02
El tiempo ayuda a descubrir
Todo: Las mentiras ocultas
Las razones mas ciertas
Y las personas mas
Falsas.
Justo en este momento me planteo seriamente la posibilidad de que estoy siendo engañado.
Tal vez comenzó luego de nuestra pelea, cuando me dijo que no estaba preparado para tener un hijo.
Si, aun somos jóvenes, pero yo esperaba formar una familia, y su respuesta solo fue que no esta listo.
No lo entendí, pero gracias a Taehyung fui capaz de intentar comprender a YoonGi.
No quería pasar por un divorcio como lo hizo Taehyung, así que tome sus consejos, y esperar a que Yoongi este preparado.
Pero ha pasado tanto tiempo de nuestra pelea, medio año, todo se debe a mi insistencia, así que lo descuide.
¿Y si fui yo quien comenzó esto?
¿Que es lo que cambio ahora?
Yo necesito respuestas.
¿Puedes decirme con
quien me engaña?
no pensé lo que escribía, solo lo mande.
Desconocido.
¿dime que tan seguro
estas ahora de eso?.
creo que un 60-40.
40 que no lo hace.
60 en que lo hace.
desconocido.
Solo trata de escoger
bien a tus amistades.
¿puedo confiar en ti?
desconocido.
claro después de todo
soy un amigo, que
no quiere que sufras.
¿como debería llamarte?
desconocido.
es mucho por hoy,
Jimin mira las señales.
Mira las señales...
¿Que señales?
Tome mi celular, cartera y llaves del auto, iría hasta YoonGi directamente, es el único que me puedo dar una respuesta.
Empecé a conducir hacia la estación de policía donde trabaja, sin llamar o avisar antes, si en realidad me engaña, no le daré el tiempo de idear una mentira.
Detuve mi auto, pensando una vez más, mientras observaba detenidamente el anillo en mi dedo anular, nos casamos, fuimos novios, amigos, compañeros, fuimos de todo, en que momento empezamos a ser desconocidos.
¿cuando te alejaste de mi?
Acaso ¿Dejo de amarme?
—Mierda! —Exclame, llevando mis manos a mi boca, intentando calmarme, no podía sufrir ataques de pánico, no otra vez. —Respira Jimin, solo respira. —Murmure intentando regular mi respiración. —Esta bien, irás ahí y él te dirá que todo esta bien.
Una vez me tranquilice, volví a conducir, no pasaron mas de 10 minutos hasta que llegue a la estación de policía, observe el auto de YoonGi, antes de decidirme a entrar.
Camine por los pasillos hasta llegar al pequeño escritorio de YoonGi, sonreí despejando todas mis dudas.
—Amor. —Susurre una vez cerca de su escritorio.
—¿Jimin? ¿Que haces aquí? — Cuestiono, dejando su celular de lado.
—Yo... yo recibí un mensaje. —Confesé, sintiéndome avergonzado, y asustado.
—Ven salgamos. —YoonGi tomo mi muñeca guiándome hasta los baños. —¿No puedes esperar a que llegue a casa?, enserio ¿tienes que venir hasta aquí?
—¿Estas molesto? —Respondí, sintiéndome idiota, ¿por que no muestra interés? —Si vine hasta aquí es por que es algo importante, ademas nunca estas en casa, llegas muy tarde por la noche, y te vas apenas te levantas. —Balbucee, sin verle a los ojos.
—Lo siento, no estoy molesto, ¿que quieres? — Hablo soltando un bufido.
—YoonGi tu... tu me engañas. —Hable intentando sostener la respiración.
—¿Quien te dijo?
—¿Es cierto? tu me engañas. —Murmure, alejándome paso a paso de él.
Esto no es lo que esperaba.
—No, no lo hago, Jimin vete hablamos en casa tengo trabajo. —Contestó, saliendo del baño.
Esta bien, no me engaña, YoonGi no me engaña.
Me repetí una y otra vez, queriendo creer en sus palabras.
Abandone la estación, yendo hasta mi auto, queriendo hablar con mi amigo.
Tome mi celular y llame a Taehyung.
—¿Estas ocupado? —Hable apenas escuche el celular ser atendido.
—Si de hecho estoy en una cita con Netflix. —Respondió con sarcasmo.
—Entonces cambia tu cita con Netflix por mi, llego en 10 minutos llevare helado de chocolate, adiós. —Termine colgando la llamada.
Conduje todo el camino hasta la tienda de conveniencia, pensando en lo mucho que quiero contarle a Tae.
—Hola Hoseok dos helados de chocolate por favor. —Pedí apenas entre a la tienda.
—Hace mucho no te miraba por acá, ¿como estas Jimin? —Pregunto mientras buscaba el helado.
—Bien gracias, si hace tiempo no visitaba a tae o venia al trabajo de YoonGi, entonces tu tienda no me queda cerca. —Explique sacando el dinero para pagar.
—Claro, a ambos los veo muy seguido, son 5 dólares. —Pidió al entregarme los helados.
—Gracias. —Agradecí, entregándole el dinero. —Adiós.
Taehyung se mudo a su nueva casa luego del divorcio, y casualmente queda cerca de la estación donde trabaja YoonGi, es una zona muy segura, por eso se mudo ahí.
Conduje no mas de 5 Minutos cuando llegue a su casa, estacione el coche, tan rápido como pude, toque el timbre, de su casa.
—¡Pasa! —Grito desde el otro lado, entre viendo a Tae guardar algo en los cajones rápidamente. —Llegaste.. —Sonrió.
—Llegue, tengo algo que contarte. —Hable mientras él va a la cocina, por las cucharas.
—Si, espérame 3 segundos y estoy contigo.
—¡Veras recibí un mensaje de texto algo raro!. —Grite, encendiendo el televisor.
—¿Raro?. —Pregunto una vez llego a mi lado con ambas cucharas. —Mi helado. —Pidió, abriéndolo tan rápido como se lo entregue.
—Ayer por la noche recibí un mensaje de un numero descocido, decía que YoonGi me era infiel, y yo en verdad lo creí por un momento, pero hoy por la mañana le he preguntado y lo ha negado, TaeTae me siento un idiota por desconfiar de YoonGi, pero a final de cuentas he confirmado que no es así. —Conté, manteniendo mi vista en mi helado, comiendo un poco.
—¿Puedo ver esos mensajes? —Pregunto, mientras lamia su cuchara.
—Si, mira. —Conteste entregándole mi celular.
—¿Por que has mantenido una platica con él? —Pregunto una vez acabo de leer los mensajes.
—Supongo que tenia dudas. —Acepte, y el negó.
—No, Jimin le has dejado ver que eres un tonto, desconfiado, que no confía en su pareja has quedado como idiota frente a sus ojos. —Hablo mientras negaba, retándole importancia a sus palabras. —Le has dejado ver que puede jugar contigo.
—Lo se. —Murmure aceptando sus palabras.
—Bueno y te has puesto a pensar, ¿que si YoonGi en realidad te engaña? —Pregunto en apenas un susurro, volviendo a comer de su helado.
—Lo perdonaría. —Acepte. —Lo pensé durante mucho tiempo, y lo perdonaría.
—Pero y si YoonGi ya no quiere estar a tu lado.—Insistio, haciéndome sentir inseguro.
—Yo no lo se debo irme.
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