En una avioneta iban los dos jóvenes enviados por Zeke y el castaño quien seguía inconsciente ajeno a lo que sucedía en esos momentos.

—Zeke va a estar contento porque por fin estarás a salvo de esos demonios de Paradis— Pieck estaba encargada de cuidar al menor mientras Porco se aseguraba que todo estuviera en orden —te lo seguro vas a estar bien pequeño Eren— acariciaba suavemente los cabellos castaños

— ¿Sigue dormido? — miraba a su compañera como cuidaba del chico —de verdad no pareciera que son hermanos, este niño tiene los ojos color ámbar mientras que Zeke los tiene color verde azulado—
—Es cierto, pero tiene el mismo color de cabello que su padre— la cabeza del menor reposaba en el regazo de la chica — ¿Falta poco para llegar? Puede despertar en cualquier momento—
—Casi estamos cerca, llegaremos pronto no te preocupes el sedante fue preparado personalmente por su hermano—

Poco después escuchaban como la avioneta comenzaba su descenso, podían ver que Zeke ya los esperaba, era normal pues la espera por su pequeño hermanito había terminado no dejaría que nadie se lo llevara y lo cuidaría.

—Parece si pudieron cumplir con la misión, díganme que Reiner o Annie siguen vivos? — miraba al chico dormido en la espalda de la mujer
—No pudimos verlos, pero sabemos que los mantienen encerrados en las celdas de ese castillo— miraba fijamente al hombre —fue casi imposible acercarnos a ellos, la vigilancia ahí está muy reforzada—
—Lo más seguro es que después de habernos llevado a Eren Jaeger los ejecuten por conspiradores en el secuestro— lamentaba que quizás no los volvería a ver nunca más
—Da lo mismo en este momento ellos fallaron y ustedes lo lograron vamos de seguro estarán agotados además que mi querido hermano despertara pronto—

Ingresaron a un edificio que era el hogar de ellos, Pieck llevó al castaño donde le indico Zeke una habitación preparada para él. La chica lo recostó y cubrió bien. Era una ternura de niño entendía en parte porque quería protegerlo después de todo su cuerpo era diferente, su condición de doncel lo ponía en peligro.

—Vas a ver que aquí estarás mejor, nadie podrá dañarte nos aseguraremos de eso— dejo una suave caricia en su cabello antes de salir de la habitación y se dirigió al comedor donde se encontraban todos —sigue dormido—
—Pronto despertara, podrías quedarte con él Pieck? — Zeke la miraba mientras arreglaba unas cosas en un bolso —tengo que hacer unas cosas rápidamente y regreso— le encantaría recibir personalmente a su hermanito en cuanto despertara, pero deberes eran deberes
—De acuerdo— se fue hacia la cocina le prepararía algo para comer lo más seguro es que tendría hambre después del largo viaje

Paso media hora hasta que finalmente Eren comenzaba a despertar de a poco se sentía desorientado no sabía que había pasado hasta que lo recordó, lo secuestraron. Se levanto alterado mirando a todos lados hasta que su vista se fijó en la misma mujer que vio antes de ser llevado.

—Tú eres... La mujer que me capturó— un ligero temor se hizo presente, sin embargo no notaba malas intenciones en ella
—No te haré nada— se acercó con cuidado mientras le acercaba una bandeja con comida —te prepare algo de comer, lo más seguro es que tengas hambre— se sentó en una silla que estaba cerca de la cama —no le puse nada raro te lo prometo—
—Yo...— a pesar que temía aceptar aquella comida su estómago rogaba por comer algo —gracias...— acepto el plato que la chica le ofrecía y comenzó a comer —esta delicioso—
—Que bueno que te guste, hay más en caso que sigas con hambre— ella estaba tratando de hacer sentir cómodo al menor pues era obvio que tenía miedo por ser llevado a la fuerza
—Dónde estamos? — preguntó finalmente después de terminar la comida dejando todo en una mesita junto a la cama —yo... Quiero regresar por favor—
—Estamos en el hogar de Zeke, tu hermano mayor— quería tomar las manos del joven para darle tranquilidad, pero decidió mejor no hacerlo —aquí es Marley un lugar fuera de los muros lo siento si fuimos bruscos contigo, pero no puedes regresar aquí estarás a salvo—
— ¿A salvo de qué?... Con mi esposo y mis amigos estaba bien... No entiendo porque me tuvieron que traer hasta aquí—
—Eren eres un doncel lo sé bien— finalmente tomó suavemente y con cariño ambas manos del castaño entre las suyas —hemos visto como otros donceles han sido usados de las peores formas que puedes imaginarte, por eso tu hermano quiere evitar que eso ocurra—
—Pero... A mí nunca me hizo nada en mi hogar— sus manos temblaban ligeramente entre las de la mujer, sin embargo, no las apartaba —mis amigos... Mi esposo siempre ellos han estado cuidándome—
—No te has puesto a pensar que quizás lo hacían para proteger lo valioso que eres? Entiende que un hombre con la capacidad de concebir es algo muy escaso y también muy buscado por todo tipo de personas—

Las palabras de Pieck lo estaban confundiendo y empezaban a generar miles de dudas sobre las personas que decían quererlo. Un dolor se formaba en su pecho creyendo que quizás los sentimientos de su esposo no eran reales y solo lo había utilizado por órdenes de los altos mandos.

—Te dejare una muda de ropa para que tomes un baño— soltó con cuidado sus manos —si necesitas ayuda puedes llamarme— antes de salir dejo la ropa en el cuarto del baño y se despidió del chico con una sonrisa

El oji ámbar se levantó con cuidado de la cama y se dirigió al baño, se despojó de la ropa que traía adentrándose en la bañera. Sus pensamientos eran un caos su vista se fijó en el anillo que simbolizaba su matrimonio con Levi.

—Por favor ven por mi pronto...— beso suavemente la pequeña argolla en su dedo anular izquierdo mientras unas lágrimas bajaban por sus mejillas —ella no tiene razón... Tú me amas yo lo sé— se abrazó a sí mismo murmurando entre súplicas el nombre de su esposo

En el castillo de la legión, Isla de Paradis

Todos se encontraban en la sala de reuniones lugar donde hace no mucho se dedicaban a planear las expediciones para conseguir la libertad de la humanidad, pero ahora estaban enfocados en rescatar a Eren, de repente Levi sintió una opresión en su pecho y junto con la voz de su amado suplicando que lo rescatara.

—E-Eren...— apretó su pecho con una de sus manos dejándose caer en la silla —me está llamando—
— ¿A qué te refieres Rivaille? — pregunto Hanji preocupada de que la falta de sueño estuviera pasándole factura al cuerpo de su amigo
—Es su voz, la escucho llamarme y pedirme ayuda— se levantó nuevamente —tenemos que darnos prisa dile a Braun que venga inmediatamente no podemos seguir perdiendo el tiempo aquí—
—De acuerdo, Moblit ve por el prisionero es momento de actuar— a pesar que sonaba una locura lo que decía el azabache era su amigo y siempre había confiado en sus palabras —tranquilo, lo vamos a encontrar y podrán estar juntos—

Moblit salió de prisa hasta las celdas ordenando a los guardias soltar al prisionero y le indico que lo siguiera hasta la sala de reuniones, al momento de llegar ambos entraron.

—Hanji-san ya traje al prisionero, cuáles son sus órdenes? — camino con Reiner detrás suyo quien mantenía la mirada baja
—Bien Braun dijiste que sabías donde se encuentra Eren y es momento que nos digas cómo llegar hasta allá—
—Solo tengo una condición... Tienen que dejar que vaya con ustedes, sin mí no tendrán posibilidades de lograrlo se los digo porque conozco bien a Zeke— levantó su mirada y en sus ojos se reflejaba un brillo de determinación —si al menos con esto puedo remendar un poco mis errores lo haré, no quiero que Eren sufra...—
—Tsk... Debiste pensar en eso antes de traicionarnos— su mal humor había empeorado con los días el no tener a Eren a su lado lo desesperaba —si tienes razón entonces te dejaremos acompañarnos, pero créeme no dudare en acabar contigo de ser necesario—
—Entonces está decidido, pongámonos en marcha y organicemos los grupos— dijo Hanji saliendo junto con a Rivaille y Moblit que llevaba al rubio con cadenas aún por seguridad

Fuera del castillo en el patio se encontraban los amigos de Eren, Annie y Erwin. La segunda tenía la mirada gacha, sentía la presencia amenazante del azabache.

—Annie...— Reiner la miraba fijamente —vas a ir con nosotros? Se supone que te habías retirado de todo esto—
—Iré solamente porque quiero ver a mi padre, pero antes los ayudare a rescatar a Eren— en el fondo le tenía aprecio al joven castaño fue uno de los pocos que tenía la suficiente fuerza para pelear contra ella, aunque varias veces lo venció
—De acuerdo prepárense saldremos en unos minutos— indicó Hanji y se encamino hasta Erwin —supongo que te quedaras aquí ya que me dejaste a cargo para esta misión—
—Con un solo brazo no hay mucho que yo pueda hacer Hanji y lo sabes— pues si en la última misión para ganar su libertad había perdido uno de sus brazos —sabes de todas formas que confío en ti, además alguien debe mantener a Rivaille controlado para evitar que cometa una locura por amor—
—Jeje tan oportuno que eres dejándome como carnada, después me asegurare de cobrarte esto tenlo presente—
—Tsk oi cejotas tampoco soy un animal para que tengan que tenerme controlado— aunque sabía que tenían razón por su Eren haría lo que sea incluso si significaba asesinar a alguien

Reiner sentía la mirada de odio dirigidas hacia su persona sobre todo de Mikasa, la verdad se las merecía solo provocó daño por eso quería redimirse salvando a Eren. Después de que estuviera de regreso con ellos se alejaría de sus vidas, se quedaría en Marley con su madre.
Ya todos estaban listos según Reiner tenían que viajar en caballo hasta un puerto donde podrían conseguir un barco y este los llevaría fuera de la isla en dirección al lugar donde mantenían cautivo al castaño.
Levi miraba fijamente la argolla en su dedo anular izquierdo depositando un suave beso en ella y susurrando para sí mismo.
—Eren resiste un poco más te prometo que volveremos a casa tu y nuestro hijo por fin estaremos juntos—

De regreso a Marley

Tras terminar de asearse y cambiarse el castaño se sentó en la cama mirando la habitación donde se encontraba debía reconocer que le gustaba cómo estaba decorada. Quizás la chica que estuvo con él hace un rato se encargó de hacerlo.

— ¿Dónde estará esa chica? Me dijo que podía llamarla si necesitaba algo y hasta ahora es la única que me da confianza—
—Pequeño Eren— como si la hubiera invocado Pieck entró en su habitación —vengo a buscarte para que conozcas a los demás de esta casa— lo tomo de una mano para guiarlo fuera de la habitación
—Emm... Pieck-san cierto? — dijo un poco tímido
—Solo dime Pieck— una pequeña sonrisa estaba presente en los labios de la chica — ¿sucede algo? —
—N-No quiero hablar de esto aquí, ¿podría ser cuando estemos a solas? — lo que tenía que conversar con ella era un tema que solo una mujer entendería por su condición como doncel
—Esta bien no te preocupes después con calma podemos hablar— lo llevó por la casa hasta llegar a una pequeña sala con algunos sillones y una mesa en el centro

Dentro de aquella sala había dos niños y el mismo chico que acompañó a la azabache cuando lo secuestraron.

 —Bueno a Porco ya lo conoces— señaló a su amigo que se encontraba apoyado en el marco de la ventana quien simplemente le dio un ligero asentimiento con la cabeza —los niños son Falco y Gabi, aunque ellos no viven aquí como tal— los mencionados se acercaron un poco para mirar detenidamente a Eren
—Hola...— saludo con un poco de timidez —s-soy Eren—
—Se parece un poco a Zeke— habló la niña —aunque es mucho más delgado, ¿es cierto que eres un doncel? — preguntó con interés
—Gabi no seas imprudente recién acaba de llegar— la regaño Pieck
—No te preocupes Pieck-san... Si es verdad soy un doncel— le respondió con algo de temor a la castaña
—P-Perdón no era mi intención— se disculpó algo avergonzada
— ¿Eres el hermano menor de Zeke? — ahora preguntaba Falco
—Eso creo... No lo conozco aún— había tantas cosas que lo tenían confundido —por cierto... ¿dónde está él? Quiero hablar y que me diga la verdad de una vez por todas—
—Al parecer estas muy impaciente querido hermanito— como si lo hubieran invocado el mencionado apareció frente a ellos —déjennos solos un momento— todos obedecieron y salieron dándoles privacidad a ambos hermanos —al fin nos conocemos—
—Diría mejor que tu fuiste el impaciente— su actitud se volvió defensiva —no esperaste mucho para que me secuestraran—
—Tuve que hacerlo después de que te casaras con ese tipo... Rivaille cierto? — mencionó el nombre de su esposo
—Casarme fue mi decisión— ya estaba cansado que se metiera en su vida sin permiso —lo amo y quiero regresar con él—
—Ya te dije no dejare que te vayas mi deber es protegerte aun eres menor de edad— se acercó al menor —prácticamente ese hombre está cometiendo un delito—
—Somos conscientes de eso! Pero nos amamos y ya estamos casados no puedes romper nuestra unión—
—Se que no puedo hacerlo por eso decidí que debías estar aquí lejos de todos ellos que pueden hacerte daño— lo agarró suavemente de los hombros —entiende Eren quiero lo mejor para ti, no quiero verte pasar lo mismo que otros donceles menos si se trata de ti mi hermano menor—

El menor se quedó un momento en shock viendo como el hombre frente suyo se mostraba tan vulnerable, algo dentro de él le decía que debía abrazarlo y su cuerpo se movió por sí solo rodeando entre sus pequeños brazos al rubio. Sus palabras estaban cargadas de dolor tan genuino.

—Lo siento que tuvieras que ver cosas así...— murmuro débilmente porque sabía bien que tenía razón, la mayoría de los donceles eran usados como simples incubadoras o prostitutas, también eran vendidos por su don de crear vida
—Ahora entiendes porque estás aquí...— se dejó abrazar por el pequeño con temor de asustarlo si lo abrazaba también
—Lo entiendo... Pero, te equivocas con ellos— hacía referencia a sus amigos y su amado —no son como los demás siempre se aseguraron de cuidarme—
—No lo aceptaré, tendrás que quedarte aquí— se separó del menor —con el tiempo comprenderás que es lo mejor—

Salió de la sala dejando al castaño solo quien simplemente se dejó caer en uno de los sillones mientras unas pequeñas lágrimas amenazaban con salir de sus ojos. No podría volver nunca con su familia, con su amado Levi.
Qué pasaría si jamás los volvía a ver... Acaso Levi se volvería a enamorar y casar con alguien más, después de todo de qué servía su matrimonio si estaban separados. Tenía miedo que lo olvidara y se fuera con alguien más, que los demás simplemente lo dejaran tirado.
De repente sintió una mano sobre su cabello que le daba suaves caricias era Pieck que se había sentado junto a él.

—Tenemos que regresar a tu dormitorio— lo ayudó a levantarse para caminar de regreso a donde dormiría —cuando lleguemos puedes decirme lo que querías hablar antes—
—Si...— caminaba en silencio junto a ella hasta que llegaron a la habitación que fue asignada para él
—Bien entonces, ¿qué pasa? — ambos se sentaron en la cama y la azabache tomo sus manos para darle más confianza para hablar
—Esto... Sé que conoces bien la anatomía de los donceles— estaba algo avergonzado —resulta ser que tengo retraso con mi periodo y necesito... Yo bueno...—
—No puede ser... Hace muy poco que contrajiste matrimonio a menos que...— una idea vino rápidamente a su cabeza —tuviste relaciones antes de casarte? — esa era la única posibilidad
—S-Si...— murmuró levemente sonrojado —no creí que pudiera pasar la tasa de fertilidad en donceles es baja—
—Depende de cada doncel, hasta no hace muy poco tu tenías un poder de titán lo más seguro es que eso pudiera alterar tu sistema y que tu cuerpo fuera más fértil de lo común— miraba fijamente al oji ámbar —es posible que en estes embarazado, pero será mejor ir con un médico no te preocupes déjamelo a mi yo iré contigo—
—Gracias...— por inercia recargo su cabeza en el hombro de la chica —s-si no es mucho pedir podrías quedarte hasta que me duerma? — pregunto un poco avergonzado
—No hay problema— acarició suavemente el cabello del menor —anda acuéstate debes dormir mañana saldremos temprano—

Con cuidado el castaño se recostó mientras cerraba sus ojos sintiendo las pequeñas caricias en su cabello, le recordaba a su madre cuando se enfermaba o tenía alguna pesadilla. La calidez que le transmitía Pieck era igual a una sensación reconfortante que poco a poco lo llevó al mundo de los sueños. Ella siguió un rato más junto a él, si era cierto lo del posible embarazo como se lo diría a Zeke, lo más probable es que quisiera asesinar a ese tal Rivaille.
Al final decidió que hasta que no estuvieran seguros del todo no le diría a nadie, ya inventaría alguna excusa para salir mañana con el chico.

—Descansa pequeño Eren— deposito un suave beso en su frente y se retiró finalmente de ahí para dirigirse a su propia habitación a descansar, el viaje de regreso la dejó completamente agotada como ellos viajaron en una avioneta se demoraron menos a diferencia del viaje en barco que se tardaba un poco más de tiempo

En la isla de Paradis

Reiner les había conseguido finalmente un barco donde podrían zarpar en dirección a Marley, el único problema vendría ahora.

—Solamente tenemos un inconveniente con respecto al viaje— llamó la atención de todos —nos demoraremos más en llegar—
— ¿No hay otra manera más rápida de llegar? — Hanji miraba fijamente al rubio con una mueca sentía la desesperación de su amigo muy cerca suyo
—La otra alternativa es viajar en avioneta, pero no fue posible conseguir una lo más probable es que ellos se aseguraron de que no los persiguieran fácilmente— refiriéndose a Pieck y Porko
—Tsk... No tenemos mucho tiempo— debido a lo poco que dormía Rivaille andaba muy irritado —mi esposo fue raptado en contra de su voluntad por culpa de tus camaradas—
—Cálmate enano no vas a conseguir cambiar la situación del viaje, aunque te pongas a maldecir a todo el mundo— la mujer de gafas ahora volvió a dirigirse a Reiner — ¿cuántos días son de viaje? —

—Tres días si todo es favorable y por el clima lo más seguro es que no tengamos inconvenientes hasta podría asegurarles que podríamos estar antes allá— les explico

Hanji miró de reojo como su amigo se alejaba de ellos en dirección al barco decidió seguir su ejemplo y todos los demás hicieron igual. No había tiempo que perder menos sabiendo la condición en la que se encontraba Eren, el mismo Levi se encargó de decirles a todos la razón porque deben actuar inmediatamente.

—De acuerdo todos recuerdan el plan cierto? Tenemos que pasar desapercibidos al llegar no podemos llamar la atención o podríamos alertar a Zeke Jaeger—
La única respuesta que obtuvo fue el típico saludo de los soldados confirmando acatar la orden. Desde ese momento estarían en un lugar desconocido para todos ellos tendrían que confiar sus vidas ciegamente en Annie y Reiner.

Era ya de noche cuando comenzaron su viaje todos se encontraban durmiendo en sus respectivos camarotes dentro del barco excepto un azabache que se encontraba en la cubierta observando el cielo lleno de estrellas. Este escenario le recordaba su luna miel no habían ido a un lugar tan lejos, fue en un bosque donde la loca de su amiga les preparó una cabaña como regalo de boda.

—Levi! Es hermosa— el castaño admiraba la pequeña cabaña que Hanji les había regalado
—No está mal la loca cuatro ojos tiene buen gusto— sin esperar más tomó entre sus brazos al estilo nupcial al menor para abrir con una suave patada la puerta y entrar
—P-Podía caminar por mí mismo— se sentía avergonzado, pero al mismo tiempo feliz por estar unido en matrimonio con el hombre que ama
—Y yo quería cargar a mi esposa hasta nuestra habitación como es tradición— llegaron hasta el único dormitorio que había en la cabaña la cama estaba adornada con pequeños pétalos de flores
—N-No me digas así— un fuerte sonrojo se hizo presente en sus mejillas
—Me gusta como suena el decirte así— sentó al castaño con cuidado en la cama y se arrodillo frente a él —entonces ahora serás Eren Ackerman te gusta? —
—Me encanta ser de ti— abrazo del cuello a su ahora esposo para depositar un suave beso —por favor quiero que me hagas el amor— susurro sobre sus labios
—Se escucha bonito cuando me lo pides— lo recostó quedando encima de él mientras con cuidado iba retirando cada prenda dejando besos y pequeños mordiscos por todo su cuerpo en señal de posesión, quería dejar su marca en ese bello cuerpo, que todos supieran que era suyo

Aquella noche se amaron más que nunca, Levi se encargó que su amado mocoso supiera todo el deseo que le provocaba. Se entregaron en cada rincón de esa cabaña y finalmente terminaron
recostados sobre una manta y con otra encima cubriendo sus cuerpos, en el pequeño jardín del lugar con el cielo estrellado como único testigo de su amor en esos momentos.

— ¿Te encuentras bien? — susurro el mayor en el oído del castaño a quien tenía apresado entre sus brazos —siento que fui muy brusco... Lo siento—
—Estoy bien, no te preocupes— acaricio su mejilla dándole a entender que no había problemas —me gusta sentirme tan amado por ti—
—Me vuelves loco por eso no puedo contenerme cuando estoy contigo— lo apegó un poco más a su cuerpo —deseo marcar cada rincón de ti, nunca tengo suficiente si se trata de ti—
—Te amo esposo mío— una dulce sonrisa adornaba los labios del oji ámbar —quiero que nos sigamos amando por siempre con esta misma intensidad—
—Yo también te amo mi amado ángel— beso suavemente su mejilla y siguió repartiendo besos por todo su rostro bajando a su cuello también dejó algunos en sus hombros —te amare en esta vida y en todas las demás que tengamos, en cada una te encontraré nuevamente para amarte—

Sellaron esa promesa besándose lentamente mientras sus cuerpos se frotaban debajo de la manta que tenía encima entregándose a su deseo y amor. Volviéndose nuevamente uno.

Su mente mantenía ese recuerdo como si hubiera sucedido hace poco, esto se debía a que sentía esa sensación de vacío desde que lo alejaron de su amado. Cuando por fin pudiera recuperarlo se aseguraría que nada ni nadie los volvería a separar, se lo llevaría un tiempo lejos de todo para estar solo ellos. Mas ahora que sabía que iba a ser padre algo que nunca creyó que pasaría en su vida, pero cuando lo supo se sintió tan feliz y afortunado que fuera su Eren quien le provocaba esta inmensa felicidad.

—Solo espérame un poco más... Voy a ir por ustedes mis dos amores— refiriéndose al castaño y su bebé
—No puede dormir cierto capitán Levi— esa voz era Mikasa, la hermana sobreprotectora del oji ámbar —yo estoy igual que usted también me preocupa Eren y mi futuro sobrino/a—
—Perdóname, les falle en protegerlo— desde que se habían llevado al menor no tenía el valor de hablar con sus dos mejores amigos sentía vergüenza de sí mismo por no haber cumplido su promesa
—Deje de culparse ninguno de nosotros sabía lo que pasaría ese día y de todas formas todos somos igual de responsables con lo que sucedió porque tampoco pudimos protegerlo—
—Mikasa tiene razón capitán— Armin se acercó de repente, al igual que ellos tampoco podía dormir —todos le fallamos a Eren, pero por eso ahora estamos aquí para traerlo de regreso a casa—

—Será mejor que vayamos a dormir un poco necesitaremos tener energías suficientes para cumplir esta misión— el azabache se alejó para irse a su camarote y poder dormir un poco cuando estuvo dentro se dejó caer en la cama quedándose dormido en poco tiempo debido al cansancio acumulado

En Marley, casa de Zeke

Un nuevo día iniciaba para el castaño, este mismo se levantaba para asearse un poco y cambiarse de ropa aunque estas le quedaban un poco grandes debido a eso Pieck tuvo que prestarle ese día ropas de ella.

—Te ves tan lindo— la chica lo admiraba de pies a cabeza —podrías pasar fácilmente desapercibido como mujer— debido a su condición el cuerpo del menor era bastante femenino —vamos, tenemos mucho por hacer hoy—
—N-No puedo salir vestido así— le daba vergüenza, pero la ropa de la azabache era la única que le quedaba —p-podemos conseguir otra ropa? —
—Está bien después pasaremos a comprarte algunas prendas para que te sientas más cómodo, por ahora tendrás que ir así no te preocupes te pondré una capa encima— se dirigieron a la entrada principal donde habían dos capas colgadas —toma—
—Gracias...— tímidamente la aceptó y se cubrió con ella
—Bien vamos— se apuraron en salir antes que alguien los viera de todas formas les había dejado una nota

Caminaban por las calles como era temprano estaba casi vacío, un par de puestos y tiendas comenzaban a abrir. Ellos se dirigían al único consultorio que había en ese lugar.
Eren estaba preocupado en caso si los llegaran a descubrir, pero Pieck lo tranquilizó con la excusa que habían salido por ropa para él lo cual en parte era cierto.

—Es aquí entremos— tomó la mano del menor entrando en el pequeño edificio, ya dentro le bajó la capucha —aquí puedes andar sin problemas, es una vieja conocida mía no hay nada que temer—
—Oh vaya Pieck a que debo tu visita? — aquella voz llamó la atención de ambos —veo que trajiste compañía esta vez—
—Tanto tiempo sin vernos Ilse— se acercó para saludarla —necesito un pequeño favor y la mayor discreción si es posible es un tema delicado—
—De acuerdo pasen— les indicó que entraran a la habitación de donde ella había salido —dime qué sucede entonces—
—Primero déjame presentarte a Eren, es el hermano menor de Zeke— señalo al chico a su lado
—Un gusto en conocerla señorita Ilse...— el menor le dio una pequeña reverencia a modo de saludo
— ¿Él es de quien tanto estaban hablando ustedes? — miraba fijamente al castaño —puedo suponer que es un doncel—
—Así es, pero necesito que no le digas a nadie que estuvimos aquí menos a Zeke— sintió un ligero apretón en su mano y sabía bien que Eren estaba nervioso —tranquilo, esta todo bien—
—Bien quítate la capa y recuéstate en la camilla, tomaré una muestra para hacer un análisis—

Mientras la médica hacía todo ese procedimiento Pieck no se apartó en ningún momento de su lado y se lo agradeció pues estaba muy asustado. Cuando ya por fin realizó las pruebas correspondientes aclaró su garganta para decirles lo que encontró.

—Bien joven Eren de acuerdo con este análisis tiene 1 mes y medio de embarazo así que felicidades—
—E-Estoy esperando un bebé? — no podía creerlo, iba a tener un bebé con su amado Levi —está segura? —
—Completamente este examen nunca falla, es bastante efectivo sobre todo en donceles— le entregó los resultados a su querida amiga
—Muchas gracias Ilse te debo una nuevamente— ayudó al castaño a levantarse y colocarse nuevamente la capa —nos veremos pronto—

Salieron del consultorio dándose cuenta que ya era mediodía y las calles se veían más concurridas. Fueron en dirección a una tienda de ropa, buscarían algunas prendas para el menor muy a pesar de Pieck que deseaba seguir vistiendo al pequeño con su ropa pues se veía tan adorable. Igual pudo encontrar varias prendas que estaban hechas para el cuerpo de los donceles y fueron justo estas las que encontró totalmente adecuadas para él.
Luego de tener sus compras listas regresaron a la casa.

—Bien estamos en casa— anunció su llegada —creo que siguen durmiendo— dejó la capa del chico en el perchero y guardo los exámenes en su bolsillo, después se aseguraría de esconderlos en un lugar seguro
—Ahí estaban— Zeke se acercó a ellos —es peligroso y lo sabes porque puede intentar escapar—
—Cálmate no tienes que hacer tanto escandalo solo fuimos a conseguirle un poco de ropa, la que le diste le queda muy grande y no podía vestirse como mujer, aunque admito que se ve adorable cierto?
—N-No digas eso Pieck-san— ahora estaba avergonzado de que alguien lo viera vestido de esa forma —puedo ir a cambiarme? —
—Si anda en lo que preparo el almuerzo— la joven le entregó la bolsa con sus ropas y se fue en dirección a la cocina
—Iré a mi habitación entonces... Permiso— paso al lado del mayor, pero sintió que lo sostuvo del brazo — ¿Qué quieres ahora? —
—Ten cuidado, lo que sea que estés pensando hacer para escapar no dejaré que lo hagas— lo miraba seriamente y después lo soltó para que se fuera
—No estoy pensando en huir de aquí, tampoco sé cómo hacerlo— suspira con tristeza —tu ganaste nunca podré irme— se alejó hasta llegar a la habitación donde se encerró y se tiró a la cama —mi Levi vendrá por mi yo sé que sí, confío en mi familia—

Con ese pequeño deseo de esperanza saco las prendas que había comprado y se cambió con uno de los conjuntos, era bastante cómodo también le gustaba como le quedaba. Al terminar de arreglarse bajo hasta donde se encontraba la azabache preparando la comida, olía delicioso.

—Casi está listo Eren, puedes acomodarte en la mesa con los demás mientras sirvo— la mujer le dedicaba una sonrisa y vio que fue a sentarse
—Hola Eren— lo saludo Porco amablemente —ven siéntate junto a tu...— dudaba si decirle hermano
—Me sentaré al lado de él— dijo simplemente y fue hasta donde le indico el joven esperando que Pieck se sentara a su lado
—Bueno aquí está la comida espero la disfruten— sirvió los platos era un delicioso estofado de carne

Todos agradecieron a Pieck y empezaron a comer aunque fuera en silencio Eren se sentía más o menos cómodo gracias a que la azabache se sentara junto a él. Terminaron el almuerzo mientras que el castaño se ofreció a ayudarle a lavar sintiendo que era una forma en parte para agradecerle todo lo que había hecho por él hasta ahora.
Cuando se fue hasta la cocina Zeke llevó a ambos jóvenes a la pequeña sala para hablar de una idea que se le ocurrió.

—Pieck de ahora en adelante cuando mi hermanito salga de aquí tienes que llevarlo vestido con tu ropa, así en caso que lo están buscando será difícil para ellos identificarlo— vio que ella iba a protestar —y es una orden así que debes cumplirla—
—De acuerdo se hará lo que tu digas— sabía bien que al menor no le gustaría para nada esa idea, pero ella no podía negarse a las órdenes del rubio

Por el momento no le revelarían lo que ordenó su hermano mayor para evitar más discusiones entre ellos, sabían bien que cuando él quisiera salir se molestaría bastante, pero Zeke seguiría insistiendo que era por su seguridad.

En el barco con dirección a Marley

Llevaban ya un día de viaje y todo marchaba a su favor tal como les dijo Reiner por lo que quizás llegarían antes a su destino. Hanji esa mañana los reunió a todos en el comedor debido a que Braun le dijo de un posible plan que ocuparía Zeke para evitar que se llevarán a Eren.

—Conociéndolo lo más seguro es que lo mantenga siempre vigilado, es decir que alguien estará acompañándolo donde sea que vayan— les explico —la otra posibilidad aunque lo dudo porque conozco a Eren, es que lo disfracen de mujer gracias a su contextura de doncel pasaría desapercibido y sería más complejo encontrarlo—
—Entonces tendremos que estar preparados en ambos casos— hablo Mikasa —si sucede lo segundo Armin y yo podríamos identificarlo de inmediato— miró a su amigo rubio y este le asintió para que siguiera —una vez cuando éramos niños la madre de Eren lo vistió como mujer para una presentación de una obra que se haría cerca de mi hogar—
—Nadie nos dijo de esto hasta que lo vimos en el escenario y lo reconocimos inmediatamente porque se parecía mucho a la tía Carla— fue rápidamente hasta su camarote sacando de un cuaderno una foto y regresó al comedor —si ven detenidamente esta foto podrán reconocerlo fácilmente— se las enseño y en efecto tenían mucho parecido es como si fueran dos gotas de agua a excepción del cabello, pero de rostro eran muy similares
—Es hermoso...— Levi murmuró mirando detenidamente la foto mientras Armin dejaba que la sostuviera unos momentos — ¿de casualidad tendrás otras? —
—Por supuesto capitán, se las mostrare más tarde— ese día había sido un milagro que encontraran a una persona con ese extraño aparato que podía tomar fotos
—Bien entonces de acuerdo con esto se nos facilita un poco más el rescate— miró al hombre rubio a su lado —agradezco tu cooperación y ayuda Braun—
—Les dije que ayudaría en esta misión porque después de todo fue culpa mía lo que le sucedió a él—

Habiendo discutido bien todas sus estrategias cada uno se fue por su lado, Levi siguió al amigo del castaño hasta su camarote. Tenía tantas ganas de conocer cómo era Eren antes que se conocieran.
Al llegar Armin sacó un cuaderno lleno de fotos, en varias aparecían los tres juntos y en otras solamente el oji ámbar.

—Si desea alguna puede tenerla, dudo mucho que él se entere— una pequeña risa salió de sus labios
—Gracias— fue lo único que dijo y observo cada foto de su mocoso, finalmente se decidió por cuatro las guardaría como su mayor tesoro

La tarde cayó y con ello ya serían dos días de viaje. El capitán del barco le informó a Hanji que se encontraban casi cerca de su destino después de todo Reiner tenía razón. A lo mucho sería al anochecer del segundo día.
Todos se encontraban más que listos para cuando ese momento llegará, volverían con Eren si o si a su hogar.
En ambos lugares ya era de noche, en pocas horas pasarían al segundo día de viaje para la legión y el que era para Eren desde que llegó a ese lugar.

En Marley

La mañana del segundodía cuando Eren le pidió a Pieck salir ella le explicó que por órdenes de Zekesolamente podría hacerlo vestido de mujer, eso provocó que volvieran a teneruna discusión cosa que querían evitar. A pesar de todo lograron convencerlo y lesdieron la idea que ese día tuvieran una tarde de hermanos, quizás de esa formapodrían comenzar a llevarse un poco mejor.
Y por arte de magia o de algún dios divino ambos aceptaron.
Pieck se encargó de arreglar al castaño, debido a que tenía el cabello más omenos largo pudo hacerle un peinado sencillo.
—De verdad te ves tanlindo— tenía una sonrisa de oreja a oreja —cómo te has sentido con los mareos olas náuseas? —
—Por el momento no se han presentado tan fuertes, lo he podido manejar bien—suspiro —me da miedo que si él se entera quiera hacerle algo a Levi...— hacíareferencia a su hermano mayor
—Tranquilo nadie lo va a saber, quiero evitar a toda costa que sigan teniendoproblemas además que no es saludable para tu bebé que te alteres mucho— aunquellevaba tiempo de conocer a Eren algo dentro de ella le decía que ese hombrellamado Levi amaba al castaño —puedo preguntarte una cosa? —
—Si claro Pieck-san— le respondió con una pequeña sonrisa
—¿Amas a ese hombre? Me refiero al señor Rivaille—
—Yo... Lo amo mucho— un profundo suspiro abandono sus labios —desde la primeravez que lo vi sentía una gran admiración, pero después lo pude conocerpersonalmente porque la legión de reconocimiento me salvo de que fueraejecutado por mis poderes de titán todo fue gracias a Levi que se ofreció avigilarme en caso que resultara peligroso— los ojos del menor brillaban alrecordar cómo se enamoró de su esposo —a pesar de que esa era su tarea inicialcon el paso de los días mis sentimientos fueron cambiando y tenía miedo delamor que crecía en mi corazón sabía que estaba mal... Los dos somos hombresademás que nuestra diferencia de edad es bastante notoria, pero cuando Levitambién dijo que sentía lo mismo por mí fue uno de los momentos más felices enmi vida—
—Te ama, de verdad él te ama— murmuró después de haber escuchado un poco de lahistoria de amor —Zeke se equivoca respecto a tu esposo— por fin entendía quecometieron un error en llevarse a Eren
—Siempre cuido de mí mucho antes de saber que me amaba, me protegía de todosaquellos que me trataban como un monstruo y de todos aquellos que solo queríanmatarme o utilizarme para su propio beneficio aunque él nunca supo que era undoncel hasta que se lo confesé esa noche...— se sonrojo un poco al recordar losucedido —por eso que mi hermano piense sobre él como un mal hombre me duele,nunca me toco en contra de mi voluntad—
—Entonces tienes que hacerle entender— tomo las manos del castaño con cariño—debes decirle esto mismo que me contaste a mí quizás así sea más fácilcontarle lo del bebé—
—Lo intentare...— sentía temor de hablar sobre este tema con el mayor, pero almenos debía intentarlo si quería tener oportunidad de regresar a casa
— ¡Bien , vamos! Nos deben estar esperando— lo jalo de la mano suavemente parabajar las escaleras donde se encontraban Zeke y Porco —perdón la demora—

Ambos hombres al ver al castaño vestido con ropas de mujer quedaronimpresionados de verdad parecía una chica, además Pieck arregló su cabello demanera sencilla gracias a que lo llevaba largo.

—Hiciste un maravilloso trabajo— la felicito el rubio acercándose a ellos —casino te reconozco hermanito—
—Zeke tiene razón te ves bien— lo halago Porco —vas a tener que cuidarlo muchocuando salgan— bromeó con el hombre a su lado
—No le digas eso vas a provocar que se ponga modo sobreprotector y la ideaprincipal es que puedan disfrutar su tarde de hermanos— se acercó con una capacubriendo al oji ámbar con ella —así no llamaras tanto la atención—
—Bien nos retiramos— le indico al menor que lo siguiera y salieron de la casa—algún lugar en especial que quieras ir? —
—Pieck-san dijo que hoy día había un festival me gustaría ir si se puede— pidióamablemente
—De acuerdo iremos allí— caminaron en silencio en dirección donde su hermano lehabía pedido, intentaría que la relación entre ellos se volviera al menos unpoco más amena

En el barco con dirección a Marley

Según los cálculos del capitán estarían llegando al puerto en la noche,aquel hombre también les había comentado que aquel día habrá un festival.
Armin al escuchar las palabras que les transmitía Reiner se levantó de golpe.Todos los miraban por la extraña reacción hasta que la castaña de gafas habló.

—¿Qué sucede Armin? — le pregunto con calma
—Él va estar ahí— murmuro de a poco —Eren va estar ahí! Siempre quiso ver unfestival— su mirada se fijó en Mikasa quien entendía lo que quería decir suamigo
—Tienes razón es lo más seguro, pero también sabemos que estará resguardado yposiblemente lo habrán vestido de mujer para que no sea fácil encontrarlo—
—Si ustedes tienen razón entonces iremos directamente a ese lugar— prontotendría a su amado entre sus brazos y de paso se desquitaba con ese maldito deZeke Jaeger
—De acuerdo Braun y Leonhart— llamó la atención de ambos —contamos con ustedesdesde este momento para poder llegar hasta ese lugar—
—Esta bien, cuenten con ello— respondieron los dos al unísono —no será tandifícil pues en esa celebración siempre llegan todo tipo de visitantes—
—El único detalle será que debemos cambiarnos de ropa para pasar másdesapercibidos— les explico Annie —y nada de armas, lo digo especialmente porustedes dos— señalo a Mikasa y Levi
—Ya escucharon tendrán que dejar todas las armas además que no queremos generarproblemas o causar una pelea innecesaria— los miro a todos —nos separaremos porgrupos así abordaremos más terreno, bien daré los grupos—
Grupo 1: Hanji, Levi, Reiner
Grupo 2: Armin, Mikasa, Annie
Grupo 3: Jean, Connie, Sasha

Moblit se quedaría para vigilar todo dentro del barco

 Cuando tuvieron todo el plan armado se dedicaron a dejar todas sus armas en susrespectivos camarotes y por seguridad serían revisados especialmente el par deazabaches.
Se quedaron esperando pacientemente hasta llegar al puerto, a lo lejos veíancomo comenzaba el atardecer pronto llegarían a su destino.

En el festival, Marley

Un par de hermanos paseaba por todo ese lugar lleno de puestos con diferentescosas que ver o hacer. El menor de ellos estaba tan maravillado y emocionadocomo un niño pequeño en navidad, este era otro de sus sueños en parte se sentíatriste de no poder compartirlo con su familia y su esposo. Quizás en algúnmomento podría disfrutarlo con todos ellos.

— ¿Quieres algo de comer? — preguntó el mayor al notarlo que estaba muycallado, pero seguramente era porque estaba más concentrado en disfrutar detodo
—Me encantaría, me dio un poco de hambre ya— había pasado un buen rato desdeque habían almorzado
—Ven por aquí venden algo que estoy seguro te gustara— rodeo sus hombros paracaminar hasta donde le había dicho mientras pedía para ambos notaba que suhermanito tenía su mirada fija en la comida frente a ellos
— ¿Cómo se llama esto? — sentía que la saliva se le acumulaba en su bocaaquello se veía delicioso
—Es pizza ten por seguro que te va a gustar mucho— pago por la comida y sesentaron en unas de las mesas cerca de aquel puesto

Eren sin esperar más empezó a comer y en efecto era delicioso aunque nada secomparaba a la comida de Pieck. Los ojos ámbar tenían un brillo único al probaralgo completamente nuevo para él. Zeke se sentía feliz que al menos estuviera disfrutando del día, pero en elfondo sabía que el castaño quería decirle algo quizás más tarde le preguntaría.
Terminaron de comer para seguir con su recorrido hasta el momento no había nadafuera de lo normal tampoco sentía peligro cerca de ellos, pero aun así debíamantenerse en alerta.

Un poco alejados de ellos estaba Pieck y Porco quienes se encargaban de revisarque nadie sospechoso estuviera cerca de ambos hermanos. En un momento la chicase excusó que tenía que ir al baño cuando en realidad su mirada había notado aalguien que creía nunca más iba a ver. Corrió detrás de esa persona hasta perderse en un callejón y ahí lo vio. EraReiner.

—R-Reiner— murmuró mirando a su amigo y compañero —¿tú cómo es posible? —
—Hola Pieck tanto tiempo sin verte— una media sonrisa llena de nostalgia sereflejó en su rostro mirando fijamente a la mujer —necesito tu ayuda—
—Es sobre Eren cierto? — como siempre era directa —he de suponer que no vienessolo o me equivoco señor Rivaille? — había notado la presencia del capitán yotra persona más
—Tsk... ¿Dónde está mi esposo? — se estaba conteniendo de golpearla, pero nodeben causar un escándalo
—Zeke está con él así que será complicado si quieren llevárselo— estaba seguraque lo que haría sería una total traición hacia el rubio —yo los puedo ayudar—
— ¿Por qué tenemos que creerte? — Levi la miraba con odio —te lo llevaste yahora te harás la buena así como así no me vengas con estupideces—
—Se que esta embarazado— dijo directamente —no se preocupen solo yo estoyenterada, su hermano no lo sabe porque querría asesinarte a ti—
—Rivaille déjala que nos ayude— lo calmo Hanji colocando una mano en su hombro—si hubiera querido hacer algo lo habría hecho ya—
—La mayor Hanji tiene razón conozco a Pieck— miró a su amiga —dinos cómo llegarhasta Eren por favor—
—Bien ahora escúchenme atentamente yo misma me encargue de vestirlo como una mujerpor órdenes de su hermano— había tomado la decisión de ayudar al castaño aregresar a su hogar a como fuera de lugar, se notaba el amor que había en lamirada de Rivaille pues era el mismo que se reflejaba en la mirada de Eren

Término de explicarles lo que tendrían que hacer y tenía fe en que resultaríaaún si eso le costaba la vida valdría la pena porque Eren junto con su bebédebían estar junto a su familia.
Volvió sola hasta donde se encontraba Porco ella les daría la señal para quepudieran actuar.

 —Ya regresé, los baños estaban algo ocupados— se disculpó con su amigo con unapequeña sonrisa
—No te preocupes hasta ahora nada raro ha pasado— mantenía su mirada atenta—deberíamos ir a comer algo nosotros también—
—Tienes razón— se adelantó para llegar donde los hermanos — ¡Hola pequeño Eren!Zeke— saludo a ambos —quiero llevarte a probar algo rico— lo tomó del brazo muyfeliz —te lo robare un momento—
—Esta bien, pero recuerda a la mínima señal de peligro sabes que hacer— Zeke sefue con Porco quien quería también comer algo
—Tranquilo estaremos bien— luego se alejó con el menor en dirección contraria ala de ellos mientras miraba hacia un callejón dando la señal a las personasocultas ahí
— ¿Dónde vamos Pieck-san? — Eren simplemente la seguía con la emoción de probaralguna otra comida nueva
—Ya casi llegamos, vamos— le puso la capucha y ella también se puso la suyapara perderse entre la gente hasta que estuvieron frente a un edificio queparecía abandonado
—E-Espera nos alejamos mucho— estaba un poco asustado porque sabía bien cómopodría reaccionar su hermano mayor
—Esa era la idea, cierra tus ojos sí? Solo un momento— tomó las manos delcastaño y comenzó a guiarlo dentro del edificio —no los vayas abrir aun—
—F-Falta mucho? — pregunto nervioso el menor
—Solo un poco más, estamos cerca— continuo hasta que estuvieron frente a unapuerta —ahora si entra hay una sorpresa para ti— soltó sus manos y abrió lapuerta

Eren le hizo caso abriendo sus ojos justo cuando entraba en la habitación, tuvoque parpadear varias veces para acostumbrarse a la poca luz que llegaba. Cuandopudo ver con claridad sentía que su visión lo estaba engañando. No podía ser...Era él, su esposo estaba ahí

— ¡Levi! — corrió hasta donde estaba el mayor quien también corrió en suencuentro, pero el castaño perdió el equilibrio y casi cae de no ser poraquellos fuertes brazos que lo sujetaron y alzaron —de verdad estás aquí...—
—Eren...— aferró el cuerpo más pequeño al suyo —Shhh... Ya estoy aquí no llores— lomantenía con algo de fuerza en sus brazos
—V-Viniste por mi...— aferraba sus pequeñas manos a la espalda del azabachemientras murmuraba entre sollozos —pero como sabias que era yo? —
—Mocoso te reconocería donde fuera— se separó ligeramente para mirarlofijamente —por cierto, te ves lindo ahora sí puedo decirte que eres mi esposa—una leve risa escapó de los labios del mayor
—E-Eh... No es cierto que vergüenza que me veas así— se había olvidado porcompleto que estaba vestido como una mujer
—A mí me gusta cómo te ves— lo volvió a estrechar entre sus brazos aspirando elaroma de su Eren, lo había extrañado tanto —perdóname por mis descuidos lospuse en peligro—
—No fue tu culpa... Fui yo quien no tuvo cuidado, espera dijiste nos? — mirabacon confusión al azabache —lo sabes? —
—Hanji me lo dijo después que fueras capturado— murmuró levemente —me volvíloco de tan solo pensar que algo pudiera ocurrirles—
—Ya estamos juntos de nuevo— acarició suavemente la espalda de su amado esposo—vamos a casa—
—Tendremos que esperar un poco más aún es peligroso irnos, pero los demás seestán asegurando de eso— después que la mujer llamada Pieck los ayudará aencontrar al menor, él le indico a lu loca amiga que diera aviso a todos queEren se encontraba a salvo
—No me importa mientras te tenga conmigo, te extrañe tanto Levi— se aferrabacon fuerza a la espalda del mayor
—Yo igual Eren— vio que había un cama en aquel cuarto y de manera rápida cargoa su oji ámbar en sus brazos hasta sentarse con él en sus piernas —tenecesito...— murmuró con voz ronca
—También te necesito— rodeo el cuello de su esposo con sus brazos —por favorhazme tuyo— cerró sus ojos para acercar sus labios y besarlo

Ninguno pudo contenerse más sin importarles donde se encontraban comenzaron aquitarse con algo de desesperación sus ropas. Eso sí el azabache tendríacuidado de no ser tan brusco pues su mocoso estaba embarazado y no queríahacerle daño al bebé.
El ambiente era caliente cargado de lujuria los gemidos y gruñidos no tardaronen hacer aparición se habían extrañado tanto lo cual se notaba en sus besos,sus caricias acompañadas de las embestidas del mayor contra el menor.

—Eren... Mi Eren nunca más dejare que te aparten de mi lado— embestía con algo defuerza, pero de manera prudente —tu eres mío y debes estar conmigo por siemprehasta la muerte—
—Mi Levi— gemía con su rostro sudado además de estar sonrojado —estaré a tuhasta mi último día de vida— prometía a su amado esposo
—Arghh... Ya no puedo más— con unas últimas embestidas derramó todo su semendentro del menor respirando agitado
—Nmgg! — al sentir aquel líquido caliente llenar su interior provocó quetambién se viniera dejando escapar un gemido algo afeminado causando un grandeleite en los oídos del azabache

Rivaille se dejó caer de lado arrastrando entre sus brazos al castaño pues senegaba abandonar aquel cálido lugar todavía. Repartía besos por todo su cuerpomientras ambos regulaban su respiración recuperándose de su intensoreencuentro.

—Lo siento por no poder contenerme— se disculpaba porque sentía que había sidoalgo brusco por lo que empezó a darle mimos
—No tienes que pedirme perdón, yo tampoco quería esperar más— se dejaba mimarpor él
—Cuando regresemos le diré a la loca que te revise quiero asegurarme que tú yel bebé están bien—
—Quiero ver a todos y volver a nuestro hogar— tomó una de las manos de suesposo colocándola en su vientre donde crecía el fruto de su amor
—Te amo tanto— acariciaba suavemente ese lugar donde crecía el bebé de ambos—gracias por hacerme tan feliz y darme una familia, les prometo que siempre loscuidare—

De repente unos toques fuertes en la puerta los alertaron, pero se calmaron alescuchar la voz de Pieck.

—Lamento interrumpirlos, pero es momento que se vayan antes que Zeke se décuenta— no iba a entrar ya que se imaginaba lo que había sucedido
—Tsk... Bien al tiro salimos— se levantó de mala gana y comenzó a vestirsemirando como su amado mocoso también lo hacía, pero lo vio complicado subiendola cremallera del vestido —déjame ayudarte—
—Gracias...— dijo un poco avergonzado, pero agradecido por la ayuda —esextrañamente cómodo ocupar este tipo de ropa según Pieck-san cuando el embarazoesté más avanzado sería mejor ocupar vestido o faldas ya que son más cómodas—
—Entonces las conseguiremos cuando regresemos— terminaron de arreglarse y tomosu mano para salir finalmente de ahí —de acuerdo guíanos—
—Vengan por aquí, tenemos que darnos prisa— la mujer comenzó a avanzar demanera apresurada en dirección a la salida —sus amigos están cerca vamos—
— ¡Pieck! ¿Qué rayos estás haciendo? — los tres se quedaron congelados al ver aquienes tenían frente a ellos —tu— señalo a Levi —devuélveme a mi hermano y tedejare ir en paz—
—Ni lo sueñes— oculto al menor detrás suyo —es mi esposo no te lo entregaré—
—Zeke... Por favor si me quieres déjame volver con él y mis amigos— pequeñaslágrimas salían de los ojos del castaño
—No dejare que te hagan daño entiende como tu hermano mayor debo cuidarte, eresun Jaeger por lo que tienes que quedarte aquí conmigo—
—En eso te equivocas estúpido desde que estamos casados su apellidos paso a serAckerman— tomo la mano del menor enseñándole los anillos que mostraban su uniónlegitima —la Reina de Paradis fue la que oficio la ceremonia—
—Tu... Bastardo eres un egoísta amarrándolo de esa forma— se iba acercar paraagarrarlo y golpearlo, pero vio que Eren empujó al azabache interponiéndose enmedio de ellos —que haces? ¿Por qué lo defiendes? —
—Porque lo amo y tú eres el único egoísta aquí— estaba cansado de que quisieratomar posesión sobre él —además... Estoy esperando un bebé de Levi por lo que note perdonaré nunca si le haces daño—
—Zeke eso es cierto...— Pieck intervino colocándose al lado del castaño en modode defensa
—ellos se aman tienes que dejarlo irse no puedes obligarlo aquedarse por favor— miraba al hombre con ojos llenos de tristeza
— ¿Tú me odias Eren? — le pregunto con dolor al menor
—No es odio lo que siento, pero estoy cansado de que intentes retenerme a lafuerza quiero que entiendas el daño que me estas provocando con esa actitud porfavor... Déjame ir con mi
familia—
—Soy un monstruo egoísta...— murmuró con dolor cayendo de rodillas —eres libre,puedes irte con ellos— miró después a la mujer al lado de su hermanito —si lodeseas Pieck también ve con Eren—
— ¿Quieres que lo cuide por ti cierto? — le dijo ella directamente sabía bienque ese era su deseo —lo haré estaré al lado del pequeño Eren en tu lugar—
—Hermano...— murmuró el castaño llamando por primera vez así al mayor —espero quealgún día puedas entenderlo— se arrodillo frente a él tomando sus manos concariño —cuando eso suceda te recibiré si llegas a venir donde estoy, adióshermano mayor— le dedicó una pequeña sonrisa y se levantó para irse con Levi yPieck

El hombre rubio vio como ellos tres se alejaban y en ese momento simplementedejo que se fuera, muy a su pesar el menor tenía razón no podía obligarlo apermanecer con él eso solo provocaría que sufriera.
Cuando por fin estaban por llegar al barco divisó a sus amigos y corrió a elloscon lágrimas de felicidad siendo recibido en un abrazo grupal. Por fin podríavolver a su hogar, deseaba de corazón que todo mejorara de ahora en adelante.
Pieck era consciente que a Zeke le tomaría tiempo aceptar la vida que llevabasu hermano, pero confiaba que el mayor pudiera contarle toda su historia que lohizo actuar así.
Aquella noche Eren descansaba entre los brazos de su amado sintiéndosetranquilo y protegido. Levi se sentía completo al final desde ahora y siempreprotegería a su mayor tesoro, la luz de su vida.