4
~Kane
Mi plan de vida había salido como yo lo había querido o por lo menos el intento de lo que había planeado en aquellos años. Era un pobre intento de lo que quería hacer con mi vida y un sueño muy raro que no pensaría que se cumpliría pero, siempre se me daban las cosas bien.
No me gusta ser una persona arrogante pero creo que lo amerita al decir que fui el mejor de mi generación en medicina. Me acomodaron fácilmente en él internado en New York hace un año y, acabo de terminar con mis prácticas así que ya estaba trabajando como un médico real. Aunque no me acostumbraba a estar aquí después de Washington parece que el destino quiso hacer su jugada esta noche.
Aunque francamente ha estado jugando conmigo estos últimos días...
—¡Tonta! ¿como es posible que te emborraches tan pronto?—Rose se queja a mi lado mientras Jayne termina de vomitar. Ella también parecía estar borracha y se notaba por la manera en la que arrastraba las palabras—Kane, llévala contigo. Yo no quiero aguantarla toda la noche además eres su novio.
Bueno, mi sospecha había sido confirmada estaba borracha también. Emma iba peor tratando de subir a un auto mientras Rose seguía de pie con nosotros. Tomé a Jayne para finalmente cargarla y llevarla más fácilmente, no quería batallar con ella tratando de que caminara.
Se sentía muy ligera.
—Eres la única persona que la toleraría borracha—explica—se ven bien juntos, ¿siempre se han visto así?—su voz se suaviza más—Te ves más raro de lo normal.
—¿Oye a donde llevas a Jayne?—un hombre se acerca a su lado—¿Estás loco? ¿Quien eres tú?
No sabía quién era ni qué decirle cuando Rose le dio un golpecito en el hombro y le dijo que se callara. No sabía que estaba pasando y era tan patético esta noche había sido todo un espectáculo desde que Liam me hizo venir a "ayudar". El chico me miró de reojo, se veía que tuvo que contenerse a decir algo más y Rose se lo llevó arrastrándolo finalmente.
Probablemente sería una noche rara y muy larga.
La mayoría de las veces suelo encontrarme con muchas situaciones complicadas más por el tipo de trabajo que tengo pero ninguna ha sido tan complicada como ver a tu ex después de muchos años tan ebria, ayudarla y ganarte el odio de una persona en específico. Porque si, me había ganado el odio de un hombre el cual no conocía.
Lo sabía por la mirada que me había dado.
Al meterla al auto no hizo ningún ruido, estaba como si tratara de procesar lo que estaba pasando. Pero en todo el camino no mencionamos nada, no pude evitar mirarla mientras conducía pero tenía que estar viendo hacia el frente para no tener algún accidente. El trayecto hacía mi departamento fue tranquilo aunque fue todo un lío meter a Jayne por el elevador.
Se quejaba mucho.
Para mi suerte habíamos coincidido y agradecía aquello porque de no ser por mi no sabría que hubiera pasado, prefería no pensarlo. Verla acostada en mi cama me daba una tranquilidad que no había tenido en años.
Verla después de muchos años me había hecho ponerme nervioso y que todo mi cuerpo chocara con todas las emociones que contuve en el pasado. Solo quería volver a encontrarla pero no había podido localizarla por ningún lado, había sido como si la tierra se la hubiera tragado por completo. No sabía como reaccionar ni siquiera sabía que decir en el momento que la vi aquella vez en el hospital aunque traté de hablar con ella. Algo que claramente no se pudo.
—Ven a dormir—murmura con sus ojos entreabiertos—¿vendrás?
—No creo que quieras que esté ahí contigo de seguro aún estás borracha, tú nunca cambias.—contuve que una sonrisa se formara en mi rostro al recordar aquella vez que la conocí—Prefiero que estés tranquila.
—No estoy borracha Kaneee.
Mi nombre había sido arrastrado por su última letra haciéndolo escuchar aún más largo cuando vi como pegó su cabeza de nuevo a la almohada y comenzó a dormir de nuevo.
—Eso dices tú, por el estado en el que te vi en la entrada créeme que si estás ebria.
Me acerqué para sentarme a su lado solo para ver que estuviera bien. La luz de la luna entraba poco por las cortinas y podía mirar su rostro con detalle en algunas partes. No sé qué había pasado esta madrugada pero todo fue tan rápido que ni siquiera me imaginaba que estaría con ella aquí. Quería estar a su lado tan cerca y abrazarla como en muchos años no lo había hecho, pero también sabía que estaba tan cansada e ida que no era correcto sólo hacerlo. Debía esperar.
Había esperado 6 años para verla esperar a que estuviera sobria no sería un problema.
Quería dormir junto a ella quería volver a sentir la calidez que sentía cada vez que la abrazaba pero era algo que posiblemente no sentiría pronto. Quizás ambos sentíamos lo mismo aún o tal vez solo en mi era el sentimiento de lo que alguna vez hubo entre ambos.
La dejé en mi cama ignorando el hecho de que quería estar a su lado y me alejé. Salí de la habitación y me recosté en el sofá de la pequeña sala que tenía cayendo totalmente derrotado. Sin darme cuenta caí dormido tan profundamente.
Un pequeño grito me despertó. Si, había escuchado como una persona había gritado y cuando lo traté de asimilar sabía que había sido Jayne. Al momento que percaté aquello me acerqué lo más rápido que pude a la habitación, la vi despeinada entre las sábanas sentada en la cama tratando de asimilar que había pasado.
Quiero asumir que había tenido una pesadilla y ahora mismo no sabía que hacía aquí.
Su mirada quedó congelada cuando me vio y no había algún tipo de reacción.
—¿Que hago aquí?—ahora su mirada hace delatarla cuando noto como me ve de arriba abajo. Recorriendo mi cuerpo haciendo que sintiera algo extraño—¿De nuevo te gané en el billar?
Bueno, por lo menos no amanecimos agresivos como aquella vez.
—Estás muy de buenas, ¿no?—quise saber—Me extraña que no te levantaras peleando.
—Han pasado años es claro que no haría lo mismo que esa vez.
Me senté a su lado en una silla que estaba al lado de la cama. Verla con completa claridad me hacía querer abrazarla después de tanto tiempo. Pero tenía que contenerme y ni yo sabía el porque.
—¿Me has secuestrado de nuevo?—pregunta. Supongo que se refiere a aquella vez que la llevé a mi habitación por no saber donde estaba su casa. En mi defensa Rose insistió en traerla conmigo—Aunque debo decir que no se parece en nada a tu habitación.
—He crecido.
—Lo veo.
—Es increíble como te has convertido en una borracha de primera, pensaba que eso se había terminado–quise bromear—Ya sabes, no es la primera vez que te salvo de meterte en un lío.
—Lo que quiero saber es como terminé aquí, recuerdo estar bebiendo hasta el tope con Emma y Rose y ahora estoy aquí contigo. No me molesta pero quiero saber como terminé aquí.
—Ambos queremos saber algo, pero creo que primero tienes que preocuparte por tu resaca.
—¿Cual resaca? Yo me siento muy bien—la conocía tan bien que sabía que estaba mintiendo—Además ocupo llegar al trabajo temprano, ¿qué hora es?
—Son las 8.
—Mierda.
Al momento de decir aquello vi cómo se levantó rápidamente tirando las sabanas a su lado. Se levantó frente al espejo que tenía en la habitación tratando de arreglar su cabello y viendo sus ojeras mientras yo estaba riendo sentado viendo todo lo que estaba haciendo.
Estaba sorprendido de verla frente a mi, quizás aún estaba en shock tratando de procesar lo que había pasado pero debía actuar más y pensar menos.
—¿Porque estás tan apurada?
—Soy la encargada de la empresa se suponía que tenía que llegar desde las 6 de la mañana.
—Dudo que mi ropa te la pueda prestar para que te cambies aquí.
—No hay problema con la ropa, siempre dejo cambios en un cajón de la oficina solo ocupo hacer que alguien me cubra mientras llego.
Comenzó a buscar entre su bolsa y vi que finalmente sacó su teléfono. Mientras ella marcaba yo solo la miraba aunque trataba de desviar mi mirada en algunas ocasiones para no incomodarla.
Pero es que era inevitable no verla.
La dejé en la habitación para poder buscar alguna pastilla para bajar su resaca. Sabía exactamente los síntomas que podía presentar y también sabía que no le vendría bien ir a trabajar sin tomar algo. La conocía y sabía que llegando al trabajo no tomaría nada ni para un dolor de cabeza.
Opté por darle zumo de mango que sabía que era su favorito, por su culpa había agarrado la costumbre de beber eso por las mañanas.
—Bien, he mantenido algunas cosas en calma mientras llego así que estoy menos apurada—explica mientras se acerca hacia mí en la barrita—¿Que bebes?
—Es para ti—lo extendí—Tu favorito.
Solo me sonrió mientras tomaba el vaso y yo no pude evitar sonreírle aunque trate de evitarlo excusándome con darle una pastilla para el dolor de cabeza.
—Me sorprende que tengas zumo aquí—menciona mientras se sienta en la barra y bebe más—Estoy segura que planeaste mi secuestro.
—Es tu culpa que tenga eso aquí; desde que te fuiste suelo beber eso cada mañana o por lo menos cuando estoy aquí.
Ella no dijo nada pero siguió bebiendo el zumo. Sabía que yo estaba siendo muy directo pero había guardado tanto de que hablar con ella y tanto que había sentido que era difícil retenerme.
—Por tu trabajo me imagino que no sueles llegar seguido a casa.
—Algo así, no tiene mucho que terminé el internado que era estar encerrado mucho en el hospital, por lo menos ahora puedo llegar a casa de vez en cuando.
—Si lo creo, debe ser muy pesado trabajar en ello.
—Jayne yo quería preguntarte si...
Justo cuando iba a preguntarle lo que la última vez traté de hacer la puerta del departamento se abrió de la nada y ambos volteamos a la vez.
Claro que las cosas no iban a ser fáciles. Me levanto para que no entre más.
—Espero no interrumpir—menciona Scarlett al entrar sin siquiera esperar a que yo le abriera la puerta—Tengo muchas cosas por las cuales disculparme contigo pero creo que eso debería ser algo privado ¿no lo crees?
Jayne se queda mirándonos a ambos y yo solo contengo la respiración para tratar de no ser una persona más grosera de lo normal. Cuando se trataba de Scarlett trataba de contenerme en no ser una persona fría con ella, pero algunas veces no me daba otra opción.
Solíamos ser amigos al principio y todo fluyó de una manera natural entre ambos. Sin embargo ahora actualmente ya no éramos nada por lo menos solo eran unos intentos de tener algo más y porque ella lo insistía. Fuimos novios un tiempo, un tiempo muy corto porque comencé a desesperarme de ella y su actitud tan posesiva conmigo. Sin embargo viendo en esta situación estaba claro que no se daría nada de nuevo entre nosotros. Ella tenía otro tipo de intenciones conmigo y yo no quería tener ningún tipo de trato con ella.
Aunque viéndolo desde este punto ella pensaba que aún habría oportunidad de nuevo entre ambos
—Creo que después podríamos hablar ahora no estoy interesado en hablar contigo y agradecería que te fueras de mi casa.
—Pero tengo cosas que hablar contigo Kane.
Era evidente que yo no tenía nada que hablar con ella.
—No me interesa, ¿tienes mi número no? Con eso es suficiente mándame un mensaje diciéndome que quieres que sepa y yo lo leeré.
Ella miró de pies a cabeza a Jayne. Pude notar como la analizaba como si ella le llegara a los talones cosa que nunca pasaría.
—¿Por ella terminaste conmigo verdad? Yo lo sabía, siempre supuse que querías irte a liar con otra. ¿No había una zorra más bonita?
Al decir esto me contuve interiormente para no cometer una estupidez por la forma en la que se había referido a ella sin embargo Jayne se me adelantó. La vi tan rápido ponerse frente a ella con los brazos cruzados pero no reflejaba ninguna emoción de enojo o no hacía notar que estaba furiosa.
—Tu no eres nadie para faltarme al respeto a mi, no pienso rebajarme a tu nivel tan...—ahora la que la miró de pies a cabeza fue ella—bajo. Me parece que te pidieron algo, deberías hacerlo. Es mejor que no molestes.
No se si me había impresionado la manera en como le habló o él como se lo había tomado con calma y la puso en su lugar. Scarlett solo reflejó su molestia pero finalmente se marchó sin decir una sola palabra.
Ahora sabía que había causado una mala impresión con Jayne.
—Veo que no soy la única Ex—pronunció girándose hacia la sala.—La unica ex en New York.
—Entre ella y yo no hubo algo formal.
—No me quiero meter en tu vida privada Kane, respeto el hecho de que tuvieras otras novias, era claro que no siempre estarías soltero.
Traté de no mencionar algo. Preferí callarme sin saber el porque quizás no quería discutir aunque francamente no sabía el porque había dicho eso.
Pero también mientras la veía terminarse el zumo que estaba en su vaso quería romper el hielo para saber más sobre ella.
—¿Piensas que de verdad no has sido mi única ex?
—Cuando nos conocimos tenías una ex novia, ahora sale otra también.—lo explicó con calma—Pero es que de verdad no quiero meterme en tu vida privada, respeto mucho el hecho de que salgas con más personas.
—Créeme si lo eres. Para mi es así. Para mi eres la única ex novia que he tenido.
Ella reprimió una sonrisa alejándose de mi y tomando su bolso del sofá. Ahí lo había dejado al momento de salir de la habitación.
Quería que entendiera que para mi las otras personas no existían, que solo existía ella para mi. Pero estoy seguro que no es lo que ella querría escuchar de mí después de años de no vernos. No puedo ser tan directo, no sé mucho sobre qué fue de ella después de nosotros.
—¿Quieres que te lleve?
—Si no te importa si, odio los Taxis de aquí—se queja—Son algo confusos para recibir indicaciones, de verdad, la última vez tuve que llegar corriendo al trabajo porque me dejó donde no era.
No quise hacerle aquella pregunta que moría por hacerle. Por alguna extraña razón sentía que debía esperar, no quería saber tan rápido de aquello que me había preguntado mucho tiempo.
En el camino a su trabajo no mencionamos mucho, puse a los Beatles porque también era su Banda favorita. Creo que es de la única persona a la cual conozco sus gustos a detalle. Y eso que ya había pasado tiempo y suelo ser una persona que olvida hasta cumpleaños.
—Sabes, tenía mucho sin escuchar a los Beatles—ella rompe el silencio—Creo que trabajar me dejó loca, por lo menos eso pienso.
—¿Trabajas todo el tiempo?
—Si, algunas veces me quedo hasta noche. Otras salgo por la tarde y llego a casa con Emma.
Al parecer su amistad sigue. Recordé el momento en que la vi saliendo del antro subiendo al auto del hombre desconocido.
—¿Viven juntas?
—Si, las 3 vivimos juntas.
—Ah me imagino que también Rose vive con ustedes.
Ella no dijo nada solo evitó mi mirada. Pensé que quería que siguiera la conversación pero antes de decir algo más ella lo hizo.
—Si, no tenemos mucho que llegamos a New York.
Por lo que veo acaban de llegar aquí hace no mucho, eso explica porque comencé a toparme con ella. Al llegar al trabajo de Jayne no se bajó rápidamente del auto como creí que lo haría. Se quedó en silencio y después de algunos minutos finalmente abrió la puerta.
Yo aún estaba procesando que la tenía aquí.
—Jayne
—¿Que pasa?
—Si quiero volver a verte ¿tengo que venir hasta acá?
Claro. Rompe el momento romántico. Genio como siempre.
—¿Acaso Está muy lejos?—levanta una de sus cejas.
—No es eso, pero está casi al otro lado de la ciudad—quise volver a intentar bromear. Tenía mucho sin hacerlo—¿No crees que me cansaré?
—Lo que creo es que no puedes vivir sin mi. Que quieres volver a verme.
—Acertaste, veo que ya eres más inteligente de lo que eras.
Soltó una pequeña sonrisa—¿Porque te cuesta tanto pedir mi número?
Esta mujer sabe leer mentes. ¿Como sabía que estaba intentando volverme a contactar con ella? Era claro que yo tendría que romper el hielo todas las veces.
—No es eso, pero para verte de nuevo.
—Puedes venir cuando gustes—murmura—Pero algunas veces no estoy aquí.
—Entonces es mejor que tengas mi número por si pasa algo—excuso—O si necesitas que alguien venga por ti.
Extendió su teléfono para poder registrar mi número.
—Si llegas a necesitar algo, solo llámame.
—Dudo mucho que tenga algunos problemas de salud pero yo te llamaré si eso pasa.
—Sabemos que no me refiero a mi oficio.
Ella asintió y sonrió para finalmente cerrar la puerta.
Sabía que quería hablar más con ella pero como adultos tenemos obligaciones y volviendo a mi cruda realidad en unas horas más iría a trabajar.
Tenía que arreglar algo antes de volver a ver a Jayne para evitar problemas después. Porque estaba seguro que no sería la última vez que la vería.
_*_
—Déjame ver si entendí, ¿fuiste con Jayne a un antro por la noche? ¡Vaya rencuentro!
Jayden no entendía nada al parecer. Estar lejos no ayudaba en nada a que me entendiera porque sabía que estaba haciendo cualquier cosa que ponerme atención.
—No entendiste nada—suelto con fastidio—he estado media hora hablando contigo sobre esto y no me ayudas en nada.
—Entiéndeme Kane, estoy vuelto loco con la mudanza.
—¿Irte a vivir con esa chica no fue muy rápido?
—Me gusta aventurarme y lo sabes—típico idiota, quiero saber cual sería su reacción al saber que Emma está aquí también.—Aunque estar lejos de casa me Hace sentir extraño.
Se había ido con su pareja actual a vivir a Kansas. No sabía ni cómo había conocido a esa chica, Jayden estuvo un tiempo viviendo conmigo pero era claro que por el internado nos dejamos de ver y él comenzó a salir con esa chica.
No me convencía del todo pero así es el. Suele ser algo terco algunas veces.
—Hablas como si te hubieras ido a otro continente.
—Lo se, igual espero verte pronto quizás tenga algunas vueltas para New York.
—¿A vivir juntos de nuevo? no gracias, cuando la chica te bote no quiero tenerte en mi departamento.
—Claro que no me botará de aquí. Me ama.
—Como digas. Voy a arreglar mi problema, deséame suerte.
—Lo que te deseo es que te deje ir fácilmente, porque conociendo ese problema no te dejará ir.
Comencé a caminar dentro del edificio pensando en una forma para que todo fuera más fácil y menos complicado para mi. Aunque mientras lo hacía le daba vueltas a todo lo que había pasado entre nosotros y todas las emociones que tenía contenidas. No solo hablaba de Jayne también hablaba del problema por el que estaba aquí.
Toco la puerta mientras espero de pie tratando de pensar que esto sea menos tardado de lo que me imagino.
—Primero me echas de tu departamento y ahora vienes a verme, ¿que pretendes?
Scarlett me mira de pies a cabeza y me da una sonrisa. Claro que sabía que pensaba y claro que no iba a pasar nada de todas las cosas que podría entender entiende la cosa que no es.
—Quiero evitar problemas es por eso que vengo de una vez contigo porque no me parece que entres a mi departamento como si fuera tu casa.
Su sonrisa se desvanece y eso me da satisfacción. Borrarle a esa carita la sonrisa que me hace fastidiar el día me da satisfacción.
—Nunca te habías quejado, ¿lo haces por ella verdad?
—Scarlett no tengo porque darte explicaciones de mi vida, ¿lo sabes? Tu y yo dejamos de tener algo hace meses. Y sabes que fue algo tóxico para ambos y más para mi.
Y era verdad, no me respetaba y solo me daba largas. Teníamos muchos problemas anteriormente y estaba tratando de que todo terminara de la mejor manera para cortar lazos por todos lados pero no se había dado la ocasión. Trate muchas veces de hablar con ella pero ahora que me ha visto con Jayne se que con mayor razón dejará de molestarme.
—Es una estupidez te quieres victimizar conmigo.
La típica excusa de una persona que se está victimizando.
—No quiero que me sigas molestando es todo, quiero que quede en claro que no tengo ya nada que ver contigo y agradecería que borraras hasta mi número para no tener contacto.
Al darle la espalda dispuesto a que esto ya acabara y que mis problemas fueran dejados por completo.
—Mi padre se enojará si se entera, ¿sabes que podría echarte? ¿A que otro hospital irías si es el dueño de el mejor de New York?
Me detuve al escucharla. Había olvidado el detalle que su padre era el dueño del hospital donde yo trabajaba y conociéndola iba a usarlo en mi contra. No podía dejar que mi trabajo de años fuera afectado por ella.
Me volví a girar hacia ella viéndola frente a mi de nuevo con una estupida sonrisa.
—¿Que pretendes?
—¿No es obvio? Mi padre sabía que teníamos una relación por eso has destacado porque le he hablado bien de ti. Sin embargo ¿que pensaría si le dijera que el doctor de su institución le rompió el corazón a su hija? Peor aún, que la engañó.
—Yo no te engañé a ti, ni siquiera hemos estado juntos desde hace un tiempo solo has querido estar cerca de mi. Pero yo ya no lo quiero.
—No lo entiendo Kane, nos hemos divertido también entre ambos. Ha habido algo entre nosotros y ahora solo simplemente quieres dejar de intentarlo.
—No quiero que me metas en problemas por no corresponderte.
Y estaba hablando con sinceridad, no quería tener problemas con su padre solo por el hecho de no corresponderle a su hija. Ya éramos mayores, sabemos que no se puede obligar a alguien a quererte por más que tú si quieras a esa persona o por más que te atraiga.
—Entonces correspóndeme como se debe Kane—pidió—Así nos evitaremos problemas.
—Creo que ambos somos mayores para saber que esto no es bueno, yo no te quiero ni siquiera quiero estar cerca de ti.
—Estoy segura que si lo intentamos de nuevo todo puede arreglarse.
Si fuera el Kane del pasado estoy seguro que todo me valdría una mierda y que la dejaría a ella y a mi trabajo. Pero no puedo dejarlo todo como si nada, me ha costado años llegar hasta donde estoy y ganar lo que actualmente he ganado.
Maldita hora en que me metí con esta mujer.
Se acercó hacia mi tratando de abrazarme y yo me alejé de ella.
—Dime cuánto es el lapso que me das para que funcionen las cosas, si las cosas no funcionan debes prometer dejarme ir sin rencores.
Claro, juega con su mente. Estoy seguro que no aguantará mucho si la tratas como lo sigues haciendo hasta ahora.
—Si veo que ninguno de los dos progresamos yo te dejaré ir sin rencores. Pero mientras quiero que lo intentes Kane, no quiero recurrir a mi padre.
Maldita la hora en la que me presenté como su pareja frente a él. Maldita la hora en la que todo esto de meterme con ella pasó y maldita la suerte de ver al amor de mi vida de nuevo y tener que perderlo de nuevo por culpa de la rubia que estaba frente a mi.
—Solo quiero mi distancia entre ambos.
—Y yo no lo quiero, así que algunas veces llegaré de visita al hospital para saber cómo estás. Hay que intentarlo.
Respiré hondo tratando de relajarme y que mi estrés no sobresaliera más de lo normal.
Aunque sabía que sería un intento en vano.
¿Porque simplemente no puedo reencontrarme con Jayne sin tener problemas? Porque estoy seguro que esto es sólo el inicio.
~~~
Te amo Kane
Pero la cagaste 😡
Gracias por ser pacientes conmigo y esperarme cada que actualizo, los amo✨
Ya prometo actualizar mas seguido 🥲💗
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top