastante bien el pudin, me gustó mucho. Sería la primera vez que cocina y no le queda hecho un desastre, pero si dejó todo los trastes sucios, que irresponsable.

Luego de haber lavado todo Ally entró a la casa muy malhumorada y alterada —¡Los odio a todos! ¡En ésta familia siempre tienen favoritismo! —Ella subió las escaleras apresuradamente encerrándose en su cuarto tirando la puerta.

Mamá entró después de ella.

—Está insoportable hoy...

—¿Qué pasó? ¿Por qué está tan enojada?

—Reprobó su examen de manejo, eso la tiene loca —Ella dejó sus maletas en una esquina del suelo —Y chocó el auto del instructor.

—Yo te dije, mamá. Ella no sabe ni siquiera montar una bicicleta, mucho menos conducir un auto.

—Tú me dijiste que estabas cansado de llevarla a todos lados que ella quisiera y estabas loco porque ella condujera, ¿O no?

—...Si. Pero ella no tiene fundamento.

—Pues ahora tiene que esperar unos 4 o hasta 6 meses para recuperar su intento —Mamá se sentó en una banca a lado de mí viendo el plato de comida de Alex que dejó servido —¿Tú hiciste ésto?

—Fue Alex, pero salió hace un rato...

—Se ve muy bien hecho, ¿Importa si lo pruebo?

—No, no hay problema... Supongo que él comerá en donde esté...

—Por cierto, ¿Dónde está ahora?

—Supongo que salió con los chicos, no estoy seguro.

—¿Y por qué no fuiste con él? Deberías salir más.

—Mamá, tengo tantas cosas en la cabeza que no puedo ir a distraerme con los chicos.

—¿Si sabes que debes de disfrutar tu juventud? La vida es una, y no puedes retroceder el tiempo. Anda ve con él, yo necesito limpiar la casa.

Estaba dudoso de ir, no quiero llegar de sorpresa e interrumpir a los chicos con lo que estarían haciendo, sería muy incómodo... Pero mamá tenía razón, tengo el derecho de divertirme y no quedarme en casa encerrado, así que iré.

Subí rápido a mí habitación para buscar mi teléfono y mi billetera, no se en donde estará metido pero de seguro habrá gastado dinero de alguna parte.

Narradora: Después de media hora, Campbell estuvo rastreando a Alex desde su teléfono llegando a un restaurante cerca de su casa, donde se encontraba él y algunos de sus amigos sentados en una de las mesas de comida conversando y riéndose.

Él se acerca a la mesa lentamente a saludar.

—Hola...

Jeff se da cuenta de la presencia de su amigo.

—¡Cam! Milagro que viniste.

—Ven, siéntate aquí —El hermano mayor de Jeff le da un espacio en los asientos de la mesa.

—Gracias... —Miraba a Alex mientras se sentaba y éste lo que hacía era ignorarlo.

—¿Cómo supiste donde estábamos? —Jeff pregunta mientras comía unos nachos de la mesa.

—Am... Alex me dijo que estarían aquí —Este siendo deshonesto ante la pregunta y el pelirrojo lo mira extrañado pero sin decir ni una palabra —¿Dónde están los demás?

—Jhonny aún sigue dormido, y Lance... Pues ya sabes cómo es su relación con Will —Freddy habla con un tono menos incómodo posible.

—¡No es cierto! Estamos bien, solo nos tomaremos un descanso —Will contradiciendo a su cuñado.

—Dijiste que discutieron y lo echaste de tu apartamento porque lo encontraste cogiendo con tu vecino de al lado, cuando ustedes mismo dicen que tienen una relación abierta y sin problemas —Con una mirada cansada.

—Lo se, pero no pude soportarlo, ¿Ok? Para mi fue difícil conquistarlo, ¿y que ahora venga él hacerme esto?

—Nos tienes a nosotros para apoyarte. Olvídate de él, pronto vendrá alguien mejor —Alex le da unas palmadas en la espada de su amigo.

—Mi hermano puede ser el más estúpido del mundo, pero nunca dejaría ir a una persona increíble como tú, Will. Tarde o temprano vendrá por tí —Jeff y Fred se levantan de la mesa —Ya volvemos, iremos a ver cómo va la comida —Ellos se van de la mesa y se van la cocina del restaurante, ellos eran los dueños y podían entrar a la cocina cuando quisieran.

Campbell usaba su teléfono bastante aburrido con las esperanzas de que Alex le diga algo, pero este charlaba con Will usando un tono de voz muy bajo y riéndose.

Él los observaba detenidamente muy disgustado. Acercaba su mano para tomar algunos de los nachos a ver si le dirigía la mirada pero seguía ignorándolo.

Veía como los chicos tenían sus manos debajo de la mesa y ellos se miraban con picardía, se molestó de inmediato por tal movimiento.

El momento fue interrumpido por Jeff que llamó desde la puerta de la cocina a Will para que fuera con ellos, dejando a Alex y a Cam solos en la mesa esperando.

—¿Será que me dirás algo, o vas a seguir ignorándome? —Cam fastidiado por el silencio y la tensión que había entre ellos.

—¿Qué quieres que te diga?

—Me pediste que viniera, ya estoy aquí y no me has dicho nada desde que llegué, solo te quedas hablando con Will.

—Bueno, estás aquí. No tengo que decirte nada —Se apoya en la mesa acercando su cara al de su amigo —Y si quiero hablar con él, ¿Cuál es el problema? ¿No puedo?

—...Dijiste que él no te gustaba, pero lo que estoy viendo es todo lo contrario.

El contrario sonríe de lado.

—¿Y si te digo que fue mentira? Tengo que aprovechar que ya no está más con Lance —Se queda mirando los labios de Cam, lo que hace que este se sonroje y se acerque lentamente para besarlo pero antes de poder hacerlo Alex se aleja de él mirándolo con picardía.

Dejándolo con las ganas, el peliazúl sintiéndose engañado y enojado por lo sucedido.

—¿Por qué...? —No logra terminar la frase.

—¿Por qué, qué? Si tu eres el que me ha rechazado múltiples veces.

Muerde su labio inferior volteando a ver a otro lado.

—Lo se... Lo siento.

—No, no lo sientes... He estado esperando años para decirte lo que sentía por ti, lo mucho que me gustas y lo mucho que disfrutaría estar contigo, y tu no lo valoras —Se acomoda en su asiento apoyando su espalda en el cojín del espaldar y cruzando los brazos —Si, ya se que es algo nuevo para ti pero también es algo nuevo para mi.

—...Pero tú no puedes obligar a nadie a que se enamore de ti, eso no es sano.

—¿Entonces por qué no me dejas convivir con Will? ¿Si tu no quieres nada conmigo?

Cam baja la mirada apenado y dudoso por lo que iba a decir.

—No me gusta verte con otro chico de esa manera...

—¿Estas celoso? —Se echa a reír —Con los años de amistad que tengo con él no te habías quejado, ¿Y a estas alturas me vas a decir que estás celoso?

—Tu sólo te comportas así por lo de esta mañana —Dice evadiendo en tema.

—No me cambies la conversación, respóndeme. ¿Por que te molesta que esté cerca de William si no me correspondes?

El menor no dice nada al respecto. No estaba seguro si de verdad sentía lo mismo por él. 

—¿Te comió la lengua el gato? —Dijo en tono burlesco.

—Olvídalo... No es nada... —Luego estira su pierna por debajo de la mesa hasta tocar la entrepierna del contrato con su pie y este se sorprende al sentir la presión.

—¿Qué intentas hacer?

—Sólo me estoy estirando —Lo observa seriamente y presiona su miembro con la suela de su tenis.

Alex incómodo se echa para atrás tratando de evitar que lo siga tocando.

—¿Crées que es gracioso? 

El peliazúl menea la cabeza y se estira más volviéndolo a tocar.

—¿Me estas provocando, sabes?

—Correré el riesgo —Sonríe de lado.

El chico se fija en el zapato —Estas usando las botas... —Refiriéndose a las que le dio en su cumpleaños.

—Si, me gustaron mucho...

—Eso me alegra... —Ambos se quedaban mirando fijamente, no sabían que otra cosa decir pero después de un corto período de tiempo los dos tenían una leve sonrisa tímida.

Cam ve a los chicos volver con la comida y baja su pierna de inmediato.

—¡El botín ha llegado! —Jeff se sienta en el fondo dejando la comida en el centro de la mesa.

—Campbell, si quieres puedes comer con nosotros, despues iremos a mi casa a pasar el rato —William ofreciendo que se quede.

—Ya desayuné, pero gracias...

—¿Al menos te puedes quedar?

—Am... Claro, lo que sea por ustedes.

N.Alex: Me sorprendió mucho que Cam viniera, mas bien pensé que seguiría enojado conmigo, pero de un segundo a otro lo noté muy extraño, y algo interesado con quién hablara... Estaba muy intenso.

Sinceramente no lo entiendo, no sé si es que trata de confundirme o sólo hacerme una broma, no lo sé...

Lo que hice en el restaurante con Will era en realidad un plan para que Cam sintiera celos, cosa que estuvo a la perfección. Eso le enseñará a no jugar con mis sentimientos cada vez que el intensa provocarme para obtener lo que quiere, ya no más.

Después de esa deliciosa comida fuimos al departamento de Will, él y Lance tenían problemas y se tuvo que ir a su antigua casa junto a sus hermanos, pero ellos apoyan más a su amigo que a su propio hermano. Asuntos de familias...

Duramos un buen rato jugando en algunas consolas que tenía en su sala de estar y tomando unos tragos de vodka, la pasábamos muy bien todos juntos y sin tener que estar pendiente de los padres de tal persona para la limpieza del lugar, eso lo haremos antes de irnos a nuestras casas.

Venía mi turno de jugar contra Campbell así que le pasé uno de los controles para que lo tomara.

—Hey, te toca.

Él estaba pegado al teléfono con una llamada charlando y riendo, de seguro ya sabrán con quién estaría hablando.

—¿Puedes darme un segundo? No tardo —Entra a la habitación de Will para continuar con la llamada y cierra la puerta.

Suspiré con cansancio y me senté en el sofá esperando a que él salga, la paciencia no era lo mío.

—Tranquilo, si quieres juego por él —Jeff se ofrece para jugar su turno.

—Ya tiene más de una hora hablando por teléfono con ella. Pensé que este día sería solo de nosotros.

—Las personas enamoradas son así, le prestan más atención a su pareja que a sus amistades, y te lo digo porque ha pasado —El rubio se confiesa por el comentario.

—¿Saben que? Yo me voy —Dejé en control en la mesa.

—¡No! ¿Por qué te vas? Si nos estábamos divirtiendo —Will pidiéndome que se quede.

—Estoy cansado, desde que está con Chloe me ha dado la espalda. Y ahora con esto de que le conté sobre mis sentimientos lo ha empeorado, lo único que me queda es rendirme y olvidarme por completo de él —Bajé mi cabeza decaído con una mano sosteniéndola y pasándola por mi cabello.

—No digas eso, Alex. No tienes por qué desanimarte, sólo dale tiempo —Frederick se coloca frente de mí tomándome del hombro.

—¡Ya no lo soporto! ¡Esa puta rubia oxigenada me tiene hasta la madre! ¡Me quitó lo que más amaba en este mundo!

—Ya cálmate, ¿Cuántas copas te bebiste?

—¡¿Y eso que importa?! ¡A la mierda todo esto! —No pude controlar mis emociones y exploté de la rabia para finalmente irme del lugar.

Los chicos me llamaban y gritaban para que no me fuera, pero ya era tarde.

...

Volviendo a la casa de los Harmon empezó a oscurecer y sin nada de ánimos me encontré con Brian y Amy en la entrada de la casa muy alegres y empalagosos, no dije nada para no interrumpirlos pero notaron que estaba ahí.

—Alex, ¿Como estás? —El pelimorado me saluda.

—Pues... Dentro de lo que cabe... Bastante mal.

—¿Por qué? ¿Te paso algo? —La chica muy preocupada me pregunta. No quería decirle nada acerca de su hermana, pues lo tomaría muy mal al respecto, así que me inventé una excusa para no mencionarla.

—Yo solo quiero llegar, tomarme un baño y acostarme a dormir... No quiero saber de nada ni nadie.

—¿Seguro que estás bien? Hueles a alcohol...

—¡Si lo estoy! —Reaccioné a mí comportamiento malhumorado —Lo siento... No quise gritarte...

—Creo que es mejor que entres... No quiero que mamá te llegue a ver así —Brian a pesar de ser muy rebelde, se preocupa mucho por sus seres queridos, y muy pocas veces lo demuestra.

No dije nada y abrí la puerta de la entrada pero antes él me vuelve a llamar y volteé a verlo.

—Oye, si necesitas hablar con alguien... Búscame, ¿Si?

Su interés en mi bienestar me hizo sacar una gentil sonrisa.

—Gracias... —Entré y fui directo a la habitación de Campbell.

Me puse a pensar en todo lo que ha estado pasando entre él y yo, y la verdad no me sentía nada bien. Me puse a caminar en círculos por la habitación sin encontrar una solución a este asunto que me estaba atormentado jodidamente.

Me duché, me cambié y me acosté en la cama cubriéndome con las sábanas hasta el cuello, no tenía para nada de sueño, pero no sabía que más hacer.

Antes de que por fin me entrara el sueño sentí la puerta del cuarto abrirse y unas pisadas acercándose a la cama. No quise ver quién era y solo me quedé quieto y sin hacer ruido, no tenía ganas de nada.

—¿Alex? —Esa voz... Su voz... Con un tono preocupado y desesperado Campbell me da unos pequeños toques para saber si estaba dormido, en la completa quietud que me encontraba supuse que se lo creería.

El no tenía idea de por qué me fui de la reunión, y tampoco tenía pensado decirle.

Mientras que se aseara aproveché de moverme un poco y tomar un rato mi teléfono, pero justo después de que lo usaba salió del baño se me acerca nuevamente.

—Hey, ¿Qué te pasó? ¿Por qué te fuiste?

Seguí sin decir nada y continuaba usado el celular.

—Te estoy hablando, Alex.

—Nada, sólo tenía un poco de mareos y me vine —Dije con el tono más seco que puede existir.

—No me mientas, vamos dime.

—¡No tengo nada, Campbell! ¡Ya déjame en paz! —En eso me levanté y tomé mis cosas para salir de la habitación y volver a lo que considero mi cama, el sofá.

Es muy incómodo dormir en el sofá pero no me queda otra opción, ya no me sentía bien durmiendo a su lado, y con todos nuestros problemas... Con todo el dolor de mi alma... Me tendré que ir de aquí.

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✅Capítulo Concluido.