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el consentido Loki

Me quedé en blanco. No sabía que decir.

Era la primera vez que escuchaba esas palabras juntas. Me emocionaba la idea de que saldría a caminar yo sola por primera vez en toda mi vida

Cerré mi computadora, me agarré el cabello en una coleta y me fui del cuarto.

Avancé con cuidado para no tropezar. Eran cerca de la una de la tarde y el día era soleado, pero todo se veía muy turbio para mí.

Luego sentí una mano sobre mi hombro y una voz algo conocida que decía

—baya, pero si eres la niñita de hace un rato

—sí, soy yo ¿pasa algo? Pregunté algo confundida y temblorosa

—bueno... pero que es esto... ¡es un bastón! ¿no puedes ver? O acaso ¿no puedes caminar?

—no tengo por qué darte explicaciones -respondí algo molesta

—no necesito que me respondas, ciega -dijo en un tono burlón

Era loki que estaba algo furioso según parecía.

Puso su mano en mi hombro y me miró como si quisiera golpearme

Me enojé un poco y le dije —suéltame o lo vas a lamentar infeliz—.

Luego tiró de mi hombro algo fuerte y no lo soporté. Le di un golpe, pero él me sujetó como si su vida dependiera de ello

Luego seguí insistiendo para que me soltara y como no funcionó no me quedó más remedio que darle con mi bastón. Creo que le di muy fuerte porque al instante me soltó sin pensarlo y puso su mano en donde le había dado mi bastón.

. —eres una chica muy mala

Lo miré y me reí un poco. Llegué a la mesa sola y Loki se quedó sentado junto a mi

Y le respondí como pude —y tú eres un cobarde

No me había detenido a mirarlo antes, pero sabía que era el momento de saber cómo era físicamente.

Mis ojos comenzaron a analizarlo detenidamente. Era flaco, alto, de tes blanca (al igual que Sabín) y tenía los ojos azules. Muy profundos. y aunque se parecían a los de Sabín, no tenían la determinación ni el brillo tan espléndido de los de ella.

No me interesa ni el color de sus ojos ni su físico porque a pesar de ser comunes, no dejaban de ser los ojos y el físico de un chico que algún día llegaría a ser lo que se propusiera.

Le calculé más o menos unos 17 años, aunque me fue difícil saberlo debido a su altura que era de más o menos un metro con 64 y que como muchos de ustedes se imaginarán, era muy alto para su edad.

Pude deducirlo gracias a la inmadurez e inseguridad que mostraban sus facciones que se movían de un lado a otro constantemente.

Sus manos, eran algo pequeñas, aunque tal vez, un poco más grandes que las mías.

Traía puesta una camisa a rallas y un pantalón negro.

Ledi una palmadita en el hombro y le dije —¿por qué me estás 

molestando?

Y me dijo algo triste —porque eres detestable

Pensé que tal vez era demasiado consentido y su ego era muy alto para el mismo

—no me conoces ¿cómo puedes saber eso?

—solo lo se

—yo no soy detestable si me conoces, pero puedo serlo cuando me conviene

Luego levantó la cabeza y me dijo —¡aléjate de mí o te daré una paliza.

Estaba cansada de ser cordial y le dije —te atreves a tocarme un solo pelo y me vas a conocer

Apreté los puños y los alcé mientras él se volteaba Asia mí y justo cuando creí tener que usar las manos una voz gritó —¡loki! Déjala en paz—

No lo podía creer, era Sabín que venía caminando con un libro en la mano.

Él se levantó de la silla para discutir con ella, pero yo me levanté también y me interpuse

—¡no te atrevas a tocarle un pelo ¿acaso nadie te ha enseñado que a las mujeres no se les golpea? ¡inferís

Ella alzó la mirada y se irguió como un soldado de repente y dijo

—ella tiene razón. Estoy cansada de que siempre me trates como si no fuera nada tuyo así que, a partir de ahora, tendrás que dejar de ser tan mal hermano y aprender a cuidarme porque, aunque no quieras ¡yo siempre seré tu hermana!

Loki se tambaleó un poco, respiró profundamente, y después salió corriendo

Sabín aún estaba algo enojada así que caminó hacia él y le dijo

—¡Ah y, por cierto, una cosa más! No vuelvas a molestar a Mili ¿me oíste?

Loki se aterró aún más y corrió más rápido.

Sabín regresó hacia la mesa y

Se sentó con migo y tomó su libro entre las manos mientras me preguntaba

—¿cómo lo enfrentaste?

le respondí —solo usé mi bastón y hablé un poco, pero lo que tu hiciste ¡lo que tu hiciste fue increíble!

Ella me dijo —se sintió muy bien decirle lo que pensaba después de tanto tiempo

—creo que no volverá a molestarte

Luego ella me respondió riéndose —creo que no

Ambas nos reímos por un rato y ella me dijo —¿Cuántos años tienes?

—tengo 13 -le respondí

—¡yo igual! -me respondió asombrada.

—¿Cuándo los cumpliste? -le pregunté

—el 7 de julio ¿y tú?

—el 21 de octubre del año pasado -respondí

Luego hablamos por un rato sobre "SHERLOCK" y sobre otras cosas más.

Me sentía bien al tener una amiga con quien charlar sobre lo que me gusta así que le pregunté —¿tienes teléfono? -y me respondió —no ¿y tú?

—yo tampoco

Luego ambas nos reímos y ella me dijo —¿Cuándo te irás?

Le dije amablemente —aún no lo sé, pero creo que dentro de unas semanas ¿y tú?

—no tengo idea, pero espero verte luego.

sonreí y le dije —yo igual

Luego le pregunté —¿y Loki?

Ella suspiró y me dijo —es un consentido

mamá siempre dice que es su favorito, pero siempre ha sido algo dura con nosotros, supongo que es porque quiere que seamos fuertes cuando crezcamos o algo.

Luego yo le sujeté la mano y le dije —ya me había pasado por la cabeza, pero estoy segura de que se compondrá

con tu ayuda claro.

Ella se levantó de la mesa y se quedó contemplando el día un rato.

Luego una voz rasposa y gruesa le dijo —Sabín, ¡es hora de comer!

Luego ella me dijo con algo de tristeza —debo irme, pero quiero verte otra vez. Luego le respondí con algo de emoción —¿mañana a la misma hora?

Ella dijo —hecho -mientras me estrechaba la mano suavemente.

Mmm. ¿a quién me recordaba ese gesto?