Capítulo 4
El profesor anduvo buscando a Roberto sin éxito, alrededor de varios lugares del parque donde se perdió, afortunadamente llevó al grupo incluyendo a sus amigos al hotel para evitar otro incidente.
Profesor: ROBERTO, ROBERTO, ¿DÓNDE ESTAS?
En observa algo raro y eran huellas de Roberto entonces las siguió.
Profesor: ROBERTO, ¿ESTAS AHÍ?
Pero al llegar al final de sus huellas ve que había huellas de felinos cerca de él, eso puso preocupado.
Profesor: Oh no, Roberto, no puede ser cierto.
Mientras en otro lado, el rey Simba y toda la guardia del león estaba caminando a las praderas, con Roberto en la espalda de Beshte, Kion estaba ayudando a Fuli, ya que estaba lastimada de la pata, pero a pesar de eso veía mucho a Roberto y Kion veía mucho a Fuli.
Kion (pensando): ¿Qué le sucede a Fuli?
Fuli (pensando): Espero que estés bien.
Al llegar a las praderas van a un árbol.
Simba: Bueno, me voy a ir, Kion vigila al humano.
Kion: Sí, papá.
Simba se va, la guardia se queda y hablando.
Kion: RAFIKI.
En eso viene un babuino con un bastón columpiándose, hasta que baja del árbol.
Rafiki: Hola guardia, ¿Qué los trae por aquí?
Kion: Verás Rafiki, queremos saber sobre los humanos.
Rafiki se sorprende al escuchar a Kion.
Rafiki: Vaya, bueno puedo decir que los humanos son criaturas que viven en otra parte del mundo.
Bunga: Entonces, ¿Son peligrosos?
Rafiki: Algunos, pero otros no todos son peligrosos. ¿Por qué tanta curiosidad sobre los humanos?
Kion: Veras...
Kion fue interrumpido por Fuli.
Fuli: Encontramos a un humano.
Rafiki se sorprendió mucho.
Rafiki: Cielos, ¿puedo verlo?
En eso Beshte deja a Roberto en el suelo y Rafiki lo ve.
Rafiki: Increíble, no sé cómo llegó aquí, pero es fascinante que sobreviviera.
Rafiki ve algo inusual y era en su brazo el símbolo que salió.
Rafiki: Oh, por los leones.
Kion: ¿Qué pasa?
Rafiki: Este símbolo en su brazo, es como que tienen ustedes, pero es la primera vez que lo tuviera un humano, nunca había pasado así.
Kion: Eso significa, ¿Qué es un guardián?
Rafiki: Si.
Todos se sorprenden al escuchar eso.
Fuli: Debe ser por la roca que tocó.
Rafiki: ¿Roca?
Fuli: Sí, vi que cuando la tocó sintió como si algo lo quemara, por eso se desmayó.
Rafiki: Increíble, debe ser de la leyenda.
Todos: ¿Leyenda?
Rafiki: Hace tiempo, dijeron que habría un nuevo guardián único, solo él veía el símbolo escondido, debe ser por eso que no entendiste lo que pasaba Fuli.
Fuli: Sí.
Rafiki: Bueno, ¿qué esperamos?, llévenlo dentro.
En eso lo llevaron al árbol en un pedazo de madera para que se acostara.
Rafiki: Bien, puede que mañana despierte, por ahora pueden descansar todos.
Todos a excepción de Fuli asintieron con la cabeza y se fueron.
Fuli: Rafiki, ¿Por qué él no entendía lo que decía?
Rafiki: De hecho, los humanos no entienden nuestro lenguaje así que para ellos pueden sonar como gruñidos o sonidos típicos para ellos.
Fuli: Ya...veo.
En eso Fuli recuerda como trató de comunicarse con él, pero Roberto no entendía.
Rafiki: No te preocupes Fuli, está en buenas manos, así que ve a descansar.
Fuli: De...acuerdo.
En eso Fuli se fue paso por paso hasta irse a su cueva.
Fuli: Quisiera que entendieras para que pudiera agradecerte lo que has hecho por mí.
Al llegar se acuesta a dormir un poco.
Mientras que en el hotel donde se hospedaron el grupo y los amigos de Roberto, llegó el profesor triste y preocupado.
Profesor: Atención a todos.
Sam llegó rápido preocupada.
Sam: ¿y Roberto?
Profesor al escucharlo se preocupó más.
Profesor: Verán...Roberto ha...desaparecido.
En eso dejó a Sam con lágrimas y un llanto fuerte.
Sam: NO, RO...ROBERTO.
Sam abraza con fuerza a Francisco, mientras que trata de consolarla.
Profesor: Debemos ser fuertes, tenemos que estar todos juntos e irnos mañana de regreso, así que empaquen todo.
En eso todos se fueron a sus habitaciones, todos empacaron sus cosas, Francisco estaba triste, pero Sam estaba devastada.
Sam: Roberto... ¿Por qué?
En eso recuerda la vez que se conocieron, Sam era una niña de 7 años tan seria que nadie quería estar con ella, siempre se la pasaba sentada leyendo en el parque de juegos en el recreo, hasta que llega un chico nuevo y los saluda alegremente.
Roberto: Hola, soy Roberto es un placer conocerlos.
Sam no prestaba atención, hasta que Roberto se sentó al lado de ella.
Roberto: Hola nueva compañera, ¿Cómo te llamas?.
Sam se volteó a verlo, ya que era la primera vez que alguien le hablara, así que comenzó a contestarlo tímidamente.
Sam: Ho..hola, soy Samantha.
En el recreo, Sam estaba en su lugar de siempre, hasta que llega Roberto y la ve con una sonrisa.
Roberto: Hola Sam, ¿Qué haces aquí?
Sam: Na...nada.
Roberto: Ya veo, oye ese libro me encanta, lo leía en la biblioteca.
Eso dejó sorprendida a Sam.
Sam: ¿En...serio?
Roberto: Claro, si quieres podemos ser amigos.
Sam se sonrojó, pero por primera vez pudo sonreír.
Sam: Claro Roberto, seamos buenos amigos.
Al terminar el recuerdo, comienza a llorar más.
Sam: Tú pudiste cambiarme y convertirme en alguien que nunca pude ser, conforme pasaban los años, mis sentimientos eran más fuertes hacia ti, incluso Francisco sabía que me gustabas. No quiero que termine así, No quiero, no quiero perderte.
El día siguiente, Roberto estaba despertándose con un dolor de cabeza.
Roberto: Ah... ¿Qué pasó?
Comenzó a levantarse poco a poco, y comienza a ver que no era donde estaba antes.
Roberto: Pero... ¿Dónde estoy?
En eso escucha que alguien se acercaba, y se da cuenta de que era la guepardo que conoció antes.
Roberto: Ah, hola amiga.
Fuli lo ve, se alegra mucho y corre hacia él.
Fuli: Que bueno que estás bien.
Roberto: Gracias ami...
Roberto comenzó a reaccionar al escuchar a Fuli.
Roberto: Espera, ¿puedes hablar?
Fuli: Espera, ¿puedes entenderme?
En eso Roberto se asusta y se aparta de Fuli.
Roberto: No, no, no, esto es un sueño.
Fuli: No es un sueño.
Roberto: Si debe ser.
Fuli: No lo es y te lo mostraré.
En eso Fuli se acerca a Roberto, le lame en la mejilla y ambos estaban sonrojados.
Roberto: Entonces, es real.
Fuli: Sí.
Roberto: Dios mío, entonces puedo hablar con los animales, esto es genial.
Fuli: Sí, que alegría porque quería decirte algo.
Roberto: ¿Qué cosa?
Fuli: Verás, gracias por ayudarme la otra vez.
Roberto: Oh si, de nada amiga, y ¿cómo te sientes?.
Fuli: Mucho mejor gracias a ti, por cierto, mi nombre es Fuli.
Roberto: De acuerdo, soy Roberto.
Roberto sonríe un poco al poder hablar con Fuli.
Roberto: Por cierto, quisiera preguntarte como llegué aquí.
Fuli: Verás...
Fuli le contó sobre lo que pasó desde que convenció al rey Simba hasta que lo ayudó Rafiki, y Roberto pudo comprender lo que pasaba.
Roberto: Ah ya veo, bueno será mejor que me vaya.
Fuli: ¿Qué?
Roberto se levantaba y dejó a Fuli triste que se notaba cuando caía las orejas.
Roberto: Lo siento, tengo que volver con mi grupo.
Roberto comenzó a caminar hacia la salida
Fuli: Pero...necesitas descansar un poco más.
Roberto: Gracias, pero debo regresar.
Fuli: Espera, no sabes cómo volver.
Roberto se detiene y comienza a reaccionar.
Roberto: Diablo es cierto.
Fuli: Hagamos algo, descansa un poco y yo te llevaré donde estabas.
Roberto pensó un poco sobre la propuesta que le dio Fuli.
Roberto: Está bien, confío en ti.
Fuli: Genial.
Roberto se sienta y Fuli se alegró mucho.
Fuli: No te preocupes, te prometo que regresaras pronto con tu grupo.
Roberto: Gracias Fuli, eres la mejor.
Ese comentario dejó sonrojada a Fuli.
Fuli: Gra...gracias.
Roberto y Fuli comenzaron una nueva amistad juntos entre un humano y un guepardo.
FIN del capítulo.
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