capitulo 5

- Gaara.- Sakura movió ligeramente el hombro de su... ¿novio?

¿Como debería llamarlo después de lo ocurrido la noche anterior? Ni idea, lo único que tenía claro era que tenía que salir de ahí, no porque no quisiera estar con el pelirojo, eso era lo que más quería, pero si iban a formar una relación sería algo normal...citas y todo ese rollo.

Gaara dijo algo que Sakura no comprendió y le dio la espalda. Sakura rió. Parecía un pequeño que pedía cinco minutos más antes de ir al colegio.

- Tenemos que levantarnos, Gaara.- dijo ella en su oído.

Gaara rodó quedando frente a Sakura.

- No, no tenemos que levantarnos.- cerró sus ojos mientras pasaba sus brazos por el cuerpo de la pelirosa-. Duerme otro poco, Sakura.

Sakura negó riendo.

- Tengo que ir al trabajo.- Gaara la aparto de su pecho para verla a los ojos-. Tengo que ir al trabajo.- dijo en tono dulce acariciando la mejilla de él.

- No, no tienes que ir.- beso su frente-. Ahora estas conmigo, puedes tener lo que quieras sin necesidad de mover un dedo.- su mano se movía de arriba hacia abajo sobre la espalda desnuda de Sakura-. Podemos dar ese viaje que querías. Sol, arena y mar...tu y yo, desnudos caminando bajo la luna con sus estrellas acompañándola.

Eso sonaba más que tentador a los oídos de Sakura, pero tendía que declinar la oferta.

- Me encantaría...- Gaara sonrió contento-...pero no puedo, por lo menos en estos momentos no.- su sonrisa se borró al instante.

Gaara aflojo su agarre.

- ¿No quieres o no puedes? - preguntó mientras se ponía de pie.

A Sakura se le hizo agua la boca al ver ese escultural cuerpo en todo su esplendor. En verdad a Gaara le habían favorecido los años.

Sakura suspiro. Se puso de pie, enrollando en la ligera sabana que minutos antes los cobijaba.

- No puedo.- agarro su mano para que Gaara la mirara-. Tengo una vida, ¿sabes? No puedo dejar las cosas así como así, solo porque mi ex...ahora ¿novio?- preguntó dudando.

- ¿Soy tu novio? - la sonrisa volvió de nuevo a sus labios.

Gaara amaba con todo su corazón a Sakura. Era algo que iba más allá del amor convencional, sería capaz de cualquier cosa para mantenerla a su lado, ahora que tenía los recursos nunca nadie más lo abandonaría.

-¿Como a ella? - dijo una voz burlona en su cabeza. "Solo son mis inseguridades hablando" Repetía en su cabeza el pelirojo, esa voz burlona se fue cuando los labios de Sakura rozaron los suyos.

- Claro.- dijo ella cuando se separaron-. No me acuesto con quien sea solo porque sí, Gaara.

Gaara se tenso.

- ¿Te has acostado con alguien más? - desvío la mirada.

Sakura le sonrió enternecida.

- No, ayer fui mi primera vez.- Gaara miró sus ojos jade-. Y no me arrepiento-. Dijo sonrojada.

Él sonrió de lado y la besó. Saber que fue el primer hombre en la vida de Sakura y obviamente el último, hacia que su interior se prendiera una llama de felicidad. En ese momento Gaara corroboro que Sakura Haruno siempre estaría a su lado.

- No te ilusiones-.Esa voz, con el mismo timbre de voz que la suya propio, solo que en tono burlón. Desde que su madre murió, esa voz hizo acto de presencia. Recordándole que no era lo suficientemente valioso para alguien. Si para su propia madre fue más importante el amor hacia su padre... ¿Que podía esperar de las demás personas?

-Ella no me va a dejar.- le contesto en tono alto. Sakura lo miró confundida. Varias veces había escuchado esa frase de los labios de Gaara, pero... ¿Por que repetía eso una y otra vez? Gaara al ver la confusión de su novia, que bonito sonaba eso para Gaara, le sonrió para tranquilizarla-. Vamos a desayunar y luego hablamos.

Sakura suspiró. Eso era mejor que un rotundo "No"

- Esta bien.- entrelazo sus dedos con los de él-. Primero hay que cambiarnos, no podemos salir desnudos.

Gaara sonrió de lado.

- Técnicamente si.- Sakura se horrorizo-. Le puedo dar el día a Chiyo.

Sakura negó sonriendo.

- Vamos-. Lo jalo-. Hay que hacerle compañía a Chiyo.

.-.-.-.-.-.-.-

- ¿Durmieron bien? - Preguntó la anciana levantando las cejas. Sakura se sonrojo y Gaara asintió.

- Muy bien-. Planto un sonoro beso en la mejilla sonrojada de Sakura-. Dormí como bebé.

Eso era verdad, las pesadillas no vinieron esa noche. Miro a Sakura platicar con Chiyo, todo gracias a ella, Sakura era especial.

- ¡Gaara!- aplaudió Sakura frente a su rostro, el salió de sus pensamientos y beso las manos frente a él-. Chiyo te esta preguntando que si que quieres de desayunar.

Sakura se cruzó de brazos.

- Lo mismo de siempre-. Chiyo sonrió asintiendo-. Iré al estudio hay unos papeles que quiero que Kakahi revise, ¿Vienes? - preguntó hacia Sakura.

Ella negó.

- Ve tú.- Gaara dudó-. Aquí estaré cuando vuelvas.- aseguro.

Gaara se retiro algo dudoso. Le era difícil estar lejos de ella, cuando no la vio por dos años, sentía que iba a morir, bueno decir que no la vio sería mentir. Un investigador le mandaba datos de ella y fotos. Tenía un centenar de fotografías de ella, era algo que nunca le diría, no la quería asustar...más.

Cuando no miró más el cabello rojo de Gaara, Chiyo hablo.

- ¿Y bien? - preguntó-. ¿Hablaron? ¿Aclaro tus dudas?

Sakura asintió contenta.

- Si.- mordió su labio-. Creo, huh, que somos novios.- dijo con pena. Era como estar hablando con su suegra, desde la plática de ayer no podía dejar de ver a la Sra. Chiyo como la madre de este. Su preocupación por él y los cuidados otorgados a lo largo de la vida de Gaara, hacía que se ganara el titulo de madre en la mente de la pelirosa.

- Me alegro por ustedes.- dijo concentrada en su labor-. Te haré una pregunta, pero quiero que seas sincera.- Sakura asintió-. ¿Lo amas?

Desvió la mirada de los ojos analíticos de Chiyo. ¿Que decir?

- La verdad...- suspiró-...Lo quiero demasiado, todo esto es muy abrumador. Tengo sentimientos encontrados, no sabría decirle con exactitud si lo amo, solo le aseguro que esta vez me quedare a su lado para descubrir si esto que siento es amor.

La Sra. Chiyo sonrió por la respuesta.

- Me da gusto escuchar eso.- regresó a su anterior tarea-. Gaara solo necesita amor en su vida.- suspiro-. Si tu lo dejas no creo que Gaara pueda soportarlo.

Sakura iba a preguntar a que se refería, pero unos brazos rodeando su cintura la interrumpieron.

- ¿Me extrañaste? - dijo juguetón.

Sakura rió.

- Solo fueron algunos minutos, Gaara.- el muchacho tomo asiento a su lado.

- Pues yo si te extrañe.- beso rápidamente sus labios y sonrió.

-.-.-.-.-.-.-.-.-.

- Tenemos que hablar y lo sabes.- Gaara hizo un puchero bastante adorable.

- Había olvidado lo terca que eres.- dijo riendo-. ¿De que quieres hablar?

- Tengo que regresar a mi departamento.- Él negó-. Si, si tengo que ir, Gaara.

Gaara bufó.

- Te puedes quedar aquí conmigo.- se acerco para abrazar a Sakura, pero ella retrocedió.

Sakura sabía lo dependiente que podía llegar a ser Gaara, por el bien de los dos tendrían que poner distancia.

- Gaara.- se dejo caer en la silla su lado. El jardín era inmenso y hermoso. Verde por todos lados-. No apresuremos las cosas.- Gaara seguía de pie, cosa que Sakura agradeció porque así bloqueaba los rayos del sol-. Hay que ir despacio para que las cosas funcionen bien esta vez.- Gaara se puso en cuclillas frente a Sakura.

- Presiento que si te dejo ir me dejarás de nuevo.- Sakura acarició su mejilla-. No puedo dejarte ir esta vez, Sakura.- beso su pierna que se encontraba ligeramente desnuda por el pantalón corto que vestía-. No soy tan fuerte.

A Sakura se le encogió el corazón al ver la mirada suplicante de Gaara, pero negó, tenía que ser fuerte por los dos.

- No te dejaré, Gaara.- beso su cabello-. Te quiero, y la razón por la cuál quiero regresar a mi departamento es por eso mismo, porque te quiero.- Gaara le dedico una mirada de confusión. Si lo quería, ¿Entonces porque no quedarse junto a él?- No podremos estar las 24 horas del día juntos, en algún momento entrare a la universidad de nuevo y eso me resta mucho tiempo.- rió- Míralo como un entrenamiento para esas futuras semanas en que tal vez ni siquiera salga de mi departamento.

Gaara suspiro. Si quería estar con ella de nuevo sería bajo las condiciones de ella, no debería tentar tanto a la suerte y aceptar.

-Aceptar es lo único que te queda.- Gaara se tensó y dejo de escuchar las palabras que salían de los labios de Sakura-. Porque si no, ella también te dejara...como tu madre.

-Claro que nos podremos ver en las tardes ya que salga del trabajo y siempre que tengamos tiempo libre.- Gaara asintió sin saber que había dicho en esos segundos-. Pero tú aquí en tu casa y yo en la mía. ¿Esta bien? - Preguntó Sakura viendo directo a los ojos de Gaara.

- Esta bien.- aceptó-. ¿Los fines de semana, te puedes quedar a dormir aquí? - pidió.

Sakura rió. Aceptaría esa petición por parte de Gaara.

-Los sábados que salga del trabajo aquí me tendrás.- besó su tatuaje-. ¿Que significa? - dijo haciendo referencia al símbolo en su frente.

- Amor.- contesto él mirándola directamente a los ojos-. Significa amor, Sakura.- y la respiración de Sakura se aceleró debido a la mirada intensa de Gaara-. Que es lo que quiero hacer en este momento contigo.- su mano recorrió la piel desnuda de sus piernas.

- Gaara.- se removió la pelirosa-. Chiyo podría vernos-. Gaara Se puso de pie llevándola a ella consigo.

- Entonces.- la abrazo por la cintura sonriendo de lado-. Vamos a mi habitación.

Bueno un poco de sexo con tu novio nunca cae mal, ¿Verdad?

.-.-.-.-.-.-.-.-

- Cualquier cosa que necesites...- rodé los ojos. Era la quinta vez que Gaara me decía eso.

- Te llamo al celular y te lo pido sin dudarlo.- Gaara rió sentado a mi lado. Era de noche e ibamos a mi departamento luego de una larga despedida en su habitación.

- ¿Segura que no quieres quedarte conmigo? - reí. Gaara era tan tierno.

- Tengo una vida, Gaara.- me acerque a él cuando el auto estuvo estacionado frente a la acera de mi departamento, el cuál compartía con una compañera de la universidad-. Ahora tu eres parte de ella, pero no puedo dejar todo de lado.- bese sus labios y él profundizo el beso.

- Vamos.- quise abrir mi puerta y Gaara no me dejó.- Déjalo, yo lo hago.- salió del auto y lo rodeó por enfrente. Su caminar elegante me hipnotizaba, abrió mi puerta desde fuera y extendió su mano, la tomé y el la besó-. Llegamos belle dame. - dijo en un sexy francés.

Reí.

- Si hablara francés te contestaría.- Gaara rió cerrando la puerta detrás de mí.

- Algún día te enseñare.- entrelazo nuestros dedos y entramos-. Eso, y muchas cosas más.- dijo en mi oído.

El ruido del ascensor me distrajo. Entré ruborizada, la pareja de ancianos se retiro, dejándonos solos ahí dentro.

Gaara sonrió de lado cuando las puertas se cerraron, me estampo contra la pared y me asuste, me estaba preparando para ver sus ojos aqua vacíos, pero no, estaban brillosos de deseo.

- Gaara.- le dije apartándolo-. Esta cosa pronto abrirá.

No me escucho. Me besó salvajemente en los labios restregándose contra mí. Gemí. Sus manos bajaron a mis pechos y mordió mis labios.

- Podríamos estar haciendo esto todas las noches.- dijo con sus labios pegados a los míos.

Reí y por poco y aceptó cuando chupo el lóbulo de mi oreja.

- ¡Gaara!- lo empuje riendo. El ascensor hizo el ruidito ese que anuncia que llegaste a tu destino.

Rió. Me encantaba verlo así tan despreocupado. Lo abrase por la cintura y él paso su brazo por mis hombros. Caminamos hacia mi departamento y sentí el cuerpo de Gaara tensarse y su ceño fruncirse.

-¿Quién es ese?- preguntó señalando con su cabeza.

En la puerta se encontraba Neji, el cuál me saludo con la mano de lejos. Le regrese el saludo y Gaara gruño.

- Es un amigo.- dije simplemente.

Mire los ojos de Gaara que poco a poco perdía su brillo. ¡Mierda!

- De hecho, es novia de Tenten.- me miró confundida-. Si hubieses hecho bien tu trabajo de acosador, sabrías que Tenten es mi compañera de cuarto y Neji su novio.

Gaara asintió, aunque algo dudoso aún. Me puse de puntitas y roce sus labios.

- Me encanta cuando eres celoso.- reí-. Pero no cuando eres irracional.

Rodó los ojos y me empujo a la pared, abrí los ojos como platos. Neji aún podría estar viendo.

- Tú eres mía, Sakura.- dijo con voz ronca. En verdad estoy considerando quedarme siempre con él-. Recuérdalo.- beso mi frente. Su brillo había regresado.

Le sonreí de vuelta y llegamos hasta mi hogar. Toque un par de veces y una muy preocupada Tenten abrió.

- Me tenías preocupada.- dijo abrazándome-. Neji me acaba de decir que te vio con un chico pelirojo bastante atemorizante en el pasillo ¿Te hizo algo? - agarro mis brazos examinándolos.

Reí y Gaara carraspeó detrás de mí. Tenten se sonrojo.

- Mucho gusto.- Saludo Gaara-. Creo que soy el pelirojo atemorizante del que hablaba tu novio.- sonrió de lado y el sonrojo de Tenten aumento, la vergüenza y la sonrisa de Gaara hacían ese color rojo en sus mejillas-. Gaara, mucho gusto.

- Huh, Tenten.- regreso el saludo nerviosa.

Me miró con confusión y yo solo me encogí de hombros.

- Ella es mi amiga de la que te hable.- dije hablando a Gaara-. Y el es...- mordí mi labio.

Gaara me abrazó por la cintura y me agarro por la barbilla, su mirada maliciosa me indico lo que haría a continuación. Me besó, el maldito desgraciado macho de las cavernas, estaba marcando territorio ¿Enserio? Mejor hazme pipi encima y sería más claro el mensaje ¿No?

Aunque lo estuviese haciendo por las razones erróneas, le conteste el beso. Un beso no se le niega a nadie, digo, un beso no se le niega a un hombre como Gaara.

- Soy su novio.- dijo una vez que me dejó ir.

Tenten abrió los ojos como platos y Neji más allá solo alzo sus cejas.

- Te veré mañana, amor.- beso mi frente y se giró-. Pasare por ti al trabajo.

Asentí.

Cuando cerré la puerta, Tenten ya estaba despidiendo a Neji.

Neji pasó por mi lado y rodó los ojos.

- Creo que esta noche no dormiras, Sakura.- dijo burlón.

Le sonreía de igual manera y dije:

- Y esta noche tu, si dormirás.- Neji frunció el ceño y rió.

- Creo que si.- y salió.

- Tu y yo tenemos cosas que hablar.- habló mi amiga en cuanto la puerta fue cerrada nuevamente.

Suspire.

Mejor si me hubiese quedado con Gaara. Miré a Tenten y traía consigo una bolsa de frituras.

Esta será una larga...larga noche.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top