Capítulo 7

Louis me deja frente al hospital diciendo que iba a esperarme allí.

- ¿Qué haces aquí? Te dije que te fueras a descansar - Me recibe Karla.

- Hola para ti también, no vine a trabajar, solo vine a saludar - Dije.

Ella me mira con una mueca de "¿Me crees idiota?".

- Vienes a ver a Hunter ¿No? - Resoplé.

- Me preocupa, salió muy herido y pudo haber muerto... -

- Está bien, los doctores lo están tratando - Dice ella.

- ¿Despertó? -

- Aún no... -

Suspiré y asentí.

- Bueno, entonces me voy, ten - Le tendí un pequeño papel - Es mi nuevo número, me avisas si sucede algo -

- Bien, nos vemos -

- Adiós -

Me di vuelta y salí del hospital regresando donde Louis, me subí al auto y me abroché el cinturón.

- Necesito un trago - Dije.

Él ríe un poco pero maneja hasta un bar, yo me bajé luego de insistirle que entrara también y tomara algo pero él se negó, resoplé y entré al bar llegando a la barra y pidiendo una bebida.

Tomé un trago largo sintiendo como el alcohol quemaba un poco mi garganta pero me desestresaba bastante.

Dejé la copa en la mesa y suspiré.

- ¿Está ocupado? - Miré a un lado viendo a Zack y Tesha juntos.

Supongo que ya hablaron y se reconciliaron. O eso parece, no lo sé en realidad.

Les hice una seña de que podían sentarse tranquilos y yo volví a beber.

Ellos piden bebidas.

- Oye... Zaira... - Miré de reojo a Tesha mientras seguía bebiendo hasta acabar.

- ¿Huh? - Murmuré a la par que pedía otra copa.

- Yo... sé que seguro no quieres escuchar sobre esto pero... de verdad lamento lo que pasó esa vez... -

Me traen mi segunda copa.

- Okey - Dije sin más y bebiendo.

Ella me mira un momento.

- ¿"Okey"? ¿Solo eso? -

De tal hermano, tal hermana.

- No sé que más quieren que diga, se disculpan por algo del pasado del que ya no siento nada ¿Qué quieres que responda entonces? - Dije.

Ella me mira sin saber que decir.

- Yo... no lo sé... - Murmura.

Dejé de mirarla y bebí nuevamente. A pesar de tenerla aquí y luego de recordar lo que pasó hace nueve años, yo me sentía normal, no estaba incómoda, o solamente yo no lo sentía por el alcohol.

Tesha si se veía incómoda ya que hace ese gesto que suele hacer cuando se incomoda, además de que juega con su pulsera.

- Si te hubieras disculpado unos días después de lo que pasó... no años... hubiera reaccionado. Nadie sabe si bien o mal, pero lo hubiera hecho, les hubiera dicho muchas cosas - La miré de reojo - Pero ambos se tardaron, así que ya no sé que decirles, no guardo rencor pero tampoco muero por volver a estar con ustedes -

Me levanté dejando el dinero sobre la mesa y salí de allí hasta Louis quien seguía esperando.

Me subí tranquila y suspirando, Louis me mira por el espejo retrovisor pero no dice nada, sino que pone en marcha el auto y vamos a casa.

***

***

Me preparé para ir al trabajo, ya podía regresar así que bajé, desayune rápido y fui al auto para luego ir al hospital.

- Ya no puedes decirme nada, he vuelto perra - Dije haciéndo reír a Karla.

- Bien, ten entonces - Me pasa un archivo de uno de los pacientes - Te lo encargo -

Asentí y caminé hacia el lugar en donde estaba el paciente. Me sentía bien regresando a trabajar, espero que todo vuelva a la normalidad rápido y no cambie de nuevo.

- Doctora Adams, el paciente de la docuentos cinco la busca -

Pensé un momento.

- ¿Hunter? -

- Si, despertó hace un segundo -

Resoplé.

- Estoy ocupada - Dije volviendo a atender los controles del paciente.

Escuché como se iba sin seguir insistiendo, pero me dejó pensando mientras hacía mi trabajo.

Si quiero saber cómo está luego de todo lo que pasó... pero siento como si mi orgullo no me lo permitiese.

Bufé frustrada y miré al enfermero ayudante.

- Revisa todo bien, luego me das el informe -

Él asiente, yo salí de la sala y fui por los pasillos hasta aquella habitación. Me quedé en la puerta pensando y teniendo un conflicto interno en si entrar o no, rodé los ojos y entré.

- Gracias Lila, me encargo desde ahora - Dije agarrando la planilla de las pruebas que habían que hacerle.

Ella asiente y sale dejándonos solos y en un silencio algo incómodo, yo suspiré y dejé la planilla a un lado para luego mirar las máquinas y el suero.

- Creí que no vendrías porque estabas ocupada - Dice.

- Mientras estés en este hospital necesitando ayuda, vendré, es mi trabajo, pero si no necesitas ayuda médica seguiré ocupada - Dije sin mirarlo.

- Comprensible, eres una profesional después de todo - Dice.

Ninguno dijo más, yo agarré la linterna y miré sus pupilas que reaccionaban bien a la luz. Pero me quedé mirando un momento el gris de sus ojos, me parecían algo más brillantes que antes... o supongo solo soy yo.

Me alejé rápido al reaccionar y suspiré pesadamente. Vi cómo tenía vendajes que se asomaban por la bata del hospital, también vi el rastro de golpes en su cuerpo, más en el rostro.

- ¿Te duele algo? - Pregunté.

- No, nada - Dice.

Lo miré entrecerrados los ojos y luego apenas roce mi dedo en su brazo él se apartó un poco y luego hizo una mueca por el movimiento.

- Si, claro... - Murmuré y busqué en los cajones la geringa y medicina para el dolor. Se la inyecte en el brazo y lo mire - Si te duele no te hagas del fuerte - Dije.

Él ríe entre dientes un poco pero suspira y asiente.

- Bien, eso es todo, tengo que irme - Dije y fui hacia la puerta abriéndola.

- Zaira - Me detuve y lo miré un minuto - Gracias... -

Asentí y salí cerrando la puerta tras de mi, reosplé soltando el aire que no sabía que había acumulado en mis pulmones y luego miré a un lado.

Karla estaba allí de brazos cruzados y una sonrisa de oreja a oreja.

- ¿Qué? -

- Te preocupas - Dice.

- Me preocupan todos mis pacientes - Dije.

- Pero él te preocupa de una manera especial -

Rodé los ojos.

- Claro que no - Dije y comencé a caminar.

- Mira, Zaira... sé que dices que dejaste todo el pasado atrás pero... -

- Pero nada, el pasado es pasado -

- Bueno, pero tus sentimientos... -

- Quedaron en el pasado ¿Por qué quieres insistir con esto? Se supone eres mi amiga -

- Y lo soy, y como amiga quiero que seas feliz, me contaste lo que viviste con Hunter, como te trataba y era contigo. Sin duda ambos se aman, no trates de evitarlo porque sé de sobra que eso hace más daño que una infidelidad -

- Tsk - Solté sonriendo de lado de forma sarcástica - No lo creo, pienso que la infidelidad duele más -

- Pues yo creo que duele más el saber que los dos se aman pero no pueden estar juntos, porque a ambos les duele aquello, no solo a uno -

- Bueno, esto de psicología de corazones lo dejamos para después, aún estamos trabajando -

Ella ríe y niega con la cabeza pero asiente.

- Vamos entonces -

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top