Ya era jueves, me desperté y me arreglé para un nuevo día. Bajé a desayunar y me encontré a mi hermano conversando con Jorge.

- Hola, hermanito – salude a mi hermano.

- Hola, Gabiber.

- Hola, mi niño – saludo a Jorge con un abrazo y un beso en la mejilla.

- Hola, pequeña.

Bueno, ustedes se preguntarán que ha pasado en los últimos dos días. Primero, Nico todavía no me quiere contar que le pasa, siempre saca una excusa para evitar el tema. Y segundo, con Jorge hemos tenido dos citas, el martes por la tarde me pidió salir y yo acepte, fuimos a un bonito restaurante y después fuimos a pasear, y el miércoles me volvió a invitar a una cita, pero en vez de ir a un restaurante fuimos a un lugar al que íbamos cuando éramos chiquitos, era un recinto en un cerro, desde ahí se podía ver toda la ciudad, o al menos la mayoría, estuvimos mucho tiempo hablando y riendo, después fuimos a un parque a comprar helado y una niña mancho la camisa de Jorge con refresco, la niña se disculpó una y otra vez y Jorge le repetía que no importaba, incluso le compro un helado a la niña para convencerla.

- ¿Nos vamos? – pregunte al notar que los chicos seguían conversando.

- Claro. Adiós, Ethan – se despidió Jorge de mi hermano.

- Adiós, Jorge.

- ¿No vas al instituto? – le pregunte a mi hermano.

- Voy en un rato más tengo que pasar a buscar a alguien.

- ¿A quién? – entrecerré los ojos.

- A una persona – me sonrió inocente.

- Okey, no te seguiré preguntando porque sé que no me vas a decir. Bye, hermanito.

- Bye, enana – le di un beso en la mejilla y nos fuimos en el coche de Jorge.

(...)

- Chicos, ya llegaron – dijo Connor saludándonos.

- Holap – saludé a todos, pero sentí que faltaba alguien -, ¿Y Sophie?

- Ethan dijo que él iba a pasar a recogerla – dijo Nicolas encogiéndose de hombros.

- Ah, vale, ¿Hace cuánto llegaron?

- Hace unos 3 minutos, más no creo – dijo Danielle.

- Nosotros hace 5 – dijeron los gemelos y David.

Sentimos el motor de un coche estacionando y me giré, era el auto de mi hermano, mi hermano bajo y fue a abrirle la puerta a Sophie, esta se bajó y Ethan le dio un leve beso en los labios, todos estábamos con la boca abierta. Después Ethan entrelazo su mano con la de Sophie y caminaron hacia nosotros.

- Hola, chicos – saludaron cuando llegaron a nuestro lado.

- ¿Cuándo nos iban a decir que estaban juntos? – dijimos Nicolas y yo al mismo tiempo.

- De hecho, no estamos juntos oficialmente, estamos intentándolo – dijo Ethan.

- ¿Y cuándo pensabas decírmelo?, soy tu hermana – le dije a Ethan.

- Es que esto surgió ayer, cuando salimos a dar un paseo – se explicó Sophie.

- Felicidades, espero que lo que tengan funcione, son muy buenos los dos y sé que tu – dijo Nicolas señalando a Ethan – vas a cuidarla o al menos eso espero.

- La voy a cuidar como a nadie – sonrió Ethan abrazando a Sophie. Okey, eso dolió, soy su hermana, se supone que él me tiene que cuidar a mí.

Mis ojos se cristalizaron – Felicidades – dije con una sonrisa forzada. Estaba feliz por mi hermano, pero escucharlo decir que la cuidara más que a mí (indirectamente), dolió, y mucho.

Tocaron el timbre anunciando el inicio de las clases.

- Chao, voy a mi clase – dije, y sin esperar respuesta, me gire y comencé a caminar hacia el baño de chicas, tenía que pasar al baño para poder relajarme un rato, sé que no es un muy buen lugar, pero al menos nadie podría saber que estoy ahí y nadie me encontraría, todos estarían en sus clases.

Cuando estaba llegando al baño, sentí que alguien me estaba siguiendo, me di vuelta, pero no vi a nadie. Entre al baño y me encerré en el último cubículo.

No aguante más y me puse a llorar. Ustedes creerán que no estoy feliz por mi hermano, pero de verdad estoy feliz por él, solo que no estoy acostumbrada a que haya otra chica en su vida que no seamos mi madre y yo.

- Gabi – escuche a alguien entrar al baño. No conteste -. Gabi, sé que estas aquí.

- Nicolas, vete, tienes que ir a clases – dije calmando mi sollozo.

- No me iré, ábreme – dijo golpeando la puerta del cubículo.

Pensé en no abrirle, pero si seguía golpeando tal vez llamaría la atención de algún profesor y se daría cuenta de que hay un chico en el baño de chicas.

Le abrí la puerta y él se lanzó a mí.

- Sé que estas así por lo que tienen nuestros hermanos – me susurro en el oído.

- Nunca había una chica aparte de mi madre o yo en su vida, no creo acostumbrarme rápido – sollozo en su pecho.

- Yo tampoco me acostumbrare fácil, Gabi, pero si mi hermana es feliz yo también lo soy.

- Quiero mucho a mi hermano.

- Yo igual quiero muchísimo a mi hermana, y si alguien le hace daño, sea mi amigo o no, le rompería la cara, pero no me preocupe tanto porque sé que puedo confiar en tu hermano, él es un buen chico y sé que va a cuidar a mi hermana, al igual que te cuida a ti, él te quiere mucho, incluso más que a mi hermana, mi hermana va a ser una etapa de su vida, una de muchas, pero tú vas a ser su vida, tú has estado con el siempre, en las buenas y malas, nunca se van a separar porque son hermanos. Sí, tendrán peleas, pero son peleas de hermanos – me susurraba mientras me acariciaba el pelo.

- Gracias – le susurre mientras seguía abrazándolo.

- De nada, linda – me dejo un beso en la coronilla y me miro a los ojos -. Ahora necesito que tengas una sonrisa – dijo mientras me secaba las lágrimas.

Le sonreí – Te quiero.

- Yo más – nos quedamos mirando por un rato hasta que sentimos la puerta abrirse.

Cerramos la puerta rápidamente y nos quedamos callados.

- Chicos, soy Mady, no se preocupen, pueden salir.

Suspire aliviada y salimos de cubículo.

- ¿Qué tal estas, amiga? – me pregunto Mady.

- Bien – le sonreí.

- ¿Segura?

- Sip, Nicolas me ayudo a comprender que puede haber más chicas en la vida de Ethan – abrace a Nicolas y mire a Mady.

- Que bien – dijo mirando con una sonrisa que no supe descifrar a Nicolas.

- ¿Vamos a clases?, no vaya a ser que nos castiguen por saltarnos una – dijo Nicolas.

- Si, vamos – dijimos Mady y yo.

Salimos del cubículo y fuimos al aula correspondiente, nos tocaba a los 3 juntos.

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En multimedia la habitación de Gabi.(esa era la idea más o menos, solo que la habitación real no es tan rosadito, tiene un poco de celeste claro y otro poco de morado)